Dr. Hugo Ruiz Morena Pediatra Col. Nº 282828903 c/Valladolid, 24. 28701 S.S.Reyes (Madrid) Tel.: 902-900-425 DISCIPLINA: TECNICA DE LA SUSPENSION TEMPORAL I.-Definición La suspensión temporal es una forma de disciplina que se utiliza para interrumpir el comportamiento inaceptable, aislando al niño en una silla o una habitación durante un período determinado. La suspensión temporal tiene la ventaja de proporcionar un período durante el cual tanto el hijo como el padre pueden calmarse. También le proporciona al niño de más de 2 ó 3 años de edad la oportunidad de pensar sobre su mal comportamiento y de sentirse un poco culpable al respecto. Si el niño tiene menos de 2 años de edad, la suspensión temporal sirve principalmente para establecer quién manda o quien dicta las normas. Los malos comportamientos que mejor responden al método de la suspensión temporal son las conductas agresivas, perjudiciales o destructivas que no pueden ser pasadas por alto. La suspensión temporal es mucho más eficaz que las “nalgadas”, las amenazas o los gritos. A medida que el niño crece, el uso de las suspensiones temporales puede ser reemplazado con el de las consecuencias lógicas. II.-Selección del lugar para la suspensión temporal A) Parques o cunas Los parques para niños y las cunas constituyen lugares convenientes para la suspensión temporal de lactantes mayorcitos. Un parque cerca de uno de los padres es preferible al aislamiento en otra habitación, porque la mayoría de los lactantes tienen miedo si no están en la misma habitación que uno de los padres. B) Sillas o rincones A un niño de mayor edad se le puede decir que se siente en una silla. La silla puede ser colocada en un rincón, mirando hacia la pared. Algunos padres prefieren hacerle estar de pie mirando hacia el rincón. C) Habitaciones abiertas Muchos padres prefieren una habitación para la suspensión temporal, porque está más aislado que la silla. La habitación más conveniente y más segura para la suspensión temporal es la del niño. Hasta los 3 años de edad, a casi todos los niños les produce temor estar en una habitación con la puerta cerrada. D) Habitaciones cerradas Algunos niños salen de la habitación tan pronto como se les pone allí. Si usted no puede poner una barrera, entonces deberá cerrar la puerta. Usted puede mantener la puerta cerrada durante los 3 a 5 minutos requeridos para el período de suspensión temporal. Si no quiere estar atajando la puerta, puede colocar un cerrojo que le permita cerrarla temporalmente. La suspensión temporal no puede durar más de unos minutos. III.-Cómo aplicar la suspensión temporal A) Establezca la duración de la suspensión temporal. Ésta debe tener la duración suficiente para que su hijo piense en su mal comportamiento y aprenda cuál es el comportamiento aceptable. Una buena regla empírica es 1 minuto por cada año de edad del niño, con un máximo de 5 minutos. Puede usarse un contador de tiempo de cocina para marcar el número de minutos de la suspensión. Si su hijo deja la suspensión temporal antes de tiempo (“se escapa”), se le debe hacer volver a la suspensión temporal, y deben volverse a contar los minutos desde el comienzo. Para los 6 años de edad, la mayoría de los niños pueden ser enviados a su habitación con la instrucción de que permanezcan allí hasta que estén dispuestos a portarse bien. B) Cómo poner a su hijo en suspensión temporal. Si su hijo se porta mal, explíquele brevemente la regla que ha desobedecido y envíelo a la suspensión temporal en una silla o en su habitación. Si su hijo no lo hace de inmediato, acompáñelo o llévelo hasta allí. Es posible que el niño llore, proteste o tenga una rabieta mientras va al lugar de la suspensión temporal. No lo reprenda ni le de nalgadas mientras lo lleva. C) Cómo mantener a su hijo en suspensión temporal. Una vez que los niños entienden el concepto de la suspensión temporal, casi siempre se quedarán en la silla, rincón o habitación hasta que transcurra el tiempo requerido. Sin embargo, usted deberá vigilar a su hijo. Si se levanta de la silla, hágalo sentar otra vez, suavemente pero con rapidez, sin darle nalgadas, y vuelva a marcar el contador de tiempo los minutos de la suspensión temporal desde el comienzo. Si su hijo sale de la habitación, llévelo de vuelta a la misma y vuelva a marcar los minutos en el contador de tiempo. Amenace con cerrar la puerta si vuelve a salir. Si su hijo es un niño obstinado de 2 ó 3 años de edad y usted recién empieza a aplicar las suspensiones temporales, inicialmente podría tener que sujetarlo en la silla con una mano sobre su hombro durante los 2 minutos completos. No se desanime; esto le enseña al niño que usted tiene intención de cumplir lo que dice. Si su hijo grita o llora durante la suspensión temporal, no le haga caso. Lo importante es que permanezca en suspensión temporal durante cierto tiempo. Su hijo no podrá entender la necesidad de estar en silencio durante la suspensión temporal hasta que tenga por lo menos 3 años, de modo que no espere esto de él antes de esa edad. D) Cómo terminar la suspensión temporal. Hágale entender claramente que es usted quien controla cuando debe terminar la suspensión temporal. Cuando el tiempo haya transcurrido, vaya adonde está su hijo y dígale:”Se acabó la suspensión temporal. Ya puedes levantarte (o salir)”. Luego, trate al niño en la forma normal. No repita la regla que su hijo desobedeció. Trate de advertir cuando su hijo hace algo que le agrada a usted y elógiele por ello cuanto antes. E) Practique con su hijo la suspensión temporal Si usted no ha usado antes la suspensión temporal, explíquesela de antemano a su hijo. Dígale que la suspensión temporal reemplazará a las nalgadas, los gritos y otras formas parecidas de disciplina. Háblele acerca de los malos comportamientos que llevarán a las suspensiones temporales. También explíquele cuál es el buen comportamiento que usted preferiría ver. Luego, simule con su hijo que él ha desobedecido una de las reglas. Llévelo a través del proceso de la suspensión temporal de modo que entienda sus instrucciones cuando lo envíe a suspensión temporal en el futuro. Instruya también a la niñera acerca de las suspensiones temporales. Escrito por el Dr. B. D. Schmitt, autor del libro “Your Child’s Health”.