A C U E R D O En la ciudad de La Plata, a 6 de marzo de 2013, habiéndose establecido, de conformidad con lo dispuesto en el Acuerdo 2078, que deberá observarse el siguiente orden de votación: doctores Soria, Hitters, Genoud, Kogan, se reúnen los señores jueces de la Suprema Corte de sentencia Mariano Justicia en definitiva P.I. acuerdo en contra la ordinario causa Procesadora L. para pronunciar 115.653, Integral "Torres, Argentina S.A. Despido". A N T E C E D E N T E S El Tribunal del Trabajo Nº 1 del Departamento Judicial San Isidro, con asiento en dicha ciudad, admitió la excepción de incompetencia opuesta por la accionada y dispuso el archivo de las actuaciones, con costas a la parte actora (fs. 90/92). Esta última dedujo recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley (fs. 96/101), el que fue concedido por el citado tribunal a fs. 102/103. Dictada a fs. 113 la providencia de autos y hallándose la causa en estado de pronunciar sentencia, la Suprema Corte decidió plantear y votar la siguiente C U E S T I Ó N ¿Es fundado inaplicabilidad de ley? el recurso extraordinario de V O T A C I Ó N A la cuestión planteada, el señor Juez doctor Soria dijo: I. El señor Mariano Pedro Ismael Torres promovió demanda contra procura del Procesadora cobro de Integral los Argentina rubros S.A. en salariales e indemnizatorios que especificó, los últimos, originados -en sustancia- en la extinción del contrato de trabajo que alegó haber mantenido con la accionada. a. En lo que interesa, la parte actora entabló su demanda ante los tribunales del trabajo del Departamento Judicial San Isidro. Con el objeto de justificar la competencia territorial de éstos, señaló que en el marco del vínculo laboral que dijo mantener con la demandada, el trabajador siempre prestó tareas en distintos establecimientos ubicados dentro del Parque Industrial de Pilar (v. fs. 11). b. La accionada opuso excepción de incompetencia en razón del territorio en los términos del art. 31 inc. “a” de la ley 11.653, expresando que su domicilio se sitúa en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (v. fs. 27/28 vta.). En el marco de lo dispuesto en el art. 3 de la ley 11.653, respecto del lugar de celebración del contrato de trabajo, afirmó que el actor no denunció ni acreditó que hubiera sido en jurisdicción del Departamento Judicial San Isidro; en cuanto al de prestación del trabajo, sostuvo que en la demanda sólo se invocó genéricamente que el demandante había trabajado en "diferentes establecimientos ubicados dentro del Parque Industrial Pilar", sin aportar "prueba sumaria" asimismo, negó que que la diera sustento demandada a tal hubiera afirmación, participado en actividad alguna y que el accionante prestara tareas en ese lugar. Todas estas circunstancias -dijo- determinaban la competencia de la Justicia Nacional del Trabajo para entender en las presentes actuaciones. c. En oportunidad de responder el traslado previsto en el art. 29 tercer párrafo de la ley 11.653, la actora solicitó el rechazo de la excepción reafirmando que la prestación de tareas por parte del accionante en la localidad de Pilar justificaba la competencia territorial del Tribunal del Trabajo N° 1 de San Isidro, y, con ese objeto, ofreció prueba (v. fs. 40/41). d. El órgano jurisdiccional fundamento en el art. 12 de la ley apertura a prueba" a fin de interviniente, con 11.653, ordenó "la resolver la excepción de incompetencia opuesta (v. fs. 45 y vta.). Luego de sustanciada la prueba, pasados los autos al acuerdo acogió la excepción, se declaró incompetente y dispuso el archivo de las actuaciones (arts. 3 y 31 inc. "a" de la ley 11.653; fs. 90/92). En lo esencial, señaló que del análisis de las constancias de la causa (contestación de oficio por Codecop S.R.L. a fs. 68 y declaraciones testimoniales de fs. 78/80) se advertía que "el solo hecho de haber pintado el actor un laboratorio dentro del Parque Industrial de Pilar" no justificaba la competencia de los tribunales del trabajo de San Isidro, pues tal circunstancia sólo podía gravitar en el supuesto de ausencia de un lugar principal de ejecución del contrato; de lo contrario, habría quedado abierta la posibilidad de que el accionante eligiera la jurisdicción que más le gustara para deducir su pretensión, lo que implicaría para la demandada ser desplazada de sus jueces naturales (v. fs. 91). En consecuencia, se declaró incompetente y ordenó que el trámite continuara ante la Justicia nacional de Primera Instancia del Trabajo en atención al domicilio de la parte demandada en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (v. fs. 91 vta.). II. La parte actora deduce recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley, en el que denuncia errónea interpretación del art. 3 de la ley 11.653 y vulneración de los arts. 14 bis y 18 de la Constitución nacional y 39 de la Constitución provincial, así como de la doctrina legal que cita (fs. 96/101). a. Sostiene que la conclusión del a quo es contraria a lo establecido en el art. 3 de la ley 11.653, en tanto el sujeto tutelado por la norma es el trabajador, para quien está previsto el derecho de elección de la jurisdicción -mientras lo haga entre una de las opciones allí previstas- y que la interpretación efectuada por el tribunal se aparta de la finalidad del citado precepto. Señala que el actor al interponer la demanda optó por la donde jurisdicción había provincial trabajado estaba pues uno de los lugares situado en el Parque Industrial de Pilar, circunstancia que -dice- el tribunal consideró probada, pues la declarada incompetencia no se funda en el hecho de que el actor no hubiera prestado tareas en el circunstancia lugar no indicado, es sino suficiente en que para esa determinar sola su competencia (v. fs. 99). Afirma que la demandada es una empresa constructora y que el desarrollo de tareas en distintos lugares y fuera del domicilio de su oficina comercial o de administración es una característica típica de la actividad, por lo que no existe para tales empresas un domicilio principal de prestación de tareas. Alega entienda que que una es incomprensible empresa constructora que sólo el tribunal puede ser demandada en su domicilio real, porque las tareas que sus empleados realizaron para ella tuvieron una duración breve o porque no pueda determinarse un lugar principal de prestación de tareas. b. En otro orden, se agravia, por un lado, de la regulación de honorarios que -afirma- excede los máximos fijados por la ley arancelaria para los casos en que el monto del litigio es indeterminado, como ocurre en la especie, y del otro, de la imposición de la totalidad de las costas a su parte. III. El recurso ha de prosperar. 1. resolución De modo atacada liminar, debe cabe considerarse aclarar que la definitiva en los términos del art. 278, tercer párrafo del Código Procesal Civil y Comercial. En efecto, en el caso se controvierte la aptitud jurisdiccional de la justicia provincial para entender en el pleito, y hallándose en juego -conforme resulta de los antecedentes competencia expuestosa un juez la posible extraprovincial, atribución la decisión de que admite la excepción de incompetencia debe considerarse como asimilable a definitiva (conf. causa L. 97.552, "Silva", sent. de 15-VII-2009). 2. a. Acierta el recurrente en impugnar las conclusiones a las que arribó el tribunal de la instancia ordinaria. En el caso, como se señaló, el trabajador optó por la jurisdicción provincial -Departamento Judicial San Isidro-, pues afirmó haber trabajado a las órdenes de la demandada en varios establecimientos del Parque Industrial de Pilar. Esta última, además de subrayar la imprecisión de las expresiones del actor en cuanto al desarrollo de sus tareas en aquella localidad, negó tanto que éste hubiera prestado servicios celebración del en ese contrato ámbito hubiera como también tenido lugar que en la esa jurisdicción y que, para más, el actor hubiera denunciado tal circunstancia. Más allá de la negativa expresada, el tribunal declaró acreditado -con base en la prueba aportada- el hecho de la prestación de servicios por parte del actor en la localidad de Pilar, aunque despojó a ese dato de toda relevancia por interpretar que tal circunstancia hubiera sido gravitante sólo ante la ausencia de un lugar principal de ejecución del contrato, y en tal sentido, sin referir concretamente el fundamento de la aseveración, se declaró incompetente para entender en estas actuaciones. b. Ahora bien, cabe recordar, ante todo, que el art. 3 de denominado la ley "derecho 11.653 a una reconoce triple al opción", trabajador esto es, el la posibilidad de entablar su demanda ante: 1) el tribunal del domicilio del demandado; 2) el del lugar donde se prestó el trabajo y 3) el del lugar de celebración del contrato. Sabido es que dicha norma, en cuanto destinada a solucionar las cuestiones de competencia que se susciten en las causas entre empleadores y trabajadores, resulta inspirada por el propósito evidente de proteger a estos últimos (conf. causas L. 109.402, "Cuellar", sent. de 4-V2011; L. 96.266, "Souto", sent. de 4-XI-2009) y, huelga decirlo, no se opone a ello la norma del art. 4 de la ley 11.653 -erróneamente invocada por el excepcionante- que establece que sólo en los casos previstos en los incs. “b”, “c”, “e” y “g” del art. 2, las demandas deberán promoverse ante el tribunal del domicilio del demandado. De los antecedentes reseñados se impone concluir que los declarar fundamentos su desplegados incompetencia no por guardan el tribunal armonía con para la finalidad tuitiva que inspiró la previsión del art. 3 de la ley 11.653. Al respecto, ha declarado esta Corte que los fines de la legislación laboral responden a un principio protectorio fundamento en beneficio constitucional del en trabajador, el art. 14 que encuentra bis de la Constitución nacional y que ha sido receptado en la Ley de Contrato de Trabajo y en el ordenamiento procesal laboral local: la ley 11.653 (conf. causas L. 109.402 cit.; Ac. 69.458, "Ruiz", resol. de 17-III-1998). En acreditada efecto, la no obstante prestación de tareas haber en la considerado localidad de Pilar, el tribunal -reitero- le restó relevancia a ese dato en tanto -a su juicio- tal circunstancia sólo podía gravitar en el supuesto de ausencia de un lugar principal de ejecución del contrato, extremo este, que, por cierto, omitió definir en la especie. Ahora bien, desde esa perspectiva, habiendo sido probado el desempeño de tareas en aquel punto geográfico -situado precisamente en el ámbito territorial de la jurisdicción del Tribunal del Trabajo N° 1 del Departamento Judicial San Isidro- y que fuera invocado por el actor a la luz de lo establecido en el art. 3 inc. “b” de la ley 11.653, tal hecho -en el contexto en que el propio sentenciante lo ubicó-, debió resultar determinante para definir su competencia en autos. Ha de observarse que no surge de la causa -y tampoco lo juzgó el tribunal de grado- que aquellas labores consistentes -como se vio- en haber pintado el actor "un laboratorio", hayan sido, en el contexto del supuesto vínculo laboral que se denunció, prestaciones excepcionales o accidentales que denoten por parte del trabajador un ejercicio abusivo de la facultad que el mentado art. 3 de la ley 11.653 le confiere. Por tales motivos, los argumentos brindados en la sentencia para determinar la asignación de la competencia en razón del territorio a la justicia nacional, importan una hermenéutica del precepto adjetivo en análisis que luce apartada de su contenido y finalidad, como lo pone de resalto el recurrente. 3. Por último, a tenor de lo expuesto en el punto anterior, deviene inoficioso el tratamiento de la crítica ensayada en torno a la imposición y distribución de las costas y a la regulación de los honorarios profesionales. IV. Por lo expuesto, corresponde hacer lugar al recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley interpuesto, revocar la sentencia impugnada y declarar la competencia del Tribunal del Trabajo Nº 1 del Departamento Judicial San Isidro para entender en la presente controversia, debiéndole remitir la causa para que prosiga con su tramitación. Con costas de ambas instancias a la excepcionante vencida (art. 19, ley 11.653). Voto por la afirmativa. Los señores jueces doctores Hitters, Genoud y Kogan, por los mismos fundamentos del señor Juez doctor Soria, votaron también por la afirmativa. Con lo que terminó el acuerdo, dictándose la siguiente S E N T E N C I A Por lo expuesto en el acuerdo que antecede, se hace lugar al recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley traído y, en consecuencia, se revoca la sentencia impugnada y se declara la competencia del Tribunal del Trabajo N° 1 del Departamento Judicial San Isidro para entender en la presente controversia. Vuelvan los autos a dicho tribunal para que prosiga el trámite según su estado. Costas de ambas instancias a la excepcionante vencida (art. 19, ley 11.653). Regístrese y notifíquese. DANIEL FERNANDO SORIA JUAN CARLOS HITTERS HILDA KOGAN LUIS ESTEBAN GENOUD GUILLERMO LUIS COMADIRA Secretario GT