En domingo 11 de febrero de 2007 Ni la Copa del América, ni el Palau de les Arts, ni las Fallas, ni la paella... La imagen de Valencia más vista en el portal de vídeos compartidos YouTube es una gamberrada grabada con teléfono móvil en la que un adolescente humilla a una persona mayor en la Línea 3 del metro. Entre los 100 millones de vídeos que sirve esta web a los más de seis millones de internautas que la visitan a diario hay 9.980 sobre Valencia. La «hazaña» del joven del metro, que ha sido vista en sólo tres semanas por 212.084 internautas y ha provocado nueve vídeos en contra que han recibido 174.768 visitas, es el segundo vídeo en español más discutido de este mes entre todos los del mundo que se comparten en YouTube, con más de mil comentarios. Por otro lado, el vídeo más visto de los 89 que aparecen al teclear «Comunidad Valenciana» es, con 21.411 visitas, el reportaje de TVE sobre los abusos urbanísticos en el litoral valenciano que desató la iras del Consell. Valencia por YouTube 8 EDUCACIÓN 4-5 PATRIMONIO 6-7 HOMENAJE El viaje de la Nau Gran Esplendor en la Catedral El legado de Pellicer Aumenta la matriculación de estudiantes mayores de 55 años Los frescos recuperados ya pueden ser visitados por los valencianos Recuerdo del heredero de Cavanilles, un botánico que divulgó la flora valenciana 2/3 En domingo 11 de febrero de 2007 COMUNICACIÓN La imagen de Valencia en Internet YouTube, una de las 10 webs con más visitantes del planeta, es el paraíso de los que comparten vídeos en la red. Este mes se cumplen dos años de su lanzamiento y entre los 100 millones de vídeos que sirve cada día hay 9.980 de Valencia. El más visto, una gamberrada de un joven en el metro. Rafel Montaner ■ VALENCIA FOTOS: LEVANTE-EMV ADA día, más de seis millones de internautas de todo el mundo teclean en su ordenador youtube.com, una de las 10 webs más visitadas del planeta. Este sitio en la red que permite a los usuarios subir, ver y compartir vídeos, a pesar de que fue fundado hace ahora dos años ya sirve más de 100 millones de pequeñas películas a las que se suman más de 65.000 nuevas cada día. De estos vídeos, 9.980 son sobre Valencia. Ante estas magnitudes, nadie discute que este portal, que atrae el 60% de los vídeos que circulan por la red, es una de las ventanas con más audiencia del planeta. En este sentido, la sorpresa es mayúscula cuando se introduce la palabra Valencia en el buscador de vídeos de YouTube y se encuentra que la imagen más vista entre las 9.980 grabaciones que alberga esta web relacionadas con Valencia, — el triple que, por ejemplo, las de Mallorca, uno de los lugares más turísticos de España— es una gamberrada protagonizada por un adolescente en la Línea 3 del Metro de Valencia. Ni la Copa del América, ni las Fallas, ni la paella... La broma de mal gusto de un joven provocando a una persona mayor en el Metro hasta que éste no puede más y le pega un puñetazo es la imagen que Valencia da al mundo en YouTube. Hace sólo tres semanas que alguien alojó en este portal la hazaña del gamberro, que fue grabada en un teléfono móvil por un amigo que le jaleaba. En 21 días, el incidente en la Línea 3 del Metro se ha convertido en el vídeo sobre Valencia más contemplado en los 24 meses de vida de esta web con 212.084 visitas acumuladas en cuatro filmaciones idénticas. La grabación se inicia en un vagón del Metro cuando una persona mayor, en tono educado y tranquilo, responde a la provocación del protagonista, quien al parecer había subido los pies sobre un C EL PORTAL YOUTUBE RECOGE LOS VÍDEOS MÁS VISTOS POR LOS INTERNAUTAS asiento aguardando que alguien se lo recriminase. La víctima, que iba acompañada por su esposa, pica el anzuelo y le reprueba al gamberro su actitud y le dice que los asientos «son para sentarse». El joven, que en principio se hace pasar por extranjero, empieza a burlarse del hombre y a insultarle hasta que éste, desquiciado, ya no puede más y al grito de «hijo de puta lo serás tú», le asesta un puñetazo en el mentón y le coge por el cuello. La intervención de otro pasajero evita que la pelea vaya a más, pero el joven jaleado por sus amigos sigue insultando a la persona mayor, amenazándole con reventarle la cabeza mientras le llama «abuelo de mierda». La violencia gratuita exhibida por este joven valenciano ha provocado unos 9 vídeos de protesta, realizados, por ejemplo, con cortes de películas de Chuck Norris, o el mismo vídeo doblado con diálogos que ridiculizan al adolescente, que han sido visitados por 174.768 internautas. Además, la gamberrada del Metro, se ha convertido en el segundo vídeo en español más discutido este mes en YouTube al generar 1.052 comentarios y el pasado viernes era el séptimo más visionado de entre todas las grabaciones en español alojadas en YouTube en lo que va de febrero La popularidad de esta web radica en que, al igual que Google Vídeo, permite alojar vídeos personales de manera sencilla y totalmente gratuita. YouTube alberga una gran variedad de clips de películas y programas de televisión, vídeos musicales, y vídeos caseros. Otro factor que juega a favor de su éxito es que los enlaces a vídeos de YouTube pueden ser también puestos en blogs y sitios web personales de internet. La segunda imagen más observada de Valencia en esta web es, con 130.029 visitas, el curioso fragmento de la serie de televisión estadounidense The Unit que emite La Sexta desde diciembre y en la que se retrata a Valencia como una ciudad donde la gente va con boina y los guardias civiles, ataviados Tres de los cuatro vídeos más vistos sobre Valencia en la web YouTube. Arriba, la gamberrada en la que el adolescente en la Línea 3 del metro insulta a una pareja de personas mayores. En el medio, las imágenes de la serie «The Unit», que hacen alusión al «cap i casal», y, por último, el gol de chilena que culminó el «rivaldazo» al Valencia CF en 2002. FOTO: YOUTUBE El valenciano que se muere por vivir en un piso de 30 m2 E muero por vivir en un piso de 30 metros./ Es sencillo de limpiar y en muebles me ahorro un huevo. Me muero por vivir en un piso de 30 metros./ Es muy fácil encontrar lo que se te cae por el suelo./Vivo en un piso que es más pequeño, que el recibidor de Zapatero./ Duermo en un saco de montañero que extiendo encima del fregadero». Con esta letra y una pegadiza melodía empieza el vídeo que ha llevado a la fama al joven universitario valenciano Toni Martínez. Este estudiante de cuarto curso de la Universitat de Valencia solo se ha gastado un euro en confeccionar este divertida parodia de la M propuesta de la Ministra de Vivienda, la socialista María Antonia Trujillo, de construir minipisos de 30 m2 para estudiantes. Toni, cuyo vídeo además de en YouTube se puede ver también en su web (http://www.toniamartinez.com) relata que para realizar esta sátira le bastó «la cámara de vídeo que utiliza para grabar los cumpleaños, un PC con un simple micrófono y el euro que me costó la cartulina que gasto al principio para recortar una casa». Todo esto, además de una dosis de ingenio desbordante, le han valido al joven para conseguir que 211.550 internautas hayan visto su creación desde que la alojó en YouTube el 26 de octubre pasado y además el «clip» musical se haya pasado por las principales cadenas de televisión estatales. «No he hecho esta parodia con intención de ofender a nadie, simplemente quería hacer una crítica con humor. Buscaba un piso de estudiante en Valencia y no en- con tricornios de gigantescas alas, golpean antes de preguntar. Esta tópica imagen del Cap i casal la han visto los 18,5 millones de norteamericanos que ha congregado frente al televisor esta serie de acción sobre un grupo de soldados de las fuerzas especiales y sus familias. La jugada en la que Fernando Alonso saca de la pista del circuito de Cheste al piloto probador de Ferrari, Luca Badoer, en los últimos entrenamientos celebrados en el circuito valenciano, es el tercer vídeo más solicitado. En solo una semana ha hecho las delicias de 111.876 internautas. La cuarta imagen más seguida es el hat-trick que Rivaldo le hizo al Valencia CF en el último partido de la liga 2001-2002. Los tres goles que el astro brasileño le endoso a Cañizares, el último de ellos en una espectacular chilena, sirvieron para dejar fuera de la Champions League al club de Mestalla. Así, cinco años después, el Rivaldazo, se mantiene entre los cuatro vídeos más vistos sobre Valencia con 83.103 visitas. La búsqueda de vídeos por Comunidad Valenciana también arroja el resultado sorprendente de que el más solicitado es el polémico reportaje de Informe Semanal que bajo el título Construcción sin límites analiza los abusos urbanísticos en la Comunitat Valenciana. Alguien ha alojado en YouTube este trabajo periodístico de TVE de casi 14 minutos que desató las críticas del Consell. Con casi 21.500 visitas es el más reclamado de los 89 que hay sobre la C. Valenciana en esta web. Los vídeos más visionados de Castelló y Alicante son grabaciones personales, en el primer caso de Bous al carrer. Entre los 987 vídeos que aparecen en YouTube al teclear Castellón destaca una carrera a plena luz del día entre un Ferrari de 500 caballos y un coche deportivo por la ronda y las calles de la capital de la Plana o el de un joven que bajo el título de Garganta profunda se bebe un cubata sin manos y de un trago . En Alicante, el vídeo con más éxito entre los 2.310 con que cuenta esta web es el de un grupo de jó- contraba nada, así que la ministra me inspiró cuándo dijo aquello de los 30 metros», explica Toni, al que le gusta componer canciones en su ordenador, relata que tras grabar el vídeo con ayuda de unos amigos y de su hermano pequeño, decidió «colgarlo» en YouTube. «Simplemente quería mostrar mi trabajo a la gente», añade. El éxito en internet no le ha sorprendido a Toni, quien el mismo día en el que La Sexta empezó su campaña de publicidad «Opá, viavé el Mundial», llevó a YouTube una antiversión del tema del Koala —un «hit» por cierto surgido de la red— bajo el título «Opa, no viavé el Mundial» ha tenido 161.372 visitas en 8 meses. ■ R. MONTANER. El vídeo más visto sobre la Comunitat Valenciana es, con 21.411 visitas, un reportaje de TVE sobre los abusos urbanísticos en el litoral valenciano venes introduciendo un caramelo de menta de la marca Menthos en una botella de Coca-cola light, una reacción química entre los ingredientes de ambos productos provoca que el tapón salga disparado a gran altura. Pero, además de gamberradas, vídeos personales, o los momentos estelares de los eventos deportivos o películas e incluso vídeos musicales —a pesar de las reglas de la web que prohíben colgar vídeos con copyright, este material existe en abundancia— YouTube es un arma política de primera mano que por el momento solo parece haber sido descubierta por la izquierda valenciana con menos recursos económicos. Así, partidos como el Bloc o la reciente creada plataforma progresista Ja en tenim prou, que está a punto de crear una película colectiva con 50 cortos en la que denunciaran los momentos más os- curos del PP, han encontrado en la red el vehículo perfecto para difundir sus mensajes. Alguno de estos vídeos, como el Réquiem per un poble creado por el colectivo Salvem Catarroja ya ha tenido unas 300 visitas en YouTube. Artur Velez, miembro del área de comunicación del Bloc, coordinó el vídeo de animación Ja n’hi ha prou, una grabación en la que se critica la gestión de los populares en la Comunitat y que en 6 meses ha sido visitada por más de 10.000 internautas no solo en YouTube, sino también en los portales de vídeos compartidos de los buscadores Google y Yahoo. Velez destaca que este canal de difusión «económicamente es muy rentable, porque a un coste muy bajo se puede conseguir un gran impacto publicitario». La organización juvenil de este partido, el Bloc Jove, ha lanzado un concurso de vídeos en la red que bajo el título Adéu PP, «ya ha recibido unos 15 cortos que se subirán en breve a la red». El éxito de esta plataforma, que concentra las dos terceras partes de vídeos que viajan por internet, se puede calibrar en el hecho de que convirtió a sus creadores, Chad Hurley y Steve Chen, en dos de las personas más ricas de EE UU cuando el 10 de octubre pasado vendieron YouTube al gigante Google por 1.650 millones de dólares, unos 1.270 millones de euros al cambio actual. El Xiquet Alemany, humor Made in Valencia en la red E L Xiquet Alemany, seudónimo bajo el que se oculta un universita- rio valenciano de 27 años, empezó hace seis meses a alojar vídeos en YouTube en los que parodia la política y a los políticos valencianos. Los 49 vídeos que ha realizado subtitulando grabaciones de películas, anuncios o «clips» musicales han creado, como el mismo dice, «una falla en internet donde se recupera la sátira política que se ha perdido en las reales». El éxito de su crítica, que no deja títere con cabeza ni a derecha ni izquierda, se mide en las 55.577 visitas que han recibido sus vídeos. La última grabación, que el miércoles envió a YouTube, es una en la que parodia a Carlos Fabra, presidente de la Diputació de Castelló, con imágenes de la película «El Padrino». Entre las que más impacto ha causado destaca «GodzRita», un vídeo en el que a partir de un anuncio chino ha convertido a la alcaldesa de Valencia en el mítico dinosaurio Godzilla que destruía las ciudades en las cintas japonesas de serie B de los años 70. Joan Ignasi Pla, satirizado con imágenes de la película «Conan El Bárbaro», tampoco se escapa de este pimpampum. El difícil «parto» del Compromís, el pacto electoral entre Bloc y EU, también es uno de sus temas preferidos. Así, con imágenes de los teletubbies, que él convierte en los «valentubbies» parodia a los negociadores del acuerdo o con el fondo de «El Exorcista» retrata al Bloc convertido en un cura intentando sacar el «demonio» del comunismo de la niña, a la sazón EU. El Xiquet, que toma su alias de unos de los vídeos más famosos de YouTube en el que un enfadado niño alemán golpea un PC porque no se le carga un juego, dice incluso ha recibido un e-mail de felicitación enviado desde la redacción de RTVV «en el que me dicen que les gustaría hacer vídeos de humor político como los mios en Canal 9, pero no pueden». ■ R. MONTANER. Carlos Marzal COMPLICIDADES Manías de escritura OS dueAlgunos ociosos –atareados siempre en sus conjeturas sobre los asombros de la realidad, por mínimos que parezcandefienden que la escritura a mano es la única verdadera bajo la capa del cielo. Yo, que he querido figurar desde la infancia en la mesnada de los ociosos sin demasiadas obligaciones –pero que me he visto en la obligación de pertenecer a la común cofradía laboral, con trabajos más o menos respetables-, no sé muy bien qué opinar sobre asuntos de tanta sutileza. Como aspirante a escritor – que es el único estatuto que se puede arrogar alguien que escribe-, me interesan casi todos los asuntos relacionados con la literatura, incluidos los anecdóticos que viven en su periferia. Digamos que me interesa lo literario y lo legendario; la literatura y lo que de literario tienen a veces los aledaños de la literatura. Me interesa, pongamos por caso, identificar los libros que aparecen en esas fotografías, tan de escritor, con anaqueles al fondo, y que tienen por lo general un aire de ternura mitad cinegética, mitad bibliográfica: aquí están mis trofeos de caza, mis leones de la imaginación, mis elefantes del pensamiento, mis aves gráciles de la poesía, aquí está mi paisaje, las piezas que me cobro. Me gusta conocer las ceremonias menores de la creación L –porque no hay hombre sin su ritual y sin su aspiración a sacralizar su pequeño mundo de lo cotidiano: saber si alguien escribe con música o en silencio de eremitorio; con luz artificial o con el sol que inunda su despacho y cae sobre la mesa trazando la línea divisoria entre la interioridad y la exterioridad de la conciencia; si lo hace en pijama, o en batín de japonerías estampadas, o en chándal, o vestido de punta en blanco para la ocasión; si escribe de pie sobre una cómoda (en lo que para mí resulta una paradoja del confort estilístico-mobiliario), o si lo hace tumbado en la cama (lo que representa según creo una disculpable blasfemia para con las deleitosas funciones talámicas). Soy un curioso de las ebriedades del ebrio –el filósofo adicto a la cafeína, el poeta sometido a la nicotina, el narrador entusiasta de la heroína-, y de las ebriedades del sobrio – el filósofo madrugador, el poeta anda- El estilo, en definitiva, es para algunos el hombre, la sombra del temperamento, o mejor dicho, su imagen el espejo de lo que escribe. riego, el narrador deportista. Lo hago por apetito de chismoso, por vocación fabuladora, y porque creo que la mayor parte de las veces una manía dice tanto como un teorema, y una tara del carácter nos explica el carácter de un sistema de pensamiento como el sistema no acierta a hacer. Cometida esta digresión, confieso que no sé muy bien si la forma en que ejecutamos la escritura tiene alguna repercusión en la escritura misma, alguna consecuencia de orden estilístico. Aunque lo cierto es que hay quien lo supone, y suponerlo, en estos casos, equivale a que suceda así (estar convencido de algo representa otorgarle corporeidad, aunque se trate de una fantasmagoría). El estilo, en definitiva, es para algunos el hombre, la sombra del temperamento, o mejor dicho, su imagen el espejo de lo que escribe. Podría ser, pero podría ser también lo contrario, porque llegados a esta altura del artículo se me desata el ardor escéptico, que es como cualquier otra manía de la inteligencia, tal vez provocada por alguna manía menor del comportamiento. Quién sabe. Conozco a un escéptico recalcitrante que cuando tiene que construir un enunciado en el que se emita un juicio, construye también su contrario, y después, para ser ecuánime consigo mismo y con el temple que le adjudica al universo, echa a cara o cruz cuál será el que se imprima. Oscar Wilde 4/5 En domingo 11 de febrero de 2007 Alfons Cervera Renacen los frescos de la Catedral DESDE LA FRONTERA Futbolista H Los frescos renacentistas del siglo XV, obra de los pintores de cámara italianos Paolo de San Leocadio y Francesco Pagano, ya pueden contemplarse en la Catedral de Valencia. Dos años y medio después de su hallazgo en la cúpula del Altar Mayor de la seo, los ángeles restaurados se proyectan en todo su esplendor y belleza. Valencia recupera así una obra histórica y de gran relevancia artística que provoca admiración. Anabel Blancas ■ VALENCIA FOTOS: FERNANDO BUSTAMANTE L AS pinturas bendecidas por el arzobispo Agustín García-Gasco en presencia del presidente de la Generalitat, Francisco Camps y la alcaldesa, Rita Barberá, el pasado jueves, fueron halladas en junio de 2004 durante los trabajos de restauración de la bóveda. Los ángeles ocupan la práctica totalidad de la bóveda gótica original del presbiterio, cuya superficie es de más de 100 metros cuadrados. La existencia de estos frescos era conocida por los técnicos ya que figuran en los Archivos del Cabildo, aunque se desconocía su estado de conservación después de 350 años ocultos detrás de la falsa bóveda del siglo XVIII que construyó el arquitecto Pérez Castiel. Las pinturas fueron realizadas por los dos artistas italianos por encargo de la Iglesia, a instancias del obispo de Valencia, Rodrigo de Borja, quien más tarde se convertiría en el Papa Alejandro VI. Rodrigo de Borja viajó a Valencia para autentificar el matrimonio de los Reyes Católicos y con él, los dos pintores. En aquella época, Valencia se convertía en la principal puerta del Renacimiento italiano. Sus trabajos se prolongaron durante nueve años, de 1472 a 1481, tres más de lo contemplado en el contrato. Paolo de San Leocadio (14471519) es de los dos, el pintor más relevante. Muchos de sus cuadros cuelgan de los museos más importantes del mundo como el National Gallery de Londres o el Prado. También el Museo de Bellas Artes de Valencia exhibe sus obras, la mayoría, de temática sacra. San Leocadio fue uno de los introductores en España del renacimiento romano. Las novedades que incluye son importantes como los fondos en perspectiva geométrica que producen sensación de realidad tridimensional, la calidad de los tejidos y los volúmenes que, en el Carmen Pérez, Rita Barberá, García Gascó, Francisco Camps y Alejandro Font de Mora, el pasado jueves, en el acto de presentación de los frescos renacentistas de la Catedral. El dibujo, el detalle y el color indican la calidad de la obra. El tiempo y nuevos estudios permitirán una valoración exacta, aunque nadie duda de que se trata de una de las obras cumbre del Cuatroccento italiano. caso de la técnica llega a ser prodigiosa. Tanto él como Pagano mostraron la gran influencia de Leonardo. Con estos frescos, San Leocadio parece entrar por la puerta grande en la historia del arte, reivindicando un puesto de honor en el Renacimiento. Con la presentación al públi- co de las pinturas renacentistas, se cierra el debate sobre su futuro. La bóveda barroca descansará en otra parte. Y los ángeles no volverán a las tinieblas. La Catedral de Valencia seguirá siendo lo que ha sido siempre, un modelo de coexistencia de estilos. cambio los tercios más habituales de esta columna y escribo de fútbol. El fútbol. Esa mezcla de gritos apasionados en las gradas y directivos que estampan firmas de corrupción y especulación inmobiliaria al pie de aquella pasión a ratos demasiado acalorada. Las mejores novelas policiales saldrían ahora, no de las cuentas sangrientas de la mafia siciliana, sino de los entresijos burocráticos de los clubes. El fútbol. Cuando joven yo andaba por esos campos del diablo, terrosos y con piedras en lugar de la hierba posmoderna, intentando que desde mi posición de defensa central con algo de clase (eso decían) el balón entrara las menos veces posible en la portería que tenía a mis espaldas. Incluso estuve a punto de entrar en la plantilla de un club bastante grande pero decidí quedarme con mis amigos y seguir disfrutando en casa los domingos por la tarde. Algunos ídolos de entonces siguen en mi memoria: Gensana y Antonio Calpe a la cabeza, luego ya los clásicos, Kubala, Di Stefano, Puchades. Y por encima de todos ellos, mi querido Vicent Adriá, que si no hubiera sido por una leve lesión cardiovascular que le detectaron cuando los dos jugábamos en el Llíria CF habría llegado a ser mejor que Johan Cruyff, a cuyo juego se parecía el de mi amigo como dos gotas de agua. Hoy el fútbol es otra cosa bien distinta. No me interesa casi nada. Mucho rollo con las nuevas tácticas, pero todas se resumen en una: no perder el partido. Estrategias defensivas a mogollón y un sólo atacante que se desenvuelva en la soledad miedosa del área enemiga. Eso no es fútbol sino la condena a perpetuidad de la libertad creadora que esgrimían los viejos futbolistas. Pero bueno, en ese paisaje desolador siempre hay algo -alguien- que ofrece a la afición una señal inviolable de sentido común, de fuerza física, de ética futbolística puesta a disposición de la victoria, una victoria que devendrá más moral que nunca si ha dejado en el césped la huella de sus botas. Hablo ahora mismo de David Albelda. Si él juega, funciona mejor el Detalles de los frescos. Arriba, una visión general de los mismos. OY equipo. Se ha demostrado en las semanas que anduvo de baja y cómo todo ha cambiado a su vuelta. Sin embargo, los extraños comportamientos del presidente y el director deportivo del Valencia CF (¡señor, qué cruz!) nos sumen en la perplejidad: no sé a qué viene tanto marear la perdiz con que si se le amplía o no el contrato. Tanto dinero gastado en operaciones raras -deportivas y no deportivas-, para que se ningunee abruptamente a un tipo que es, además de un gran futbolista y según me cuentan quienes lo conocen, una excelente persona. Los gritos del público en el viejo Hablo ahora mismo de David Albelda. Si él juega, funciona mejor el equipo. Se ha demostrado en las semanas que anduvo de baja y cómo todo ha cambiado a su vuelta. FOTO: MANUEL MOLINES Mestalla levantaban la otra noche el nombre de Albelda y lo dejaban caer en el palco vip donde viven de lujo los dueños del club. A lo mejor esos dueños estaban pensando en la mala racha que atraviesa el pelotazo de Porxinos y no se enteraron del reclamo que retumbaba contundente en las gradas. El fútbol es una mierda en lo que tiene de mafia siciliana. Pero gente como David Albelda y algunos otros (ahí mismo el joven Raúl Albiol) hacen que esa mierda huela menos. Incluso a ratos hacen que huela bien y que disfrutemos con ella. Y eso, para quien todavía aspira a disfrutar del fútbol en su estado más puro, es de agradecer. Esta columna quiere ser eso, una muestra de gratitud a quienes siguen saltando a un campo de fútbol con las ganas de dotarlo de una cierta dignidad individual y colectiva. De alma, en definitiva, de un alma que hoy por hoy, en esa maraña oscura de los clubes de fútbol, brilla lamentablemente por su ausencia. 6/7 En domingo 11 de febrero de 2007 HOMENAJE ESTA SEMANA FALLECÍA EL BOTÁNICO VALENCIANO MÁS POPULAR, DIVULGADOR DE LA FLORA AUTÓCTONA Joan Pellicer, el heredero de Cavanilles El pasado lunes nadie quería creer. Nadie quería dar crédito a la noticia que, surgida de un apartamento de la playa de Miramar, recorría toda la Safor de teléfono en teléfono. Joan Pellicer i Bataller, el médico, el botánico, el etnólogo, el paseante, el naturalista, el cascarrabias y amante de las plantas, el hombre silvestre que acumuló una inmensa sabiduría de la naturaleza y sus gentes, había fallecido meses antes de cumplir los sesenta años. Se había ido el etnobotánico valenciano más popular desde Cavanilles. Sergi Sapena ■ GANDIA FOTOS: JESÚS ESCRIVÀ/JOAN PELLICER FOTO: J. PELLICER El río Serpis, entre Villalonga y l’Orxa, imagen que ilustra el libro «De la Mariola a la mar». El Estret de les Aigües, entre la Vall d’Albaida i la Costera. FOTO: J. PELLICER Amanecer en la desembocadura del río Serpis (Gandia). FOTO: J. PELLICER Arriba, los «frares» de la Serrella (el Comtat) con una «escabiosa de cingle» fotografiada por Pellicer. Joan Pellicer, en primer término, en una de sus innumerables excursiones didácticas por el «territori diànic». FOTO: J. ESCRIVÀ Escrivà, amigo de la infancia y colaborador en algunos de sus libros, destacaba el viernes, dos días después de asistir al entierro de Joan Pellicer, que este doctor en medicina y cirugía no había nacido para sentarse en un sillón y atender en una consulta. Su vida, casi siempre metida en un halo de soledad, estaba destinada a observar, escuchar y narrar en un estilo único y sencillo, agradable y contundente, secretos de la naturaleza y sus paisajes que arrancaba en decenas de pueblos entre quienes habían vivido siempre en íntima relación y respeto con un mundo que desaparece a marchas forzadas. Pellicer era, en muchos sentidos, un personaje singular. Capaz de hablar durante horas de una sola planta, de un árbol centenario o de un paraje desconocido para la mayoría de los mortales, hasta principios de los años noventa se había limitado a publicaciones sencillas de limitada distribución. En 1991 la Universitat Popular de Gandia publica el Herbari breu de la Safor. En esta obra lo de breve es una paradoja porque el botánico describe con una precisión que nadie había hecho antes decenas de plantas, sus mil y un nombres, sus propiedades curativas y sus características. Tres años después, ya siendo un personaje conocido y popular, dedica una obra a su pueblo, Bellreguard, verd esguard. Es entonces cuando se presenta al Centre d’Estudis i Investigacions Comarcals Alfons el Vell de Gandia para transmitir a su director, Nèstor Novell, que tiene en mente una gran obra y pide ayuda para editarla. Se trata de Meravelles de Diània, que va surgiendo página a página, foto a foto, con la ayuda de Maite Sastre, dedicada durante meses en cuerpo y alma a colaborar en el ardua labor de J ESÚS extraer la sabiduría que Pellicer había acumulado durante años. Cuando se publica, «Meravelles de Diània» sorprende. Joan Pellicer no sólo narra y describe nueve parajes de seis comarcas valencianas, sino que contagia al lector en el desconocido mundo de los nombres. Cada lugar, cada piedra, cada planta, cada senda, cada fuente, cada huella humana es un mundo en sí mismo, y todo el libro queda convertido en una poesía descriptiva que atrapa. «Es usted más brujo que botánico», le espetó un asistente a una de sus charlas, sorprendido por la inmensa sabiduría sobre las plantas Esa obra, que se convierte en su mejor tarjeta de presentación, le abre las puertas a posteriores trabajos, entre los que destaca «De la Mariola a la mar», un viaje integral por el río Serpis y la cultura de sus pueblos de ribera. Después llegaría su Flora pintoresca del País Valencià y el Costumari botànic, editado en tres volúmenes y convertido en la obra más completa sobre las plantas que pueblan la geografía valenciana. Pese a ser poco amante de los premios, en 1999 recibe con satisfacción el Bernat Capó por su labor «en la difusión de la cultura popular», y en 2002 el Ayuntamiento de Pedreguer le entrega el Premi d’Honor de Cultura Popular. El año pasado la Mancomunitat de la Valldigna también destacó su contribución al conocimiento de la botánica y la naturaleza. A Sus colaboraciones en televisión, primero en Gandia TV y después en el programa Medi ambient, de Punt2, elevarían su popularidad más allá de las comarcas montañosas que arropan el curso del río Serpis, un escenario que conocía palmo a palmo con una precisión irrepetible. Son miles las personas que, en decenas de charlas, cursos y paseos, han aprendido a amar la naturaleza y a saber ver en cualquier planta todo un mundo de nombres y sabiduría que casi siempre pasaba desapercibido. Los organismos con los que más colaboró, como el centro Alfons el Vell, la Universitat Popular de Gandia, el Col·lectiu de Mestres de la Safor, y decenas de colegios, institutos y asociaciones, han mostrado su pesar por su repentina pérdida. Núria Sendra, en nombre de Edicions Bullent, que reeditó en 2002 Meravelles de Diània y publicó su Costumari botànic y otras obras, no duda en señalar que «Joan Pellicer era, sencillamente, un genio, un hombre que por la mañana sacaba cul- tura de un pastor de cabras y por la tarde se sumergía en un tratado botánico de una dinastía china desconocida para la mayoría de nosotros». A nadie le cabe la menor duda de que, pese a lo publicado y a lo que haya podido dejar escrito, con él se ha ido una inmensa cantidad de información que quedará oculta para siempre. En una de sus charlas divulgativas, muchas veces abarrotadas de un público que no se movía del asiento hasta la última palabra, tuvo que escuchar de boca de un hombre que había quedado sorprendido: «Me parece que es usted más brujo que botánico. Nadie puede saber tanto de las plantas a no ser que haya descubierto cómo hablar con ellas». La muerte le ha pillado preparando una expedición a México, en donde tenía previsto arrancar secretos a los cactus del desierto, pero ahora tendrán que seguir esperando quién sabe cuántos años, bajo el sol abrasador, a que llegue otro sabio solitario que sea capaz de aprender su idioma. El poeta de su inventada «Diània» UNQUE Joan Pellicer era un experto en botánica general y especialmente en la valenciana, no cabe duda de que su mundo más inmediato, del que consiguió ser un auténtico sabio, era el territorio comprendido por las comarcas de la Safor, la Marina, el Comtat, l’Alcoià, la Vall d’Albaida y la Costera. Ese espacio, que ha intentado ser bautizado con el nombre de Comarcas Centrales Valencianas, se convirtió en la pasión de su vida, y él lo convirtió en el territori Diànic o, simplemente Diània, denominación que adoptó «atendiendo a razones de pura sonoridad». Bajo ese epígrafe surgió Meravelles de Diània, sin duda la obra más acuradamente preparada de su bibliografía, en la que Pellicer describe sendas y caminos, plantas e iglesias, topónimos y milagros, personajes y paisajes urbanos. Narra desde la visión que tuvo Cavanilles hace doscientos años hasta su llanto por las agresiones a espacios naturales y patrimonio histórico de indudable valor. Todo ello en un estilo que le lleva casi a inventar las palabras, en una belleza narrativa que transpira, página a página, su amor por todo lo descrito. Dos años después, en A 1997, Pellicer intentó repetir esa creación en De la Mariola a la mar. Viatge pel riu Serpis. Los dos libros se agotaron rápidamente, aunque Meravelles de Diània fue reeditado por Bullent en 2002. Como ejemplo de su sencillez y poética casi romántica, valga la descripción que hizo de una fotografía que muestra un simple amanecer en la playa de Gandia: «Gola del riu Serpis entre la màgia de les canyes emplomallades i l’or novell del sol naixent. El bes de les aigües del riu i de la mar, l’abraç de la foscor de la nit i de la claror de l’aurora». Joan Pellicer fue, entre otras muchas cosas, un poeta de la naturaleza y de la sencillez y, evidentemente, el mejor poeta de su querida Diània. ■ S. SAPENA. Carmen Amoraga [email protected] PALABRAS MÁS, PALABRAS MENOS Diferencia va de tanto tiempo viendo House, Anatomía de Grey, Urgencias, y hasta Hospital Central, una se había hecho a la idea de que los hospitales son sitios como los de las series de la televisión, sitios en los que reina la humanidad, las ganas de curar a la gente, la voluntad de ayudar a los demás, los medios para hacerlo. Qué va. No hay más que pasar un día cualquiera por las urgencias de un hospital cualquiera para comprobar que George Clooney no está por ahí ni de casualidad, que la humanidad termina donde empieza el dolor, y que las ganas de curar y la voluntad de ayudar chocan estrepitosamente con los medios para hacerlo, que deben estar por donde Clooney, es decir, en otro lugar. No lo digo por meterme con el personal. Ellos hacen lo que pueden. Lo comprobé el otro día, cuando pasé ocho horas en urgencias. Fui con mi padre. Entró con 26 de tensión. Pasaron noventa minutos antes de que empezaran a atenderle. Después, seis horas y media más. Estuvo sentado en una silla, codo con codo con otros pacientes en su misma situación: una mujer que esperaba desde hacía cuatro horas los resultados de unos análisis; un hombre que aguardaba el alta desde hacía dos; los familiares de un abuelo que pedían con desespero un tranquilizante para él cada vez que alguien con pinta de médico o enfermero pasaba por delante de ellos y que no conseguían nada de nada. Y así hasta el infinito, siempre con la misma respuesta para todos: yo hago lo que puedo. Y es la pura verdad: con los mimbres que tienen hacen lo que pueden. Sólo con responder a los que les preguntan si falta mucho para que les atiendan, si tienen ya sus resultados o si eso es de verdad de la buena el servicio de urgencias, ya tienen bastante. Luego está lo de examinar al paciente, lo de averiguar qué le pasa y por qué, lo de pedir que le hagan esta prueba o esta otra para descartar males mayores, lo de tener en cuenta a los acompañantes y darles información puntual, etcétera etcétera, que también lleva su tiempo. D ESPUÉS Yo lo comprendo. Aunque en caliente me enfade con ellos, como casi todos, en frío les comprendo. No es su culpa. Qué más quisieran que ser más, que ganarse la vida en condiciones, sin jugársela a cada rato, que tener dinero y medios para que su trabajo no fuera de alto riesgo. Pero, claro, un hospital público no es importante. A no ser que sirva para salir en una foto, qué sé yo, por ejemplo, detrás de un cirujano eminente que acaba de hacer el milagro de transplantarle las manos a una mujer. Pero eso pasa tan pocas veces, pero tan No hay más que pasar un día cualquiera por las urgencias de un hospital cualquiera para comprobar que George Clooney no está por ahí ni de casualidad. pocas, que es mejor gastarse el dinero de todos en que un conductor de fórmula uno se de una vuelta de ocho minutos por las calles de la ciudad, o en levantar proyectos efímeros, o en construir teatros que pierden el escenario antes de ser inaugurados. Es mucho mejor. Da muchas más fotos. Diferencia va. Por eso, yo, aunque sé que me después me arrepentiré de lo que voy a escribir, el día que vuelva a un hospital, antes de encontrarme de frente con Hugh Laurie, el de House, o con George Clooney, el de Urgencias, antes de echarme a la cara a cualquiera de estos médicos buenorros de mentiras, preferiría mil veces darme de bruces con el conseller de sanidad. Más que nada para que me dijera en mi cara, y en la de los médicos, enfermeras y demás pacientes, que urgencias se colapsa porque los usuarios vamos para allá sin ton ni son y no porque se necesite más personal. A lo mejor, después de echar un vistazo a mi alrededor, hasta me convence. Cosas más extrañas se han visto. George Clooney. FOTO: EFE Última En domingo 11 de febrero de 2007 EDUCACIÓN AUMENTA LA MATRICULACIÓN DE ALUMNOS MAYORES DE 55 AÑOS EN LA UNIVERSIDAD El viaje de la Nau Gran Cuando en octubre de 1999 se inauguró el curso académico de la Universitat de València, algo era diferente respecto a cursos anteriores. Setenta y siete de los cuarenta mil alumnos que se matricularon aquel año tenían más de 55 años. Comenzaba la aventura de la Nau Gran, y, tras siete años de singladura, ya son más de mil sus alumnos. Remei Castelló ■ Los alumnos de la Nau Gran están familiarizados con las nuevas tecnologías, pero también son usuarios de las bibliotecas universitarias. VALENCIA FOTOS: LEVANTE-EMV curso 2006-2007 se han matriculado mil alumnos y la demanda sigue en aumento. Los cuatro itinerarios con los que se empezó (Filología, Arte, Geografía e Historia y Filosofía) se han ampliado a siete (agrupando algunas de las anteriores e incluyendo Ciencias Básicas, de la Salud, Económicas y Jurídicas). Y la propuesta de tres años que dura cada uno de estos ciclos se encontró con la reivindicación de los alumnos que no querían finalizar el ciclo y demandaban una ampliación. “Vimos que al final cuatro años no serían suficientes, nos pedirían un quinto. Al final decidimos que los itinerarios duran tres cursos pero cabe la posibilidad de que los alumnos continúen un año más matriculándose de optativas”, explica Sacramento Pinazo, responsable del programa. E STE COMPARTIR APUNTES CON LOS MÁS JÓVENES.Todos los profesores destacan la ilusión con la que cada año este grupo de alumnos empieza el nuevo curso. “No se pierden una clase. Comparten los apuntes, se ayudan entre sí”, afirman. Un compañerismo y una ilusión que tiene sorprendidos a los alumnos más jóvenes, con los que comparten aulas y diversas asignaturas. Desde la Nau Gran se ha previsto una relación intergeneracional con los alumnos denominados de titulación, o sea alumnos más jóvenes que estudian una carrera. Una iniciativa que cuenta con una gran acogida entre ambos colectivos de estudiantes. Esta complicidad viene avalada por la concepción de una exposición sobre la Nau Gran. La sorprendente evolución que ha experimentado el programa en siete años ha servido para que la Uni- nerante por lo que se podrá ver en breve en otras sedes que la Universitat tiene en poblaciones como Gandia o Ontinyent, y en las que tienen presencia estos estudios a través del programa la Nau Gran als Pobles. Los paneles y las fotos de la muestra recogen momentos robados a los alumnos en las aulas, pero también hay apartados dedicados a contrastar la educación de estos alumnos en época escolar o bachillerato y cincuenta años después en la Universitat. Desde la Nau Gran se ha previsto una relación intergeneracional con los alumnos denominados de titulación, o sea, alumnos más jóvenes que estudian una carrera. versitat de València muestre, a través de una exposición, la intensa trayectoria de este programa, los secretos de su éxito, los entresijos, el día a día de los alumnos, la relación con los compañeros más jóvenes, las historias personales o los proyectos de futuro de algunos de los matriculados. Para el montaje de la muestra se creó una comisión de carácter intergenera- cional. Sacramento Pinazo y José Beltrán, comisarios de la muestra, destacan los resultados positivos de esta comisión: “A la hora de trabajar no se percibía la diferencia de edad, al contrario, ésta había desaparecido”. La exposición titulada El viatge de La Nau Gran se clausuró la pasada semana en el edificio histórico pero está concebida como una muestra iti- ANÉCDOTAS ENTRE LIBROS. Las historias personales que se pueden encontrar en la Nau Gran no dejan indiferente a nadie. Si se visita la exposición o se recorren los pasillos y las aulas de la Universitat agudizando el oído se puede a acceder a anécdotas, vivencias y sueños de los alumnos más veteranos. Como ejemplo cuatro historias de la vida de los alumnos de la Nau Gran y el ejemplo de cómo algunos de ellos han dirigido su vida hacia el envejecimiento productivo, ¿como?, inscribiéndose en programas de voluntariado, como es el caso de dos alumnas, una que colabora en una asociación de familiares de enfermos de Alzheimer, o el caso de otra de ochenta años que es voluntaria en el barrio del la Coma. Otra alumna, a partir de una clase de historia comenzó a indagar en el pasado de su padre y está preparando un libro sobre la República y el franquismo. Pero no son las únicas historias. Muchos alumnos de Historia del Arte son voluntarios culturales y muestran los tesoros de la Universitat y de la misma Valencia como guías. La mayoría de los alumnos cuando finalizan un itinerario comienzan otro, pues como ellos dicen “el saber no ocupa lugar”. “Muchos de ellos ya han realizado tres itinerarios y como aún les quedan algunos dicen que ya saben lo que harán los próximos 21 años”, indica Pinazo. Destacan el buen ambiente de trabajo y de diversión que les envuelve. Para este programa no hay límite máximo de edad y si no que se lo pregunten a Carlos Romeo que a sus cerca de noventa años y siendo el estudiante de mayor edad, acaba de colaborar en un libro que se ha editado con motivo de la exposición. La implicación de estos alumnos es tal que una de las alumnas ha puesto la voz a un documental sobre la Nau Gran que ha editado la Universitat. Incluso algunos profesores de la Universitat ya jubilados se han apuntado a la Nau Gran para realizar estudios vocacionales. Así, médicos jubilados cursan estudios de Humanidades, Filosofía, Arte, Historia, Economía, i otros alumnos se decantan por ciencias básicas o sociales. Uno de esos casos es el de Amando García, profesor de Física de la Universitat, ha estudiado Historia del Arte junto a su mujer y ahora ella es voluntaria cultural en el Museo de Bellas Artes.