el paisaje de la albufera

EL PAISAJE DE LA ALBUFERA
J.F. Mateu Bellés
Universitat de València
è
EL PAISAJE: INTRODUCCIÓN
Expresión polisémica
Concepto mixto
Paisaje-territorio (cartografiable)
P i j i
Paisaje-imagen
(i
(intangible)
t
ibl )
Paisaje = territorio culturalmente interpretado
EL PAISAJE DE LA ALBUFERA
I. Un dominio de transición marítimo-terrestre
II. Un entorno rural
III La construcción de la imagen paisajística
III.
IV. La Albufera en el marco metropolitano
p
I La Albufera
I.
Albufera, un medio de transición
- La albufera se sitúa entre el mar y los deltas del
Turia-Xúquer
- Es un tipo de costa de “restinga y albufera”
- La forman tres medios interdependientes:
p
1.. La
L Devesa
D
o restiga
g arenosa
2. El lago o lluent
3 La marjal o marisma (arrozal )
3.
1 Un
1.
U medio
di d
de transición:
i ió lla Devesa
D
- En la Devesa o restinga arenosa (de origen
marítimo-fluvial) la dinámica eólica ha modelado un
amplio campo dunar
- A partir de la playa, se reconocen:
Dunas embrionarias
m
Dunas móviles
Dunas estabilizadas
Malladas
Dunas (más antiguas) estabilizadas
2 Un
2.
U medio
di d
de transición:
i ió ell lago
l
- El lago o lluent es una masa hipereutrófica
(25 km2 de superficie)
Surgencias o ullals
ENTRADAS
Aportes de ríos
í y barrancos
“sobrantes” de riego
Gola del Perelló
SALIDAS
Gola del Perellonet
G l d
Gola
dell P
Pujol
j l Nou
N
3 Un
3.
U medio
di d
de transición:
i ió marjal
j l o marisma
i
- Area pantanosa alargada entre Pinedo y Cullera
- Perímetro de la bahía estuarina flandriense
- Albufera en proceso de colmatación
- Prado halófilo en tiempos medievales y modernos
- Tierra de arróz
4 Un
4.
U medio
di d
de transición:
i ió ell hidrosistema
hid i
- Es un hidrosistema situado en cola de una gran
superficie de regadío histórico
- El regadío
g
histórico ha modificado los equilibrios
q
ambientales
ALBUFERA SALOBRE
ALBUFERA DULCEACUÍCOLA
EL PAISAJE DE LA ALBUFERA
I. Un dominio de transición marítimo-terrestre
II. Un entorno rural
III La construcción de la imagen paisajística
III.
IV. La Albufera en el marco metropolitano
p
II La Albufera
II.
Albufera, un entorno rural
El paisaje rural guarda memoria de muchas actividades,
algunas ya desaparecidas
El paisaje contiene elementos tangibles e intangibles
muy relevantes
l
t sobre
b ell entorno
t
rurall
1. Topónimos:
p m
el Saler,, la Devesa,, Mallada
2. La barraca
3 Las barcas
3.
La bonificación ha transformado la marjal
EL PAISAJE DE LA ALBUFERA
I. Un dominio de transición marítimo-terrestre
II. Un entorno rural
III La construcción de la imagen paisajística
III.
IV. La Albufera en el marco metropolitano
p
III. La Albufera,, la construcción de una
imagen: el paraiso cinegético
Durante
D
t siglos,
i l
la
l imagen
i
dominante
d i
t f
fue la
l de
d
paraiso cinegético
“Décadas” de Escolano
Orellana
Sarzo (1906)
Chapman and Buck (1910)
El tío Paloma buscó al nieto para presentarle su cazador.
E un señor
Era
ñ gordo,
d de
d aspecto bonachón
b hó y pacífico:
ífi un
industrial de la ciudad que, después de una vida de rabajo,
creía llegado el momento de divertirse como los ricos y copiaba
g Parecía molesto ppor su
los pplaceres de sus nuevos amigos.
terrorífico aparato: le pesaban las bolsas para la caza, la
escopeta las altas botas,
escopeta,
botas todo nuevo,
nuevo recién comprado.
comprado Pero al
fijarse en la canana en forma de bandolera que le cruzaba el
pecho,
h sonreía
í bajo
b j su enorme fieltro,
fi l
j á d igual
juzgándose
i l que
aquellos héroes boers cuyos retratos admiraba en los
periódicos.
(Blasco Ibáñez, 1902)
Así como al hablar de Burgos, todos recuerdan la
existencia de una espléndida catedral,
catedral y al hablar de
Sevilla, recuerdan la existencia de la Giralda, así
también al hablar de Valencia, al recuerdo del Miguelete,
se une el de la Albufera.
Albufera
(S
(Sarzo,
1906)
Al sur está cerrada por el Mediterráneo por un cordón de dunas
cubiertas de pinos, contrastando agradablemente el follaje verde
oscuro con intervalos de arena desnuda, formando salpicaduras. Por
todos los otros lados los límites de la laguna
g
están marcados ppor
carrizos amarillos que rodean sus orillas.
Sus aguas, salpicadas por las redes blancas de los “faluchos”,
faluchos ,
presentan la apariencia de un pequeño mar, apariencia que se ve
incrementada cuando el tiempo está tormentoso por la altura de las
olas.
(Chapman & Buck, 1910)
III. La Albufera,, la construcción de una
imagen: referencias literarias
Institucionistas de la Universidad de Valencia:
Eduardo Soler, Eduardo Boscá, etc
Renaixença: Teodoro Llorente
Blasco Ibañez: Cañas y Barro
La Albufera es una laguna muy grande, y tiene, desde tiempos
remotos, fama de hermosa. Pero quedaría chasqueado alguien
q buscase
que
b
enn ella
ll algo
l parecido
p id a los
l lagos
l
d Suiza
de
S i o de
d
Lombardía, encajonados entre selváticos montes o ceñidos por
verdes y risueñas colinas. El aspecto de la Albufera es muy
q domina la línea horizontal
z
y la amplitud
p
de la
distinto. Aquí
perspectiva. Eso también tiene majestad y belleza.
(Llorente, 1889)
La selva casi virgen,
virgen que se extiende por leguas y leguas
[…] Los pinos retorcidos y seculares se movían con
majestuoso rumor, y bajo las bóvedas que formaban sus
copas extendíase una dulce penumbra semejante a la de
las naves de una catedral inmensa. De vez en cuando,
al través de dos troncos se filtraba un rayo de sol como
si entrase por un ventanal
ventanal”
(Blasco Ibáñez, 1902)
III. La Albufera,, la construcción de una
imagen: pintores y fotógrafos
Finales del siglo XIX: Salvador Abril, Sorolla, etc
Primera generación de paisajistas del siglo XX:
Antonio Fillol
Fillol, Constantino Gómez
Gómez, José Benlliure
Benlliure, etc
III. La Albufera,, la construcción de una
imagen: propuestas de uso
Opinión favorable para la conversión de la
Devesa en parque público
Blasco Ibañez: EL PUEBLO
Concejales Blasquistas
Hay que preocuparse no sólo de la salud y la decencia, sino del
embellecimiento de la ciudad, y crear en las playas valencianas y
sus terrenos colindantes, grandes bosques de pinos, eucaliptos, etc.,
verdaderos paseos para el esparcimiento,
esparcimiento no como esos jardines por
los que se pasea enguantado, estirado e incómodo, para mirar y ser
mirado sino paseos populares,
mirado,
populares selvas con maleza,
maleza donde las
familias puedan tenderse y merendar los domingos (como ocurre en
l bosques
los
b
i di t a Paris),
inmediatos
P i ) acariciadas
i i d por
p una vegetación
t ió
salvaje y en libertad, que se esparce sin temor a las tijeras del
jardinero
d
(Blasco Ibáñez, 1901)
La ciudad tiene a sus puertas un lago y un bosque
hermosísimo y que la mayoría de los vecinos no conoce
siquiera [...] La posesión del lago y el bosque variará
por completo la faz de Valencia y aumentará los
alicientes para ser visitada por extranjeros y las
condiciones para ser convertida en estación invernal
(Ajuntament de Valencia, 1905)
Edificios que puedan servir de hotel, de hospedería
p familias
para
f ili y de
d restaurant,
t
t con espacios
p i cubiertos
bi t
ppara qque ppuedan refugiarse
f g
los ppaseantes
sorprendidos por una tormenta, rodeado todo por
una explanada que utilicen como punto de reunión
los que visiten la Dehesa.
(Ajuntament de Valencia, 1905)
III. La Albufera,, la construcción de una
imagen: naturalistas
Celso Arévalo y el Instituto General y Técnico de Valencia
Luis Pardo:
“La Albufera de Valencia. Estudio limnográfico, biológico,
económico y antropológico” (1942)
P. Virgili:
“Aprovechamiento piscícola de la Albufera de Valencia” (1956)
J.J. Alonso:
“Balance hídrico y estudio de aportes sólidos a la Albufera”
C. Dafauce:
“La albufera de Valencia. Estudio piloto” (1975)
(1974)
I. Docavo:
“La albufera de Valencia, sus peces y sus aves” (1979)
Hoy Valencia [...] aprisionada totalmente en el recinto de sus
viviendas y no tiene lugares adecuados para que sus habitantes en
los días de descanso ppuedan darse un baño de aires y sol [[…]]
hasta las playas de los barrios marítimos, Grao y Cabañal, han
sido acotadas por la ambición particular y los paseos de la ciudad
son escasísimos y de tan reducida extensión, que no bastan para
una población veinte veces menor.
menor [...]
[ ] Por tanto [..]
[ ] la Dehesa y
el lago de la Albufera no deben ser objeto de concesión alguna a
particulares para que en su monte y lago puedan disfrutar los
particulares,
habitantes de la ciudad y sobre todo las 20.000 y pico de
f ili obreras,
familias
b
en los
l días
dí de
d descanso,
d
l beneficios
los
b fi i
inestimables del ambiente libre de la naturaleza.
(Boscá et al, 1911)
Debemos rendir a nuestro hermoso lago el culto que se
merece; es conveniente y más aún necesario, formar un
Museo de la Albufera en el que se exponga la gea, flora
y fauna de la misma, así como la parte tecnológica que a
ella haga referencia (industria pesquera y cestera,
aprovechamiento
h i
d caza, etc.).)
de
(P d 1921)
(Pardo,
EL PAISAJE DE LA ALBUFERA
I. Un dominio de transición marítimo-terrestre
II. Un entorno rural
III La construcción de la imagen paisajística
III.
IV. La Albufera en el marco metropolitano
p