LOS CUATRO PRINCIPIOS SIMPLIFICACIÓN DE VIDA PARA LA NUEVA ERA DE AMOR DIVINO Y SERVICIO El primer principio es Amor Divino, que sencillamente es Servir. Servir a los demás es en realidad lo único que hacemos en el Universo. Sin importar nuestro título, profesión u oficio, todos somos servidores en cada labor que desempeñamos. Desde lavar platos, educar a un hijo hasta dirigir a una nación, todo sigue siendo servicio. Cuando al fin aceptemos que estamos aquí para servir, podremos encontrar nuestra actividad específica de servir a la humanidad desde nuestro corazones. Entonces, al darte cuenta de esto, acércate a algún conocido y pregúntale: "¿Qué es lo que puedo hacer para servirte?" Al principio dilo muchas veces en voz alta (frente a un espejo, a tus amigos, familiares, etc.). Haciendo práctica de este servicio, reconocerás lo que es necesario al encontrar la esencia de lo que en realidad hace falta: así tu actitud será natural y sin esfuerzo. La constante práctica del principio de servicio produce de una manera espontánea la Armonía para ti y para todos aquellos que te rodean. Al transcurrir el tiempo, tus familiares, amigos y compañeros de trabajo observarán tu ejemplo, permitiéndose a sí mismos la oportunidad de servir desde sus corazones. HONESTIDAD El segundo principio es la honestidad. La honestidad es sencillamente Auto-observación. Es poseer la capacidad de ser lo suficientemente valiente y calmado (a), ante la fealdad de tus aspectos personales que todavía no has pulido. Aquello que llamas temor frustración, confusión, depresión o enfermedad son ilusiones: son facetas del gran diamante interno que mantienes en tu corazón, el cual debes pulir lo suficiente para lograr mostrar su brillo celestial. Estar vivo es en realidad auto-observarte con honestidad cómo reaccionas ante tus experiencias. Debes saber que toda experiencia es específica y exacta para acentuar la belleza de tu diamante interno. Tu diamante son tus virtudes: estas virtudes llegan a su brillo máximo cuando observas con carácter y neutralidad. Así, al practicar el principio de honestidad, el resultado natural es la Paz Interna. De la misma manera, las relaciones interpersonales adquieren mayor satisfacción y sinceridad, además de una renovada profundidad. Observarás, de igual manera, la sinceridad en las palabras de otros, alcanzando así más resultados que te llevan a ti y a la otra parte a ganar conjuntamente. AGRADECIMIENTO El tercer principio es decir continuamente, "¡estoy agradecido(a)!". Estar agradecido(a) es ser como un niño que al momento de otorgársele un dulce por parte del padre, abraza y besa a su papá fuertemente. El niño abre el dulce, lo divide en dos partes y obsequia la mitad al papá que se siente halagado. El padre al recibir este tierno regalo, se siente aún más agradecido y dispuesto a compartir regalos con su pequeño hijo, ya que la apreciación del hijo refleja un recibimiento desde el corazón. Dar gracias produce una sonrisa en ti y en otros. Al expresar la sencilla palabra "gracias", manifiestas una de las más grandes virtudes que se propagan de persona a persona. Esta virtud es reconocer continuamente que lo Celestial vive en cada persona y además que dicha virtud puede ser activada sencillamente al decir "¡Muchas gracias! - ¡Te agradezco desde mi corazón!". Es así que, al practicar este tercer principio de gratitud, una profunda experiencia de gozo es creada en todo el mundo. Otros también sentirán este Gozo, dándose cuenta que lo Celestial se puede manifestar entre nosotros, inducido por nuestra voluntad. BENDECIR Al cuarto principio es bendecir. Bendecir es sencillamente extraer la sabiduría de cualquier experiencia, sin importar si la consideramos buena o mala. No existen las coincidencias, todo está bien planteado bajo los Cielos. Así pues, existen lecciones que deben ser aprendidas por todas nuestras experiencias, ya que nos agregan mayor sabiduría para crecer en prosperidad, para crear lo deseado y para convertirnos en todo lo que realmente somos. Bendice todas tus experiencias y todo aquello que esté a tu alcance. Obsérvate y acepta que los cielos verdaderamente te bendicen con todo lo que puedas necesitar. Entiende al fin, que todo lo celestial se está manifestando y existe en todo lo que te rodea. Así, al practicar el cuarto principio de bendecir un Sentido Unificado del Ser es creado en tu persona y en la humanidad: unificado entonces al Cielo y la Tierra como una sola fuerza de acción. Los Cuatro Principios de Vida para la Nueva era de Simplificación generan muchos resultados que han ayudado a miles de personas de diversas trayectorias. Nuestra Gran Promesa a los Cielos es cumplida cuando alcanzamos Armonía, Paz Interna y Gozo, garantizando así la Ascensión Unificada de la humanidad. Los primeros dos principios se nos conectan con la Fuente Divina de Energía, los otros dos nos otorgan Claridad Mental. Alcanzarás así cualquier visión deseada, desde felicidad, abundancia y salud, hasta paz mental y relaciones satisfactorias. Es nuestra oración sincera, que aceptes estos cuatro principios desde tu corazón, y que así, los practiques diariamente. Al hacerlo, observarás resultados que te llevarán a aceptar que esta información es legítimamente espiritual. Decídete a compartirlos con tus familiares y amigos. Estas honestas palabras vienen desde el Plano Divino y de un humilde servidor llamado Maestro Hsu Hong Chi. Te agradecemos la oportunidad de servirte. Por favor, siéntete libre de comunicarte con nosotros para obtener mayor información sobre seminarios, talleres y consultas privadas. Se Paz- Se el Cielo en la Tierra"