UNIVERSIDAD AUTONOMA DE CHIRIQUI La cultura de evaluación de la calidad. MSc. JOSE DEL C. ROJAS 2005. Cultura de Evaluación de la Calidad . Trabajadores de la cultura a nivel internacional han debatido por años sobre el significado y función del concepto cultura. Una de las grandes conclusiones a las que se ha llegado es aquella que sostiene que la cultura puede ser inducida, esto ha despertado un gran número de nuevos planteamientos, especialmente en las democracias latinoamericanas. Este nuevo concepto de cultura, tiene como base el mejoramiento de la calidad de vida del individuo y de esta manera, el mejoramiento e la sociedad. La evaluación es un componente fundamental de cualquier esfuerzo que se haga para producir algo de valor la evaluación (Dressel, 1976; Morris y Fitz-Gibson 1981; Stufflebeam et.al., 1985; y Escotet) , se hace necesaria cuando se requiere: Validar y hacer explícitos uno valores. Examinar planes , acciones y otros logros Comprobar y interpretar los logros de un programa Mejorar un programa y un curso de acción. La “cultura evaluativa”. El término “cultura” involucra un concepto polisémico y complejo. Más aún, si se le combina con el de evaluación, en el ámbito educacional. Sin un ánimo reduccionista, mas con el afán de llegar una convención para estimular la discusión, se propone entender por “cultura evaluativa” la combinación aditiva de acciones evaluativas formales que se difunden, con el uso de los resultados de dichas evaluaciones para la toma de decisiones y el reconocimiento social de la relevancia de la información evaluativa. En otros términos se propone la siguiente ecuación: Acciones + Uso de + Relevancia resultados social de la evaluativos información = Cultura Evaluativa evaluativas difundidas La instalación de una cultura evaluativa implica que se lleven a cabo evaluaciones educativas formales y periódicas, se difundan y se genere una estrategia de difusión de sus posibles usos, ya se trate, por ejemplo, de aprendizajes, o bien, de la competencia profesional de los maestros. Así, también se construye la relevancia social de la información evaluativas. Factores que facilitan o inhiben el desarrollo de una cultura evaluativa. Es posible reconocer cuatro factores principales que facilitan o inhiben el desarrollo de una cultura evaluativa. Estos son: · la tradición en evaluación del país, · las políticas educacionales, · la legislación o normativa y, · las estrategias y formas de difusión de resultados. La tradición en evaluación del país. Este factor tiene que ver básicamente con el tiempo durante el cual se han estado realizando acciones evaluativas en un país, así como con los recursos humanos calificados disponibles para llevarlas a cabo. Las políticas educacionales. Otro factor que contribuye a la generación de una cultura evaluativa son las políticas educacionales que promueven las acciones evaluativas. Al respecto se puede afirmar que si una política educacional involucra la evaluación, entonces la evaluación ocurre y, eventualmente es utilizada para propósitos de la toma de decisiones. La legislación o las normas. Un tercer factor, que constituye una dimensión facilitadora de la construcción de una cultura evaluativa se encuentra en la legislación o las normas respecto a la evaluación, ya que legitima la evaluación. Las estrategias y formas de difusión de resultados. Este último factor tiene un efecto decisivo sobre la formación de la cultura evaluativa. Como se señaló anteriormente, la cultura evaluativa tiene dos componentes, las acciones de evaluación por un lado y el uso de la información, por el otro. En tanto, los dos factores previos actúan principalmente sobre la realización de las acciones de evaluación, éste incide más específicamente sobre el uso de la información producida. En efecto, si la información generada por los procesos evaluativos no se difunde o se disemina mediante una estrategia equivocada, difícilmente puede ser utilizada en la toma de decisiones. La diseminación comprende al menos cuatro fases: la información previa al proceso evaluativo, durante el proceso, de los resultados y el seguimiento. La difusión previa al proceso tiene como propósito informar acerca de los objetivos, características y calendarización del proceso. Es una etapa de sensibilización a los afectados e involucrados por la evaluación. Se puede pensar que, una vez que un programa o sistema de evaluación se encuentra instalado, esta etapa ya no es necesaria. Sin embargo, estos sistemas no son estáticos, sino dinámicos y sufren cambios en el tiempo. Dichos cambios se pueden referir a los contenidos, modalidades, calendarios, poblaciones objetivo, cobertura, etc., de modo que siempre es necesario sensibilizar los afectados e involucrados con respecto estos cambios. Efectos cultura evaluativa sobre el sistema educacional, así como sobre el debate político y público, en general. La cultura evaluativa puede tener un efecto virtuoso y otro vicioso sobre el sistema educacional y, sobre el debate político y público. El efecto virtuoso se produce cuando el servicio educativo mejora, de acuerdo a los consensos nacionales en cuanto a lo que esta mejora implica, traduciéndose frecuentemente en un otorgamiento de prioridad al sector educación y una asignación de mayores recursos. Otro efecto positivo que deriva de la cultura evaluativa es, que los criterios o estándares para juzgar el desempeño de los estudiantes se definen cada vez mejor y con expectativas más altas, lo que contribuye a que los educandos incorporen conocimientos útiles y actualizados, mejores habilidades de pensamiento, destrezas más complejas y valores, como se convino en la declaración de UNESCO en 1990. De esta manera se logran mejores recursos humanos, esto es, un “capital humano” cada vez más valioso. Por otra parte se produce un círculo vicioso cuando los resultados de la evaluación se traducen meramente en un trabajo hacia el logro de lo que el sistema de evaluación respectivo pretende explícitamente. Es claro que ningún sistema de evaluación puede abarcar todos los propósitos y diferentes aspectos del proceso educativo y, por lo tanto, siempre proporcionará una visión parcial. En otros términos, los estudiantes aprenden lo que el sistema de evaluación pretende, los directores contratan a los profesores que logran los mejores resultados con sus alumnos y los padres escogen las escuelas de acuerdo a este mismo criterio, para sus hijos, cuando tienen la opción. Este último efecto hace que no se logren las metas educacionales nacionales, si no que solamente las que abarca el sistema de evaluación, pues todo aquello que el sistema o programa no incluye se relega a un segundo plano o simplemente se suprime, ya que es menos importante y, por consiguiente, la educación se torna sesgada y empobrecida. Es de gran importancia los siguientes esfuerzos realizados por diferentes países latinoamericanos en lo que se refiere a la modernización del sistema educativo no solo se han diseñado programas de formación y desarrollo profesional para todos los trabajadores de la educación , impulsa y fortalece los programas y acciones de formación y desarrollo profesional . En Centroamérica se ha hecho un gran trabajo por medio del Sistema Educación Centroamericano de Evaluación y Acreditación de la Superior ( SICEVAES) , del Concejo Superior Universitario Centroamericano (CSUCA) ; quien aglutina a dieciséis Universidades Publicas del Istmo Centroamericano . Estos organismos centroamericanos han sido y son motivados para muchos programas e instituciones involucrados de participar en procesos de evaluación que se conducen simultáneamente en toda la región , es realizar este ejercicio con la oportunidad de conocer los progresos , dificultades , las experiencias y el resultado de los programas e instituciones colegas de otros países de la región. Evaluación Educativa La evaluación de la calidad de la educación es de suma importancia para satisfacer las necesidades educativas de cualquier país es por ello que tendríamos que definir que es evaluación. las definiciones de evaluación son múltiples y cada una tienes su justificación .Por lo tanto se eligen solo algunas de ellas como : Evaluar es el sentido lexicológico de la palabra evaluar o valorar, es fijar el valor de un objeto determinado. Cuando se menciona que tal Universidad es muy eficiente, se esta otorgando un valor a la institución educativa de que se trate, y calificar el tipo de educación imparte. El valor otorgado a la institución , que se expresa en palabras como bueno , eficiente , de calidad , depende tanto de las características objetivas de la educación o institución educativa , como de la idea que tiene el sujeto que evalúa cerca de lo que es ( o debe ser ) bueno , eficiente o de calidad . En tal sentido una valoración no puede ser mas que la apreciación subjetiva de las cualidades de la institución educativa componentes, por ejemplo y de sus la Curricula que se ha desarrollado, que puede ser individual o compartida con otros. La evaluación de un programa académico es el proceso a través del cual se recoge y se interpreta, formal y sistemáticamente, información pertinente sobre un programa educativo, se producen juicios de valor a partir de esa información y se toman decisiones conducentes a mantener, proyectar, reformar o eliminar elementos del programa o su totalidad. Un proceso de evaluación de un programa académico presume: Definir los propósitos de la evaluación Delimitar el objeto de la evaluación Delimitar sus variables, elementos, indicadores y criterios, para establecer el nivel y calidad del programa en su funcionamiento. Recolectar, analizar e interpretar información pertinente. Valorar la calidad del programa en su totalidad o en algunas de sus variables y elementos Analizar los niveles de logros del programa evaluativo Identificar e incorporar los ajustes o cambios pertinentes Establecer procesos permanentes de seguimiento y control. DISTINTOS ENFOQUES DE LA CALIDAD: Calidad: El concepto de calidad, aplicado a la educación, presenta dificultades en su estudio. Sin embargo, se han efectuado intentos (Pérez 1991. p.16), en el Primer Encuentro Internacional sobre Calidad y Evaluación Universitaria realizado en San Juan, Puerto Rico, donde varias la universidad. Un primer análisis brinda las siguientes connotaciones: Calidad como valor intrínseco de una acción, proceso o institución; Calidad como eficiencia de un proceso o de una organización; Calidad como pertinencia social de los productos de la educación; Calidad como valor cultural, político o social de la universidad. Sin el deseo de entrar en elaboraciones filosóficas sobre la calidad, se diferencian seis formas distintas de utilización de este concepto en la educación que se detallan a continuación: La calidad que se usa en las comunidades académicas y tiende a evaluarse según estándares internacionales. La calidad como resultado entre metas, objetivos y resultados: es la correspondencia entre lo que se ofrece en la institución y lo que se produce. Suele aplicarse a instituciones estrechamente vinculadas al mundo del trabajo. La calidad como la mayor o menor distancia con respecto a un modelo que se considera como ideal o deseable para la institución o unidad académica: la calidad consiste en este caso, en el grado en que una institución educativa o programa se acerca a lo que se ha definido como su prototipo. Este concepto en la actualidad es muy aplicable a instituciones educativas que están estrechamente relacionadas a la historia, las tradiciones y proyectos. La calidad como satisfacción de las necesidades del usuario: este concepto de calidad está muy ligado a la mayoría de las instituciones de educación superior. Es la justificación para evaluar la opinión de los estudiantes, empleadores, agencias de financiamiento, egresados, entre otros. Es un criterio muy utilizado en las instituciones con un claro perfil profesional o técnico. La calidad como agregado: se entiende por “valor agregado”, aquello que el estudiante aprende durante su permanencia en la institución. En este caso, la calidad se centra en el perfil individual del egresado. Se aplica en las instituciones educativas donde el perfil es un tanto difuso o de formación general. La calidad como agregado de propiedades: exige definir un conjunto de indicadores previos, los cuales se cuantifican con el fin de clasificar las instituciones de manera jerárquica. Es aplicable para aquellas actividades que originan productos tangibles como publicaciones. El concepto de calidad en la educación superior hace referencia a la síntesis de características que permiten por un lado , reconocer el modo como un programa académico especifico o una institución de determinado tipo están cumpliendo con su misión , y por otro , hacer un juicio sobre la distancia relativa entre dicho cumplimiento y lo optimo que corresponde a su naturaleza . La calidad en la educación es un proceso que implica el despliegue continuo de políticas acciones estrategia y recursos que , integrados en planes de desarrollo promuevan el cumplimiento de una mision y de un ideal de excelencia . la pertinencia , la eficiencia y la eficacia de dichos planes deben evaluarse periódicamente en el marco de un proceso de autorregulación cuya expresión visible ante la sociedad y el mundo académico es la acreditación temporal y su continua renovación . Los componentes de la evolución de la calidad son : Autoevaluaccion Evaluación externa o evolución por pares Evaluación final que realiza el Concejo Nacional de Acreditación , a partir de la autoevaluacion y evaluación externa La autoevalucion es la herramienta que promueve la calidad de las instituciones y permite identificar sus fortalezas y debilidades. Este proceso es asumido por la institución MARCOS LEGALES DE LA EVALUACION Y LA ACREDITACION EN PANAMA. Tal como se ha dicho, la Constitución Política de Panamá, consagra la educación como un derecho de la persona y un servicio público que tiene una función social, garantiza la autonomía universitaria y establece las libertades de enseñanza, aprendizaje, investigación y cátedra. Del mismo modo, otorga al Estado la Facultad de regular y ejercer la suprema inspección y vigilancia de la educación con el objeto de velar por su calidad y por el cumplimiento de sus fines. Como consecuencia de la Constitución Política de 1972, aparece la Ley 11 de 1992, en la que se reconoce la autonomía de las universidades definida como el derecho de las instituciones a darse y modificar sus estatutos, designar sus autoridades académicas y administrativas, crear, organizar y desarrollar sus programas académicos, definir y organizar sus labores formativas, académicas y docentes, científicas y culturales, otorgar los títulos correspondientes regímenes y establecer, arbitrar y aplicar sus recurso para el cumplimiento de sus misión social y de su función institucional. Así mismo, en la Ley 11, se define el fomento de la calidad del servicio educativo como principio orientador del Estado y su compromiso en lograr que este servicio se ejerza con elevados niveles de calidad. Además la Ley 11 de la Universidad de Panamá y el Estatuto de la Universidad Autónoma de Chiriquí y el Ministerio de Educación de Panamá, han declarado desde 1998 a la actualidad mediante decretos la equidad y calidad en los diferentes programas de educación básica general, pre-media, media, pos-media, pregrados, grados y postgrados. En este año 2005 se llevó a cabo el Foro de Desarrollo Institucional de Evaluación y Calidad de la Educación. El Ministerio de Educación, en el año 1999, creó los círculos de calidad, estándar básico como referente necesario para la creación y funcionamiento de programas y características de alta calidad como eje de acreditación voluntario en todo el sistema educativo panameño. El reciente énfasis en la evaluación de la calidad de la educación aparece en un contexto muy preciso en el que coinciden, al menos tres tipos: • En primer lugar, las nuevas que la sociedad y la economía proyectan sobre los sistemas educativos, en el marco de la internacionalización y de la incesante búsqueda de competitividad de los mercados mundiales, pero también de la mejora de la calidad. • En segundo lugar, las crisis económicas que, de modo recurrente, han afectado a la capacidad de dar salida a todas y cada una de las necesidades de orden social patentes en nuestras sociedades. • No en último término y en buena medida como resultado de los efectos de esas recurrentes crisis económicas sobre la opinión pública y sobre las ideologías, una nueva cultura- la rendición de cuentas que se acompaña de una falta de confianza en la capacidad del Estado para dar salida de modo eficaz, eficiente y económico a todas y cada una de las necesidades que una población cada vez más exigente plantea. El artículo 4º de la Declaración Mundial sobre Educación para Todos de Jomtien, titulado «Concentrar la atención» es más que elocuente al respecto: « Que el incremento de las posibilidades de educación se traduzca en un desarrollo genuino del individuo y de la sociedad depende en definitiva de que los individuos aprendan verdaderamente como resultado de esas posibilidades, esto es, de que verdaderamente adquieran conocimientos útiles, capacidad de raciocinio, aptitudes y valores. En consecuencia, la educación básica debe centrarse en las adquisiciones y los resultados afectivos del aprendizaje, en vez de prestar exclusivamente atención al hecho de matricularse final. De allí que sea necesario determinar niveles aceptables de adquisición de conocimientos mediante el aprendizaje en los planes de educación y aplicar sistemas mejorados de evaluación de los resultados. Es así que el concepto de calidad ha pasado a estar el primer plano de la agenda educativa y a cobrar una mayor atención por parte de los actores políticos, sociales y económicos. En ese sentido, se puede afirmar que, de la misma manera que la utopía de la universalización de la escuela primaria generada a fines del siglo XIX fue la base sobre la que se construyeron los sistemas educativos de la región a lo largo del siglo XIX, sobre el final de éste aparecen estar dadas las condiciones para el surgimiento de una nueva utopía, la de brindar una educación de calidad en condiciones de equidad, utopía que podría constituirse en la idea- fuerza aglutinadora de los consensos sociales y políticos indispensables para el desarrollo de nuestros sistemas educativos en el siglo. “la calidad comienza en la educación y termina en la educación “ (Isi kawa) La calidad solo es posible partiendo de las competencias profesionales y compromisos del personal , dirección y operación , que conduce , brinda servicios , realiza trabajos ,desarrolla procesos , y entrega productos o servicios , que cumplen con sus requisitos en un clima confiable , estimulantes , satisfaciendo y excediendo las expectativas del cliente y la sociedad , por lo tanto nos compromete a seguir creando estrategias y proyectos para tratar de lograr la calidad de la educación .