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ONU Celebración para el Día del Inmigrante
Consideraciones Litúrgicas
Sugerencias para la Celebración Eucarística:
1.
RITO PENITENCIAL
. Señor Jesús, tú vives en solidaridad con los más pobres y los vulnerables:
por las veces que hemos sido indiferentes a las luchas de nuestros hermanos y hermanas
inmigrantes: SEÑOR TEN PIEDAD…
. Cristo Jesús, tú levantaste tu voz desafiante ante las autoridades opresoras de tu tiempo:
por las veces en que hemos nos hemos callado frente a legislaciones y estructuras injustas:
CRISTO TEN PEIDAD…
. Señor Jesús, te sentaste a la mesa con quienes era vistos como parias y marginales:
por las veces que no acogimos a los extraños y a los extranjeros en nuestra confusión: SEÑOR
TEN PEIDAD…
2.
ORACIÓN DE LOS FIELES
ESUQUEMA A
Por el cese de la violencia y la pobreza que desplaza a tanta gente de sus casas y sus tierras:
Oremos al Señor…
Por los obreros migrantes, para que puedan vivir y trabajar en condiciones de justicia y
seguridad: Oremos al Señor…
Por las familias y los hijos de los obreros migrantes, para que puedan reunirse pronto: Oremos al
Señor…
Para que se termine el tráfico de humanos, para que su dignidad de hijos de Dios sea reconocida
y protegida: Oremos al Señor…
Por nuestros legisladores, para que establezcan y promulguen leyes que protejan los derechos de
todos, especialmente los más vulnerables de nuestro país: Oremos al Señor…
Por los dadores de trabajo y las corporaciones para que elijan siempre la dignidad y la valía de las
personas por sobre la ganancia y el poder: Oremos al Señor…
Por nuestra Comunidad Agustiniana, para que continúe sirviendo a los sin techo y a los que
tienen mayores carencias y para que alienten con claridad una justa reforma sobre la inmigración:
Oremos al Señor…
1
ESQUEMA B
Repetimos juntos: Señor, tú eres el don y eres el que dona.
Te damos la bienvenida en nuestros corazones y en nuestros hogares, amado Jesús…
Te damos la bienvenida en la persona del migrante rural, quién con su trabajo nos brinda el vino
y los frutos de la tierra para nuestras mesas…
Te damos la bienvenida en la persona del marinero y del camionero, quienes con sus largos viajes
nos traen bienes y combustibles para nuestros hogares…
Te damos la bienvenida en las personas de los niños refugiados, solos por el mundo, quienes con
su esperanza y coraje son fuente de inspiración para nosotros…
Te damos la bienvenida en las personas de los que piden asilo, detenidos en nuestras prisiones
sin causa o condena, que nos enseñan la sed de justicia…
Te damos la bienvenida en la persona del inmigrante docente, científico, artista, atleta, médico,
todos quienes traen sus dones para enriquecer nuestras tierras y nuestras vidas…
OREMOS (juntos):
Señor Jesús, enséñanos a reconocerte en el rostro del extranjero y a acoger tu presencia entre
nosotros. Tú nos has llenado de gracias con los dones de muchas culturas y naciones. Líbranos del temor
de aquellos que vienen de otras tierras.
Enséñanos a compartir, como una devolución, nuestros dones con quienes llegan a nuestras latitudes, así
podrás decir: “Fui extranjero y me acogisteis. Vengan a mi Reino.” Te lo pedimos en tu Nombre, en el
del Padre y por medio del Espíritu Santo. Amén.
2
ORACIONES PARA LOS LAUDES O LAS VÍSPERAS
Oración por la Justicia:
Ven, Santo Espíritu!
Ven, ayúdanos a abrirnos a la maravilla, la belleza y la dignidad de la diversidad que
encontramos en cada cultura, en cada rostro y en cada experiencia que vivimos, junto al que está entre
nosotros.
Ven, llénanos con generosidad, frente a los desafíos para seguir adelante permitiendo que los
demás compartan junto a nosotros, los bienes y la belleza de la creación.
Ven, cura las divisiones que nos impiden ver el rostro de Cristo en todos los varones, las mujeres
y los niños.
Ven y danos la libertad de estar junto y para aquellos que se ven obligados a dejar sus tierras en
busca de trabajo y seguridad, y sepamos acogerlos en una nueva tierra que tiene suficiente para
compartir con todos.
Ven, tráenos entendimiento, inspiración, sabiduría y el coraje necesario para aceptar los cambios
y seguir en el camino.
Ven, Espíritu Santo y muéstranos el camino.
Oración por la justicia del inmigrante:
OH Dios, que acoge a todos sus hijos, incluso a los pródigos,
ayúdanos a abrir nuestros corazones y a dar la bienvenida a todos los que vienen, como lo
hicieron nuestros antepasados, en búsqueda de la promesa de una nueva tierra y una nueva vida.
Elimina el temor de nuestros corazones;
ayúdanos a usar las palabras “hermano” y “hermana” cuando acogemos a los que llegan.
Permite que recordemos, con tu gracia, que hay suficiente pan y peces para todos en la mediad
que nos unamos como tu familia.
Danos el coraje y la compasión para respetar los derechos de todos, en nuestros países de
abundancia.
Te lo pedimos, por Cristo nuestro Señor.
3
Oración a Jesús Migrante:
OH Jesús, quien en los primeros días de tu vida terrenal te viste obligado, junto a María, tu
amada Madre, y a San José, a dejar tu tierra natal y a experimentar en Egipto la miseria y las
incomodidades de los inmigrantes pobres, vuelve tus ojos sobre nuestros hermanos y hermanas quienes,
lejos de sus amadas tierras y de todo lo que les es más querido, tienen que luchar diariamente con las
dificultades de una nueva vida y están expuestos a graves peligros y persecuciones.
Señor, sé su guía en el camino inseguro, su auxilio en las dificultades, su consuelo en la pena,
mantenlos firmes en su fe, santos en sus vidas y esperanzados en sus hijos, sus cónyuges y en sus padres.
OH Señor, danos las fuerzas para que seamos capaces de abrazarlos amorosamente como a hermanos y
hermanas nuestros, y cuando completemos nuestra peregrinación, nos recibas en el Cielo como nosotros
lo hemos hecho con cada uno, en esta tierra. Amén.
ORACIÓN DE COMPASIÓN Y JUSTICIA
Eterno Dios de Sabiduría y Misericordia,
has sembrado tu luz en cada alma humana.
Por medio de tus Profetas y Maestros, nos recuerdas, de generación en generación, que como hijos tuyos,
somos hermanos y hermanas los unos de los otros;
y que tu amor por nosotros nos da el poder para hacer que la sociedad ponga sus raíces
en el amor, en la justicia y cuide sabiamente de tus pequeños.
Has sembrado en nosotros el ansia de hacer justicia y de ser misericordiosos,
la capacidad de sentir y entender las vidas de los otros.
Nos diste el poder de recordar lo que nuestros antepasados nos relataron sobre sus privaciones.
Tus Escrituras nos recuerdan constantemente que conoces el corazón del extranjero,
ya que tu mismo lo fuiste.
Nos diste el don de la decisión moral y la capacidad de los sentimientos en relación a
los otros y sus condiciones de vida y de actuar para su bien.
Dios de justicia y misericordia, rezamos hoy por el coraje de ser testimonio
eficaz para la justicia con los extranjeros,
Justicia para el pobre y los que no tienen derechos cívicos,
Justicia para aquellos que vienen a este país dispuestos ha hacer los trabajos más duros y peor
remunerados, con el fin de alimentar a sus familias y dar esperanza al futuro de sus hijos.
Oramos por los niños, que necesitan protección, seguridad,
los beneficios de una buena educación, la promesa de una buena vida.
Nos comprometemos a trabajar por leyes que protejan a los extranjeros,
que les den equidad en esta sociedad, leyes que hagan posible el hecho de que ya nadie sea extranjero,
nunca más.
Guía nuestras acciones y danos las palabras apropiadas para hablar a los corazones de los líderes que nos
gobiernan, para que alcancen la luz en sus conciencias y así puedan promulgar leyes justas.
Ayúdanos a ser instrumentos de tu justicia.
Te lo pedimos por medio de Jesucristo nuestro Señor. Amén.
4
POESÍA
Dame tus manos (GB 2000)
Migrante, dame tu mano.
Ellos dicen que no puedes estar aquí,
Esta no es tu tierra.
Pero para mí, tú perteneces a esta tierra
Porque tú la trabajas con tus manos.
Trabajador de ultramar, dame tu mano.
Está media vacía: tú ganas la mitad de lo que gano yo.
Pero yo se que no es correcto
Porque tu fatiga es igual a la mía.
Lo siento en tus manos.
Trabajador doméstico, dame tu mano.
Conservas mi casa en orden,
A mi familia confortable.
¿Por qué me fijo en ti,
Tú que tienes a mis hijos en tus manos?
Migrante ilegal, dame tu mano.
Viniste sin ser invitado
Y te mantienes callado para no perder tu oportunidad.
Ahora te mandan a casa
Pero un día, más allá de las fronteras,
Vamos a estrechar nuestras manos.
Todos los que están en movimiento, denme sus manos.
Para mi sois tan diferentes y habláis en lenguas extrañas
Debido a que yo nunca migré y no conozco vuestro origen.
Gracias por enseñarme que la piel de Dios, tiene el color de vuestras manos.
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