Arras 3/11/06 09:51 Página 141 Luis Estival Alonso 10. El desistimiento y el allanamiento en las arras penitenciales Siguiendo a Callegari, podemos definir el desistimiento, como “el poder atribuido por la ley o por la voluntad de las partes a un contratante para extinguir, mediante su declaración de voluntad, una relación contractual obligatoria y continuada, o el vínculo obligatorio que lo une a un contrato plurilateral, ex nunc, ya sea inmediatamente o con un plazo de preaviso”289. En sentido sustantivo, el desistimiento será la declaración de voluntad, explícita o implícita, de uno de los contratantes en virtud de la cual manifiesta, unilateralmente, su voluntad inequívoca de desligarse del contrato. El desistimiento o denuncia del contrato se apoya en convenio libremente pactado y que autoriza a una de las partes (o a ambas), a poner fin a la relación contractual, sin que tenga que basarse en causa especial, ya que lo determina la decisiva voluntad de los interesados, que así lo acordaron expresamente en el negocio constitutivo de la obligación, sin que represente infracción del artículo 1256 del Código Civil, que prohíbe dejar al arbitrio de uno de los contratantes la validez y cumplimiento de las obligaciones290. Una de las características esenciales de las arras penitenciales que conforman su naturaleza, como decíamos en capítulos anteriores, es la 289. CALLEGARI, DANTE. “Il recceso unilaterale dal contrato, parte seconda”. IV, G. Giappichelli, Turín, 1939, pag. 215, cit. por VERDERA IZQUIERDO, BEATRIZ, op, cit. pag. 140. 290. STS de 11 de Abril de 1986. cuadernosprácticos 141 Arras 3/11/06 09:51 Página 142 El contrato de arras posibilidad de una de las partes de desistir unilateralmente del contrato principal, sin tener que basar este desistimiento en una causa concreta, sino por el puro y simple ejercicio del principio de autonomía de la voluntad, evidentemente mediante la pérdida de lo entregado como arras o la restitución doblada, por imperio del artículo 1454 del Código Civil291. Aunque el artículo 1454 del Código Civil habla de que “podrá rescindirse el contrato”, no se trata propiamente de una rescisión en el sentido utilizado por los artículos 1290 y 1291 del mismo texto, sino de una facultad convencional de resolución, o mejor aún, de desistimiento unilateral. Si bien las arras penitenciales autorizan al desistimiento, no es así si se trata de arras confirmatorias, puesto que el contrato sólo podrá extinguirse, entre otros supuestos por el mutuo disenso, esto es cuando las partes convienen la extinción del contrato, o bien por la resolución del mismo, esto es, por la extinción sobrevenida de la relación obligatoria que se produce como consecuencia de una declaración de voluntad o del ejercicio de una acción judicial. Así se expresa la SAP de Málaga de 10 de Noviembre del 2000 (LA LEY JURIS: 430884/2000), que señala: “Trasladada la anterior doctrina al supuesto que nos ocupa, de los términos del contrato resulta claramente que la configuración que las partes le dieron a las arras fue de arras confirmatorias que naturalmente no autorizan al libre desistimiento unilateral del contrato sino que confirman el contrato celebrado. Dicho lo anterior, o bien se acredita el incumplimiento de cualquiera de las partes de lo que resultaría la posibilidad de resolver el contrato al contratante cumplidor que se ve perjudicado por el incumplimiento del otro; o bien se acredita el mutuo disenso como causa de extinción del mencionado contrato, lo que conduciría a resolver la liquidación de la relación preexistente. De las pruebas practicadas ha resultado probado en definitiva el mutuo desistimiento de las partes del contrato celebrado, quedando por tanto y únicamente por resolver la liquidación de la relación preexistente. Si la relación que se extingue no 291. Entre otras, la reciente SAP de Barcelona de 19 de Abril del 2005: “el pacto de arras es claro, y penalizaba el desistimiento sin causa con la pérdida para el comprador o la devolución doblada para el vendedor. Y sólo en caso de consumación jugaba la cantidad entregada como paga y señal (así debe interpretarse el pacto sexto, arts. 1281 y 1284 del C.c.).” 142 Arras 3/11/06 09:51 Página 143 Luis Estival Alonso había desplegado todavía ningún efecto, la regla debe ser que ningún efecto se ha producido, ni puede ser por consiguiente reclamado. Sin embargo, si la relación que se extingue había desplegado, por el contrario, aunque sea parcialmente algún efecto, como es en este caso, la entrega de determinada cantidad de dinero, debe comportar, salvo pacto en contra, la restitución de las cosas al estado que tenían en el momento de constituirse la relación. Y es en este sentido en el que procede la devolución de la cantidad entregada a cuenta del precio”292. Por otro lado, en las arras penales, el desencadenante para que manifiesten sus efectos es el incumplimiento pero no el desistimiento293. A tal efecto, la STS de 19 de Junio de 1986 (LA LEY JURIS: 540480/1986), establece las diferencias entre desistimiento e incumplimiento, cuando dice: “… por lo que en este particular debe acogerse la fundamentación del quinto motivo del recurso en cuanto ataca la afirmación de la sentencia que identifica al arrepentimiento o desistimiento del contrato regulado en el artículo 1454, con el incumplimiento culpable del contrato tipificable en el artículo 1124, identificación inadmisible en cuanto el desestimiento implica el lícito ejercicio de una facultad o derecho potestativo concedido por el ordenamiento jurídico y el incumplimiento supone la vulneración del contenido obligacional asumido por la parte”. Hay que distinguir desistimiento de resolución, puesto que el desistimiento no necesita una causa concreta para llevarlo a efecto, sin embargo la resolución se otorga por la ley en determinados supuestos concretos; al mismo tiempo, la parte que desiste no debe haber incumplido sus obligaciones contractuales, por el contrario, para poder resolver el contrato por una de las partes tienen que haberse producido incumplimientos por la otra294. 292. En el mismo sentido SAP de Soria de 25 de Junio del 2003. 293. VERDERA IZQUIERDO, BEATRIZ. Op. cit. pag. 101. 294. Así lo entiende la SAP de Madrid, de 21 de Marzo del 2005 (LA LEY JURIS: (1975019/2005), que recoge: “el desistimiento mostrado por la vendedora recurrida excluyó la viabilidad de la pretensión de la recurrente, que en modo alguno puede invocar en su beneficio el artículo 1288 del Código Civil, al ser correcta la interpretación efectuada del contrato debatido, no existiendo cláusulas obscuras como se alega, no siendo tampoco de aplicación la Ley de Consumidores y Usuarios ni la Ley sobre Condiciones Generales de cuadernosprácticos 143 Arras 3/11/06 09:51 Página 144 El contrato de arras Consecuencia del desistimiento de una de las partes, es el allanamiento295 a, bien la pérdida de lo entregado como arras o la restitución doblada de la cantidad pactada. Puede suceder que la parte que desista incumpla el pacto de arras y no devuelva la cantidad doblada, entonces nos encontraríamos ante un incumplimiento en relación con el negocio arral, no en relación al contrato principal que se habría extinguido como consecuencia del desistimiento ejercitado296. La devolución de las arras duplicadas puede efectuarse por cualquier medio admitido en derecho, además del dinero metálico la consignación judicial o el depósito notarial. En lo referente al lugar de la devolución, a falta de pacto al respecto que es lo más normal, hay que remitirse al art. 1171 del Código Civil297. La facultad de desistir, resolviendo el contrato, puede ejercitarse en nuestro ordenamiento no sólo en la vía judicial, sino también mediante declaración, no sujeta a forma, dirigida a la otra parte, pero a reserva de que sean los Tribunales quienes examinen y sancionen su pro294. la Contratación, en la medida en que los acuerdos alcanzados se ubican en un precontrato, acuerdo alcanzado en consonancia con los artículos 1254 y 1255 del Código Civil, no existiendo adhesión incondicional a la oferta realizada en la que se plasmara de una vez, y sin necesidad de ulterior concreción, el acuerdo de voluntades equiparable a una compraventa perfeccionada en perjuicio del comprador, motivos que deben llevar a la desestimación del recurso y a la íntegra confirmación de la resolución recurrida”. 295. Nos referimos al término “allanamiento” no en un sentido técnico-procesal, sino como un acto incondicional de aquietamiento y cumplimiento, como una conducta personal de la parte desistidora del pacto de arras. Sobre el significado de la expresión “allanarse” con referencia al art. 1454 del Código Civil, la STS de 13 Mayo de 1930, dice que “entre las varias acepciones que tiene el allanamiento en el lenguaje jurídico, aplicado el verbo de que el sustantivo procede, en forma reflexiva, para significar una conducta personal, en el campo del derecho civil, allanarse es sujetarse o rendirse a alguna ley, decisión o convenio”. En este sentido, también la STS de 22 de Febrero de 1949. 296. VERDERA IZQUIERDO, BEATRIZ. Op. cit. pag. 151. 297. El art. 1171 del Código Civil, dispone: “El pago deberá ejecutarse en el lugar que hubiese designado la obligación. No habiéndose expresado y tratándose de entregar una cosa determinada, deberá hacerse el pago donde ésta existía en el momento de constituirse la obligación. En cualquier otro caso, el lugar del pago será el del domicilio del deudor.” 144 Arras 3/11/06 09:51 Página 145 Luis Estival Alonso cedencia cuando es impugnada (negando el incumplimiento o rechazando la oportunidad de extinguir el contrato), determinando, en definitiva, si el desistimiento ha sido bien hecho o si ha de tenerse por indebidamente utilizado298. Por lo que se refiere al plazo para ejercitar el desistimiento, al no tener previsto un plazo especial de prescripción, se somete al general de quince años que para las acciones personales que prevé el artículo1964 del Código Civil299. El desistimiento tiene diferentes caracteres según quien ejercite la acción desistidora: si es el que entregó las arras, basta con que exprese su voluntad de desistir del contrato y perderlas; si es el que recibió las arras, su declaración habrá de acompañarse de la entrega o puesta a disposición del otro contratante de las arras que recibió dobladas300. Por lo que se refiere al plazo, no sería aplicable el de cuatro años marcado por el art. 1299 del Código Civil301, por no tratarse de una acción de rescisión302. 298. STS de 17 de Febrero de 1996, 23 de Enero de 1999 y 8 de Mayo del 2002. 299. SAP de Teruel de 14 de Diciembre del 2004. 300. DIAZ ALABART, SILVIA. Op. cit. pag. 31. 301. El art. 1299 del Código Civil, establece: “La acción para pedir la rescisión dura cuatro años. Para las personas sujetas a tutela y para los ausentes, los cuatro años no empezarán hasta que haya cesado la incapacidad de los primeros, o sea conocido el domicilio de los segundos”. 302. A pesar de la lamentable literalidad del art. 1454 del Código Civil que habla de “rescindir el contrato” en lugar de desistir. El mismo problema terminológico lo tienen en Italia, donde se utilizan indiscriminadamente términos como: disdetta, licenza, licenziamiento, dimissione, rinuncia o recesso; y también en Francia donde, incluso en el propio Code, se habla de: congé, dènontiation, rèvocation, rèsiliation, retrait, etc. Vid. en este sentido ROMANO, SALVATORE. “La revoca degli tai giuridici privati”. Ed. Cedam, Padua, 1935, reimpresión de 1980, pag. 13 y sigts. cuadernosprácticos 145 Arras 3/11/06 09:51 Página 146 El contrato de arras