CENSO PRIMAVERAL DE MILANO NEGRO (MILVUS MIGRANS

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CENSO PRIMAVERAL DE MILANO NEGRO
(MILVUS M I G R A N S ) EN NAVARRA MEDIANTE EL METODO
DE TRANSECTOS POR CARRETERA
Juan Ignacio DEAN*
RFsuMEN7Censo primaueral de Milano Negro (Milvus migrans) en Navnrra mediante el método de
rronseclus por carrerera. Durante los meses de mayo y junio de 1994 se ha realilado un censo de Milano
Negro niditicante en Navarra, mediante transectos por carretera. Para la realimción de dicho censo se
han recorrido 3.606 km pertenecientes a 94 cuadrículas UTM, con una media de 38,5 km por cuadrícula.
Se han invertido 165,5 horas de censo distribuidas en 65 jornadas de trabajo y en el mismo han
parlicipado 47 personas. En el presente artículo se exponen los resuliddos del censo realizado y se analiza
la posible influenckü de diversos factores sobre ellos. Durante el presente censo se han observado 478
milanos, lo que permite calcular un lndice Kilometrico de Abundancia para el conjunto de la provincia de
13,2 aves/100 km. La especie es especialmente abundante en la zona medid de Navarra con valores de
IKA de 24 para la Navarra media oriental. 22 para la ribera eslellesa, 14 para la Navarra media
occidental y 1 I para las cuencas prepirenakas. Hasta un 35 % de los milanos conlactados se encuentra en
concentraciones. El 29 % del total de los milanos negros observados estaban en vertederos o muladares.
Los datos obtenidos permiten estimar la población de milanos negros en Cpoca reproductora alrededor
de los 1.300-1.500 ejemplares y, asumiendo una población no reproductora de un tercio del total, la
existencia de unas 400-500 parejas nidilicantes. Los milanos negros parecen evitar tanto aquellas áreas
con una elevada influencia humana como las menos deterioradas por la acción humana y, en consecuencia, ampliamente forestadas.
Palabros clave: Censo, Milano Negro, Milous migrans. transeclos desde vehículo.
SUMMARY.-Spring census of Black Kire (Milvus migrans) in Nauarra (Norihcrn Spain) by road
rransecls. In May and June 1994, a census of breeding black kites was conducted in Navarra (Northern
Spain) by road transects. For this purpose, 3,606 km werc made in 94 UTM squares, with an average
value 0138.5 km per square. A total o1 165.5 hours were invested dislributed in 65 working days, and 47
people psrticipated in this census. In this paper we present the results o1 this census and we analyse the
possible influence of difierent lactors on the results. During the present census 478 Black Kites were
observed, which allowed the calculaiion o l a Kilomelric lndex of Abundante (IKA) o1 13.2 birds/lM) km
Tor the whole province. The species is remarkably abundant in lhe medium zone of Navarra with IKA
values of 24 lor the central-eastern zone o1Navarra, 22 lor the Ebro vdlley in the Estella region, 14 lor the
central-western zone and I I lor the prepirenaic atea. As much as 35 % ol the Kites observed were lound
in aggregations. 29 % of (he total number of Black Kites registered were located in reluse tips and
abbatoirs. The data obtained allow us to estirnare the Black Kite population during the breeding season
as around 1.300-1.500 individuals and, assuming a non-brceding population o1 one lhird ofthe total. the
existente o1about 400-500 breeding pairs. Black Kites seem to avoid as much areas with a strong humdn
influence, as those less altered by human intervention, and hence very widespread woodlands.
K e y words: Black Kite, census, Miluus migrans. road transects.
La población europea de Milano Negro se
estima entre las 75.000 y las 100.000 parejas,
si bien, hasta tres cuartas partes d e la misma
podrían corresponder a Rusia. En Europa
occidental la población más importante es la
española, que se cree en torno a las 9.000
parejas reproductoras (Tucker & Heath,
1994). A mediados d e los 70 Garzón (en
Gensbal, 1993) estimó la población española
en 25.000 parejas, lo que supondría un descenso drástico d e la población si ambas estimaciones son fiables. También son relevantes
las poblaciones francesa (5.800-8.000 parejas)
y alemana (5.000-7.000). Tucker & Heath
(1994) consideran esta especie como vulnerable debido al importante descenso poblacio-
* Travesía de Bayona, 1, 6." E. E-3101 1 Pamplona.
178
AROEOLA 43121. 1996
nal en las 2 últimas décadas. Sin embargo,
esta consideración se ve influída por la tendencia decreciente de la importante población
rusa en marcado contraste con las poblaciones de Europa occidental y central que parecen estables o crecientes, aunque este hecho
no se ha contrastado suficientemente mediante estudios de campo (Tucker & Heath, 1994).
El Milano Negro es, en nuestra región, un
visitante estival. Los primeros ejemplares se
observan durante los primeros días de marzo
e incluso en los últimos de febrero. De acuerdo con Viiiuela (1993a), la primera andanada
de milanos negros está constituida básicamente por ejemplares adultos, llegando los
ejemplares jóvenes e inmaduros con un cierto
retraso. La especie abandona sus áreas de cría
desde finales de julio hasta finales de agosto,
Es muy notorio el paso de migrantes europeos durante el mes de agosto en los portillos
pirenaicos donde se contabilizan una media
anual de 11.520 ejemplares para los últimos 8
afios en el observatorio de Organbidexka
(OCL, 1989-1996). La población navarra fue
estimada en 1985 alrededor de las 200 parejas nidificantes por Elósegui (1985).
Durante la primavera del aiio 1994 se realizó en Espana un censo de milanos reales
(Milvus milvus) nidificantes promovido por
la sociedad inglesa RSPB (Royal Society for
the Protection of Birds) y coordinado en Espana por la Sociedad Espaiiola de Ornitología (SEO-BirdLife). Durante dicho censo, y
en la provincia de Navarra, se censaron además otras rapaces y entre ellas el Milano
Negro (Milvus migrans). El presente artículo
recoge los datos obtenidos para dicha rapaz.
Para la realización del censo se empleó el
método de los transectos desde vehículo. En
el presente artículo se calculan índices de
abundancia en Navarra y se estima la densidad y la población total de la especie. Numerosos estudios han empleado este mktodo
previamente para el censo de aves en la Península Ibérica (Carrasca1 et ak. 1981; Santos
& Tellería, 1981; De Juana et al.. 1988; Viiiuela, 19936; Viiiuela, 1994) y fuera de ella
(Quinn, 1981) y han discutido su aplicación
para estimar la abundancia de aves rapaces.
Asimismo, el tema ha sido analizado en profundidad en diversas revisiones y libros recientes (Thyollay, 1976; Fuller & Mosher,
1981; Tellería, 1986; Bibby er al., 1992).
El método seguido ha sido descrito y discutido de forma más extensa en Deán (1995~1).
El territorio foral se distribuyó según cuadrícula~UTM de 10 km de lado, en cada una
de las cuales se recomendó realizar entre 40 y
60 km de transectos en automóvil. La media
obtenida fue de 38.5 km por cuadrícula. Se
han cubierto 94 cuadrículas UTM lo que representa aproximadamente el 90% del territono. Se han realizado 591 transectos desde
automóvil a una velocidad de unos 40 km
por hora, alcanzándose un total de 3.606 km
de transectos y cerca de 165 horas de observación. El transecto promedio tuvo una longitud de 6.1 km y el rango osciló entre 0,s y
21 km. Se censaron todas las especies de aves
rapaces salvo el Buitre Leonado (Gyps fulUUS). Los ejemplares se asignaron a bandas
de observación. Se distinguieron 4 bandas
«sobre la carretera, 0-100 m. 100-200 m, más
de 200 m», y las concentraciones de individuos se registraron aparte.
Las cuadrículas se caracterizaron seglin la
influencia humana mediante distintos parámetros (densidad de población, número de
localidades, cobertura arbórea y kilómetros
asfaltados), así como mediante un índice de
antropización definido como la media de las
4 variables empleadas una vez normalizados
los valores para evitar la gran dispersión de
los mismos. A este fin, se adaptó el método
descrito por Reques (1993). La densidad de
población se calculó obteniendo la suma de
habitantes de las distintas poblaciones incluidas en cada cuadrícula y refiriendo la misma
a habitantes por kilómetro cuadrado. Los colaboradores debieron indicar cuál era la cobertura arbórea de las cuadrículas censadas.
No obstante, estos datos fueron contrastados
por el coordinador mediante el análisis de las
fichas empleadas en cartografía 150.000 así
como mediante visitas a las cuadrículas que
ofrecían dudas una v a representadas en su
conjunto. Del mismo modo, se pidió a los
colaboradores que calcularan el número de
kilómetros asfaltados dentro de la cuadrícula
y estos datos fueron contrastados por el
autor mediante el análisis de las fichas
1:50.000.
Los datos originales correspondientes a las
cuatro variables descritas anteriormente pre-
sentan valores muy contrastados por lo que se
procedió a su normaliiación mediante el
cálculo de sus índices Z utilizando la fórmula:
zi j =x..-x,/s,
8,
donde,
Z,=valor de z en la variable i.
X,=valor de la variable i.
X,=media de la variable i,
S, = desviación típica de la variable i.
Para calcular el índice de antropiaación se
obtuvo la suma de todas los índices Z correspondientes a una cuadrícula y se dividió está
cantidad por el número de variables consideradas. La fórmula
tros a la redonda. En caso de descubrir una
concentración se recomendó detener el vehículo oara identificar la razón de la concentraci6n.
El Indice Kilomftrico de Abundancia
fIKAI
. . se define como número de aves observadas por 100 km de transectos.
Este censo se realizó gracias a la colaboración desinteresada de numerosos voluntarios
cuya relación se da en el Apdndice.
RESULTADOS
Milanos negros y horario
Se han asignado los milanos censados a
periodos horarios y posteriormente se ha
comparado esta distribución con otra distribución teórica basada en el esfuen.o realizado durante cada periodo horario (bas6ndonos en el número de kilómetros
recorridos durante el mismo). Los valores
observados se han comparado con los esperados mediante un test de la (x2 y difieren
significativamente de ellos ( X 2 = 176.9;
P<0,0001; gl= 7) lo que sugiere una actividad no uniforme de los milanos a lo 1;irgo del
período horario seleccionado como de censo.
Sin embargo, cuando se eliminan del análisis
los milanos negros detectados en las concentraciones así como los observados despues de
las 16 horas, hora recomendada para la finalización del censo, la diferencia entre ambos
grupos de datos se hace no significativa
(12=10.37; P=0,10; gl=6). Los resultados se
muestran en la figura 1.
resume en un único el valor el fenómeno que
pretendíamos caracterizar: el diferente grado
de antropización de las cuadrículas.
Se estableció la comparación entre los milanos negros observados y los esperados según los parámetros descritos anteriormente.
Para ello se han estimado los milanos esperados proporcionalmente al número de kilómetros recorridos, bien por cuadrícula,
bien por transecto, período horario o día.
Cuando se ha hecho el cálculo a nivel de los
transectos todos los kilómetros realizados en
cada uno de los transectos se han asignado a
la hora media del mismo, es decir, a la hora
media entre la de terminación del transecto y
la de comienzo del mismo. Para el análisis
por transectos se han eliminado aquéllos en
que los datos horarios o los correspondientes Milanos nrgrus v. euolrrciún en el tiempo
a otros parámetros no fueron registrados o
Cuando se compara el número de milanos
resultaban dudosos.
El horario recomendado fue entre una ho- negros observados por períodos de 5 días de
ra después de la salida del sol y las 16 horas. observación, comenzando el 15 de mayo y
Se recomendó como período de realización terminando el 25 de junio, y el número de
del censo el comprendido entre los días 15 de milanos negros esperados en función del esmayo y 15 de junio de 1994. Se consideraron Rierzo realizado en cada período (número de
fechas preferentes las comprendidas entre el kilómetros recorridos por período) se obser28 de mayo y el 5 de junio. Cinco cuadrículas va una diferencia significativa ciilre los milanos observados y los esperados (,y2=75,5;
fueron censadas con posterioridad.
Se define como concentración la observa- Pc0.0001; gI= 6) aunque no se aprecia una
ción de mas de 2 milanos negros y se cuentan tendencia clara para la mayor o menor ebctitodos aquellos que se descubren en 300 me- vidad del censo en función del tiempo.
ARDEOLA 4NZh 1996
FIG.l.-Aves observadas (barras negras) wrss esperadas (barras blancas) durante el periodo de enso.
fobserved (block
barsJ versus exnecred birds Iwhi-
Dislribucidn del Milano Negro durante
la epoca reproductora
En la figura 2 se muestra el IKA obtenido
para cada una de las cuadrículas censadas.
Esta distribución de los milanos se representa en escala 1 x l km en la figura 3.
El Milano Negro se distribuye principalmente en la zona media de Navarra. Es más
escaso en las cuencas pirenaicas y en la Navarra cantábrica así como en la ribera, siendo clara su asociacidn a los cursos fluviales.
Los milanos negros son especialmente abundantes en los cursos del Arakil, el Ultzama, el
Arga (sobre todo entre Puente la Reina y su
desembocadura), el Irati en su curso medio y
hasta su desembocadura, el Zidacos, el Aragón y el Ebro entre Viana y Castejón, haciéndose más escaso aguas abajo.
En las 3 cuadrículas de mayor densidad
(WN50, WM98, XN31) se contabilizan importantes concentraciones de milanos negros
asociadas a vertederos y muladares.
mis abundante durante la &pocareproductora y supone el 35 % de los contactos de todas
las rapaces (excluido el buitre).
En la figura 4 se ha representado la distribución del IKA por intervalos. Dos cuadrícula~registran valores de IKA por encima
de 100, lo que está condicionado por la existencia del muladar de Aibar (60 ejemplares)
en la cuadrícula XN31 y del basurero de Viana (15 ejemplares y otros 15 a menos de
1.5 km) en la cuadrícula WN50. La cuadrícula XN31 resultó ser tambien la de mayor
densidad en el censo de milanos reales tnvernantes y nidificantes y en ella se localiza, por
otra parte, el mayor dormidero de milanos
reales de Navarra utilizado por unos 425-450
milanos. Además, el muladar citado dio lugar
a una concentración de Alimoches (Neophron
pernocterus) de unos 30 ejemplares. En la segunda cuadrícula un porcentaje sign~ficativo
de los milanos negros se observaron en las
proximidades del vertedero de Viana en 2
concentraciones de 15 ejemplares.
La siguiente cuadrícula con mayor densidad y un IKA de 57 es la WM98 donde se
localizan los vertederos de Peralta (16 ejemplares) y Azagra (12 ejemplares).
En 56 de las cuadrículas censadas (59,5 %)
se obtuvo un IKA menor de 10 aves/100 km
o nulo y en 34 (36,2 %) se obtuvieron valores
de IKA relativamente elevados comprendidos entre 10 y 50.
Milanos por bandas de obseruacidn
Los milanos se distribuyeron por bandas
de observación, segdn recoge la figura 5.
Llama poderosamente la atención el gran
porcentaje de milanos negros que se observan en concentraciones. La cifra alcanza los
169 individuos, representando el 35 % del total de milanos contactados. Otro hecho notable es la alta detectabilidad de los milanos
negros incluso a distancias considerables
(> 200 m). Suponen el 32 % de los ejemplares
observados fuera de las concentraciones.
Distribucidn del I K A
Concenlraciones y comportam~nto
de los milanos negros
El IKA total para la provincia es de 13.2
aves/100 km. El Milano Negro es la rapaz
Del total de milanos negros detectados en
concentraciones (Fig. 6) un 81 % se localiza-
CENSO PRIMAVERAL DE M I L A N O NEGRO EN NAVARRA MEI>IANTE TRANSKTOS POR CAKKkTERA
FIG.2.-IKA
(miidnos obsewados/100 km) por cuadrícula UTM
UTM squnre.]
de
181
10 km de lado.
[ I K A (ohserued kir(,.s/100 km) p n 1 0 kin [$.viile
kan en vertederos o muladares lo que representa el 29 % del total de los milanos negros
contabilizados durante el censo. Un 8% se
observaron próximos a granjas (en realidad,
una sola concentración de I I individuos) mientras que un 2 % se asignó a una posible zona
de nidificación (concentración de 3 ejempkires).
Estos datos ponen de maniíiesto la importante
dependencia de los milanos negros durante la
epoca de nidilicación dc los basureros, como ya
han puesto de maniliesto muchos autores (Donhar, 1992; Sunyer, 1992; Génsbel, 1993).
Para un total de 299 milanos, excluidos los
169 detectados en las concentraciones, se ha
reflejado su actividad al ser descubiertos. Solamente 9 (el 3 %) se encontraba posado. Entre los posados, 4 lo estaban sobre árbol, 2 cn
el suelo y sendos milanos mzís en poste y
torre eléctrica.
Se trató de buscar una correlación entre el
IKA por cuadrícula y la caracterización de
las mismas desde el punto de vista antrópico.
Cuatro de los factores seleccionados no mostraron una correlación significativa con el Indice Kilométrico de Abundancia. Para este
análisis se empleó el coeficiente de correlación de Spearmsn ya que las variables no se
distribuyen de forma normal. Los valores obtenidos lueron: IKA uersus índice de antropización r=0,1313 (P=0,2073); IKA uerats número de poblaciones r= -0.0599
(P=0,5662); IKA urrsus kilometraje asfaltado r=0,0658 (P=0.5186); IKA versus cobertura arbórea r = -0,1643 (P=0,1136). La correlación resultó signiiicativa con la densidad
de población (r=0,2017; P=0,0512) y se hace
m& significativa cuando se eliminan del
análisis las cuadrículas que incluyen la población de Pamplona y que son dos valores
muy anómalos (r=0,2467; P=0,0178).
A Ia vista de los datos obtenidos se trató
de ver en que rangos de esas variables analizadas los milanos observados se seoarabin
más dc los valores esperados. Los valores
esperados se calcularon en función del kilo-
ARDEOLA 43121 1996
FIG. 3.-Milanos negros observados. El punto negro significa presencia de Milano Negro en la cuadricula
1 x I km. En algunas cuadrículas no se registraron los ejemplares con esta precisidn por lo que bnica-
mente se muestra el número total de individuos en la cuadrlcula UTM.
[Black Kites observed. Black spofs mem Black Kire presence in rhe corresponding 1 x 1 km square. Iri sorne
squares indiuiduals were nof registered wirh fhaf precisioir and only the rofal number o/ them in rhe UTM
square is given.]
metraje realizado en las cuadrículas. Parece
apreciarse una tendencia de los milanos a ser
menos frecuentes en las cuadrículas totalmente antropizadas y en aquellas muy poco
antropizadas, ya que en las cuadrículas con
índices de antropización extremos se observan menos milanos negros de los esperados
(Fig. 7). Se observaron diferencias significativas entre milanos observados y esperados
cuando los datos se analizaron por rangos de
índices de antropimci6n
(x2 = 46.96;
P <0,0001; gl= 4; Fig. 7). La misma tendencia parece observarse cuando se analizan la
densidad de habitantes de la cuadrícula (Tabla l; x2=55,91; P<0,0001; gl=5) o el
número de kilómetros asfaltados (Fig. 8;
x2 = 82,30; P <0,0001; gl=6). En ambos casos
los milanos parecen evitar los valores extremos de estas variables, en cuyas cuadrículas
se detectan con menos probabilidad.
En la figura 9 se han representado los milanos censados en función de la cobertura
arbórea de las cuadriculas así como los esperados en función del esfuerzo realizado por
cuadrícula. Los valores esperados difieren
significativamente de los esperados ( ~ ~ = 9 4 , 8 2
P <O,MX)l; gl= 8). Los milanos negros parecen seleccionar negativamente en Navarra y
en el período reproductor las cuadrículas con
cobertura arb6rea mayor del 20 % y positivamente aquellas con cobertura arbórea entre O y 20 %. Un análisis semejante se realizó
con los 354 transectos en los que se reflejó la
cobertura arbórea para los mismos obtenien-
Causas concentraciones
IKA
F i u . 4.-Número de cuadrículas por intervdlos de
IKA. Sobre las barras el niimero de cuadrículas
por intervalo.
[Nunrhcr of squares per I K A hlermls. Oir rop 1f
bors is no. o/ UTM sqtrnre3 per inierunl.1
Fio. 6C
, ausas
de las concentraciones observadas.
[Causesfor ihe ngqreyarions observed.]
lndice de antropizaci6n
FIG. 7,n
l dn
i
Banda de observaci6n
FIG. $.-Porcentaje de aves por banda de observacidn. Sobre las barras el porcentaje de milanos
observados en cada banda.
[Percentaye oJ birds per helt. 011 iop n/ hurs is
perceniaye o/ kires per belt.]
de antropizaci6n por cuadrícula
UTM. Comparaci6n de los milanos observados
(barras negras) y los esperados (barras bldncds) en
funcion del esfuerzo de censo realizado.
[Anrltroprc index per UTM Lqunre. Cotilpnrison beriireit ohserr;ed kites (hlack bars) and expecred ones
184
ARDEOLA 4301, IW6
Km asfallados
FIG.8.-Número de kilómetros asfaltados w r cuadrícula UTM. Comparación de los milanis obrervados (barras negras) y los esperados (barras blancas) en función del esiueno de censo realizado.
[ ~ u m b e rof kilomerers oJ roads per UTM squrre.
Comparison betweeii observed (black hnrs) and expecred kites (white bars) according ro the eflorr
made during rhe census period.]
Númem de müanos negros esperados y observados
en función de la densidad de habitantes por km'.
[Numher oJ block kites obserwd and expected in
relarionship wiih fhe density of inhnbiranfs per km']
Densidad de
habitantes
por km2
[Inhabirans
per km2]
Milanos
negros
esprados
[Expecled
black kites]
Milanos
negros
observados
[Observed
block kires]
FrG. 9.-Cobertura arbórea por cuadrícula UTM.
Comparación de los milanos observados (barras
negras) y los esperados (barras blancas) en función
del esfuerzo de censo realizado.
[Tree cooerage per UTM square. Compurison between observed (black bars) and expected kites
(whire bars) according to the eflorr m d e during !he
census period.]
d o un resultado similar. Dentro de las cuadrícula~tambien, los ejemplares de esta especie, parecen escoger las zonas con baja cobertura arbolada (menor del 20%) en detrimento del resto.
Los datos referidos a la actividad de los
müanos negros a lo largo del día hacen pensar que &tos disminuyen su actividad a partir de las primeras horas de la tarde (Fig. 1)
por lo que los transectos realizados en ese
horario son menos productivos y, por consiguiente, parece acertado limitar el horario del
censo a partir de una hora determinada.
Conviene tener presente que en la distribución de los milanos observados influyen
otros factores, como la propia aleatoriedad
en la selección de las cuadrículas que incorporan una cierta variabilidad no dependiente
del horario. Por otra parte, de un segundo
análisis estadístico se excluyeron las observaciones a partir de las 16.00 horas y las concentraciones, ya que este factor debe incluir
un cierto sesgo de los datos dada la no aleatoriedad en el tiempo y/o en el espacio de la
distribución de vertederos y muladares, principales causas de las mismas. En estas condiciones la diferencia entre los milanos esperados y los observados deja de ser significativa.
La direrencia entre los milanos negros observados y esperados a lo largo del período
de censo muestra que ha habido días en los
que el censo ha sido más efectivo, bien debid o a la propia actividad de los milanos negros. circunstancias climatológicas, pericia de
los observadores, conteos de concentraciones, aleatoriedad en la selección de las cuadrícula~u otros factores. No se aprecia una
tendencia al incremento o disminución progresivo debido a la propia actividad de los
milanos y la incorporación de los primeros
pollos al vuelo debe ser despreciable o inexistente. Por otra parte, es conocido que las
condiciones climatológicas muy adversas tales como fuertes vientos, niebla o lluvia disminuyen la detcctabilidad de las aves al disminuir el tiempo de vuelo (Viñucla, 1994b).
Tanto los conteos de concentraciones como la
propia selección dc las cuadrículas podrím ser
las causas más probables para explicar esta
distribuci6n no aleatoria de los milanos a lo
largo del período del censo. Lógicamente si
durante un período particular se han censado
vanas de las cuadrículas de alta densidad este
período aparecerá con un exceso de milanos
negros observados respecto a los esperados.
La asociación de los milanos negros con
los cursos fluviales mostrada en nuestros resultados (Fig. 3) se ha descrito para otras
zonas del área de distribución de la especie
(Cramp, 1980; GénshJ, 1993). La presencia
de milanos negros aprovechando las basuras
de los vertederos también ha sido ampliamente documentada en la bibliografía de
esta especie (Donázar, 1992; Sunyer, 1992;
Génsbol, 1993).
El conjunto de parámetros que miden la
antropización de las cuadrículas muestran
una tendencia del Milano Negro a evitar las
zonas totalmente degradadas, donde no se
encuentran zonas arboladas adecuadas para
nidifícar y la presión humana es abrumadora,
pero tambien evitan aquellas con una elevada cobertura arbórea donde sería difícil encontrar sulicentes territorios de caza. El hecho de que en la zona norte la cobertura
arbórea sea notablemente superior podría
determinar una menor detectabilidad del MiIano Negro enmascarando los resuliados. Sin
embargo, en contra de este razonamiento Iiabla el hecho de la asociación de los cjemplares de esta especie con los fondos de valle,
distribución que se observa tanto en el norte
como en el sur.
Atendiendo a la distribución de los ejemplares por bandas de observación cabe destacar que la proporción de milanos negros contactados en la banda más externa (mis allá
de los 200 m) es inferior a la obtenida para el
Milano Real en invernada (36 %), pero similar a la del Ratonero en época reproductora.
Asimismo, es superior a la observada para el
Cernícalo Vulgar en invierno ( 1 3 %) y en primavera (24 %), como cabría esperar de una
rapaz notablemente inferior, y a la del Milano Real niditicante, probablemente debido al
cambio de comportamiento respecto a la población invernante. Conviene recordar que
esta rapaz se hace menos dependiente de los
vertederos (38 % del total de las observaciones invernales versus 15 % de las primaverales) en la medida que el Milano Negro pasa a
explotar esta fuente de alimento (Deán,
199%; obs. pers.).
Por otra parte, la distribucidn de los ejcmplares de Milano Negro durantc la primavcra respecto a las distintas bandas de observación es extraordinariamente parecida a la
que presentan los milanos reales invernantes
(Deán, 19951>),donde también se registró un
importante contingente (38 %)en las concentraciones, mayoritariamente motivadas, como en el caso del Milano Negro, por Ia existencia de vertederos y muladares. En la tabla l se pueden comparar ambos porccntajes
y hasta que punto la detectabilidad del Milano Real en invernada y del Milano Negro en
época reproductora deben ser parecidas.
Otros autores han descrito, para el área de
Doñana, el hecho de que los milanos reales
invernantes reemplacen a los milanos negros
reproductores en la utilización del nicho ecológico (Heredia et al., 1991). Nuestros datos
muestran el mismo patrón a un nivel geogriífico superior. Además, de la comparación
186
AROEOLA 4312k 1996
Distribucidn de ejemplares por bandas de observacidn en porcentaje. Comparacidn entre los milanos
negros en epoca reproductora y los milanos reales
invemantes.
[Bird disrribution per belt in percenrage. Comprison between block kites during the hreeding season
and ivintering red kites.]
Banda
de
observacidn
Milanos negros
en dpou
reproduclora
Milanos
reales
invemantes
[Obserwtion
range]
[Black Kites in
breedúig season]
[Wintering
Red kires]
Concentraciones
37
35
de los mapas de presencia de ambas especies
(Fig. 3; Deán, 199%) se deduce que los milanos negros ocupan los mismos lugares que
abandonan los milanos reales en la zona sur
de la comunidad. Tambidn, ambas especies
son abundantes en los valles de Ultzama,
Arakil e Irati. Estas distribuciones geográficas vienen a redundar en el mismo hecho ya
descrito más arriba.
Se ha estimado la población mediante diversos mdtodos descritos en la bibliografía
(Tellería, 1986; Bibby et al., 1992) aunque no
se cumplen escrupulosamente todas las condiciones ideales para tales cálculos. Se ha empleado el metodo del transecto finland6s
(2 bandas) tanto considerando una banda de
100 m como una de 200 m y tanto asumiendo una declinación en la detectabilidad de los
milanos lineal como exponencial negativa.
En todos los casos. los cálculos de densidad
se realizaron según las comarcas geográficas,
cuya densidad debe ser relativamente uniforme (análisis estratifícado). Para ello se distribuyó la región de Navarra en comarcas geográficas con condiciones orográficas y de
vegetación relativamente uniformes. Se definieron, a este fin, 7 comarcas: Navarra
húmeda del noroeste, valles pirenaicos, cuencas prepirenicas, Navarra media oriental,
Navarra media occidental, ribera estellesa y
ribera tudelana. También se empleó el
mdtodo de Emlen de forma estratificada
(Emlen, 1971; Emlen, 1977). En cualquiera de
las estimaciones los valores obtenidos
superaban los 1.700 ejemplares para la provincia de Navarra. El mdtodo de Emlen, probablemente el m& ampliamente empleado
para este tipo de estimaciones, proporciona
un valor de 1.713 ejemplares. El modelo lineal 1.784. El modelo exponencial valores
más elevados.
Sin embargo, estos metodos de estimación
exigen una serie de condiciones que difícilmente se cumplen en los estudios de campo.
Entre estas condiciones estan las siguientes:
las aves que se hallan sobre la línea del transecto deben detectarse siempre, los animales
se observan en su localización inicial, se estiman correctamente las distancias, los ejemplares objeto de estudio deben distribuirse de
forma aleatoria al igual que los transectos
realizados y la localización de cada especimen es independiente de la de otros. Podemos asumir que las 3 primeras condiciones se
cumplen razonablemente aunque con frecuencia se ha discutido en otros trabajos la
dificultad de asignar los ejemplares a las bandas de observación. Las 2 últimas premisas
son de difícil cumplimiento. La primera de
las mismas podría aceptarse para las áreas
llanas de la zona media y sur de la comunidad, pero no se cumple en las zonas media
montafiosa y en toda la zona norte. En dichas comarcas los milanos negros son más
frecuentes en las proximidades de los cursos
fluviales y alrededores de las poblaciones
(nótese la asociación con los ríos en la Fig. 3
y la importancia de los basureros en la
Fig. 6), que es por donde transitan la mayoría de las carreteras desde las que se realizan
los transectos. Creemos, en consecuencia, que
los m6todos de estima tradicionales descritos
m6s arriba sobreestiman la densidad en algunas comarcas al extrapolar la densidad en las
proximidades de las carreteras al resto del
territorio donde los milanos negros deben ser
más escasos (por ejemplo en zonas montañosas como las sierras de Urbasa, Andía y
Aralar, o zonas con elevada cobertura arbórea de la zona pirenaica). El modelo exponencial exacerba este defecto de estimación
debido a su propio planteamiento matemáti-
CENSO PRIMAVERAL IIE MILANO NliGRO
EN NAVARRA
co. Este modelo cs más propio para aves
pequenas cuya detectabilidad se reduce rápidamente con la distancia o para aquellas que
habitan zonas boscosas o de matorral con el
mismo resultado. pero no parece adaptarse
bien al Milano Negro.
Dada la similitud de las distribuciones espaciales entre el Milano Real invernanle y el
Milano Negro en epoca reproductora (Tabla 2). hemos asumido para esta última especie una deiectabilidad (porcentaje de individuos de la población observados) similar a la
de aquel. Por otra parte, se ha tenido cn
cuenta el grado de derectabilidad de la especie en comparación con otras de p o b l a c i h
mejor conocida en la provincia de Navarra l o
que nos ha permitido hacer una estimación
preliminar de la poblaci6n de Milano Negro
en época reproductora, siendo 6sia de al menos 1.300-1.500 ejemplares lo que. asumiendo
conservadoramente un porcentaje de n o reproductores de un tercio, proporciona un valor de alrededor de 400-500 parejas reproductoras. Algunos autores han observado
dicha proporción de n o reproduciores para
el Milano Real (Viñuela, 1994). Otros consideran que la tasa de supervivencia de los
jóvenes de Milano Negro debe ser alta dado
su amplio espectro alimenticio y su hábito de
alimentarse en los vertederos (Grande & Hiraldo, 1987). Sin embargo, la productividad
de l a especie n o parece ser elevada ya que se
ha observado que en algunas regiones sólo el
64% de las parejas criaron con éxito y los
valores de productividad calculados fueron
de 1.2 y 1.48 pollos por puesta en 2 estudios
independientes (Génsbd, 1993). Tambitn, en
Navarra se ha descrito un notable porcentaje
de parejas que no culminan la reproducción
(Eldsegui, 1985). La cifra de parejas estimada
es notablemente superior a la observada por
Elósegui (1995) hace una década, duplicándola al menos, por l o que parece que la
especie podría estar aumentando pohlacionalmente en la actualidad. Sin embargo> a la
hora de evaluar este extremo conviene tener
presente que ambos estudios estiman la población de la región basándose en presupuestos y m6todos totalmente diferentes por l o
que. aunque nuestros datos apuntan a un
cierto incremento, la magnitud del mismo
podría ser dilerente que la mera diferencia
matemitica entre las estimaciones.
MEDiANTli 'TRAKSe(T0S POR CARRETERA
187
A~;UADI:CIMI~NT~~.-L~
sociedad inglesa RSPB
promovió el censo y subvencionó los gastos del
mismo. Javier Viiluela y Allrcdo 0rteg;t (SEOBirdLile) llevaron la coordinacibn en Espaila. Colabor6 de lorma desinleresada la Guarderia del
Scrvicio de Medio Ambiente del Gohicrno de Navarra. El autor coordinú el censo en Navarra en el
ailo 94 y redactó el presente inlorme. A todos los
que de alguna maneri han colaborado en el censo.. muchas gracias.
Tambien deseo agradecer a Pedro Arralihel sus
vitliosos comentarios al original del texto. A J. Viñuela y otro revisor anónimo. sin ninguna rct6rica.
las mcioras su~cridas
tras la revisión ya
. aue
. conlrihuyeron signific;ttlvarncnte imejurar l a calidad del
mismo. asi como a A. Atino su ineslimahlc ayuda
con el an;llisis esiadístico de los datos
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G. BerasategiW). E. BuruscoíR), (8)D. Cam~ión.J. CarricaíR). T. CerdAn(RI. J. CoreraíRI. J. Cuair6níRl
(1413. Deán. F. DeBn, E. ~lizalde.F.~ r d & z a i n ( ~A.) , ~ r & i ( ~ (23)A.
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