Equipo de Polo de Desarrollo – Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 5 TRABAJO DE INVESTIGACIÓN - POLO DE DESARROLLO LAS TIC Y SU IMPACTO EN LA FORMACIÓN DOCENTE ABSTRACT: Este trabajo presenta los resultados de un proyecto de investigación sobre la gestión de los recursos tecnológicos, llevado a cabo en el ISFDyT Nº5 en la Institución por el equipo de Polos de Desarrollo en el año 2008. A partir de los aportes de conceptos provenientes del campo de la Tecnología Educativa se analizaron las representaciones que tanto alumnos, docentes y directivos tienen sobre la incorporación de las TIC en la formación docente, para tratar de ofrecer algunas respuestas prácticas a los crecientes desafíos que presenta el uso de las nuevas tecnologías en la formación docente. En este sentido se indagaron las orientaciones asumidas por dichos actores frente a los cambios curriculares y los efectos que produce incorporar en el proceso de enseñanzaaprendizaje las nuevas herramientas. Prof. Alejandra Foschia Lic. María del Huerto Revaz Lic. Ana Testatonda Lic. Lidia Valentini Equipo de Polo de Desarrollo – Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 5 FUNDAMENTACIÓN “En el pasado, el intervalo entre cambios era mucho mayor que la vida humana.......Hoy es al contrario y, por lo tanto, nuestra formación debe prepararnos para una continua novedad de condiciones de vida”. (N. W. Alfred) Actualmente las instituciones de formación docente se enfrentan al desafío de capacitar a la nueva generación de docentes para incorporar en su formación las nuevas herramientas de aprendizaje. Esta titánica tarea supone la adquisición de nuevos recursos y habilidades, y una cuidadosa planificación de la gestión de dichos recursos. En tal sentido, consideramos a la Tecnología Educativa como el cuerpo de conocimientos que, basándose en disciplinas científicas referidas a la práctica de enseñanza, incorpora todos los medios a su alcance y responde a la consecución de fines en los contextos socio históricos que le otorguen significado (Litwin, 1993). La entendemos también como un proceso complejo e integrado que implica a personas, procedimientos, ideas, artefactos y organizaciones con el fin de analizar las necesidades educativas y formativas de los individuos y de los grupos, y diseñar, poner en práctica y evaluar propuestas para responder a estas necesidades y uso de los recursos y procesos de aprendizaje, entendidos como: materiales, artefactos, métodos, técnicas, lenguajes, sistemas organizativos y personas. (Sancho, Juana María, 2000). Muchas veces la Tecnología aparece, en la escena educativa, como algo imprescindible y temible a la vez. "Hay que" enseñar informática, "hay que" poner videos aunque no siempre se sepa para qué, "hay que" dinamizar las clases para que los alumnos se interesen por los temas”, etc. Estas y otras frases nos llevan a cuestionar: ¿Cuál es el impacto de las tecnologías (de la información, de la comunicación y otras) en los procesos de enseñanza y de aprendizaje? ¿Cuáles son los entramados entre la producción, la tecnología educativa y su inserción en un proyecto pedagógico-institucional?. Es preciso, entonces, que la institución en su conjunto interprete esta situación, brindando a sus alumnos la posibilidad de adquirir y desarrollar competencias acordes al mundo social actual en el que van incluyéndose entornos tecnológicos avanzados, de manera tal que les Equipo de Polo de Desarrollo – Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 5 permita desenvolverse cotidianamente e incorporarse gradualmente en distintos ámbitos culturales. En este proceso de cercanía competente a las tecnologías, la importancia del docente como gestor de la innovación en la escuela, se presenta decisiva, constituyéndose en el motor fundamental del proceso de integración de los recursos tecnológicos, en especial de las TIC. Por lo tanto los propósitos de esta investigación fueron: Analizar la incorporación de las TIC desde las preocupaciones pedagógico-didácticas y ético-filosóficas como crítica y superación de la impronta tecnicista. Comprender e interpretar la realidad educativa de la institución: Alumnos, docentes, directivos, desarrollando la autorreflexión en los procesos de conocimiento mediados por los recursos tecnológicos. Avanzar en la construcción de conocimientos, identificando problemas que a su vez sean generadores de conocimiento y, por lo tanto, de nuevos interrogantes. La complejidad de esta tarea nos impuso un interesante desafío como equipo de trabajo porque fue necesario indagar: El impacto de la tecnología en la sociedad global y sus repercusiones en la educación. El amplio conocimiento que se ha generado acerca de la forma en que los individuos aprenden y las consecuencias que ello tiene en la creación de entornos de aprendizaje más efectivos y atractivos, centrados en el alumno. Las distintas etapas del desarrollo docente y los grados de adopción de las TIC por parte de los profesores. La importancia del contexto, la cultura, la visión y liderazgo, el aprendizaje permanente y los procesos de cambio al momento de planificar la integración de las tecnologías a la formación docente. Las habilidades en el manejo de las TIC que los docentes deben adquirir tanto en lo que refiere al contenido como a la pedagogía, los aspectos técnicos y sociales, el trabajo conjunto y el trabajo en red. La importancia de desarrollar estándares que sirvan como guía para la implementación de las TIC en la formación docente. Es necesario advertir que solo con la elaboración de nuevos materiales y estrategias docentes no es suficiente. Para que la educación pueda explotar al máximo los beneficios de las TIC en el proceso de enseñanza y de aprendizaje, es esencial que tanto los futuros Equipo de Polo de Desarrollo – Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 5 docentes como los docentes en actividad sepan utilizar estas herramientas. En este sentido las instituciones y los programas de formación deben liderar y servir como modelo basándose en los principios psicopedagógicos de construcción del conocimiento y en las actuaciones docentes que faciliten la creación de una nueva cultura metodológica entre los docentes. Dar forma y difusión a tales prácticas representa motivar al profesorado al tiempo que ponen el material a disposición de otros educadores e instituciones preocupadas por adecuar la enseñanza a los nuevos tiempos. Cada vez más la formación para el cambio es aquella que está contextualizada en el lugar de trabajo, motivada por los propios problemas y alentada por la acción conjunta y colaborativa del cuerpo docente, buscando un efecto de cascada que impacte en los diferentes niveles educativos. Es fundamental al abordar esta temática pensar en la integración de tres procesos pedagógicos vinculados al cambio: la formación del profesorado, la innovación educativa y la investigación de la propia metodología.1 La formación se orienta al desarrollo profesional del docente. Formar es ayudar a tomar conciencia de las propias actuaciones y el cómo mejorarlas. Por tanto la formación docente no se limita sólo a la apropiación de los conocimientos, sino que debe generar, actitudes y valores coherentes con las nuevas demandas, es decir, desarrollar nuevas habilidades y destrezas para la enseñanza, incorporar hábitos que puedan ser transmitidos a los alumnos.2 Por otro lado, la investigación como proceso de adquisición de conocimientos para mejorar la práctica, no es el mero saber, o el saber “sobre”, sino el saber para, es decir, investigar el propio proceso de innovación metodológica. Lo que el profesorado haga cada día de su vida profesional para afrontar los problemas de tener que enseñar a un grupo de estudiantes unos determinados contenidos, durante cierto tiempo, con el fin de alcanzar una meta, es conocimiento en acción, es tecnología. (Sancho, Joana. 1994. Para una tecnología Educativa. Horsori. Barcelona) 1 Esta propuesta está basada en el Proyecto Internacional denominado EDIFID (Estrategias Didácticas Innovadoras para Formación e Innovación Docente), coordinado por Saturnino de la Torre, catedrático de Didáctica e Innovación en la Universidad de Barcelona. 2 De la Torre, Saturnino y otros. Estrategias Didácticas Innovadoras. Recursos para la Formación y el Cambio. Octaedro Ediciones. Barcelona, 2000. Equipo de Polo de Desarrollo – Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 5 CONCEPTUALIZACIONES: ANÁLISIS CUANTITATIVO Y CUALITATIVO Con la metodología cualitativa tratamos de identificar la naturaleza profunda de las realidades, su sistema de relaciones, su estructura dinámica. Lo cuantitativo se orientó a determinar la fuerza de asociación o correlación entre variables, la generalización y objetivación de los resultados a través de una muestra para hacer inferencia a una población de la cual toda muestra procede. INFORME DE RESULTADOS El presente informe se elaboró a partir del trabajo de campo realizado en el ISFDyT Nº 5 de la ciudad de Pergamino. Dado el carácter exploratorio del mismo, se ha privilegiado la comprensión antes que los fines cuantitativos, a los efectos de no predicar tendencias en el universo encuestado. Los instrumentos aplicados fueron encuestas (cuestionario escrito) estaba destinadas a 69 docentes y 1 directivo y 269 alumnos (muestreo estratificado). ENCUESTA A DOCENTES (ANÁLISIS CUALITATIVO) 1. TITULACION La institución como contexto organizativo afecta y se ve afectado por los cambios que le suceden al docente a lo largo del tiempo. Las historias personales de la experiencia proporcionan el marco biográfico que hace inteligible su desarrollo profesional. Dentro de los factores que influyen en ese desarrollo y siguiendo a Fernández Cruz, se pueden citar: la edad, la experiencia, los eventos privados y los eventos profesionales. Si bien la mayoría de los profesores encuestados han realizado una postitulación (Licenciaturas, postítulos, capacitación docente en el caso de los profesionales) cabe preguntarse ¿ Por qué se convierte en un usuario del conocimiento y no en un productor del mismo?. ¿ Será en tal sentido que la pasión por lo metodológico contribuye a la generación de profesores más preocupados por el control del aula que por el aprendizaje en sí?. Creemos que ello tiene que ver con el conocimiento profesional, que hoy en día hace que la función docente sea más compleja por las propias características de la actuación que ha de realizar en contextos peculiares e ideosincráticos. Actualmente la tendencia predominante de Equipo de Polo de Desarrollo – Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 5 la formación permanente se suscribe en un marco de actualización de los conocimientos como consecuencia de los rápidos y permanentes cambios y avance de la tecnología y de las ciencias. Sin embargo, "el desarrollo profesional, en cualquier ámbito, representa un proceso de formación continua y la oportunidad para reconstruir los saberes específicos, mejorar las prácticas y fortalecer las condiciones del ejercicio profesional" (Prieto, 2001). En este sentido, al decir de Imbernon (1994) “la función docente ha de superar, con la creación del conocimiento pedagógico, esa práctica encorsetada y asumir su verdadero protagonismo en los procesos de profesionalización”. 2. ANTIGÜEDAD EN LA DOCENCIA A continuación se analizarán los datos desde el modelo de los ciclos vitales propuestos por Susana Huberman. 3 Asumida la realidad diferencial en la vida del docente, producto de la interacción, es preciso centrar el análisis en la antigüedad docente más que en la edad. En la población consultada se evidencia una clara mayoría de docentes que tienen entre 11 y más de 21 años de antigüedad en la docencia. Esto supone, según los ciclos establecidos por Huberman, que se podrían encontrar recorridos profesionales diferentes. Por un lado, aquellos que se preocupan básicamente por la mejora de su tarea, diversificando estrategias, generando nuevas prácticas y experimentando la actualización científico-técnica. Otro grupo puede encontrarse abriéndose a la gestión como vía de promoción, descubriendo nuevos cargos, asumiendo compromisos y responsabilidades con el contexto de la institución como vía del desarrollo profesional. Por último, se encontrarían aquellos en los que puede estar decayendo la entrega inicial, o se cansan por la rutina, de manera que reducen los compromisos profesionales motivados por cierta crisis profesional como consecuencia de su insatisfacción vital, cayendo incluso en el abandono de su carrera. De todas maneras es la etapa de experimentación de nuevos horizontes en cualquiera de las direcciones apuntadas. En la otra franja correspondiente a mas de 21 años en la docencia (1 solo docente con 50 años de antigüedad y 5 docentes con más de 35 años) se podría visualizar al menos tres tipos de comportamiento: aquellos que abordan su profesión de manera positiva, incrementando su interés por el aprendizaje de los alumnos y trabajando con sus colegas en el mismo 3 Becaria del Ministerio de Educación y Ciencia de España (1987). Directora y fundadora del Caep-Centro Argentino de Educación Superior y Permanente-(desde 1989). Miembro de la comisión de Calidad de la Educación del IRAM (desde 2007). Equipo de Polo de Desarrollo – Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 5 sentido. Otros adoptan una postura defensiva, teniendo menor optimismo. Y por último, aquellos desencantados respecto de su experiencia pasada, manifestando cansancio y pocas ganas de activación. La institución que queremos ha de poseer ciertas cualidades en relación al trabajo cooperativo. En tal sentido habría que fomentar: el espíritu de colaboración y el trabajo en equipo, el intercambio de conocimientos y experiencias innovadoras, la disposición a compartir proyectos de investigación, contribuir a la creación de una institución que aprende y considerarla, no únicamente como el lugar de trabajo, sino como un espacio que nos es propio y que hay que cuidar a partir de las relaciones. 3. ANTIGÜEDAD EN LA RAMA Aquí consideramos un conjunto de problemáticas y concepciones que, si bien son claramente diferentes, operan como un todo en el marco del trabajo educativo: criterios pedagógicos, supuestos y prejuicios de la formación profesional específica, valores e ideas personales asentados en una determinada matriz socio-cultural, problemáticas derivadas del funcionamiento de la organización institucional en sí misma. Y todas, en medio de la actividad docente propiamente dicha y con el alumno-joven y adulto como sujeto del aprendizaje. El docente que ejerce en el Nivel Superior es un profesional comprometido con los valores sociales de su país y de su comunidad. Sin embargo en la práctica, muchas veces, la educación se reduce a aquella que tenemos al alcance de nuestra conciencia: formar docentes y técnicos. Por ello una preocupación central de este Nivel (dado que la mayoría de los docentes encuestados tiene una antigüedad superior a los 11 años) gira en torno a repensar qué profesional es el que tenemos que formar para la cambiante sociedad del siglo XXI. 4. MODOS DE ENSEÑANZA De los datos recogidos en ese punto, creemos que el más significativo es el que corresponde a la cantidad de docentes que dicen utilizar la investigación como modo de enseñanza (54%). Esta realidad nos conduce a reflexionar acerca de la representación de la investigación en el imaginario docente, sobre todo si se tiene en cuenta los índices de producción de conocimientos que revela la encuesta: ¿ Cómo interpreta el docente la investigación?¿Se trata de una práctica capaz de producir nuevos conocimientos o simplemente de estrategias de revisión bibliográfica o reproducción de información?. Equipo de Polo de Desarrollo – Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 5 Históricamente, formación y desarrollo profesional habían sido tratados de manera aislada, no como conceptos antinómicos, sino como dos caras de la misma moneda. Una comprendía la cultura que se debía desarrollar y otra la técnica o competencia que debía aplicarse (Núñez, 2002). Esta concepción es coherente con el concepto técnico, la estrategia, la búsqueda de resultados, la adecuación de medios a los fines, que han predominado en los procesos formativos. 5. RECURSOS TECNOLÓGICOS Un alto porcentaje de los docentes encuestados define los recursos tecnológicos desde un modelo de racionalidad instrumental, que instala una clara inversión de medios y fines. De esta forma la tecnología deja de ser un medio para la enseñanza y, como consecuencia, su impacto sobre los proyectos curriculares es nulo. Esta definición se cruza a su vez, con una determinada manera de entender el rol docente con relación a los recursos: se trata de un profesional que se limita a facilitar o usar artefactos en gran parte disociados con el proceso de enseñanza y aprendizaje. Otro porcentaje de docentes ( 30%) entiende los recursos tecnológicos como medios con fines educativos. Esta concepción conlleva la atención sobre los modelos pedagógicos que sugiere el material presentado, los contenidos curriculares a seleccionar, su presentación y secuenciación, las estrategias didácticas que se modelan y el modelo de profesionalidad subyacente. ¿De qué modo usamos las capacidades de los medios para influir en el aprendizaje de los alumnos?, ¿cómo convertimos un medio de enseñanza en un recurso para un aprendizaje significactivo?. A) USO CONOCEN, MANEJAN, UTILIZAN: 27 DOCENTES CONOCEN, PERO NO USAN: 8 DOCENTES Una forma ingenua de entender la tecnología sería considerarla meramente como cuestión de herramientas (equipos) y aptitudes y conocimientos (programas). Claro que estos componentes son importantes, pero constituyen la superficie de la tecnología, como la punta visible del iceberg. La tecnología también comprende una estructura conexa, e incluso una estructura profunda. Los conocimientos en que se basa constituyen una determinada estructura cognoscitiva, un marco mental, una cosmología social que actúa como un terreno Equipo de Polo de Desarrollo – Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 5 fértil en el que pueden plantarse las semillas de determinados tipos de conocimientos para que crezcan y generen nuevos conocimientos. Para utilizar las herramientas hace falta una cierta estructura del comportamiento. Las herramientas no funcionan en el vacío, las hace el hombre y las utiliza el hombre y para que puedan funcionar requieren determinadas circunstancias sociales. Incluso una tecnología de la producción totalmente automatizada implica una estructura cognoscitiva y del comportamiento, es decir de distanciación del proceso de producción. Por lo general se tiene muy poca conciencia de estas estructuras que acompañan a las tecnologías.[.....] hay tendencia a reducir las tecnologías a técnicas. En los docentes encuestados hay un claro indicio de esta afirmación. El mismo modelo de racionalidad instrumental que aparece en las definiciones de los recursos y su relación con el rol docente, se hace presente en este item. Por un lado se manifiesta una interpretación de las tecnologías anclada en la década de los 60 y 70 y, por otro lado, cruzando los datos con los correspondientes a otros items podríamos inferir que: la utilización y manejo de las tecnologías no surten los efectos esperados al momento de captar el interés de los alumnos y promover procesos de comprensión genuinos. Quedan en un nivel descriptivo desconociendo la existencia de otros niveles y estrategias cognitivas y metacognitivas. B) CAPACITACIONES REALIZADAS HICIERON CAPACITACION: 21 DOCENTES (Manejo de los programas básicos, 1 solo profesor realizó TRADOS, 1 COREL). NO HICIERON CAPACITACIONES: 14 DOCENTES C) APLICACIÓN EN SU PRÁCTICA DOCENTE Al analizar ambos ítem que tienen una importante relación, se evidencia que si bien la mayoría reconoce la importancia de la capacitación en el manejo de las TIC, las mismas no se ven reflejadas en su práctica áulica. Equipo de Polo de Desarrollo – Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 5 Esta conclusión se podría relacionar con el concepto de profesionalidad restringida y profesionalidad desarrollada, propuesto por Hoyle4 (1984). Con respecto a la primera, que está muy entroncada con la línea positivista, el profesor se considera un profesional técnico-experto que legitima el servicio social, como un transmisor de conocimientos y valores sociales tradicionales a las nuevas generaciones dentro de una racionalidad técnica. El miedo a no poder dominar la tecnología paraliza y solo se piensa en hacer el ridículo frente a los alumnos. La propuesta para transformar esta actitud es pensar en una profesionalidad desarrollada, es decir, donde el cambio social sea visto como algo dinámico e impredecible, propio de las sociedades modernas, donde los problemas no tienen definiciones estables, y las explicaciones y comprensiones son negociables mediante el dialogo y la reflexión compartida. Aquí se podría hacer esta pregunta ¿En qué sentido el conocimiento profesional que la mayoría de los docentes posee, ya sea por capacitaciones o postitulación se origina y transforma la propia práctica profesional? 6. INTERNET Un aspecto interesante a destacar es que la mayoría de los docentes encuestados manejan Internet. Pero la pregunta es ¿ Qué servicios puede utilizar un docente en Internet?. Teóricamente todos ( el correo electrónico, la participación en listas y el acceso a páginas Web). Sin embargo el docente es un profesional acostumbrado a “saber”, a ocupar el rol de ser “el que sabe”. En este sentido utilizar la computadora le presenta un desafío conflictivo. Incluirla en las clases significa encontrarse con un conjunto de conocimientos técnicos en los que ser “el experto” resulta una misión imposible. Otra cuestión para pensar (ya que la mayoría de los encuestados dice manejar Internet) es conocer en qué puede enriquecer esta herramienta a su propia clase. Una posibilidad es la evaluación crítica de ese medio y aquí aparecen algunos elementos a tener en cuenta: Solicitar a docentes del área de informática que oficien de coordinadores o asistentes para decodificar los términos técnicos que obstaculizan la enseñanza. 4 HOYLE, E. 1974. “Professionality, professionalism and control in teaching”, London. Educational Review, 3. Equipo de Polo de Desarrollo – Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 5 Coordinar junto al docente la búsqueda de páginas Web y así armar un archivo con direcciones de Internet. Evaluar junto a otros docentes la manera de optimizar el uso de Internet dentro del ámbito escolar. ENCUESTA A LOS ALUMNOS (ANÁLISIS CUALITATIVO) Los alumnos encuestados del Instituto Superior de Formación docente y Técnica Nº 5 creen que la formación brindada por el mismo los prepara para su desempeño laboral (casi 70%), sólo un porcentaje reducido cree que no. Con respecto a la pregunta sobre el tipo de clases a las que asisten la mayoría de los alumnos coincide en expresar que son de tipo expositivo y dialogadas. Respecto de las estrategias de investigación y resolución de problemas los alumnos afirman que el porcentaje de las mismas es reducido. Este dato difiere considerablemente con los resultados de las encuestas a docentes, ya que estos afirman que se desarrollan tareas de investigación en un 56 %. Si se cruzan los datos correspondientes a las modalidades de investigación de problemas en los docentes y alumnos, la diferencia es en el porcentaje muy significativa (71 %) Esta información permite instalar algunas cuestiones como: 1. ¿Cómo se representan los conceptos de investigación y de resolución de problemas entre docentes y alumnos? 2. ¿Cual es la incidencia en la producción de conocimientos y de las habilidades para la resolución de problemas en la cultura institucional y en los distintos espacios curriculares? Respecto al uso que los docentes hacen en sus clases de los recursos tecnológicos, el reconocimiento de los mismos en la formación docente, y las distintas posturas de los profesores frente a las TIC, podemos expresar que se inscriben en un el paradigma de la racionalidad instrumental ya que tras invertir medios y fines no tienen un impacto en las prácticas pedagógicas, ni promueven proceso de comprensión genuina en los alumnos. Por otro lado, los alumnos ponen en evidencia la disociación a la que conduce esta racionalidad instrumental, ya que sólo el 5 % e los docentes utilizan las TIC en sus clases, cuando, sin embargo, el 95 % de los docentes permiten su uso y lo fomentan pero no lo incorporan en su práctica pedagógica. Equipo de Polo de Desarrollo – Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 5 CONSIDERACIONES FINALES ⇒ En general, se deben reconocer niveles de conocimiento que superen el nivel descriptivo de los temas. ⇒ Con respecto a la resolución de problemas hay que utilizar estrategias que le permitan al alumno abordar los problemas del campo disciplinario. ⇒ Proponer niveles de indagación, es decir, el estudio y la producción en un campo de conocimiento. ⇒ No hay dudas de que se aprende de manera diferente y esto transforma las relacionas entre docentes y alumnos. ⇒ Pensar que la sola incorporación de las nuevas tecnologías a la enseñanza no soluciona todos los problemas educativos pero que incorpora a nuestras prácticas, nuevos escenarios educativos, favorecedores de aprendizajes genuinos indispensables para nuestra sociedad de la información y la comunicación social. Lo anteriormente expuesto nos lleva concluir que el desarrollo profesional entendido como un proceso de formación continua se ve afectado por múltiples dificultades. Ello plantea grandes desafíos a nuestra institución, por lo que necesitamos fortalecer la profesión docente impulsando desde nuestros ámbitos de acción comunidades críticas, que generen espacios de encuentro, discusión e investigación que posibiliten confrontar alternativas de prácticas significativas que impacten en todos los actores involucrados en el proceso de enseñar y aprender. En este sentido, la centralidad de las prácticas colaborativas, son un eje fundamental pues ellas implican el reconocimiento del carácter específico de la profesión docente en la existencia de un espacio donde ésta pueda ser ejercida, como también, el protagonismo en tanto actores sociales, que " tengan poder en la toma de decisiones respecto a los asuntos que afectan su desempeño profesional. Es necesario replantearse no sólo las condiciones objetivas con las cuales se desempeñan planes, programas, recursos, infraestructura, etc., sino también, el sistema organizativo/normativo operativo, de manera que esté al servicio de lo pedagógico". Equipo de Polo de Desarrollo – Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 5 Por eso la necesidad de comprender e interpretar la realidad educativa de una manera amplia que permita efectivamente incorporar, no sólo lo que está escrito en los distintos documentos disponibles o las conclusiones de investigaciones realizadas, sino también los significados de las personas implicadas en los contextos en los cuales se vive cotidianamente. EQUIPO DE POLO DE DESARROLLO TECNOLOGIA EDUCATIVA ISFDyT Nº 5