Capítulo Criminológico Vol. 25, No. 1, 1997: 53-89 ISSN: 0798-9598 IMPACTO DE LA DESAPLICACIÓN DE LA LEY SOBRE VAGOS Y MALEANTES Y LA APLICACIÓN DEL CÓDIGO DE POLICÍA DEL ESTADO ZULlA Jesús Enrique Párraga* * Psic. Investigador del Instituto de Criminología "Dra. Lolita Aniyar de Castro" (ICLAC). Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas. Universidad del Zulia. Maracaibo. Venezuela. Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulía 55 RESUMEN Mediante esta investigación se recaba información objetiva permitiendo el estudio de la intervención preventiva y represiva del Estado durante dos períodos de tiempo. El propósito fundamental es evidenciar lo acontecido luego de la desaplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes como mecanismo tradicional de respuesta a la materia de menor cuantía y la utilización del Código de Policía como una opción de represión y control social. Se utilizaron dos muestras probabilísticas estratificadas de expedientes pertenecientes a personas a quienes se les aplicó una pena de arresto según lo establecido en el Código de Policía, en los años 1993 y 1995, antes y después de la Resolución del Gobierno del Estado Zulia en el año de 1994, de no aplicar la Ley sobre Vagos y Maleantes. Se examinan la cantidad de penas de arresto, porcentaje proporcional de personas arrestadas a la orden de la Prefectura del Municipio Maracaibo en comparación con el total de personas detenidas por cualquier circunstancia, así como las características de las personas sancionadas administrativamente y la naturaleza de la falta que originó la privación de libertad, entre los años considerados. Los datos muestran una mayor cantidad proporcional de personas arrestadas en el año 1995, en comparación con 1993, sin diferencias en la naturaleza de la falta cometida, no observándose cambios en las características de los sancionados, respecto de aquellos a quienes se les aplicó este mismo Código en el año 1993. Se evidencia una débil tendencia hacia la realización de arrestos por causas poco relevantes. Palabras claves: Ley sobre Vagos y Maleantes, Código de Policía, Faltas en el Código Penal, Leyes Contravencionales. ,,¡,, 'ifl! 56 '¡, 1 Jesús Enrique Párraga Capítulo Criminológico Vol. 25, No. 1 (1997) THE IMPACT OF NON-APPLICATION OF THE VAGRANCY LAW AND THE APPLICATION OF THE POLICE CODE IN THE STATE OF ZULlA ABSTRACT In this paper objective information is gathered in order to permit the study of the preventive and represive intervention of the state in two periods of time. The fundamental purpose is to give evidence to what happened after the non-application of the vagrancy law which was used as a traditional mechanism to answer the matter of lesser degree and the utilization of the Police Code as an option for social control and repression. Two stratified probabilistic samples of police records were studied; those pertaining to people who had been arrested under the terms of the Police Code in the years 1993 and 1995, befare and after the resolution of the Zulia State Government to not apply the Vagrancy Law. The number of arrests, the proportional percentage of people arrested by order of the Maracaibo Municipal Prefect, the total number of persons arrested under whatever circumstance, and also the characteristics of the people administratively sanctioned, and the nature of the offense which originated privation of liberty in the years under consideration were studied. The data demonstrates a proportionally larger number of people were arrested in 1995 than in 1993, with no difference in the nature of the faultiness, and without distinction in terms of the characteristics ofthe people sanctioned with respect to those to whom the police code was applied in 1993. There is evidence of a very weak tendency toward the realization of arrests for causes of little relevance. Key words: Vagrancy Law, Police Code, Faultiness in the Penal Code, Contraventional Laws. Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulía 57 INTRODUCCIÓN Las desigualdades sociales, económicas y culturales cada vez mayores en América Latina y la falta de medidas y políticas estatales para enfrentar esta situación, han disminuido la posibilidad de acercamiento a mayores niveles de realización personal y satisfacción de necesidades básicas, produciendo grandes cifras de miseria, privación de bienes materiales y búsqueda de satisfacción de las necesidades legítimas a través de medios ilegítimos. Al agravarse la actual crisis venezolana, acentuarse la injusta distribución de la riqueza, aumentar la espiral inflacionaria que extrema aún más la delicada y compleja situación, ha ascendido el índice de criminalidad, acompañado por la injusticia resultante de la emergencia represora que busca disminuir la inseguridad personal, dirigiendo esta acción contra las clases de menores recursos, a las que se trata de controlar y de paso silenciar sus protestas. El efecto es más de espejismo, con la proyectada intencionalidad de sosegar a la opinión pública dominante, a sus reclamos y quejas neuróticas; a la vez que tranquilizar y acallar a la oposición política estéril, que demanda la represión. La forma de control social ejercida hasta entonces no ha logrado los objetivos racionales en el combate a la criminalidad y a la delincuencia, al no considerar los contextos económicos, sociales y culturales que las genera. Las medidas improvisadas no han logrado sino incidir en la criminalización de los individuos provenientes de los sustratos económicos más afectados por la misma crisis, aquellos, sin una educación básica, sin preparación en una actividad laboral definida, los más pobres, los desposeídos. A propósito de esto último, los procesos de criminalización han sido definidos como selectivos, de naturaleza política, íntimamente ligados a las estructuras institucional, ideológica y jurídica; concertados por los poderes económicos predominantes y dirigidos generalmente a circunscritas clases sociales 1, que no son otras, que las de menores recursos y formación personal. Las medidas, aplicadas por funcionarios administrativos cercenando los derechos fundamentales, son muchas veces decididas arbitraria y subjetivamente, sin lógica ni sustento científico, cargadas de extralimitaciones, desafuero, despotismo, atropello e injusticia; consideraciones basadas en el "peligrosismo" o en la "personalidad del autor". Un Derecho Penal que fun- '1 * ',.¡, j 58 '¡, 1 Jesús Enrique Párraga Capítulo Criminológico Vol, 25, No. 1 (1997} damente su aplicación en determinadas características del individuo, las cuales desde una perspectiva lógico-jurídica racional no posibiliten responsabilizarlo de manera alguna, se atiene al peligro o a esa singularidad -del autorsin tener en cuenta el hecho objetivo y ni siquiera si tiene cierta gravedad. Los tipos penales no pueden ser transformados con la nitidez requerida para una adecuada interpretación tomando en consideración esta clase de derecho, no permitiendo además limitar el poder del autoritarismo. El Derecho vigente en Venezuela es un Derecho Penal del hecho o de acto, donde los atributos de personalidad del autor son considerados subsidiariamente porque el Juez tiene la facultad de recurrir al experto según el caso. El elemento principal es la lesión al orden jurídico y del orden social, que originan la aplicación o no de la pena; ésta es la consecuencia jurídico-penal del acto o hecho en cuestión, no la probabilidad de producir la lesión ni tampoco la sospecha. Por eso, en el derecho venezolano el control penal administrativo de desempleados o de individuos sin ocupación fija a quienes se les presumen involucrados en ciertas actividades predelictivas o prohibidas social y moralmente, no es admisible. Sin embargo se dan esas situaciones, con el agravante de que se trata de una intervención estatal por medio de órganos ejecutivos que llegan hasta la restricción de libertades. En América Latina, el Estado interviene ante la lesión de una conducta tipificada y también ante la desviación por medio de órganos administrativos, e incluso llega al etiquetamiento. El sistema penal en esta parte del continente americano usualmente utiliza para el ordenamiento de las conductas desviadas, un sistema de discernimiento entre delitos y contravenciones; a diferencia de lo establecido en otras latitudes donde se habla de crímenes, delitos y contravenciones, siendo los primeros de mayor peso y castigo más severo. En el caso de Venezuela destaca en el Código Penal, el Libro Tercero de Faltas, sección dedicada especialmente a las contravenciones como su nombre lo indica. En referencia a este tema, existen también en Venezuela la polémica Ley sobre Vagos y Maleantes -como anticipación a la delincuencia supuestamente pronosticable en base a ciertas condiciones y características personales-al igual que diversos Códigos de Policía (normas reglamentadas por los Poderes Ejecutivo y Legislativo regionales) especie de sistema paralelo contrario al régimen de garantías constitucionales, dirigido a los ciudadanos que no han cometido ningún delito en sí. Estos son puestos en funcio- Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulia 59 namiento por las autoridades mediante prácticas administrativas y policiales cuya presencia ocupa un amplio espectro de ejecución en la misma vida democrática de la República. La aplicación por parte del Estado de mecanismos que atentan de una u otra manera contra la integridad misma de los ciudadanos y en especial de aquellos que carecen de las oportunidades para lograr su legítimo progreso, se vio interrumpida circunstancialmente para dar paso a un intento de armonizar la razón entrenada con la práctica de políticas dirigidas hacia el problema-objeto criminal y penal. Se demuestra como la democracia si puede, como forma de gobierno, desarrollar aunque lentamente pero en dirección acertada, actuaciones que se caracterizan por su transparencia y por establecer cauces para lograr parcelas cada vez mayores en la igualdad de derechos, al acceso de oportunidades, en la garantía de los bienes y servicios básicos de educación, salud, seguridad, y, según el caso, equidad y justicia. La posición del Ejecutivo Regional del Estado Zulia, entre los años 1994 y 1995, de no aplicar la Ley sobre Vagos y Maleantes -una vez vista como la forma de "regular el estado peligroso sin delito" 2 , de carácter correctivo y como medida de defensa social-originó entonces una abierta discusión sobre su conveniencia como mecanismo tradicional de respuesta, convirtiéndose en blanco de políticos y legisladores opositores, de las para entonces, autoridades ejecutivas regionales. Entre los argumentos se destacaban entre otros, que tal desaplicación constituía unas de las razones del supuesto incremento de la delincuencia en la región zuliana y específicamente en su capital, la ciudad de Maracaibo. Esto en abierta contradicción a la historia de aplicación de la propia ley en cuestión, ya que en más de cincuenta años el incremento de las conductas sancionadas por ésta, ha sido significativo3. El tema de la criminalización, estigmatización y etiquetamiento fue evocado por quienes se oponían -y se oponen- a la implementación de dicha ley administrativa. No es objeto de la presente discusión repetir o ampliar el discurso fundamentado, relativo a ésta posición científica y "humana". La desaplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes fue complementada con la Resolución Gubernamental de remitir a los Tribunales de Municipio de la Jurisdicción respectiva, a las personas arrestadas a la orden de la Prefectura del Municipio Maracaibo (la cual agrupa diecinueve municipios) ,¡,. 60 1 1 ,, Jesús Enrique Párraga Capítulo Criminológico Vol. 25, No. 1 (1997) incursas en conductas tipificadas como falta en el Código Penal Venezolano, esto es, judicializar las faltas contenidas en el Código Penal4 . Las categorías de vagos y maleantes desde el punto de vista jurídico, son complementarias del Código Penal; dieciséis de las veinticuatro figuras previstas por la Ley sobre Vagos y Maleantes, constituyen delitos y faltas 5 . Esta es una de las razones por las cuales el Ejecutivo Regional decidió remitir los casos a sus jueces naturales para la administración de justicia. Mediante esta investigación se recaba información objetiva permitiendo el estudio delicado y complejo de la intervención preventiva y represiva del Estado en dos muestras de trescientos cincuenta sujetos, cada una, durante dos períodos específicos de tiempo, los años 1993 y 1995. El propósito fundamental es evidenciar lo acontecido en la primera instancia del control social formal, luego de la desaplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes, como mecanismo tradicional de respuesta a la materia de menor cuantía. Las autoridades policiales ante la imposibilidad de basar su trabajo de mantenimiento del orden público en la utilización del sistema de justicia penal como alternativa, esto es, el libro tercero de Faltas del Código Penal -por demás antiguo y desactualizado- u otra normativa contravencional, recurrieron al Código de Policía del Estado Zulia; que al igual a otros Códigos de Policías existentes, ha usurpado la facultad de legislar sobre materia penal que la Constitución asigna, de manera exclusiva, al poder nacional (artículos 136, vigésimocuarto aparte; y 139) 6 . En entrevistas con las autoridades policiales superiores, éstas han confirmado la utilización del Código de Policía ante la devolución por parte de los Tribunales de Municipio de los casos referidos previamente por faltas contempladas en el Código Penal. El utilizar una alternativa policial como la anunciada anteriormente puede resultar en la criminalización de los considerados "peligrosos sin delito", a los que se les atribuyen conductas predelictuales o a quienes por la simple apariencia, se catalogan como sospechosos, relegándolos así al interior del sistema de justicia penal o a procedimientos administrativos, que provocan inseguridad jurídica, violan el principio de legalidad, someten a "sanciones" y a "medidas preventivas" de "carácter correccional". Ante las opiniones y críticas respecto a la desaplicación y de sus "negativas" repercusiones, sería fácil especular que tales individuos fueron objeto de una peculiar aplicación entonces de instrumentos como el Código de Policía, por par- Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulía 61 te de las autoridades policiales, en sus intenciones por controlar las consideradas por éstas como conductas susceptibles de alguna medida correctiva. El consumo de los medios de comunicación genera una matriz de opinión, orquestada y deseada por los poderes políticos y económicos; así la población ingenua, a la vez que no pocos funcionarios policiales, adoptan actitudes y posiciones que les impide la comprensión del significado de un verdadero estado de defensa de las garantías legales y de los derechos humanos; en la concepción de una política criminal de carácter preventivo en lugar de represivo. La forma alternativa de criminalización aquí planteada y estudiada son los arrestos policiales, por orden de las prefecturas o jefaturas civiles, esto es, la aplicación del Código de Policía con el que se implementan medidas preventivas, consistentes en medidas correctivas de privación de la libertad, como las penas de arresto. El arresto policial es realizado frecuentemente de manera inconstitucional, privando la libertad por circunstancias asociadas a la sospecha y no a la certidumbre de la comisión de algún delito. Se coarta el derecho a la defensa, y, se imposibilita la intervención del Ministerio Público como pertinentemente debe hacerlo. Se observa, pues, que la función policial se caracteriza por el ejercicio del poder en forma no tan legítima como se desearía y mucho menos considerando los derechos humanos. El número de denuncias referidas a muertes, torturas, allanamientos, heridos y detenciones arbitrarias por parte de funcionarios policiales es cada día más evidente gracias a organizaciones dedicadas a la defensa y promoción de los derechos humanos, que investigan y hacen seguimiento del abuso policial. De manera que esta forma del ejercicio de la autoridad por parte de funcionarios de policía seguirá impulsando estudios y conllevando a los análisis, planteamientos y rectificaciones necesarios para el alcance de la convivencia social en armonía con las exigencias y expectativas ideadas. Los resultados obtenidos por investigadores y expertos dedicados al tema han contribuido al abordaje del punto en cuestión. La conformación legal de los cuerpos de policía no significa necesariamente, la ocupación efectiva de un espacio de control en el medio social. Se descuida el análisis del impacto efectivo de las reformas legales en la vida cotidiana. De hecho, a pesar 1 ,¡, t'i 62 1 i ¡ Jesús Enrique Párraga Capitulo Criminológico Vol. 25, No. 1 (1997) de la aparentemente bien desarrollada estructura de las diversas fuerzas policiales en Latinoamérica, la investigación sobre su operación, si bien es limitada, demuestra su debilidad relativa como agencias de control cotidiano en relación al ciudadano 7 . Es posible que la expansión legal de los poderes policiales haya sido un intento de compensar el escaso espacio social e · de operacwnes · 8. e1ectivo Si bien es imposible pretender que la realidad ordenada o esbosada por las normas coincida absolutamente con la realidad concreta, si es posible elaborar una crítica sobre el nivel de aplicación de las normas a partir del margen existente entre una y otra realidad. Y ello es muy importante, porque tal desfase puede implicar fenómenos como el de negación radical del modelo proclamado u oficial por parte del modelo aplicado. O bien porque las contradicciones existentes entre ambos modelos revelen funciones de encubrimiento, de legitimación, o de simbolismo entre otros 9 . Los enunciados anteriores sirven como preámbulo al propósito fundamental de este trabajo, el cual es examinar las características de las personas arrestadas y la naturaleza de la falta cometida (que origina el arresto), utilizando dos muestras representativas de los expedientes de personas arrestadas a quienes se les aplicó el Código de Policía del Estado Zulia, en dos años diferentes ( 1993 y 1995 respectivamente) -antes y después de la desaplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes, en ese mismo Estado-. Los datos recolectados y analizados descriptivamente, darán respuesta a la interrogante central: ¿Cuál es la cantidad de penas de arresto, cuáles las características de las personas arrestadas y la naturaleza de las faltas cometidas, en los grupos estudiados, luego de la desaplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes, al ser utilizado el Código de Policía del Estado Zulia como una opción de represión y control social? Considerando que la policía tiene a su cargo la labor de vigilancia y mantenimiento del orden público, lo que la coloca en contacto directo con situaciones definibles como de ocurrencia delictiva y aunque no tiene carácter instructor, legalmente debe este cuerpo de seguridad referir, a los efectos de instrucción criminal, los hechos delictivos conocidos a la Policía Judicial Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulia 63 o a los tribunales de justicia, se utilizaron algunos de los datos encontrados en los expedientes del Departamento de Detenidos Comunes, de la Prefectura del Municipio Maracaibo, para emprender un breve y superficial análisis de la primera y más visible instancia del sistema de justicia penal. De manera que, sin pretender ejecutar una aproximación profunda del modelo de justicia penal imperante, se plantea esta segunda interrogante: ¿Qué tipo de procesamiento institucional se origina en la operación de rutina de detección de casos de interés penal por parte de la policía? Igualmente se dilucidirá si dentro del tiempo establecido del estudio, los cuerpos policiales efectuaron arrestos por causas o motivos no expresamente establecidos dentro de los instrumentos normativos considerados en esta investigación; lo cual se traduciría en arrestos por causas poco relevantes, incluso comparables entre ambos años objeto de estudio. Los objetivos generales de investigación están destinados, primero, a determinar si luego de la desaplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes, ha surgido la utilización del Código de Policía del Estado Zulia como una alternativa de control social; segundo determinar la cantidad de penas de arresto, el porcentaje proporcional de personas arrestadas en comparación con el resto de las personas detenidas, por cada cohorte; y tercero identificar las características de las personas arrestadas y la naturaleza de las faltas cometidas, por cada cohorte estudiado. Para efectos de esta investigación se entiende por "penas de arresto" el resultado de la acción policial que tiene como consecuencia la imposición de una sanción administrativa, la cual debe corresponder a la aplicación de una norma legal (Artículo 12° del Código de Policía). En la redacción del Código de Policía del Estado Zulia puede observarse la utilización de éste término (Ejemplo: Artículos 144° y 148°). Como "personas detenidas" se identifican a los individuos aprehendidos por la violación de la ley penal. Se pondrán a prueba dos hipótesis, con la intención de comprobar una de ellas, al considerarse las variables de investigación involucradas en el problema de estudio planteado. De esta forma, las hipótesis de investigación se definen de la siguiente forma: l. "La aplicación posterior del Código de Policía del Estado Zulia, luego de la desaplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes, está 1 .. 'i ~ ! i Jesús Enrique Párraga 64 Capítulo Criminológico VoL 25, No. 1 (1997) caracterizada por una mayor cantidad proporcional de penas de arresto en el año 1995, en comparación con el año 1993; (a) sin diferencias en la naturaleza de la falta cometida; y (b) no observándose cambio en las características de los sancionados, a quienes se les aplicó éste mismo Código en los años 1993 y 1995" 2. "La aplicación posterior del Código de Policía del Estado Zulia, luego de la desaplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes, está caracterizada por una mayor cantidad proporcional de penas de arresto en el año 1995, en comparación con el año 1993; (a) con diferencias en la naturaleza de la falta cometida; y (b) observándose cambio en las características de los sancionados, a quienes se les aplicó éste mismo Código en los años 1993 y 1995". Se abre la posibilidad de anunciar o no si la desaplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes ha resultado en una criminalización -estigmatizaciónde los sujetos considerados peligrosos y/o sospechosos, al ser, entonces, aplicado el Código de Policía de manera particular. LEGISLACIÓN ESPECIAL DE ORDEN PÚBLICO La existencia de un procedimiento de actuación de un subsistema de justicia dirigido por las autoridades de policía, bien sea a petición de los ciudadanos o por promoción propia, conlleva al marco de análisis de éste organismo en la ejecución de su labor de control social. Concentrando la atención en lo que puede constituirse como el cimiento de su actuación, la cual ocurre ante la comparecencia de nuevos elementos intervinientes, es importante precisar en términos de actividad efectiva el desempeño de los cuerpos policiales y su asociación con las expectativas político-gubernamentales en términos de seguimiento de las normas, en la garantía de la seguridad jurídica y demás derechos fundamentales, así como constatar que las respuestas a las conductas sociales definidas por quienes detentan el poder administrativo reflejan identificadas actuaciones hacia la denominada "desviación", "orden público", "estados o condiciones" de los ciudadanos y no de hechos que vulneren la ley penal. La policía uniformada es una rama vinculada al problema delictivo, conjuntamente con otras instancias policiales como el Cuerpo Técnico de Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulia 65 Policía Judicial, la Dirección de los Servicios de Inteligencia y Prevención (DISIP), la Guardia Nacional (adscrita a las Fuerzas Armadas) y las recientemente creadas Policías Municipales. Es definida como "órgano auxiliar de policía judicial", desarrollando actuaciones complementarias para el enjuiciamiento criminal. La instrumentación legal básica de la policía uniformada yace en los códigos de policía de las diferentes entidades político territoriales -como cuerpo descentralizado subordinado a las gobernaciones de estado y al Distrito Federal, en un caso específico. La Constitución Nacional es quebrantada continuamente mediante la sobreposición de tipificaciones penales en normas reglamentarias del poder ejecutivo, como los códigos de policía. Como ejemplo de ello, el Art. 1°, en el Título 1, de "Disposiciones Generales", del Código de Policía del Estado Zulia, indica como objeto del mismo "establecer normas de conducta ciudadana, tipificando las faltas contra la seguridad y el orden público, y señalar las sanciones y procedimientos para aplicarlas". Entre las "sanciones y medidas preventivas que las autoridades de Policía pueden aplicar, tienen un carácter correccional" (Art. 134°), interesa la pena de arresto hasta por un máximo de ocho (8) días impuesta por el Gobernador (Art. 144°) o bien impuesta cuando su límite mayor no exceda de cuatro (4) días, por los Prefectos o Jefes Civiles de los Municipios Foráneos o Parroquias (Art. 145°). Se destacan en estos artículos la aparente potestad que tienen las instancias administrativas de coartar la libertad de los individuos, haciendo caso omiso a lo expuesto en el Artículo 60 de la Constitución. En la literatura concerniente al tema de la política criminal en América Latina se ha reseñado la violación a garantías fundamentales en materia penal como son los principios de legalidad de los delitos, de los procesos y de las penas 10 . En el Código de Policía, el primero de los principios mencionados es irrespetado por tipificaciones abiertas e imprecisas que colisionan con el desarrollo de la tipicidad, la cual debe estar basada precisamente en ese principio. A continuación se expondrán algunas de las disposiciones contempladas en el Código de Policía, que denotan el caso de la legislación penal abierta: El Art. 89° del Capítulo 11 -De la Decencia y Buenas Costumbresdispone: "La Policía, de oficio o a instancia del dueño y/o encargado, podrá desalojar de los establecimientos públicos o privados a quienes se encuentran en estado de embriaguez manifiesta perturbando el orden, o cometan ac- 1 66 1 Jesús Enrique Párraga Capítulo Criminológico Vol. 25, No. 1 {1997) tos atentatorios a la moral y las buenas costumbres ... ". De igual forma el Art. 97 del Capítulo III -De la prostitución-indica: "Queda terminantemente prohibido establecer casas de lenocidio, de prostitución y, en general, cualquier establecimiento que ofenda la moral pública, dentro del perímetro urbano, zonas residenciales y sitios poblados". En el Capítulo IV referente a la Potestad Doméstica, el Art. 104° señala: "Todo el que infiera malos tratos a su cónyuge, concubina o concubina, hijos, pupilos o dependientes, será conducido a instancia de cualquier interesado, a la Prefectura y amonestado por el Prefecto o Jefe Civil del Municipio Foráneo o Parroquia, y si no se corrigiere será sancionado con multa de ... o arresto ... ". ¿Cómo determinar el significado de "malos tratos", dada la complejidad psicosocial y amplitud implícita en este enunciado? Con lo siguiente se inicia la aclaración: "El maltrato doméstico conocido como violencia familiar o violencia doméstica, es otra de las formas de represión contra las mujeres, pudiendo cometerse además contra otros integrantes vulnerables de la familia (vg. niños y ancianos)" 11 . Revisando la siguiente cita sobre la similitud conceptual entre las definiciones de violencia doméstica y maltrato, se advierte la pertinencia de la interrogante anteriormente planteada: "En ambos casos se trata de formas de comportamiento dirigidas a las personas que provocan o producen lesiones o daños físicos, psíquicos y morales" 12 . Ahora bien en una sociedad en la cual la dinámica del poder de influencia interpersonal descansa sobre la utilización de estructuras relativas al grado y tipo de recursos de dominio o autoridad ejercidos, como por ejemplo el poder coercitivo (amenazas de castigo físico, castigo físico y agresión verbal), donde la forma de comunicación interpersonal establecida oscila entre la sumisión y la hostilidad, caracterizada además por relaciones inasertivas con las figuras cercanas, en su mayoría adoleciendo de expresiones afectivas positivas tanto verbales como físicas, en una sociedad en la cual la mayoría significativa de los hogares se caracterizan por seguir un patrón cultural de desintegración familiar, la norma, lo común, lo culturalmente aceptado y practicado es la expresividad de conductas violentas. Incluso desde el punto de vista del maltrato, en la dimensión de desarrollo personal, igualmente se destacan abusos los cuales van en detrimento del logro de objetivos trascendentales en la vida de las víctimas. Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulia 67 En sintonía aún con el anterior punto y como afirma Párraga de Esparza (1994:62): La inexistencia de procedimientos policiales y judiciales, de órganos de asistencia social y jurídica para atender a la mujer maltratada, de refugios donde ellas puedan asilarse una vez que tomen la decisión de abandonar y denunciar a su compañero, y la falta de programas de prevención y rehabilitación influyen definitivamente en la ausencia de denuncias y de control numérico de los casos de maltrato. El Art. 144° indica "El Gobernador del Estado podrá imponer penas de arresto hasta por ocho (8) días, mediante Resolución, motivada, para mantener el orden, la moral, la decencia pública, la seguridad social y la protección a las personas y sus bienes". Este es una especie de criterio totalizador de la instancia administrativa para desplegar su poder hacia la dinámica interna de la relación ciudadana, dependiente además de las referencias abiertas. Como conclusión a este punto de la legislación abierta y antes de extinguir este breve análisis de algunos de los artículos del Código de Policía, se puede decir que a través de la interpretación policial de los artículos contemplados en este código, la policía se atribuye competencia para advertir en los ciudadanos comportamientos homosexuales, de prostitución, conductas prevandálicas, desestabilizadores de la tranquilidad pública. Es notable la ingerencia de la valoración administrativa y policial en la hermenéutica de estas normas administrativas de seguridad y orden público, afectando así la seguridad jurídica. En el Art. 102° del Capítulo II -De la Prostitución- el cual reza de la siguiente manera: "Se prohíbe la utilización de la vía pública como medio de captación para dedicarse a la prostitución. El contraventor será sancionado con arresto de tres (3) días y, en caso de reincidencia, le será aplicado el procedimiento previsto en la Ley sobre Vagos y Maleantes"; se aprecia un tratamiento peligrosista de la reincidencia, reflejándose en la agravación de la pena del último delito y en la imposición de otras leyes como la Ley sobre Vagos y Maleantes. ¡, ,¡ ,, Jesús Enrique Párraga Capítulo Criminológico VoL 25, No. 1 (1997} 68 DINÁMICA POLICIAL La interacción policial con la sociedad establecida en términos de las facultades de aquella, está circunscrita en su conceptualización por el Estado en concordancia con reflexiones legislativas, jurídicas y ejecutivas. La labor policial "implica detección, restricción y/o prevención de comportamientos ilícitos" 13 . La policía está constituida por individuos, con expectativas, aptitudes y especialmente con actitudes con altas probabilidades de estabilidad en el tiempo. El comportamiento o desempeño, exteriorizado en concordancia o no con los estatutos establecidos, necesita siempre de valoración tanto en términos cualitativos como cuantitativos, tomando la pertinente consideración de la factibilidad y objetividad de tal disposición. Una cosa es lo que está establecido desde el punto de vista jurídico y otra es la actuación del poder policial. La policía en la medida en que cumple una función de vigilancia y disuación, reduce el flujo potencial de casos a ingresar; inmediatamente, en la medida en que generalmente es la primera instancia oficial que conoce de un hecho punible, opera una precalificación del mismo como infracción y evalúa las posibilidades reales de adelantar una investigación criminal que conlleve su pase sucesivo al aparato jurisdiccional, opera una selección de casos. Si a ello se añade el hecho de que ninguna otra instancia pública de control social interactúa tan frecuentemente con la población y que las presiones públicas y privadas sobre control y manejo de la criminalidad se centran fundamentalmente en ella" ... "se comprende su im¡ortancia en cualquier análisis del Sistema de Justicia Penal" 1 . Lo anterior es oportuno traer a colación, ya que hallazgos realizados por investigadores venezolanos 15 sobre el particular, llevan a éstos a afirmar que la activación de un organismo de seguridad como la policía uniformada está mediatizada por la "imagen de presencia" antes que al "procesamiento efectivo y terminal de situaciones definibles como claramente delictivas". Los resultados anunciados por estos autores indican que ante las conductas penalmente procesables, "no se manifiesta la adopción de medidas que permitan suponer el interés en proseguir averiguaciones tendentes a individualizar culpables y a aplicar sanciones". Agregan luego, "la formalización de la denuncia es claramente minoritaria y operaría más como un archivo de sos- Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulia 69 pechosos a ser utilizado con miras de control policial antes que para preparar casos de prosecución criminal". En cuanto al arresto policial en estos casos, prosiguen los citados autores denotando que las variadas circunstancias que conllevan a ésta acción, bien sea contra las personas, propiedad, estupefacientes y otras de calificación múltiple, no corresponden tanto a la "necesidad de asegurar pruebas para averiguaciones sucesivas", como para "afirmar la presencia policial". Entre los resultados de una investigación sobre la aplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes en una ciudad venezolana, se consiguió que las reglas sumarias para el procesamiento de los casos son pasadas por alto por los responsables administrativos, siendo las detenciones y la privación de la libertad no acordes con el procedimiento legal 16 . No cabe duda que lo anterior no sólo es una aproximación a la ineficiencia del sistema de seguridad policial, sino que es el puente inmediato a la corrupción y a la violación de los derechos establecidos que se refleja en el abuso de poder y en la represión que suele, muy a pesar de los esfuerzos realizados desde diferentes perspectivas, llegar a actos totalitarios y hasta autoritarios. MÉTODO Sujetos La unidad de análisis son los expedientes de las personas arrestadas (que reposan en el Departamento de Detenidos Comunes, de la Prefectura del Municipio Maracaibo), esto es, los sancionados con penas de arresto como medidas preventivas, con aplicación del Código de Policía del Estado Zulia. La población objetivo la configuran las personas arrestadas durante los años de 1993 y 1995, de ambos sexos y cualquier edad, a la orden de la Prefectura del Municipio Maracaibo con aplicación de sanciones -administrativas-privativas de libertad establecidas en el Código de Policía del Estado Zulia. El tamaño estimado del universo para los años objeto de estudio está conformado por 5.868 sujetos en 1993 y 7.584 sujetos en 1995 (ver Tabla 1). Se conformaron dos grupos, uno por cada año, con muestras seleccionadas aleatoriamente a través de una muestra probabilística estratificada con un procedimiento de selección sistemática de elementos muestrales. De ésta ,,, 1 70 ¡ Jesús Enrique Párraga Capítulo Criminológico VoL 25, No. 1 (1997) manera cada grupo quedó conformado por 350 sujetos, para permitir la generalización de los resultados. Con el procedimiento de selección implementado, los elementos muestraJes tienen valores muy parecidos a los de la población, de manera que las mediciones en el subconjunto den estimados precisos del conjunto mayor, reduciendo el error estándard a menos de 0.5. La estratificación aumenta la precisión de la muestra e implica el uso deliberado de diferentes tamaños de muestra para cada estrato, que en este caso es la relación mensual de suministros a la Prefectura del Municipio Maracaibo, "a fin de lograr reducir la varianza de cada unidad de la media muestra!" 17 . La selección sistemática logra una muestra proporcionada. La selección del año de 1993 se debe a que es éste el año previo, inmediatamente anterior a la desaplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes; aunada a la dificultad de aumentar a un mayor tamaño la muestra para este cohorte debido a la desaparición de muchos archivos contentivos de los "records" y de la imposibilidad de localizar una gran cantidad de expedientes de los años previos a 1993, repercutiendo en el procedimiento y la confiabilidad de la selección, la inclusión de los relativamente escasos expedientes disponibles. Se infiere que debido a la anterior situación, el efecto de variables extrañas como cambios en las condiciones socio-económicas de la población venezolana, crisis fiscal y moral, estabilidad política e institucional y otras, no inciden sobre los resultados y la metodología ha utilizar, al permanecer las condiciones generales del venezolano y especialmente del zuliano muy semejantes, durante los años objeto de estudio, es decir, entre 1993 y 1995*. Para el año 1995 ya ha transcurrido un año desde la desaplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes, según resolución del Ejecutivo Regional, tiempo suficiente para la adopción de tal medida y para permitir reflejar procedimientos diferenciales. * El análisis de los datos utilizados en esta investigación, se realizó en el primer semesre del año 1996, habiendo sido elegido y encargado Francisco Arias Cárdenas como gobernador del Estado Zulia, y ordenado éste la aplicación de nuevo de la Ley sobre vagos y maleantes, imposibilitando cumplir con el objetivo inicial de incluir otros años -de no aplicación de dicha ley- en el estudio. Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulia 71 Variables dependientes Si de la desaplicación ha resultado la criminalización a través del Código de Policía, ésta incidencia diferencial ha de ser evidente en las siguientes áreas: Primero, las penas de arresto aplicadas durante 1995 deben haber aumentado tanto en número absoluto como en porcentaje respecto al resto de las detenciones practicadas al hacer la comparación con el año 1993. Como segunda evidencia, si el Código de Policía se utilizó con carácter correccional para arrestar preventivamente al sujeto considerado como peligroso al estilo de la Ley sobre Vagos y Maleantes, debe haber diferencias identificables en los expedientes de ambos grupos, es decir, en las características de los sujetos. Es hipotetizado que, como cohorte, el año 1995 presentará entonces amplios prontuarios policiales contentivos de más cantidad de arrestos preventivos en comparación con el cohorte de 1993 (conformado por sujetos a los cuales se les arrestó preventivamente fundamentándose las autoridades para ejecutar esta acción en el Código de Policía). La extralimitación de la capacidad punitiva del Estado se incrementa a partir de 1985 a raíz de la crisis económica que comienza a vivenciar la nación, conllevando a que los sujetos considerados como peligrosos fuesen más fácilmente detenidos debido a las diferentes actividades de los cuerpos de seguridad del Estado, tales como: operativos de seguridad, redadas, allanamientos, entre otras, criticadas por los opositores a la Ley sobre Vagos y Maleantes y tan característico de los procedimientos acompañantes de este instrumento administrativo. Como aclaratoria, los casos registrados a la orden de la Prefectura del Municipio Maracaibo, los cuales son utilizados en este trabajo, excluyen a aquellos sujetos a los cuales se les aplicó la Ley sobre Vagos y Maleantes en 1993 -con cualquiera de las medidas correccionales-siguiendo con todo el procedimiento administrativo establecido en dicha Ley; de manera que el grupo está conformado por personas arrestadas, con aplicación de las atribuciones establecidas en el Código de Policía. Se incluyen sí, aquellos que aparecen en el Libro de Registro de la Prefectura con conductas acreedoras de arresto sujetas a la aplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes, pero que en definitiva según los propios registros y expedientes, tal procedimiento no se llevó a cabo. Las circunstancias alrededor de ésta decisión, quizá de las autoridades superiores policiales -Prefecto, Secretario de Gobierno, Gobernador- no interesan a los efectos de los objetivos del estudio. Lo que si es Jesús Enrique Párraga Capítulo Criminológico Vol. 25, No. 1 (1997) 72 evidente es que a éstos individuos en definitiva se les aplicó el Código de Policía. La anterior explicación es pertinente por considerar que durante el año de 1995 si bien no se aplicaba la Ley sobre Vagos y Maleantes, los motivos registrados de los arrestos se incluían en categorías establecidas en dicha Ley; algunas de ellas como ya se mencionó anteriormente describen delitos y faltas tipificados en el Código Penal no pudiéndose atribuir como justificativo del arresto, según lo observado en los expedientes, a la aplicación del Código de Policía. Por Jo que se decidió clasificar Jos diferentes motivos y naturaleza de las faltas (y delitos, según el caso) tal como originalmente aparecen en el Libro de Registros, no interviniendo y tampoco desvirtuando así la confiabilidad y la validez de lo que fue considerado como "definiciones operacionales ya establecidas en la rutina de trabajo de los funcionarios policiales". Lo mismo puede decirse de ambos grupos, como se observará más adelante respecto a Jos sujetos que fueron reseñados con delitos contra la propiedad y/o contra las personas y a quienes no se les abrió instrucción por estas conductas ni fueron remitidos a la policía judicial ni a tribunales, sino que se les arrestó preventivamente por unos días. Este tipo de análisis es conveniente ya que lo asentado por los organismos de seguridad es relativamente definido por éstos, al entrar en contacto con su fuente de origen 18 . El porcentaje en cada grupo de las diversas ofensas contempladas sirve como indicador de los cambios en la gravedad de las mismas, para así determinar si se realizaron detenciones en 1995, por causas o motivos que no están expresamente establecidos dentro de los instrumentos normativos analizados. La diferencia entre los porcentajes de los casos conocidos por activación propia, en cada año, sirve como indicador de la labor desplegada por la policía en esos períodos de tiempo. Variable independiente El efecto de la desaplicación fue objeto de estudio al observar las cifras que muestran la diferencia numérica y porcentual entre los casos correspondientes al año 1995, es decir, el año en el cual no se aplicó la Ley sobre Vagos y Maleantes, y el año 1993. Fue operacionalizada como el incremento en el porcentaje porporcional de personas arrestadas entre uno y otro año Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulia 73 objeto de estudio. El número de suministros a la Prefectura del Municipio Maracaibo en los respectivos años objeto de estudio (n=5.868 en 1993; n=7.584 en 1995), fue utilizado como medida de las penas de arresto; de igual forma se utilizó el número de detenidos por diferentes motivos (n=20.910 en 1993; n=20.016 en 1995), entre los dos períodos de tiempo estudiados. (ver Tabla 1). Entre 1993 y 1995 las penas de arresto aumentaron en un 29.24% La diferencia porcentual proporcional entre las penas de arresto y las personas detenidas por diferentes motivos asociados a la ley penal fue de un 9.82% (ver Tabla 1). Instrumento de recolección de datos Se utilizó para esta investigación un instrumento de recolección de datos de diecinueve items que recoge las variables principales objeto de estudio y otra información de identificación personal registrada en los expedientes del Departamento de Delitos Comunes, de la Prefectura del Municipio Maracaibo. Este instrumento es una adaptación de otro muy similar, utilizado por Santos ( 1996) en el estudio sobre el tema en cuestión. En la siguiente sección se presentarán los resultados más relevantes. RESULTADOS Y DISCUSIÓN El examen de las distribuciones de frecuencias encontradas en cada período objeto de estudio constituye uno de los procedimientos implementados para responder al problema de investigación, demostrando que a raíz de la no aplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes ha surgido como alternativa la aplicación del Código de Policía de una manera particular. Como se demuestra posteriormente en la Tabla 1, en el Municipio Maracaibo en 1995 la cantidad de penas de arresto impuestas mediante la aplicación del Código de Policía, es decir, personas a la orden de la Prefectura del Municipio Maracaibo, aumentó tanto en números absolutos como en porcentaje, respecto a 1993. Sin embargo esta situación no es atribuible necesariamente a la implantación de una política criminal de tipo represiva en lugar de la anunciada para ese entonces, que se caracterizó por su naturaleza preventiva, como tampoco al aumento de los delitos y de las faltas. Se debe considerar que se implementó un programa de coordinación policial a partir de 1994, con inci- 1 Jesús Enrique Párraga 74 Capítulo Criminológico Vol. 25, No. 1 (1997) dencia en una mayor acción de este cuerpo de seguridad, haciéndose la presencia policial más evidente como resultante de la dotación a este organismo de unidades radiopatrulleras, armamento, municiones y uniformes nuevos, entre otros. Se establecieron también para ese segundo período de tiempo estudiado, una serie de beneficios económicos e incentivos al personal uniformado; todo ello capaz de intervenir en los resultados encontrados. Ahora bien, si la intención además de brindar condiciones laborales más justas, fue despertar cierta motivación en los policías hacia el desempeño de sus funciones, esto pudo repercutir en que simplemente actuaran más frecuentemente de la forma en que éstos se desenvuelven normalmente en su relación con el común de los ciudadanos, muy a pesar de las instrucciones impartidas por sus superiores en el sentido de cumplir con las diseñadas estrategias preventivas en lugar de las represivas. No se puede subestimar el efecto de otra circunstancia asociada con la disposición motivacional que igualmente pudo contribuir en las acciones ejercidas por los funcionarios policiales, específicamente en la identificación de conductas sancionables. Si bien la solidez de los argumentos que la componen no son refutables desde el punto de vista de la teoría psicológica en que se sostienen, no es menos cierto que la investigación no introdujo procedimientos para su medición, por lo cual la intención es anunciar su valor heurístico, para su consideración en otras fases de estudio del área en cuestión. El ser humano siempre se crea expectativas relacionadas con el grado de libertad de escogencia entre diferentes alternativas. Si la libertad de escogencia es amenazada por factores ambientales que eliminan una de las alternativas o si la posibilidad de escogencia se encuentra sometida a cierta presión por un agente externo, la persona reaccionará de manera bastante predecible con miras a restaurar la alternativa amenazada, esto es, en dirección a preservar su libertad de escogencia. Esta es la base del paradigma de la teoría de la reactancia psicológica. Se trata de un estado motivacional que se activa cuando el sentimiento de pérdida de control sobre las opciones del individuo es movilizado por restricciones no esperadas o aceptadas de antemano*. * La Teoría de la Reactancia Psicológica fue desarrollada por Brehm. Para mayor información consultar Brehm & Brehm J.: "Psychological Reactance: A Theory of Freedom and Control". New York. Academic Press. 1981. Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulia 75 Se ha dicho que los funcionarios policiales se vieron atados de mano a la hora de practicar sus labores de seguridad y orden público, percibiendo la desaplicación como atentatoria, coartando su campo de acción; experimentarían los funcionarios policiales una especie de impotencia a raíz de la desaplicación que tiene mucho que ver con cuán amenazante resultaba la situación a la que estaban sometidos para la auto-estima y la estabilidad del Yo, por ende reaccionando en contra de Jo establecido y de la manera en que consideraban no contraria a la libertad de escogencia, es decir de actuación. No hay duda de que la utilización de la Ley sobre Vagos y Maleantes está muy internalizada en los operarios del resguardo de la seguridad pública. Esta explicación a lo acontecido a raíz de la desaplicación tiene como meta ayudar a comprender la situación. Lo acotado es sólo una aproximación válida en el análisis de los hechos en base a los datos recolectados. Otra variable interviniente no prevista en la investigación es la influencia en los funcionarios policiales, incluidos los de mayor jerarquía, del rechazo de la colectividad a la desaplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes. Sin embargo en torno a este punto hay ciertos datos que se presentarán más adelante que reflejarán algo acerca de esta tendencia, cuando se analicen las denuncias y los denunciantes. Un hallazgo interesante es aquel indicativo de que en ambos años permanece casi invariable la cantidad total de personas detenidas, observándose una leve disminución en el segundo año. No resulta contradictorio esta aseveración con lo planteado en el inicio de esta sección, ya que, para resolver la interrogante central del estudio no es decisivo la cantidad total de detenciones por sí mismo, como un dato aislado, sino el porcentaje proporcional de los arrestos en relación con ese total de detenciones practicadas (ver Tabla 1). Mientras el incremento de las penas de arresto, tanto en números absolutos como en porcentaje, es consistente con las hipótesis planteadas, a continuación se expone lo relativo a la determinación de la naturaleza de la falta motivante de los arrestos y de las características de las personas arrestadas, entre un grupo y otro. En cuanto al primer punto la distribución se realiza según lo reseñado en los expedientes policiales, identificando la disposición legal que fundamenta los arrestos arbitrarios, averiguación de identidad o cualquier conducta que no haya sido prevista por la Ley como delito o falta, Jesús Enrique Párraga Capítulo Criminológico Vol. 25, No. 1 (1997) 76 TABLA No.1 Penas de arrestos como porcentaje del total de personas detenidas en 1993 y 1995 ----~~~---~ Años objeto de estudio 1993 1995 % Diferencia Porcentaje proporcional 28.06% 37.88% 9.82%* Penas de arresto (Municipio Maracaibo) 5.868 7.584 29.24%* Personas detenidas (Estado Zulia) 20.910 20.016 -4.27%* * tomado del muestreo. Fuente: Departamento de Detenidos Comunes; Prefectura del Municipio Maracaibo Elaboración Propia. y por tanto, no clasificable. Es importante acotar que en este proceso metodológico participó un grupo de expertos en la materia, en calidad de jueces. Se observa entre los dos grupos, en cuanto a las conductas acreedoras de arresto según la regulación establecida en el Código de Policía, un desplazamiento de los motivos de los arrestos hacia otras tipificaciones distintas a las del Código. Esto no significa una menor utilización en 1995 de la respectiva normativa administrativa, en comparación con el empleo dado en 1993. Debe recordarse que a ambos grupos constituyentes de la muestras les fue aplicada una pena de arresto según lo establecido -supuestamente- en el Código de Policía. Lo resaltante es que los expedientes contienen esos datos, en la atribución de las conductas merecedoras de sanciones, según los argumentos allí encontrados. En relación al hallazgo en los expedientes policiales de conductas tipificadas en la Ley sobre Vagos y Maleantes, como factor causal de los arrestos, se observa entre los grupos una tendencia mayor en el año de 1995, pese a la posición de la desaplicación. Los arrestos considerados de carácter No Determinado son apreciados en mayor cantidad en el segundo año objeto de estudio. Las conductas tipificadas en el Código Penal se mantienen muy semejantes entre un año y otro. Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulía 77 La acción policial ejecutada durante el año 1995 demuestra como la frecuencia del contacto policial con las conductas establecidas en las normativas especiales de orden público y defensa social se caracteriza por la criminalización y el etiquetamiento, permaneciendo constante la injerencia policial en asuntos relacionados con la lesión a bienes jurídicos protegidos por la ley penal. Los porcentajes resultantes de la clasificación de las conductas asociadas al arresto según los instrumentos legales que las contemplan, se muestran en la Tabla 2. Se hace la acotación de que se incluyen las conductas tipificadas por el Código Penal como delito, encontradas en los expedientes. Los porcentajes de las diversas faltas tipificadas en la Ley sobre Vagos y Maleantes, así como de aquellas conductas consideradas como indeterminadas, indica una tendencia, aunque débil estadísticamente, hacia la realización de arrestos por motivos no expresamente establecidos dentro de los instrumentos normativos contemplados, durante el año 1995 en comparación con 1993. La anterior interpretación extraída de los resultados obtenidos se fundamenta en los siguientes argumentos: Primero, aumentaron los arrestos arbitrarios, es decir, aquellos imposibles de relacionar con una determinada lesión a un bien jurídico o una conducta verdaderamente amenazante a la seguridad ciudadana o a una falta. TABLA No. 2 Clasificación de la naturaleza de la falta o delito* según lo establecido en los instrumentos legales contemplados 1993 Instrumentos legales 1995 Frecuencia Porcentaje Frecuencia Porcentaje 250 71.4 197 56.3 Ley de Vagos y Maleantes 4 1.1 47 13.4 No determinada 5 1.4 14 4 Código Penal* 90 25.7 92 26.3 Total 35 Código de Policía Número de observaciones perdidas: O 100 350 100 Jesús Enrique Párraga 78 Capítulo Criminológico Vol. 25, No. 1 (1997) Segundo, el blanco de la mencionada ley según lo reseñado por expertos criminólogos en numerosas investigaciones, son los pobres, los considerados sospechosos por la pertenencia a una determinada clase social, los señalados por su apariencia, los perseguidos y rechazados socialmente por supuestas conductas indeseables, los intolerados por determinadas características, los sujetos supuestamente peligrosos, y no las conductas realmente violatorias a la ley penal y amenazantes a la convivencia social. Sin embargo pese a todo lo anterior, cuantificándose en el segundo año estudiado más arrestos atribuidos a conductas tipificadas en la Ley sobre Vagos y Maleantes, así como más arrestos arbitrarios, es necesario destacar que debido al aumento, apenas de 5 a 14 casos -números tan pequeños- es posible que esta variación sea aleatoria. Se presenta por igual la posibilidad de que el hallazgo de las distribuciones de 1993 y 1995 difieran, obedeciendo al posible cambio -a su vez- en el primer renglón -código de policía-. Se confirma lo planteado en una de las hipótesis de investigación acerca del no hallazgo de diferencias -estadísticas-significativas (Phi, Cramer's V, Coeficiente de Contigencia, Lambda, Goddman & Kruskal Tau) identificables entre ambos grupos, en especial en lo referente a las características de los sujetos; aunque se tiene que el grupo correspondiente al año de la desaplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes revela aparentemente -sin valor estadístico- más contacto previo con el sistema de control social formal en comparación con el otro cohorte (ver Tabla 3), ya que el porcentaje de personas arrestadas con antecedentes policiales luce incrementarse de 35.1% (n=123) a 47.4% (n=l66). Se demuestra que no hay diferencia estadística significativa (Phi, Cramer's V, Coeficiente de Contingencia, Lambda, Goodman & Kruskal Tau) en cuanto a la existencia de una tendencia mayor en 1995 de conductas acreedoras de arrestos según la Ley sobre Vagos y Maleantes, en personas con antecedentes policiales (ver Tabla 3), no entendiéndose por esto que los individuos que sí poseían historial de este tipo fueran mayormente arrestados en 1995. De manera que no puede afirmarse, con base a los valores estadísticos encontrados, que se ha reforzado el circuito de criminalización, sancionando menormente las desviaciones primarias, aunque observando los datos impresione como que se ha manteniendo alto el porcentaje de casos señalizados y seguidamente etiquetados. Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulia 79 TABLANo.3 Antecedentes policiales por naturaleza de la falta o delito* según su tipificación en los instrumentos legales Antecedentes Policiales Instrumento Legal 1995 1993 % n % n Código de Policía 82 67% 90 54.2% No Determinada 2 2% 3 2% Ley sobre Vagos y Maleantes 4 3.3% 36 22% 35 29% 37 22.3% 123 35.1% 166 47.4% Código Penal* Total ~- ------ --·--- Número de observaciones perdidas: 227 (1993) 184 (1995) El 3.7% (n=l3) de las personas arrestadas que conforman el grupo de 1995, poseen antecedentes de aplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes a diferencia del 2.0% (n=7) del grupo de 1993 (ver Tabla 4). De nuevo se presenta la posibilidad de que siendo los números tan pequeños, éstas diferencias sean aleatorias. Al ser analizados conjuntamente la posesión de antecedentes de aplicación de una medida correccional privativa de la libertad, según lo establecido en la Ley sobre Vagos y Maleantes y la naturaleza de la falta o delito según el caso, que originó el arresto estudiado, se observa que en 1995 al 76.9% de las personas con este tipo de antecedente se le atribuye una conducta tipificada en la Ley sobre Vagos y Maleantes como argumento del arresto (ver Tabla 4). Esto no necesariamente indica la instauración de un proceso de señalamiento y estigmatización por parte de los funcionarios administrativos reforzando el etiquetamiento previo, al no encontrarse una diferencia estadística significativa. Al analizar conjuntamente las ofensas específicas que ocasionaron los arrestos anteriores -en caso de arrestos múltiples, reincidencia, se seleccionó 4 1.2% 5 1.4% 194 57.6% 197 56.3% 2 28.6% 248 72.3% 250 71.4% Sí No Total Número de observaciones perdidas: O (1993) o (1995) LVM: Ley sobre Vagos y Maleantes SI: Antecedentes de Aplicación NO: No Antecedente de Aplicación 14.3% 3 23.1% 1993 1993 14 4% 14 4.2% 1995 No Determinada LVM 1995 Código de Policía 4 1.1% 4 1.2% 1993 47 13.4% 37 11% 10 76.9% 1995 Ley sobre Vagos y Maleantes 90 25.7% 86 25.1% 57.1% 4 1993 92 26.3% 92 27.3% 1995 Código Penal 1995 13 3.7% 337 96.3% 350 100% 1993 7 2% 343 98% 350 100% Total TABLANo.4 Antecedentes de medidas correccionales privativas de libertad según lo establecido en la Ley sobre Vagos y Maleantes por naturaleza de la falta %- ~· , .:::!¡::¡ ~~ -- ¡::¡. .... • ~¡:::(l) - ~di ~ ~- o ¡:;· tO o 0: ;:l ~: \) §' o .§ \) o ~ Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulia 81 la ofensa más severa, para luego especificar el instrumento legal que la contempla- y el instrumento legal contentivo de la naturaleza de la falta que originó el arresto en el respectivo año estudiado (ver Tabla 5), no se observa una diferencia estadística significativa entre los grupos en cuanto a la cantidad de personas arrestadas con antecedentes policiales y señaladas en los años objeto de estudiado, de una conducta tipificada en la Ley sobre Vagos y Maleantes, aunque se presenta un aumento numérico de 3.3% en 1993 a 22% en 1995; sin embargo este aumento es esperado ya que en el primer año se aplicaba la referida ley, por lo que los casos se deben encontrar en los expedientes de sancionados con esa Ley en particular y no en los tomados en cuenta para este estudio que como se recordará son aquellos a quienes se les aplicó una pena de arresto según el Código de Policía. Al analizar conjuntamente la tenencia de antecedentes penales y el instrumento legal que explica la naturaleza de la falta que originó el arresto estudiado, se observa que las personas con este tipo de antecedentes fueron sancionadas por una conducta tipificada en la Ley sobre Vagos y Maleantes en 1995 en un 42%, en comparación con el 4.3% del año 1993. Pudiendo indicar que en el año estudiado correspondiente a la desaplicación de la Ley sobre Vagos y Maleantes, las personas con antecedentes penales fueran más susceptibles de ser objeto de medidas administrativas, como resultado de su identificación y posterior persecución por parte de las autoridades competentes; lo que querría decir que quien tuviera antecedentes penales aparentemente tuvo mayores posibilidades de ser aprehendido y reseñado. Lo anterior podría ser el resultado del desplazamiento de sanciones mediante el Código de Policía a personas con las especificadas características, ante la imposibilidad de aplicación de otra norma administrativa o de la sanción por parte de los Tribunales de Municipio. Nótese que los arrestos atribuidos a conductas tipificadas por el Código de Policía en las personas con antecedentes penales disminuyen en el año de 1995 a un 38% (n=9), cuando en el año de 1993 fue de 65.2% (n= 15). Coincide la anterior tendencia con los arrestos originados por lesión a los bienes jurídicos resguardados por el Código Penal. En la Tabla 6, se exponen los datos relativos a los anteriores comentarios. Sin embargo al utilizar pruebas de diferencia estadística, no es posible afirmar todo lo anterior: los resultados no son significativos (Phi, Cramer's V, Lambda, Goodman & Kruskal Tau). 2 2% 2 4% 1993 Número de observaciones perdidas: 227 (1993) 184 (1995) 90 54.2% Total 82 67% 1 100% 36 51.4% 3 11% 3 50% 47 77% 1995 LOSEPS Código Penal 29 54% 12 86% No Determinada Ley sobre Vagos y Maleantes 41 75% 1993 3 2% 2 3% 1 2% 1995 No determinada 4 3.3% 3 6% 1 7.1% 1993 36 22% 8 11.4% 23 82.1% 1 17% 4 7% 1995 Ley sobre Vagos y Maleantes 35 29% 20 37% 1 7.1% 14 26% 1993 37 22.3% 24 34.3% 2 7.1% 2 33.3% 9 15% 1995 Código Penal 123 100% 54 44% 28 17% 6 4% 61 37% 1995 166 100% 1 .6% 70 42.2% Total 14 11.4% 55 45% 1993 Instrumento legal que contiene la ofensa que originó el arresto en cuestión Código de Policía Código de Policía Instrumento Legal arresto anterior TABLA No. 5 Instrumento legal que contempla la ofensa que originó el arresto policial anterior por instrumento legal que contiene la ofensa que originó el arresto en cuestión ~- .:::!!:l ~e§ ~~' '-'tl • ~¡::(1) - (JJ;:! ~t"l ~ ~' o ~ t8'¡:;· o ~: (J o ~ (J .g t\:) O;) Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulia 83 TABLA No. 6 Antecedentes penales por naturaleza de la falta Antecedentes Penales Instrumento Legal 1993 n 1995 % n % 15 65.2% 9 38% Policía No Determinada 2 9% 2 8.3% Ley sobre Vagos y Maleantes 1 4.3% 10 42% Código Penal 5 22% 3 13% 23 6.5% 24 6.9% Código de Policía Total Otros datos recolectados muestran como en los expedientes que conformaron los grupos, hay hallazgos que de igual forma son importantes para la aceptación o no de las hipótesis de investigación, así como para responder a las interrogantes planteadas. Se hace la acotación de que se presentan números muy pequeños, lo cual podría incidir en que los resultados fueran producto de factores aleatorios. Al identificar al denunciante, se tiene que en el grupo de 1993 la variable definida en este estudio como "denuncia ciudadana", es formalizada en el 1.2% (n=4), mientras que para 1995 esta categoría llega al 3.9% (n=13). Esto puede ser indicativo de una reacción por parte de la ciudadanía en la búsqueda de la resolución de los problemas de inseguridad, al mantenerse en contacto con las estructuras del Estado encargadas del orden público y sobresale la definición social establecida en los procesos de criminalización, señalamiento y etiquetamiento según un patrón de rechazo y adjudicación de peligrosidad social a personas con determinadas características. Al analizar conjuntamente las variables Denuncia Formalizada y Naturaleza de la Falta Cometida, se obtienen los siguientes datos: Para 1993 la denuncia es formalizada cuando la falta cometida está contemplada en el Código de Policía, en el 71.1% (n=241) de los casos, en 84 Jesús Enrique Párraga Capítulo Criminológico Vol. 25, No. 1 (1997) comparación con el 55.3% (n= 183) de 1995, observándose una disminución de la denuncia sustentada en esta normativa administrativa, al confrontar los datos de uno y otro año, objeto de estudio. Al ser la ofensa sancionada por la Ley sobre Vagos y Maleantes, se formaliza la denuncia en 1993, en el 1.2% (n=4) de los casos, en comparación con el 14.2% (n=47) de 1995, aun cuando en este último año no se aplicaba dicho instrumento legal. Se presenta el desplazamiento de las conductas tipificadas en el Código de Policía hacia la Ley sobre Vagos y Maleantes, a raíz de la desaplicación de dicha ley. Cuando es determinada la conducta asociada a la detención, en 1993 la denuncia se presenta en el 1.2% (n=4), de los casos, en comparación con el 3.6% (n=12) de 1995; se evidencia un incremento de las denuncias de conductas asociadas a situaciones no posibles de clasificar según los instrumentos legales considerados; lo que constituye un aumento de las medidas tomadas arbitrariamente que afectan la libertad de los ciudadanos. Al analizar conjuntamente las variables Denunciante y Naturaleza de la Falta Cometida, se obtienen resultados interesantes (Tabla 7). Cuando el agredido es el denunciante y la falta cometida en su contra está contemplada por el Código de Policía, se observa una disminución en la formalización de las denuncias en 1995, con respecto a 1993. Los casos encontrados en los expedientes indican una disminución en el año 1995 en la actuación de oficio de los funcionarios policiales, en situaciones asociadas a conductas sancionadas en el Código de Policía. En 1995, los integrantes de la comunidad formalizan menos denuncias asociadas con conductas reguladas por el Código de Policía. Se aprecia un desplazamiento de las denuncias realizadas por la comunidad hacia conductas tipificadas por la Ley sobre Vagos y Maleantes. En los expedientes estudiados correspondientes al año de 1995 se observa un aumento en las denuncias formalizadas por parte de la víctima y por parte de la comunidad, cuando los motivos están asociados a conductas tipificadas en la Ley sobre Vagos y Maleantes; año precisamente caracterizado por la desaplicación de la Ley en cuestión. En 1995 la policía actúa de oficio en un mayor porcentaje de casos con conductas tipificadas por la Ley 99 58% 133 86.4% 5 71.4% 3 75% Agredido -Víctima Organismo de Seguridad Comunidad Denuncia Ciudadana 5 39% l 20% 96 8% 79 47% 1995 4 2.6% 1993 10 7% 2 1.2% 1995 No Determinada Número de observaciones perdidas: 11 (1993) 19 (1995) 1993 Denunciante Código de Policía 1 14.3% 2 1.3% 1 6% 1993 3 23.1% 4 80% 22 16% 17 10.1% 1995 Ley sobre Vagos y Maleantes Instrumento legal 1 25% 1 14.3% 14 9.1% 72 42% 1993 5 39% 14 10% 70 42% 1995 Código Penal Denunciante por naturaleza de la falta. Frecuencia y porcentaje TABLA No. 7 4 1.2 7 2.1% 154 46% 172 51% 1993 Total 13 4 5 2% 142 43% 168 51% 1995 ¡:) ;:l V¡ CJl ()) R" V¡ ;:l ¡::) ~ g_ ~~ ¡::: NC ce§ 2_c: ~~ t>ll::>' m.¡g l=l.t!: ¡5' ~ ~!5" 'g§- ~ e 5: " !:l. cE" !:l. ¡:;· ~ ;;-.g C•- ~§V¡ s: í5" ~ §- ~e .ga !5"~ (¡:"-< 86 Jesús Enrique Párraga Capítulo Criminológico Vol. 25, No. 1 (1997) sobre Vagos y Maleantes. Un dato muy particular es la ausencia de casos denunciados por la ciudadanía en 1993, cuando la conducta cuestionada es tipificada en la Ley sobre Vagos y Maleantes, en 1995, si se presentan. Permanecen casi igual las cifras en ambos años para los casos tipificados en el Código Penal y asociados con la activación propia de la policía, así como con denuncias formalizadas por el agredido. Cuando la conducta es tipificada por el Código Penal, la comunidad es la denunciante en el 14.3% (n=1); en 1995 no hay denuncias por esta circunstancia. En los expedientes estudiados aparece la policía actuando de oficio en 1995, en un mayor porcentaje de casos en los cuales no es posible identificar la falta o delito cometido. Al tratarse de conductas tipificadas en el Código Penal, en 1995, las denuncias ciudadanas asociadas evidencian un aumento. En el grupo de 1993, el 32.9% (n=115) de los sujetos arrestados habían sido denunciados con anterioridad ante las autoridades competentes; en comparación con el 43.6% (n=l52) de 1995. Esto indica una mayor presencia de esta característica en particular, en los detenidos durante 1995. Entre los sujetos arrestados en 1993, el 67.1% (n=235) no habían sido denunciados anteriormente, en comparación con el 56.4% (n=197) de 1995. Esto indica una menor presencia de esta característica en particular, en la muestra del año 1995. Conductas tipificadas en el Código de Policía son los motivos de las denuncias formalizadas anteriormente en contra de las personas arrestadas del grupo de 1993, con un 47% (n=54), mientras que para el grupo de 1995, lo es en 35% (n=54). Nótese que la frecuencia de ocurrencia es la misma, disminuyendo el porcentaje. Para el 10.4% (n=l2) de las personas arrestadas del primer grupo, el motivo de la denuncia anterior no está determinado por ninguna de las normativas manejadas; disminuyendo en el segundo grupo a 2.6% (n=4). Conductas tipificadas en la Ley sobre Vagos y Maleantes es el motivo de la denuncia anterior interpuesta ante las autoridades competentes en contra de los detenidos en el grupo de 1993, con el .9% (n= 1), aumentando al 20.4% (n=31) en 1995. Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulia 87 CONCLUSIONES A manera de conclusión existen evidencias para afirmar que se observa en el segundo grupo estudiado ( 1995) un desplazamiento de los motivos de los arrestos hacia otras tipificaciones distintas a las del Código de Policía, no significando una menor utilización en este año de la respectiva normativa administrativa, en comparación con el empleo dado en 1993. Dicha situación trajo como consecuencia una forma alternativa de criminalización de los considerados "peligrosos sin delito", a través de medidas preventivas consistentes en medidas correctivas de privación de la libertad, como las penas de arresto, las cuales son consideradas inconstitucionales. La evidencia presentada confirma una de las hipótesis de investigación, resultando una mayor cantidad proporcional de penas de arresto en el año 1995, en comparación con el año 1993; no evidenciándose diferencias estadísticamente significativas en la naturaleza de las faltas cometidas, así como tampoco en las características de los sancionados entre un año y otro objeto de estudio. Los porcentajes de las diversas faltas tipificadas en la Ley sobre Vagos y Maleantes, así como de aquellas conductas consideradas como indeterminadas, indica una tendencia, aunque débil estadísticamente, hacia la realización de arrestos por motivos no expresamente establecidos dentro de los instrumentos normativos contemplados, durante el año 1995 en comparación con 1993. Se observó una reacción por parte de la ciudadanía en la búsqueda de la resolución de los problemas de inseguridad, al mantenerse en contacto con las estructuras del Estado encargadas del orden público, sobresaliendo la definición social establecida en los procesos de criminalización, señalamiento y etiquetamiento. Aparentemente las personas con antecedentes penales fueron más susceptibles de ser objeto de medidas administrativas, como resultado de su identificación y posterior persecución por parte de las autoridades competentes; lo que quiere decir que quien tuviera antecedentes penales tuvo mayores posibilidades de ser aprehendido y reseñado. Hay un desplazamiento de sanciones mediante el Código de Policía a personas con las especificadas 88 Jesús Enrique Párraga Capítulo Criminológico Vol. 25, No. 1 (1997) características, ante la imposibilidad de aplicación de otra norma administrativa o de la sanción por parte de los Tribunales de Municipio. Hay una disminución de la denuncia sustentada en el Código de Policía entre un año y otro estudiado. Se evidencia un incremento de las denuncias de conductas asociadas a situaciones no posibles de clasificar según los instrumentos legales considerados; lo que es considerado como un aumento de las medidas tomadas arbitrariamente que afectan la libertad de los ciudadanos. En 1995 los integrantes de la comunidad formalizan menos denuncias asociada con conductas reguladas por el Código de Policía. Se aprecia un desplazamiento de las denuncias realizadas por la comunidad hacia conductas tipificadas por la Ley sobre Vagos y Maleantes. Se observó un aumento de denuncias formalizadas por parte de la víctima y por parte de la comunidad, cuando los motivos están asociados a conductas tipificadas en la Ley sobre Vagos y Maleantes. Hay una disminución de la actuación de oficio de los funcionarios policiales, en situaciones asociadas a conductas sancionadas en el Código de Policía. En 1995 la policía actúa de oficio en un mayor porcentaje de casos con conductas tipificadas por la Ley sobre Vagos y Maleantes. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS l. 2. 3. 4. 5. ANIYAR, Lolita. "Notas para la discusión de un control social alternativo". Criminología Crítica, Congreso Mundial de Criminología; Universidad de Medellín, Colombia. 1984, pp 91. ANIYAR, Lolita. "Controlar la delincuencia dentro del marco constitucional: razones para una ley contravencional como alternativa a la Ley de Vagos y Maleantes"; Relación Criminológica, n 1, 1992, pp 21.25. Ibídem, pp 25. SANTOS, Thamara. "La Ley de Vagos y Maleantes. Resultados de su desaplicación en la ciudad de Maracaibo". Capítulo Criminológico 24-1, Año 1996, pp 4. HERNANDEZ, Tosca. La ldeologización del Delito de la Pena. EDICS. de la U.C.V. Caracas, 1977. Impacto de la desaplicación de la ley sobre vagos y maleantes y la aplicación del código de policía del Estado Zulia 6. 7. 8. 9. 10. 11. 12. 13. 14. 15. 16. 17. 18. 19. 89 ZAFFARONI, Eugenio. "Derechos Humanos y Sistemas Penales en América Latina"; Instituto Interamericano de Derechos Humanos. Depalma, 1987. GABALDON, Luis. "Policía, incertidumbre y violencia en América Latina: Una alternativa al modelo del Estado autoritario". Derecho Penal y Criminología, Vol. XV, No. 51, sept-dic. 1993, pp 200,204. lbidem, pp 204. TOCORA, Fernando. "Política Criminal en América Latina". Ediciones Librería del Profesional, Bogotá, 1990, pp 18. lbidem pp 38. ANTONY, Carmen. "Derechos Humanos y Mujer (Observaciones sobre su Victimización)", Capítulo Criminológico, No. 18-19, 1990-1991, pp 206. PARRAGA, Marise1a. "Violencia Doméstica: Maltrato Marital", Revista de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas, Universidad del Zulia. No. 71, Enero-Diciembre, 1994, pp 58. GABALDON, Luis. 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