El concepto de la prehistoria

CIENCIAS SOCIALES
Prehistoria
Recuerde que:
•
Nuestro Sistema Solar forma parte de la galaxia conocida como Vía Láctea,
que se formó hace unos 4,600 millones de años y los geólogos dividen su
historia en Eras y Periodos.
•
El ser humano es el único ser vivo que se ha preocupado por conocer su
origen y su pasado. Esta preocupación le ha permitido crear una ciencia:
la Historia.
•
La Historia es la ciencia que estudia al ser humano a través del tiempo.
Para su mejor estudio, ésta se divide en dos periodos: el prehistórico y el
histórico.
Sabía que:
•
Los grupos humanos de la prehistoria trabajaron principalmente la piedra.
•
Con este material construyeron los primeros monumentos de la humanidad.
•
De la última glaciación (Würm) a nuestro tiempo sólo ha transcurrido 25,000
años, lo que hace pensar que nos encontramos en un periodo interglaciar.
•
Dos son las características principales del ser humano prehistórico: fabricar
instrumentos y preguntarse por su propia existencia en el mundo.
•
Durante el Paleolítico Superior se fabricó la aguja de coser, así como las
primeras lámparas para alumbrarse en la oscuridad.
Propósito:
Estudiar este tema nos permitirá obtener un panorama general de la Edad Prehistórica, introduciéndonos al origen del Homo sapiens, así como en su trayectoria cultural,
en diferentes lugares de las diversas etapas de dicha época.
El concepto de la prehistoria
Alguna vez se ha preguntado ¿qué es y por qué nos interesa el estudio de la prehistoria?
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PREHISTORIA
La palabra prehistoria tiene dos significados:
•
Por un lado, se refiere al periodo del pasado de la humanidad anterior a la
historia,
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Y por otro, a la ciencia que investiga ese periodo.
La prehistoria estudia la larga etapa de la vida de la humanidad durante la cual el
hombre y la mujer no conocían la escritura. Como no disponemos de testimonios escritos, sólo podemos conocer la vida de la humanidad prehistórica mediante el estudio
de los restos culturales que dejó, como son los instrumentos de madera, hueso, piedra o metal que usaban entonces; sus entierros; sedimentos de habitaciones, o bien
restos de la flora y la fauna de esa época.
Nos interesa el estudio de la prehistoria, ya que el hombre y la mujer de esta
época son nuestros ancestros y de ellos provienen los comienzos de nuestro dominio
de la naturaleza y nuestra cultura material y espiritual.
Se había preguntado, ¿cómo es la historia de la prehistoria y su dimensión
temporal?
Ésta se remonta a los siglos XV y XVI, cuando algunos sabios, como el célebre
Leonardo da Vinci, sostienen que ciertos instrumentos de piedra probaban la gran
antigüedad del ser humano; sin embargo, la opinión general era la contraria, pues
se discutía que tales instrumentos eran producidos por obra de fenómenos naturales
(como los rayos).
Durante el siglo XVIII, algunos científicos notables se ocupan del problema de la
antigüedad de nuestra especie, apoyados en el estudio de los instrumentos de piedra:
hachas y otros utensilios. Es hasta mediados del siglo XIX, cuando se producen los
más importantes avances en la geología, la estratigrafía y la paleontología.
Los testimonios que se descubrían de la industria lítica (es decir, en piedra) del
ser humano prehistórico y de los restos de esqueletos humanos, fortaleció la idea
de que éste era contemporáneo de formas animales ya desaparecidas.
Es hasta las últimas décadas del siglo XIX, que reconocen a la prehistoria como
una ciencia con un objeto definido: la investigación de las primeras etapas culturales
del ser humano.
Para dar una idea aproximada de la inmensa duración de los tiempos prehistóricos, conviene recordar lo que dijo H. G. Wells sobre el tiempo humano: si redujéramos
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a diez horas toda la historia del ser humano, la parte conocida, la que corresponde a la civilización, desde el surgimiento de la alta cultura en Egipto y Mesopotamia,
hasta nuestros días, se reduciría a cinco minutos. Las restantes nueve horas y
cincuenta y cinco minutos forman los tiempos prehistóricos. Por lo tanto, es casi
completamente oscuro para nosotros más o menos un millón de años, el pasado del
ser humano.
¿Cómo saben la antigüedad de los restos encontrados?
Entre los métodos de fechamiento empleados en la arqueología, encontramos
que el más reciente es el derivado de la radioactividad. Se han demostrado las
cualidades de ciertos metales radioactivos que se desintegran constante y
regularmente hasta convertirse en sustancias inertes. Conociendo el tiempo promedio
en que ocurren esas desintegraciones, se puede llegar a precisar la edad de una
inmensidad de objetos.
El método del carbono 14, radioactivo, es uno de los más empleados en la
actualidad. Su efectividad alcanza a medir la antigüedad de materiales orgánicos
hasta de 70,000 años. Éste se basa en que todos los organismos vivos acumulan un
equilibrio constante de carbono 14 durante su existencia. Al morir, se pierde ese
equilibrio y se inicia un proceso de desintegración, técnicamente medible con un
margen de variabilidad limitado.
Además, existen otros métodos y técnicas cronológicas para fechar con relativa
precisión los restos prehistóricos, por ejemplo, el del flúor, que consiste en la medición
de este elemento en los restos de huesos y dientes; o el análisis polínico, que permite
estudiar la flora existente en una época determinada, mediante el estudio del polen
fosilizado.
Estos métodos y técnicas han permitido a la ciencia prehistórica formar cuadros
cronológicos, que ofrecen una imagen de los cambios que se presentaron en la
superficie terrestre, incluyendo la aparición y desarrollo cultural de la humanidad.
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