EL TEMA DE LA BIBLIA 73 Lección Veintiuna La Revelación del Propósito de Dios Si Dios tiene un propósito eterno que involucra al hombre, ¿cómo le hará saber al hombre este plan? En la introducción del curso declaramos que el plan de Dios ha sido revelado en la Biblia. En esta lección daremos una mirada más de cerca al método, procedimiento, o proceso usado por Dios en la revelación de Su plan al hombre. Parte 1 – El Antiguo Testamento I. DIOS HA REVELADO SU PLAN AL HOMBRE EN LA BIBLIA. A. Toda la Escritura es inspirada por Dios (2 Tim. 3:16-17). 1. La frase “inspirada por Dios” (RV) es de una sola palabra griega theopneustos. Theopneustos es una palabra compuesta de dos palabras griegas, theos, Dios, y pneo, respirar. Benjamin Warfield, quien hizo cierto escrito sobresaliente sobre el tema de la inspiración, señaló que esta palabra “muy claramente no quiere decir inspirada de Dios”. Dijo que el término griego “no tiene nada para decir de inspirando o inspiración; que habla solamente de un spiring o spiration. Lo que dice la Escritura no es que es breathed into por Dios o que es el producto de la inbreathing Divina en sus autores humanos, sino que es breathed out por Dios, Dios-breathed, el producto del aliento creativo de Dios” (ISBE, II:839 y Sigs.). 2. La afirmación de Pablo es que la Escritura es el aliento de Dios. Dios es la fuente u originador de la Escritura. Theopneustos es usado solamente aquí en el Nuevo Testamento. En ninguna parte la Escritura habla de “hombres inspirados”. Un reconocimiento de este hecho nos ayudará a hablar mas exactamente con respecto al proceso de la revelación. B. ¿Qué está incluido en el término Escritura? 1. Escritura es de la palabra griega graphe. Puede ser usada en el sentido general del escribir común y corriente, o en un sentido técnico de Escritura como las “Palabras [u Oráculos] de Dios”. 2. Los traductores de algunas versiones entienden graphe en el sentido general. Los de otras la entienden en el sentido técnico. 3. La palabra graphe es usada 51 veces en el Nuevo Testamento. Las palabras escritura o Escrituras “siempre se refieren a las ‘Palabras de Dios’, los libros autorizados” (Miller, Introducción Bíblica General, Pág. 44). 4. En 1 Tim. 5:18, la Escritura del Antiguo y Nuevo Testamento están conectadas. Pablo cita de Dt. 25:4 y Luc. 10:7 bajo la designación de escritura. Esto es importante porque coloca uno de los Evangelios a la par con la literatura generalmente reconocida de aliento de Dios. II. DIOS HABLO EN EL PASADO POR LOS PROFETAS (2 Ped. 1:20-21). A. La profecía de la Escritura no es un asunto de “interpretación personal” (LBLA). Esto no quiere decir que un individuo no pueda estudiar o interpretar la Escritura por sí mismo. Significa que las profecías de la Escritura no se originaron con los hombres mismos. El versículo 21 explica la declaración del versículo 20: “Porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana ...”. Ella no fue el resultado de la investigación y búsqueda humana. B. Los profetas fueron inspirados (§llevados, movidos) por el Espíritu. 1. Movido es del griego phero que significa llevado, movido, conducido, o Anotaciones EL TEMA DE LA BIBLIA 74 Anotaciones transportado. 2. Bauer dice que phero significa “se fue de su posición, impulsado”. En el sentido pasivo significa “ser movido, ser conducido, permitirse uno mismo ser conducido”. Esto puede ser literalmente por el viento y el tiempo (Hch. 27:15,17), o figurativamente por el Espíritu de Dios (2 Ped. 1:21) (BAGD, Pág. 855). 3. “Lo que es ‘transportado’ es tomado por el ‘portador’ y llevado por el poder del portador, no por sí mismo, al objetivo del portador, no al suyo propio. Los hombres que hablaron por Dios son declarados aquí que habían sido tomados por el Espíritu y llevados por Su poder al objetivo de Su escogencia. Las cosas que ellos hablaron bajo esta operación del Espíritu fueron Sus cosas, no las de ellos. Y esa es la razón que es asignada de por qué ‘la palabra profética’ es tan segura” (Warfield, ISBE, II:841). 4. Los profetas del Antiguo Testamento fueron movidos, guiados, o transportados por el Espíritu Santo para decir las mismas cosas que Dios quería que dijeran en el mismo momento en que quiso que las dijeran. Ni el Antiguo Testamento ni el Nuevo Testamento es el producto de genios meramente humanos; es el producto de Dios a través de calígrafos (o escritores) humanos. III. LOS PROFETAS HABLARON PALABRAS Y AFIRMARON ESTAR HABLANDO A MEDIDA QUE EL ESPIRITU LOS GUIABA. A. El Espíritu de Cristo estaba en ellos revelando ciertas cosas que ahora son anunciadas en el Evangelio (1 Ped. 1:10-12). B. El término profeta en el Antiguo Testamento es del hebreo nabhi. Originalmente la palabra parece haber significado algo como ampollarse, luego hablar, o anunciar. La mejor forma de determinar su definición es examinar su uso en las Escrituras. Eso es, dejemos que la Biblia defina sus propios términos. 1. El Señor constituyó a Moisés “dios para Faraón”, y Aarón su hermano fue su profeta (Ex. 7:1). 2. Exodo 4:16 muestra que Aarón fue el interlocutor o boca de Moisés (quien era como Dios para él). Esto quiere decir que el profeta es el interlocutor de Dios, o la boca de Dios. 3. Cuando Dios dio Su patrón para un profeta dijo: “... y pondré mis palabras en su boca, y él les hablará todo lo que yo le mandare” (Dt. 18:18-19). Aquí tenemos a Dios como el originador de las palabras que El hablaría a través de sus profetas. C. El término profeta implica que era un pronosticador, pero no necesariamente un adivino. Una gran parte del trabajo hecho por los profetas del Antiguo Testamento fue para su propia generación. Eran predicadores que fueron guiados directamente por el Espíritu de Dios. D. Los escritores del Antiguo Testamento afirmaron estar hablando la palabra de Dios. La expresión “así dice el Señor”, o su equivalente, aparece más de 2.000 veces en el Antiguo Testamento (cfr. 2 Sam. 23:1-2; Mat. 22:43; Isa. 1:1-2; Jer. 10:1-2; Ez. 1:3). E. Zacarías 7:12 menciona el proceso completo de la revelación. El Señor envió Sus palabras por el Espíritu a través de los profetas. CONCLUSIÓN: Dios habló Palabras por medio de Su agente, el Espíritu Santo, a través de los profetas. Jesús dijo, con referencia a los escritos del Antiguo Testamento, “la Escritura no puede ser quebrantada” (Jn. 10:35). EL TEMA DE LA BIBLIA Los puntos I y II son tomados en su mayor parte de Introducción a las Evidencias Cristianas, por Ferrell Jenkins, Págs. 49-50. §El texto griego Westcott y Hort dice, como se ve en la traslación de las Ver. ASV., y la H.A., “hombres hablaron de parte de Dios, impulsados por el Espíritu Santo”. La Ver. B.A. dice lo mismo, si substituimos la palabra en el texto por la que se da en la margen (“inspirados” por “llevados, movidos): “hombres llevados por el Espíritu Santo hablaron de parte de Dios”. Hay manuscritos que dicen, como lo traduce nuestra versión, “santos hombres de Dios hablaron”. Notas Sobre Segunda de Pedro, Pág. 16, Bill H. Reeves. ____________________________________________ Parte 2 – El Nuevo Testamento I. CRISTO VINO COMO LA REVELACION DE DIOS AL HOMBRE. A. De Su segunda venida se habla como una manifestación (1 Ped. 1:13; 2 Tes. 1:7). La palabra manifestación literalmente significa un descubrir o quitar el velo. B. Cristo vino y declaró, explicó, o interpretó al Padre (Jn. 1:18). Dijo a los apóstoles que les había mostrado al Padre (Jn. 14:6-9). C. Cristo vino a hacer conocer lo misterios de Dios que habían estado oculto en generaciones pasadas (Col. 1:26-27). D. Jesús reveló al Padre, pero hubieron muchas mas cosas que necesitaban ser reveladas. Los apóstoles no fueron capaces de entender todo ello durante el ministerio personal de Cristo. El prometió retornar al Padre y enviar el Espíritu Santo (otro Ayudador o Consolador) para guiarlos a toda la verdad (Jn. 16:12-14; 14:16-17). II. LAS PROMESAS DE LA GUIA DIVINA HECHA A LOS APOSTOLES. A. Jesús prometió a los apóstoles liberarlos de la preocupación. 1. “... no os preocupéis por CÓMO o QUÉ hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar ...” (Véase Mat. 10:17-20). El Espíritu de vuestro Padre habla en vosotros (Léase también Mr. 13:11; Luc. 12:12). 2. J. W. McGarvey hizo el siguiente comentario excelente sobre la promesa de Jesús: “Bajo cómo está incluido la manera de hablar; eso es, el estilo, la dicción y el arreglo; bajo qué, el asunto; eso es, los pensamientos y los hechos. No se les dijo que no se preocuparan por alguno de estos, aún cuando sus vidas dependieran de lo que ellos dirían. Es imposible que el hombre mortal estuviera libre de la preocupación bajo tales circunstancias, sin ayuda sobrenatural. Se sigue que la razón por la Jesús procedió para dar esta prohibición es la única que podría ser dada por un ser racional ... Esta seguridad sería suficiente para librarlos de la preocupación, si solamente podían creerla implícitamente; pero ¡que requería una fe implícita! ¡Cuan diferente de la fe débil que ahora se tambalea ante el pensamiento de que una promesa tal como esta jamás se hubiera tenido en cuenta!” (J. W. McGarvey, Evidencias del Cristianismo, Págs. 172-173). B. Libres de premeditación. “Proponed en vuestros corazones no pensar antes cómo habéis de responder en vuestra defensa” (Luc. 21:12-15). ¡Imagínese diciéndole a un cristiano que ha sido acusado falsamente de un crimen que no se prepare con anticipación para hacer una defensa! 75 Anotaciones EL TEMA DE LA BIBLIA 76 Anotaciones C. La guía directa del Espíritu Santo (el Consolador, Ayudador o Paracleto). Nótese la obra específica del Espíritu con relación a los apóstoles. 1. Guiar a los apóstoles a toda la verdad (Jn. 14:26; 16:12-14; Luc. 12:12). 2. Debía declarar las cosas que vendrían (Jn. 16:13). 3. A través de ellos iba a convencer al mundo con respecto al pecado, de la justicia y del juicio (Jn. 16:7-11). 4. Debía dar testimonio de Jesús (Jn. 15:26). D. Ser bautizados con (o, en) el Espíritu Santo (Hch. 1:5,8). McGarvey comenta: “Aquí el mismo don del Espíritu previamente prometido es llamado un bautismo en el Espíritu – una figura que designa el hundimiento de sus propios poderes mentales en aquellos del Espíritu Santo cuando él viniera sobre ellos; y les asegura que entonces recibirían poder, y serían sus testigos en toda la tierra. El poder necesario para ser tales testigos, como aprendemos de la segunda parte, es el poder para obrar milagros físicos y el poder para hablar con el absoluto conocimiento con respecto a la exaltación de Jesús, y concerniente a su voluntad en todas las cosas sobre las que no había hablado en persona” (Pág. 175). E. ¿Fueron cumplidas estas promesas? Escuche de nuevo a McGarvey: “En la publicación de estas promesas de Jesús, como lo hacen todos estos cuatro escritores, ellos dan a entender que afirman que Mateo y Juan, quienes eran de los doce, experimentaron su cumplimiento, o que se quedaron sin cumplir. No importa lo que pudiéramos pensar de la veracidad de estos escritores, no podemos suponer lo que ellos trataron de decir más tarde, y por ese motivo dar a entender que su Señor les hizo promesas que falló en cumplirlas. Incuestionablemente ellos trataron de transmitir el pensamiento de que cada una de estas promesas fueron cumplidas; y escribieron en un tiempo cuando el cumplimiento era un hecho de su propia experiencia pasada u observación” (Pág. 176). III. LOS APOSTOLES Y LAS PALABRAS DEL NUEVO TESTAMENTO. A. Dios reveló Sus palabras a los apóstoles por el Espíritu (1 Cor. 2:9-13; Véase también Efe. 3:1-5). Este pasaje enseña la inspiración verbal de la Biblia. “La Inspiración Verbal es la obra de Dios a través del Espíritu Santo dirigiendo de esta manera a los hombres en su elección del tema y en su elección de las palabras que sus escritos contienen, escribiendo fielmente, exactamente lo que Dios deseaba, y todo lo que El deseaba, ellos lo contienen. Esta es la doctrina de la administración o guía; eso es, Dios guió de tal manera en la escritura de los libros de la Biblia que las palabras son Sus palabras en el estilo de los escritores. La Inspiración Verbal es lo opuesto de los Conceptos Inspirados” (H. S. Miller, Introducción Bíblica General, Pág. 24). B. Pablo afirmó que el evangelio que predicaba fue recibido por revelación (Gál. 1:8,11-12). C. Los apóstoles (y profetas) del Nuevo Testamento fueron dirigidos por el Espíritu Santo. La totalidad de lo que escribieron es inspirado. Esto es inspiración plena. Significa que la inspiración se extiende a cada parte de sus escritos; cada parte es igualmente inspirada (cfr. 2 Tim. 3:16-17). Dios utilizó los siguientes elementos humanos dentro de la guía del Espíritu Santo. 1. La investigación de los documentos (Luc. 1:1-4). 2. El uso de la experiencia humana (1 Cor. 15:32; Fil. 1:12-14). 3. El arreglo de los materiales (Jn. 20:30-31). 4. La elección de palabras peculiares al vocabulario del escritor (1 Cor. 2:7-13). Considere el lenguaje médico de Lucas. Hobart, en El Lenguaje Médico de San Lucas, dice que Lucas usó 480 términos médicos EL TEMA DE LA BIBLIA contemporáneos en Lucas-Hechos (Cfr. Luc. 4:38; gran fiebre, y 5:12, lleno de lepra). CONCLUSION: En Cristo y el Evangelio, Dios ha hecho una revelación completa y final de Su propósito y voluntad hacia el hombre (Heb. 1:1-2; Rom. 1:16-17). Es nuestra obligación estudiar para que podamos apreciar Su propósito eterno. A medida que aprendamos debemos hacer Su voluntad (Mat. 7:21-23). 77 Anotaciones