webredes/textos/parasitosis - Redes. Revista hispana para el

Anuncio
El análisis de redes en la consideración de las parasitosis
humanas.
Marta CRIVOS; LauraTEVES; Anahí SY*1
Universidad Nacional de La Plata- Argentina
Los resultados obtenidos en investigaciones interdisciplinarias sobre la problemática de las
parasitosis humanas en dos comunidades argentinas aborígenes Mbyá-Guaraní, - muestran
la necesidad de explorar las condiciones bioculturales en que se instalan y prosperan estas
infecciones.
Para ello se propone utilizar la metodología de redes para visualizar relaciones entre
especies de parásitos y sus hospedadores humanos. De este modo se espera acceder a la
delimitación de grupos de hospedadores cuyos atributos conduzcan a identificar indicadores
relevantes a una evaluación de conductas de riesgo culturalmente específicas.
A través de esta propuesta intentamos discutir el uso de protocolos y parámetros estándar
para la delimitación de grupos en riesgo de infección parasitaria.
Introducción
Este trabajo surge de la evaluación de la metodología utilizada y los resultados
obtenidos en una investigación interdisciplinaria centrada en la problemática de las
parasitosis humanas, de la cual participaron biólogos especialistas en parasitología,
antropólogos y etnobotánicos.
Esta investigación: “Estrategias para la integración de la comunidad Mbyá- Guaraní
de Kaaguy Poty (Valle del Cuñapirú, provincia de Misiones) en las prácticas de
diagnóstico y prevención de parasitosis”2 se desarrolló en el área de la Reserva
Privada de la Universidad Nacional de La Plata, “Valle del Arroyo Cuña Pirú” de la
Laboratorio de Investigaciones Etnográficas- Facultad de Ciencias Naturales y MuseoUniversidad Nacional de La Plata- Argentina. [email protected]
1
Proyecto dirigido por la Dra. Navone y Prof. Marta Crivos, investigadores del área de
Biología y Etnografía de la FCNYM, financiado Secretaría de Extensión Universitaria, Consejo
Superior de la Universidad Nacional de La Plata. Expte. N°100-48.865/99. 1999-2000
2
Provincia
de
Misiones
(Argentina),
donde
están
asentadas
las
poblaciones
aborigenes Mbyá-Guaraní de Kaaguy Poty (Flor de Monte) e Yvy Pyta (Tierra Roja).
En sucesivos trabajos de campo, a través de la implementación de técnicas de
entrevistas,
observación
sistemática
y
talleres3
en
el
ámbito
de
ambas
comunidades, fue posible acceder a la perspectiva local en torno a la problemática y
realizar una aproximación a las conductas que estarían favoreciendo el contagio.
Estas actividades además permitieron la obtención de muestras de materia fecal y
de suelo para su análisis en laboratorio.
Mediante el análisis coproparasitológico, se identificaron diferentes tipos de
parásitos. En base a la evaluación de su distribución en la población estudiada, su
ciclo de vida y los modos de transmisión asociados; se delimitaron los factores de
riesgo de infección parasitaria. En relación a esto y de acuerdo a lo planteado por
los parasitólogos hallamos que:
“Todas las formas encontradas son de transmisión directa. No se encontraron
parasitosis trasmitidas obligatoriamente por alimentos (al menos las diagnosticables
por métodos directos) (...) La mayoría de los parásitos hallados pertenecen al grupo
de los geohelmintos o seudogeohelmintos , que presentan su forma infestante (huevo
o larva) en el suelo durante un tiempo variable, determinando así que los mayores
riesgos de infección por parásitos se encuentran en la exposición de la población a
estas formas infestantes (Ascaris lumbricoides, Trichuris trichiura, Strongyloides
stercoralis, y Necator americanus). El resto de los parásitos encontrados se transmiten
La técnica de Taller se implementa a fin de generar un espacio de intercambio que
incluyera, tanto a la población aborigen (niños y adultos), como a docentes y personal
médico-sanitario de la zona, y a nuestro equipo. De este modo se pretende acceder al saber
local acerca de las parasitosis para ponerlo en relación con el conocimiento aportado por los
parasitólogos. Durante el taller fueron utilizados distintos tipos de registro –vídeo,
grabaciones, notas de campo- incluyendo la distribución entre los asistentes de material
para representar gráficamente los lugares y conductas de riesgo en relación a las afecciones
parasitarias, el cuerpo humano y la localización de los parásitos en él, y las imágenes
resultantes de sus observaciones al Microscopio.
3
generalmente por contaminación fecal de manos, utensilios, alimentos, o agua (en el
caso de los Protozoos)” (Digiani, 1998)
La delimitación de factores de riesgo supone la presencia de ciertas conductas
asociadas al contagio, muchas de ellas ya contempladas en protocolos estandar de
uso generalizado en la investigación epidemiológica. A fin de identificar y
caracterizar conductas de riesgo en el ámbito de la vida cotidiana de estas
poblaciones, se realizaron observaciones sistemáticas en diferentes espacios de la
comunidad de Kaaguy Poty -alrededores de las viviendas, arroyo y senderos
frecuentemente utilizados-.
Para ello fue confeccionado un protocolo observacional que contempló los siguientes
aspectos: características de la vivienda: techo, paredes, piso; características de los
alrededores de la vivienda (galería, patio, senderos, chacra); contacto con animales
domésticos y del monte; hábitos de higiene: espacios y formas de eliminación de
residuos (orgánicos e inorgánicos) y de eliminación de excretas; disponibilidad de
agua (procedencia, acarreo, almacenamiento, consumo, diferentes usos); pautas de
higiene vinculadas con el uso de utensilios y vajilla; pautas de higiene en relación
con los alimentos; uso de calzado, vestimenta, formas de locomoción según grupo
etario (gateo, locomoción vertical libre), sueño, alimentación, juego, lavado del
cuerpo, etc.
De acuerdo con los resultados del informe parasitológico y de las observaciones
realizadas, en general, todos los individuos están expuestos a las mismas situaciones
de riesgo de infestación por Uncinarias, Ascaris lumbricoides, Trichuris trichiura,
Strongyloides stercoralis y Necator americanus (contacto piel/suelo y fecalismo)
Los resultados obtenidos en las observaciones y las muestras de suelo tomadas
en los alrededores de las unidades habitacionales, permiten concluir que ésta
representa un ámbito propicio para la transmisión y adquisición de numerosas
parasitosis. En todas las actividades en los alrededores de la vivienda están
involucradas conductas de riesgo de infección parasitaria. El hábito de andar
descalzo ha sido una de las observadas con mayor frecuencia, tanto en el
desplazamiento de adultos y de niños de ambos sexos en el ámbito doméstico,
como en las incursiones a través de los senderos hacia las chacras y el monte.
Asimismo, la adopción de ciertas posturas corporales en el desarrollo de distintas
actividades en las que los individuos toman contacto con el suelo constituiría otro
factor de riesgo importante. En el caso de los niños, que juegan activamente en
los alrededores de las casas, el contacto con el suelo es mas frecuente, con
mayores riesgos de exposición a Ascaris lumbricoides para aquellos que
presentan hábitos de geofagia, lo cual los convierte en el grupo etario más
vulnerable (Informe de avance, 2000).
Otro aspecto importante, remarcado por los parasitólogos, es el hecho de que
durante el período de lactancia, que se extiende hasta el año o año y medio de
edad, los niños serían menos vulnerables a la infección con parásitos. Esto es así
en tanto el único alimento ingerido es la leche materna y en esta etapa existe
menor contacto piel/suelo.
Los resultados de los análisis coproparasitológicos realizados nos permiten acceder,
en principio, a datos cuantificables sobre la presencia /ausencia de cierto/s tipo/s de
parásitos en cada organismo individual y a partir de ello inferir el estado sanitario de
la población estudiada en un momento dado.
En el marco de este análisis, los factores que favorecerían el ingreso de los parásitos
al organismo humano son considerados a través de una serie de variables -sexo,
edad, grupo doméstico y condiciones sanitarias de la vivienda- que creímos relevantes
para la delimitación de grupos de población “en riesgo” de enfermar.
Los resultados obtenidos en el análisis no conducían a explicaciones plausibles de la
alta incidencia de las parasitosis en ambas comunidades. Esto plantea la necesidad de
realizar una revisión de los parámetros y criterios desde las cuales estabamos
considerando el problema.
El examen de los supuestos que subyacen al desarrollo y conclusiones de nuestro
trabajo nos acerca al análisis de redes. La posibilidad de explorar las relaciones entre
especies de parasitos y sus hospedadores humanos se plantea como una estrategia
alternativa para reconocer agrupamientos “naturales”. La explicación de
las
configuraciones obtenidas a partir de la consideración de relaciones estrictamente
biológicas –parásito-hospedador-, requerirá la evaluación de las variables socioculturales ya utilizadas en la caracterización de “grupos de riesgo” y la identificación
de otras que den cuenta de los grupos emergentes.
Características del área y de la población
El área de estudio se encuentra localizada al nordeste de la República Argentina, en
el Valle del Arroyo Cuña Pirú, de la provincia de Misiones. Desde el punto de vista
biogeográfico, pertenece al Distrito de las Selvas Mixtas, Provincia Paranaense del
Dominio Amazónico (Cabrera y Willink, 1973).
La Selva Paranaense
es
considerada uno
de
los
sistemas
naturales
más
amenazados de Sudamérica. Se trata de un bioma de gran diversidad biológica, que
ha estado sometido a múltiples mecanismos de explotación -extracción selectiva de
maderas, el reemplazo del bosque nativo por plantaciones forestales de exóticas, la
construcción de represas hidroeléctricas y la colonización agrícola, entre otros (Vila
y Bertonatti, 1994) que han producido la desaparición de la mayor parte de la selva
y el deterioro de gran parte de sus remanentes.
Las etnias Mbyá Guaraní se desplazan por este medio desde la época pre y posthispánica hallando en él las condiciones favorables para el desarrollo de su modo de
vida. Esto ha hecho posible el mantenimiento de sus actividades de subsistencia
tradicionales -horticultura de roza y quema, caza, pesca y recolección de vegetales
y miel silvestre-; realizadas en el espacio del “monte” o selva.
Las dos comunidades estudiadas -Kaaguy Poty e Yvy Pyta-, registran -según censo
del año 2001- un total de 285 personas. Cada asentamiento está constituido por
alrededor de 25 viviendas asociadas a espacios de cultivo, distribuidas en claros
abiertos en la selva a la vera de la Ruta Provincial N° 7.
La mayoría de los pobladores actuales de ambas comunidades proviene de otras
comunidades Mbyá de la Provincia de Misiones (Cuñapirú I, 25 de Mayo, Ruiz de
Montoya, El Dorado, Garuhapé, San Ignacio y Capioví, entre otras) y en menor
medida, de Paraguay y Brasil. Si bien esta movilidad continúa, en la actualidad se
registra a escala individual o de pequeñas unidades familiares y los núcleos de
población Mbyá han tendido a formar asentamientos más estables4.
En el presente, las actividades de subsistencia se han diversificado, las actividades
tradicionales se ven complementadas con la comercialización de artesanías y el
trabajo temporario en las colonias5. Estas nuevas actividades que introducen el
dinero en la economía del grupo, han producido numerosos cambios en su estilo de
vida, entre ellos, la posibilidad de adquirir alimentos elaborados, lo cual ha
resultado en una importante modificación en la dieta.
En relación al estado sanitario de la población, el análisis de los datos obtenidos de
la investigación etnográfica y parasitológica, y la documentación proveniente de las
instituciones oficiales de salud, indican una alta prevalencia de enfermedades
infectocontagiosas (tuberculosis) y gastrointestinales (parasitosis y patologías
asociadas).
Al proceso de sedentarización han contribuído diferentes factores, entre ellos, la asignación
de viviendas, por gestión de ENDEPA (Equipo Nacional de Pastoral Aborígen). Este plan de
viviendas contempló dos tipos de construcción: de madera o de material y ladrillos, con
techos de zinc en ambos casos. Dichas construcciones han dificultado la movilidad, en tanto
no ofrecen la posibilidad de translado que presentan las viviendas tradicionales.
5
La Colonia es un área de producción agrícola y ganadera, generalmente de poca extensión.
Estas tierras fueron asignadas a familias de inmigrantes europeos, que llegaron a nuestro
país en la segunda mitad del siglo XIX, y aún son usadas por sus descendientes, conocidos
como colonos. La población Mbyá se incorpora como trabajador a destajo en las épocas de
cosecha, principalmente de yerba mate, tabaco y té. (Crivos et al., 2002).
4
Si bien en una de las comunidades existe un puesto sanitario, actualmente la
población no cuenta con asistencia médica en dicho ámbito. En consecuencia,
aquellos casos que se considera requieren la atención de la medicina oficial,
implican el traslado de la población hasta las unidades sanitarias más próximas.
Además del recurso a la medicina oficial a través de las instituciones antes
mencionadas, los miembros de ambas comunidades consultan a especialistas
locales6 a quienes reconocen experiencia en el diagnóstico y terapéutica de diversas
enfermedades cuyo tratamiento se inicia, por lo general, en el ámbito doméstico
Procesamiento del material
Se trabajó con los resultados del análisis coproparasitológicos correspondientes a
dos muestras tomadas en el año 1999 y el 2000 en las comunidades de Yvy Pyta y
Kaaguy Poty asentadas en el predio de la UNLP. Ambas muestras incluyen
individuos de ambos sexos, pertenecientes a diferentes grupos etarios y residentes
en unidades habitacionales de ambas comunidades.
MUESTRA 1: fue colectada en noviembre de 1999, incluye 43 personas, 15
varones y 26 mujeres (dos muestras sin identificar) en un rango etáreo entre 0.8 y
50 años.
Tabla 1
Nombre
CaGo
MaGo
RoGo
MaFr
JoBe
JoGo
DaEs
Sexo
F
F
F
M
F
F
M
Edad
(años)
0,8
2
3
3
3
4
5
Unidad Habitacional
(U.h)
YP. VIII
YP. VIII
YP. XIV
YP. VIII
YP. XI
YP. VI
YP. XIV
6 Denominados curanderos o poropoano va´e “el que sabe de remedios o yuyos”.
HuGo
ZuGo
AdGo
HiFr
JuGo
NuNe
CaoC
PaBe
Y.Go
YeBe
LeVe
ElDu
YuCa
NoDu
FlMo
BeBe
AnBe
EsDu
RaBe
CrBe
GrBr
NeDu
MaCa
TeCh
RoNu
EsBe
RoCa
GeBe
YoBe
OmDu
EsBe
GeBe
CaCa
GlAl
RaCa
JuCa
M
F
M
M
M
M
F
F
M
M
F
F
F
M
F
F
M
F
F
M
F
F
F
M
F
F
F
M
F
M
F
F
F
F
5
6
6
8
8
11
36
50
?
1
1
1
1,3
1,8
2
2
3
3
4
5
5
5,5
7
7
7
8
8
9
9
9
11
12
17
20
24
30
YP. V
YP. VI
YP. XXII
*
YP. XIX
YP. V
*
YP. VIII
*
KP. IX
*
KP. XVIII
*
KP. XXIV
KP. XXV
NO ESTA
KP. XXVI ó X
KP. XVIII
KP. X
NO ESTA
KP. X
KP. XXIV
KP. IV
*
KP. VII
KP. X
KP. I
*
KP. IX
KP. XXIV
YP. XXVII
KP. X
KP. II
KP. XXVI
KP. XXIV
KP. X
La siguiente matriz muestra la relación presencia/ausencia de las 13 especies
parásitas identificadas en cada uno de los individuos incluídos en la muestra 1
Matriz YP-KP 1999
E. coli E. nana
CaGo
MaGo
RoGo
MaFr
0
1
0
1
0
0
0
1
B.
I.
G.lambl
C.
hominis Butschl
ia
Mesnili
ii
0
0
0
1
1
0
0
0
0
0
0
0
1
1
0
0
H.
Uncinar
S.
T.
A.
E.
levadur
nana
ias
stercor Trichiur lumbric vermic
as
alis
a
oides ularis
0
0
0
0
0
0
0
1
1
1
0
0
0
0
0
1
1
0
1
0
0
0
1
1
0
0
0
0
JoBe
JoGo
DaEs
HuGo
ZuGo
AdGo
HiFr
JuGo
NuNe
CaoC
PaBe
Y.Go
YeBe
LeVe
ElDu
YuCa
NoDu
FlMo
BeBe
AnBe
EsDu
RaBe
CrBe
GrBr
NeDu
MaCa
TeCh
RoNu
EsBe
RoCa
GeBe
YoBe
OmDu
EsBe
GeBe
CaCa
GlAl
RaCa
JuCa
1
1
1
0
1
0
1
0
0
1
0
0
0
0
0
0
1
0
0
1
1
1
0
1
0
0
1
0
1
0
0
1
1
1
0
0
1
0
1
0
1
1
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
1
0
0
0
1
0
0
0
1
1
1
1
0
0
0
1
0
1
0
1
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
1
0
0
0
1
0
0
0
0
0
1
0
0
1
0
0
0
0
0
1
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
1
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
1
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
1
0
1
1
1
1
1
1
1
0
1
1
0
1
1
0
0
0
0
0
1
0
1
1
1
1
1
1
1
0
1
0
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
0
0
1
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
1
0
0
0
1
0
0
0
0
0
1
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
1
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
MUESTRA 2: fue colectada en marzo de 2000, incluye 31 personas, 18 varones y
13 mujeres en un rango etáreo entre 0.7 y 49 años.
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
Tabla 2
Nombre
Sexo
Edad
(años)
Unidad habitacional
(U.h)
LoVe
ReMa
YeEs
CaRa
HuRa
FlCa
UbGo
AlMa
MiRa
PaNu
JeCa
FeFe
VaOl
IrGo
SoCa
MaCh
WiCa
JuGo
ElCa
NaEs
FeCa
ClOl
JuCa
JaFe
DaCa
JoFe
RuCh
BaFe
OsCh
JuNu
SiCh
F
M
F
M
M
F
M
M
M
F
F
M
F
F
F
M
M
M
F
F
F
F
M
M
M
M
M
M
M
F
M
0,7
1
2
6
8
8
9
19
24
24
1
1.1
2
3
3
3
4
5
5
6
6
6
6
7
7
9
10
11
12
18
49
+
+
YP. XIV
+
+
+
YP. XIX
+
YP. XXI
YP. XIII
+
KP. XXV y XXVII
YP. XIX
KP. III
KP. XXVIII Y XXIX
KP. III
YP. XIX
KP. IV
YP. XIII
KP. XXVII
KP. IV
KP. XXVII
KP. III
KP. XXVIII
KP. XXVIII
YP. XIX
KP. XXVIII
* no fue identificada U.h de procedencia
La siguiente matriz muestra la relación presencia/ausencia de las 13 especies
parásitas identificadas en cada uno de los individuos incluídos en la muestra 2
Matriz YP-KP 2000
E. coli E. nana
LoVe
0
0
B.
I.
G.
C.
Homini Butschl Lambli Mesnili
s
ii
a
1
0
0
0
H.
Uncinar S.
T.
A.
E.
levadur
Nana ias
Stercor Trichiur lumbric vermic as
alis
a
oides ularis
0
0
0
0
0
0
0
ReMa
YeEs
CaRa
HuRa
FlCa
UbGo
AlMa
MiRa
PaNu
JeCa
FeFe
VaOl
IrGo
SoCa
MaCh
WiCa
JuGo
ElCa
NaEs
FeCa
ClOl
JuCa
JaFe
DaCa
JoFe
RuCh
BaFe
OsCh
JuNu
SiCh
0
1
0
0
1
1
0
0
1
0
1
1
1
0
1
0
1
0
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
0
0
0
1
1
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
1
0
1
0
0
1
0
1
0
0
1
1
1
1
0
0
0
0
0
1
0
0
1
0
1
0
0
1
0
1
1
0
1
0
1
0
0
0
0
0
1
0
1
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
1
0
0
0
0
1
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
1
1
1
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
1
0
0
0
1
1
1
1
0
0
0
0
0
1
1
1
1
1
0
1
1
1
1
1
0
0
0
1
0
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
0
1
0
1
1
0
1
0
1
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
A cada una de las matrices se aplica el cálculo de clique, determinado por un
tamaño mínimo de 3 individuos. El procedimiento se aplica a la matriz en el modo
fila y en el modo columna.
Resultados
Los resultados que obtuvimos para la muestra 1 al aplicar el cálculo de cliqué en
modo fila permitió identificar sobre un total de 13 especies de parásitos 4 grupos, 3
grupos conformados por 6 especies y 1 grupo de 7 especies. En los 4 grupos
aparecen 3 especies: E. coli, E. nana y Uncinarias y dos especies H. nana y B.
hominis forman parte de tres de los cuatro grupos.
1
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
Los resultados para la muestra 1 al aplicar el cálculo de cliqué en modo columna
(total
42
personas)
permitieron
identificar
3
grupos
de
personas,
dicho
agrupamiento respondía a la presencia de un parásito que se presentaba como
constante en todos los individuos que pertenecían al grupo, en combinación con
otros. De este modo observamos que el grupo 1 respondía a la presencia de
Uncinarias y agrupaba a 32 personas, el grupo 2 respondía a la presencia de E.
nana, agrupaba a 12 personas y el grupo tres a G. lamblia, agrupando 3 personas.
Los diferentes grupos o clique estan formados por individuos que pertenecen a
distintos grupos etáreos y de diferente sexo, además cualquier individuo puede
estar incluído en más de un grupo.
En la representación gráfica en Pajek los 7 individuos no incluídos en el
agrupamiento o cliqué (no hospedan parásitos) quedan desconectados de la red.
Para explicar esta situación recurrimos a información proveniente de archivos –
registro de consultas e historias clínicas- de las unidades sanitarias del área y
hallamos que de los 7 individuos, 4 tienen menos de 3 años de edad y habían sido
diagnosticados con parásitos en instancias de consulta previas. Esto nos permite
hipotetizar sobre un posible tratamiento que explicaría la ausencia de parásitos.
Los resultados que obtuvimos para la muestra 2 al aplicar el cálculo de cliqué en
modo fila, permitió identificar sobre un total de 13 especies de parásitos 4 grupos,
3 grupos conformados por 7 especies y 1 grupo por 8 especies. Formando parte de
los 4 grupos aparecen 4 especies: E. coli, E. nana S. Stercolaris y Uncinarias; y 2
especies: G. lamblia y B. hominis forman parte de 3 de los 4 grupos.
Los resultados para la muestra 2 al aplicar el cálculo de cliqué en modo columna
permitieron identificar 6 grupos de personas, dicho agrupamiento respondía a la
presencia de un parásito que se presentaba como constante en todos los
integrantes del grupo, en combinación con otros y/o a la presencia de 2 tipos de
parásitos más frecuentes, en combinación con otros. De este modo observamos que
el grupo 1 respondía a la presencia de Uncinarias y agrupaba a 25 personas, el
grupo 2 respondía a la combinación de Uncinarias y E. nana, agrupando a 23
personas y el grupo 3 a una combinación de Uncinarias y E. coli, formando un
grupo de 21 personas; el grupo 4 agrupaba a 21 personas que tenían B. Hominis, el
grupo 5 reunía a 9 personas que poseían una combinación de uncinarias y G.
lamblia, y el grupo 6 respondía a la presencia de H. nana, agrupando a 6 personas.
Cada uno de lo grupos presentan gran variabilidad en cuanto a sexo y edad de sus
integrantes.
En la representación gráfica de Pajek observamos que todos los individuos están
incluídos en la red y los 3 individuos que aparecen más alejados del agrupamiento,
cliqué, son aquellos que presentan una sola especie parásita, qué en ningún caso es
la misma.
En ambas muestras, sobre el total de 13 especies de parásitos, se forman 4 grupos
o cliqué, algunas especies forman parte de todos los grupos: E. coli, E. nana y
Uncinarias y B. hominis forma parte de 3 de los 4 grupos.
Los resultados al aplicar el cálculo de cliqué en modo columna permitieron
identificar entre 3 y 6 grupos de individuos, dicho agrupamiento, como se dijo
antes, respondía a la presencia de un parásito que se presentaba como constante
en todos los individuos. En ambas muestras el agrupamiento que reunía el mayor
número de individuos respondía a la presencia de Uncinarias. También se observa
en ambas muestras un grupo que nuclea un menor número de individuos asociado
a la presencia de G. lamblia.
Hallamos como constante para ambas muestras que los parásitos agrupan
individuos de distintos grupos etarios y de sexo. Consultando los censos
poblacionales y mapas del emplazamiento de las unidades habitacionales en ambas
comunidades, observamos que no existe correlación entre las agrupaciones de
individuos infectados emergentes de este análisis y su distribución en el espacio.
Tampoco se conforman grupos a partir de la presencia de una única especie
parásita, los agrupamientos siempre responden a combinaciones de diferentes
especies.
Perspectivas
El enfoque del análisis de redes presenta la posibilidad de estudiar el problema de
las parasitosis
humanas en relación a la identificacion de actores –parásitos e
individuos-, tipo de vínculo y la frecuencia e intensidad de las interacciones
El modelo que obtenemos a través del análisis de clique muestra una imagen
congelada del modo en que los parásitos estarían agrupando a la poblacion
hospedadora. La posibilidad de visualizar la relación entre especies parásitas y las
personas se ofrece como una vía para indagar sobre la forma de transmisión de las
parasitosis en las poblaciones humanas. De este modo los resultados obtenidos en
nuestro análisis nos permiten establecer que el contagio no es individual, ni se
asocia a la edad, sexo o corresidencia de los individuos infectados.
En este sentido la implementación de la metodología de redes nos ha permitido
revisar criticamente los resultados obtenidos en la primer etapa de investigación,
centrada en la identificación de factores que ponen en riesgo la salud de la
población. Al instalar el problema del contagio como resultado de conductas
individuales
-hábitos
de
higiene,
procesamiento
y
consumo
de
alimentos,
eliminación de residuos e infraestructura de la vivienda- en relación a variables
como sexo, edad y coresidencia, las explicaciones se limitan al establecimiento de
un conjunto de causas que permiten predecir el contagio.
En un proyecto de investigación aplicada, como en el que estuvimos trabajando, la
predictibilidad adquiere una importancia fundamental en tanto el conocimiento
obtenido es inmediatamente transferido a la población a fin de generar acciones
orientadas al mejoramiento de su calidad de vida.
Sin embargo, en nuestra investigación los altos índices de reinfección y la
información resultante de la observación de conductas que forman parte de las
rutinas cotidianas en estas comunidades -que en los protocolos utilizados se
califican como “conductas de riesgo”-, nos conducen a revisar criticamente los
supuestos y parámetros bioculturales desde los cuales hemos considerado esta
problemática.
En este sentido observamos que no es apropiado evaluar como “conductas de
riesgo” a nivel individual comportamientos que estan presentes en toda la población
y forman parte del modo de vida Mbyá. Esto nos plantea la necesidad de pensar en
las causas de las parasitosis a través de la consideración de una nueva combinación
de factores que permita dar cuenta de la complejidad del fenómeno.
Considerando la relacion parasito/hospedador como un caso/ejemplo de interacción
entre una comunidad humana y su medio ambiente, la infección parasitaria
resultaría un indicador de desajustes en la interacción entre las comunidades Mbyá
y su medio natural7.
En
este
sentido,
la
investigación
etnográfica
da
cuenta
de
importantes
transformaciones en la relación entre los Mbyá y su medio. A diferencia del
nomadismo
como
estrategia
de
vida
en
el
pasado,
en
la
actualidad
el
desplazamiento de estos grupos presenta caracteristicas diferentes. El proceso de
sedentarización creciente que se registra en las comunidades Mbyá conlleva una
utilización cada vez más intensiva de un medio natural –la selva- ya degradado8. Si
7 Recientes investigaciones en el campo de la Ecología y la Biología Evolutiva sostienen esta
hipótesis.(Cf. Mark E. Torchin, Kevin D. Lafferty, Andrew P. Dobson, Valerie J. Mckenzie &
Armand M. Kuris, 2003).
8 Desde la investigación biológica, se considera que los cambios socio-ambientales ocurridos
en la selva misionera en las últimas décadas han determinado la emergencia de nuevas
parasitosis y un aumento de su incidencia (Slifko et al., 2000; McCarthy y Moore, 2000) y
que esta situación no ha sido acompañada por estudios sistemáticos que contemplen e
integren los múltiples factores que intervienen en la instalación y recrudecimiento de este
tipo de patologías.
bien es posible observar el constante movimiento de pequeños grupos familiares,
éstos se trasladan desde y hacia asentamientos permanentes.
Antiguamente el patron de movilidad implicaba el abandono del territorio habitado y
el traslado de toda la población hacia nuevos espacios dentro de la selva. La
circulación periódica de estos grupos en los límites de este ecosistema permitía la
recuperación de los espacios de ocupación previa. En la actualidad, la persistencia
de patrones de comportamiento ligados al libre desplazamiento en el ecosistema
selvático en los asentamientos estables produce desajustes en la relación entre los
Mbyá y su medio que creemos se ponen de manifiesto en la patogenicidad de las
parasitosis humanas. Indagar en los factores que inciden en esta situación implica
iniciar estudios comparativos de estas poblaciones en emplazamientos más o
menos estables y recientes. En este sentido el trabajo etnográfico nos permitió
identificar grupos de familias que se desplazan según el patrón tradicional, es decir,
ocupando nuevos espacios dentro de la selva que les permiten recrear sus
estrategias particulares de vida. La posibilidad de caracterizar tanto a nivel
biológico como sociocultural a estos grupos permitirá delimitar nuevos parámetros
a incorporar al análisis de redes y formular hipótesis que den respuestas a los
interrogantes planteados.
Bibliografía
Almeida Filho, N. Por una etnoepidemiología. Esbozo de un nuevo paradigma
epidemiológico. En: Cuadernos Médico-Sociales 61, Rosario, CESS, 1992.
Batagelj, Vladimir and Andrej Mrvar. 2001. Pajek 0.77. Copyright © 1996.
http://wlado.fmf.uni-lj.si/pub/networks/pajek/
Borgatti, S.P., M.G. Everett and L.C. Freeman. 1999. UCINET V for Windows:
Software for Social Network Analysis. Natick: Analytic Technologies.
Cabrera A. L. y A. Willink. 1973. Biogeografía de América Latina. hic of latin
America. OEA. Serie de Biología, Monografía 13. Washington, D.C.
Crivos, M., M. R. Martínez, G. Navone, M. L. Pochettino, P. M. Arenas, C. Digiani, L.
Teves, C. Remorini,
A. Sy , C. Illkow y N. Delorenzi. 2001. Ethnobiology of the
parasitoses: the case of two Mbyá-Guaraní communities (Province of Misiones,
Argentina). En: Biocultural Diversity and Benefits Sharing, Berlin, B and E.A.Berlin
(eds) University of Georgia Press, Athens, GA, USA.
Crivos, M; Martínez M. R.; Navone G.; Pochettino M. L.; Arenas P.M; Digiani C.;
Teves L.; Remorini C.; Sy A.; Illkow, C; y Delorenzi N. 2000. “Un enfoque
etnográfico-biológico en el estudio de las enteroparasitosis en comunidades MbyáGuaraníes,
Misiones,
Argentina”.
En
Revista
Médica
“SZTUKA
LECZENIA”.
Universidad de Cracovia, Polonia.
Crivos, M., M. R. Martínez, G. Navone, M. L. Pochettino, L. Teves, C. Remorini, y
A. Sy. 2000. Los ‘tacho’: consideraciones sobre el origen y función de los
parásitos en dos comunidades Mbyá de la provincia de Misiones. En: Revista
Folklore Latinoamericano. IUNA. Buenos Aires, Tomo 4. En prensa.
Digiani, M. Celina. 1998. “Estudios parasitológicos en poblaciones indígenas del NE
argentino”. Informe de subsidio presentados a la Comisión de Investigaciones
Científicas de la FCNyM- Universidad Nacional de La Plata. Argentina
Hanneman, Robert A. Introducción a los Métodos del Análisis de Redes Sociales.
http://wizard.ucr.edu/~rhannema/networks/text/textindex.html
Informe de Avance: Proyecto “Estrategias para la integración de la comunidad
Mbyá-Guaraní de Kaaguy Poty -Valle del Cuñapirú, provincia de Misiones- en las
prácticas de diagnóstico y prevención de parasitosis” 2000. FCNyM. UNLPArgentina.
MacCarthy J. & T A. Moore. 2000. Emerging helminth zoonoses. International
Journal for Parasitology 30 : 1351-1360
Martínez, María Rosa, Marta Crivos y Laura Teves. (en prensa). Owners, Intruders,
and Intermediaries: The Claim for Land Ownership of the Mbya-Guarany (Cuña Piru
Valley, Missiones, Argentina). Stanley Engerman and Jacob Metzer (editors) En:
Ethno-Nationalism and Land Rights in Historical Perspective. Routledge.
Molina, José Luis. 2000. El análisis de redes sociales. Ediciones Bellaterra.
Barcelona, España.
Navone G.T.; Crivos M.; Martinez M.R.; Digiani M.C.; Pochettino M.L.; Teves L.;
Arenas P.; Ilkow C.; Delorenzi N.; Remorini C. y Sy A. 2000. Enteroparasitosis en
comunidades Mbyá-Guaraní: una experiencia interdisciplinaria en el Valle del
Cuña Pirú, provincia de Misiones. En: Actas del III Congreso Argentino de
Parasitología, Tomo I, Págs. 33-36.
Navone, G; Crivos, M; Martínez, M R; Digiani, C; Teves, L; Remorini, C y Sy, Anahí.
1999 “El enfoque interdisciplinario en Parasitología Humana. Una experiencia en
comunidades aborígenes Mby’á-Guaraní, Provincia de Misiones, Argentina”. En:
Actas XIV Congreso Latinoamericano de Parasitología. Federación Latinoamericana
de Parasitología, A.C. Acapulco, Guerrero, México.
Navone G; Crivos M.; Martínez M. R.; Digiani M. C.; Pochettino M. L.; Teves L.;
Arenas P.; Ilkow C.; Delorenzi N.; Remorini C. y Sy A. 2000. “Estrategias para la
prevención de enteroparasitosis en comunidades Mbyá-Guaraní de la provincia de
Misiones (Argentina)”. Publicado en Libro de Resúmenes de las III Jornadas de
Zoonosis Microbianas y Parasitarias. II Jornadas de Enfermedades Emergentes de la
provincia de Buenos Aires y I Jornadas de Medio Ambiente, Educación y Zoonosis
de la provincia de Buenos Aires. Pp. 61.
Slifko T.R.; Huw V.Smith, Joan B.Rose. 2000. Emerging parasite zoonoses
associated with water and food. International Journal for parasitology 30 :13791393.
Torchin, Mark E., Kevin D. Lafferty, Andrew P. Dobson, Valerie J. Mckenzie &
Armand M. Kuris. 2003. Introduced species and their missing parasites. En: Nature
421, 628 – 630, 6 febrero.
Vila
A.
R
y
C.
Bertonatti.
1994.
Situación
ambiental
de
la
Argentina:
recomendaciones y prioridades de acción. Boletín técnico No. 14., 71 pp., Buenos
Aires.
Wasseman, S y K. Faust. 1999. Social Network Analysis: Methods and Applications.
Cambridge University Press.
Anexo 1
Vínculos entre los individuos con parasitosis de Yvy Pyta y Kaauy Poty 1999.
Anexo 2
Especies parasitarias presentes en la población de Yvy Pyta y Kaauy Poty en 1999.
Anexo 3
Vínculos entre los individuos con parasitosis de Yvy Pyta y Kaauy Poty 2000.
Anexo 4Especies parasitarias presentes en la población de Yvy Pyta y Kaauy Poty en 2000.
Descargar