172 J.M. GIMÉNEZ BACHS, A. SALINAS SÁNCHEZ, J. LORENZO ROMERO Y COLS. casos clínicos 14 Arch. Esp. Urol., 57, 2 (172-174), 2004 Fibrohistiocitoma maligno retroperitoneal de gran tamaño: aportación de un caso. JOSÉ MIGUEL GIMÉNEZ BACHS, ANTONIO SALINAS SÁNCHEZ, JUAN LORENZO ROMERO, MARÍA JOSÉ DONATE MORENO, IBRAHIM R. HERNÁNDEZ MILLÁN, MIGUEL SEGURA MARTÍN, JOSÉ MARÍA PASTOR GUZMÁN Y JULIO VIRSEDA RODRÍGUEZ. Summary.- OBJECTIVES: To report one case of a large retroperitoneal malignant fibrohistiocytoma. METHODS/RESULTS: 40-year-old female with the diagnosis of a large right retroperitoneal mass after a study for right flank pain and weight loss over several months. Surgery was performed with excision of a large tumor; the pathologic diagnosis was malignant fibrohistiocytoma. CONCLUSIONS: Primary retroperitoneal tumors are rare neoplasias, usually diagnosed in advanced stages. The malignant fibrohistiocytoma is an unfrequent entity with difficulty histological diagnosis and poor prognosis. To date, the only valid option is surgery, because adjuvant treatments do not offer clear advantages today. Keywords: Malignant fibrohistiocytoma. Retroperitoneum. Retroperitoneal tumors. Servicio de Urología. Complejo Hospitalario Universitario de Albacete. Albacete. España. INTRODUCCIÓN Resumen.- OBJETIVO: Describir un caso de fibrohistiocitoma maligno retroperitoneal de grandes dimensiones. MATERIAL / RESULTADOS: Mujer de 40 años de edad a la que se le diagnostica gran masa retroperitoneal derecha tras estudio por dolor en fosa renal derecha y pérdida de peso de varios meses de evolución. Se realizó cirugía exerética de gran tumoración, cuyo diagnóstico anatomopatológico fue de fibrohisticitoma maligno. CONCLUSIÓN: Los tumores retroperitoneales primarios son neoplasias raras, habitualmente de diagnóstico tardío. El fibrohistiocitoma maligno constituye una entidad infrecuente con difícil diagnóstico histológico y con mal pronóstico. La única opción válida hasta el momento es la cirugía, ya que los tratamientos adyuvantes no ofrecen claras ventajas hoy en día. Palabras clave: Fibrohistiocitoma maligno. Retroperitoneo. Tumores retroperitoneales. Se denominan tumores retroperitoneales primitivos o primarios a aquellas tumoraciones, benignas o malignas, originadas en el espacio retroperitoneal, excluyendo los tumores de los órganos que se encuentran en esta región, como glándulas suprarrenales, riñones, uréteres, páncreas, porciones del duodeno y colon, grandes vasos, etc. Son tumores relativamente infrecuentes, ya que constituyen del 0,07 al 0,2% de las neoplasias en general (1). Podemos encontrar en el espacio retroperitoneal diversas estructuras cuyo origen embrionario es distinto, por lo que hay bastante variedad de tumores (en su mayoría malignos) que se hallan en esta localización (2). El fibrohistiocitoma maligno (también llamado xantoma fibroso maligno o fibroxantosarcoma) es un tipo de tumor de origen histológico incierto, de localización preferente en tejidos blandos de las extremidades y más raramente en retroperitoneo, en cuyo caso el diagnóstico es habitualmente tardío y dificultoso, y con tratamiento fundamentalmente quirúrgico, ya que, desgraciadamente, otros tratamientos adyuvantes no ofrecen resultados aceptables hasta el momento (3). CASO CLÍNICO Correspondencia José Miguel Giménez Bachs C/ Salamanca, 4 - 5º dcha. 02001 Albacete. España. e-mail: [email protected] Trabajo recibido el 30 de abril de 2003. Mujer de 40 años de edad, con antecedentes de alergia a la penicilina, artropatía psoriásica en tratamiento con AINEs y fumadora de 10 cigarrillos al día desde los 17 años. La paciente presenta dolor en fosa lumbar derecha de varios meses de evolución, y al realizarse una ecografía abdominal se halla masa heterogénea de 10x15 cm. en área suprarrenal derecha, por lo que se pide TAC para completar estudio. Al realizar la TAC (Figs. 1 y 2) se halla gran masa suprarrenal derecha de 15x18 cm., con dos componentes: uno de 6x4 cm. con FIBROHISTIOCITOMA MALIGNO RETROPERITONEAL DE GRAN TAMAÑO aumento de la vascularización y otra lesión heterogénea con posible contenido graso. Así mismo se observa sangrado retroperitoneal y peritoneal con desplazamiento del riñón derecho hacia delante y hacia la línea media. Es remitida a Urgencias para ser valorada por el Servicio de Urología. A la exploración, la paciente se encuentra afebril, normotensa y normocoloreada. A la palpación abdominal se pone de manifiesto efecto masa en hipocondrio derecho y mesogastrio, no doloroso. La paciente refiere anorexia y pérdida de 5 kg. de peso en el último mes. En el estudio analítico destaca un hematocrito del 36,1%, hemoglobina: 12,1 g/dl, leucocitos 10390 /ml (76,9% neutrófilos), urea 21 mg/dl, y creatinina de 0,7 mg/dl. El resto de parámetros, tanto bioquímicos como de coagulación, están dentro de la normalidad. 173 Se procede a su ingreso hospitalario para observación, completar estudio y tratamiento. Durante el ingreso se realiza RMN que confirma la existencia de una gran masa retroperitoneal derecha, por lo que tras completar estudio preoperatorio se realiza intervención quirúrgica. Se realizó laparotomía subcostal derecha, resecando la gran masa alojada en cavidad retroperitoneal, que engloba tanto al riñón como la glándula suprarrenal derecha. Dicha masa está adherida a pared de diafragma, que se lesiona accidentalmente en el procedimiento de exéresis, requiriendo su reparación quirúrgica y colocación de tubo de drenaje de neumotórax. Durante el acto quirúrgico precisó la transfusión de dos concentrados de hematíes. El estudio histopatológico (Fig. 3) describe pieza de 3156 gramos de peso con riñón y suprarrenal adherida de aspecto normal. Se aíslan 5 ganglios linfáticos que no presentan metástasis. El tumor está constituido por células fusiformes con núcleos ovales que se disponen en haces separados por estroma laxo, fibras colágenas y vasos sanguíneos. Aparecen adipocitos maduros y zonas de hialinización, así como células gigantes con amplio citoplasma eosinófilo y núcleos únicos o múltiples, hipercromáticos y pleomórficos. Inmunohistoquímicamente las células presentan positividad para anticuerpos antidesmina y antivimentina, y negatividad para citoqueratinas (CAM 5,2; DE1-3), actinas (1A4, HHF35) y proteína S-100. Diagnóstico definitivo: Fibrohistiocitoma maligno. Transcurridos 6 meses de la intervención quirúrgica la paciente se encuentra libre de enfermedad y sin afectación metastásica en la TAC. DISCUSIÓN Fig.1: Imagen de TAC donde se aprecia la extensión del tumor en hipocondrio derecho. El fibrohistiocitoma maligno es un tumor raro, con cierta predilección por el sexo masculino. Constituye, no obstante, el Fig.2: TAC: Desplazamiento del riñón derecho en sentido anterior y medial. Fig.3: Histología tumoral con células grandes multinucleadas, células fusiformes y vasos sanguíneos. 174 J.M. GIMÉNEZ BACHS, A. SALINAS SÁNCHEZ, J. LORENZO ROMERO Y COLS. sarcoma de partes blandas más común, pero su localización preferente es en extremidades, siendo la localización retroperitoneal la segunda en frecuencia. La mayor incidencia se produce en la edad adulta, entre la 5ª y 7ª década de la vida, siendo bastante inusual su presentación antes de la 4ª década (4). La localización retroperitoneal de los tumores permite el crecimiento de los mismos sin generar síntomas, hasta que alcanzan un gran volumen pudiendo producir compresión u obstrucción de órganos vecinos. Cuando estos tumores presentan sintomatología, habitualmente ya han alcanzado un gran volumen y el pronóstico se ensombrece (3, 4). Aunque la radiografía simple o la urografía pueden aportar datos al diagnóstico, éstos son inespecíficos y con la ecografía y sobre todo la TAC, obtendremos información acerca de la composición y densidad, extensión y relación con órganos y estructuras vecinas. Para conocer la verdadera naturaleza del tumor, la punción-aspiración guiada por TAC no parece ser un buen método, ya que puede llevar a errores diagnósticos, por lo que si es necesario el conocimiento de la naturaleza tumoral previo a la cirugía, está más indicada la biopsia insicional (5, 6). Quizá, uno de los aspectos más controvertidos en este tipo de tumores es su histogénesis y su dificultoso diagnóstico diferencial con otras neoplasias que muestren un grado de pleomorfismo similar. La forma convencional presenta tres patrones histológicos fundamentalmente: estoriforme o "en rueda de carro", fascicular y pleomórfico, siendo éste último el más frecuente. Existen también las variantes mixoide, inflamatoria y angiomatoide, mucho más raras. Su variado contenido celular hace difícil la diferenciación con otras entidades y lo que los caracteriza es la presencia de histiocitos y células fibroblásticas (3). El tratamiento es esencialmente quirúrgico y consiste en la resección completa del tumor, dado su potencial maligno (1, 3, 4, 5, 7) . La excisión de ganglios linfáticos no parece mejorar el pronóstico, y parece que esta actitud se reserva para aquellos casos en los que macroscópicamente se sospecha afectación ganglionar (3). Otros tratamientos de apoyo a la cirugía tales como la quimioterapia no han tenido el éxito esperado, obteniendo tasas de respuesta en torno al 33%, pero encontrando mayor supervivencia que en los pacientes que no responden (8). La radioterapia local postoperatoria a altas dosis puede resultar útil para el control local de la enfermedad, aunque todavía no está claro el beneficio que estos tratamientos aportan. Por tanto, la cirugía puede considerarse la única opción válida con intención curativa y otros tratamientos sirven de apoyo o como tratamiento paliativo (3, 7, 9). El fibrohistiocitoma maligno tiene un comportamiento agresivo y la supervivencia a los dos años ronda el 60%, con un alto porcentaje de recidivas y de metástasis a distancia. Parece haber cierta relación entre el tamaño tumoral y su potencial metastásico, aunque en algunos casos tumores de pequeño tamaño han presentado metástasis, pero fundamentalmente cuando éstos se localizaban en planos más profundos (afectando la fascia). La tasa de recidivas no parece tener tanta relación con el tamaño (3, 10). Así pues, los factores de buen pronóstico son la localización superficial, el tamaño menor de 5 cm., la posibilidad de resección radical y el grado celular y estadio tumoral bajos. No obstante, es importante el seguimiento estrecho de este tipo de tumores ante la eventualidad de una recidiva o la aparición de metástasis. BIBLIOGRAFÍA y lecturas recomendadas (*lectura de interés y **lectura fundamental) *1. ZULUAGA GÓMEZ, A.; MARTÍNEZ TORRES, J.L.; DE LA FUENTE SERRANO, A.: "Patología del retroperitoneo. Tumores retroperitoneales." En: Resel, ed. Formación continuada en Urología. Vol. 2, nº 1: 11-23. Barcelona, Pulso ediciones. 1996. 2. GARCÍA FREIRE, C.; VILLAR NUÑEZ, M.; LÓPEZ PITA, J. y cols.: "Histiocitoma fibroso benigno retroperitoneal: presentación de un caso." Actas. Urol. Esp., 22: 524, 1998. **3. WEISS, S.W.; ENZINGER, F.M.: "Malignant fibrous histiocytoma. An analysis of 200 cases." Cancer.; 41: 2250, 1978. *4. POVAR, J.; FRANCO, J.M.; MUÑOZ, J.R. Y COLS.: "Histiocitoma fibroso maligno de partes blandas: descripción de 10 casos." Med. Clin., 96: 6, 1991 5. GÓMEZ DE LA TORRE, R.; TRIVIÑO, A.; POZUELO MANCHÓN, M. y cols.: "Histiocitoma maligno del retroperitoneo: un diagnóstico complicado." Ann. Med. Interna., 11: 307, 1994. *6. REPASSY, D.; CSATA, S.; STERLIK, G. y cols.: "Retroperitoneal malignant fibrous histiocytoma." Int. Urol. Nephrol., 31: 303, 1999. **7. LEWIS, J.L.; LEUNG, D.; WOODRUFF, J.M. y cols.: "Retroperitoneal soft-tissue sarcoma. Analysis of 500 patients treated and followed at a single institution." Ann. Surg., 228: 355, 1998. 8. LEITE, C.; WOODWIN, J.W.; SINKOVICS, J.G. y cols.: "Chemotherapy of malignant fibrous histiocytoma. A southwest oncology group report." Cancer., 40: 2010, 1977. 9. EILBER, F.C.; EILBER, K.S.; EILBER, F.R.: "Retroperitoneal sarcomas." Curr. Treat. Options. Oncol., 1: 274, 2000. 10. MILLÁN, J.; ROMERO, J.; GARCÍA VADILLO, C. y cols.: "Histiocitoma fibroso pleomórfico maligno de localización retroperitoneal." Med. Clin., 90: 474, 1988.