Informe `Las familias españolas ante la crisis económica`

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La crisis económica
INFORME
LAS FAMILIAS
ESPAÑOLAS
ANTE
LA CRISIS
ECONÓMICA
JUNIO, 2008
BARÓMETRO DE LA FAMILIA 1
Título: Los españoles ante la crisis económica.
Texto: José Manuel Lacasa ([email protected])
Fecha de realización: Junio, 2008.
Realización: Encuesta realizada por GAD (Gabinete
de Análisis Demoscópico) para PADRES Y COLEGIOS
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PRESENTACIÓN
Desde principios de año, el goteo de malos datos en referencia a la economía española ha ido creciendo hasta transformarse en una avalancha. En este tiempo, y más en el periodo pre-electoral,
los políticos han estado discutiendo si esto era una crisis o una recesión, si esto se acababa en cuatro días o si la mala situación había venido para quedarse, si había que ser optimista o pesimista… En PADRES y COLEGIOS queremos salirnos de la órbita de las discusiones bizantinas de los
políticos y preguntar a las familias españolas cómo ven la situación, y por ello hemos elegido
como tema principal del Barómetro de la Familia de PADRES y COLEGIOS cómo sufren y cómo
actúan las familias ante la crisis económica.
El Barómetro de la Familia quiere saber no sólo cómo ven las familias la situación general de la
economía española, sino cómo ven su propia situación y qué expectativas tienen en cuanto a su
capacidad económica dentro de un año. Y más aún, qué aspectos de la crisis han comenzado a
incidir más en los bolsillos de las familias españolas. Crisis es una palabra abstracta –aunque con
una carga emocional evidente–, y lo importante es en qué medida afectan concretamente a las
familias españolas la subida de los tipos de interés de las hipotecas, la escalada del precio de la
gasolina o de la cesta de la compra, la caída de la bolsa o el parón de la construcción.
Además, hemos querido preguntar a las familias españolas qué hacen para capear la crisis y
cuáles son los efectos de la falta de dinero en los patrones de consumo de los españoles. En resumen, ¿en qué dejan de gastar los españoles lo que pagan de más al llenar el depósito, en el recibo
de la hipoteca o en el mercado? También nos interesa cómo se están transformando los patrones
de ahorro de los españoles, en tres aspectos concretos que han sido muy populares durante los
años de bonanza económica: los planes de pensiones, las cuentas ahorro-vivienda y la bolsa y los
fondos de inversión.
Por último, preguntamos a las familias españolas lo que piensan de las medidas que ha tomado el Gobierno en los últimos meses y que pueden tener cierto impacto para paliar la crisis de las
familias españolas.
Ficha técnica: Barómetro de la Familia de PADRES Y COLEGIOS
Universo: españoles mayores de 18 años
Muestra: 1.000 entrevistas telefónicas.
Error: ±3,2% con un grado de confianza del 95,5% y p=q=50
Fecha de campo: 5 al 20 de mayo
Instituto: GAD (Gabinete de Análisis Demoscópico)
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1. PERCEPCIÓN DE LA CRISIS
1.1. Percepción de la crisis económica
El 54% considera que la situación económica actual es mala
Para los españoles no hay duda: la situación económica del país es mala para un 54% de los entrevistados, y regular para un 41%. Tan sólo un 4% piensa que la situación es buena. Y no hay variaciones en prácticamente ninguno de los segmentos de población: lo piensan tanto varones como
mujeres, jóvenes o viejos, estén trabajando, estudiando o jubilados, hayan estudiado o no. Tan
sólo se aprecia una mínima diferencia entre los solteros y el resto: aquellos son los únicos donde
son mayoría los que piensan que la situación está regular en vez de mal.
Esta situación es coherente con la encuesta del CIS perteneciente a abril de 2008, publicada
recientemente: en dicho barómetro los españoles que piensan que la situación económica actual
es “regular” son el 44%, mientras que los que piensan que es “mala” o “muy mala” son el 46%. La
diferencia entre una encuesta y otra puede estribar, muy probablemente, en que el trabajo de
campo del barómetro familiar se hizo unas semanas después que el de la encuesta del CIS, y visto
el deterioro acelerado de la percepción de la situación económica por los españoles –según el
barómetro del CIS, en un mes el porcentaje de españoles que pensaban que la situación era mala
aumentó nueve puntos–, no es de extrañar que el Barómetro de la Familia haya detectado una
percepción aún peor a pesar del poco tiempo transcurrido. Como dato de contraste, hace exactamente un año el barómetro de abril de 2007 decía que el 27% de los españoles pensaba que la
¿Cómo calificaría la actual situación económica...?
...en España
...en España, dentro de un año
El 95% piensa que no va bien
La mitad piensa que iremos a peor
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
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situación económica general era “mala” o “muy mala” –por cierto, los mismos que pensaban que
era “buena” o “muy buena”.
Donde sí hay diferencias de percepción es según el espectro ideológico en que se sitúen los
encuestados: sólo entre los que se consideran de “izquierda moderada” son mayoría los que piensan que la situación está regular, y la van viendo peor según se alejan de esta ideología, tanto hacia
la derecha como a la izquierda. Si clasificamos a los encuestados por recuerdo de voto, el 7% de
los votantes del PSOE en las elecciones de 2008 piensa que la situación económica es buena, frente a un 48% que considera que es regular y un 43% mala; entre los votantes del PP, el 35% piensa
que la economía va regular, mientras que un 64% opina que va mal.
Con respecto a cómo estará la economía española dentro de un año, casi la mitad de los españoles, un 48%, opina que estará peor que ahora, un 23% que estará igual y un 15% que estará
mejor. Una vez más, no hay diferencias por sexos ni, apenas, por tramos de edad –tan sólo los
mayores de 65 años parecen pensar que las cosas estarán menos mal dentro de un año que los que
se encuentran entre los 30 y los 44 años. Tampoco las hay por nivel de estudios. Sí las hay –la previsión de le economía tiene mucho que ver con la confianza en el Gobierno– si se segmenta por
recuerdo de voto: entre los votantes del PSOE piensan que la economía española estará mejor
dentro de un año el 23%, igual un 25% y peor un 34%; entre los del PP creen que mejorará el 7%,
igual un 20% y peor un 61%. Parece evidente que el Gobierno necesita un plan que al menos restaure la confianza de sus propios electores.
Por establecer una comparación que permita ver con cierta distancia la evolución de esta percepción, es útil acercarse de nuevo al barómetro del CIS, que hace una pregunta similar desde
hace años: si en abril de 2008 el 11% piensa que la economía española irá mejor en un año, el 30%
estima que irá igual y el 45% que funcionará peor, en abril de 2007 eran el 14% los que pensaban
que mejoraría, el 41% que iría igual (recordemos que la valoración de la economía en esa época
era mucho mejor que la actual) y el 27% que empeoraría.
1.2. Percepción de la crisis en la propia familia
Los que esperan que su situación vaya a peor son ya el 19%, frente al 8% hace año y medio
Si se pregunta no por la situación general de España, sino por la de la propia familia, las cosas
cambian: sólo el 18% se ve ya en mala situación, aunque el 52% se ve regular –la muy española respuesta en tiempos de crisis: “tirando”–, mientras que un 29% se ve bien. La situación es percibida
igual tanto por hombres como por mujeres, y tampoco hay diferencias significativas por tramos
de edad. En este caso no hay diferencias ideológicas, tanto los votantes del PP como los del PSOE
sienten la crisis por igual. Sí las hay, como veremos más adelante, entre los afectados por distintos
aspectos de la crisis: por ejemplo, aquellos afectados “mucho” o “bastante” por la crisis hipotecaria o por el parón de la construcción se ven estadísticamente más afectados que los que se ven
“poco” o “nada” perjudicados; y, por el contrario, aquellos que confiesan que la caída de la bolsa
les ha cogido de lleno no parecen notarlo mucho, pues un 40 % consideran su situación “buena”,
y sólo un 10% “mala”. Volveremos sobre ello en el próximo capítulo.
¿Se puede decir entonces que la crisis no ha llegado aún a las familias? No exactamente, aunque hay claras diferencias entre la situación vivida personal y la percepción de la situación general. Para ello es útil volver al barómetro del CIS, que aunque no suele preguntar por la situación
familiar habitualmente, sí que lo ha hecho en alguna ocasión, la última en diciembre de 2006. En
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¿Cómo juzga la situación económica...?
...de su familia
...de su familia, dentro de un año
Más de la mitad se ve regular
Pocas esperanzas de mejorar
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
esa época la percepción de crisis era aún muy baja (un 25% frente al 46% actual), y los españoles
contestaban así a la pregunta “Me gustaría que me dijera si, en la actualidad, se encuentra
Ud. muy satisfecho, bastante, poco o nada satisfecho con su actual nivel de vida?”: un
9% estaba muy satisfecho, y un 71% bastante satisfecho; por contra, un 18% se encontraba poco
satisfecho, y un exiguo 1,5% no estaba nada satisfecho. Es decir, aunque la pregunta del CIS no
recogía el término medio, en la nuestra, a la hora de decantarse –como se ha indicado antes– más
de la mitad elige el “regular”.
Cuando se pregunta por cómo piensan que estará su situación económica familiar dentro de
un año, en comparación con la presente, un 18% piensa que irá mejor, un 55% que estará igual y
un 19% espera estar peor. Es preocupante que entre los que ya tienen una situación familiar percibida como mala, son nada menos que un 37% los que creen que dentro de un año estarán peor.
Como veremos, esta percepción tiene mucho que ver con el aumento de los tipos de interés, la
verdadera espada de Damocles para muchas familias. Aunque no hay diferencias significativas
por sexos, sí las hay por edades, aunque el que los jóvenes vean mejor el futuro que los adultos es
habitual, y sale en las encuestas habitualmente.
En este caso, la percepción vuelve a tener un aspecto ideológico: un 23% de los votantes del
PSOE piensan que estará mejor –frente a un 12% de votantes del PP–, y un 14% confiesa que espera encontrarse peor –en el PP esta cifra es del 24%.
Para poner en perspectiva estos datos, volvemos a recurrir al barómetro del CIS de diciembre
de 2006. Ante la pregunta “¿Y cómo cree Ud. que será su situación económica personal
dentro de un año: mejor, igual o peor que ahora?”, los españoles contestaban en un 32% que
“mejor”, en un 55% que “igual”, mientras que un 8% esperaban estar “peor”. Es decir, ha habido un
“corrimiento hacia el rojo” en un año y medio: aunque los que esperan no moverse mantienen la
misma proporción, si en 2006 los que esperaban empeorar eran cuatro veces menos que los que
pensaban mejorar, hoy ambos grupos son iguales.
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Incidencia de las distintas manifestaciones de la crisis
Porcentaje de personas que contesta estar muy o bastante afectados por los siguientes aspectos
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
2. INCIDENCIA DE LOS DISTINTOS ASPECTOS DE LA CRISIS
2.1. Extensión frente a impacto en las manifestaciones de la crisis
A un 43% de los españoles les afecta mucho la subida de la cesta de la compra
Prácticamente todos los españoles se ven afectados por al menos una de las manifestaciones de
la crisis. Dos de ellas en concreto, la subida de la cesta de la compra y la subida de la gasolina afectan “mucho” o “bastante” al 89 y al 71% de los españoles, respectivamente. Otras dos, aunque más
graves, afectan en menor medida: mientras que la subida de las hipotecas afecta “mucho” o “bastante” a un 30% de los españoles, el parón de la construcción lo sufren en la misma medida un
27%. La manifestación de crisis menos extendida es la caída de la bolsa, que afecta “mucho” o
“bastante” al 13% de los españoles. No se ha preguntado por manifestaciones de crisis más graves
–paro, suspensiones de pagos, etc.– porque todavía tienen una incidencia poco significativa estadísticamente.
Sin embargo, aunque la extensión de algunas manifestaciones de la crisis es mayor porque
afecta a un mayor número de familias, no es menos cierto que el impacto sobre esas familias es
menor que otras circunstancias menos extendidas. Como veremos más adelante, la subida de la
gasolina o la de la cesta de la compra, a pesar de su elevada incidencia, no tienen por sí solas la
capacidad de afectar a la percepción de los españoles de su situación familiar –tanto en el
momento actual como en la esperanza de remontar dentro de un año–, e incluso a la percepción
global, que tiene la subida de las hipotecas. Por poner un ejemplo, entre los que les afecta mucho
la subida de las hipotecas, un 78% reconocen que la subida de la gasolina les afecta mucho también, el mismo 78% que dice que les afecta mucho la cesta de la compra. Sin embargo, la media
de muy afectados por la subida de la gasolina es del 31%, y los muy afectados por la subida de la
cesta de la compra, el 43%. A perro flaco –o hipotecado– todo se le vuelven pulgas.
Incidencia de las manifestaciones de la crisis
Contraste entre la extensión y el impacto de la crisis
Subida de la hipoteca
Subida de la gasolina
Subida de la cesta de la compra
Caída de la bolsa
Parón en la construcción
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
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Extensión
Impacto
Media
Alta
Alta
Baja
Media
Alto
Medio
Medio
Bajo
Medio
¿En qué medida le han afectado las siguientes manifestaciones de la crisis?
Subida de la hipoteca
Subida de la gasolina
Cesta de la compra
Afecta a buena parte de los españoles
El 71% se ve muy o bastante afectado
Afecta mucho a la mitad
Caída de la bolsa
Parón en la construcción
Escaso impacto en las familias
Un 10%, muy afectado
Las distintas manifestaciones de la
crisis tienen distinta incidencia en
las familias: en cuanto a número de
personas afectadas, la extensión de
la subida de productos básicos es
mayor que el resto. Sin embargo,
aunque afecta a menos personas, la
subida de las hipotecas tiene un
impacto mayor en las familias que
tienen una, primero porque les afecta además de la subida de los productos básicos, y segundo porque
su percepción del impacto de la crisis en su familia es mayor. Por si
fuera poco, se ven obligados a restringir su consumo en mayor medida
que los demás.
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
La subida de la cesta de la compra afecta mucho a un 43% y bastante a un 46%, mientras que
afecta poco al 8% y nada al 2%. Es, por tanto, la que más incidencia tiene en cuanto a número de
personas afectadas. Por sexos, afecta más a las mujeres –un 46% contestan que mucho– que a los
hombres –dicen sentirse muy afectados un 39%. Por edades, afecta más a los que están entre los
30 y los 64 que a los jóvenes y a los viejos. Por recuerdo de voto, afecta por igual a los votantes de
todos los partidos.
La subida de la gasolina afecta mucho al 31% de los españoles, bastante al 40% y poco al 11%.
Un 18% dicen que no les afecta para nada. Por sexos no hay apenas diferencias, y tampoco las hay
por edad, salvo que los afectados son significativamente menos entre los mayores de 65 años (los
mayores conducen mucho menos). Tampoco hay diferencias por recuerdo de voto.
La subida de las hipotecas afecta mucho al 11% de los españoles, y bastante a otro 19%. “Poco”
contestan un 16%, mientras que un 54% dice que no les afecta nada. Por sexos, les pesa a todos
por igual, pero no así por edad: a los que tienen entre 18 y 44 años les afecta significativamente
más que a los que tienen entre 45 y 64 años, mientras que apenas les pesa a los mayores de 65 años
(sólo un 5% dicen sentirse muy o bastante afectados). Por recuerdo de voto vuelve a no haber diferencias.
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Es importante destacar, como se ha apuntado antes, que los afectados por la hipoteca parecen
ser los que más están sufriendo durante el estadio inicial de la crisis. Para empezar, a la subida de
la hipoteca se les suma además la subida de la gasolina y de la cesta de la compra, y además su
percepción varía: piensan, por ejemplo, que la subida de la cesta de la compra, que afecta a todos
más o menos por igual, les afecta más a ellos. Cuando uno tiene el agua al cuello, un vaso más es
bastante para ahogarse.
No es de extrañar que muchas familias se encuentren ahogadas por las hipotecas: en apenas
dos años los tipos de interés han pasado de poco más de un dos y medio a más de un cinco por
ciento. Es una medida abstracta, pero fácil de concretar: por cada 10.000 euros de capital de hipoteca, una familia que la tenga a 30 años, pasa de pagar 41 euros a desembolsar 57 al mes, un 39%
más. Y si sumamos todas las cuotas se pasa de pagar menos de 5.000 euros de intereses a pagar
más de 10.000 –es decir, acaba pagando más intereses que casa. Una familia que se haya hipotecado en los últimos cinco años, y que le queden por pagar 300.000 euros de capital, pasa de pagar
al mes 1.225 euros a más de 1.700. No es de extrañar el poder que tienen las hipotecas de desequilibrar un presupuesto familiar, pues nada ha subido tanto en tan poco tiempo. Además, la situación se ha vuelto en un corto espacio una ratonera: demasiadas veces el capital comprometido es
ya mayor que el valor real del piso, lo que sumado a las dificultades de venta de inmuebles cierran
con frecuencia todas las salidas.
En este sentido, se puede decir que la crisis es sobre todo hipotecaria, aunque luego veremos
que la capacidad para extenderse a otros sectores es muy alta. Por ello, la medida de facilitar la
renegociación de las hipotecas puede ayudar a algunas familias a sacar la cabeza fuera del agua
–aunque a un precio muy alto: por ello no está especialmente bien valorada–, pero habría que
pensar en otras medidas. Una de ellas, de carácter social, sería evitar que más familias se vieran
obligadas a hipotecarse con la inestabilidad de tipos y precios actual: y, por ello, una moratoria en
la obligación de comprar una casa si se ha desgravado durante tres años la cuenta ahorro-vivienda en la declaración de IRPF podría ayudar.
El parón en la construcción afecta “mucho” al 10% y “bastante” al 17%, mientras que poco al
14% y nada al 57%. En este caso, las cifras suben mucho por los “hipotecados”, que al hablar de
viviendas parecen dejarse “arrastrar” por una especie de hipersensibilidad y contestan también
que mucho. Naturalmente, se ven afectados no por el paro en este sector, sino sobre todo por la
caída del valor del piso hipotecado.
Por último, la caída de las bolsas sólo ha afectado “mucho” al 4%, “bastante” al 9% y “poco” al
14%. Y nada al 57%. Además, estas pérdidas, como veremos, no parecen afectar demasiado a la
situación económica familiar. No hay diferencias significativas por sexo, edad o recuerdo de voto.
2.2 Cambios de percepción y situación debidos a las manifestaciones de la crisis
Tener hipoteca multiplica los efectos de la crisis
Ya hemos destacado antes cómo el tener o no hipoteca influía de forma clara en cómo sienten que
les afectan otras manifestaciones de la crisis: mientras que el 78% de los “muy hipotecados”
–aquellos que contestan que la subida del euribor les concierne mucho– siente que le afecta
mucho la subida de la gasolina, ese porcentaje se reduce al 24% si los que contestan son aquellos
que dicen que la subida de las hipotecas no les ha afectado nada. Además, el 65% de los que dicen
que la subida de las hipotecas les afecta bastante dicen que la subida de la gasolina les afecta también bastante (sólo un 35% de los que la hipoteca no les afecta lo dicen).
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Pero también es interesante examinar los cambios de percepción de la situación de la economía española y la de la economía familiar entre los que se ven afectados por las distintas manifestaciones de la crisis. Por ejemplo, hay nada menos que 13 puntos de diferencia en los que creen
que la situación económica en España es mala si los entrevistados sienten que la hipoteca les afecta mucho o bastante, frente a los que les afecta poco o nada: en otras palabras, el 63% de los que
sienten el peso de la hipoteca piensan que la situación económica de España es mala, frente al
50% de los que les afecta poco o nada la subida del euríbor.
También afecta, naturalmente, a la percepción de la situación económica familiar: mientras
que un 24% de los hipotecados piensan que su situación económica familiar es mala, eso sólo lo
piensan el 16% de los que la subida hipotecaria les afecta poco o nada.
Por el momento el estudio –con las limitaciones que tiene– parece describir sobre todo una crisis hipotecaria agravada por un escenario inflacionista en los productos básicos. Con el paro creciendo, la situación puede calificarse de preocupante. Sin embargo, en el capítulo siguiente, que
intenta conocer dónde las familias comienzan a ahorrar para hacer frente a la crisis, puede ser
visto también como pistas sobre una inmediata restricción del consumo o, en otras palabras,
cómo la crisis hipotecaria se puede ir extendiendo a otros sectores. Algunos, como el de la industria del automóvil, ya han hecho saltar las alarmas. Otras pueden llegar pronto.
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3. HACER FRENTE A LA CRISIS
3.1. Medidas generales para hacer frente a la crisis.
El 45% de los jóvenes (18-29 años) está pensando en ponerse a trabajar para ayudar en casa
La crisis económica está afectando de forma desigual ante los españoles. Lo que para unos obliga
a unos pequeños ajustes, para otros es un ajuste del cinturón en toda regla. Además, cada uno prefiere –o toma porque no tiene más remedio, o tiene posibilidades con unas más que con otras
otras– algunas medidas sobre otras. Unas son más drásticas que otras, aunque la mayoría tienen
un gran impacto en la marcha de la economía, y por ello tienen la capacidad de extender la crisis
a otros sectores.
Una de las medidas de las que ya se está viendo el impacto es la caída de las ventas de automóviles. Es un sector especialmente sensible a las crisis –y se hacen oír más que otros sectores, todo
hay que decirlo. Lo cierto es que ya la encuesta detectaba que un 17% de los españoles tenía intención de retrasar el cambio de coche debido a la crisis, mientras que un 35% no pensaban en tomar
esta medida. Es significativo que sea un 25% de los que se ven muy o bastante afectados por la
subida de las hipotecas.
Es preocupante que entre los que tienen una hipoteca, sean ya el 18% los que esté pensando en
renegociarla con el banco. A pesar del aliento del Gobierno a esta medida, es una decisión muy
¿Va a retrasar el cambio de coche?
Todos
Hipotecados
Un 17% de los españoles lo hará...
...por un 25% de los hipotecados
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
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Otras medidas ante la crisis
Renegociar la hipoteca
Ponerse a trabajar
¡El 18% de los que la tienen!
(Jóvenes entre 18 y 29 años)
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
cara que sólo se toma cuando no se tiene más remedio, por lo que debe dar que pensar el que
estén barajándola casi un quinto de los hipotecados.
También es muy preocupante, sobre todo en un país con un 31% de abandono educativo temprano, y que tiene el sistema educativo con las peores tasas –salvo Portugal– de titulación de Europa, el que el 45% de los jóvenes entre 18 y 29 años estén pensando en ponerse a trabajar para ayudar en casa, lo que en muchos casos puede precipitar el abandono de los estudios.
Por otro lado, ya hay un 22% de los españoles que está pensando en buscar ingresos extras para
llegar a fin de mes, aparte de los conseguidos en su trabajo habitual. De esta medida son más partidarios los jóvenes entre 18 y 29 años (43%) y los que tienen entre 30 y 44 años (33%). Entre los
hipotecados, la medida es muy “popular”, pues están pensando en ella el 35%.
Una de las medidas que más llamará la atención, debido a las fechas en las que estamos, y al
impacto económico que esto puede tener en España, es la restricción de las vacaciones. Nada
¿Va a buscar ingresos extra para llegar a fin de mes?
Todos
Hipotecados
Un 22% de los españoles lo hará...
...frente al 35% de los hipotecados
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
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¿Va a dejar de viajar o salir de vacaciones?
Todos
Hipotecados
Un 37% se queda en casa...
...y un 53% entre los hipotecados
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
menos que el 37% de los españoles ha decidido dejar de viajar o de salir de vacaciones como medida de ahorro, por un 51% que piensa mantener sus planes. Entre los hipotecados es la medida más
popular: nada menos que un 53% de aquellos muy o bastante afectados por la hipoteca se quedará este año “disfrutando” de la casa que tanto le cuesta pagar, y sólo un 40% de estos saldrá de
vacaciones.
3.2. Cambios en los patrones de consumo.
Más de la mitad de los españoles ya ha reducido el gasto en ropa y en bares y restaurantes
En el momento de realizar la encuesta las familias españolas ya estaban reduciendo gastos. Los
cambios de patrones de consumo afectan sobre todo a productos y servicios más superfluos
¿Ha tenido que reducir el gasto en...?
Pan, leche, huevos
Carne y pescado
Ya son el 12% de los españoles
Un 15% reduce el gasto en proteínas
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
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¿Ha tenido que reducir el gasto en...?
Menaje y muebles
Ropa y complementos
Un 40% reduce en este concepto
Más de la mitad deja de comprar ropa
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
desde el punto de vista de las familias –no así para los sectores económicos implicados–, aunque
ya comienzan a notarse, aún a pequeña escala, reducción en algunos productos básicos.
Por ejemplo, el 12% de los españoles reconoce haber reducido su gasto en productos como pan,
leche o huevos, mientras que un 15% admite restringir el consumo de carne y pescado. Es decir,
la crisis comienza a alterar la dieta de una parte de las familias españolas. Además, entre los que
dicen sentirse afectados mucho o bastante por la subida de las hipotecas, los que ya han reducido el consumo de leche, pan y huevos son el 20%, mientras que son el 25% los que han reducido
la compra de carne y huevos.
En otros sectores la reducción del gasto es una decisión tomada por un mayor número de familias. Por ejemplo, en menaje y muebles son ya un 40% de los españoles los que han decidido reducir gastos, y en ropa y complementos esta decisión ya la toman más de la mitad de los encuestados: el 51% admite estas restricciones.
¿Ha tenido que reducir el gasto en...?
Libros, música, DVD
Bares y restaurantes
También ahorro en productos culturales
Malas noticias para la restauración
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
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¿Ha tenido que reducir el gasto en...?
Telefonía, internet, TV
Espectáculos
A los esp les cuesta ahorrar aquí
Un 42% sin Indiana Jones
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
No son pocos tampoco los que han reducido el gasto en productos culturales: el 38% admite
haber restringido la compra de libros, música o películas de DVD. Por o que se refiere al consumo
en bares y salidas a restaurantes, uno de los sectores con más peso en la economía española, la
crisis ha obligado a reducirlo al 52% de los españoles.
Un sector donde los españoles parece que están menos dispuestos a reducir gastos es en el de
las comunicaciones: vistos los porcentajes anteriores, sorprende que sólo el 28% haya reducido el
gasto en telefonía, internet o televisión de pago. Sí es mayor la reducción en la asistencia a espectáculos (cine, teatro, conciertos): un 42% ya se ha visto en tal tesitura.
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¿Ha perdido capacidad de ahorro y ha dejado de invertir en...?
Plan de pensiones
Bolsa y fondos
Cuenta ahorro-vivienda
La mitad los ha reducido
Un tercio ha dejado de invertir en ellos
Más de un tercio abandona
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
3.3. Cambio en los patrones de ahorro familiar
Un tercio abandona las cuentas ahorro-vivienda y la mitad reduce los planes de pensiones
Naturalmente, con los índices de reducción de consumo vistos en el punto anterior, no sería de
extrañar que también se vieran afectados los patrones de ahorro de las familias españolas. El
Barómetro de la Familia ha querido saber cuantas familias han perdido capacidad de ahorro y han
dejado de invertir en algunos de los productos de ahorro-inversión más populares en los últimos
años.
Es preocupante, en un momento en que puede haber problemas a medio plazo en la caja de la
Seguridad Social para mantener el poder adquisitivo de las pensiones que el 23% de los encuestados (es decir, casi la mitad de los que lo tienen) se haya visto obligado a reducir la inversión en
planes de pensiones.
Aunque la incidencia de la caída de la bolsa ha sido menor en las familias españolas –pero,
desde luego, no en la economía nacional–, es significativo que la tercera parte de los que invertían en bolsa y fondos haya tenido que retirarse debido a la crisis económica.
Respecto a las cuentas de ahorro-vivienda, aunque es el producto menos utilizado debido a la
corta duración de sus ventajas fiscales, es más de un tercio de los que lo utilizan los que se han
visto obligados a reducir la inversión. No sabemos qué parte lo hace como consecuencia directa
de la crisis –es decir, por falta de dinero- y qué parte sencillamente ha dejado de ver su utilidad
porque lo que se han visto obligados es a posponer la compra de una casa porque no pueden
hacer frente a una hipoteca.
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¿Qué le parecen las siguientes medidas del Gobierno?
2.500 euros nacimiento
400 euros IRPF
100 euros madres
Más de la mitad dudan de su eficacia
Dos tercios no creen en esta medida
Tampoco es especialmente valorada
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
4. VALORACIÓN DE LAS MEDIDAS DEL GOBIERNO
El alquiler joven es la medida más valorada
Algunas de las medidas tomadas por el gobierno en la pasada legislatura o al principio de la presente pueden tener un impacto para paliar la crisis. Sin embargo, pocas de estas medidas son bien
valoradas por la mayoría de los españoles. Aunque todas las opiniones tienen un sesgo político
–son mejor valoradas por los que han votado al PSOE que los que lo han hecho al PP–, son pocas
las que convencen a la mayoría de los votantes del PSOE hace dos meses.
Las medidas de reparto de dinero no parecen ser valoradas como eficaces por la mayoría de los
españoles. Ni los 2.500 euros por hijo, ni la devolución de los 400 euros a través del IRPF ni los 100
euros para las madres con hijos menores de tres años consiguen que el 50% las considere eficaces. Entre los votantes del PSOE, la medida de los 2.500 euros es considerada eficaz o muy eficaz
por el 49%, los 400 euros por el 39% y los 100 euros por el 47%.
¿Qué le parecen las siguientes medidas del Gobierno?
Alquiler joven
Becas
Renegociación hipoteca
Una de las medidas más populares
Pocos dudan de su eficacia
Tampoco convence a demasiados
FUENTE: Barómetro de la Familia. Junio, 2008.
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Mejor prensa tienen las becas, tanto entre los españoles en general como entre los votantes del
PSOE en particular. El alquiler joven es considerado muy o bastante eficaz por el 56% de los españoles y por el 70% de los votantes del PSOE. Las becas son consideradas eficaces por el 68% de los
votantes del PSOE y por el 59% de los españoles.
La medida que menos emoción despierta, a pesar de cómo se ven afectados aquellos que tienen una hipoteca, es la de la renegociación de las hipotecas: sólo el 34% admite cierta eficacia, y
sólo el 42% de los votantes del PSOE.
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