cultivo del trigo sobre terreno corrugado

CULTIVO DEL
TRIGO SOBRE
TERRENO CORRUGADO
• UN MEDIO DE CONTRARRESTAR EL EXCESO DE HUMEDAD
El ías Letelier A.
Ingeniero Agrónomo
Claudio Ubilla R,
Técnico Agrfco/a
El cultivo sobre camellones o platabandas se ha
recomendado tradicionalmente en aquellos
terrenos en los que el problema de mal drenaje
no tiene una solución económica en lo que se
refiere a avenamiento* o en aquellos en los que
hay un exceso de lluvia durante algún período
del desarrollo de un cultivo.
Al respecto, dice don Roberto Opazo: "Este
sistema de cultivo en caballete puede adoptarse
en los suelos de poco espesor, en los húmedos,
impermeables o bien, cuando se requiere efectuar cultivos delicados durante el invierno y
por consiguiente se requiere que no sufran de
exceso de humedad en el suelo"! 11. Sin embargo, el uso de este sistema en el cultivo del trigo
es prácticamente nulo.
Las terrazas marinas de las V y VI Regiones
tienen suelos de textura arcillosa, pero de
buena permeabilidad. Después de las lluvias, los
apozamientos son escasos y pequeños, correspondiendo solamente a irregularidades del re1ieve o a zonas en que el excesivo tráfico de
veh (culos o maquinaria ha producido una disminución de la macro-porosidad del suelo
superficial.
*Avenamiento: drenaje.
(1) Agricultura, 1 Parte. Ministerio de Agricultura,
Santiago, 1926.
!PA La Platina Nº 28, 1985
La elevada cantidad de lluvia que cae en
invierno en las terrazas marinas de las V y VI
Regiones induce a preguntarse si -no obstante
esta buena permeabilidad- el cultivo del trigo
sufre de exceso de humedad en el período del
macollaje, ya que las lluvias prolongadas sobresaturan el suelo durante varias horas, aunque
éste tenga una buena permeabilidad, y es conocido el hecho de que algunos cultivos son muy
afectados por un período breve de inundación.
Una manera de disminuir los efectos de la falta
de aireación durante el lapso de anegamiento
consiste en sembrar sobre platabandas o came1Iones. Por su mayor altura, el suelo que forma
estas estructuras dispone de un mayor espacio
poroso no saturado de agua durante el período
que dure la lluvia y alcanza su capacidad de
campo antes que el suelo que está a nivel
normal.
DOS AÑOS DE INVESTIGACION
Para comprobar esta hipótesis se efectuaron en
la Subestación Experimental H idango dos experimentos, ·uno en 1983 y el otro en 1984, en
los que se comparó una siembra normal con
otras en las que el trigo se desarrolló en la parte
alta de camellones o platabandas.
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El suelo en que se efectuó el ensayo en 1983 es
franco arenoso frno en su capa superficial (O a
18 cm) y arcilloso en profundidad; su macro·
porosidad es elevada (25 a 35 por ciento) hasta'
un metro de profundidad; no se observó apozamientos durante el periodo invernal.
El suelo del ensayo 1984, de posición más baja
que el anterior, es franco arcillo limoso en superficie, tornándose en arcilla plástica bajo los
30 cm. La macroporosidad es satisfactoria (22
por ciento) sólo hasta los 40 cm. Más abajo
disminuye notablemente, siendo menor a 2 por
ciento bajo los 60 cm. No obstante estas caracterr'sticas desfavorables, el suelo no permaneció
inundado después de las lluvias, con excepción
de algunas manchas de pequeña extensión. En
estos manchones el trigo se veía muy clorótico
durante el macollaje.
En el Cuadro 1 se comparan las lluvias en
ambos años durante el perr'odo de desarrollo
del cultivo.
Puede observarse que tanto las condiciones de
suelo como las climáticas, señalan un mayor
peligro de efectos dañinos por exceso de agua
en 1984 que en 1983.
Sembrar en la parte alta de los camellones presenta un problema práctico ya que no existen
en el comercio sembradoras para efectuar este
trabajo.
COMO SOLUCIONAR EL PROBLEMA
Sobre el terreno preparado para la siembra, se
sembró y se aplicó el fertilizante a voleo. En
seguida se pasó el corrugador, el cual dejó la
semilla y el fertilizante en la parte superior del
camellón, como lo indica la Figura 1. La siembra queda en franjas sobre los camellones, sin
necesidad de utilizar ninguna máquina especializada.
Las corrugadoras pueden ser del tipo indicado
en la Figura 2 que es el que se utilizó para el
tratamiento Nº 3 del ensayo realizado en 1984
(13 cm de altura).
Pueden ser también cultivadores con las gualetas situadas a la distancia conveniente. Si las
gualetas del cultivador son muy pequeñas para
formar un camellón de la altura requerida, se
forran con arpillera. Esto es lo que se hizo para
obtener los camellones de los tratamientos
Nº 2 en ambos ensayos ( 1O cm de altura).
RESULTADOS
En los Cuadros 2 y 3 se indican las características de los diferentes tratamientos que se probaron y los rendimientos obtenidos.
En 1983 no hubo diferencias de rendimiento
entre el tratamiento corrugado y el normal. El
tratamiento en platabandas rindió significativa-
CUADRO 1. Precipitación mensual y total para los años 1983 y 1984 en
las terrazas marinas de la V y VI Regiones (mm)
Año
1983
1984
Abril
4
34
Mayo
Junio
Julio
Agosto
75
212
173
222
519
134
53
175
Septiembre Octubre
37
119
5
76
Total
689
1.149
Figura 1. El corrugador deja las semillas que previamente han sido sembradas a voleo, en franjas sobre el camellón.
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IPA La Platina Nº 28, 1985
Figura 2. Corrugador que forma
camellones de 13 cm de altura.
mente menos, pero esta diferencia se debe a
que -para confeccionar las platabandas- es
necesario perder un tercio de la superficie total
de siembra. Puede decirse, por tanto, que en
1983 la corrugación no produjo efecto sobre
los rendimientos.
En 1984, en cambio, las corrugaciones de mayor altura (tratamientos 2 y 3) tuvieron un
rendimiento muy superior (10 qqm/ha) sobre
la siembra normal y sobre el corrugado de baja
altura; en realidad, este corrugado bajo tendió
a desaparecer en el curso del experimento debido al impacto de la lluvia.
CUADRO 2. Ensayo de
corrugación en trigo 1983, variedad
Andifén, fecha de siembra: 21 de
abril. Subestación Experimental
Hidango. Secano costero VI Región.
Tratamientos
1. Platabandas
2. Corrugado
3. Siembra normal
CUADRO 3. Ensayo de
corrugación en trigo 1984, variedad
Andifén, fecha de siembra: 26 de
abril. Subestación Experimental
Hidango. Secano costero VI Región.
Tratamientos
1.
2.
3.
4.
Corrugado
Corrugado
Corrugado
Siembra normal
Los resultados de ambos ensayos están de
acuerdo con los antecedentes de clima y suelo
de los dos años en que se efectuaron los experimentos e indican que la práctica de la corrugación puede ser interesante para el cultivo del
trigo en· Chile, en una serie de condiciones en
las que dominan los inviernos lluviosos y el
suelo ofrece alguna dificultad para la evacuación inmediata del agua de lluvia, sin llegar a
ser suel'os de mal drenaje. Tal serla el caso de
las terrazas marinas de la V Región hacia el sur,
de los grumosoles situados en el llano central
al sur del r(o Maipo y de algunos suelos rojos y
granlticos situados al sur de la VI 1 Región.
Altura del
Ancho del
camellón o
camellón o
Rendimientos
platabanda
platabanda
qqm/ha
17 cm
220 cm
10 cm
40 cm
32,4
42.8
44,9
Altura del
camellón o
platabanda
3,5 cm
10
13
cm
cm
Ancho del
camellón o
Rendimientos
platabanda
qqm/ha
12 cm
40.cm
30cm
50,2
60,2
61,3
50,7
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IPA La Platina Nº 28, 1985
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