Editorial LA UNIVERSIDAD Y LA PRODUCCIÓN CIENTÍFICA Un reclamo que con frecuencia hace nuestra sociedad a la universidad peruana es el de una mayor relación con la realidad del país. En este particular, muchos pueden ser los comentarios y muchos los descargos; sin embargo, para mejorar esta relación resulta indispensable, primero, hacer un esfuerzo por integrar y vincular estrechamente la formación profesional, el posgrado y la investigación científica, tecnológica y humanística en las universidades. De esta manera podemos esperar que la universidad contribuya al desarrollo del país, con el compromiso de atender sus necesidades, problemas y carencias, a través de la formación de profesionales íntegros y debidamente calificados. Según información de la Asamblea Nacional de Rectores, ANR, en el Perú, actualmente hay 350 programas de maestría y 66 programas doctorales, es decir 416 programas de posgrado. Por otra parte, nuestra producción científica en la forma de artículos publicados en revistas de calidad e impacto en el mundo científico escasamente se aproximan a los 225 artículos por año durante los 4 últimos años. No obstante, la conexión de la investigación con los numerosos programas de posgrado es mínima. Esta proliferación de maestrías y doctorados en nuestro país se debe más a la exigencia de los centros de trabajo, a las necesidades personales de los candidatos, más que a un interés académico y del país por contar con cuadros altamente calificados. También, hay que ser objetivos en reconocer, que los posgrados se han convertido en una fuente de generar recursos propios para no pocas universidades. La oferta y demanda ha generado un mercado muy activo, tenemos nombres de maestrías y doctorados que, en muchos casos, no corresponden a las nomenclaturas y denominaciones internacionales. En una concepción más amplia, el nivel de la formación profesional universitaria debería estar ligado a los niveles de investigación científica, tecnológica y humanística e, inclusive a los niveles de sus posgrados. Siendo el profesor universitario el elemento básico en la formación profesional, entonces, éste en ningún caso puede estar exento del quehacer cotidiano por la investigación básica, aplicada o de desarrollo experimental. Es necesario que el profesor universitario pueda pasar siempre renovadas experiencias de investigación a los estudiantes de pregrado y posgrado. Por otra parte, la producción científica corresponde a una medida de la calidad e impacto de las investigaciones. Percibimos, sabemos, o nos han dicho, que la producción científica nacional es relativamente baja, en términos comparativos inclusive con países de la región. Pero ¿cuáles son nuestras cifras en este tema? ¿las conocemos realmente? La producción científica se da, por lo general, en tres niveles: - de artículos en revistas periódicas especializadas e indexadas, Rector Manuel Burga Díaz Vicerrector Académico Raúl Izaguirre Maguiña CSI Boletín 46 2 - de artículos en revistas no-indexadas de impacto local, - de las tesis doctorales y, al nivel, de algunas tesis de maestría. Sin menoscabo de la importancia de los dos últimos niveles, solo la producción científica al nivel de artículos en revistas periódicas indexadas tiene un impacto internacional. Por ello, le dedicaremos una especial atención a este primer nivel de la producción científica. En efecto, para facilitar el manejo de este nivel de informaciones, ya sea de los grupos de investigación más avanzados o de las agencias relacionadas con la promoción de la Ciencia y la Tecnología, en la actualidad existen importantes bases de datos de registros bibliográficos. En el libro la Producción Científica de San Marcos (19952001) [1], editado por el Fondo Editorial de San Marcos y presentado en el Congreso de la República el 9 de octubre último mostramos una información básica de 151 artículos en revistas indexadas con autores sanmarquinos. Este trabajo fue desarrollado a partir de la base de datos del Institute for Scientific Information, ISI, mediante la captura electrónica de la palabra Perú y posteriormente de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. El ISI fue creado por el gobierno norteamericano para el uso de las agencias de fomento a la investigación científica, posteriormente fue comprada por Thomson Corporation. Esta importante base de datos es usada por National Science Fundation (USA), CNPq (Brasil), por citar algunas instituciones, para evaluar proyectos de investigación. La base de datos del ISI incluye una lista de 8,400 revistas científicas arbitradas (peer-reviewed research journals) o indexadas en campos sobre: Ciencias de la Vida, Medicina Clínica; Ingeniería, Computación y Tecnología; Agricultura, Biología y Ciencias Ambientales; Ciencias Físicas, Químicas y de la Tierra; Ciencias Sociales; Artes y Humanidades. En este sentido, una revista indexada es una publicación periódica de investigación reconocida en el mundo académico por su grán calidad e impacto. La calidad de una revista se sustenta en la evaluación de artículos mediante el criterio de juicio de pares peer review. En este caso, el par es un especialista, quien hace las veces de árbitro en el tema del artículo específico que va a evaluar. En el caso del autor de un artículo, por lo general, además de cultivar una especialidad, éste tiene otras subespecialidades y hasta una o más sub-sub-especialidades. Por ejemplo, consideremos el caso de: Un físico, primera especialidad: física de materia condensada, primera sub-especialidad: magnetismo blando; primera sub-sub-especialidad: vidrios metálicos; segunda subsub-especialidad: nanoestructuras magnéticas. En este caso, un artículo de este autor, mediante el criterio de juicio de pares, solo podría ser evaluado por otro espe- Vicerrectora Administrativa Beatriz Herrera García Consejo Superior de Investigaciones Presidente Víctor Peña Rodríguez Comité Ejecutivo del CSI Renato Benazic Tome Sergio Ronceros Medrano Daniel Lovera Dávila Ernesto Polar Falcón Santiago López Maguiña cialista, o árbitro, con el mismo grado o mayor de especialización del autor. Por regla general, este árbitro es reconocido internacionalmente por ser un investigador altamente especializado, con un número importante de publicaciones arbitradas y frecuentemente citado por otros autores. De esta manera, en cada número, los Comités Editores de estas revistas de prestigio internacional escogen cuidadosamente a los árbitros. El impacto de una revista en el mundo académico se mide a través del factor de impacto, el cual se calcula a través del número de citaciones en un año de los artículos publicados en años anteriores respecto al número de artículos publicados en el mismo periodo. En el Boletín 45 del Consejo Superior de Investigaciones se muestra un ejemplo de cálculo del factor de impacto de la revista HYPERTENSION, con ISSN 0194-911X, durante el año 1999; el cual fue aproximadamente 5. Esto significa que en el año 1999, un artículo publicado en HIPERTENSION fue citado en media en 5 otros artículos de revistas igualmente indexadas. Resulta importante destacar que las revistas que tienen un mayor un mayor factor de impacto en la comunidad científica internacional tenemos a las revistas: NATURE y SCIENCE, con factores de impacto cercanos a 25. Por estas dos importantes razones, las 8,400 revistas del ISI constituyen el conjunto de las revistas más importantes en el contexto internacional seleccionadas de un universo de 25,000 revistas científicas de circulación internacional. La selección de estas revistas se hace en base a criterios de periodicidad, contenido editorial, internacionalidad y análisis de citas [2]. La relevancia de una base como la del ISI es que si queremos comparar datos y medir nuestra ciencia con la ciencia internacional debemos usar una medida común a todos. Sin embargo, además de la base del ISI existen otras bases de datos importantes, pero menos completas, por ejemplo: 1) PASCAL (Institut de linformation Scientifique et Technique, CNSR; Francia) Ciencias, Tecnología y Medicina 2) BIOSIS* (Asociación internacional de biólogos; UK) Botánica, Ecología, Zoología, Bioquímica, Biomedicina, Biotecnología, etc. 3) CAB International* (UK) Agricultura, Ciencias Forestales, Salud, Ciencias de la Vida, Administración y Conservación de Recursos Naturales. 4) CHEMICAL ABSTRACTS (American Chemical Society, US) Química, Ciencias de la Vida 5) MEDLINE (US National Library of Medicine) Medicina 6) ICYT (Centro de Información y Documentación Científica, CSIC; España) Agronomía, Astronomía, Astrofísica, Ciencias de la Vida, Ciencias de la Tierra y el Espacio, Farmacología, Física, Matemáticas, Química y Tecnología 7) INSPEC* (IEE, Institute of Electronic Engineering; UK) Física, Ingeniería Eléctrica, Electrónica, Comunicaciones, Ingeniería de control, Computación e Informática 8) IME (Índice de Medicina de España) Medicina 9) COMPENDEX* (Engineering Information; USA) Índice de Ingeniería Las bases de datos marcadas con * actualmente están incluidas en los registros del ISI. Según análisis reportado en el libro de Indicadores de Ciencia y Tecnología, editado por el CONCYTEC en el año 1999 y elaborado a partir de información del ISI, se observa que entre 1990 y 1994 el promedio de artículos arbitrados en revistas indexadas, por lo menos con un autor trabajando en una institución peruana, fue de 150 aproximadamente. Entre 1995 y 1998 este promedio ascendió a 180 artículos. Para mayor información se puede recurrir a otro trabajo realizado por Raúl Cuevas y colaboradores [3] donde se muestra, en detalle, las instituciones en el Perú con mayor número de publicaciones en C&T durante los últimos 10 años. Cabe resaltar que este tipo de trabajos sobre indicadores de la producción científica son preparados atendiendo a los conceptos de la bibliometría [4] dentro del marco de la cienciometría [5]. Nuestras recientes investigaciones sobre el último periodo comprendido entre 1999 y 2001, muestran una media estimada en 225, la cual se encuentra por debajo de Chile, Venezuela y Colombia, cuyas producciones son a este nivel son 9, 5 y 2.5 veces mayor que la producción científica peruana. También es interesante destacar la tendencia creciente de la producción científica de Chile, Venezuela y Colombia, en tanto que la nuestra se mantuvo constante o en todo caso con un ligero aumento pero mucho menor que en estos países. Por ello es necesario destacar la importancia e revaloración de las publicaciones científicas para quienes tienen como misión hacer y desarrollar ciencia. Es a través de las publicaciones científicas y de las patentes como se mide de manera objetiva la productividad de las instituciones científicas y, obviamente de los investigadores o científicos. Hay personas que consideran que al científico le toca crear puestos de trabajo, el impacto social del trabajo científico solo se puede ver en el mediano y largo plazo. La realidad que muestran la cifras sobre la producción científica de San Marcos es expresiva de lo que pasa en el país en el sector de la investigación y desarrollo científico. Sin políticas adecuadas, los grupos de investigación y sus investigadores, desconectados en mayor o menor grado con los programas de posgrado, buscan recursos donde haya quien los ofrezca e investigan aquello que interese al financista. No formamos cuadros científicos de acuerdo a los estándares internacionales, ni tampoco acumulamos el conocimiento necesario que pueda servir como base para crear tecnología. REFERENCIAS [1] Víctor Peña, P.H. Rivera y Raúl Cuevas. La Producción Científica en San Marcos (1995-2001). Fondo Editorial de San Marcos, 2002. [2] James Testa. La base de datos del ISI y su proceso de selección de revistas. Presentado en el Seminario de la Evaluación Científica. Proyecto SciLEO. Universidad de São Paulo. 4-6 marzo, 1998. Formato electrónico en http://www.isinet.com [3] Raúl Cuevas y Augusto Alcalde. Perú indicadores de producción científica. http://www.cytindicadores.hpg.ig.com.br [4] Ronald Rosseau. Indicadores bibliométricos y econométricos en la evaluación de instituciones científicas. Presentado en el Seminario de la Evaluación Científica. Proyecto SciLEO. Universidad de São Paulo. 4-6 marzo, 1998. [5] Ernesto Spinak. Indicadores cienciométricos. Presentado en el Seminario de la Evaluación Científica. Proyecto SciLEO. Universidad de São Paulo. 4-6 marzo, 1998. Dr. Víctor Antonio Peña Rodríguez Presidente CSI Boletín 46 3