El ININ hoy Técnicas nucleares aplicadas al estudio de piezas arqueológicas y obras de arte Por Javier M. Ortega Escalona ([email protected]) Un reactor nuclear, dos aceleradores de partículas, microscopios electrónicos y otros equipos altamente especializados son ahora instrumentos que se utilizan para el estudio de piezas arqueológicas y otras obras de arte. Desde hace poco más de una década, el Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares (ININ) creó una línea de investigación especializada en el estudio y la preservación del vasto patrimonio cultural de México. «En 1997, se creó el primer laboratorio de Arqueometría en México para analizar, procesar y tratar material arqueológico por medio de técnicas nucleares» señaló la doctora Dolores Tenorio Castilleros, investigadora del ININ, quien promovió la creación de este laboratorio y ha contribuido con una serie de trabajos a la utilización de técnicas nucleares como herramienta de la arqueología. Las técnicas nucleares ofrecen a la antropología una serie de ventajas sobre los métodos tradicionales. Por ejemplo, en las caracterizaciones de huesos, cerámicas, piedras, pigmentos y otros objetos, es decir, en el conocimiento de los elementos que componen las muestras, se da un «diálogo» entre los átomos de las piezas y de los instrumentos del ININ que permite conocerlos con extraordinaria precisión (de partes por millón). A diferencia de los métodos tradicionales que requieren de un muestras de 1 2 Contacto Nuclear un tamaño suficientemente para ser analizadas, al aplicar las técnicas nucleares, pueden utilizarse muestras muy pequeñas, incluso menores a un gramo. En otros casos, como por ejemplo con un lienzo o una obsidiana, las pruebas se practican sobre las piezas completas sin que requieran de una preparación previa ni sufran ningún deterioro. Como ocurre con otras innovaciones tecnológicas, muchos especialistas de la arqueología desconocen todavía los atributos de las pruebas y no consideran a la arqueometría por técnicas nucleares como una opción con evidentes ventajas sobre los estudios tradicionales. En otros casos, las propias instituciones encargadas del estudio y preservación del patrimonio cultural mexicano han solicitado la colaboración del ININ para determinados proyectos. Algunas de las técnicas utilizadas en el ININ para la caracterización de materiales arqueológicos son la emisión de rayos X por inducción de partículas (PIXE), el análisis por activación neutrónica (AAN), la fluorescencia de rayos X (FRX), las espectroscopia de absorción atómica, las cromatografía de gases o líquidos, la espectroscopia infrarroja, la difracción de rayos X y la microscopía electrónica de barrido, que se describirán brevemente a continuación. Para la aplicación de la técnica PIXE se requiere de un acelerador de partículas. En México existen tres de estos equipos utilizados para X Figura 1. Esquematización de técnicas analíticas en un acelerador de partículas investigación científica: uno de ellos se encuentra en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y los otros dos, en el ININ. La técnica PIXE (figura 1) consiste en hacer incidir un haz de protones -proveniente del acelerador- sobre los átomos de la muestra; esta reacción produce que los átomos de la pieza en estudio emitan las radiaciones características que sirven como una «huella digital» de los elementos que componen la muestra. Resultados similares pueden obtenerse de la fluorescencia de rayos X, donde se aplica radiación gamma a la pieza. Para el análisis por activación neutrónica se usa un reactor nuclear de investigación como fuente de neutrones. En vez de incidir sobre las capas electrónicas de los átomos (como lo hacen los protones en la técnica PIXE), los neutrones van al núcleo de los átomos de la muestra y los vuelve radiactivos; el nivel y el tipo de energía que emite la muestra, permiten identificar claramente los elementos que la componen. Otras instituciones mexicanas, regularmente efectúan sus caracterizaciones por medio de análisis químicos convencionales, lo que resulta difícil, lento y, en ocasiones, la pieza se destruye. En contraparte, con técnicas nucleares las piezas se irradian, no se destruyen y, previa preparación del experimento, en minutos pueden obtenerse resultados. La microscopía electrónica es otra de las herramientas en las que el ININ ha desarrollado una amplia experiencia. A diferencia de los microscopios ópticos tradicionales que emplean luz, en los microscopios electrónicos emiten un haz de electrones que interacciona con la muestra y se producen varios fenómenos, entre ellos: ¿ se generan electrones retrodispersados y secundarios, rebotados en la superficie de la muestra, que proporcionan información sobre ésta (microscopía electrónica de barrido); ¿ otros electrones atraviesan la muestra y ofrecen información sobre su estructura (microscopía electrónica de transmisión); ¿ los electrones denominados Auger y los rayos X característicos, proporcionan información sobre la composición química de la muestra; y ¿ los electrones absorbidos dan información sobre la conductividad de la muestra. Como en el caso de otras pruebas, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha solicitado al ININ una serie de estudios de microscopía electrónica. Esta vinculación inspiró al INAH para adquirir su propio microscopio electrónico. Las combinaciones de las técnicas nucleares X Contacto Nuclear 1 3 disponibles en el ININ han revelado datos de importante valor antropológico: por ejemplo, determinar las sustancias conservadoras que pueden aplicarse a objetos antiguos para no dañarlos; establecer la existencia rutas de intercambio comercial en el México prehispánico mediante la determinación de la región de procedencia de ciertos vestigios; o la dieta de un grupo humano a partir de los elementos encontrados en restos óseos, entre otras aportaciones. A continuación se presenta una breve retrospectiva de algunos estudios desarrollados por especialistas del ININ. Lienzo la Virgen de los Dolores: un acercamiento al multi-método La investigación de objetos antiguos únicos es una actividad ardua y que requiere de exhaustivo cuidado por parte de los expertos de la conservación. Un aspecto determinante en esta labor es saber cómo muestrear las obras, a fin de obtener información significativa y evitar daños en la pieza durante su estudio. Una forma para optimizar la información contenida en el propio objeto es el uso de varias técnicas analíticas sobre las mismas micromuestras. Un ejemplo de este multi-método es el estudio del lienzo de la Virgen de los Dolores, proveniente de una colección particular y cuyo origen histórico era incierto. Esto motivó al propietario a solicitar al ININ y a otras instituciones que se analizaran sus materiales para obtener una datación aproximada, al tiempo que se autentificaba la obra. Las técnicas que se utilizaron fueron PIXE, análisis por activación neutrónica, microscopia óptica, microscopía electrónica de barrido (MEB), espectroscopia micro-Raman y espectroscopía infrarroja con transformada de Fourier (FT-IR). Estos métodos permitieron identificar los diversos pigmentos inorgánicos (óxido de hierro, negro de carbón, blanco de plomo, azul prusiano), así como añil. Las microscopias aplicadas revelaron la capa estructural de las muestras, mientras que FT-IR permitió determinar la naturaleza del barniz usado (goma laca). A través de este conjunto de técnicas fue posible identificar los materiales en la pintura, que son indicativos del período de manufactura de las obras de arte. Datación de huesos de mamut El propósito de esta investigación, realizada con el INAH, fue datar algunos huesos de mamut encontrados en el Valle de México, por medio del método de decaimiento del uranio. Desde luego, no todas las muestras son susceptibles a datarse por este método, por lo que fue necesario aplicar técnicas analíticas previas. Para este trabajo, primeramente se determinó la concentración total de uranio en los huesos del mamut a través de espectrometría ultra violeta; luego se hizo un estudio de la conservación de estas muestras por medio de microscopía electrónica de barrido (SEM), difracción de rayos X (XRD) y PIXE. El uso complementario de esta técnicas permitió verificar el estado de la conservación del hueso, mientras que el decaimiento del uranio determinó la edad de los huesos del mamut. Estudio de materiales purépechas por las técnicas PIXE y metalográfica A solicitud de un investigador de la Escuela Nacional de Antropología e Historia, se utilizó la técnica PIXE disponible en el acelerador Tanden Van de Graaff del ININ para analizar 12 piezas de cobre encontradas entre las ofrendas de la tumba del Señor Tarasco, descubierta en el portal de Matamoros, en Uruapan, Mich., en 1957. Adicionalmente, se utilizó un microscopio metalográfico. Esta investigación contribuyó a la determinación el periodo y las técnicas de X 1 4 Contacto Nuclear manufactura de estas piezas metálicas prehispánicas. Irradiación gamma para la preservación de documentos importantes de documentos de incalculable valor histórico. En el ININ se han realizado pruebas para determinar las dosis que deben aplicarse para cada tipo de papel. Apoyo a la restauración Pruebas de microscopía electrónica han identificado la presencia de hongos en documentos antiguos, donde la humedad del medio ambiente permite su crecimiento y el consecuente daño al papel. Por medio de la irradiación gamma es posible eliminar los microorganismos y garantizar la conservación La técnica PIXE revela que Murillo utilizó obsidianas mexicanas en sus obras El ININ fue la única institución extranjera en participar en un estudio practicado a dos obras de Bartolomé Esteban Murillo: junto con el Centro de Investigación y Restauración de Museos de Francia, el Centro de Investigación en Física Aplicada a la Arqueología, el Museo Nacional de Historia Natural y el Museo de Louvre (todas ellas organizaciones francesas), se investigaron La agonía en el jardín y San Pedro penitente arrodillado ante Cristo y la columna. Por medio de la técnica PIXE, se analizaron para identificar la naturaleza de un material poco utilizado, usado como fondo en estas obras. Originalmente se consideraba que el pigmento estaba compuesto por mármol negro; ahora se sabe que se trata de obsidiana con una composición idéntica en ambas obras. Esta composición se comparó con la de seis obsidianas de las denominadas «espejos ahumados», provenientes de los museos de Historia Natural y del Hombre, ambos en París, con muestras geológicas de cinco yacimientos mexicanos. Las trazas de obsidianas de Murillo de manganeso, zirconio, estroncio, yodo, rubidio, niobio y zinc eran muy similares a las de cuatro de los espejos ahumados y a las de otras obsidianas procedentes del yacimiento de Ucareo-Zinapécuaro Al interpretar los procesos físico químicos, microestructurales y características de los materiales constitutivos de piezas antiguas se ofrecen bases a restauradores y arqueólogos para tomar decisiones apropiadas. (Michoacán), un importante sitio de extracción en la época prehispánica. En la literatura sobre el tema, no se encontraron datos de obsidianas similares en otras regiones de Mesoamérica, o bien, en los yacimientos del Mediterráneo. La participación del ININ consistió en proveer de datos sobre la composición química elemental (obtenida por la técnica PIXE) de muestras de los yacimientos de obsidianas más utilizados en la época prehispánica, así como de muestras físicas. El estudio determinó que aunque Murillo vivió en Sevilla, ocasionalmente empleó en sus pinturas materiales provenientes del Nuevo Mundo. La agonía en el jardín en la línea PIXE X Contacto Nuclear 1 5 Este es el caso delestudio denominado Análisis por espectroscopía Raman de materiales. El propósito de este trabajo fue mejorar las técnicas de restauración a fin de que no se emplearan materiales ajenos que pudieran dañar las piezas. Para esto fue necesario caracterizar, por una parte, materiales utilizados por artistas prehispánicos en la elaboración de pinturas, utensilios y otros objetos ornamentales, y por otra, las materias primas que aplican los restauradores actuales. Existen pocos estudios sobre este tema y la mayoría de los datos que se conocen en la actualidad se basan en fuentes documentales, más que en estudios científicos. Para este trabajo, investigadores del ININ hicieron un profuso estudio bibliográfico sobre sustancias orgánicas, como pegamientos y pigmentos que se utilizaban en la época prehispánica, para después conseguir físicamente las sustancias en algunos expendios de la Ciudad de México y del sureste de la República, además de obtener otros materiales de uso regional y general en la práctica de la conservación. La labor no resultó fácil, pues obviamente las materias primas han cambiado su nombre con el paso del tiempo. Después de hallar las materias primas, se prepararon muestras en el ININ y se enviaron al departamento de Química Analítica de la Universidad de Gante en Bélgica, donde se elaboraron espectros Raman1. Los resultados (en La espectroscopía Raman es una técnica fotónica de alta resolución que proporciona en pocos segundos información química y estructural de casi cualquier material o compuesto orgánico o inorgánico, lo que permite su identificación. El análisis con esta técnica se basa en el examen de la luz dispersada por un material al incidir sobre él un haz de luz monocromático. Una pequeña porción de la luz se dispersa inelásticamente experimentando ligeros cambios de frecuencia que son característicos del material analizado, e independ ientes de la frecuencia de la luz incidente. 1 Aje gum o Axin. es aceite de insectos. Estos viven en la corteza de los árboles «jatropha curcas» (coquillo, coquito, cotoncillo). La goma gutta es laca orgánica que da colores amarillos poco permanentes, por lo que se sustituye por la aureolita 2 1 6 Contacto Nuclear cuya interpretación también participaron especialistas del ININ) demostraron la existencia de materias primas como aceites de chía y linaza, cera de Campeche y de abeja, copal blanco, resinas mastique, chapopote, gomas de aje2. Restauración del códice Techialoyan Para la restauración del Códice Techialoyan, proveniente de la población de San Pedro Totoltepec, Estado de México, así como de otras piezas, el ININ colaboró con el Instituto Mexiquense de Cultura (IMC), por medio de técnicas analíticas nucleares como PIXE y AAN y otras aportaciones en ciencia de materiales, microscopía electrónica y física computacional. Por medio de la colaboración interinstitucional, se estudiaron piezas del patrimonio cultural del IMC, como las pinturas rupestres de Ixtapantongo y de la cueva del Venado (en Acambay), y los diablitos de Malinalco. El deteriorado estado de conservación de algunas de estas piezas y aún de otras en buenas condiciones, han hecho necesaria la utilización de técnicas analíticas especializadas, nucleares y no nucleares. Procedencia y uso de los raspadores de obsidianas prehispánicas de Metztitlán, Hidalgo En este trabajo colaboraron el INAH, el Instituto de Investigaciones Antropológicas (IIA-UNAM) y el ININ. La investigación se hizo sobre los raspadores arqueológicos de obsidiana encontrados en el área de Metztitlán, Hidalgo. El ININ contribuyó con dos técnicas analíticas: la procedencia de la materia prima fue determinada por medio de análisis por activación neutrónica. En forma complementaria se utilizó microscopía electrónica para identificar el uso de las herramientas prehispánicas. En esta forma, se infiere que los raspadores de Metztitlán hechos de obsidianas de Zacualtipan, Hidalgo, fueron utilizados para la extracción del jugo del agave en el periodo postclásico tardío. L