Hoja informativa El sistema de gobierno sueco Suecia es una democracia parlamentaria. La Constitución declara que, en Suecia, todo el poder público emana del pueblo y que el Riksdag –el Parlamento sueco– es el máximo representante del pueblo. Los diputados del Riksdag son elegidos en comicios generales celebrados cada cuatro años según un sistema electoral proporcional. El Rey de Suecia es el jefe del Estado, pero carece de poder formal. En lugar de ello, el país es dirigido por el Gobierno, que responde de su gestión ante el Riksdag. Bases de la democracia sueca En Suecia, la democracia y el parlamentarismo surgieron en las primeras décadas del siglo XX. Se suele considerar que 1917 fue el año en que se introdujo claramente el sistema parlamentario. Desde entonces, el monarca no ha ejercido ningún poder personal en relación con cambios de Gobierno. Sin embargo, formalmente, el parlamentarismo no se estableció hasta la aprobación de la nueva Ley sobre la Forma de Gobierno, en 1974. El sufragio universal se introdujo en 1921. La reforma del derecho de voto de 1909 creó el sufragio universal masculino y el sistema electoral proporcional, lo que, entre otras cosas, condujo a un éxito importante de los partidos políticos de izquierda en las elecciones de 1911. En 1921, el sufragio universal se extendió también a las mujeres. Después de la Segunda Guerra Mundial, la democracia se convirtió en el concepto completamente dominante sobre cómo debía organizarse el sistema político sueco y, en 1951, quedó asegurada formalmente asimismo la libertad de religión. La Ley sobre la Forma de Gobierno, que es el documento más importante de la Constitución, presenta los rasgos fundamentales del sistema sueco de gobierno. Esa ley entró en vigor el 1 de enero de 1975, sustituyendo así a la correspondiente ley anterior, ya anticuada, de 1809. La nueva ley implicó en gran parte la incorporación de la práctica imperante a la Constitución. Se basa consecuentemente en los principios de soberanía popular y de democracia y parlamentarismo. El primer artículo establece: “Todo el poder público en Suecia procede del pueblo. El gobierno del pueblo sueco se basa en la libre formación de opiniones y en el derecho de voto universal e igual, y se realiza mediante un régimen representativo y parlamentario y por medio de la autonomía municipal.” Además de la Ley sobre la Forma de Gobierno, la Constitución incluye la Ley de Sucesión, de 1810, que regula la sucesión al trono; la Ley de Libertad de Prensa, de 1949, que regula la libertad de expresión en los medios impresos; y la Ley de Libertad de Expresión, de 1991, que protege esa libertad en la radio y la televisión, en el cine, el vídeo y las grabaciones en cinta, etc., conforme a los principios establecidos por la Ley de Libertad de Prensa. Además, hay un Reglamento parlamentario, de 1974, que ocupa un lugar intermedio entre el derecho constitucional y la legislación ordinaria. La tarea de la reforma constitucional no acabó con la promulgación de la nueva Ley sobre la Forma de Gobierno. En lugar de ello, ha sido enmendada en cierto número de ocasiones. Así, por ejemplo, tanto en 1976 como en 1979, esa ley fue enmendada para reforzar los derechos y libertades fundamentales y, en 1994, para hacer posible la adhesión de Suecia a la Unión Europea. El jefe del Estado – un monarca sin poder formal El rey o la reina que ocupe el trono de Suecia en virtud de la Ley de Sucesión, es el jefe o la jefa del Estado. El jefe del Estado sueco, desde septiembre de 1973 el Rey Carlos XVI Gustavo, no ejerce ningún poder político ni participa en la vida política. Como jefe del Estado, es el representante del país en su conjunto y, como tal, realiza solamente tareas y funciones ceremoniales. El jefe del Estado rinde visitas oficiales a otros países y actúa como anfitrión de otros jefes de Estado en visita oficial a Suecia. Además, firma las cartas credenciales de los embajadores de Suecia en otros países y recibe a los embajadores extranjeros en Suecia. Otra tarea oficial del Publicado por el Instituto Sueco Abril del 2007 DI 55 n En www.sweden.se encontrará más hojas informativas en varios idiomas. jefe del Estado es la apertura del periodo anual de sesiones del Riksdag. El jefe del Estado no participa en las deliberaciones del Gobierno y no necesita firmar ninguna decisión gubernamental. En 1979 se enmendó la Ley de Sucesión para implantar la igualdad de derechos al trono entre los herederos, ya sean hombres o mujeres. Así, desde 1980, ese derecho pertenece al primogénito, independientemente del sexo. El Riksdag – representante del pueblo La Ley sobre la Forma de Gobierno asigna al Riksdag un papel completamente central en el sistema sueco de gobierno. El Riksdag tiene el poder legislativo y el Gobierno, que es responsable ante el Riksdag, ejecuta las decisiones parlamentarias y presenta proyectos de nuevas leyes o enmiendas de leyes. Desde 1971, Suecia ha tenido un Riksdag unicameral con 349 escaños. Toda la Cámara es elegida en comicios directos basados en el sufragio de todos los ciudadanos suecos de 18 años de edad o más que residan, o hayan residido anteriormente, en Suecia. Las elecciones generales al Riksdag se celebran el tercer domingo de septiembre, cada cuatro años. El Gobierno tiene derecho, además, a convocar elecciones extraordinarias entre las generales. Un mandato recibido en tales elecciones vale solamente para el periodo restante de la legislatura normal de cuatro años. Por eso no tiene mucho sentido considerar la convocatoria de unas elecciones extraordinarias al final de un periodo de cuatro años. La elegibilidad como diputado al Riksdag requiere tener la nacionalidad sueca y Hoja informativa haber llegado a la edad de votar. Todas las elecciones siguen el principio de representación proporcional. El sistema electoral está diseñado para asegurar una distribución de escaños entre los partidos políticos en proporción a los votos obtenidos por ellos en todo el país. Así, además de los 310 escaños fijos por las circunscripciones electorales, hay otros 39 “escaños de ajuste”, que se pueden repartir libremente para obtener una distribución proporcional equitativa en el conjunto del país. No obstante, los escaños de ajuste son ocupados también por candidatos de las listas normales de los partidos. La regla de la plena proporcionalidad nacional tiene una excepción: una cuota que requiere que un partido obtenga, por lo menos, un cuatro por ciento de todos los votos emitidos en las elecciones para tener representación en el Riksdag. Con ello se pretende impedir la entrada en el Riksdag de formaciones políticas muy pequeñas. A pesar de todo, en cada circunscripción electoral, un partido puede obtener un número fijo de escaños si consigue, por lo menos, un 12 por ciento de los votos, aunque no lograra el mínimo del cuatro por ciento en todo el país. En la actualidad, hay siete partidos políticos representados en el Riksdag: Partido Moderado (Moderaterna, M); Partido Cristiano Demócrata (Kristdemokraterna, KD); Partido Liberal (Folkpartiet, FP); Partido del Centro (Centerpartiet, C); Los Verdes (Miljöpartiet de Gröna, MP); Partido Socialdemócrata (Socialdemokraterna, S); y Partido de Izquierda (Vänsterpartiet, V). Todos los partidos reciben subvenciones públicas para sus actividades generales. Esa ayuda del Estado se basa en los resultados de las elecciones al Riksdag. Los partidos sin representación parlamentaria también reciben subvenciones, pero a condición de que hayan obtenido, por lo menos, un 2,5 por ciento del voto a nivel nacional en alguna de las dos últimas elecciones al Riksdag. Desde 1997 ha existido también un sistema de voto a candidatos individuales en una lista de partido. Ello puede servir de base para determinar qué candidato o candidatos deben ser seleccionados para ocupar los escaños de un partido determinado. Para ser elegido de esa forma, un candidato tiene que obtener votos personales equivalentes, por lo menos, a un ocho por ciento de los votos de un partido en una circunscripción electoral. Las diversas profesiones de la sociedad sueca están bastante bien representadas en el Riksdag, aunque los funcionarios públicos están sobrerrepresentados. A raíz de Resultado de las elecciones al Riksdag. Porcentaje de votos recibidos por los partidos parlamentarios. Año 1932 19401 1948 1956 19582 1964 1968 1970 1973 1976 1979 1982 1985 1988 1991 1994 1998 2002 2006 M 23,1 18,0 12,3 17,1 19,5 13,7 12,9 11,5 14,3 15,6 20,3 23,6 21,3 18,3 21,9 22,4 22,9 15,2 26,2 FP 12,2 12,0 22,8 23,8 18,2 17,0 14,3 16,2 9,4 11,1 10,6 5,9 14,2 12,2 9,1 7,2 4,7 13,3 7,5 C 14,13 12,03 12,43 9,43 12,73 13,23 15,73 19,93 25,13 24,13 18,13 5,53 12,43 11,33 8,53 7,73 5,13 6,13 7,93 KD 1,4 1,4 1,9 (2,6) 2,9 7,1 4,1 11,8 9,1 6,6 NYD 4 6,7 1,2 0,1 S 41,7 53,8 46,1 44,6 46,2 47,3 50,1 45,3 43,6 42,7 43,2 45,6 44,7 43,2 37,7 45,3 36,4 39,8 35,0 V 8,3 4,2 6,3 5,0 3,2 5,2 3,0 4,8 5,3 4,8 5,6 5,6 5,4 5,9 4,5 6,2 12,0 8,3 5,8 MP Otros 1,6 1,5 5,5 3,4 5,0 4,5 4,6 5,2 3,6 4,1 2,3 2,4 1,7 2,1 2,2 0,5 3,6 0,9 1,0 2,5 3,1 5,7 1 Estas elecciones, celebradas durante la Segunda Guerra Mundial, fueron consideradas como un voto de confianza dado al primer ministro socialdemócrata. 2 Elecciones extraordinarias a raíz de un referendo sobre el sistema público de pensiones y de la disolución del Riksdag. 3 Incluido un 2,6% para los Cristiano Demócratas, que hicieron su campaña en las listas del Partido del Centro en 1985. 4 Nueva Democracia, partido populista no socialista creado en 1991, desapareció del Riksdag en 1994. las elecciones del 2006, la proporción de diputadas subió al 47,3 por ciento. Los trabajos del Riksdag Un Riksdag recién elegido comienza su primera sesión parlamentaria a los 15 días de las elecciones. Su trabajo es dirigido por el presidente de la Cámara y tres vicepresidentes. Cada Riksdag de reciente elección nombra por lo menos 16 comisiones permanentes para su legislatura de cuatro años: las Comisiones de Asuntos Constitucionales, de Asuntos Económicos y de Hacienda, así como otras comisiones que corresponden, a grandes rasgos, a la división de los Ministerios. Los partidos están representados en las comisiones en proporción al número de escaños conseguidos. Los ministros del Gobierno pueden asistir a las reuniones de las comisiones permanentes del Riksdag para presentar información y, a menudo, funcionarios ministeriales asisten para dar explicaciones y aportar información relevante. En cuestiones relativas a la UE, el Gobierno tiene que consultar al Comité Consultivo parlamentario para la UE. Eso se refiere, sobre todo, a cómo preparar las negociaciones en el Consejo de Ministros de la UE en nombre de Suecia. A diferencia de las 16 comisiones permanentes, el Comité Consultivo para la UE no se ocupa de propuestas para decisiones parlamentarias. Los cargos del presidente y de los vicepresidentes de la Cámara, así como las presidencias de las comisiones, se reparten generalmente entre los diversos partidos según acuerdos entre ellos. Todos los asuntos son estudiados a fondo en el seno de las comisiones, que, a veces, organizan vistas especiales sobre cuestiones complejas o de largo alcance. Todos los asuntos discutidos en las comisiones se incluyen en informes que ellas tienen que presentar al Riksdag, para que adopte la decisión oportuna. No es posible enterrar un proyecto de ley o una moción de un diputado en la comisión correspondiente. El periodo anual de sesiones parlamentarias dura alrededor de ocho meses, cerrando por vacaciones desde mediados de junio hasta mediados de septiembre. Durante los primeros 15 días después de la presentación por el Gobierno de su proyecto anual de Presupuestos del Estado, los distintos diputados pueden presentar mociones sobre cualquier asunto. Después de la presentación de cada proyecto de ley por el Gobierno, los diputados tienen 15 días para proponer enmiendas sobre las cuestiones planteadas en cada proyecto. Cada diputado tiene un suplente oficial, que se hace cargo de sus tareas parlamentarias en caso de ser nombrado ministro del Gobierno o presidente de la Cámara, o de que se tenga que ausentar durante más de un mes. Como coordinador de los trabajos del Riksdag, se espera que su presidente esté por encima de las políticas partidarias, y no tiene derecho a votar en el Riksdag. Referendos consultivos y vinculantes Los referendos son considerados como una excepción del procedimiento normal para 2 Hoja informativa resolver importantes cuestiones políticas nacionales en Suecia, que es el del Riksdag. Por tal motivo, un referendo nacional sólo puede celebrarse después de la aprobación oportuna del Riksdag. La Cámara puede convocar dos tipos de referendos: consultivos o vinculantes sobre cuestiones constitucionales. En el primer caso, el Riksdag promulga una ley especial que determina la pregunta que se vaya a plantear, y la fecha de celebración del referendo. Hasta ahora, se han celebrado seis referendos consultivos a nivel nacional. Los tres últimos se refirieron a la energía nuclear (1980), la adhesión de Suecia a la UE (1994) y la introducción del euro como moneda de Suecia (2003). Los referendos vinculantes se pueden celebrar por lo que se refiere a enmiendas de la Constitución. Una tercera parte de los diputados pueden pedir uno de esos referendos, que tiene que celebrarse al mismo tiempo que unas elecciones generales. Hasta ahora, no ha tenido lugar ningún referendo vinculante. Un referendo se puede celebrar también a nivel municipal o provincial. Este tipo de referendos es siempre consultivo. El Gobierno responsable ante el Riksdag El Gobierno dirige los asuntos del país, pero es responsable de su gestión ante el Riksdag. Este nombra a un primer ministro, a quien le encarga la tarea de formar Gobierno. El primer ministro elige personalmente a los ministros que integrarán su Gabinete, y decide asimismo qué ministros deben ser los jefes de los respectivos Ministerios. Juntos, el primer ministro y los ministros del Gabinete, forman el Gobierno sueco. Según la Constitución, el Gobierno es el que tiene la capacidad formal de tomar las decisiones gubernamentales, y no el jefe del Estado. Normalmente, los ministros representan al partido o los partidos políticos en el poder. En muchos casos, puede que tengan su propio escaño en el Riksdag, que conservan durante el periodo en que estén en el Gobierno. Entonces, un suplente se hace cargo de sus tareas parlamentarias. Dicho de otra forma, un ministro del Gobierno tiene que abstenerse de su derecho al voto en el Riksdag. Todos los ministros tienen derecho, sin embargo, a participar en los debates parlamentarios. Para ejercer la función de control que es central en una asamblea representativa, el Riksdag puede, en caso de que exista una mayoría absoluta a favor de ello, aprobar una moción de censura contra un ministro determinado o contra todo el Gobierno, provocando así la dimisión del Partidos en el Gobierno desde 1945 Año Partido/Partidos Primer ministro 1945-1951 S 1951-1957 1957-1976 S/C S 1976-1978 1978-1979 1979-1981 1981-1982 1982-1991 C/M/FP FP C/M/FP C/FP S 1991-1994 1994-1998 M/FP/C/KD S 1998-2002 2002-2006 2006- S S M/C/FP/KD P.A. Hansson/ T. Erlander T. Erlander T. Erlander/ O. Palme T. Fälldin (C) O. Ullsten T. Fälldin T. Fälldin O. Palme/ I. Carlsson C. Bildt (M) I. Carlsson/ G. Persson G. Persson G. Persson F. Reinfeldt (M) ministro o del Gobierno, respectivamente. No obstante, la moción de censura no entra en vigor si el Gobierno convoca elecciones extraordinarias en el plazo de una semana. Si el primer ministro así lo pide, el presidente de la Cámara le despedirá de su cargo. Lo mismo ocurre en caso de aprobarse una moción de censura en el Riksdag. Un ministro puede ser cesado bien sea por el primer ministro o bien por el Riksdag a raíz de una moción de censura contra él/ella. Si dimite el Gobierno, el presidente del Riksdag deliberará con los líderes de los partidos políticos y con los tres vicepresidentes de la Cámara. Entonces, el presidente hará una propuesta de nuevo primer ministro, y el Riksdag votará sobre la propuesta. Esta quedará aprobada si no más de la mitad de los diputados votan en contra. Si la propuesta es aprobada, el presidente del Riksdag nombrará como primer ministro al candidato propuesto. Trabajo del Gobierno y de su Secretaría General El Gobierno dirige los asuntos de Suecia ejecutando las decisiones del Riksdag y tomando iniciativas sobre nuevas leyes o enmiendas de leyes, sobre las que decide el Riksdag. Para ayudar al Gobierno en esa tarea, hay una Secretaría General y alrededor de 250 organismos estatales. El responsable de todas las decisiones del Gobierno es el Gabinete en su conjunto. Aunque, en la práctica, hay numerosos asuntos rutinarios que son decididos por los ministros competentes y, sólo formalmente, aprobados por el Gobierno, el principio de responsabilidad colectiva se refleja en todos los trabajos gubernamentales. El Gobierno tiene una plantilla de fun- cionarios públicos y personas en cargos de designación política, que le ayudan en sus trabajos. Todos ellos están integrados en la Secretaría General del Gobierno, que es un organismo estatal integrado por la Oficina del primer ministro, los diversos Ministerios especializados, la Representación permanente de Suecia ante la Unión Europea y la Oficina administrativa. La Secretaría General del Gobierno tiene alrededor de 4.600 empleados. El Gabinete se reúne una vez a la semana para tomar decisiones formales. Esas reuniones son presididas por el primer ministro o, en su ausencia, por el viceprimer ministro o alguno de los otros ministros. Antes de la reunión, todas las cuestiones importantes han sido ya discutidas por los miembros del Gabinete a fin de resolver de antemano las posibles discrepancias. Por eso, en principio, todas las decisiones del Gobierno son siempre unánimes. Sin embargo, si el Gabinete está integrado por más de un partido, uno o más ministros pueden ocasionalmente tener opiniones diferentes de las de la mayoría. La tarea principal de los Ministerios consiste en preparar las decisiones del Gobierno por lo que se refiere a: • proyectos de ley para su presentación al Riksdag, incluido el proyecto de Presupuestos del Estado; • la promulgación de leyes, decretos e instrucciones para los organismos estatales; • las relaciones internacionales de Suecia; • el nombramiento de jueces y determinados altos cargos de la administración central; y • la consideración por parte del Gobierno de apelaciones en casos no tratados por los tribunales. El trabajo interno del Gobierno implica un grado alto de coordinación entre los diversos Ministerios. Si un asunto es de interés para más de un Ministerio, el contacto interministerial es obligatorio. Todos los proyectos de ley del Gobierno y las declaraciones importantes de ministros (por ejemplo, las respuestas a interpelaciones de los diputados) que vayan a ser presentados al Riksdag, deben enviarse por anticipado a los demás miembros del Gabinete, para que puedan expresar sus puntos de vista. Los métodos de trabajo de los Ministerios pueden variar, pero, en general, vienen a ser iguales. A los ministros les siguen en rango los secretarios de Estado, que dirigen el trabajo del Ministerio correspondiente. Los Ministerios tienen asimismo secretarios de prensa y asesores 3 Hoja informativa políticos a quienes se confía la asistencia al ministro en la elaboración de la política a seguir. A diferencia de otros funcionarios públicos de la Secretaría General del Gobierno, los ministros y las personas en cargos de designación política dejan sus puestos, cuando se produce un cambio de Gobierno. Además del equipo encargado de la dirección política, cada Ministerio tiene uno o más altos funcionarios públicos. Las tareas de un director general de Asuntos Administrativos en un Ministerio incluyen asegurar que el trabajo del Gobierno se haga de manera legal, consecuente y uniforme. Las responsabilidades del director general de Asuntos Jurídicos, que puede ser la misma persona, incluyen también asegurar que los proyectos legislativos y otros documentos legales sean redactados dentro de un marco legal, consecuente y uniforme. El trabajo cotidiano de los Ministerios es realizado por las distintas divisiones de la política. Esas divisiones preparan asuntos antes de que el Gobierno adopte una decisión, y son también responsables de los contactos con los organismos estatales adscritos al Ministerio competente. Para cuestiones generales, hay una secretaría de asuntos legales y una división administrativa. ces, presentan sus recomendaciones alternativas en el informe. Una vez que la comisión ha presentado su informe al Ministerio ante el que es responsable, el informe es remitido casi siempre a los organismos públicos y organizaciones afectados para que den su opinión sobre el particular. También tienen derecho a presentar sus opiniones al Ministerio competente organizaciones y personas privadas a las que no se haya remitido el informe. Una vez expirado el periodo para los comentarios públicos, el Ministerio recopila todas las opiniones presentadas. Estas pueden conducir a ajustes más o menos amplios de las recomendaciones de la comisión, aunque el Gobierno puede decidir asimismo no tomar ninguna medida por ellos. Sin embargo, por lo general, el Gobierno presenta su propia propuesta al Riksdag en forma de un proyecto basado en el informe de la comisión y en las opiniones presentadas. Es posible que ese método de trabajo pueda parecer engorroso y que exige mucho tiempo, pero se considera que es valioso desde una perspectiva democrática. De esa forma, los partidos de la oposición y otros intereses organizados tienen la posibilidad de influir en la política del Gobierno, incluso antes de que adopte una postura sobre determinada cuestión. Comisiones de encuesta Con frecuencia, las decisiones del Gobierno no son preparadas solamente por los Ministerios. En cuestiones de mayor importancia, es corriente que el Gobierno nombre una comisión de encuesta, que examine a fondo el asunto de que se trate y, luego, presente, recomendaciones de cambios en las leyes u otras reformas. Una comisión de ese tipo puede constar de una sola persona, si bien es corriente que estén integradas por un presidente y otros miembros que representen a los partidos políticos y a diversos entes públicos, así como por asesores especializados y otros expertos. Esas comisiones suelen ser asistidas también por una secretaría. Las comisiones de encuesta tienen una gran libertad y pueden realizar sus estudios por medio de viajes, interrogatorios, labor de investigación, etc. El trabajo de una comisión suele ser seguido por los medios de comunicación, hasta que publica su informe. Ello da al público en general una idea de sus avances. Una comisión de encuesta trabaja a menudo durante uno o dos años, a veces más tiempo. En muchos casos, las recomendaciones de la comisión son unánimes, al menos en cuestiones de principios, pero sus miembros pueden tener también distintas opiniones y, enton- Los funcionarios del Estado Al ámbito de las operaciones de cada Ministerio están adscritos cierto número de organismos estatales. Estos son los responsables de las actividades cotidianas de los funcionarios del Estado. Junto con los órganos de administración local –Ayuntamientos y Diputaciones provinciales–, aseguran que las instrucciones aprobadas por el Riksdag y el Gobierno sean ejecutadas en todo el país. El Gobierno decide los objetivos, las directrices y la asignación de recursos para las operaciones de esos organismos, pero no decide cómo aplicarán una ley o cómo decidirán sobre diversos asuntos. Cada organismo está a las órdenes de un director general nombrado por el Gobierno, normalmente por un periodo de seis años. A veces, un director general es elegido en los círculos políticos. La junta directiva de un organismo público consta del director general en calidad de presidente, cierto número de altos funcionarios del organismo en sí y representantes de organizaciones o de grupos de la población que tengan un interés especial en las actividades del organismo, y, a veces, también de políticos. Todos los miembros de la junta directiva son nombrados por el Gobierno, al igual que la mayoría de los altos funcionarios de los organismos. Otros funcionarios son contratados por los organismos competentes. Un ministro, o un Ministerio, no puede intervenir en la gestión que un organismo haga de asuntos administrativos individuales. Debido a su estatus independiente, se espera que los organismos estatales presenten propuestas al Gobierno sobre las directrices que deben seguir. Suelen referirse a ajustes en las leyes y decretos que sean de aplicación en los campos respectivos de cada organismo. Esas recomendaciones hechas por los organismos estatales suelen ser remitidas para comentarios públicos, igual que se hace con los informes de las comisiones de encuesta. Organismos estatales y ciudadanos La Ley de Procedimiento Administrativo establece las bases sobre cómo proceder en los asuntos de los organismos estatales. Para ello, fija normas aplicadas, en principio, por todos los organismos en todos los campos. La finalidad principal de esa ley es salvaguardar los derechos legales de los ciudadanos en sus tratos con un organismo estatal, exigiendo, por ejemplo, objetividad, una tramitación cuidadosa y normas uniformes. Al mismo tiempo, la citada ley supone un enlace entre los derechos legales y el servicio público. En otras palabras, los organismos estatales no sólo tienen que actuar de forma correcta en un sentido legal formal, sino que, además, tienen que dar una información rápida, sencilla y clara, y ayudar a los ciudadanos a asegurar sus derechos. Toda persona afectada por la decisión de un organismo estatal y que no esté satisfecha con esa decisión, puede apelar normalmente ante un tribunal administrativo. La primera instancia es el tribunal provincial administrativo. En la medida en que se conceda permiso de revisión, una causa podrá ser luego recurrida ante el tribunal administrativo de apelación y, finalmente, ante el Tribunal Superior Administrativo. La mayoría de los documentos oficiales son públicos, es decir accesibles a los medios de comunicación y a los ciudadanos privados. Todos los archivos de organismos estatales están a disposición del público, a menos que hayan sido clasificados como secretos en virtud de la Ley de Secretos por razones relacionadas con la seguridad nacional, las relaciones internacionales o la intimidad de las personas privadas. Normalmente, una persona no necesita dar ninguna razón por la que desee ver un documento público, ni mostrar su documento de identidad para tener acceso a él. Toda persona a quien se le 4 Hoja informativa haya denegado al acceso a un documento público, puede apelar contra la decisión del organismo correspondiente. Órganos de administración local El sector público sueco tiene tres niveles de actuación: nacional, provincial y municipal. Todo el territorio de Suecia está dividido en municipios, gestionados por Ayuntamientos electos. Estos son los responsables de una amplia gama de instalaciones y servicios: viviendas, carreteras, abastecimiento de agua y tratamiento de aguas residuales, escuelas, asistencia pública, asistencia a las personas mayores y a la infancia, etc. Los Ayuntamientos tienen derecho a cobrar impuestos sobre la renta de las personas físicas. También cobran tasas y cuotas por diversos servicios. Debido a ello, los Ayuntamientos tienen una libertad relativamente grande para decidir los servicios que deben ofrecer. No obstante, tienen la obligación legal de prestar determinados servicios básicos. A nivel provincial están las Diputaciones electas y los gobiernos civiles. Las Diputaciones son responsables de supervisar las tareas que no puedan ser atendidas por los Ayuntamientos, ya que requieren una coordinación en zonas mayores. El caso más notable es el de la asistencia sanitaria. Las Diputaciones provinciales tienen derecho a cobrar impuestos sobre la renta para cubrir sus gastos. Los gobiernos civiles son los representantes del Gobierno central a nivel provincial. El jefe de un gobierno civil, el gobernador civil, es nombrado por el Gobierno por un periodo de seis años y suele haber sido anteriormente un político destacado, por ejemplo un ministro del Gobierno o un diputado. Los gobiernos civiles deciden sobre cuestiones como la utilización del suelo (por ejemplo, permisos de construcción) y el tráfico (incluidos los carnés de conducir). La distribución de responsabilidades entre el Estado, las Diputaciones provinciales y los Ayuntamientos, así como la amplitud que deben tener las unidades provinciales, puede que sean modificadas. En los últimos años, han sido objeto de estudio por parte de una comisión parlamentaria. Poder, cambio social y nuevos retos Durante muchas décadas, el Partido Socialdemócrata ha desempeñado un papel destacado, a veces dominante, en la política sueca: desde 1932 hasta 1976, los socialdemócratas gobernaron sin interrup- ción, excepto durante un periodo de 100 días en 1936, en que Suecia tuvo un Gobierno provisional. Sin embargo, en los últimos 30 años, el Gobierno ha cambiado varias veces entre los socialdemócratas y el bloque político de centro-derecha. En las elecciones de 1976, los partidos de centro-derecha lograron la mayoría de los escaños parlamentarios. Así, el Gobierno socialdemócrata dimitió y fue sucedido por una coalición integrada por los Partidos del Centro, Moderado y Liberal. Al cabo de dos años en el poder, esa coalición fue sucedida por un Gobierno de minoría liberal. En los comicios de 1979, los partidos de centro-derecha mantuvieron su mayoría parlamentaria, formándose un nuevo Gobierno tripartito. En la primavera de 1981, el Partido Moderado abandonó el Gobierno. En las elecciones de 1982, los partidos de centro-derecha perdieron su mayoría parlamentaria, por lo que se formó un Gobierno de minoría socialdemócrata. Este siguió en el poder también a raíz de las elecciones de 1985 y 1988. En los comicios de 1991 se produjo otro cambio de poder con la formación de un Gobierno de minoría de centroderecha integrado por moderados, liberales, centristas y cristiano demócratas. En las elecciones de 1994, los partidos de centro-derecha volvieron a perder el poder, con lo que los socialdemócratas formaron un nuevo Gobierno de minoría. A raíz de las elecciones de 1998 y del 2002, los socialdemócratas siguieron en el Gobierno, aunque, para implementar sus políticas, tuvieron que formar una alianza parlamentaria con el Partido de Izquierda y con Los Verdes. Los comicios del 2006 produjeron un nuevo cambio en el poder. Los partidos de centro-derecha formaron un Gobierno cuatripartito, dirigido por el líder del Partido Moderado, Fredrik Reinfeldt. La lucha entre los partidos políticos por conseguir el control del Gobierno es, sin duda alguna, uno de los ingredientes más centrales del sistema de gobierno sueco. Sin embargo, el papel del Gobierno, así como el funcionamiento de ese sistema gubernamental en general, ha tenido que hacer frente asimismo al reto de otros desarrollos habidos en la sociedad. El papel de los partidos políticos ha cambiado. Los ciudadanos ya no participan en la labor de esos partidos en la misma medida que antes. La caída del número de votantes se suele considerar que está relacionada también con la creciente desconfianza en el sistema político establecido. Por otra parte, hay indicios de un creciente interés por diversos movimientos sociales, a menudo basados en redes de carácter social. A nivel político, ha llamado también la atención el papel de los contactos informales y de las “redes sobre diversas políticas”. Además, la comunicación política y la relación entre los políticos y los medios de comunicación han cambiado, y algunos observadores sostienen que la sociedad sueca es definida cada vez más por los medios de comunicación. De forma similar, la nueva tecnología de la información brinda oportunidades innovadoras para la comunicación entre los ciudadanos y los políticos, al tiempo que también plantea nuevas cuestiones sobre el funcionamiento del ámbito público y la transparencia. La internacionalización ha modificado asimismo las condiciones previas para el sistema de gobierno sueco. Eso quedó especialmente claro a raíz de la adhesión de Suecia a la UE en 1995. Diversas cuestiones que antes eran decididas por el Riksdag, lo son ahora a nivel de la UE. Todo ello plantea nuevos retos al sistema de gobierno sueco. En la pasada década se produjo también un creciente debate sobre ese sistema, por ejemplo sobre la incapacidad del sistema electoral actual para facilitar la creación de Gobiernos fuertes. Como resultado de esos debates, y a la luz de cambios como la adhesión a la UE, el desarrollo de la tecnología de la información y, en especial, la caída del número de votantes, el Gobierno decidió en el 2004 nombrar una comisión de encuesta para realizar una nueva y amplia revisión de la Ley sobre la Forma de Gobierno. Esa comisión, que terminará su trabajo en el 2008, recibió el encargo de estudiar tanto el sistema electoral como las normas sobre referendos, la formación de Gobiernos y el papel del sistema judicial en la democracia sueca. Enlaces relacionados El Riksdag de Suecia, Sveriges Riksdag, www.riksdagen.se The Government and the Government Offices of Sweden, Regeringen och regeringskansliet, www.sweden.gov.se (únicamente en inglés) The Parliamentary Ombudsmen - JO, Riksdagens Ombudsmän - JO, www.jo.se/Page.aspx (únicamente en inglés) The Swedish Association of Local Authorities and Regions, Sveriges Kommuner och Landsting, www.skl.se (únicamente en inglés) ¿Tiene alguna opinión sobre esta publicación del Instituto Sueco? Contacte con nosotros en: [email protected] Este texto lo publica el Instituto Sueco y puede ser encontrado en www.sweden.se. No puede ser reutilizado sin previo consentimiento del Instituto Sueco. Para obtener permiso para usar el texto, póngase en contacto con [email protected]. Fotos o ilustraciones no pueden ser usadas en otros contextos. El Instituto Sueco (SI) es un organismo público creado para difundir conocimientos sobre Suecia en otros países. Produce una amplia gama de publicaciones en varios idiomas sobre diversos aspectos de la sociedad sueca. Para mayor información sobre Suecia: www.sweden.se –el portal oficial de Suecia en la Internet–, la Embajada o el Consulado de Suecia en su país, o el Instituto Sueco, Box 7434, SE-103 91 Stockholm, Suecia, tel. +46 8 453 78 00, [email protected], www.si.se, www.swedenbookshop.com.