En primer lugar, coloco el djembé en el suelo y busco el principio de
la cuerda. El nudo se puede hacer cerca del aro superior, o cerca del
aro inferior. Yo prefiero hacerlo cerca del aro inferior.
Cuando lo he encontrado, agarro la primera
cuerda vertical que se encuentra a su derecha, y
tiro de ella. Siempre es mejor hacerlo con unos
guantes. Observo que obtengo un poco de cuerda.
Tomo la siguiente cuerda vertical de la derecha, y
repito la operación. Compruebo que obtengo más
cuerda que antes.
Hago lo mismo con todas las cuerdas, de izquierda a derecha. Procuro tirar de todas las cuerdas con la misma
tensión, para que el aro inferior no se descentre, y el sonido final sea óptimo.
Cuando he dado toda la vuelta al djembé tirando de las
cuerdas verticales, estiro todo lo que puedo, y le hago
un nudo en el mismo sitio donde había empezado. Si
veo que las cuerdas verticales no han quedado muy
tensas, repito la operación desde el principio. Es muy
importante dejar bién tensadas las cuerdas verticales.
Descanso, estiro un poco los músculos y me bebo una cerveza.
Lo siguiente es entrelazar las cuerdas verticales, con la misma cuerda que he obtenido al tensarlas. Empiezo con las dos cuerdas verticales que se
encuentran a la derecha del inicio de la cuerda, donde está el nudo.
Paso el extremo de la cuerda por detrás de las dos cuerdas que voy a entrelazar.
Luego paso el extremo de la cuerda por detrás de la primera de las dos cuerdas que quiero entrelazar.
Tiro del extremo de la cuerda, y observo
que las dos cuerdas verticales se
entrelazan.
Repito la operación con las dos cuerdas verticales siguientes:
Paso el extremo de la cuerda por detrás de las dos
cuerdas que voy a entrelazar. La foto de la derecha es
una ampliación de la de la izquierda.
Luego paso el extremo de la cuerda por detrás
de la primera de las dos cuerdas que quiero
entrelazar, y tiro.
Repito la operación con todas las cuerdas verticales, hasta que llego otra vez al nudo
Cuando he dado toda la vuelta al djembé entrelazando las cuerdas verticales, descanso, estiro los músculos y me bebo otra cerveza. Ahora hay
que seguir entrelazando cuerdas verticales. Al no estar ya paralelas como las de antes, es más difícil. Me concentro y busco las dos cuerdas
verticales que tengo que entrelazar. Las miro fijamente, y me olvido de las demás.
Básicamente, la mecánica es la misma que
antes: paso el extremo de la cuerda por detrás
de las dos cuerdas que voy a entrelazar.
Luego paso el extremo de la cuerda por detrás de la primera de las dos
cuerdas que quiero entrelazar. Tiro del extremo de la cuerda, y observo
que las dos cuerdas se entrelazan. La foto de la derecha es una ampliación
de la de la izquierda.
Repito la operación con las dos cuerdas siguientes que quiero entrelazar.
Primero paso el extremo de la cuerda por detrás de las dos cuerdas que quiero entrelazar.
Luego paso el extremo de la cuerda por detrás de la primera de las dos cuerdas que quiero entrelazar.
Tiro del extremo de la cuerda, y observo que las dos cuerdas se entrelazan.
Continúo entrelazando hasta que llego nuevamente al nudo.
Si anteriormente he tensado bién las cuerdas verticales, el djembé ya debería sonar bién. Si no es
así, continúo entrelazando las cuerdas verticales. Paso el extremo de la cuerda por detrás de las
dos cuerdas que voy a entrelazar.
Luego paso el extremo de la cuerda por detrás de la primera de las dos cuerdas que quiero entrelazar.
Tiro del extremo, y observo que las dos cuerdas se entrelazan.
Continúo entrelazand