MEMORIA SYDNEY - Comité Olímpico Español

Anuncio
ASISTENCIA MÉDICA
DURANTE LOS JUEGOS
OLÍMPICOS DE SYDNEY'2000
INDICE
Introducción
1.
Funciones y tareas de coordinación de la asistencia sanitaria.
2.
Preparativos previos al viaje de Sydney.
3.
Asistencia médica en Sydney.
4.
Recomendaciones.
5.
Anexos.
A finales del mes de marzo de 2000, una vez conocida la relación de la
mayoría de deportistas que habían sido seleccionados para asistir a los Juegos
Olímpicos de Sydney y una vez conocido el número máximo de técnicos y oficiales
que podían ser acreditados en Sydney, el Comité Olímpico Español decidió acreditar a
17 médicos y 17 Fisioterapeutas pertenecientes a las Federaciones de Atletismo (2/3),
Baloncesto (1/1), Balonmano (1/2), Ciclismo (1/0), Esgrima (1/0), Fútbol (1/2),
Gimnasia (1/2), Hockey masculino (1/1), Hockey femenino (1/1), Judo (1/0), Natación
(2/3), Piragüismo (1/1), Taekwondo (1/0), Tenis (1/0) y Voleibol (1/1). Entre paréntesis,
la primera cifra indica el número de médicos acreditados de la Federación
correspondiente, mientras que la segunda cifra indica el número de fisioterapeutas
acreditados de cada Federación. En el anexo 1, se muestra la relación nominal de
personal médico y fisioterápico acreditado por el COE en los Juegos Olímpicos de
Sydney.
Además de los citados profesionales, el Comité Olímpico acreditó a un médico
más (Sr. Gorostiaga) y a un fisioterapeuta (Sr. Bové) para que, a las órdenes del Jefe
de los Servicios Médicos del COE (Sr. Rubio), coordinasen todo el seguimiento médico
del equipo español durante los Juegos, atendiesen la consulta médica y fisioterápica
del COE en la Villa Olímpica y asistieran especialmente a los deportistas y técnicos de
las Federaciones que no tuviesen ni médico ni fisioterapeuta acreditado (Boxeo,
Halterofilia, Hípica, Remo, Tiro con Arco, Tiro Olímpico, Triatlón, Vela y Voleibol).
En este trabajo se explicarán algunos aspectos de la asistencia médica
realizada al Equipo Olímpico Español, y más especialmente, las labores de
coordinación y asistencia médica y fisioterápica llevada a cabo con el Equipo Olímpico
Español. Para ello, se abordará en primer lugar los preparativos llevados a cabo y
durante las semanas previas al viaje. En segundo lugar se analizará la asistencia
médica realizada en Sydney y, por último, se sugerirán algunas recomendaciones que
permitan mejorar la calidad de la asistencia médica del COE en futuros eventos.
1. Funciones y tareas de la coordinación de la asistencia
sanitaria.
Las funciones de coordinación de la asistencia médica que se llevaron a cabo
en los Juegos Olímpicos de Sydney fueron las siguientes:
1.1. Antes del viaje a Sydney:
-
Acreditar al personal sanitario.
-
Realizar el listado, pedir autorización y recibir la autorización del listado de
medicamentos a importar a Sydney.
-
Comprar los medicamentos del listado anteriormente citado.
-
Diseñar y encargar libro de recetas.
-
Comprar el material fungible de fisioterapia.
-
Alquilar el material inventariable de fisioterapia.
-
Preparar los maletines de viaje del material médico, fisioterápico y
farmacéutico.
-
Controles antidopaje:
•
Asegurarse de que los deportistas olímpicos pasarían por lo
menos dos controles antidopaje en España entes de viajar a
Sydney con resultados negativos.
•
Asegurarse de que cada deportista olímpico rellenase una hoja
detallando los medicamentos y ayudas ergogénicas ingeridas en
los últimos meses.
-
Diseñar, contratar y evaluar la realización de un software de control de
medicamentos de farmacia.
-
Recabar, organizar y guardar toda la información sanitaria procedente del
Comité Organizador de Sydney'2000.
-
Recabar, organizar y almacenar toda la información científica relacionada
con los Juegos o con los controles antidopaje.
-
Transmitir la información pertinente a los Jefes de equipo y personal
sanitario acreditado.
1.2. Durante la estancia en Sydney:
-
Responsabilizarse de los locales y enseres de la consulta médica del COE
en la Villa Olímpica. Esto incluye:
•
Responsabilizarse de las entradas y salidas del local.
•
Custodiar la farmacia, el material médico y fisioterápico propio.
•
Custodiar las camillas, mobiliario y material suministrado por la
organización de los Juegos.
•
Custodiar el material de fisioterapia alquilado.
•
Custodiar las recetas del COE, los formularios de peticiones de
diagnóstico por la imagen, analíticas y recetas a la policlínica.
•
-
Custodia y confidencialidad de las historias clínicas
Atender las consultas médicas y fisioterápicas que se soliciten y
coordinarlas.
-
Coordinar las relaciones con la Policlínica de la Villa Olímpica en los
siguientes aspectos:
•
Diagnóstico por la imagen.
-
Controlar el formulario de peticiones.
-
Registrar fotocopia de dichas peticiones.
-
Acompañar, si no hay personal sanitario disponible, al
deportista a la Policlínica.
•
-
Recoger y archivar el informe.
-
Explicarlo al deportista.
Consultas especializadas.
-
Controlar el formulario de peticiones.
-
Registrar fotocopia de dichas peticiones.
-
Acompañar, si no hay personal sanitario disponible, al
deportista a la Policlínica.
•
-
Recoger y archivar el informe.
-
Explicarlo al deportista.
Obtención de medicamentos.
-
Controlar el formulario de recetas de la Policlínica.
-
Darle la receta al interesado, o ir personalmente para
reponer la farmacia.
-
Solicitar fotocopia de la receta.
Coordinar las relaciones con el Hospital Oficial de los Juegos Olímpicos:
•
Coordinar el transporte desde la Policlínica o desde el lugar del
accidente al Hospital.
•
Acompañar al deportista a la visita de urgencias del Hospital.
•
Decidir la conducta a seguir con el personal médico del Hospital.
•
En caso de intervención quirúrgica:
-
-
Acompañar en el preoperatorio.
-
Asistir a la intervención quirúrgica.
-
Hacer un seguimiento del postoperatorio.
Coordinar todo lo relacionado con el control antidopaje. Comprende:
•
Atender a los oficiales del control antidopaje cuando solicitan
ayuda para localizar a deportistas para someterles a un control
por sorpresa fuera de competición.
•
Acompañar y vigilar el proceso del control antidopaje por
sorpresa de los deportistas que no estén acompañados de
personal sanitario.
•
Declarar por escrito, con los debidos justificantes, la utilización
de los productos restringidos, custodiando una fotocopia de
dicha declaración.
•
Coordinar y controlar el número de controles realizados por cada
Federación.
•
En caso de control positivo, acompañar al deportista y llevar a
cabo las peticiones y relaciones pertinentes con la Comisión
Médica del CIO.
-
Coordinar la asistencia y seguimiento médico de toda la delegación
española. Esto incluye:
•
Convocar reuniones generales.
•
Suministrar la información general referente a la asistencia
médica.
•
Centralizar la información procedente de los equipos en lo
referente a la asistencia médica, la utilización de la policlínica y
el control antidopaje.
-
•
Organizar el Servicio de Guardias del Servicio Médico.
•
Atender las peticiones sanitarias de los equipos.
Informar en todo momento al Director de Deportes del COE.
En el siguiente apartado se indicarán las actividades que se llevaron a cabo
antes del viaje de Sydney para cumplimentar las funciones señaladas en el apartado
1.1.
2. Preparativos previos al viaje de Sydney.
En el apartado anterior se señalaban las tareas y funciones que había que
llevar a cabo antes de viajar a Sydney para poder garantizar una asistencia médica de
calidad. En este apartado se explicarán con detalle las actividades realizadas.
2.1. Acreditación del personal sanitario.
El Comité organizador de los Juegos envió al COE una notificación en la que
se indicaba que la legislación australiana permitiría que durante la estancia en
Australia el personal sanitario de cada delegación podría tratar solamente a los
miembros de su delegación respectiva, y utilizaría medicamentos provenientes
solamente de sus respectivas farmacias o de la farmacia de la policlínica. Para ello,
cada Comité Olímpico debía enviar, antes del 1 de Junio de 2000, el nombre, la
categoría profesional y la fecha de llegada y de salida de todos los profesionales
sanitarios que se fuesen a acreditar. También se señalaba que la elección de los
profesionales sanitarios y de sus prestaciones era responsabilidad exclusiva de cada
Comité Olímpico. Por último, se recibió un modelo de formulario para registrar a cada
profesional sanitario. Los formularios rellenados se enviaron al Comité Organizador
antes del 1 de Junio de 2000. En el anexo 1 se indicaba una relación del personal
sanitario acreditado en Sydney por el COE.
2.2. Autorización de importación de medicamentos a Sydney.
La
ley
australiana
de
importación
de
medicamentos,
preparaciones
fitoterapeúticas y de productos de medicina tradicional exige que se cumplan una serie
de requisitos antes de autorizar la importación de dichos productos. Para que los
servicios médicos de cada Comité Olímpico pudiesen importar a Australia sus propios
productos, la organización de los Juegos exigió que antes del 1 de Junio de 2000,
cada delegación enviase una lista completa de los medicamentos, las preparaciones
fitoterapeúticas, los productos de medicina tradicional y las ayudas ergogénicas que
fuesen a importar a Australia con ocasión de los Juegos Olímpicos. Esta lista debía ser
cumplimentada rellenando un impreso en el que se solicitaban diferentes
informaciones que permitiesen identificar el contenido de cada producto así como el
nombre genérico del principio activo y las dosis importadas.
Una vez recibidas las listas enviadas por cada Federación, el Comité
Organizador de los Juegos las enviaría a la Administración Australiana de Alimentos
(TGA). La TGA examinaría cada listado y daría su aprobación o solicitaría
explicaciones sobre los diferentes productos.
En diferentes documentos enviados, el Comité Organizador advirtió que el
Servicio de Aduanas australiano pediría realizar en cualquier momento un control de
los medicamentos de cada delegación y solicitar el registro actualizado de las
sustancias importadas.
2.3. Compra de los medicamentos del Servicio médico del
C.O.E.
Los medicamentos autorizados por la TGA para ser importados a Australia
fueron encargados y comprados en la Farmacia Lda. María González Landete (Avda.
Valladolid, 71 - Madrid).
2.4. Diseño y encargo del libro de recetas.
La prescripción de medicamentos de la farmacia del Servicio Médico del COE
se controló mediante la expedición de recetas. Todo medicamento administrado se
acompaño de la correspondiente receta.
2.5. Compra del material fungible de fisioterapia.
El fisioterapeuta del servicio médico del COE (Toni Bové) se encargó de hacer
el pedido de material fisioterápico.
2.6. Alquiler de material inventariable de fisioterapia.
El COE alquiló en Australia el siguiente material de fisioterapia:
-
2 aparatos de ultrasonidos e interferenciales.
-
2 tens.
-
1 láser puntual.
2.7. Preparación de maletines de viaje del material médico y
fisioterápico.
Además
de
los
medicamentos
y
del
material fisioterápico
anteriormente, se llevó a Sydney el siguiente material médico y de oficina:
señalado
-
Pegatinas, ordenador, clasificadores, cuaderno de incidencias, Libro
Martíndale, Vademecum internacional, Manual de atención primaria y
Manual de urgencias.
-
Termómetro, esfingomanómetro, estetoscopio, laringoscopio, otoscopio, kit
de sutura estéril, material de sutura (4-0, 5-0, 6-0), goma para extracciones,
tijeras, esparadrapo, tiritas, vendas adhesivas, gasas estériles, tablillas de
inmovilización, depresores linguales, guantes estériles, stery-streep, agujas
(18-20) y jeringuillas.
Para el viaje, se preparó el material en 3 bloques diferentes:
a) Maletín de viaje, que lo transportarían personalmente los médicos en el
avión.
b) Resto de material médico, que se transportó en 3 maletas.
c) Material fisioterápico que fue transportado en cajas embaladas.
Todo el material llegó en perfectas condiciones a Sydney.
2.8. Controles antidopaje.
Antes de salir para Sydney, se informó a los Jefes de Equipo y al personal
sanitario que todos los deportistas españoles que asistiesen a los Juegos de Sydney
debían someterse a, por lo menos, dos controles antidopaje analizados en un
laboratorio español homologado.
También se les solicitó que cada deportista rellenase una declaración de
empleo de los medicamentos o de las ayudas ergogénicas ingeridas en los últimos
meses. Esta declaración debía ser firmada por el propio deportista, por el médico que
se las prescribió y por el Jefe de los Servicios Médicos de su Federación.
Todos los deportistas españoles cumplieron estos dos requisitos aunque, en
algunos casos, la verificación de dicho cumplimiento solamente se pudo realizar
cuando los deportistas se encontraban en Sydney.
2.9. Diseño, control y evaluación de un programa informático
para controlar los medicamentos de la farmacia.
Se ha señalado anteriormente que el Comité Organizador de los Juegos iba a
exigir un control exhaustivo de los medicamentos durante los Juegos. Por ello, el
servicio médico del COE decidió encargar un programa informático de control de las
existencias y los movimientos de los medicamentos durante los juegos. Este programa
permitió tener un control exhaustivo en todo momento de las existencias y los
movimientos de los medicamentos durante los Juegos. Además, las Federaciones de
Ciclismo, Atletismo y Hockey lo utilizaron para controlar sus existencias.
2.10. Recabar, organizar y guardar toda la información sanitaria
procedente del Comité Organizador de Sydney.
En los meses previos a los Juegos, se recibió diferente información referente a
los Juegos. Esta información se resume en los 3 folletos publicados al respecto: 1)
Guía del control antidopaje, 2) Guía de la atención médica, y 3) Guía farmacéutica.
Estas guías no están contenidas en este informe debido a su gran extensión.
2.11. Recabar, organizar y almacenar la información científica
relacionada con los Juegos.
La información científica más relevante almacenada previamente a los Juegos
fue de dos tipos: a) La relacionada con los problemas médicos que se podían
encontrar en Sydney (ej.: Milne y col. Sports Medicine 28(4): 287-298, 1999), y b) la
relacionada con el control antidopaje y especialmente con la detección de
Eritropoyetina en orina (ej.: Lasne y de Ceaurriz, Nature: 405(8): 635, 2000) y en
sangre (ej.: Parisotto y col. Haematologica 85: 564-572, 2000). Estos últimos artículos
eran muy importantes porque a partir a ellos el COI decidió imponer los controles
antidopaje de sangre y orina para detectar la Eritropoyetina.
2.12. Transmitir la información pertinente a los Jefes de Equipo
y al personal sanitario acreditado.
La transmisión de la información a las diferentes federaciones cuyos
deportistas iban a asistir a los Juegos Olímpicos se hizo de dos modos. a) por una
parte, mediante contacto individual personal, telefónico o por correspondencia del Jefe
de los Servicios Médicos del COE con los Jefes de equipo o los médicos de
Federación, y b) mediante la organización de 2 reuniones en el Comité Olímpico:
La primera reunión se llevó a cabo el 15 de Abril del 2000, fue dirigida por el Dr.
Rubio y asistieron a ella los Jefes de Equipo y/o médicos de las Federaciones que
iban a asistir a los Juegos.
En dicha reunión se trataron 5 aspectos: 1) Acreditación del personal sanitario, 2)
Asistencia médica en Sydney, 3) Medicamentos, 4) Control Antidopaje, y 5)
Declaración previa de medicamentos utilizados por los deportistas.
La segunda reunión se llevó a cabo bajo la forma de unas Jornadas a las que se
invitó a todo el personal sanitario que iba a estar acreditado por el Comité Olímpico
Español durante los Juegos. En estas Jornadas se impartieron diferentes
conferencias:
•
Asistencia Médica del Equipo Olímpico Español y control Antidopaje en Sydney
(Dr. Silvio Rubio).
•
Infraestructura Sanitaria del Comité Organizador de Sydney 2000 (Dr. Juan
Manuel Alonso).
•
Aspectos prácticos de la adaptación del Jet-Lag (Dr. Ramón Olivé).
•
Actualización del tratamiento en lesiones músculo-esqueléticas (Dña. Mónica
Sala).
También se presentó el programa de control de medicamentos.
Esta última reunión fue muy elogiada por los participantes, permitió unificar
criterios, mejorar la formación del personal sanitario y mejorar la cohesión del personal
sanitario que iba a asistir a los Juegos Olímpicos.
3. Asistencia médica en Sydney.
En este apartado se analizará la asistencia médica llevada a cabo durante la
estancia de la delegación española en Sydney, desde el 5 de septiembre hasta el 2 de
octubre de 2000.
Conviene señalar que durante la estancia del equipo español en Sydney no se
produjo control alguno de medicamentos por parte de la Organización de los Juegos.
A la llegada a Sydney, los Dres. Rubio y Gorostiaga declararon en la aduana la
llegada de los medicamentos autorizados por la TGA. Esta declaración fue aceptada
sin ningún tipo de verificación.
3.1. Locales y material de la consulta médica de la delegación
española en la villa olímpica.
El local de asistencia médica que la organización de los Juegos puso a
disposición de la delegación española en la villa olímpica fue muy aceptable y cumplió
las condiciones requeridas por el CIO. Por ejemplo, su superficie era adecuada
(cercana a los 80 metros cuadrados), estaba compuesta por una gran sala con 9
camillas, 3 salas abiertas separadas de la gran sala por unas cortinas, y una sala
aislada del resto. Además, había 4 mesas y varias sillas, taburetes, 6 lámparas de
examen, 2 armarios de farmacia con llaves, una máquina de hielos, papeleras,
recipientes para recoger material médico desechable y un frigorífico.
Este equipamiento, unido al material médico y fisioterápico transportado por el
COE, permitieron que se llevase a cabo una asistencia médica en condiciones
satisfactorias. Además, la proximidad de los locales médicos con los locales
administrativos del COE permitieron agilizar las tareas administrativas del servicio
médico.
Las funciones de custodia y responsabilidad de las entradas y salidas de los
locales del servicio médico, de custodia de la farmacia, del material médico y
fisioterápico propio, de las camillas, mobiliario y material suministrado por la
organización de los Juegos, del material fisioterápico alquilado, de las recetas y
formularios de peticiones, y de la confidencialidad de las historias clínicas se llevaron a
cabo con normalidad.
3.2. Consultas médicas y fisioterápicas realizadas por el
Servicio médico del COE.
Durante la estancia en Sydney el número total de consultas realizadas por el
Servicio médico del COE (Silvio Rubio, Toni Bové, Esteban Gorostiaga) fue de 385,
repartidas de la siguiente manera: Atletismo (4), Baloncesto (15), Balonmano (39),
Boxeo (31), Ciclismo (29), COE (31), CSD (4), Esgrima (5), Fútbol (2), Gimnasia (6),
Halterofilia (6), Hípica (32), Hockey (7), Judo (4), Natación-Waterpolo: (70), Piragüismo
(1), Remo (1), Taekwondo (5), Tenis (9), Tiro con arco (3), Tiro olímpico (2), Triatlón
(3), Vela (74), Voleibol (2).
Además de las consultas realizadas directamente por el personal del servicio
médico del COE, los médicos y fisioterapeutas de algunas Federaciones, como la de
Atletismo, Balonmano, y Waterpolo utilizaron los locales médicos del COE para llevar
a cabo parte o la totalidad de su asistencia médica.
Muchas de las consultas médicas realizadas por el servicio médico del COE se
acompañaron de una prescripción de medicamentos de la propia farmacia del COE o
de la de la Policlínica.
Una parte de las consultas médicas realizadas por el servicio médico del COE,
necesitó ser completada con una visita a la Policlínica para solicitar exámenes
complementarios (radiología, escaner, ultrasonidos, analítica, etc) o consultas
especializadas.
Por último, 3 deportistas sufrieron lesiones de cierta consideración:
1) José María Merchán, de Triatlón sufrió una fractura de escafoides de su
muñeca derecha cuando participaba en la prueba de ciclismo. Como
consecuencia de ello, fue operado el 20 de septiembre en el Hospital
Olímpico Concord. El postoperatorio fue normal y el deportista pudo salir
hacia Madrid el día 25 de septiembre, como estaba previsto.
2) El jugador de baloncesto Nacho Rodríguez tuvo una luxación interfalángica
de uno de los dedos de su mano. A pesar de ello, pudo seguir jugando.
3) El taekwondista Francisco Zas tuvo una lesión del ligamento cruzado
posterior de su rodilla derecha mientras competía en su primer combate.
Esta lesión le impidió continuar compitiendo y será tratado a la vuelta de los
Juegos.
3.3. Coordinación de las relaciones con la Policlínica de la Villa
Olímpica y con el Hospital Olímpico.
La Policlínica de la Villa Olímpica estuvo abierta desde el 2 de septiembre
hasta el 4 de octubre y suministró los siguientes servicios: urgencias, medicina
deportiva, medicina general, tratamiento por la imagen (radiología, ecografía,
tomodensitometría, resonancia magnética), odontología, oftalmología, fisioterapía,
masajes, podología, y servicio de esterilización. Además, permitió acceder a otras
consultas de ORL, dermatología, oftalmología, ortopedia y ginecología. Por último,
también albergó la farmacia y el centro de control antidopaje.
La opinión generalizada es que estos servicios sanitarios funcionaron muy bien
con un personal altamente cualificado y con muy buena atención al paciente. Tal vez
el único defecto señalado por algunos ha sido la lentitud con la que se realizaba cada
acto, y cierta tardanza en enviar los informes por escrito. El personal sanitario y los
miembros de la delegación española utilizaron con bastante frecuencia los servicios de
la Policlínica, sobre todo el tratamiento por la imagen y la farmacia. Además, como se
ha señalado anteriormente, el triatleta José María Merchán tuvo que ser operado en el
Hospital Olímpico Concord.
3.4. Coordinación de los controles antidopaje.
En un folleto editado por el Comité Organizador de los Juegos de Sydney se
señalaba que la Comisión Médica del CIO sería la responsable del programa de
control antidopaje desde el 2 de septiembre hasta el 1 de octubre de 2000. Por su
parte, el Comité Organizador de los Juegos de Sydney (SOCOG) se encargó de poner
en marcha la infraestructura necesaria a la recogida de muestras.
Durante los Juegos se llevaron a cabo dos tipos de control antidopaje: fuera de
competición y en competición. Además, los controles de competición podían ser
realizados en orina o/en sangre. Ello se debe a que unos días antes de comenzar los
Juegos, el Comité Ejecutivo del CIO autorizó un procedimiento que partiendo del
análisis de sangre y orina permitía detectar la utilización exógena de Eritropoyetina.
En principio, el Comité Organizador anunció que desde el 2 de septiembre
hasta el 1 de octubre de 2000 se llevarían a cabo unos 600 controles fuera de
competición y unos 2.000 controles de competición. El Comité Organizador de los
Juegos decidió que la selección de los deportistas que debían pasar los controles
fuera de competición sería parcialmente controlada y parcialmente aleatoria. También
se indicó que cualquier deportista acreditado podría ser controlado en todo momento y
en cualquier lugar.
La persona que tenía el poder de decisión en última instancia sobre el número
de deportistas que debían ser evaluados y el método de selección era el presidente de
la Comisión Médica del CIO, Sr. De Merode, aunque debía consultarlo previamente
con el Comité Organizador, los representantes de las Federaciones Internacionales de
los Comités Olímpicos Nacionales y con los deportistas.
Por último, en los controles de competición la Comisión Médica del CIO, en
colaboración con cada Federación Internacional, decidió el número y la distribución de
los controles de competición que iban a realizarse a los deportistas. En general, los
controles antidopaje de competición se aplicaron a los cuatro primeros de la
clasificación general final y a otros deportistas designados al azar.
Durante el periodo comprendido entre el 2 de septiembre y el 1 de octubre de
2000 los controles antidopaje que se realizaron a la delegación española fueron los
siguientes:
•
Controles fuera de competición: 34 (21 de orina y 13 de sangre), repartidos
del siguiente modo: Atletismo (9), Balonmano (2), Baloncesto (1), Ciclismo
(9), Gimnasia (1), Halterofilia (3), Hípica (1), Hockey Hierba (4), Judo (1),
Piragüismo (1), Triatlón (1), Waterpolo (1). Los controles de sangre fueron
realizados a deportistas de las federaciones de Atletismo, Ciclismo y
Piragüismo. El porcentaje de controles fuera de competición de orina y de
sangre realizados al equipo olímpico español, supuso un 5.2% y un 4.2%,
respectivamente,con respecto al número total de controles realizados en los
Juegos Olímpicos de Sydney. Conviene recordar que los deportistas
españoles supusieron el 3.5% del total de los deportistas que compitieron
en Sydney.
•
Controles en competición: 32, que supusieron un 1.6% del total de
controles de competición llevados a cabo durante los Juegos Olímpicos de
Sydney, repartidos del siguiente modo: Atletismo (6), Boxeo (1), Balonmano
(3), Ciclismo (6), Fútbol (1), Gimnasia (1), Hockey Hierba (1), Judo (1),
Natación (5), Piragüismo (1), Taekwondo (1), Tenis (5).
Se puede afirmar que los procedimientos de control antidopaje no han
funcionado correctamente durante los Juegos de Sydney. Esta afirmación se basa en
dos puntos:
1) La organización de dichos controles. A lo largo de los Juegos se observó que la
coordinación de los controles antidopaje realizados fuera de competición dejaba
mucho que desear. Esta falta de coordinación se produjo en distintos aspectos:
•
En general, los oficiales que realizaban los controles a la delegación española se
dirigían a los locales del COE y solicitaban que se les indicase el alojamiento del
deportista que había sido seleccionado para ser controlado. En numerosas
ocasiones los deportistas estaban entrenándose y había que establecer un
procedimiento complicado para localizarlos. Estos procedimientos podrían haberse
evitado si los responsables de los controles antidopaje hubiesen sido informados
previamente por el Comité Organizador sobre el calendario de entrenamientos de
cada deporte y delegación.
•
En numerosas ocasiones, los oficiales se presentaron en días sucesivos
solicitando información sobre un deportista determinado que todavía estaba en
España o fuera de Sydney, a pesar de que en días anteriores se les había indicado
esta circunstancia y se les había notificado el día exacto de llegada a Sydney. Este
error indica que no existieron buenos canales de comunicación entre los oficiales y
los responsables del control antidopaje.
•
En algunas ocasiones los oficiales se equivocaron de deportista y le hicieron ir
repetidas veces a realizar el control antidopaje. Por ejemplo, a un deportista de
Hípica (Sr. Jurado) se le hizo ir dos veces por un error administrativo, a la sala de
control antidopaje de la Policlínica para realizar un control fuera de competición el
mismo día que comenzaba su competición.
Todos los problemas de coordinación fueron señalados personalmente por el
Servicio Médico del COE a Doña. Nicki Vance, directora del programa antidopaje, que
reconoció la existencia de problemas de organización y pidió excusas por ello.
2) Los procedimientos de elección de los deportistas que tenían que pasar controles
antidopaje fuera de competición y la información sobre dichos controles ha sido
muy pobre.
Uno de los aspectos más negativos de los controles antidopaje que se realizan
en unos Juegos Olímpicos es el de la información sobre los controles antidopaje
realizados y sobre su resultado. Por ejemplo, sólo se informa de los resultados
positivos y no de los negativos, cuando lo lógico sería informar sobre los resultados de
todos los controles antidopaje realizados.
Un segundo aspecto negativo es que se informa demasiado tarde sobre el
número de controles antidopaje que va realizando el Comité Organizador (más de 4-5
días). Por ejemplo, el día 2 de octubre de 2000, un día después de la finalización de
los Juegos, tan solo se conocía el número total de controles que se habían realizado
hasta el 27 de septiembre. Este retraso en el suministro de información supone un
aspecto negativo en la organización de estos controles.
Por último, el aspecto más grave relacionado con los controles antidopaje es el
desconocimiento previo o posterior de los criterios que se siguen para seleccionar a
los deportistas que tienen que someterse a un control antidopaje fuera de competición.
En principio, la organización había indicado que se llevarían a cabo 600 controles
fuera de competición y cerca de 2.000 controles de competición. La Comisión Médica
del Comité Olímpico Internacional, en el informe oficial final sobre los controles
antidopaje realizados con ocasión de los Juegos Olímpicos de Sydney (Anexo 2) ha
señalado que llevó a cabo 404 controles de orina de fuera de competición, 307
controles de sangre de fuera de competición y 2052 controles de competición. Al
equipo olímpico español se le realizaron 21 controles de orina fuera de competición (el
5.2% del total), 13 controles de sangre fuera de competición (el 4.2% del total) y 24
controles de competición (el 1.6% del total). Si tenemos en cuenta que la participación
española en los Juegos supuso aproximadamente el 3.5% del total de los
participantes, ello implica que el número de controles de fuera de competición
realizados a los deportistas españoles fue muy superior al que le correspondía si el
sorteo se hubiese realizado aleatoriamente. Por lo tanto, sería conveniente que la
Comisión Médica del CIO, responsable de la elección de los deportistas que tenían
que ser sometidos a los controles antidopaje fuera de competición, informase sobre los
criterios que siguió y sobre el número de deportistas de cada país que fueron
sometidos a control. Además, la Comisión Médica del Comité Olímpico Internacional,
en el informe oficial final sobre los controles antidopaje realizados con ocasión de los
Juegos Olímpicos de Sydney ha señalado que al equipo olímpico español se le
realizaron 13 controles de orina fuera de competición, cuando en realidad el número
de controles realizados fue de 21. Esto situaría a España en tercera posición, igualada
con Francia, en el número de controles de orina realizados fuera de competición, por
detrás de Estados Unidos (23 controles), Australia (22), y por delante de países como
Alemania (18 controles), China (14), Italia (15) o Rusia (17). Países, todos ellos con
una delegación más numerosa que la española.
Por último, indicar que entre el 2 de septiembre y el 1 de octubre de 2000 hubo
11 casos positivos y que ninguno de ellos correspondió a los deportistas españoles.
3.5. Coordinación de la asistencia sanitaria de la
delegación española.
El servicio médico del COE, bajo la dirección del Dr. Rubio, realizó la
coordinación y la asistencia sanitaria de todo el equipo olímpico español. Para ello, se
convocó al personal sanitario a 2 reuniones antes de viajar a Sydney. Una vez en
Sydney, se llevaron a cabo reuniones de coordinación en los locales del servicio
médico del COE en la villa olímpica. En dichas reuniones se indicó al personal
sanitario que tuviese constantemente informado al servicio médico del COE sobre los
incidentes más importantes (controles antidopaje, lesiones, incidencias).
Se puede afirmar que el funcionamiento como grupo del personal médico ha
sido correcto y el ambiente bueno y con afán de cooperación, salvo 2 ó 3 federaciones
que han funcionado de modo individual. No obstante, es necesario recalcar para todo
el personal sanitario y técnico que unos Juegos Olímpicos
o cualquier otra
competición de ámbito similar exige de todo el personal médico y sanitario una clara
vocación de servicio y colaboración, sin afán de protagonismo.
Tal vez el único aspecto negativo ha sido el de las guardias de presencia en los
locales del servicio médico del COE. Estas guardias se solicitan a los médicos de
Federaciones para que de modo voluntario sustituyan unas horas a los médicos del
servicio médico del COE cada 3 ó 4 días. La realidad es que solamente 6 médicos se
ofrecieron a hacer las guardias. Este es un aspecto que debería solucionarse en un
futuro.
3.6. Informes al Jefe de Deportes del COE.
Desde el día 14 de septiembre hasta el 30 de septiembre el servicio médico del
COE realizó diariamente un informe al Jefe de Deportes del COE en el que se
informaba del número de controles antidopaje que había realizado la delegación
española, el número de consultas médicas realizadas por el servicio médico del COE y
las incidencias lesionales más importantes.
4. Recomendaciones.
Tras el análisis realizado, las recomendaciones que se sugieren son las
siguientes:
•
Archivar el presente documento junto con el programa informático de
control de medicamentos para que pueda servir en un futuro como punto de
partida y de referencia para futuras asistencias médicas del COE.
•
Preparar el listado de medicamentos que se importarán a los Juegos de
Atenas con un año de antelación, para que todas las Federaciones puedan
enviar sus listados (para los Juegos de Sydney algunos médicos no
pudieron hacerlo porque no se lo comunicó su Federación).
•
Mejorar el modelo de receta interna, añadiendo el número de orden y la
fecha.
•
Adquirir de modo permanente pequeño material médico inventariable
(esfingomanómetro, otoscopio, laringoscopio, tijeras, material de sutura).
•
Comprar un maletín de viaje que permita ordenar la medicación y acceder a
ella rápidamente.
•
Mejorar los mecanismos de comunicación con los laboratorios españoles de
control antidopaje para conocer más rápidamente la relación de deportistas
que han pasado control antidopaje previo a los Juegos.
•
Exigir a los deportistas y a los médicos de Federaciones que solamente
utilicen ayudas ergogénicas y médicas que tengan el registro sanitario
oficial obligatorio. Ello se debe a que algunas empresas multinacionales de
venta de suplementos dietéticos y de herboristería venden suplementos de
proteínas y vitaminas a los que les añaden hormonas o productos
prohibidos sin señalarlo en sus prospectos. Este es un grave problema que,
si no se corta a tiempo, puede tener consecuencias negativas inevitables e
imprevisibles para el COE en futuros Juegos Olímpicos.
•
Continuar impulsando el intercambio de información científica con el
personal sanitario de las Federaciones.
•
Potenciar la ayuda y asesoría técnica, científica y de material al personal
sanitario de las Federaciones.
•
Reflexionar sobre la posibilidad de modificar ligeramente el modelo de
asistencia médica en los Juegos. Tal vez, sería conveniente tener un
médico más y un fisioterapeuta asistiendo a la delegación en los locales
centrales del COE en la villa olímpica en vez de intentar que cada
Federación tenga su propio personal sanitario. Esto favorecería la cohesión
de la delegación y mejoraría probablemente la coordinación y asistencia
sanitaria de la delegación.
•
Expresar nuestro malestar con los controles antidopaje fuera de
competición que se llevaron a cabo en Sydney y, especialmente,
-
Por el desconocimiento de los horarios oficiales de entrenamiento de los
distintos deportes.
-
Por la insistencia de los oficiales del control antidopaje en solicitar
repetidamente la presencia de deportistas españoles, a pesar de que se les
había notificado que estaban fuera de Australia y su fecha de llegada.
-
Por hacer ir 2 veces a la sala de control antidopaje de la Policlínica a un
deportista español para someterse a un control antidopaje fuera de
competición, el mismo día que comenzaba la competición.
-
Por la ausencia de información por parte del COI referente a los criterios
que se siguieron para obligar a que el 5.2% de los controles fuera de
competición se les realizara a los deportistas españoles, cuya delegación
suponía solamente el 3.5% de los participantes, cuando a otros países
como Rusia, Italia o Alemania se les realizaron menos controles de fuera de
competición..
•
Felicitar al Comité Organizador de los Juegos de Sydney por la cobertura
sanitaria realizada y por las instalaciones que puso a disposición del COE.
Madrid, 17 de octubre de 2000
5. ANEXOS
ANEXO 1
ANEXO 1. Personal médico y fisioterápico acreditado en Sidney. Personal sanitario.
OFICIALES Y TÉCNICOS
(excepto personal sanitario).
COE Y CSD: 23
Médico
Deportistas
0
Silvio Rubio
Fisio o asimilado
Toni Bové
Esteban Gorostiaga
ATLETISMO: 18
111
Juan Manuel ALONSO
Angel BASAS
Andrés ARQUER
Miguel Angel COS
Manuel RAFAEL
BALONCESTO: 5
12
Delfín GALIANO
José Emilio BIEL
BALONMANO: 6
15
Luis Ignacio NEBOT
Pedro MORA
Andrés ALEMANY
BOXEO: 1
1
CICLISMO: 14
22
Juan Carlos DIAZ DEL VALLE
ESGRIMA: 1
3
José Antonio QUEVEDO
FÚTBOL: 6
18
Jorge GUILLÉN
Julio CARMONA
Entiquio GÓMEZ
GIMNASIA: 9
20
Andrés FERNÁNDEZ
Juan Jesús LLORENTE
Ana TORRES
HALTEROFILIA: 1
3
HÍPICA: 19
12
HOCKEY: 10
32
Gil RODAS
Arturo BROS
Cristina PÉREZ
Sandra LÓPEZ
JUDO: 6
12
Francisco GÓMEZ
NATACIÓN: 13
43
José DACUERRE
Felipe HERRANZ
Alberto ESTIARTE
Mónica SOLANA
Miguel RODRÍGUEZ
PIRAGÜISMO: 6
19
Manuel RODRÍGUEZ
REMO: 2
4
TAEKWONDO: 2
4
Ramón OLIVE
TENIS: 3
7
Angel RUIZ-COTORRO
TIRO CON ARCO: 1
1
TIRO OLÍMPICO: 3
4
TRIATLÓN: 2
4
VELA: 10
17
VOLEIBOL: 6
14
Imanol DUANDIKOETXEA
Antonio MALLO
David DÍAZ
ANEXO 2
Descargar