Eneas fue un héroe troyano, emparentado con el dios Zeus (Júpiter

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ENEAS
Eneas, Anquises y Ascasio
G.Bernini, 1622
Eneas fue un héroe troyano, emparentado con el dios Zeus (Júpiter) por parte
de padre y madre: era hijo de la diosa Afrodita (Venus) y el ilustre mortal Anquises,
quien, a su vez, descendía del rey Dárdano, el legendario fundador de la ciudad de
Troya e hijo de Zeus
Según se narra en el canto XX de la Ilíada, el dios Neptuno (Poseidón) salvó a
Eneas de la furia de Aquiles y le anunció que tanto él como sus descendientes
reinarían durante largo tiempo, aun después de la caída de Troya.
Hay distintas versiones legendarias sobre la historia de Eneas. Según Virgilio, al
caer Troya a manos de los aqueos, Eneas abandonó la ciudad con su pequeño hijo
Ascanio y portando al anciano padre Anquises sobre sus hombros; también llevó
consigo los penates familiares. Su esposa –Creusa- murió durante esa terrible noche.
Al frente de una flota de veinte barcos, Eneas se dirigió con los supervivientes de
Troya hacia la península itálica. El viaje de Eneas estuvo repleto de peripecias, entre
las cuales una terrible tempestad enviada por Juno, los arrojó a las costas del norte de
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África, donde fueron recibidos por la reina fenicia Dido en la recién fundada ciudad de
Cartago. Entre ambos se despertó una intensa pasión; enterado Júpiter de los amores
de Eneas y la reina, dio la orden al héroe de partir para cumplir con su destino (fundar
un imperio), lo que culminó con el suicidio de Dido. Éste es el asunto central del canto
IV de la Eneida.
Ya en las costas de Italia, Eneas fue
conducido por la sibila de Cumas al inframundo,
donde se encontró con la sombra de antiguos
héroes, de su padre y también su esposa Creusa,
quien le anunció un glorioso futuro.
Más tarde apoyó al rey Latino en su lucha
contra Turno. Vencido éste, Eneas recibió como
esposa a la hija de Latino, la joven Lavinia.
A la muerte del suegro, Eneas reinó con gran
acierto.
Según
algunas
versiones,
el
héroe
La Sibila y Eneas en los Infiernos
J.Brueghel el viejo, 1600
desapareció durante una tormenta; según
otras
leyendas, los dioses lo habrían llevado con ellos.
A Eneas le sucedió su hijo Ascanio, de cuya descendencia nacerían Rómulo y
Remo, fundadores de Roma.
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