Indice Biografía−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−Pág.3 Kafka no es Kafkiano−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−Pág.3 •

Anuncio
Indice
• Biografía−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−Pág.3
• Kafka no es Kafkiano−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−Pág.3
• Su o
• bra−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−Pág.3,4
• Resumen del libro−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−Pág.4,5
• Tema−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−Pág.5
• Intencionalidad del autor−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−Pág.5
• Comentarios de la obra−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−Pág.5,6
• Valoración personal−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−Pág.6
• Bibliografía−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−−Pág.6
Biografía
Franz Kafka, nació en Praga, Checoslovaquia, el 3 de julio de 1883, hijo primogénito de una familia judía (sus
dos hermanos siguientes murieron a la edad de dos años y seis meses respectivamente). Seis años después de
su nacimiento su madre dio a luz sucesivamente tres hermanas. Su infancia fue signada por una tremenda
soledad y un gran temor a su padre, de carácter dominante y severo, que no logró amar a su hijo por la
debilidad que creía ver en él. Esta ruptura espiritual con su padre y la necesidad imperiosa que siempre sintió
de acercarse a él y ser comprendido, originaron una de sus obras fundamentales, La carta al padre, que éste
no llegó nunca a leer. Pese a la propia inseguridad y a la gran desconfianza en si mismo que luego Kafka
atribuiría a este conflicto familiar, que recibió en 1906 de doctor en jurisprudencia, aunque no hizo uso del
título, pues siendo su único deseo el de escribir, prefirió un puesto sedentario y de horario breve en una
oficina pública.
Era débil y enfermizo, de un aspecto insignificante que el mismo destacaba vistiendo ropas inadecuadas y no
siempre nuevas. De toda su vida, el sabor amargo de una soledad únicamente mitigada en sus últimos años por
la que sería su compañera, Dora Dymant, a la que sólo conoció un año antes de su muerte, y con la que trató
ser feliz, a pesar de la estrechez económica que debió soportar. Su vida fue gris y llena de penurias, en medio
de una soledad multiplicada por su insaciable necesidad de fraternidad, por su búsqueda de un mundo mejor y
de un Dios más cercano.
Kafka no es kafkiano
En la introducción a unos Cuentos de Kafka(recopilación de cuentos de Kafka), Vicente Roberto Andreano
insiste en esta paradoja del no ser Kafkiano de Kafka. Este adjetivo, de Kafkiano con el comer del tiempo se
ha aplicado a todo lo terrible, obse−
sesivo y laberíntico del mundo. Efectivamente sí le cabe este calificativo a parte de la vida y la obra de Kafka.
Pero en cuanto buscamos en Kafka su realidad humana en sus sentimientos nos encontramos con un inmenso
ser humano, con una libertad de espíritu y de amo por la vida que le hace un Quijote que con una implacable
honestidad va en busca de la justicia y de Dios y de una necesidad de amor.
Por lo que podemos decir: la vida y la obra de Kafka es kafkiana, él no.
Su obra
Hace setenta y tres años, el 3 de junio de 1924 en un hospital de Viena moría silenciosamente −tal como había
1
vivido−, Franz Kafka. El ruido de la fama le llegaría muchos años más tarde, sin que él llegara a saberlo, sin
que su gran amigo y albacea testamentario, Max Brod, pudiera imaginarlo. Diez años después de su muerte,
Kafka , que hasta entonces había sido un desconocido, inundaba los mostradores de las librerías de toda
Europa y encendía la llama de una polémica que dura hasta nuestros días.
Pero es imposible, cincuenta años después, no agradecer a Max Brod el haberse negado a cumplir uno de las
últimas voluntades de Kafka: la de quemar toda su obra y destruir así siempre un universo poblado por seres
más fantásticos que los producidos nunca por la imaginación: los hombres. Probablemente la fuerza de la
literatura de Kafka radique en la unidad pétrea en que consiguió fundir la realidad y la ficción, la genial
sencillez con que logró una obra que, a fuerza de humana, roza las fronteras de lo fantástico.
Pero Franz Kafka no es un autor fantástico, o quizás lo es, en la enorme medida en que la fantasía es parte de
la realidad de la vida. Como en un juego de espejos, la personalidad pequeña e insignificante , enfermiza, del
gran checo, escapa a todos los moldes, es imposible encasillarlo en una escuela o un ordenamiento, no se lo
puede etiquetar ni cercar ni archivar, porque más allá de sus datos personales que tanto han influido en todo lo
que de él se ha escrito, una ola de humanidad, de libertad de espíritu y de amor por la vida rebasa lo
anecdótico y prevalece en el tiempo.
En toda su obra Kafka hace de aquel padre que le aplastaba, sin duda, un retrato de abrumadora lucidez; pero
nunca le condena, porque le respeta siempre, y se echa la culpa así mismo. La soledad y el ahogo harán nacer
en el un sentimiento de culpabilidad que es clave en su obra y su vida.
El estilo de Kafka es denso, apretado, lleno de alusiones y reticencias, y todos sus personajes están rodeados
de una atmósfera de misterio e inquietud, reflejo de la atormentada vida interior del novelista. Su obra se
constituye una afluencia de escenas y situaciones percibidas con una intensidad sin precedentes, en la que el
detallismo descriptivo cobra una expresión visionaria. El centro de su mundo es el hombre angustiado,
habitante de un mundo sin salidas.
De su producción cabe destacar La condena (1913), En la colonia penitenciaria (1914), La metamorfosis
(1915), Un médico rural (1917) y En la construcción de la muralla china (1918), narraciones; El proceso
(1925), El castillo (1926), América (1927), novelas. Sus Diarios y Carta al padre constituyen documentos
literarios básicos del s. XX. Se le considera un decisivo renovador del género épico−narrativo contemporáneo.
Resumen del libro
En este corta novela el autor, Franz Kafka, cuenta la historia de un chaval llamado Gregorio que ve como su
vida cambia radicalmente después de convertirse en escarabajo.
Gregorio tenía un buen trabajo, era viajante y llevaba adelante a toda su familia. Una mañana Gregorio
amanece con cuerpo de insecto, a consecuencia de esto se queda en su cuarto por miedo a que le vean sus
familiares; estos le llamaban desesperadamente para que fuera a trabajar. Gregorio intenta ponerse en pie y
acomodarse a su nuevo cuerpo, que todavía no domina. Por su retraso al trabajo, llega el procurador a su casa
para llevárselo. Tras proponerse abrir la puerta y conseguirlo, causa el asombro del procurador y de su familia.
El procurador se marcha sin pensárselo, su madre cae desmayada, y Gregorio sigue al procurador hasta la
escalera para que no se marchara. El padre, enfadado, obliga a Gregorio a meterse en su cuarto dando patadas
en el suelo, y golpes con el bastón y el periódico.
Después de todo lo ocurrido Gregorio queda abandonado por su familia, solo mantiene una pequeña relación
con su hermana que le da de comer y le atiende, pero siempre dejando cierta distancia debido a su repugnante
aspecto. Encima de todo se siente culpable al ser él la única persona que mantenía a la familia. Sin él, la
familia tuvo apuros económicos. Aún con éstos problemas la madre intenta también mantener una relación
con Gregorio, cosa que le impiden los familiares; aún así, ella sigue manteniendo su papel de madre a
2
espaldas de su padre intentando también ayudarle en las cosas que pudiera, pero siempre en cosas en las que
no tuviese que verlo personalmente. Gregorio va viendo como el medio tiene que cambiar para él porque él no
puede adaptares al medio, así va haciéndose cada vez más a la idea de su nueva condición de insecto, un
parásito que lo único que hacía era estorbar. En una limpieza de la madre y la hermana, comienzan a quitar
muebles y recuerdos, Gregorio ante ésto le entra miedo sale corriendo, dejándose ver por la madre que
comenzó a gritar y ambos se pusieron muy nerviosos, cuando llega el padre comienza a golpearle lo que le
causó una herida.
Al encontrarse la familia en apuros económicos, intentan sacar dinero, por lo que convierten el cuarto de
Gregorio en una habitación para huéspedes. Esto hace que Gregorio se sienta cada vez más marginado.
Algunos problemas que tuvo este con los huéspedes hizo que sus padres la tomaran con él, por lo que decidió
no comer más para morir humildemente y dejar a la familia tranquila de todos los problemas que causaba.
Éste era tan buena persona que murió pensando en que dejaría de ser un estorbo y a la vez facilitaría la vida de
su familia que desde lo ocurrido había estado algo trastornada.
Al día siguiente la criada se encuentra a Gregorio muerto (un escarabajo más), y lo tira a la basura. Comienza
entonces otro cambio dentro de la familia, otra metamorfosis para bien.
Tema
El tema en realidad es el cambio, la transformación o como bien indica el nombre del libro la metamorfosis de
Gregorio de como se siente excluido del mundo y más tarde rechazado por la sociedad.
En esta obra el autor, que tuvo una infancia determinante en cuanto a la sensación de extrañamiento ante el
mundo, se siente totalmente identificado con el protagonista y por eso la historia se basa en una
transformación que hace ver todos los problemas con el que el autor se enfrentó en la realidad.
Intencionalidad del autor
El autor quiere expresar a través de esta obra lo que le ocurrió durante su vida, lo hace identificándose con
Gregorio que se convierte en escarabajo, un animal cuya imagen tiene un contenido deprimente, negativo
Ese cambio, de humano a insecto, es una simple metáfora que se corresponde con la infancia sufrida por el
autor, que le trasformó en una persona bastante lista pero con una personalidad independiente y excluida del
mundo que le rodeaba. Por lo tanto la intencionalidad del autor es clara: quiere, puede que inconscientemente,
hacer ver una infancia que le marco para el resto de su vida, que es lo mismo que marcó la transformación de
Gregorio.
Comentarios de la obra
Kafka vuelve a encontrar el estilo mitológico de la metamorfosis, pero con una lógica en la locura que da
nueva vida al género. Es imposible olvidar estas imágenes: el descubrimiento de la transformación por el
director de Gregorio, el horror experimentado por su padres, los cuidados que la hermana del desdichado le
presta durante algún tiempo, luego la soledad progresiva de la alimaña: ésta se oculta bajo el canapé cuando se
le lleva su comida, se pasea por las paredes casi totalmente desnudas, se nutre con restos de alimentos casi
enteramente podridos. El padre ha vuelto a su trabajo, la madre no tiene la entereza de mirar a su hijo, hasta
que un día, el padre, irritado, lanza una manzana medio podrida, que se incrusta en los riñones de la pobre
sabandija; ésta se arrastra hasta al fin con aquel pegote en su caparazón herido.
Una noche en el salón, suena la música; la hermana toca el violín; algunos señores, inquilinos, han venido a
escucharla. Es una verdadera fiesta de familia, cálida, armoniosa, musical. La puerta ha quedado entreabierta.
Gregorio se siente atraído: Gregorio desearía que su hermana fuese a vivir con él, libremente. Entonces podría
3
hablarle, decirle cuánto la admiraba, que quería enviarla al Conservatorio, y entonces ella, conmovida,
estallaría en sollozos, y él podría besarla.
Naturalmente, Gregorio es descubierto por los oyentes. La música cesa repentinamente. Entonces la hermana
dice Nos lo tenemos que quitar de encima(pág. 70). Aquella misma noche, Gregorio, completamente solo,
muere.
La oculta ternura hacia su familia, la especie de humildad aflictiva que caracteriza esta muerte, la voluntad
humilde de desaparecer progresiva y discretamente del cuadro de la vida, impregnan la agonía de una alimaña.
Cuando la criada descubre el cadáver completamente seco de Gregorio, es ella la que se encarga de barrerlo,
de hacerlo desaparecer con los deshechos del cubo de la basura. Entonces, los padres y la hermana
experimentan, a su vez, una especie de metamorfosis: vuelven a tomarle gusto a la vida, pues la última página
del relato termina con esta descripción de la joven vida inocente y candorosa, que puede al fin henchirse y
desarrollares, una vez que la sabandija ha desaparecido.
Este cuerpo joven, que se estira y cobra conciencia de su belleza rebosante de vida, contrasta de manera
irresistible con la sabandija que la criada acaba de arrojar al cubo de la basura.
Este mito expresa el aislamiento de Kafka, incapaz de incorporarse a la sociedad y hacerse reconocer por
ella. Por último −quizás sobre todo− lo que aquí se expresa es el drama de la soledad, la de los locos, por
ejemplo: esos seres a los que se les mantiene ocultos a la familia y a los amigos, pero que andorrean por la
casa, y, a veces, aprovechando un minuto de descuido, se deslizan en el salón familiar, atraídos por la música.
Y esos otros que no están locos, pero que no son gratos, que no son verdaderamente acogidos en ninguna
parte, a quienes se les echa la comida como se echa un hueso a un perro, a quienes se oye distraídamente,
durante un instante, pero que no existen verdaderamente para nosotros,también esos son tratados por nosotros
como sabandijas.
Valoración personal
El autor describe la vida de una persona con un detallismo sorprendente e incluso se hace como un poco
agonizante hacia lector por esa pesadez de describirlo todo. Creo un logro la imagen del escarabajo por todos
los significados que sugiere.
También me ha gustado la gran comparación que ha hecho el autor de su vida con el protagonista de la obra.
Ha querido expresar a través de una gran metáfora lo que le ocurrió a el mismo. Pero aún nos queda por saber
el porqué de la transformación de Gregorio; puede que sea una alucinación, o quizás que el mismo se vea
como un monstruo repugnante y marginado. En conclusión y para terminar esta obra es fácil de leer, y con
muy poca extensión que sugiere una gran cantidad de ideas.
Bibliografía:
• Franz Kafka, La metamorfosis. Clásicos de siempre.
• Franz Kafka Cuentos. Ediciones Orión.
• Enciclopedia Universal Ilustrada, Tomo 5 del Apéndice. Espasa Calpe.
• Enciclopedia Universal Multimedia Salvat.
• Charles Moeller, Literatura del siglo XX y Cristianismo, III− La esperanza humana. Editorial Gredos.
7
2
•
4
Descargar