59 tema 3º. la expresión plástica infantil: génesis y desarrollo.

Anuncio
TEMA 3º. LA EXPRESIÓN PLÁSTICA INFANTIL: GÉNESIS Y DESARROLLO.
Extracto de los capítulos 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9 y 10, del libro:
Kellogg, Rhoda. (1989). Análisis de la Espresión Plástica del preescolar. Editorial Cincel, Madrid.
LOS GARABATOS BÁSICOS:
¿Es un componente esencial el interés visual en el garabateo?.
Los garabatos básicos son veinte clases de trazos realizados por niños de dos años, e incluso
menores. Estos movimientos muestran variaciones de la tensión muscular que no requieren control
visual.
También los animales pueden, mediante arañazos, trazar líneas sobre una superficie, pero ninguno
de ellos puede hacer todos los mencionados garabatos. Para hacerlos se necesita un sistema
muscular y nervioso como el humano, de donde se desprende que la capacidad para formar todos
estos garabatos no es una adquisición reciente de la especie. Así pues el niño que no puede
hacerlos revela en sí mismo alguna deficiencia mental o física.
Los veinte garabatos básicos constituyen los cimientos del arte, y su importancia reside en que
permiten una descripción detallada y global del trabajo de los niños pequeños.
Garabato 1
Garabato 11
Garabato 2
Garabato 12
Garabato 3
Garabato 13
Garabato 4
Garabato 14
Garabato 5
Garabato 15
Garabato 6
Garabato 16
Garabato 7
Garabato 17
Garabato 8
Garabato 18
Garabato 9
Garabato 19
Garabato 10
garabato 20
Estos garabatos se hacen alrededor de los dos años de edad y luego se emplean con fines
artísticos.
Las primeras en aparecer son las denominadas líneas múltiples, y a partir de ellas después se logra
el control también de las llamadas simples. El artista adulto utiliza las líneas múltiples para sombrear
y el niño para colorear los dibujos. Tanto el uno como el otro utilizan las líneas simples para la
delineación de las formas.
Es difícil a veces hallar ejemplos claros de cada garabato en la obra de los niños de dos años, pues
a esa edad suelen superponerlos. Con frecuencia cambian de dirección de la mano, probablemente
para evitar la fatiga muscular y ello suele provocar cambios en la forma de estos garabatos.
LOS PATRONES DE DISPOSICIÓN.
Los garabatos no necesitan control ocular, ya que pueden hacerse sin que el ojo del niño guíe su
mano; más aun, el niño puede hacerlos aunque no pueda ver. Sin embargo, los patrones de
disposición requieren tanto la capacidad visual como la guía de la mano por parte del ojo. Relaciona
de alguna manera tamaño y ubicación de los garabatos con el soporte o superficie, y comienza a
agrupar los garabatos en apariencias predeterminadas.
59
P1. Global
P7.Mitad
diagonal
P13.Arco de
dos ángulos
P2.Centrado
P8.Mitad
diagonal
alargada
P14.Arco de
tres ángulos
P3.Bordes
espaciados
P9.Eje diagonal
P15.Pirámide
de dos
ángulos
P4.Mitad
vertical
P10.División
de dos tercios
P16.A través
del papel
P5.Mitad
horizontal
P11.Cuarto
de página.
P17.Abanico
sobre línea
de base
P6.Equilibrio
bilateral
P12.Abanico
en un ángulo
Según la experiencia de la profesora Kellog, los niños prefieran el formato apaisado, de forma que el
papel sea más ancho que largo. La importancia de los patrones de disposición estriba en el curso del
desarrollo evolutivo que de ellos se desprende. Los patrones son la prueba más temprana de control
en la formación de figuras que se halla en el arte infantil. Los patrones sugieren deliberados medios
círculos, cuadrantes, rectángulos, triángulos, arcos y variadas formas irregulares.
Desde los veinticuatro meses los niños guían con frecuencia sus movimientos a la hora de
garabateas, de forma que los trazos se ajustan a patrones definidos. Estos patrones nacen
espontáneamente, el niño los hace sin ser dirigido y sin copiar, y son a menudo una respuesta al
estímulo visual del proceso de garabatear. Los patrones sugieren figuras a las que dará luego cuerpo
el niño rellenando una superficie o dibujando un contorno.
Los niños perciben y recuerdan aquellos garabatos que evocan figuras; los que no las evocan no se
recuerdan tan fácilmente. Las figuras que encontramos en el arte infantil tienen su origen en las
percepciones de los niños en relación con sus propios garabatos.
El psicólogo de la Gestalt W. Kholer, ha propuesto la hipótesis de que hay ciertas funciones
fisiológicas del cerebro responsables de la tendencia a organizar los datos visuales en figuras
agradables o "buenas", esto es que tengan simetría, sencillez y regularidad.
LAS FORMAS DE DIAGRAMAS NACIENTES.
Hacia los dos años de edad, los niños suelen disponer algunos garabatos en patrones de disposición
definidos, situando sus dibujos en relación con los bordes del papel. A los tres años hacen
diagramas mediante líneas simples que forman cruces y delinean círculos, triángulos y otras figuras.
A los Diagramas les preceden unas estructuras que podríamos llamar formas de Diagramas
Nacientes.
E1. Líneas múltiples
que se cruzan.
E5. Cruces de líneas
paralelas.
60
E2. Cruces de líneas
múltiples levantando
el lápiz.
E6. Líneas multicruzadas, cruces en
T.
E3. Pequeños cruces.
Líneas cortas cruzan
otras líneas.
E7. Cruces de líneas
añadidas en garabato.
E4. Líneas entrecruzadas.
E8. Cuadrados
construidos con líneas
que se cruzan.
D.O.Heeb (1961), explica que las configuraciones totales son una guía para la percepción infantil de
la figura, y no así las partes pequeñas de los dibujos. Afirma que las partes y los todos se perciben a
través de diferentes procesos mentales. La facultad de ver un todo, una Gestalt, es innata, mientras
que la capacidad para ver las partes se debe adquirir mediante la continuada actividad del ojo y el
cerebro.
Cualquiera que sea la explicación, la percepción infantil de las formas globales, implícita en sus
garabatos, parece un hecho. Mucho antes de que los niños sepan trazar el contorno de un óvalo, de
un triángulo o de cualquier otro Diagrama, conbinan los Garabatos básicos dentro del espacio
implícito de tales figuras, y no se trata de excepciones sino de dibujos muy comunes.
Las formas de los Diagramas nacientes suponen una transición entre los dos primeros de los
estadios generales en que la autora clasifica el arte autodidácta.
Estadio de los Patrones
Estadio de las Figuras
Estadio del dibujo
Estadio Pictórico
Garabatos Básicos y patrones de disposición. (a los 2 años).
Diagramas nacientes y diagramas. (a los 3 años)
Combinaciones de diagramas. (poco después)
Representaciones visuales.
Los Patrones de Disposición, las Figuras Implícitas, los Diagramas y los Garabatos Básicos, son
comunes a la obra de adultos y niños. En efecto, tales estructuras pueden observarse en el dibujo y
en la pintura de todas las culturas.
El Arte abstracto moderno se apoya en los dibujos infantiles no por una regresión personal, sino
porque el arte infantil contiene las formas estéticas más empleadas en todo arte, sin excluir el
figurativo.
Herbert Read dice: "Comparar el arte abstracto con los garabatos infantiles no ridiculiza a aquél; por
el contrario, lo une orgánicamente a los comienzos de todos los símbolos visuales.
LOS DIAGRAMAS.
El análisis del arte infantil puede llevarse a cabo a partir de seis diagramas. Cinco de ellos son
figuras geométricas regulares: el rectángulo (incluyendo el cuadrado), el óvalo (incluyendo el círculo),
el triángulo, la cruz griega y la cruz de San Andrés. Aunque las versiones infantiles de esos cinco
diagramas adolecen de falta de precisión geométrica, los diagramas están trazados con bastante
claridad, a menudo con una línea única e ininterrumpida. El sexto diagrama, una figura irregular,
sirve para clasificar una gran diversidad de estructuras lineales deliberadas que circundan una
superficie irregular.
Visualmente, los diagramas son semejantes a muchos de los Patrones de Disposición y formas de
Diagramas Nacientes que hemos visto anteriormente. Desde el punto de vista del desarrollo, los
diagramas indican una aptitud creciente para el empleo controlado de las líneas y la utilización de la
memoria.
Durante el estadio de los patrones y al comienza del estadio de las figuras, el niño responde a los
estímulos visuales de sus propios garabatos. A medida que va haciéndose con el control ocular de
los Garabatos Básicos, es capaz de utilizarlos para completar los patrones de disposición y las
Formas de Diagramas Nacientes sugeridas por sus garabatos. Las estructuras que traza son
espontaneas, y un resultado de la interacción de la actividad motriz que da origen a sus garabatos y
61
de su predisposición a que le agraden ciertas formas. La interacción se opera a través de la
coordinación del ojo y la mano del niño. Ninguna de las estructuras lineales de este estadio precisa
necesariamente de premeditación. Probablemente surgirán naturalmente en el curso de garabatear.
Sin embargo, los diagramas dan muestra de planificación y deliberación. Es posible que inicialmente
algunos se deban al azar, del mismo modo que algunos de los primeros garabatos son totalmente
deliberados. Por ejemplo una cruz griega puede provenir de un trazo vertical hecho al azar y seguido
de otro horizontal deliberado, con el fin de formar una cruz; o bien asimismo, una forma de Diagrama
Naciente.
D1.Rectángular
D2.Ovalado
D3.Triangular
D4. Cruz
griega
D5. Cruz San
Andrés.
D6. Irregular.
LAS COMBINACIONES
Cuando se han unido dos diagramas, se da lugar a lo que la autora ha definido como una
combinación. Teóricamente el número de pares posibles es de veintiuno, incluyéndose la unión de
dos diagramas idénticos. Si se definen en función de su parte dominante (si uno de ellos es inscrito o
no), el número es de treinta y seis. Y las categorías de separadas, superpuestas y contenidas, se
elevarían a sesenta y seis.
Se pueden hacer multitud de categorías que resultarían excesivas cara a un intento de análisis.
Algunas de esas combinaciones se vuelven habituales, mientras que otras son raras o prácticamente
inexistentes. Entre las preferidas por los niños figuran la cruz griega unida a la cruz de San Andrés, y
cualquiera de ellas unida a un rectángulo, a un óvalo o a una forma irregular. También se unen con
frecuencia dos óvalos o dos rectángulos.
Una categoría separada la constituirían los intentos de combinación. En tales estructuras lineales, el
niño ha unido dos figuras, pero una de ellas no es un Diagrama definido. Indica que el niño esta
experimentando la unión de dos figuras.
A medida que los niños progresan en el arte espontaneo, van creando gradualmente un sistema de
estructuras lineales visualmente lógico, en el sentido de que una estructura lineal conduce a otra.
Cuando utiliza el material artístico sin verse coaccionado por la dirección de los adultos, el niño
recuerda y hace uso del sistema que se ha enseñado a sí mismo. Las combinaciones, según se
definen aquí, ofrecen una vía para determinar y designar una parte importante del proceso del arte
espontaneo.
LOS AGREGADOS
Cuando el niño comienza a formar agregados (unidades de tres o más diagramas) actúa como un
artista con un repertorio de ideas visuales. El número de agregados es infinito, y el niño que dibuja
normalmente hará muchos agregados complejos entre los tres y cuatro años. Adquirirá un estilo
personal que estará relacionado con el modo en que el niño traza los Garabatos Básicos, figuras,
bocetos y pinturas. Las variaciones de la tensión muscular y de la atención ocular producen líneas
débiles o fuertes y conexiones claras o indefinidas entre las líneas. Además, el grado de atención del
niño determina el que la ejecución de una estructura lineal sea audaz o delicada, simple o
complicada, grande o pequeña.
A medida que aprende a dibujar por sí mismo -siempre que no interfieran los adultos-, aprende cuál
es la presión muscular que produce los efectos que prefiere y cuales son las más fáciles de utilizar.
Los agregados constituyen el grueso del arte infantil entre los tres y los cinco años. Los niños nunca
se cansan de hacerlos. Lo que impide que los Agregados se conviertan en un revoltijo de formas es
el gusto infantil, al parecer innato, por el equilibrio y la regularidad.
62
Se pueden distinguir tres clases de equilibrio: de arriba abajo, de izquierda a derecha y de conjunto.
En el primero, la mayoría de los trazos que están en la parte superior de la configuración están
equilibrados por trazos semejantes en la parte inferior. En el equilibrio de izquierda a derecha, la
mayoría de los trazos de la izquierda están contrarrestados por trazos en la derecha. El equilibrio de
conjunto, como el que tiene lugar en un rectángulo o en un óvalo, es una combinación de los otros
dos. Cuando utiliza papel de dibujo, el niño suele situarlo a lo ancho.
El equilibrio tiene importancia desde el punto de vista del desarrollo, ya que, al parecer, el niño
percibe y recuerda las estructuras lineales equilibradas con mayor facilidad que los demás tipos de
estructuras. Y, como se indica en el apartado de los Mandalas, Soles y Radiales, el niño parece
preferir el equilibrio del conjunto a los otros dos.
En toda mente humana existe un orden visual primario, independiente del pensamiento racional, del
desarrollo del lenguaje y de los estados emocionales, que se expresa en estructuras de gestalts.
El niño que percibe la circularidad de su propio garabato y que repite su percepción en un diagrama
oval hace una abstracción, aunque no haya conceptualizado el proceso. La abstracción forma parte
del proceso mismo.
LOS MANDALAS
Mandala es la palabra Sanscrita que designa el circulo. En las religiones orientales, se aplica a varias
estructuras lineales, especialmente a las figuras geométricas dispuestas en estructuras concéntricas.
El mismo tipo de estructuras surge en el arte infantil. Con frecuencia los Mandalas hechos por niños
son combinaciones, formadas por un circulo o un cuadrado divididos en cuadrantes por una cruz
griega o una cruz en aspa. O bien son agregados formados por un circulo o un cuadrado divididos en
octavos por la conjunción de ambas cruces. Los círculos o los cuadrados concéntricos son
igualmente Mandalas.
A diferencia de los Soles, los Mandalas están divididos por una o varias cruces y, a diferencia de los
Radiales, tienen un perímetro circundante. Las tres estructuras suponen una importante ayuda para
el análisis del arte infantil.
Los Mandalas constituyen el eslabón fundamental en la evolución progresiva que conduce del trabajo
abstracto a la pintura figurativa. El niño, de los Mandalas accede a los Soles y luego a las figuras
humanas. Al pasar de una fase a otra, incorpora en los nuevos dibujos muchos rasgos de su arte
espontaneo anterior. Este sistema de desarrollo lógico visual, explica la forma de conjunto de las
primeras figuras humanas, forma que a los adultos les parece distorsionada, tosca y poco artística.
Esa forma mandaloide de las primeras figuras humanas es una señal de la esencial naturaleza
artística del niño. Los Mandalas no sólo son significativos como eslabón del progresivo desarrollo
artística infantil, sino también como nexo entre el arte de los niños y el de los adultos. Constituyen
una prueba de que los adultos comparten la visión estética de los artistas infantiles. Unos y otros
reaccionan favorablemente ante ala Gestalt del Mandala. ¿Por qué es el Mandala tan atractivo?. Una
razón reside en su equilibrio de conjunto.
Un gran Mandala grabado en piedra no se considera pueril porque sólo lo puede hacer un adulto. La
misma figura trazada en un papel por un niño de tres años es considerada inmadura y sin
importancia.
LOS SOLES
En los garabatos tempranos la coordinación infantil de la mano, el ojo y el cerebro a menudo da
como resultado trazos que suponen una implícita figura de conjunto. En trabajos posteriores el niño
traza varias de esas figuras y las combina con Gestalts organizadas y no figurativas. Cuando estas
constan de líneas separadas, como en el caso de los Diagramas, Combinaciones, Agregados y
Mandalas básicos, el niño ha realizado un trabajo estructurado.
Las estructuras que lleva a cabo el niño muestran un desarrollo progresivo, pero no se trata de un
mero progreso de las estructuras lineales simples a las complejas. El Sol es una estructura muy
simple, y sin embargo, no aparece hasta que el niño ha trazado ya agregados complejos. Todos los
niños de dos años trazan ya líneas curvas y rectas, que son el componente del Sol. Sin embargo,
rara vez dibujan un circulo con el perímetro cortado por varias líneas antes de los tres años.
¿A qué se debe la relativamente tardía aparición del Sol?. La explicación de la Autora comienza por
subrayar que los niños pequeñas toman las ideas para sus estructuras principalmente de sus propios
garabatos y no de los dibujos de los adultos o de los objetos con impacto visual.
63
Aunque algunos evocan realmente al Sol, parece que no provocan un estímulo suficiente para trazar
un Sol hasta que no se ha realizado sucesivos Mandalas. Las líneas que cortan el circulo son
sugerentes, y como quiera que en el arte infantil una imagen conduce a otra, este Mandala
probablemente inspira al Sol. La autora sostiene que el paso evolutivo del Mandala al Sol es el orden
que predomina en el dibujo infantil.
Tanto el Mandala como el Sol son Gestalts que gozan de preferencia y que en el arte se utilizan
generalmente de forma no figurativa. Como el Mandala la Gestalt Sol, tiene una dilatada y gloriosa
historia artística, que incluye el arte prehistórico estudiado por los arqueologos y constituye otro de
los nexos entre el arte adulto y el arte infantil.
Entre las Gestalts que en los primeros garabatos son semejantes al Sol figuran los Pre-Soles y los
Soles en ciernes. Estos Soles, junto con el Mandala, suministran el estímulo visual para los Soles
estructurados.
La uniformidad del arte infantil en todo el mundo me induce a creer que la mente humana está
predispuesta a recordar -es decir, a preferir- unas variaciones y a recordar otras. Las rechazadas son
aquellas o demasiado complicadas para ser captadas al instante o demasiado difíciles para repetirlas
con la frecuencia necesaria para fijarlas en la mente.
En el sistema del dibujo infantil, parece que el Mandala y el Sol suministran el estímulo para los
primeros dibujos infantiles de la figura humana. En esta evolución, las líneas a las que se confiere tal
catalogación no son figurativas. Si lo fueran, aparecerían frecuentemente en las figuras humanas
posteriores, y no es así. Por el contrario, las líneas muestran que el niño ha sido estimulado por sus
precedentes dibujos del Sol.
El Sol sólo aparece con variedad de rayos, después de que el niño ha dibujado figuras humanas con
líneas definidas. El añadido de estos rayos da lugar a uno de los diseños perennes del arte humano,
entre los que figura el símbolo de la flor. Sin embargo, la figura humana ocupa el primer lugar en la
jerarquía del arte infantil.
LOS RADIALES.
Otra estructura importante en el arte infantil es la radial. Que forma parte de muchos diseños e
influye en la colocación de los brazos y piernas en la Figura humana.
Una estructura radial es un conjunto de líneas que parten de un punto o de un área reducida. La
combinación de una cruz griega con una de San Andrés es un Radial. El Radial hecho con cruces
constituye un caso especial; se parece a otros Radiales, pero no tiene el mismo origen visual: deriva
de los Diagramas, mientras que los Radiales que habitualmente ejecutan el arte infantil proceden de
Garabatos hechos con movimientos rítmicos, que no requieren control visual.
Morris (1962) afirma que los orígenes de la pintura son desconocidos. Cree que el arte es el
resultado de un excedente de energía que se libera a través de una actividad gratificante, y que en
un tiempo el arte servía a tres propósitos: comunicar datos sobre técnicas de caza; auspiciar
finalidades religiosas o mágicas y proporcionar satisfacción estética a los artistas. Cuando el hombre
desarrollo la escritura, la pintura perdió una de sus principales funciones, situación que se agudizo
aun más al inventarse la fotografía. También decayó el uso del arte con fines religiosos, con lo que la
estética quedaba como razón primera para el arte.
Morris enumera seis principios biológicos de la pintura, término que utiliza tanto para el arte abstracto
como para el figurativo: Actividad autogratificante; control de la composición; diferenciación
caligráfica; variedad temática; óptima hetereogenidad e imaginería universal. Todos ellos aplicables
tanto al arte de los hombres como al de los simios.
Morris muestra que tanto los simios como los hombres tienen una necesidad estética, pero no
alcanza a entender que esa necesidad es quizá la explicación primordial de las actividades artísticas,
y que pintar para comunicar algo sobre la actividad diaria puede ser secundario. Muchas de alas
formas artísticas a las que Morris y los arqueólogos atribuyen un significado religioso las hacen los
niños por razones estéticas. Por ejemplo sostener que cuando el hombre prehistórico traza la figura
del Sol demuestra que lo adora es válido sólo si afirmamos igualmente que el culto solar es
característica de todos los niños, a juzgar por su arte. A menos que sostengamos que el arte infantil
expresa sentimientos religiosos, tendremos que admitir que los símbolos que utilizan los adultos por
motivos religiosos tal vez son escogidos simplemente porqué son buenos desde el punto de vista
estético.
64
Las líneas que utiliza el arte infantil como la caligrafía aparecen en los Garabatos Básicos, pero su
empleo es diferente. En el arte infantil, las líneas se utilizan exclusivamente para realizar estructuras
autodidactas, no aprendidas de los adultos. Cada generación parte de cero y cada niño se enseña a
sí mismo los rudimentos del dibujo antes de los seis años.
El niño aprende también en casa o en la escuela muchas combinaciones lineales del arte de los
adultos. Cuando evoluciona de las formas abstractas como los Radiales al trabajo figurativo, el gusto
estético biológico que ha desarrollado por si mismo entra en conflicto con los deseos y las
expectativas de los adultos que le rodean. Este gusto biológico lo aplica tanto al trabajo figurativo
espontáneo como a las formas abstractas. Las primeras figuras humanas que traza el niño deben
más a las estructuras precedentes de su arte espontaneo que a su observación de los seres
humanos.
El conflicto entre el gusto cultural transmitido por los adultos y el gusto biológico del arte espontaneo
es particularmente claro cuando el niño trata de aprender los esquemas transmitidos por la cultura. Si
los esquemas coinciden con las estructuras del arte espontaneo, como en el caso de las líneas
radiales empleadas para trazar un halo en el dibujo de los adultos, el conflicto es mínimo, pero los
conflictos culturales resultan a menudo extraños para el niño. Parecen menos definidos que las
estructuras de su propio arte y más difíciles de aprender.
El conflicto es tan frecuente porque los esquemas de los adultos se basan en gran parte en las
Gestalts visuales de los objetos, mientras que en el arte infantil las Gestalts se basan en el
equilibrio, proporción y forma de las líneas.
65
Descargar