Olores y sabores de la comida ritual en Catorce, San Luis Potosí. Catorceños y new agers. Neyra Patricia Alvarado Solís El Colegio de San Luis, A.C. En este municipio, asentado en el desierto Chihuahuense, las influencias del exterior en la cocina local ha sido sistemática. Desde la creación del Real minero, en el siglo XVIII, las haciendas ganaderas y el comercio, posteriormente el abandono de la minería como actividad económica importante y actualmente el turismo atraído por el peyote y el pueblo mágico, así como los peregrinos (huicholes y católicos) que visitan el desierto en la recolección de peyote y a San Francisco, respectivamente, contribuyen en esta complejidad culinaria. Región de gran tradición en las fiestas del ciclo de vida y las imágenes santas, los platillos en cada una de ellas, tiene su toque local contemporáneo con la herencia de antaño. Los catorceños, aquellos que reivindican su origen desde la creación del Real minero de Catorce, ofrecen la reliquia o convivio al patrón. Se trata de platillos cuyos olores y sabores se van conformando desde la temprana edad, comida que permite la obtención de la fuerza del cuerpo. Contrariamente a los extranjeros asentados en el Real, quienes por ser vegetarianos tienen un cuerpo débil, enfermo, por no ofrecer la reliquia y por no haber obtenido desde la infancia los olores y sabores. A partir de este ejemplo, interesa ahondar en las relaciones entre new agers y catorceños, como una forma de delimitar socialmente las fronteras en esta sociedad en gestación. Introducción La región de Catorce, conformada por la sierra de Catorce (3200m snm) y las planicies desérticas, lo que fue un pueblo fantasma y ahora Pueblo Mágico de Real de Catorce, es el contexto donde circulan “jipis” a lo largo del año, en busca del peyote y de experiencias mágicas; huicholes que en temporada seca peregrinan rumbo al desierto, 1 desde la Sierra Madre Occidental en busca del peyote. En el pueblo sólo se ven los escasos huicholes vendedores de artesanías asentados allí, o las autoridades que son invitadas a las diversas reuniones convocadas, para detener el proyecto minero de la compañía canadiense First Majestic. Los turistas mexicanos y extranjeros visitan ya sea a San Francisco o la región (peyote). De la misma forma, los peregrinos católicos abren paso, aproximadamente, durante un mes que dura la fiesta de San Francisco, época en que los extranjeros asentados en el pueblo, lo abandonan, para dar paso a las multitudes. Los catorceños, como se autodenomina la población cuyas familias fundaron el Real de Minas y las haciendas ganaderas y agrícolas en la región, se metamorfosean a los largo del año dependiendo de la época y las actividades. Desde 2006, investigo la complejidad de la región circulando por la sierra y las planicies de sus ambos lados, entre los diferentes grupos de población. Me interesa saber cómo los catorceños se construyen en este contexto de diversidad, apoyando frente a su solicitud, con resultados tangibles su proceso de calificación como prestadores de servicios turísticos, actividad en la que se vieron envueltos cómo una forma de vida. En este contexto interesa conocer ¿cómo se determinan los olores y sabores en la comida ritual de Catorce?, existiendo diferentes ciclos rituales dependiendo de la población, así como diferentes tipos de comida ritual. Delimitaré esta intervención a los catorceños de Real de Catorce frente a un sector de los new agers, asentados allí. Catorceños y new agers Hablar de los catorceños, es hacerlo de un conjunto de población cuya familia ascendente desarrolló alguna actividad ligada a la minería. Ya sea directamente en las minas, el comercio, en las haciendas ganaderas o las agrícolas. Se trata de descendientes de españoles, ingleses norteamericanos y de población de la región. En algunos casos se trata de población que abandonó el Real de minas, porque otros se quedaron, cuando dejó de explotarse la minería para buscar trabajo en los estados del noreste del país (Coahuila y Nuevo León). 2 Mapa. 1. La región de Catorce 3 En dos momentos importantes esta población regresó, aunada al poblamiento de extranjeros1 atraídos por el peyote. La primera fue a principios del siglo XX (Aguiñaga, 1975) cuando San Francisco, imagen santa que atrajo a peregrinos conformando a Real de Catorce como un santuario católico importante en la región. El segundo fue en 1970 cuando se asentaron varios extranjeros procedentes de Europa y EU, así como mexicanos de otros estados del país. La nominación de Real de Catorce en 2002 como pueblo mágico2, ha tenido eco en el turismo nacional, que busca en este pueblo experiencias místicas y mágicas del desierto, acompañadas de una infraestructura hotelera y culinaria europea. Este pueblo mágico ha atraído a huicholes que venden sus artesanías o que son contratados para dirigir ceremonias new age ofrecidas por empresarios turísticos. Los new agers llegan de Italia, Suiza y Estados Unidos en diferentes épocas, los ya asentados atraen a los demás mediante redes de amistad. Atraídos por lecturas literarias new age donde Real de Catorce aparece como un pueblo serrano en ruinas por el abandono de los trabajos mineros y por la cercanía con el desierto a donde los huicholes buscan el enteógeno. Real de Catorce fue la atracción de población que vivió movimiento hippie y que decidió tener una vida tranquila. Así son denominados “jipis” y se identifican por una forma de vida donde el peyote les es fundamental, se hayan conformado en empresarios turísticos o no. En ambos grupos la construcción de olores y sabores tiene un sentido diferente. Olores y sabores Para los catorceños, el poder distinguir los sabores y los olores está ligado con la práctica de haberlos consumido desde temprana edad. Es decir, tiene que ver con la alimentación y la utilización de productos regionales cuya calidad saben distinguir por la procedencia y/o el tratamiento que se les da. A esto se suma la forma de cocinar y el toque personal en cada familia. En cuanto a los productos regionales, los new agers asentados allí han podido también distinguir los olores y los sabores de los productos regionales, aunque su utilización sea en su propia cocina y no tenga que ver con su 1 Extranjero es concebido localmente como procedente de otros países pero el término “jipi” de hippie, recubre genéricamente a los fuereños. 2 Certificación otorgada por la Secretaría de Turismo Federal, para destacar frente al turismo a aquellos lugares que por su historia, arquitectura y tradiciones son únicos en el país. 4 consumo desde la infancia. En la sierra se da el orégano que es de olor y sabor muy fuerte, cualidad sabida por la población de la región para determinar las cantidades a utilizar. Los chivos de las planicies del ejido de Estación Catorce que circulan anualmente entre los pastos serranos, es la mejor carne de toda la región. Lo mismo sucede con los quesos y las hortalizas, éstas últimas cultivadas por un suizo en las tierras de Vanegas. Las manzanas de Real de Maroma tienen un sabor y un perfume que las destaca, pues son orgánicas sin proponérselo, “estas manzanas no le piden nada a las que venden en el super [supermercado], son mejores y se pueden conservar, yo las tengo en mi sotano” comenta una suiza en Real de maroma. Estos productos serranos y de las planicies han conformado el sentido del sabor y del olfato. Para los catorceños, la comida otorga la fuerza a la persona. Tanto la persona como los animales y las plantas, deben ser cuidados siguiendo los ciclos lunares, para que logren esa fuerza, comenta una señora que “barre”3 en el ex -Real minero. De manera que la luna determina en sus diferentes fases los momentos de curar, de cortar o podar una planta, de mover el ganado, de ordeñar, entre otros. La luna menguante y creciente permite múltiples actividades, no así la luna llena cuya fuerza puede afectar al individuo, animales o plantas. La comida en la obtención de la fuerza del individuo está presente desde una tierna edad, comenta una sobadora de las planicies. Así a un bebé desde un mes de nacido le dan probaditas de caldito de frijoles con tortilla machacada, que se haga líquido. Poco a poco van integrando los frijoles sin el “pellejito”. Conforme va creciendo, aumenta la variedad y la dosis, cambiando la forma de preparación “siempre cuidando que no se ahogue con la comida”. La leche materna es la principal alimentación del bebé y puede darse hasta los dos años. Así hasta la edad adulta se van introduciendo la “comida de diario” y “la comida de fiesta”, dependiendo de las etapas importantes del individuo y de la comunidad. Son estos olores y sabores los que son compartidos a nivel familiar y colectivo. En la circulación de personas con tradiciones culinarias diferentes, el aprendizaje y la introducción de platillos se va equilibrando en el gusto local el uso y la combinación de nuevas especias, con la sazón personal. 3 Barrer es el término que usan para limpiar el cuerpo con plantas y huevo. 5 Para los catorceños, los new agers son vegetarianos, no comen carne o casi no la consumen, solamente cuando los catorceños los invitan, piensan que es porque no quieren gastar dinero. Comenta una joven de Real de Catorce ¿“cómo cuando nosotros les invitamos se comen bien la carnita”?, Por su parte, los new agers buscan el consumo de productos naturales, que permitan una alimentación y armonía con la naturaleza, prácticas asociadas a una vida tranquila, lejos de las urbes pero ligada a la magia del peyote y a la pureza y equilibrio alimenticio. Concepciones posiblemente de trasfondo vegetariano o macrobiótico donde inicialmente los principios ying-yang proporcionan dicho equilibrio entre el cuerpo y el cosmos. Para ellos, los olores y los sabores son los de aquellas plantas y sus frutos que creciendo de forma natural o cultivada están ajenos a los químicos y que permiten su preparación para el consumo. Estos olores y sabores se comparten en las fiestas new age que reagrupan esencialmente a su mismo grupo. Veamos ahora, el sistema ritual de los catorceños, retomamos solamente aquellos en los que participa la colectividad. Conformación de los Sistemas rituales De manera que el sistema ritual de los catorceños de Real de Catorce está conformado por las fiestas patronales, del ciclo de vida y las sesiones terapéuticas. Ocasionalmente participan en convocatorias de rituales new age. El sistema ritual de los new agers está conformado también por fiestas del ciclo de vida, patrióticas, despedidas y bienvenidas, pequeños rituales personales y rituales colectivos entre la India y el cerro Quemado. En los cumpleaños, las bodas y bautizos tanto de catorceños como de new agers, son de participación cerrada a uno u otro, solo algunas personas circulan entre ambos. Los new agers no participan de la vida católica del lugar, y por tratarse de una parroquia cuyo santuario genera enorme riqueza, mantiene al conjunto del obispado de Matehuala. El último sacerdote responsable de la parroquia no ha activado la vida pastoral, que en otro tiempo otros sacerdotes impulsaron, por lo que el ciclo ritual de las imágenes tiene una participación escasa y muy marcada. Por ejemplo para el ciclo anual, la participación mayoritaria se da en Semana Santa (marzo-abril), San Francisco (4 de octubre) y Virgen de Guadalupe (12 de diciembre). En las otras fechas la participación es menor. 6 Para el ciclo new age, solamente participa el grupo de amigos en cuestión. Tabla 1. Rituales colectivos en Real de Catorce Fiesta Fecha Participación Virgen de Guadalupe Virgen de la Concepción Navidad Virgen del Carmen San Francisco 12 de diciembre 8 de diciembre 24 diciembre 16 de julio 17 septiembre-12 octubre Semana Santa Fiestas patrias Marzo-abril 15 sep, 20 nov, Fiestas cívicas Vacaciones de verano Rituales gandhianos Thanksgiven “acción de gracias” Fin de cursos Junio-agosto Abril-junio noviembre Independencia de EU 4 julio Catorceños, new agers Catorceños Familiar Catorceños Peregrinos católicos y catorceños comerciantes Catorceños y turistas Turistas norestenses y agentes del turismo (institucional, privado) Catorceños y new agers Turistas y peregrinos New agers y catorceños New agers y amigos-turistas norteamericanos New agers Siguiendo la información de la tabla, podemos observar que los rituales colectivos catorceños están ligados a la vida religiosa católica heredada de los Reales mineros, la de las imágenes santas, aunque podemos constatar que una participación mayor se da en la fiesta de la virgen de Guadalupe, que en la de la patrona, la Purísima Concepción. En la fiesta de San Francisco, participan en algunos momentos del ciclo ritual como habitantes del pueblo, pero la mayor parte del tiempo son comerciantes. Los cumpleaños, rituales terapéuticos, o del ciclo de vida se llevan a cabo entre cada sector de la población. Los rituales que reivindican el patriotismo, entre los new agers, refieren lo norteamericano y la unión familiar (tanksgiven y 4 de julio), y entre los catorceños, son fechas de atracción turística (15 septiembre y 20 noviembre). Solamente dos tipos de rituales colectivos reagrupan a ambos grupos, el de la virgen de Guadalupe y los de los gandhianos. En el primero se festeja a Nuestra Madre y en los segundos, se reivindica una filosofía en busca de la paz del mundo. En el primero, la participación de los new agers se da por la comida que se comparte entre todos, cada uno ofrece lo que vende o los platillos de temporada navideña, como buñuelos, ponche, tamales, etc. En el segundo, al ser convocados por el padre, hacen recorridos por el pueblo como los 14 puntos o el camino de la sal, anunciando la armonía y la paz entre todos en el pueblo. 7 La distinción entre ambas la da justamente la comida, la cual es sinónimo de convivencia para los participantes de la fiesta de la virgen de Guadalupe, mientras que en los rituales gandhianos “ellos no dan comida”, como dice una señora que habita el Pueblo Mágico. Aquí entramos en distinciones importantes en la comida ritual de ambos grupos. El Convivio y la ofrenda Para los catorceños la ofrenda está conformada por las flores, las velas, que se le ofrecen a la virgen de Guadalupe y a otras imágenes santas. La reliquia es la comida que se prepara especialmente para compartir con los participantes de la fiesta para convivir, esta pudiendo ser familiar o colectiva. Una precisión es importante de señalar. En toda la región serrana y de las planicies, los catorceños preparan platillos regionales en la reliquia. Encontramos el asado, el mole, la fritada, barbacoa de res, carnero y carnitas. Desde la época colonial, en estas regiones mineras desérticas, se habla de la importancia de la carne de cerdo y su preparación con chiles secos y especias los cuales funcionaban como conservadores pero también conformaban los platillos de fiestas (Román, 2008). Los habitantes catorceños de Real de Catorce, no están exentos de preparar estos platillos, solamente que por su actividad comercial los hacen para los rituales del ciclo de vida (cumpleaños, bautizos, bodas). No es casual que en la fiesta de la virgen del Carmen del 2011, la reliquia consistió en galletas y refrescos. Una actividad recientemente introducida fue la representación de escenas bíblicas, impulsada por un nuevo sacerdote que llegó a apoyar las actividades de la parroquia. Después de un año de preparación, el evento culminó con la escenificación de las mismas por cada barrio y con reliquia. Aquí los participantes catorceños llevaron, molletes, sándwiches de jamón y pollo, atole de pinole, refrescos y pan. Lo que se destaca en la reliquia es el convivio entre todos, el que es promovido por las imágenes santas y especialmente por la virgen de Guadalupe, fecha en la que tanto catroceños como new agers participan y conviven en la capilla del panteón en donde culmina la procesión. Respecto a la comida ritual de los new agers, para los rituales del ciclo de vida preparan ensaladas, pastas, pan y para los patrióticos, el pastel de calabaza y un guisado de carne 8 de cerdo y alubias. Pero la comida ritual es colectiva entre ellos solamente, en ocasiones puede estar presente algún catorceño pero no es la regla. Concepciones de olores y sabores que se excluyen Hemos visto que la comida ritual posee una diferencia sustancial entre catorceños y new agers. La convivenvia entre ambos grupos que se ha dado ya desde algunas décadas, nos deja ver en el sistema ritual y en la concepción de la comida ritual como convivio, la diferencia entre ambos. Ambas poblaciones se excluyen en diferentes momentos rituales, logrando solamente reunirse en dos fechas. La reliquia de la virgen de Guadalupe y los rituales gandhianos pero en éstos últimos no existe comida con el sentido de convivio. En la convocatoria de los mismos por el padre, deja entrever un nivel de coerción en la participación de los catorceños, no así para los new agers quienes participan emotivamente por los mensajes de paz y los símbolos de unión entre todos los que habitan el pueblo y el mundo. La comida ritual de los catorceños no puede verse aislada de una concepción de fuerza que el cuerpo humano debe adquirir, fuerza asociada a las fases lunares, en donde los olores y sabores se van conformando desde la pequeña edad. ¿Cuál es la relación entre estos olores y sabores con las imágenes santas? Recordando la relación de parentesco que los peregrinos en el desierto (Alvarado, 2008) han establecido por generaciones con las imágenes santas, incluso después de la muerte, sería importante considerarlas en este contexto. De la misma forma, vemos cómo las tensiones sociales y políticas se ven reflejadas en la comida y el sistema ritual de ambos grupos. A lo largo del tiempo dichas tensiones han tenido un carácter diferente. Los catorceños han sido desplazados a las periferias del pueblo vendiendo sus terrenos a estos new agers y convirtiéndose en sus empleados. Ellos mismos dicen que no quieren un San Miguel de Allende, Guanajuanto. Actualmente con el conflicto minero donde los catorceños están por y los new agers en contra de los trabajo de la mina, estas relaciones se han recrudecido. Para los catorceños, el activismo político de los new agers, en el fondo busca continuar fomentando un turismo de élite que tiende a la desaparición de los catorceños, no velan por el bienestar de los huicholes pues sólo hablan de la armonía de la naturaleza y de las costumbres, 9 mientras que los huicholes artesanos, en el pueblo viven hacinados, en condiciones de alcoholismo y nos son motivados para ir a la escuela. Mencionan que los extranjeros solo buscan su bienestar, quieren verse siempre beneficiados pero no ayudan a nadie. Estas reflexiones nos llevan a recordar el estudio que Ossipow hiciera sobre el vegetarianismo y la macrobiótica en suiza (en Nizard, 1999:86) donde la alimentación y un conjunto de prácticas (yoga, taï chi, uso de medicinas suaves, interés por la ecología y el tercer mundo) y representaciones, van aparejados de un militarismo cuyos aspectos económicos y financieros son un verdadero mercado. Sobre los problemas de la mina, los catorceños remarcan que ya desde la época colonial el trabajo en la minería hizo lo suyo y ellos buscan su futuro inmediato, teniendo trabajo. Insisten en que no necesitan que llegue gente de fuera a decirles qué es lo que tienen que hacer, ya que en sus propios países los extranjeros nunca hicieron nada por las injusticias. Recuerdan con insistencia lo que pasó en Cerro de San Pedro, con una supuesta lucha de defensa con gente de fuera, la cual concluyó en que los trabajos de la mina se comieran al cerro. Vemos pues, que los procesos de integración de ambos grupos en este contexto turístico son complejos y tiene aún, una fuerte tendencia a la exclusión en diferentes esferas de la vida de los habitantes de este pueblo, en la que la comida ritual no es la excepción. Bibliografía: Alvarado Solís Neyra Patricia, 2008, El laberinto de la fe, peregrinaciones en el desierto mexicano, Colegio de San Luis, A.C.-Conacyt. Montejano y Aguiñaga , Rafael, 1975, El Real de Minas de la Purísima Concepción de los Catorce, S. L. P, San Luis Potosí, San Luis Potosí : Academia de Historia Potosina. Nizard Sophie, 1999, Ossipow (Laurence) 3ª cuisine de corps et de l’âme –Approche ethnologique du végétarisme, du crudivorisme et de la macrobiotique en Suisse, dans Archives des sciences sociales des religions, volumen 106, Numéro 1, pp. 85-86. Román Gutiérrez, José Francisco, 2008, Los saberes de la tierra. Raíces y tradiciones de la comida zacatecana. Historia de una cocina. Fotografía de Adalberto Ríos Lanz, Sectur, Ideas, Lunwer, Gobierno del estado de Zacatecas. 10