UNIVERSIDAD DE PANAMÁ FACULTAD DE MEDICINA ESCUELA DE SALUD PÚBLICA. DEPARTAMENTO DE MEDICINA PREVENTIVA Y SOCIAL PROGRAMA DEL CURSO METODOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN CURSO SOBRE METODOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN MÓDULO 2: El Momento Teórico OBJETIVO PARTICULAR: Elaborar una hipótesis científica como respuesta al problema de conocimiento Por: Manuel Escala Luzcando, MD, MSP, EDS Panamá Marzo 2007 52 ÍNDICE DE TEMAS TEMA No 6. REVISIÓN DE LA LITERATURA TEMA No 7. EL PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA TEMA No 8 LA JUSTIFICACIÓN DEL ESTUDIO TEMA No 9 EL FUNDAMENTO TEÓRICO TEMA No 10 LA HIPÓTESIS Y LAS VARIABLES TEMA No 11 LOS OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN 53 TEMA No 6 REVISIÓN DE LA LITERATURA OBJETIVO GENERAL: Dominar las técnicas para la revisión bibliográfica y la formulación de citas OBJETIVOS OPERACIONALES 1. Diferenciar los estilos de referencia 2. Aplicar el sistema de nombre y año 3. Caracterizar el sistema numérico alfabético INFORMACIÓN 4. Utilizar el sistema de orden de mención 5. Hacer citas en el texto CONTENIDO 6. 7. 8. 9. 10. Estilos de referencia Sistema de nombre y año Sistema numérico alfabético Sistema de orden de mención Como citar en el texto Day Robert A. Cómo escribir y publicar trabajos científicos.2ª ed.-- Washington, D.C.: OPS, c1995.-- p.234 (Publicación Científica; 558) ISBN 92 75 31558 2 Capítulo 12 Cómo citar las referencias Los textos que contienen innumerables referencias revelan más inseguridad que erudición. William C. Roberts Reglas que deben observarse Lo mismo que en la sección de Agradecimiento, hay dos reglas que deben observarse en la sección de Referencias. En primer lugar, deben enumerarse solo obras importantes y publicadas. Las referencias a datos no publicados, obras en prensa, resúmenes, tesis y otros materiales de importancia secundaria no deben abarrotar la sección de Referencias o de Obras citadas. Si una referencia de esa clase parece absolutamente esencial, se podrá añadir al texto entre paréntesis o como nota de pie de página. En la bibliografía se puede incluir un trabajo que haya sido aceptado para publicación, citando el nombre de la revista, seguido de “en prensa”. En segundo lugar, coteje todas las partes de cada referencia contra la publicación original antes de presentar el manuscrito y, tal vez, de nuevo en la fase de corrección de pruebas de imprenta. Esto lo sé porque en otro tiempo fui bibliotecario: hay muchos más errores en la sección de Referencias de un artículo científico que en cualquier otra de sus partes. 54 Estilos de referencias Las revistas varían mucho en la forma de tratar las referencias. Una autora que examinó 52 revistas científicas encontró 33 estilos diferentes de enumerar las referencias (M. O’Connor, Br. Med. J. 1(6104): 31, 1978). Algunas revistas incluyen los títulos de los artículos y otras no. Las hay que insisten en que se indique la paginación completa y otras solo citan la primera página. Los autores precavidos escriben las referencias completas (normalmente en fichas de 7.5 x 15 cm) o introducen esa información completa en un archivo computarizado. Luego, al preparar un manuscrito, disponen de todos los datos que necesitan. Es fácil suprimir información; pero resulta realmente laborioso consultar luego 20 o más referencias para añadir los títulos de los artículos o las páginas finales cuando el director de la revista lo exige. Aunque usted sepa que la revista a la que se propone presentar su manuscrito utiliza una forma abreviada (por ejemplo, sin títulos de artículos), hará bien en preparar una lista de referencias completas. Esto es una buena costumbre porque 1) la revista puede rechazar el manuscrito, lo que se traducirá en la decisión de presentarlo a otra revista, que quizá exija mayores requisitos, y 2) es muy probable que más adelante vuelva usted a utilizar algunas de esas mismas referencias al redactar otros artículos de investigación o revisión (la mayoría de las revistas que publican revisiones exigen referencias bibliográficos completas) o libros. Cuando presente un manuscrito para publicación, cerciórese de disponer las referencias de acuerdo con las “Instrucciones a los autores”. Si las prepara de una forma radicalmente diferente,, el director y los árbitros pueden suponer que ello indica un rechazo anterior del trabajo o, en el mejor de los casos, es prueba evidente de falta de cuidado. Afortunadamente hay programas de computadora que pueden formatear automáticamente las bibliografías con arreglo a diversas especificaciones. End Note por ejemplo, puede servir para formatear las referencias destinadas a Science, Nature y muchas otras revistas. Básicamente con apretar una tecla, se puede formatear una bibliografía entera de un modo determinado. Si el manuscrito es rechazado por una revista, otro toque de tecla formateará de nuevo las referencias para que se ajusten a las exigencias de otra. Además, End Note puede reformatear las citas del texto y la sección de obras citadas del final. Una de las ventajas de mantener las referencias en End Note, Reference Manager o sistemas análogos es la exactitud que se consigue. Una vez que una referencia se ha incluido correctamente, nunca aparecerá de forma incorrecta, porque no habrá que volverla a escribir. Aunque hay una variedad casi infinita de estilos de referencias, la mayoría de las revistas científicas utilizan alguno de estos tres sistemas generales: de nombre y año, numéricoalfabético y de orden de mención. Sistema de nombre y año El sistema de nombre y año (llamado a menudo sistema de Harvard) fue muy popular durante muchos años y se sigue utilizando en muchas revistas, aunque no tanto como antes. Su gran ventaja es la comodidad para el autor. Como las referencias no están numeradas, pueden añadirse o suprimirse fácilmente. Por mucho que se modifique la lista, “Smith y Jones (1990) “seguirá siendo exactamente lo mismo. Si hay dos o más “Smith y Jones (1990)” el problema se resolverá fácilmente citando el primero como “Smith y Jones (1990ª)”, el segundo como “Smith y Jones (1990b)” etc. Los inconvenientes del sistema de nombre y año lo son para los lectores y editores. El inconveniente para el lector se produce cuando (a menudo en la Introducción) hay 55 que citar un gran número de referencias en una misma frase o párrafo. A veces el lector tiene que saltarse varios renglones de referencias entre paréntesis para poder reanudar el hilo del texto. Incluso dos o tres referencias, citadas juntas, pueden resultar perturbadoras para el lector. La desventaja para el editor es, evidentemente, el mayor costo. Si “Smith, Jones y Higginbotham (1991) puede convertirse en (1990)”, los costos de composición tipográfica e impresión se reducen. Como algunos artículos están escritos por un número abultado de autores, la mayoría de las revistas que utilizan el sistema de nombre y año tienen una regla sobre la utilización de la expresión “et al” (“y otros”). En su forma más típica, la regla es la siguiente. Se utilizan siempre los nombres al citar artículos de uno o dos autores; por ejemplo, “Smith (1990)”, “Smith y Jones (1990)”. Si el trabajo tiene tres autores, se indican los tres la primera vez que se cita, por ejemplo, “Smith, Jones y McGuillicuddy (1970)”. Si se cita de nuevo, puede abreviarse: “Smith et al. (1970)”. Cuando un trabajo tiene cuatro o más autores, se cita como “Smith et al. (1990)” desde la primera vez. En la sección de Referencias, algunas revistas prefieren que se enumeren todos los autores (por muchos que sean); otras revistas anotan solo los tres primeros autores y añaden “ et al.” Los “Uniform Requirements for Manuscripts Submitted to Biomedical Journals” (Requisitos uniformes de los manuscritos presentados a revistas biomédicas) (International Committee of Medical Journal Editors, 1993) dicen: “Enumere todos los autores pero, si son más de seis, indique seis y añada “et al”. Sistema numérico-alfabético Este sistema consistente en citar por número las referencias de una lista alfabetizada, es una modificación moderna del sistema de nombre y año. La cita por números mantiene los gastos de impresión dentro de límites razonables; la lista alfabetizada, especialmente si es larga, resulta relativamente fácil de preparar para los autores y de utilizar para los lectores (Especialmente los bibliotecarios). A algunos autores que han venido utilizando normalmente el sistema de nombre y año no les suele gustar el sistema numérico-alfabético, pues alegan que citar números es una estafa para el lector. Según esta argumentación, al lector hay que decirle el nombre de la persona relacionada con el fenómeno que se cita; a veces, hay que indicarle también la fecha, ya que una cita de 1894 puede considerarse de distinta forma que una de 1994. Afortunadamente, esos argumentos pueden rebatirse. Al citar referencias bibliográficas en el texto, hay que decidir si los nombres o fechas son importantes. Si no lo son (como ocurre normalmente), utilice solo el número de la referencia: “En estas condiciones la pretirosina se convierte cuantitativamente en fenilalanina (13)”. Si quiere indicar el nombre del autor, hágalo en el contexto de la frase “La función del seno carotídeo en la regulación de la respiración fue descubierta por Heymans (13)”. Si desea indicar la fecha, hágalo también dentro de la frase: “La estreptomicina se utilizó por primera vez en el tratamiento de la tuberculosis en 1945 (13)”. Sistema de orden de mención El sistema de orden de mención consiste sencillamente en citar las referencias (por número) según el orden en que se mencionan en el artículo. Este modo de proceder evita los 56 gastos de imprenta considerables del sistema de nombre y año, y a los lectores con frecuencia les gusta porque pueden acudir rápidamente a la lista de referencias si lo desean, siguiendo el orden numérico a medida que las encuentran en el texto. Es un sistema útil para las revistas en que cada artículo contiene solo algunas referencias. En el caso de trabajos largos, con muchas referencias, no resulta probablemente un buen sistema. No es bueno para el autor, por la incomodidad considerable que supone renumerar la lista como consecuencia de la adición o supresión de referencias. Tampoco es ideal para el lector, porque la presentación no alfabética de la lista puede ocasionar la separación de diversas referencias a obras de un mismo autor. En la primera edición del presente libro, decía que el sistema numérico-alfabético “parece estar ganando lentamente preponderancia”. Poco tiempo después, sin embargo, pareció la primera versión de los “Requisitos uniformes para preparar los manuscritos que se proponen para publicación en revistas biomédicas”. (sistema de Vancouver), que patrocinaba el sistema de orden de mención para las revistas participantes. Varios centenares de revistas biomédicas han adoptado los “Requisitos uniformes...” (International Committee of Medical Journalist Editors, 1993). Por ello, hoy no resulta claro que sistema de citas ganará “preponderancia” si es que alguno la gana. El documento de “Requisitos uniformes....”es tan impresionante por muchos conceptos que ha tenido y sigue teniendo importantes repercusiones. Está de acuerdo básicamente con una norma preparada por el American National Standards Institute (ANSI) (1977). En el terreno de las citas bibliográficas, sin embargo, sigue habiendo una fuerte oposición. Por ejemplo, el poderoso Council of Biology Editors decidió utilizar el sistema numérico-alfabético en la quinta edición del CBE Style Manual. (CBE Style Manual Committee, 1983). Además la 14a. Edición de The Chicago Manual of Style (1993), que es la biblia de la mayor parte de la comunidad editora de obras académicas, sigue respaldando con claridad las referencias ordenadas alfabéticamente. En sus más de 100 páginas de instrucciones detalladas para tratar las referencias, varias veces hace observaciones como la siguiente (página 522): “La forma más práctica y útil de ordenar las entradas de una lista de referencias o de una bibliografía es seguir el orden alfabético, por autores”. Sin embargo, el libro de Huth Medical Style E Format (Huth, 1987) trató de inclinar la balanza a favor de los “Requisitos uniformes....” (orden de citación), al menos en el caso de las revistas biomédicas que adoptaran ese manual de estilo, nuevo y amplio. Títulos y paginación completa ¿Deben indicarse en las referencias los títulos de los artículos? Normalmente habrá que adaptarse al estilo de la revista; si esta permite elegir (como hacen algunas), recomiendo que se incluyan las referencias completas. Al expresar los temas generales, los títulos de los artículos permiten a los lectores (y a los bibliotecarios) interesados decidir fácilmente si tienen que consultar todas, alguna o ninguna de las referencias citadas. La utilización de la paginación completa (número de las páginas primera y última) fachita a los posibles usuarios la distinción entre las “notas” de una página de extensión y los artículos de revisión de 50 páginas. Evidentemente, el costo, para uno mismo o para una biblioteca, de obtener las referencias, especialmente si son en forma de fotocopia, puede variar considerablemente en función del número de páginas de que se trate. Abreviaturas de los títulos de las revistas 57 Aunque los estilos de las revistas varían mucho, hay un aspecto de la cita de referencias que se ha uniformado en los últimos años, y es el de las abreviaturas de los títulos de las revistas. Como resultado de la amplia aceptación de una norma (American National Standards Institute, 1990) casi todas las revistas primarias y servicios secundarios principales utilizan ahora el mismo sistema de abreviación. Antes, la mayoría de las revistas abreviaban los nombres (la abreviación permite ahorrar en los gastos de imprenta), pero no había uniformidad. La Journal of the American Chemical Society se abreviaba de distintas formas, como “J. Amer.Chem.Soc.”, “Jour.Am.Chem.Soc.”,, “J.A.C.S.”, etc. Esos distintos sistemas planeaban problemas tanto a los autores como a los editores. Ahora, existe esencialmente un solo sistema, y es uniforme. La palabra “Journal” se abrevia siempre como “J”. (Algunas revistas omiten el punto después de las abreviaturas.). Observando unas cuantas reglas, los autores pueden abreviar muchos títulos de revistas, incluso poco conocidas, sin necesidad de consultar una lista. Es útil saber, por ejemplo, que todas las terminaciones en “ología”, se abrevian acabando en la “I” (“Bacteriología” se abrevia “Bacteriol.”; “Fisiología”, “Fisiol..”, etc.). Por ello, si se memorizan las abreviaturas de las palabras comúnmente utilizadas en los títulos, pueden abreviarse con facilidad la mayoría de los títulos de revistas. Una excepción que debe recordarse es que los títulos de una sola palabra (Science, Biochemistry) no se abrevian nunca. En el apéndice 1 se da una lista de las abreviaturas correctas de las palabras comúnmente utilizadas en los títulos de las publicaciones periódicas. Cómo citar en el texto Me deprime ver cómo muchos autores utilizan métodos descuidados al citar la bibliografía. (Nunca estoy deprimido mucho tiempo...mi capacidad de atención no es muy grande.) Una falta común consiste en hacer una “referencia pasada”, en la que se remite al lector con desenvoltura a “la elegante aportación de Smith” sin decir para nada sobre qué escribió este ni que relación tienen los resultados obtenidos por él con los del autor. Si vale la pena citar una obra, hay que decir al lector por qué. Algunos autores adquieren el hábito de poner todas las citas al final de las oraciones, cosa que es un error. Las referencias deben hacerse en el lugar de la frase a que se apliquen. Michaelson (1990) da este buen ejemplo: Hemos examinado un método digital de modulación de amplio espectro para la comunicación por satélite de acceso múltiple y la radiotelefonía móvil digital. Obsérvese cómo las citas se vuelven mucho más claras si se formula la frase del siguiente modo: Hemos examinado un método digital de modulación de amplio espectro para su utilización con el perfeccionamiento de Smith de la comunicación de acceso múltiple y con la técnica de Brown de radiotelefónica móvil digital . Ejemplos de los diferentes estilos de referencias Para que el lector pueda apreciar simultáneamente las diferencias entre los principales sistemas he aquí tres referencias tal como aparecerían en la sección de Referencias de una revista. Sistema de nombre y año. 58 Day, R.A. 1996. Cómo escribir y publicar trabajos científicos. Washington, DC: Organización Panamericana de la Salud. Huth, E.J. 1986. Guidelines on authorship of medical papers. Ann. Intern. Med. 104:269-274. Sproud, J., H. Kllaren, y F. Mannarino. 1993. Surgical treatment of Freigerg’s Infraction in athletes. Am. J. Sports Med. 21:381-384. Sistema numérico-alfabético 1. Day, R.A. 1996. Cómo escribir y publicar trabajos científicos. Washington DC: Organización Panamericana de la Salud. 2. Huth, E.J. 1986. Guidelines on authorship of medical papers. Ann. Intern. Med. 104:269-274. 3. Sproud, J., H. Kllaren, y F. Mannarino. 1993. Surgical treatment of Freiberg’s Infraction in athletes. Am. J. Sports Med. 21:381-384. Sistema de orden de mención 1. Huth E.J. Guidelines on authorship of medical papers. Ann Intern Med 1986; 104:269-274. 2. Sproud J, Klaaren H, Mannarino F. Surgical treatment of Freiberg’s infraction In athletes. Am J Sports Med 1993; 21:381-384. 3. Day, R A. Cómo escribir y publicar trabajos científicos. Washington, DC: Organización Panamericana de la Salud; 1996. Además de por la ordenación no alfabética de las referencias, el sistema del orden de mención se distingue bastante de los otros porque elimina los puntos después de las abreviaturas (en los títulos de revistas, por ejemplo) y después de las iniciales de los autores, y las comas después de los apellidos. Si tiene la intención de presentar un manuscrito a cualquier revista que use ese sistema de citas, deberá conseguir un ejemplar de Uniform Requirements for Manuscripts Submitted to Biomedical Journals. Pueden obtenerse ejemplares gratuitamente de Secretariat Office, Annals of Internal Medicine, American College of Physicians, Independence Mall West, Sixth St. at Race, Filadelfia, PA 19106. 59 CURSO DE METODOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN PRÁCTICA No 6: LA REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA I. OBJETIVOS: 1. Revisar fuentes bibliográficas. 2. Citar referencias adecuadamente. II. DOCUMENTOS DE REFERENCIA: 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. Day R. ¿Cómo citar las referencias. En: Cómo escribir y publicar trabajos científicos. 2ª edición. Washington: OPS, 1996: 49-56. http://www.freemedicaljournals.com http://www.goldenlinks4doctors.com/ http://promedicum.com/mantenimiento.html http://www.ncbi.nlm.nih.gov/entrez/query.fcgi http://www.telmeds.org/ http://www.healthinternetwork.org III. PROCEDIMIENTO: 1. Revise el documento 1 de referencia. 2. Elabore una ficha de trabajo: a. Anote en la parte superior: Nombre del autor o autores Título del artículo Nombre de la publicación (Libro o Revista) Editorial (si es libro) Volumen y número de la publicación Página inicial y final del artículo Año de publicación Sitio internet si fue localizada de esta manera (incluya la fecha en que lo hizo) b. Escriba la idea principal del autor de interés para su investigación, la cual puede encontrarse en el resumen, la introducción, o los resultados. Si transcribe la idea textualmente colóquela entre comillas. 3. Confeccione 5 referencias sobre el tema de investigación que permitan exponer: características del problema temático (v.g. diabetes), consecuencias del problema, causas del problema (v.g factores de riesgo de diabetes) y soluciones propuestas (v.gr. prevención, tratamiento y/o rehabilitación en diabetes), ordenando los elementos de acuerdo con las indicaciones del documento 1. Se recomienda utilizar 5 a 10 referencias en el Planteamiento del Problema y 5 a 10 en el Fundamento Teórico. 60 CURSO DE METODOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN TEMA No 7 PRÁCTICA No 7 EL PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA El planteamiento del problema debe brindar un argumento convincente de que los conocimientos disponibles son insuficientes para dar cuenta del problema y sus posibles alternativas de solución, o brindar un argumento convincente de la necesidad de someter a prueba si lo que se conoce y se da como un hecho verdadero, puede no ser tan cierto dados nuevos hallazgos o nuevas situaciones. En este acápite se debe reflejar que el investigador se ha documentado sobre el problema y ha realizado una exhaustiva revisión bibliográfica sobre el tema I. OBJETIVOS: 1. Caracterizar un problema. 2. Indicar las Causas. 3. Señalar las soluciones, 4. Formular el problema (Indicar el problema de conocimiento: preguntas sin respuesta). II. DOCUMENTOS DE REFERENCIA: 1. Organización Panamericana de la Salud. Planteamiento del problema. En: Guía par escribir un protocolo de investigación. Washington, USA. Páginas 4-5. [email protected] III. PROCEDIMIENTO: 1. Lea el documento de referencia. 2. Definiendo brevemente el concepto o significado de los términos con que denomina el problema, señale brevemente antecedentes conocidos sobre el mismo, desde el nivel mundial hasta el nivel local. 3. Caracterice el problema mediante la expresión de su magnitud y su severidad: Frecuencia absoluta y relativa. ¿Qué efectos tiene o puede tener en cuanto a mortalidad, morbilidad, limitaciones, discapacidades, dificultades, así sean de tipo administrativo. Áreas geográficas afectadas y grupos de población afectados por el problema?. ¿Cuál es su potencialidad, a cuántos puede afectar? Hay diferencias en cuanto a etnia y género. Si no las hay indíquelo o especifique que no se sabe. No olvide indicar que algo no se sabe en cualquiera de los aspectos revisados. Documente sus aseveraciones haciendo citas y evidenciándolo con las referencias. Si surgen dudas notables en este aspecto, el plantemiento del problema puede limitarse a su caracterización (estudio descriptivo) 4. Causas probables del problema: ¿Cuál es el conocimiento actual sobre el problema y sus causas? ¿Hay consenso? ¿Hay discrepancias? ¿Hay evidencias conclusivas? ¿Cuánto se puede profundizar en el estudio de acuerdo con las facilidades que contamos y la fase del conocimiento en que estamos? Si se supero el apartado anterior (caracterización) el problema se profundiza a este nivel (causalidad) lo que sugiere un estudio analítico. 5. Soluciones posibles: ¿Cuáles han sido las formas de resolver el problema? ¿Qué se ha propuesto? ¿Qué resultados se han obtenido? Este aspecto señala que estamos ante un problema de resultados o de eficacia (y efectividad) como en los estudios de intervención (tipo ensayo clínico). 6. Preguntas sin respuesta: Cualquiera sea el nivel de profundización del problema (caracterización, causalidad o eficacia) retome las dudas de conocimiento: ¿Qué sigue siendo una interrogante? ¿Qué no se ha logrado conocer, determinar, verificar, probar? Finalmente, formule en forma de pregunta(s) el problema, en lo cual se puede plantear el qué (descripción), la relación entre factores relacionados, la diferencia en unos y otros 61 7. 8. 9. o el por qué (causas) ocurre en los diversos niveles de profundidad, de acuerdo con las limitaciones del estudio, dónde y cuando ocurre y quiénes lo presentan. Puede hacerse una o varias preguntas cuyas respuestas no se contesten simplemente como SÍ o como NO. La investigación se limitará a describirlo (características del problema y la población afectada)?, se podrá profundizar en su causas (políticas, sociales, económicas, administrativas, ecológicas, biológicas, fisiopatológicas, bioquímicas y/o moleculares? Se puede dedicar a probar soluciones nuevas o propuestas? En el tema de desnutrición las preguntas sin respuesta podrían ser: ¿Cuáles son las características de los niños desnutridos de El Chorrillo? ¿Qué secuelas se producen como consecuencia de la desnutrición. ¿Qué factores de riesgo se asocian a la desnutrición. (causas posibles)? Qué medidas de intervención son eficaces para prevenir.. detectar precozmente..tratar.. o rehabilitar a niños desnutridos?.. Cada una de ellas se deriva de uno de los aspectos del planteamiento del problema. La formulación del problema se expresa mediante una PREGUNTA CENTRAL que recoja la duda fundamental que esperamos resolver mediante la investigación. La pregunta central, usando el sentido común y la intuición puede ser el punto de partida del problema. De ser así, reconstruya el planteamiento del problema a partir de ella. Sobre la base de la pregunta que formula el problema puede redactar preliminarmente el Objetivo General y el Título de la Investigación. . FORMULARIO para El Planteamiento (estructurado) del Problema (Sugerencias que Ud. puede utilizar según el nivel de profundidad del problema) Magnitud y Severidad del Problema: Frecuencia absoluta y relativa: Complicaciones y secuelas: Áreas geográficas afectadas: grupos de población afectados: Consideraciones étnicas: Consideraciones de género. Consecuencias o complicaciones. La depresión es la segunda patología crónica más frecuente que atiende el médico de atención primaria. Su prevalencia en los centros de atención primaria va de un 5 a 10%. Esta cifra aumenta en los adultos mayores, donde se ha encontrado que 17 a 37% de aquellos que acuden a centros de cuidados primarios, presentan síntomas depresivos. El riesgo de morbilidad durante la vida es del 7 al 12% en el varón, y 20 al 25% en la mujer, siendo evidente que el sexo femenino es mayormente afectado (2,3). Según la OMS, ocupa la cuarta causa de discapacidad a nivel mundial, y se predice que para el 2020 estará en el segundo lugar (4). En nuestro país, las muertes producidas por accidentes se encuentran en el segundo lugar de causa de muerte según las estadísticas; las lesiones autoinfligidas intencionalmente ocupan el cuarto lugar de una lista de ocho. Sólo en el año 2003, hubo 195 defunciones por ésta causa (5). Esto nos llama a reflexionar, ya que 50% de los suicidas presentan un episodio depresivo mayor (6). Para agravar esta situación, más de la mitad de estos pacientes que cometen suicidio, visitaron a su médico de cabecera en el mes previo al desenlace. (7) Los pacientes con depresión tienen mayor discapacidad funcional que aquellos que presentan otro tipo de enfermedades crónicas ( por ejemplo, diabetes, hipertensión); pierden más días de trabajo, pasan mayor tiempo en cama y sufren más dolor corporal que otros pacientes. (7) El paciente deprimido también es frecuentemente subdiagnosticado, esto ocurre cuando éste se presenta con múltiples quejas somáticas y el médico no logra detectar la causa de consulta real y se empeña en descartar entidades biológicas específicas. Este círculo vicioso es alimentado por las consultas de manera repetida de médico en médico; además de la utilización de los recursos diagnósticos de forma indiscriminada, aumentan considerablemente los costos de los servicios 62 de salud y empeorando la calidad de vida de éste paciente. Según encuestas realizadas del National Institutions of Mental Health (EU), 70% de los pacientes deprimidos no reciben tratamiento. Causas probables del problema: Conocimiento actual sobre el problema y sus causas: Consenso: Discrepancias: Evidencias conclusivas: Soluciones posibles ¿Cuáles han sido las formas de resolver el problema? ¿Qué se ha propuesto? ¿Qué resultados se han obtenido? Actualmente no se conoce aún la etiología de la depresión, sin embargo se piensa que es resultado de la integración de factores ambientales, genéticos y constitucionales, eventos adversos en la vida del individuo y disfunción del SNC.(4) Las etiología de la depresión es desconocida, y se propone como multifactorial. Una de las teorías actuales es la de diátesis-estrés, que involucra factores emocionales, sociales y ambientales que influyen en el paciente, además de vulnerabilidades genéticas y adquiridas. A medida que recurren los episodios depresivos, éstos generan disfunción en el sistema nervioso central inducida por el hipercortisolismo, y disturbios del sueño, que como última consecuencia producen desbalance en los neurotransmisores serotonina, noradrenalina y ácido gammaminobutírico (GABA).(8) El United States Preventive Services Task Force en el año 2002 revisó la evidencia científica que existe respecto al tamizaje de la depresión. Concluyen que realizar este tamizaje está fuertemente recomendado en todos los adultos en la práctica clínica en sistemas de salud donde se pueda asegurar el diagnóstico, tratamiento efectivo y seguimiento. No hay consenso en cuál es la mejor herramienta para realizar el tamizaje, pero el USPSTF menciona dos preguntas sencillas que se pueden hacer y tienen sensibilidad y especificidad parecida a los cuestionarios largos que ya existen (9,10). Preguntas sin respuesta ¿Qué sigue siendo una interrogante? ¿Qué no se ha logrado conocer, determinar, verificar, probar? con respecto a magnitud, severidad, causas o soluciones al problema. ¿ Cuántos pacientes en la consulta ambulatoria de nuestras policlínicas están deprimidos? ¿Conocemos el perfil epidemiológico de nuestros pacientes deprimidos?¿Están recibiendo tratamiento nuestros pacientes afectados? Pregunta Central ¿Cuáles son las características socio-epidemiológicas de los pacientes deprimidos atendidos en la consulta de Medicina Familiar en la Policlínica Presidente Remón durante el mes de febrero de 2006? Objetivo General Describir características socio-epidemiológicas de pacientes con depresión detectados por tamizaje Características socio-epidemiológicas de pacientes adultos con depresión captados mediante tamizaje en la consulta ambulatoria de Medicina Familiar de la Policlínica Presidente Remón de la Caja de Seguro Social de Panamá durante febrero de 2006. Título preliminar NOTA: Presente al facilitador el Planteamiento del Problema siguiendo este formulario. Al final debe incluir las referencias que evidencian las citas. Si utiliza tablas u otra evidencia debe colocarla en el texto entre paréntesis. 63 CURSO DE METODOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN TEMA No 8 PRÁCTICA No 8 JUSTIFICACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN. I. OBJETIVO: 1. Justificar el estudio siguiendo los criterios de la Guía para escribir un protocolo de Investigación de la Organización Panamericana de la Salud. II. PROCEDIMIENTO: 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. Lea reflexivamente el Acápite “JUSTIFICACIÓN DEL ESTUDIO” de la Guía para escribir un Protocolo de la OPS. Indique ¿Cómo se relaciona la investigación con las prioridades de la región y del país? o con las prioridades de la comunidad, la Institución o la Asignatura, considerando la trascendencia que tiene el problema para la comunidad (los usuarios del servicio), para los prestadores de servicio y los administradores, así como su vulnerabilidad (posibilidad de controlarlo, reducirlo o anularlo), como criterios de selección del mismo. Puntualice qué conocimiento e información se obtendrá con esta investigación retomando las preguntas sin respuesta del planteamiento del problema. Explique ¿Cómo se utilizarán los resultados y quienes serán los beneficiarios?. Una vez que se obtiene nuevos conocimientos ¿Qué uso inmediato le podremos dar para beneficio de las personas o entidades que tienen el problema social que estamos enfrentando. Establezca ¿Cuál es la finalidad que se persigue con el conocimiento que brindará el estudio? No es el resultado que se obtiene inmediatamente. Se trata del propósito de la investigación. Una vez que se obtienen los resultados y se utilizan produciendo beneficios, qué impacto tendrá en estas personas o instituciones? Identifique los beneficiarios de la investigación. ¿Quiénes pueden recibir algún beneficio importante de la utilización de los resultados? (pacientes, familiares, prestadores de servicio, administradores, comunidad). Indique ¿Cómo se diseminarán los resultados para que puedan ser utilizados por los beneficiarios o por quienes pueden utilizarlos para tomar decisiones o realizar otras investigaciones relacionadas? 64 FORMULARIO (estructurado) para redactar La Justificación del Estudio Prioridad ¿Cómo se relaciona la investigación con las prioridades de la región y del país? La depresión tiene un impacto negativo en la calidad de vidad del paciente por lo que resulta de sumo interés estimar la magnitud del problema y las características de estos pacientes Conocimientos nuevos ¿Qué conocimiento e información se obtendrá? Mediante este estudio conoceremos las características clínicas y socio-epidemiológicas de los pacientes deprimidos que acuden a la Policlínica Presidente Remón. Utilidad ¿Cómo se utilizarán los resultados? Con estos conocimientos se podrá ofrecer una mejor calidad de atención al paciente asegurado Finalidad ¿Cuál es la finalidad que se persigue con el conocimiento que brindará el estudio? Mejorando su diagnóstico oportuno y la calidad de la atención esperamos contribuir a evitar las complicaciones que se pueden producir por la depresión y mejorar su calidad de vida. Beneficiarios ¿quiénes serán beneficiarios? los Los pacientes con riesgo de depresión o deprimidos que acudan a los centros de atención primaria de la Caja de Seguro Social Divulgación de los resultados Los resultados se divulgarán entre los servicios de atención ¿Cómo se diseminarán los primaria mediante exposiciones, en la Jornada Médica de la resultados? CSS y se publicarán en una revista científica. NOTA: Presente al facilitador la Justificación del Estudio utilizando este formulario. 65 CURSO DE METODOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN TEMA No 9: EL FUNDAMENTO TEÓRICO Elementos teóricos necesarios para explicar el problema de conocimiento El fundamento teórico, considerado el "piso" que sustenta la pregunta central del estudio, expone el razonamiento y argumentos del investigador hacia la búsqueda de la evidencia que le de respuesta a la pregunta y/o hipótesis. Requiere igualmente, una exhaustiva revisión de la bibliografía. INTRODUCCIÓN Tal como señala la Guía de la OPS, el fundamento teórico es la argumentación y demostración de que la "pregunta" tiene fundamento (piso), derivando en probable(s) respuesta(s) y/o hipótesis de trabajo. Se caracteriza por: El establecimiento de relaciones entre la variable independiente y variables respuesta. ¿Qué se sabe y como lo han explicado? ¿Los resultados son conclusivos? ¿Cuáles son los fundamentos de la pregunta? ¿Cómo se explica y argumenta las posibles respuestas a la pregunta? ¿Cuáles son los supuestos? ¿Cuáles son las relaciones? ¿Cuáles serían las hipótesis de trabajo? Expone el razonamiento y argumentos del investigador hacia la búsqueda de la evidencia que le de respuesta a la pregunta y/o hipótesis. Requiere igualmente, una exhaustiva revisión de la bibliografía. I. OBJETIVOS: 1. Elaborar una explicación teórica al problema. 2. Sustentar la formulación de la Hipótesis. II. DOCUMENTO DE REFERENCIA: 1. Sabino, C. El llamado Marco Teórico. En: Metodología de la Investigación. Capítulo 5Capítulo 5. Free Website hosting Freeservers. com 66 EL LLAMADO MARCO TEORICO Es más fácil morir con honra que pensar con orden. José Martí 5.1. Concepto Hemos afirmado, en el capítulo anterior, que el planteamiento de una investigación no puede realizarse si no se hace explícito aquello que nos proponemos conocer: es siempre necesario distinguir entre lo que se sabe y lo que no se sabe con respecto a un tema para definir claramente el problema a investigar. Del planteamiento de la investigación surgen, por lo tanto, sus objetivos internos y externos, y la posibilidad de emprender la imprescindible delimitación del campo de estudio. Pero ya mencionábamos con anterioridad Bv. supra, 2.2B que ningún hecho o fenómeno de la realidad puede abordarse sin una adecuada conceptualización. El investigador que se plantea un problema no lo hace en el vacío, como si no tuviese la menor idea acerca del mismo, sino que siempre parte de algunas ideas o informaciones previas, de algunos referentes teóricos y conceptuales, por más que estos puedan no tener todavía un carácter preciso y sistemático. Porque, muchas veces, es sólo durante el propio proceso de investigación que se refinan y hacen más rigurosos los conceptos existentes, a medida en que se penetra en las características de los objetos de estudio y se los va conociendo mejor. Teniendo en cuenta estas consideraciones y recordando el esencial carácter dinámico del proceso de conocimiento, es que podrá juzgarse entonces la importancia de abordar el trabajo de investigación teniendo como punto de partida una sólida perspectiva teórica, que haga explícitos los conceptos y supuestos que dan origen a la investigación. El marco teórico, también llamado marco referencial (y a veces, aunque con un sentido más restringido, denominado asimismo marco conceptual) tiene precisamente este propósito: dar a la investigación un sistema coordinado y coherente de conceptos y proposiciones que permitan abordar el problema. Es decir, se trata de integrar al problema dentro de un ámbito donde éste cobre sentido, incorporando los conocimientos previos referentes al mismo y ordenándolos de modo tal que resulten útiles en nuestra tarea. Veamos lo anterior con un ejemplo. Si deseamos conocer la forma en que la libertad económica ha influido en el desarrollo de América Latina será conveniente recordar que existen diversas definiciones y formas de concebir el desarrollo y que la libertad económica es un concepto complejo, que sintetiza en sí mismo innumerables aspectos específicos de muy diversa naturaleza. Sobre el desarrollo se han elaborado además diversas teorías, en muchos sentidos contrapuestas, y no resulta serio comenzar a trabajar sobre el tema sin antes conocerlas, analizarlas y saber el punto en que se encuentran en la actualidad. De modo que es preciso pasar revista a todo este conjunto de problemas, ordenar las ideas y esbozar los criterios generales con los que habremos de trabajar. No quiere decir esto que exista un único marco teórico posible para este problema, un sólo concepto válido de desarrollo o de libertad económica, o que debamos seguir una forma estandarizada de acercarnos a los datos que nos permiten evaluar ambos elementos, sino que debemos pasar revista a los conocimientos existentes, organizarlos de algún modo coherente y utilizarlos entonces como punto de partida para el trabajo de indagación a realizar. Explicitar los puntos anteriores y muchos otros, sin 67 duda, que surgirán en relación a ellos significa poner en claro para el propio investigador sus postulados y supuestos, asumir los frutos de investigaciones anteriores y esforzarse por orientar al trabajo de un modo coherente. De toda esta actividad dependerán, en no poca medida, los frutos que se obtendrán al cabo de la investigación. El cometido que cumple el marco teórico es, pues, situar a nuestro problema dentro de un conjunto de conocimientos en lo posible sólidos y confiables que permitan orientar nuestra búsqueda y nos ofrezcan una conceptualización adecuada de los términos que utilizamos. Por esta razón, el punto de partida para construir una marco de referencia lo constituye nuestro conocimiento previo de los fenómenos que abordamos y las enseñanzas que extraigamos del trabajo de revisión bibliográfica que obligatoriamente tendremos que hacer. Es por ello que, en muchos proyectos de investigación, no se presenta una sección aparte denominada marco teórico@ sino que se exponen sus características dentro de lo que se denomina revisión bibliográfica@ o antecedentes@. Puede suceder, por tal motivo, que el marco teórico de un trabajo no aparezca en forma explícita en el mismo, aunque es normal que toda investigación de cierto nivel plantee estas referencias teóricas en sus capítulos iniciales. Cuando no se las formula es porque estamos aludiendo a un sistema referencia lo suficientemente conocido como para que el mismo no requiera de una exposición detallada, ya que se puede suponer, razonablemente, que los lectores lo conocen con anterioridad. Este es el caso de las teorías ampliamente aceptadas, de conceptos difundidos uniformemente en libros de texto o de aportes bien conocidos por los especialistas de una disciplina. Tampoco es usual que un investigador que se inscribe dentro de una escuela determinada de pensamiento, como el psicoanálisis, por ejemplo, haga una exposición preliminar de los fundamentos de dicha corriente: basta con que señale sus puntos de partida y que puntualice, si es necesario, lo que comparte o no de la corriente mencionada pues es frecuente que existan diversos matices dentro de un tronco común para que se haga clara la posición del investigador. En otras ocasiones, cuando se trata de una indagación donde el marco referencial se reduce, en realidad, a algunas pocas proposiciones, éstas pueden insertarse al comienzo del trabajo sin merecer una aclaración mayor. Tal es el caso de estudios aplicados o de investigaciones que buscan extender conceptos bien conocidos a nuevos casos de estudios. No es por tanto necesario que todos y cada uno de los informes de investigación posean una sección específica denominada marco teórico. Lo que sí es importante es desterrar las fuentes de posibles confusiones aclarando al lector nuestros puntos de partida, el sentido que damos a nuestros conceptos, la relación que establecemos entre ellos de acuerdo a los antecedentes existentes y al problema que nos proponemos investigar. 5.2. El problema de la causalidad 68 Tal vez la mayor preocupación de todo científico se refiera a las causas que originan los fenómenos. El investigador desea responderse a preguntas tales como ¿por qué algunos árboles crecen en climas húmedos y otros en zonas secas?, ¿ por qué existe la burocracia?, ¿ por qué las radiaciones atómicas producen problemas genéticos? Encontrar las causas que producen determinados hechos o regularidades entre los fenómenos conocidos es en realidad hallarles una explicación, incluirlos dentro de leyes generales que regulan su comportamiento y de ese modo los hacen inteligibles. Si encontráramos que un cierto fenómeno F se produce siempre que estemos en presencia de la condición C, y que si ésta no se halla presente nunca ocurre F, estaríamos en condiciones de afirmar que C es la causa de F, y que F es el efecto de C. Este es el tipo de relación más estricto que puede vincular ambos términos y recibe el nombre de relación causal o relación de causa-efecto. Este tipo de relación se presenta en las ciencias naturales (aunque con menos frecuencia de lo que se supone) pero raramente en las ciencias humanas o sociales. Siempre que un trozo de hierro (a presión atmosférica) alcanza los 1.535 oC de temperatura éste se funde, y siempre que se funde es porque ha alcanzado dicha temperatura. En el área de las ciencias humanas tenemos que, en primer lugar, los fenómenos ocurren en un marco muy complejo de variables interrelacionadas de tal modo que, al acontecer el fenómeno en estudio, no sólo percibimos la presencia de una, dos o tres variables, sino de una multiplicidad de ellas, que a su vez se modifican e influencian entre sí. Muchas veces se alude al carácter histórico, irrepetible, de todos los acontecimientos humanos, pretendiendo que por esta razón sea imposible abstraer a partir de ellos leyes generales. Como lo expresa Mario Bunge con mucha claridad, [V. Causalidad, El Principio de Causalidad en la Ciencia Moderna, Ed. Eudeba, Buenos Aires, 1961.] este es un argumento poco sólido pues, en esencia, los hechos físicos son también irrepetibles. Si fundimos una barra de hierro ese hecho, en sí mismo, es también único, pues podemos volver a hacer esa misma operación con otro trozo de metal o con el mismo trozo después de un tiempo, pero se tratará, como es fácil apreciar, de hechos muy similares, casi idénticos, pero nunca del mismo hecho. Lo que sucede es algo muy diferente: ocurre que, en cada operación en que se repite un experimento, el investigador puede regular con relativa precisión el comportamiento de las muchas otras variables que podrían intervenir: controla la presión, la composición química del material a fundir y de la atmósfera en que se encuentra, el tamaño del objeto, etc. Este tipo de control, que consiste en aislar el fenómeno de la influencia de los muchos factores que no nos interesan como posibles causas, es lo que es prácticamente imposible de realizar en todo el campo de lo social, precisamente porque todo hecho en el que intervienen seres humanos es de una inmensa complejidad en comparación con los del mundo puramente físico. [V. Los Caminos de la Ciencia, Op. Cit., pp. 101 a 105, así como los puntos 6.4.1 y 6.4.2 de este libro.] Si postuláramos que la tasa de natalidad desciende a medida que aumenta el ingreso per cápita de un país encontraríamos tal vez que esta relación se cumple en muchos casos, pero que nunca se establece del modo estricto que suele seguir una verdadero modelo causal. Si bien es cierto que ambas variables han estado estrechamente ligadas en las sociedades modernas, no podemos negar que existen muchas otras influencias y circunstancias que inciden 69 decisivamente sobre la relación que analizamos. Así, el conjunto de valores culturales preexistentes, la existencia de políticas poblacionales, las prácticas religiosas, la densidad de población, el grado de urbanización y otros muchos factores pueden influir de un modo bastante importante para que la natalidad baje o se estanque en un contexto social determinado. Son variables capaces de estimular, reducir, desencadenar o impedir dicho fenómeno, según su peso relativo en cada circunstancia. Como las explicaciones de tipo causal resultan inadecuadas, por su rigidez, para los fenómenos sociales, es que los científicos dedicados a estas disciplinas se han preocupado especialmente por el problema epistemológico que consiste en suplantar un modelo de causalidad mecánico por otro que rescate la específica complejidad de lo social. En este sentido son varias las posiciones que existen. Desde la aceptación de modelos estadísticos, propiciada ya por Emilio Durkheim a fines del siglo pasado, [V. Las Reglas del Métodos Sociológico, Ed. Panapo, Caracas, 1990, cap. V.] hasta las proposiciones de marxistas o estructuralistas, pasando por los aportes que puede proporcionar la llamada Teoría del Caos [V. Gleick, James, Chaos. Making a New Science, Penguin Books, New York, 1987.] son evidentes los intentos por flexibilizar la noción de causalidad. Debemos destacar también aquí que las ciencias físicas han abandonado ya, en gran medida los modelos mecánicos de explicación, a partir del comienzo de este siglo y gracias a la obra de Einstein, Max Planck y Heisenberg. En todo caso es preciso tener en cuenta que la noción estrecha de causa ha sido suplantada con ventaja por el concepto más abierto de determinación. Decir que A determina a B significa tan sólo expresar que ejerce una influencia, que es capaz de modificar o alterar el comportamiento de B. No diríamos así que A es causa de B, por cuanto B puede estar determinado además por muchos otros elementos sino que A lo determina en alguna medida que es posible evaluar. Decir que el subdesarrollo es la causa de los cinturones de miseria que se han formado alrededor de muchas ciudades latinoamericanas resulta, a nuestro juicio, una aseveración excesivamente terminante y, de algún modo, imprecisa, dado que sub-desarrollo es una categoría demasiado amplia y elástica, que no reúne los requisitos de rigor propios de la ciencia. Proponer, en cambio, que dichas áreas marginales tienen cierta correlación con una determinada forma de industrialización, con migraciones interiores y con problemas de tipo cultural por ejemplo nos parece introducir un enfoque más rico y matizado del problema. En el primer caso tenemos una aparente precisión que sólo esconde una formulación en esencia vacía; en el segundo, pese a la aparente ambigüedad, tenemos una propuesta más atinada a partir de la cual es posible llegar a un afinamiento teórico que nos otorgue la precisión deseada. Para orientar al lector en este complejo terreno es que veremos seguidamente una clasificación de los distintos tipos de condicionamiento que, desde un punto de vista estrictamente lógico, existen en diferentes circunstancias. 5.3. Tipos de determinación Estudiar la forma en que diversos elementos pueden determinarse entre sí no es otra cosa que analizar los diferentes tipos de condicionamiento que pueden existir entre un hecho y otro hecho, pues la determinación que exista entre ellos puede concebirse como una forma en que 70 tales hechos se relacionan o condicionan entre sí. Estos tipos de condicionamiento pueden adoptar diversas formas, de las cuales presentamos las cuatro más importantes. [Para un examen más completo sobre este asunto, cf. Selltiz et al, Op. cit. pp. 100 a 115, y en general todo el cap. IV de esta clásica obra.] a) Condiciones necesarias: son aquellas sin las cuales es imposible que ocurra un determinado fenómeno. Es imprescindible, necesario, que estén presentes para que se produzca el hecho, aunque esto no quiere decir que cada vez que se encuentren ocurra el fenómeno estudiado. Por ejemplo, para que en un país se produzca un golpe militar es condición necesaria, obviamente, que exista un ejército organizado. Por supuesto no siempre sucede que, habiendo un ejército organizado, éste provoque un golpe militar, es más, lo normal es que no ocurra; pero para que suceda es necesario que exista la condición mencionada. La presencia de oxígeno libre Ben el aire o en el aguaB es también una condición necesaria para la existencia de los mamíferos. b) Condiciones suficientes: se refieren a circunstancias que, siempre que aparecen, desencadenan el suceso en estudio, aunque no es necesario que ellas estén presentes para producirlo, pues otras condiciones diferentes podrían por su parte ocasionarlo. V.g., es condición suficiente, para producir la muerte, que se paralice durante un cierto período el funcionamiento del corazón, pero el deceso de una persona puede producirse por muchas otras razones diferentes. c) Condiciones contribuyentes: son aquellas que favorecen de una manera decisiva el suceso investigado, y que generalmente suelen producirlo, aunque no alcancen un determinismo que pueda considerarse como necesario o suficiente. Las condiciones contribuyentes suelen tener una variada incidencia sobre el objeto condicionado, pudiendo contribuir en mayor o menor medida a que éste se produzca. El investigador deberá, pues, no sólo determinar el tipo de condicionamiento que enlaza a los fenómenos que estudia sino que, en este caso, tendrá que prestar atención a la fuerza con que éste se presenta. Así, es conocido que tanto el riego como la radiación solar contribuyen al crecimiento de las especies vegetales, pero lo hacen de un modo diverso según sus magnitudes para cada especie considerada. d) Condiciones contingentes: son circunstancias que, pudiendo favorecer la ocurrencia del hecho estudiado, se presentan sólo eventualmente, pudiendo estar por completo ausentes en la mayoría de los casos. El embargo petrolero decretado por los países árabes en 1973 fue una contingencia que redujo la oferta de ese producto, promoviendo un aumento notable de los precios, pero un aumento en el precio de un bien puede producirse normalmente por muchas otras diferentes circunstancias. La contingencia señalada, en dicho caso, es una circunstancia que operó en el marco de una situación bastante compleja del mercado y que sólo sirvió para darle una forma definida en un momento dado. 71 Solamente en aquellos casos en que se pueda sostener que una condición es a la vez necesaria y suficiente podemos decir que estamos en presencia de la causa de un hecho. Dicho en términos más precisos, C es causa de F cuando siempre que se presenta C aparece F, y cada vez que ocurre F, es que C está presente. 5.4. Las variables Una vez que alcanzamos un conocimiento relativamente amplio del tema a investigar, de sus antecedentes, aspectos principales y enfoques más usuales, debemos abocarnos a aislar, dentro del problema, los factores más importantes que en él intervienen. Para ello habremos de delimitar las principales facetas y los subproblemas diferenciales que se plantean, ordenándolos lógicamente y relacionándolos de acuerdo a su propia naturaleza. De allí surgirán las características y factores básicos que forman parte del problema y a través de los cuales podremos explorarlo, describirlo o explicarlo. Por ejemplo, si se trata de un problema de comercialización, los aspectos fundamentales que deberemos estudiar serán la oferta, la demanda, las motivaciones del consumidor, la distribución, la publicidad y otros factores semejantes. Si se trata de un trabajo de tipo etnográfico, nos interesará diferenciar las formas de tecnología empleada, la organización del trabajo, el tipo de estructura familiar, los ritos, ceremonias y formas de culto religioso. Estos factores encontrados deben ser posteriormente elaborados y estudiados, hasta que podamos llegar a formularlos en forma de cualidades o características que se entrelazan en el fenómeno a investigar. Gracias a ellos estaremos en condiciones de construir el marco teórico dentro del cual se inserta el fenómeno de nuestro interés. Cuando es posible, llegado a este punto, encontrar que nuestro marco teórico puede ser esquematizado como un conjunto de elementos interdependientes a los cuales es posible medir (de alguna forma), convendrá apelar a la noción de variable para organizar nuestros conceptos. No todos los problemas podrán ser enfocados de esta manera, y tampoco es lícito afirmar que en toda investigación sea conveniente el uso de tales instrumentos lógicos de análisis. Pero, en aquellos casos en que sea posible llegar a un grado tal de aislamiento de los factores involucrados en el problema, resulta indudable que un esquema de variables nos permitirá desarrollar mejor nuestro marco teórico, haciéndolo ganar en precisión y en claridad y facilitando enormemente el trabajo de verificación que es indispensable en la ciencia. Por variable entendemos cualquier característica o cualidad de la realidad que es susceptible de asumir diferentes valores. Es decir, que puede variar, aunque para un objeto determinado que se considere pueda tener un valor fijo. Cuando nos referimos a una característica o una cualidad, que pueden tener los objetos en estudio, cualesquiera que ellas sean, hablamos de propiedades de los objetos pero nunca de los mismos objetos. Una mesa no puede ser, en sí, una variable, pero si nos referimos a la altura de una mesa estamos efectivamente en presencia de una variable, pues una mesa puede tener una altura de 0,40 m, de 0,80 m, o de cualquier otro valor. O sea que esa cualidad de la mesa (la altura), puede asumir diferentes valores: es por lo tanto una variable. No quiere decir eso que la altura de una determinada mesa deba variar, sino que el concepto genérico de altura de una mesa puede 72 variar de un caso a otro. [La definición de variable que acabamos de ofrecer es más amplia que la usualmente utilizada en estadística y en otras ciencias; ello es así porque también intentamos abarcar, en la misma definición, los problemas que se presentan en el estudio de lo social. En todo caso nuestra definición para nada entra en contradicción con el uso aceptado en esas disciplinas: simplemente es una presentación más general de lo que, en tal caso, resultaría un caso específico o particular.] Las variaciones pueden producirse también para un mismo objeto, y no sólo entre diferentes objetos considerados. Pero, en este caso, tampoco podemos expresar que es el objeto mismo el que varía, pues esta modificación habrá de ser siempre la de alguna de sus características (incluyendo dentro de ella a su misma existencia. Así, por ejemplo, diremos que es una variable el caudal que posee un río y no el río en sí mismo. El tiempo es siempre considerado como una variable, pues los hechos pueden producirse en un momento o en otro, dentro de un continuo que va discurriendo constantemente. Por ello, si los fenómenos pueden tener siempre un tiempo determinado diferente para cada caso es que lo consideramos también como una variable. La palabra valor, que hemos empleado hasta aquí, debe entenderse en un sentido amplio y no en el más reducido de valor o magnitud numérica. De este modo, el color de un objeto es para nosotros también un cierto valor, si consideramos la variable color del objeto. Si decimos, por ejemplo, color de una fruta, en un trabajo taxonómico de botánica, esta cualidad, el color puede evidentemente variar de un objeto a otro, ya que puede haber frutas amarillas, verdes, rojas o de diferentes tonalidades. Estos diferentes colores serán, en este caso, los distintos valores que puede asumir la variable de referencia. Suele llamarse a estas variables, sobre las cuales no se construye una serie numérica definida, variables cualitativas, para distinguirlas de aquellas que sí admiten una escala numérica de medición y que se llaman, por lo tanto, cuantitativas. Todos los valores que llega a tener una variable pueden entenderse como una serie, como una sucesión más o menos ordenada de posibilidades. Tales series son de dos tipos básicos: a) Continuas: cuando entre uno y otro valor existen infinitas posibilidades intermedias. Por ejemplo, la altura de una persona, el peso de un objeto, el rendimiento de un estudiante, etc. b) Discretas: cuando dichas posiciones intermedias carecen de sentido pues la variable se modifica de a saltos entre un valor y otro y no en forma paulatina. Por ejemplo, la cantidad de hijos que posee una persona, el número de países que intervienen en una conferencia internacional, etc. En estos casos podemos hablar de un cierto valor 5, 6, 7 ó cualquier otra magnitud entera, pero es absurdo referirse a 2,3 países o 1,8 hijos. Debemos advertir, sin embargo, que sí tiene sentido, y se emplea usualmente, calcular promedios sobre estas cantidades, de modo que pueda decirse que para un cierto grupo social el promedio de hijos por familia es de 3,27 o cualquier otro valor pese a lo cual la variable no deja de ser discreta. 73 Un caso particular de una serie discreta la constituye aquel en que la misma posee solamente dos posibilidades. Ejemplo de ello serían categorías como muerto-vivo o países con o sin salida al mar, donde no cabe otra opción que las dos mencionadas. En tal caso la variable se denomina dicotómica. Una variable puede ser continua y sin embargo, de acuerdo a nuestras posibilidades concretas de medición, medirse sobre una escala discreta. Esto no le cambia su carácter, puesto que refleja más bien nuestra incapacidad para efectuar una discriminación más exacta de los valores. Lo mismo sucede, en otros casos, cuando el investigador no cree apropiado hacer un esfuerzo suplementario para obtener información más precisa. [V. infra, 8.2.] 5.5. Variables y dimensiones Sucede en la práctica que muchas de las características que nos interesa estudiar no son tan simples como las de algunos ejemplos anteriores. Resulta muy sencillo medir y comprar la variable cantidad de hijos que posee una persona, pero nos enfrentamos a una dificultad mayor si pretendemos conocer el rendimiento de un estudiante o el grado de patriarcalismo que presenta una sociedad. Esto es frecuente especialmente en las ciencias sociales, donde la complejidad de los fenómenos y de los actores que intervienen en ellos hace que normalmente nos encontremos con conceptos de suma complejidad. Cuando nos hallamos frente a variables de este tipo, que son complejas de por sí ya que resumen o integran una multiplicidad de aspectos diversos, debemos recurrir a subdividir o descomponer a la variable en cualidades más simples y por lo tanto más fáciles de medir. A estas sub-cualidades que en conjunto integran la variable las llamamos dimensiones. Por dimensión entendemos un componente significativo de una variable que posee una relativa autonomía. Nos referimos a componentes porque estamos considerando a la variable como un agregado complejo de elementos que nos dan un producto único, de carácter sintético. Así, en nuestro ejemplo, el patriarcalismo de una sociedad debe considerarse como una síntesis de un cierto tipo de organización familiar, determinamos valores de conducta individual y pautas definidas de organización económica. Para dar un ejemplo más simple, tomado del campo de las ciencias naturales, podemos afirmar que el tamaño de un objeto, digamos una mesa, no es solamente su altura, largo o ancho, sino una resultante de estas tres dimensiones que, en total, nos determinan su tamaño. Cuando en la definición anterior hablábamos de relativa autonomía lo hacíamos para destacar que las dimensiones pueden presentar diferentes valores unas respecto a otras, pero siempre dentro de ciertos límites de congruencia. Si el largo de un objeto se modificara al variar su altura no estaríamos en presencia de dos dimensiones de una misma variable sino frente a dos variables diferenciadas, una de las cuales estaría influyendo sobre la otra. En cambio, al tratarse de conceptos independientes entre sí, los consideramos como elementos autónomos que permiten integrar una variable. Naturalmente, la independencia que puede haber entre diversas dimensiones no es absoluta ni total, puesto que existe un mínimo y un máximo dentro de los cuales pueden variar los valores de las dimensiones sin llegar a producir una situación incoherente: no llamaríamos mesa a un objeto que tuviese 10 metros de largo y una altura de 20 cm, aunque puede haber mesas de esa longitud (más altas) y de esa altura (más cortas). Por 74 esta razón especificamos que se trata de una relativa autonomía, y no simplemente de autonomía. Una misma cualidad puede considerarse como una variable en sí o como una dimensión de una variable mayor según el enfoque y propósitos que guíen cada investigación, pues se trata de definiciones de carácter instrumental que el científico realiza de acuerdo a la naturaleza del problema planteado. Si, por ejemplo, nos interesa conocer y distinguir a las personas de acuerdo a su nivel socio-económico, esta variable tendrá, a su vez, dos dimensiones distinguibles: el nivel social, y el nivel económico. Pero si estamos estudiando el ingreso de las familias debemos manejar el mismo concepto de nivel económico como una variable en sí y no como una simple dimensión, y nos veremos en la necesidad de descomponer esta variable en algunas de las dimensiones que la integran. En general podemos afirmar que una cualidad interviene como variable en una investigación cuando nos es útil relacionarla como un todo con otra u otras variables; en cambio, debemos tomarla sólo como una dimensión cuando su sentido como cualidad aislada sea poco significante y deba agruparse con otras cualidades para poder ser relevante. Dentro de cada trabajo cada cualidad deberá asumir su papel fijo de variable o de dimensión, sin alterar este carácter a todo lo largo del mismo, pues de otro modo se producirían evidentes confusiones y contradicciones lógicas. Posteriormente, cada una de las variables y dimensiones que hemos aislado debe ser definida con la mayor rigurosidad posible, asignándole un sentido unívoco y claro para evitar que se originen ambigüedades, distorsiones e innecesarias discusiones sobre terminología. 5.6. Relaciones entre variables Luego de haber precisado los factores que intervienen en un problema, de haberlos definido y analizado hasta determinar el tipo de condicionamiento que los unen (según ya hemos visto en 5.3), habremos obtenido un conjunto de variables relacionadas entre sí de una cierta manera particular. Debemos entonces organizar estas relaciones observadas, de modo tal que podamos construir un esquema coherente que nos exprese el cuadro general del problema. Para ello partiremos del núcleo inicial de todo esquema de variables, es decir, del caso elemental en que encontremos que la variable B se halla condicionada por la variable A. No nos interesa ahora especificar la forma concreta de este condicionamiento sino expresar esa relación simple entre ambas variables. Si suponemos que la alimentación que se recibe en la infancia (variable A) afecta o determina o influencia el nivel de inteligencia posterior de la persona (variable B), expresaremos esta relación diciendo que las variaciones de B dependen, en cierta medida por lo menos, de lo que ocurra con la variable A. Llamaremos entonces a la variable A variable independiente y a la variable B variable dependiente, pues sus valores dependen de los que asuma A. La variable A es llamada independiente, pues dentro de la relación establecida no depende de ninguna otra, aunque pudiera resultar dependiente si estudiáramos otro problema. Por ejemplo, la variable nivel socio-económico tiene una relación evidente con la calidad de la 75 alimentación que se recibe. Si llamamos C a esta nueva variable obtendremos el siguiente esquema: Donde ahora A juega el papel de variable dependiente y C asume el papel de independiente. Es perfectamente posible agrupar las dos relaciones planteadas en un solo esquema, que muestre el modo en que se enlazan las tres cualidades consideradas. La variable A resulta ahora dependiente respecto a C, pero independiente respecto a B. La designaremos entonces con el nombre de interviniente, pues resulta un factor que interviene entre C y A modificando o alterando con su propio contenido las relaciones que existen entre esos dos elementos. Además de estas tres posiciones básicas que las variables pueden adoptar al relacionarse entre sí existe una cuarta posibilidad, que se refiere al caso de variables que ejercen una influencia de tipo difuso y general sobre todo el conjunto de los hechos investigados. Designaremos a este tipo de variables con el nombre de contextuales, porque nos indican precisamente el medio, el contexto o ámbito general donde se desarrollan los fenómenos que se estudian. Los valores presentes en una sociedad, el tipo de estructura económica y conceptos que tienen, en general, este amplio nivel, son las más de las veces considerados como variables contextuales. Los esquemas de variables que acabamos de mostrar son los más simples que cabe concebir, constituyen por así decir la célula básica con que luego se estructuran sistemas más complejos. Es normal que una variable no sólo afecte a otra más sino a varias simultáneamente, así como que una variable dependiente sea influida por dos, tres o más variables independientes. Este tipo de entrelazamiento corresponde mucho más a los temas de la realidad social, donde no es raro poder distinguir 10 ó 20 variables jugando un importante papel en un cierto problema. En este caso estamos en una relación de mutua dependencia, donde no hay en propiedad una variable independiente sino una constante retroalimentación entre dos elementos que se condicionan recíprocamente entre sí. Esta situación es bastante frecuente en los fenómenos sociales, que presentan al observador muchos casos de factores entrelazados de tal modo que dan origen a circulos ya sea viciosos o virtuosos de retroalimentación positiva, o a circunstancias donde se produce en cambio una retroalimentación negativa, donde el crecimiento de un factor induce al decrecimiento de otro que, a su vez, refuerza el crecimiento del primero. 5.7. Concepto de hipótesis Cuando afirmamos que existe una cierta relación entre dos variables estamos suponiendo que una cierta característica de la realidad influye sobre otra. Si enunciamos esta relación de un modo explícito, afirmando que X afecta el comportamiento de Y, y si además le damos a tal afirmación un carácter condicional, de enunciado sujeto a prueba o verificación, estaremos elaborando un tipo de proposición fundamental en el avance de toda ciencia: la hipótesis. La 76 hipótesis es así una afirmación, aún no verificada, que relaciona dos o más variables de una manera explícita. Lo que allí se enuncia puede o no ser confirmado por los hechos, por los datos que se recojan, pero en todo caso sirve como punto de partida para organizar el conjunto de las tareas de investigación. Llegar a comprobar o rechazar la hipótesis que se ha elaborado previamente, confrontando su enunciado teórico con los hechos empíricos, es el objetivo primordial de todo estudio que pretenda explicar algún campo de la realidad. [V. Selltiz et al, Op. Cit., pp. 52 a 58.] La hipótesis es la técnica mental más importante del investigador y su función principal es sugerir nuevos experimentos o nuevas observaciones, apunta con razón W. Beveridge [W.I.B. Beveridge, The Art of Scientific Investigation, W. W. Norton Company Inc., New York. Tomado de La Hipótesis, Cuadernos de Epistemología No. 35, Univ. de Buenos Aires, 1967, pág 5.] y añade, para resaltar el valor de esta herramienta metodológica, que una hipótesis puede ser muy fértil sin ser correcta, ya que su capacidad para sugerir diferentes pruebas y análisis de la realidad suele resultar de mucha utilidad para detectar nuevos fenómenos hasta entonces pasados por alto. Lo importante es la actividad que se realiza al confrontar hipótesis con fenómenos empíricos, pues en ella radica una de las notas más importantes de todo el sistema de pensamiento científico. Para que una hipótesis cumpla con su cometido esencial debe reunir una serie de características básicas, entre las que pueden destacarse: [V. Goode y Hatt, Metodología de la Investigación Social, Ed. Trillas, México, 1970, pp. 80 a 82.] Clara conceptualización, que permita identificar sin lugar a dudas cada uno de los términos que involucra desterrando, hasta donde sea posible, toda vaguedad en el enunciado. Referentes empíricos, que posibiliten encontrar hechos concretos sobre los cuales se podrá luego corroborarla o refutarla. Especificación clara respecto a las condiciones en que puede someterse a prueba. Relaciones precisas con los conceptos que usualmente se emplean en el campo de conocimiento sobre el que versa. Por otra parte debemos apuntar que las hipótesis pueden pertenecer a diferentes órdenes o niveles, es decir, que ellas pueden ser más o menos generales o específicas. Las hipótesis del nivel superior son aquellas que sólo figuran como premisas del sistema y las de nivel inferior son las que sólo figuran como conclusiones del sistema; las de los niveles intermedios son las que aparecen como conclusiones de deducciones de nivel elevado y sirven de premisas para las deducciones de hipótesis de bajo nivel, constituyéndose un todo articulado que abarca desde las proposiciones de mayor generalidad hasta las más particulares. [Richard B. Braithwaite, Scientific Explanation, Harper y Brothers, New York, 1970. Tomado de La Estructura de Los Sistemas Ciéntificos, Cuadernos de Epistemología, No. 35, Universidad de Buenos Aires, pág. 1.] Las hipótesis, naturalmente, serán diferentes según el tipo de investigación que se esté realizando. [Cf. Goode y Hatt, Op. Cit., pág. 78.] En los estudios exploratorios, a veces, el objetivo de las investigación podrá simplemente ser el de obtener los mínimos 77 conocimientos que permitan formular una hipótesis. También es aceptable que, en este caso, resulten poco precisas, como cuando afirmamos que el medio de comunicación X induce probablemente un cambio de valores en la población Y, o que el planeta Z posee algún tipo de atmósfera, sin especificar de qué elementos está compuesta. Los trabajos de índole descriptiva generalmente presentan hipótesis del tipo todos los X poseen, en alguna medida, la característica Y . Por ejemplo, podemos decir que todas las naciones poseen algún comercio internacional, y dedicarnos a describir, cuantificando, las relaciones comerciales entre ellas. También, y ya con un grado más alto de complejidad, podemos hacer afirmaciones del tipo X pertenece al tipo Y , como cuando decimos que cierto compuesto químico es un éster o que una tecnología es capital-intensiva. En estos casos describimos, clasificándolo, al objeto de nuestro interés, incluyéndolo en un tipo ideal complejo de orden superior. Por último podemos construir hipótesis del tipo X produce (o afecta) a Y, donde estaremos en presencia de una relación entre variables similar a la que mostrábamos en los ejemplos del punto anterior. 78 PRÁCTICA No 9 EL FUNDAMENTO TEÓRICO III. PROCEDIMIENTO: 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. Haga un índice ordenado de los temas a ser revisados considerando la Pregunta (s) central (es) del problema de conocimiento. Para la pregunta "¿Qué factores de riesgo se asocian la desnutrición en menores de 5 años en el corregimiento de El Chorrillo?", los siguientes serían los temas a revisar: a) Desnutrición, b) Desnutrición en niños preescolares, c) Factores de riesgo de desnutrición en niños, d) Características del corregimiento de El Chorrillo. Revise la literatura sobre estos temas incluyendo tanto los conceptos descritos en documentos bibliográficos, en investigaciones semejantes en otros lugares o en el mismo lugar en otro tiempo, lo cual es propio de las revistas. Los temas no deben alejarse de lo estipulado en la pregunta central, aunque se puede mencionar brevemente aspectos relacionados. El aspecto más revelador en este ejemplo sería la identificación de factores de riesgo que pueden causar el problema, con lo cual estaríamos elaborando una explicación al mismo. Si se trata de estudios de intervención interesa revisar qué efectos han sido observados en otros trabajos sobre población humana o modelos animales. En otras palabras, se trata de revisar lo que se sabe sobre el asunto, de manera que podamos construir un modelo explicativo, una teoría al respecto. Es posible que tengamos que dilucidar controversias presentadas en el planteamiento del problema. Recuerde que las condiciones en que se producen los problemas pueden variar notablemente en momentos y lugares diferentes, y los resultados pueden ser distintos por la intervención de otros factores. Después de redactar lo que se sabe al respecto, respetando siempre las fuentes bibliográficas (mediante las citas), elabore una teoría, una explicación sobre las características (como valores esperados de los parámetros de la población objeto de la investigación), las causas, o las soluciones posibles del problema (según la pregunta central del problema). Ilustre, mediante un diagrama, las relaciones entre las variables consideradas en la explicación al problema, tal como se expresa en las figuras de la ayuda visual en ppt. que se adjunta al tema. 79 FORMULARIO MODELO para redactar El Fundamento Teórico Revisión de los conceptos incluidos en la pregunta central Concepto Depresión de Concepto de Depresión: Etiología diagnóstico y Etiología y diagnóstico: Escala depresión Zung de de Escala depresión geriátrica Yesavage de de La depresión la podemos definir como un síndrome caracterizado por el decaimiento del estado de ánimo, la disminución de la capacidad de experimentar placer y de la autoestima, con manifestaciones afectivas, ideativas, conductuales, cognitivas, vegetativas y motoras, con serias repercusiones sobre la calidad de vida y el desempeño social y ocupacional. Hipócrates fue el primero en describir el cuadro clínico de la depresión y la nombró melancolía, que se deriva de melanos: negra y cholis: bilis. Esta denominación fue gracias a su teoría de que la melancolía era producto del exceso de bilis negra en el cerebro. Con el pasar de los siglos, las teorías del origen de esta patología iban de la mano del pensamiento científico de la época. Ya en la década de 1960 se declara la hipótesis aminérgica dela depresión por Schildkraut, donde el déficit de los neurotransmisores noradrenalina y serotonina dan lugar a la aparición de la depresión. Actualmente no se conoce aún la etiología de la depresión, sin embargo se piensa que es resultado de la integración de factores ambientales, genéticos y constitucionales, eventos adversos en la vida del individuo y disfunción del SNC. (4) Las etiología de la depresión es desconocida, y se propone como multifactorial. Una de las teorías actuales es la de diátesis-estrés, que involucra factores emocionales, sociales y ambientales que influyen en el paciente, además de vulnerabilidades genéticas y adquiridas. A medida que recurren los episodios depresivos, éstos generan disfunción en el sistema nervioso central inducida por el hipercortisolismo, y disturbios del sueño, que como última consecuencia producen desbalance en los neurotransmisores serotonina, noradrenalina y ácido gammaminobutírico (GABA).(8) El United States Preventive Services Task Force en el año 2002 revisó la evidencia científica que existe respecto al tamizaje de la depresión. Concluyen que realizar este tamizaje está fuertemente recomendado en todos los adultos en la práctica clínica en sistemas de salud donde se pueda asegurar el diagnóstico, tratamiento efectivo y seguimiento. No hay consenso en cuál es la mejor herramienta para realizar el tamizaje, pero el USPSTF menciona dos preguntas sencillas que se pueden hacer y tienen sensibilidad y especificidad parecida a los cuestionarios largos que ya existen (9,10). Escala de depresión de Zung: El test de depresión de Zung autoadministrado es un cuestionario que consta de 20 items, utilizado ampliamente para realizar tamizaje de depresión. Fue publicada por primera vez por su autor en el año 1965. Su uso abarca todas las áreas, desde atención primaria, psiquiatría, y estudios de investigación. Se han publicado estudios en Colombia y España donde esta escala alcanzó un nivel de sensibilidad del 96% y de especificidad de un 70%, por lo cual se consideró válida para esta población.(11,12) Esta escala es de tipo Likert, con puntuaciones de uno a cuatro. Luego de realizar la sumatoria, se obtendrán resultados que van de 20 a 80 puntos. El punto de corte para escoger nuestros casos será cuando este puntaje sea mayor de 40. Escala de depresión geriátrica de Yesavage: La Escala de Depresión Geriátrica de Yesavage es un instrumento ampliamente utilizado para tamizaje de depresión, ha sido traducida y validada en diversos idiomas incluyendo el español. En diversos estudios se ha demostrado su validez en adultos mayores sanos y de la comunidad. La versión original fue desarrollada por Brink y Yesavage en 1982 y consta de 30 preguntas de formato si-no. En 1986, Sheikh y Yesavage desarrollaron la versión abreviada de 15 preguntas, la cual conserva la efectividad de la escala original, mejorando la facilidad de la administración. Un puntaje de 5 o más respuestas positivas sugiere depresión, con una sensibilidad y especificidad de entre 80-95%.(13). Recientemente se publicó un estudio donde se evidenció que esta escala se podría aplicar en adultos mayores con alteración en la función, sin daños a nivel congnitivo y de la comunidad.(14). 80 ANTECEDENTES CIENTÍFICOS Revise la literatura y exprese los resultados de otras investigaciones indicando las controversias si las hay Argumentación para formular la Hipótesis La depresión es una de las patologías más frecuentes que se presentan en la consulta de los centros de atención primaria. Reviste gran importancia por su repercusión en la calidad de vida, productividad y uso de los servicios de salud de los pacientes afectados. Por este motivo el mundo científico investiga todos los aspectos relacionados con la depresión. Desafortunadamente en nuestro medio no contamos con estudios de prevalencia y epidemiología relacionada con la depresión, pero un informe de la Organización Panamericana de la Salud revela que en Panamá, el 1% de la población padece de enfermedades mentales, donde la depresión es aquella que encabeza la lista.(15) Se han realizado en otros países estudios de prevalencia de depresión donde analizan las variables epidemiológicas que en el presente trabajo se van a discutir. En el año 2003, se publicó un artículo donde fueron encuestados 48 estados de los Estados Unidos de América, dándose la depresión más frecuentemente en mujeres, en pacientes en edad productiva (18-59 años), en personas casadas, los que estaban empleados, y los que vivían en estado de pobreza. Todos éstos resultados tenían un nivel de significancia estadística de 0.05 o menos.(16). Con respecto a las comorbilidades, se ha establecido que los pacientes con comorbilidades médicas, llámese diabetes mellitus, entre otras, presentan una prevalencia alta de depresión.(17,18). Por otra parte, se dice que 18 a 25 % de los pacientes que padecen depresión están siendo tratados adecuadamente.(19) Podemos observar que los pacientes deprimidos son predominantemente adultos de edad media, del sexo femenino, en su mayoría son empleados, casados y viven en estado de pobreza. Tienen por lo menos una enfermedad concomitante, y la mayoría no está recibiendo tratamiento farmacológico. NOTA: Presente al facilitador el Fundamento Teórico siguiendo este formulario. Al final debe incluir las referencias que evidencian las citas. Si utiliza tablas u otra evidencia debe colocarla en el texto entre paréntesis. 81 CURSO DE METODOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN TEMA No 10/PRACTICA No 10 FORMULACIÓN DE LA HIPÓTESIS I. OBJETIVOS: 1. Elaborar la(s) hipótesis de la investigación, 2. Seleccionar las variables del estudio, II. DOCUMENTO DE REFERENCIA: 1. Sabino, C. El llamado Marco Teórico. En: Metodología de la Investigación. Capítulo 5Capítulo 5. Free Website hosting Freeservers. com III. CONCEPTOS: “La hipótesis es así una afirmación, aún no verificada, que relaciona dos o más variables de una manera explícita. Lo que allí se enuncia puede o no ser confirmado por los hechos, por los datos que se recojan, pero en todo caso sirve como punto de partida para organizar el conjunto de las tareas de investigación. Llegar a comprobar o rechazar la hipótesis que se ha elaborado previamente, confrontando su enunciado teórico con los hechos empíricos, es el objetivo primordial de todo estudio que pretenda explicar algún campo de la realidad". La formulación de la Hipótesis requiere, por lo tanto, haber identificado, desde la revisión bibliográfica, las variables del problema. Observe que si bien es cierto, durante el planteamiento del problema formulamos variables, éstas pueden corresponder a categorías o dimensiones de variables. "Factores de riesgo" comprende un conjunto de variables que gracias a la revisión bibliográfica podemos especificar. Para Riegelman (1992, pág 47) la formulación completa de una hipótesis específica incluye los efectos esperados, el tipo de asociación y la forma de medirlo. Ejemplo: "el grado de daño orgánico está asociado con el grado de hipertensión" se especifica: "el aumento del estrechamiento de las arterias de la retina, medido mediante fotografías sucesivas tomadas durante tres años de observación, está asociado con un aumento de la tensión arterial diastólica, utilizando como medida la media de tres mediciones realizadas al inicio del estudio". La prueba estadística de una hipótesis nos permite categorizarlas en: a) de estimación y b) de asociación, aspecto que debemos considerar al elaborar el plan de análisis seleccionando la prueba estadística adecuada. IV. PROCEDIMIENTO: 1. Retome la formulación del problema, Ud. puede revisar la formulación del problema a la luz de la revisión bibliográfica. 2. La pregunta(s) formulada(s) dará(n) margen a respuestas cognitivas de tipo descriptivo (magnitud y severidad del problema), explicativo (causas del problema) o predictivo (soluciones al problema). Puede tratarse de uno o varios tipos de respuestas. Frente a la pregunta: ¿Cuáles son los factores asociados a la desnutrición en menores de cinco años en El Chorrillo?, la respuesta hipotética podría ser: La pobreza, el deficiente consumo de alimentos, el bajo nivel educativo de la madre, las infecciones intestinales y el deficiente control de salud del niño son factores asociados a la desnutrición….. La especificación de estos factores habrá surgido después de la revisión bibliográfica, aunque con anterioridad podríamos suponer que los factores serían: sociales, económicos, biológicos y de los servicios de salud. 82 3. Formule respuesta(s) a la(s) pregunta(s) del mismo tipo: correspondencia (o correlación), influencia (explicación, o asociación causal), resultados esperados (predicción). 4. Si la pregunta al problema anterior fuera ¿Cuáles son las características de los niños desnutridos de El Chorrillo?, la hipótesis podría ser: Los niños desnutridos de El Chorrillo son pobres, su consumo de alimentos es deficiente, sufren infecciones intestinales y no reciben una adecuada atención de salud. Esta afirmación nos llevaría a estimar valores de frecuencia esperados con rangos e intervalos de confianza. 5. Si la pregunta al problema anterior fuera ¿Cómo influye la pobreza, el deficiente consumo de alimentos, las infecciones intestinales y la atención de salud en el estado nutricional de los niños de El Chorrillo?, la hipótesis podría ser: A mayor nivel de pobreza, mayor deficiencia en el consumo de alimentos, mayor frecuencia de infecciones intestinales y menor atención de salud, mayor grado de desnutrición presentan los niños de El Chorrillo. Esta hipótesis requerirá una prueba de correlación 6. Si la pregunta al problema anterior fuera ¿Qué Factores de Riesgo se Asocian a la desnutrición de los niños del Chorrillo?, la hipótesis podría ser: La pobreza, el deficiente consumo de alimentos, las infecciones intestinales y la inadecuada atención de salud son Factores de Riesgo Asociados a la Desnutrición en los niños de El Chorrillo. Para probar esta hipótesis plantearemos pruebas de asociación. 7. Si la pregunta al problema anterior fuera ¿La educación nutricional de la madre disminuye el grado de desnutrición de sus hijos?, la hipótesis podría ser: La educación alimentaria a las madres mejora el estado nutricional de sus hijos (Que sería semejante a decir: la educación alimentaria de las madres es eficaz en el mejoramiento del estado nutricional de sus hijos). También requiere prueba de asociación o prueba de diferencia entre proporciones. 8. A continuación identifique las variables recordando que las variables contienen dos o más categorías. 9. La hipótesis nula plantea que no hay diferencia, correlación o asociación, entre las variables o grupos de estudio, procurando, si es el caso, diferenciar la(s) dependiente(s) de la(s) independiente(s). 10. Verifique que en la formulación de la hipótesis se pueda reconocer las unidades de análisis, las variables y los elementos lógicos. Recuerde que la hipótesis se formula en forma afirmativa, plantea los valores esperados de alguna variable o la relación entre dos o más variables, deber ser comprobable mediante el sometimiento a prueba de las relaciones expresadas y deben tener capacidad de describir, correlacionar, explicar o predecir. La comprobación de la hipótesis, su aceptación o su rechazo, constituye el carácter científico de la investigación. Aún en un estudio descriptivo podemos formular hipótesis de carácter descriptivo como la estimación de la prevalencia de una condición resultante o dependiente (enfermedad, defunción, curación o prevención) o de factores que podemos identificar como potencialmente causales (variables independientes). El tipo de hipótesis que formulemos {descriptiva de estimación, descriptiva de correlación, analítica de comparación o analítica de causalidad} determinará el tipo y diseño de estudio que aplicaremos para rechazarla o aceptarla y en correspondencia las pruebas estadísticas correspondientes. ENTREGUE AL FACILITADOR LA HIPÓTESIS FORMULADA Y EL LISTADO DE VARIABLES PARA SU REVISIÓN. 83 CURSO DE METODOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN TEMA No 11 PRACTICA No 11 LOS OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN I. OBJETIVOS: 1. Revisar el Objetivo general de la investigación 2. Elaborar los objetivos específicos de la investigación. II. CONCEPTOS: Los objetivos de la investigación constituyen un conjunto de actividades, dentro del contexto de la investigación, dirigidos a probar la hipótesis formulada, así la llamemos un supuesto descriptivo. No incluye, por consiguiente otras actividades que hemos realizado para plantear el problema y construir el fundamento teórico, ni aquellas que nos llevarán a discutir los resultados, sacar conclusiones y hacer recomendaciones. Al respecto, la Guía de OPS señala que. “es conveniente definirlos después que haya elaborado el fundamento teórico y se tengan clara la secuencia entre la pregunta central y las posibles respuestas a las preguntas y/o las hipótesis de trabajo. Dicha recomendación se basa en el hecho de que la definición de los objetivos no son más que una operacionalización de las respuestas y/o hipótesis que sugiere el investigador. Se constituyen en las actividades intelectuales que el investigador ejecutará en todo el proceso de la investigación”. Se trata de un plan de acciones que buscan probar o rechazar la hipótesis formulada. Señala el camino metódico mediante el cual medimos las variables y las relacionamos desde el punto de vista de la hipótesis a probar. El objetivo general se relaciona directamente con la pregunta central de la investigación y más estrechamente con la hipótesis formulada. Recordemos que la hipótesis es la respuesta teórica a la pregunta, formulada sobre la base del fundamento teórico. Por lo tanto, los objetivos dependen de la pregunta central y del tipo de hipótesis a someter a prueba. Si se trata de dar respuesta a un problema descriptivo, magnitud y severidad, nos limitaremos a medir las variables y someterlas a estadísticas descriptivas. Si se trata de una hipótesis de correlación, medimos y establecemos correlación estadística. Si se trata de determinar factores causales, pasamos de la medición a la estimación de asociación estadística; si se trata de predecir resultados, medimos, estimamos asociación y comparamos resultados de intervenciones. Conviene considerar, en la elaboración de objetivos específicos, tres etapas: medición simple, análisis y relación. En la etapa de medición podemos usar verbos como identificar, registrar, seleccionar, detallar, medir, estimar (un dato que describe por aproximación) y evaluar (para recoger un dato como cuando se mide el dolor utilizando una escala). 84 En la etapa de análisis podemos utilizar verbos como: ordenar, catalogar, diferenciar, analizar, interpretar. Puede ser suficiente un objetivo de análisis. En la etapa de relación, podemos utilizar verbos como: estimar, calcular, relacionar, comparar, diferenciar, contrastar, interpretar. Esta etapa se liga a la aplicación de una prueba estadística mediante la cual se contrasta o se prueba la hipótesis. III. PROCEDIMIENTO: 1. Cuando formulamos la pregunta del problema elaboramos un objetivo general preliminar. Ahora lo podemos revisar considerando la Hipótesis para establecer si nos permite probarla. El objetivo general consiste de una acción que responde a la pregunta fundamental del problema expresada mediante un verbo en infinitivo. Si la pregunta fuera: ¿Cuáles son los factores asociados a la desnutrición en niños menores de 5 años en el corregimiento de El Chorrillo?, el objetivo general podría ser: "Determinar los factores de riesgo asociados a la desnutrición en niños menores de 5 años del corregimiento de El Chorrillo". Indica algo que vamos a hacer para responder al interrogante. 2. El verbo del objetivo general debe ser coherente con el tipo de pregunta. En el orden del interrogante sobre magnitud y severidad o características de algo (inclusive si se trata de una solución que necesitamos describir) podemos utilizar el verbo DESCRIBIR. Cuando buscamos establecer correlación podemos utilizar el verbo CORRELACIONAR o el conjunto verbal “ESTABLECER CORRELACIÓN”. Frente a problemas de causalidad es pertinente el verbo DETERMINAR y para establecer pronóstico podemos “EVALUAR (la eficacia, o la efectividad)”. De acuerdo con situaciones propias podemos utilizar verbos como COMPARAR, o de manera genérica ESTABLECER. El verbo evaluar también puede ser utilizado en un estudio descriptivo cuando se requiere aplicar un instrumento de evaluación diagnóstica como en el caso de la evaluación nutricional, o la formulación de diagnósticos mediante la evaluación clínica. 3. Los objetivos específicos permiten alcanzar el objetivo general. Señalan en infinitivo los componentes que tenemos que completar para alcanzar el objetivo general. No incluyen las tareas o pasos relacionados con la revisión bibliográfica ni la discusión y las recomendaciones. 4. Los objetivos específicos corresponden a aspectos parciales de la hipótesis o componentes de la hipótesis. Los factores de riesgo, por ejemplo, pueden ser clasificados en socioeconómicos, biológicos, estilos de vida y de los servicios, entonces la identificación de cada grupo de factores ha de constituir un objetivo específico. Ejemplo: 1. Registrar las características generales de los niños del estudio (edad, sexo, sector). 2. Identificar los factores biológicos, 3. Seleccionar factores socioeconómicos. 4. Señalar los estilos de vida de la familia. 5. Reconocer factores de la oferta de servicios. 5. Recuerde que los objetivos específicos han de ser concretos, concisos, medibles y alcanzables y deben seguir un orden, ya sea metodológico o lógico. 85 6. Se puede diferenciar dos tipos de objetivos específicos. a. los que se refieren a la medición de las variables: medir, identificar, registrar, seleccionar, detallar, estimar, examinar (para medir una característica), evaluar (como cuando aplicamos una guía para obtener un resultado que mida una variable) b. los que se refieren a la relación entre variables o subvariables utilizando verbos como: estimar (un valor a partir de datos crudos), calcular, relacionar, analizar, comparar, diferenciar, contrastar, interpretar. 7. Si el estudio supera la descripción de un grupo (o un caso), y por lo tanto es de tipo comparativo es necesario incluir un objetivos específicos que permita establecer relación entre las variables, tales como. Objetivo específico 6: “Establecer la diferencia entre niños y niñas con respecto a....” ”Estimar la correlación entre el nivel de pobreza y el grado de desnutrición”. “Estimar la fuerza de asociación entre el factor de riesgo... y la enfermedad...”, “Comparar la eficacia de una intervención con respecto a otra”. 8. Tal como señalamos anteriormente, el título de la investigación corresponde al objetivo general. Se sustrae el verbo que determina el qué hacer de la investigación. Siguiendo el ejemplo señalado, el título sería: "Factores de riesgo asociados a la desnutrición en niños menores de cinco años del corregimiento de El Chorrillo en diciembre 2004”. 9. Recuerde que “un buen título debe ser corto, preciso y conciso. Le debe dejar claro al lector (revisor) los objetivos y variables centrales del estudio. Estas se constituyen en las "palabras claves" para su clasificación e indización del proyecto. Si es posible y no lo prolonga, en el título se podría anticipar el diseño Entregue al facilitador el conjunto de objetivos constituido por el objetivo general y los específicos para su revisión. Nota: En los trabajos de tesis puede formularse más de un objetivo general porque en la misma se puede incluir elaborar una propuesta de intervención para resolver un problema posteriormente a la investigación. En este caso se puede agregar, por ejemplo: “elaborar una propuesta de control alimentario”, “Formular un plan de alimentación complementaria”, Diseñar un programa de educación alimentaria......”. Este segundo objetivo requiere sus propios objetivos específicos en el campo de la elaboración de proyectos.