anatomía filosófica - Hemeroteca Digital

SEGUNDA SERIE.
Uanáliag;» de 11 Febrero de fi8J4.
NUMERO 166..
PERIÓDICO OFICIAL
B E BvA SOClEDAIk MÚSICA GEXERAL I&E SOCORROS
ANATOMÍA FILOSÓFICA: doctrina anatómico-dogmática sobre la
materia de los cuerpos.—MEDICINA PRACTICA: gastro-entero-he" patitis crónica; perforación del estómago etc. CIRÜJIA PRACTICA:
Ensayo feliz de trasfusion.—FARMACIA
ESPERIMENTAL: deluso
del ácido tártrico en la1 Alcalimetría.—Del CiinKer, nuevo ájente t e rapéutico. —Maceraeion aromática amarga de Plissou.—QUINTO
CONGRESO CIENTÍFICO ITALIANO, (continuación).—SOCIEDAD
MEDICA GENERAL DE SOCORROS MUTÜOS.-BIBLIOGRAFIA.'
ANATOMÍA FILOSÓFICA,
amá.4©iMte«»-d©gmá.tiica solsrc la,
materia de los cuerpos.
(Conclusión).
La üilosofia de las ciencias en general nos enseña también que es mas racional y mas lógico proceder de lo que
está mejor estudiado y de lo mejor conocido hacia lo que
está menos explorado cien tíficamente;luego será preciso
convenir, que en los primeros tiempos de los estudio
anatómicos, el hombre se hallaba en la necesidad de principiar por conocerse y por anatomizarse á si mismo, antes de disecar los cuerpos organizados mas remotos de él.
Luego el hombre, sintiendo la necesidad de unafmedida ó de
un primer término de comparación, no podía y no debia
adoptar como tal sino la anatomía del hombre; reservándose el derecho de tomar, según !a necesidad, de los organismos medios los documentos científicos que se pueden
obtener mas fácilmente que en los organismos superiores.
Tal es el método general de degradación progresiva que
Blainville demuestra en sus cursos-y en sus obras, la conveniencia y racionalidad que ha sabido dar, uniendo al
precepto y el ejemplo como prueba de la regla un examen
rápido en sentido inverso, es decir, volviendo desde los
vejetales y la esponja á el organismo del hombre como
confirmación del progreso siempre unido íntimamente con
la ley de la
finalidad.
•
Si tomamos ahora en consideración que la anatomía de
los vejetales mas complicados, ha sido también la primera
que se ha estudiado; al paso que no ha podido estudiarse
sino mucho mas tarde la de los vegetales mas sencillos, nos
será fácil concluir de aqui, que los animales y vejetales superiores son mas fáciles de caracterizar, no obstante ser
complejos, mediante esta misma complicación: y conviniendo por otra parte en que su estudio es mas largo que
el de los animales y vegetales inferiores. El método que
procede de los cuerpos organizados superiores ó complejos,
cuyas características son muy pronunciadas, respecto de
los cuerpos organizados mas y mas inferiores y simples,
que por esto mismo son mucho mas díficiles de determinar
y caracterizar; este método es el único qué se puede considerar como lógico y como didáctico, puesto que procede
délo conocido á lo desconocido. Y seria imprudente sostener que exista un punto de vista puramente lógico que consiste en proceder de lo simple ó de lo desconocido ó menos
conocido alo compuesto ó sea lo conocido, y queeste modo de ver sea aplicable legítimamente á un trabajo de exposición en que la ciencia esta enseñada y formulada como
Tom. V.
cuerpo de doctrina didáctica. Nosotros, por el contrario,
persistimos en creer que la demostración, procediendo de
lo simple á lo compuesto, solo tiene un valor subsidiario
en la enseñanza, y que no puede ni debe emplearse sino
como prueba de la regla seguida generalmente, que marcha de lo compuesto conocido, alo simple menos conocido ó desconocido.
Cuando se tiene cuidado-de comprobar después que lo
llamado simple existe también en los organismos complejos ó superiores, como en los inferiores mas sencillos , y
que lo llamado simple es siempre mucho mas difícil de determinar y de conocer que lo compuesto, se acaba uno de
convencer de que la única marcha que conviene á una ciencia formulada en cuerpo de doctrina debe ser al mismo
tiempo iójica y práctica, y que para ser así debe proceder
de lo mejor conocido á lo desconocido, esto es, de lo compuesto , que es mas fácil de determinar , á lo mas simple
que casi siempre es indeterminable ó mas difícil de determinar. En cuanto al camino que debería seguirse en las
investigaciones para profundizar mejor los misterios de las
organizaciones animal y vegetal, es maslójiep y mas práctico el esplorar los fenómenos en sus condiciones medias,
porque estas son mas favorables y permiten observar los
hechos inmediatamente que se desprenden de la homoge»
neidad y antes de que sean enmascarados con la complicación. Este camino de la investigación ha sido indicado por
Blainville y recomendado en las lecciones que dá de filosofía anatómica en la facultad de ciencias.
Conocemos, pues, ahora el principio general de la doctrina anatómica comup de los animales y vegetales , y debemos estar seguros de que , en la inmensa mayoría de los
casos , este principio dá la llabe de la esplicacion de las diferencias y variedades que se ven salir del seno mismo de
la unidad del plan propio y peculiar de cada reyno.
Conocemos también la marcha iójica del método de demostración seguido generalmente en la enseñanza, y presentamos aquí sobre este particular una reflexión que nos
parece fundada en e¡ aprecio exacto de las diferenciasde la
organización animal comparada con la vegetal respecto de
la individualidad.
En una mirada preliminar y rápida sobre la organizacion'general de las individualidades de los dos reynos ¿conviene proceder siempre desdéel hombre á la esp'onja?Nm^
guna duda tenemos én esta parte, según los argumentos
presentados anteriormente. Pero después de haber recorrido las series de los organismos animales según este orden ¿ no'seria oportuno recorrer la serie de los organismos
vegetales desde los mas simples hasta los mas compuestos,
en razón á que los vegetales son siempre aglomeraciones
de individuos ó de organismos simples, susceptibles de
transformarse ó metamorfosearse los unos en los otros? Pensamos que este modo de'iproceder, indicado ya por muchos
naturalistas, tiene la ventaja de manifestar la semejanza de
las formas de los animales inferiores con las de los vegetales inferiores , y pone en claro el contraste entre las formas determinadas de los órganos animales que no se transforman nunca los unos en los otros, con las formas variables y las metamorfosis de los órganos de los vegetales. La
serie general de los cuerpos organizados, estando así dispuesta en dos líneas que se aproximan por su estremidad
inferior y. se separan por la superior , se reconoce cuanto
contrastan eon la organización simple y la individualidad
siempre aglomerada de los vegetales la organización mas y
mas complicada y las tres especies de individualidad aglomerada , agregada y aislada tie los cintaales , mayormente
cuando se tiene cuidado de comprobar que la individualidad en eL reyno animal se eleva gradualmente y se formaJa gerárquicamente en personalidad en las sociedades de
los animales , y liega al sumwm bajo este aspecto en tes secie'dades humanas.
En la rápida ojeada sobre la serie general de los cuerpos organizados se puede reconocer la correspondencia fi• íosóñca y las diferencias anatómicas entre la nutrición y la
reproducción efectuadas por medio de los órganos animales y, vegetales. Puede también hacerse corresponder sin
confundir la sensibilidad y movilidad de los animales, con
la sensibilidad de los vegetales , que no es mas que un fenómeno de movilidad. Que los animales se muevan cambiando ó no de lugar, sus movimientos subordinados á la
voluntad no pueden ser confundidos con los producidos á
influjo de la irritabilidad muy manifiesta de gran número
de vegetales.
Así es que en la doctrina de la anatomía general y comparada de los cuerpos organizados, se deberá escluir el método de las series paralelas y el llamado de ramificaciones,
que tienen siempre el inconveniente de hacer perder de
vista el orden gerárquico.
Pero el conocimiento de la serie general de los cuerpos
organizados que esté mejor dispuesta para el estudio comparativo de su anatomía no es suficiente; y los anatómicos
de los dos reinos han dispuesto también sistemas de la clasificación de los órganos ó partes^ de estos cuerpos en series mas ó menos artificiales.
En tesis general puede decirse que estas series de partes han sido siempre establecidas según tres puntos de vista principales; que son la contestura (materiales), la estructura (órganos) y la figura ó forma esterior (regiones):
los hemos indicado ya ,.y desarrollado discutiendo" el principio de la finalidad. Bástanos ahora el dar aquí una esposícion, sucinta de las series de partes que se pueden establecer racionalmente en la anatomía comparada mas general.
1°.' En cada organismo vejetal ó animal la serie de materiales de contestura
debe establecerse según su distin0
ción fisiológica,,!.
en materiales fluentes (fluidosnutri{
tivos) 2. en materiales tejidos (tejidos animales y vejetales) y 3.° materiales emanados de los fluentes y producidos por la acción de los tejidos ^sangre, savia y tejidos).
2.° En atención á lo que hemos dicho sobre las diferencias de la individualidad de los animales y de los vejetales , la serie de los órganos debe todavia fundarse sobre
la distinción fisiológica 1.° en órganos de la vida de relación , los cuales solamente existen en los anímales; 2.° en
órganos de la nutrición; 3,°.en los de la reproducción ó
vida de las especies, que son comunes á los.dos reinos
aunque establecidas sobre distinto plan. Esta diferencia
del pian de estructura de los organismos vejeiales, comparados con los de los animales está claramente señalada por
la nomenclatura de !a organografia animal comparada con,
la vejeta!. Como puede verse en la zoología.
3 o . Sobre las diferencias de la individualidad y finalidad fisiológica de los animales y vegetales reposan las diferencias de las series de regiones de los cuerpos, de los
. animales comparados con las regiones del organismo indi, vidual de los vejetales. Luego hemos dicho que ya se podían aproximar solamente los organismos animales phytoideos , es decir, de individualidad aglomerada sobre una
parte común, á los organismos vejetales bajo el aspecto de
""las regiones, que permite establecer la disposición arboriforme de ciertos animales. Debe notarse aqui que no
puede establecerse ninguna correspondencia entre la sé- .
rio de las regiones de ¡in organismo individual animal aislado ó considerado aisladamente, y la serie de regiones de
un organismo individual vejetal, considerado aisladamente ó en su aglomerado natural de individuos'elementalesy
metamorfoseados.
Limitamos aqui estas consideraciones generales preliminares sobre las series de las partes admitidas por los anatómicos de los dos reinos, y ahora debemos indicar el método ségua el cual deberán examinarse las series de partes
que se han de estudiar en la serie de los órganos vivientes.
Los principios del establecimiento de la serie de lasartes, bosquejado ya por Aristóteles,,perfeccionado sucevamen'.e por todos los anatómicos y mejor fundado por
Vicq-dAzyr, han dado lugar en estos últimos tiempos á
investigaciones filosófirasínlas que se ha abusado déla
analogía délin modo e\trafío. En este género de investigaciones se compira entre si ias diversas partes en un mismo organismo, lista comparación preliminar ó simplemente anatómica, da pna caracterización ó valuación preliminar de las series de las partes que se propone comparar
después en la serie de los cuerpos organizados.
Después de haber obtenido la caracterización de las
partes por medio de la comparación puramente anatómica
se puede proceder á la comparación de las series homogéneas de las partes en toda serie de los organismos, y se
debe cuidar mucho de distinguir los casos en que débilmente, gradualmente la comparación de las partes llegue
á un termino en que no permitaya una comparación racional. Esta segunda comparación que puede llamarse anatomico-seriaí és el .obgcto principal de la anatomía conparada.
Ademas del principio de la finalidad tan antigua y lejitimamente acreditado, que suministra todos los hechos
de la anatomía comparada mas general, es de la mayor inportancia recurrir actualmente á un principio sentado por
Blainville. Esté principio lógico que creemos ser aplicable
racionalmente á la ciencia general de los cuerpos organizados, nos parece que debe foírmilarsc en su aplicación á
la anatomía dejos dos reinos ¡ diciendo. La forma este-'
rior es un traslado del fondo dé los organismos y de las
condiciones interiores de su existencia. La ciencia es
deudora á Blainviíle dé haber sentido y demostrado toda
la importancia del gran principio de la forma que se liga
tan intimamente con el de la finalidad.
Esta interpretación filosófica de la forma ó facies- tan
poco apreciada por Linneo, dará á la ciencia un impulso"
y una dirección que será causa de trabajos mas lentos,
pero de mas valor, en razón de qué este estudio compara-,
tivo tiende á encontrar la suma de las relaciones naturales de los seres.
.
Tales son las verdades fundamentales que deben dar á
la doctrina anatómica comuna los dos reinos un valor mucho mas científico , y qué exigían dé nuestra parte el desarrollo que las hemos dado.
Siguiendo el nlétodo espuesto anteriormente, al que
nos hemos propuesto dar la forma de un eunspeetus silogísticus, se obtienen los resultados dispuestos entres grupos principales; á saber 1.° los grados de eompárabilidad
( identidades, parvedades, semejanzas, analogías,
ambigüedades, inversida-des, diversidades);^.0 los grados
de desenvolvimiento conocidos con los nombres de máximo, medio, mínimo; 3 o los grados dedistinciónsegún los
que se establecen los fciaíws, las transiciones ú oscilaciones , y las fusiones. '
La esperienciá de la enseñanza ha'consagrado el uso
seguido constantemente de tomar por términos de comparación los cuerpos organizados sanos y adultos, y no
emplear sino subsidiariamente los resultados mas ó menos
importantes que se obtienen, comparando los cuerpos organizados en la serie de sus estados sucesivos, constitutivos y alternativos*
.
COROLARIOS,
•
Los diversos resultados que se obtienen, comparando
los cuerpos organizados según el método citado, conduce»
naturalmente á los corolarios que deben confirmar Sos
principios sentados y aplicados, y además á dar las iñduciones y previsiones que permite el actual estado dó la anatomía comparada general de los cuerpos organizados vi- •
vientes y fósiles.
.
• ' • ' • ' .
Luego el estudio coniparativo de los cuerpos organizados, los corolarios obtenidos hasta hoy, reasumiendo las
tres especies de reslyítados ya indicados, confirman desde
luego el principio dé la finalidad: Estos corolarios prueban ademas 1.° que el método de enseñanza que proceda
de lo mejor conocido á lo que lo es menos y 2." que el método de investigación que camina desde los términos medios, remontándose hasta el término estremo de mayor
complejidad ó vice versa, son los únicos que se pueden
considerar rigorosamente como racionales y lógicos y perpetuamente como los únicos para sacar las inducciones y
previsiones , que han de activar y afirmar el progreso verdadero de la anatomía y de todos los demás ramos de las
ciencias naturales.
. .
.43—
Luego silos principios, el método y el espíritu dolos
corolarios que caracterizan la doctrina anatómica común
á los dos .reinos de los cuerpos organizados corresponden
á la vez á las necesidades de la enseñanza do la investigación
y de los progresos de la ciencia , que es lo que hemos procurado demostrar, no se podra menos de eouciuir de aquí
que esta doctrina se presenta coa un carácter dogmático
aceptable aún por parte de los espíritus mas severos.
emolientes, emulsión anodina por !a noche la que vomitó
a! momento , cataplasmas anodinas al epigastrio.
Dia 3. Pulso (iebii y acelerado , la misma dieta láctea;
vómitos biliosos con muy mal gusto en la boca, dolores al
cpigastriu, dstriciou ce vicnlne, iabativas estimulantes, medio escrúpulo de magnesia calcinada por mañana y tarde;
tubo algún alivio.
Días 4, 5, tí, y 7. Siguió poco mas ó menos que el dia
anterior con el mismo réjimen.
Via 8. Se suspendió '.a leche por los vómitos que la
ocasionaba; dieta de caldo, mistura antiemética de Riverio,
un golpe de sanguijuelas al epigastrio, iabativas estimulantes por mañana y tarde, ningún alivio:
Dias 9.10,11 y 12: En el mismo estado, el mismo plan,
no podía estar echada sino del lado izquierdo.
- CBites*© - h e p a t i t i s c r ó m i c a : pes*Via 13. Se aumentaron los dolores y los vómitos , sin
foraeion del estómago: peritonitis: muerte á los 30 hacer ninguna deposición de vientre; insistí en las labatiMas de enfermedad .después de llevar diez años de pa- vas emolientes, cataplasmas anodinas al epigastrio y región
decer. Autopsia.
hepática izquierda donde mas sentía el dolor.
Via 14. Suma debilidad, pulso pequeño; repugnancia
¡¡¡Cuan ardua empresa es para el hombre indagar los á toda clase de alimentos y medicinas , pervigiüo contiimpenetrables arcanos de la naturaleza, hallándose siem- nuado de muchos dias; agua de canela para tomar algunas
pre esta cubierta con un velo que el mas sublime entendi- cucharadas, un grano de opio por la noche; descansó un
miento no puede descubrir, por mucho que trate de averi- poco.
guar las altas funciones con que el criador dotóá cada una
Días 15, 16 y 17 siguió lo mismo.
de sus partes en todos los seres de la misma, descendienDia 18. Pulso débil casi imperceptible: en la noche de
do por escala , desde el hombre, el mas perfecto de los or- este día se exacerbaron todos ios' síntomas con sudores fríos,
ganizados , hasta el ma,s pequeño zoófito, desde el nías ro- cara hipocratica, todo manifestaba una muerte próxima;
busto álamo, hasta el DMS pequeño liquen, y desde la Ba- sinapismos á las estretnidades, y una mistura escitante:
llena mas formidable que surca los vastos mares, hasta el unción: á la hora poco" mas ó menos de tan crítica situa. mas ínfimo de su especie!!!. Si todo se queda en teorías é ción se presentó un vómito de sangre muy renegrida tan
hipótesis entre los naturalistas y fisiólogos mas eminentes abundante que pasó de una cuartilla: á cosa de media hoy de mas crédito; poco menos sucede en el estado morboso ra de esta evacuación hizo una deposición de vientre de
de nuestras indisposiciones, si en todas ó en la mayor par- pelotillas renegridas, sumamente endurecidas con bastante
té de ellas nos hallamos divididos en distintos pareceres, abundancia de sangre, de un color como una fuerte disocomoha sucedido con la que dá margena esta historia; pues lución de carbón.(melena de los auto,res); con estas evadespués de mas de 10 aíios de padecimientos ha sucumbi- cuaciones tan preternaturales me persuadí y digo á sus indo, dejando dicho á sus parientes y al que suscribe (que la teresa/ios que la muerte era infalible, porque manifestaba
visitó como encargado de la salud pública en las dos faculta- grandes lesiones orgánicas en el vientre la evacuación de,
des de medicina y cirujia, en esta populosa villa bien ape- aquella podredumbre.
sár suyo la primera por no ser de su competencia) en el úlDia 19. Mucha debilidad, pero mas despejada de semtimo ataque que la acometió, quose hiciera la inspección blante que la noche anterio.r, sensibilidad aumentada en
anatómica: por qué con cuantos facultativos consultó la todo el vientre, manifestándome que parecía la desgarradecían diferente parecer; uaos que si estaba afectado el hí- ban el hígado; caldo de^ pollo, labativas de lo mismo , fogado, o.trosque el bazo, otros qsje el estómago etc.; y para mentaciones emolientes^ todo el vientre.
si en semejantes, casos se puede ilustrar alguna cosa ámis,
Diasid, 21, 22 y 23. Siguió con algún alivio, durmió alcomprofesores en el pronóstico dé tal indi-posición voy á re- gunos ratos, aunque siguieron los vómitos de sangre y las
ferir desaliñadamente su historia tal como la he presenciado. deposiciones de lo, mismo.
Jujita González, de edad de 43 años., temperamento
Dia 24. Cesaron los vómitos de sangre y las deposinervioso, muy irritable , idiosincrasia hepática, hacia mas ciones d,e lo mismo, las orinas eran escasas, se elevó el
de'10 años que padecía una ga^str,odinia que la atacaba coa vientre , el que hasta entonces habia estado muy deprimas enerjía en los meses de agosto y setiembre : la reco- mido , nuevos dolores, en el mismo y pervigilio ; la misma
mendó el facultativo que se hallaba en, el pueblo en aquel dieta anterior, infusion.de flor de malvas gomosg alcanfotiempo , entre otras cosas , las aguas minerales de Soporti- rada; un grano de opio por la noche: cataplasmas anodinas
lla , las que tomó dos años, mas después no quiso volver- alepigasirio , posición de! lado izquierdo.
las á tomar aun que se las ordenaron y había conseguido
Vítulo,26, 27 y 28. El mismo plan anterior, el vientre
bastante alivio con ellas; pues es tal e! ca racter de algunos se iba cada vez meteorizando ma?, los dolores en aumento;
sujetos en este pais que desprecian su salud por no menos- no se la movió en estos dias mas que una vez á beneficio
cabar sus intereses. Continuaron Lis ataques del mismo mo- de labativas emolientes, que deciá la daban mas alivio, y
do poco mas ó menos en los aemás años, según me dijo, con cataplasmas de vinoaromático al epigastrio, pues ni los
y que no habia conseguido alivio alguno con cuantas pr.es- calmantes, ni los antiespasmódicos de nada la servían.
cricionesia habían dado , sino por muy corto tkmuo con
Dias 29 y 30, Seguían en aumento todos los síntoma1;;
algún calmante.
continuo con el plan anterior, no podía moverse del lado
El 30 de setiembre último me llamó por primera vez , y izquierdo, ni para tomar los caldos.
me hizo la sucinta relación que acabo de indicar, manifesDia 3Í. Pulso débil, abatimiento de fuerzas, dolores
tándome al propio tiempo que, baria unos quince días se agudísimos en todo el vientre y tirantez , sudores frios,
hallaba muy incomodada con grande inapetencia, pues ha- cara hipocratica, agonía y muerte á las 12 de este dia.
bia 8 dias que no tomaba mas alimento que agua y dos hueInspección anatómica: abierta la cavidad del vientre se
vos que vomitó al momento, dedicándose sin embargo de derramó mas de diez cuartillos de un líquido amarillento
esto á sus tareas domésticas; asi que se hallaba en un es- verdoso, de un olor fetidísimo con algunos fracmentos de
tado de debilidad estremada, con bastante demacración; en aumento, de lo que quedé sorprendido, y mucho mas al
su vista le ordené ponerse en cama y tomar coidos nutriti- ver una úlcera fistulosa, ó mejor diré un orificio que daba
vos , y para" bebida usual un cocimiento de cebada : le re- sajida á dicho líquido , como si se hubiera hecho con un sa"conocí el vientre , el cual se hallaba muy deprimido , y co- cabocados, de roas de media pulgada de circunferencia en
mo suele deejrs.c pegado á Los ríñones con mucha astric- la parte lateral izquierda del estómago, á media pulgada
ción-; en la rejipr» hepáticaizquierda se notaba bastante li- del piloro , dando paso á su cavidad; en la parte media de
rautez , el pulso débil pero sin calentura, y sus menstrua- este conducto habia otra del grandor de una almendra; la
ciones corrientes,.
pprcion de conducto de esta cavidad que se comunicaba
Con este piaji siguió el día 30 y 1.° de octubre, sin mi- con el estómago era mas pequeña que la de lo esterior.
tigarse ios dolores ni los vómitos, y en los intermedios arro- Toda la longitud de dicho conducto con !a cavidad medio estaba cicatrizada, como si hubiera sido una abertura
jaba mía escesiva abundancia de jugo gástrico y salivas.
Via '2. Eu el mismo estado: dieta láctea , labativas natural; tenia como pulgada y media de largo y cumo tr«s
MEDICINA PRACTICA.
—•&&—
los genios privilejiados en la noble tarea de descifrarla clave por cuyo méd¡o puedan esplicarse un dia los misteriosos
fenómenos de la vida y¿dc las enfermedades, mientras que
nosotros , mas humildes, contribuimos también á nuestro
modo al éxito de la empresa proporcionándoles dé vez en
cuando algunos buenos materiales para el edificio que intentan construir.
Por hoy nos ocuparemos de un ensayo feliz de trasfusiou practicado por uno de nuestros recomendables cirujanos , el señor D. Cayo Sacristán, titular de la villa de Dnéves. He aquí la observación que nos ha remitido este laborioso profesor.
«Una muger de 23 años de edad y embarazada-de seis
meses y medio padecía de varices en la pierna derecha, y
habiéndose egercitado demasiado tiempo en las labores de
su casa, al hacer algún esfuerzo, ó tomar alguna posición
violenta , se le rompió la vena sáfena y perdió una gran
cantidad de sangre, de modo que se vio precisada á mandarme llamar átoda priesa. A mi llegada encontré á la enferma en un estado de síncope completo, con la cara desencajada , elcolor pálido , los ojos undidos, la nariz fria,:
é inundada en sudor ; sin pulso, ni mas señales de circulación que algunos latidos casi imperceptibles en la rejion
del corazón; ln sangre corría sin cesar de la vena rota , y
escretaba y se orinaba involuntariamente. Le apliqué varios éscitantes á.las ventanas de la nariz , y los repercusivos mas enérgicos al vientre, pechos y otros puntos de la
piel; mas viendo que no producían ningún buen efecto,
propuse practicarla trasfusion: admitida la propuesta, y
ofreciéndose oportunamente un joven á que le sangrase,
disequé inmediatamente la vena mediana, la abrí, y recibiendo la sangre en una jeringuilla, introduje con ella
Unas seis onzas de este líquido por la vena déla paciente: á
los dos minutos observé que esta se ajitaba, abrió en seguida los ojos é hizo esfuerzos para vomitar: retiré entonces la jeringa, y tuve la satisfacción de distinguir el pulso,
aunque todavía era casi imperceptible. A las siete horas y
cuarto de esta operación la arteria solo daba 109 pulsaciones por minuto , y pasadas otras dos la enferma me co •
noció y ¿contestó á algunas preguntas que le hice : el calor fue restableciéndose gradualmente. A los doce dias y
medio , la enferma , después de cinco horas de trabajo, parió una niña muerta , ya corrompida , siguiendo hasta el
cuarto dia en un estado tal de debilidad , que se temia verla espirar por momentos: el dia cinco estuvo mas aliviada,
y el seis todavía mejor habiendo desaparecido algunos sínr
tomas; el siete, habiendo pedido mas alimento , se la aumentaron los caldos y siguió hasta el once con bastante
alivio. En este dia, habiendo cometido la imprudencia de
comerse un pedazo de pan untado en aceite , sintió al momento una grande incomodidad y le sobrevino una fuerte
calentura que cesaba y se roprodúcia; pero al quinto dia
se limpió, continúo desde entonces sin interrupción el alivio , y á los 31 dias empezó á ocuparse en las faenas de su
casa sin la menor incomodidad.»
El estado eminentemente critico, y aun desesperado,
en que se encontraba la enferma cuando se presentó este
profesor, la ineficacia de los remedios que empleó al prinE n s a y o í'elás ele
cipio , á pesar de su actividad y energía, y la reacción
verdaderamente admirable, que empezó á observarse a los'
Persuadidos de que el mejor modo de contribuir á los dosmimitos de practicada la operación, son unos hechos tan
progresos de la medicina es el reunir y presentar ala con- significativos ylconcluyentes que, en nuestro concepto, no
sideración de los profesores aquellos hechos prácticos, que dejan al entendimiento mas quisquilloso lugar alguno de
siendo de alguna importancia, ofrecen las garantías nece- duda sobre la virtud altamente vivificadora y restaurante
sarias y suficientes para que no pueda dudarse de su reali- de la sangre que se inyectó en las venas de esta muger
dad y esactitud , hemos determinado dar , de hoy- en ade- moribunda. Algunos pormenores mas sobre el estado de
lante, un lugar preferente en nuestro periódico á todos los cada una de las funciones antes y después de practicada
que reúnan estas circunstancias, bien sean tomados de la operación, hubieran hecho, si se quiere, mas completa
nuestra práctica particular y la de los grandes hospitales de y acabada esta observación ; pero lo dicho en ella es muy
esta Corte , ó bien de la estensa correspondencia que se- suficiente para hacer ver que el cambio,feliz que se obtuguimos con tantos prácticos distinguidos, asi nacionales vo no puede menos de atribuirse al tino, oportunidad y pericia con que se hizo la trasfusion déla sangre, lo cual unicomo estrangeros.
Bellas y seductoras aparecen por lo general las teorías, do á la sencillez y ostensible buena fé con que el suceso,
especialmente en sus primeros tiempos, es decir, mien- se relata y á las garantías de inteligencia y veracidad que
tras tienen á su favor el prestijio de la novedad ; pero si se reconocemos en el observador, constituye un hecho inexaminan una por una todas las que hasta el dia se han signe digno de consignarse en la historia de este célebre
inventado, se vera que el único tesoro con que han enri- medio terapéutico, que tan varia fortuna ha corrido, que
queeidola ciencia y todo lo bueno y útil que de ellas nos tan ruidosas disputas ha ocasionado, tantas reyertas, y
ha quedado está reducido alas investigaciones prácticas, á . aun escándalos , entre algunos profesores, y sobre el cual
los hechos bien observados , á cuyo descubrimiento y ave- solo nos permitiremos hacer unas ligeras observaciones.
riguación se dedicaron sus autores con el fin de comproSin que nos arredre el terrible anatema que pesa sobre
bar por este medio los principios de su doctrina. Sigan pues esta malhadada operación, prohibida con penas muy seve-
de circunferencia era de una sustanciaendurecida de un color amarillento, que costaba bastante cortarla con el bisturí:
el omento gastco-cólico estaba destruido en su parte anterior, no habia mas que algunos fragmentos que nadaban
en dicho líquido; el hígado no tenia lesión alguna, pero
su color en varias escisiones que le hice era de un pardo
oscuro: el bazo estaba muy reblandecido y de un color
negruzco. Los intestinos delgados tenían en varias partes
unas manchitas encarnadas y otras algo lívidas: en las demas partes de esta cavidad no se notaba alteración particular.
Reflexiones. El origen de esta indisposición, en mi
concepto, fue un foco .'erminoso ó hidatidico que,'corroyendo las membranas del estómago , inílamó esta parte,
ósea formándose un quiste hidatidico entre medio de ellas,
corroyendo y horadando una y otra parte ocasionó la
rotura que acabo de describir ; mas bien me aproximo al
foco verminoso, porque en este país padecen mucho de
lombrices en todas las edades, y en las deposiciones que
hizo sanguinolentas hecho varias medio podridas. La destrucion del omento la ocasionó, á mi parecer, el derrame
tan acre que habia en esta parte, como igualmente la
variación de color en el hígado y bazo: el flujo de sangre
podía ser de alguna ramificación de las venas coronarias estomáticas , rotas en el conducto preternatural; las manchas
encarnadas y lívidas de los intestinos podían ser ocasionadas por dos causas: ó por la propagación de la inflamación'
del estómago, ó por el contacto del liquido derramado entre ellos: en fin, ingenios mas intelijentes que el mió podrán sacar mejor fruto de mi relación. No obstante, no
puedo menos de confesar que la medicina es impotente en
tales casos, y en otros á este análogos desearía verá los
partidarios de la homeopatía, si con sus teorías pomposas
nos hacían algún milagro. Jamas saldremos de sistemas, y
por fin é indispensablemente nos habremos de refujiar á la
verdadera medicina del venerable anciano griego, la que
siempre acataré con la mayor veneración y respetó: bien
terminante dice en sus aforismos 21 y,22 de la sección 4. a
cual era el éxito que podia tenerla enferma en cuestión: y
así todo facultativo que desee el bien de la humanidad y
esplendor de la profesión, debe tener todo el conato y
sumo aeierto en pronosticar , como dice el artículo del
uimero 161 último del Boletín de Medicina, y no envolvernos en un laberinto con tanto fárrago de sistemas como en el dia existen.
Ruego á V. V. señores Redactores tengan á bien insertar estos mal pergeñados renglones en su apreciable
periódico, si lo consideran de alguna utilidad; de lo que
les quedará agradecido su atento suscritor, S. S. Q. B. S.M.
Leandro Abad y Cantabrana.
Canales 18 de Enero 1844.
—45—
ras por la autoridad pública en el vecino reino de Francia
á mediados del siglo diez y siete, ni los epítetos de aventurada, temeraria, inhumana y aun diabólica con que sus
adversarios la han calificado, ni menos la opinión de otros
que la consideran como contraria á los principios de la sana fisiolójia , sobre lo cual pudiéramos hablar mucho , nos
atreveremos a decir: que la trasfusion de la sangre no ha
sido estudiada «on la imparcialidad y calma que eran necesarias para poder apreciar el lugar que debiera ocupar
en la terapéutica. Grave sin duda de suyo esta operación,
ha alarmado naturalmente siempre que puesta en práctica
ha dejado de corresponder al objeto de su aplicación, y
mas si á ella se seguía, aunque tarde, la muerte del enfermo ; de modo que su primera desventaja proviene
de la prevención con que desde el principio se la ha mirado. Pero ¿se ha averiguado cual corresponde, que los sucesos desgraciados que se atribuyen son realmente debidos á esta causa , como en su encono contra la trasfusion
lo pretende el célebre Lamartiniere?
Mucho dudamos de ello, y el fundamento de nuestra
duda esel observar que en la mayor parte de estos sucesos,
el mal éxito de la operación debe atribuirse, ó á descuidos
mas ó menos inevitables de parte de los operadores, ó á
ciertas contraindicaciones que no se supieron apreciar, ó
á la índole incurable de las enfermedades que un celo iud'screto y exajerado se propuso combatir por este medio,
como sucedió con los enfermos de Denis y de Blundell,
que el primero padecía de una enagenacion mental, y el
segundo de un escirro en el piloro , muy adelantado en su
carrera. Por otra parle; ¿se ha comprobado cual debiera
que lodos los resultados favorables, y los grandes sucesos
que se atribuyen á esta operación sean efectiva y csclusivamente producidos por ella, como lo suponenWren,
Major, Emmerets, lliva y tantos otros entusiastas y apasionados como ha tenido en todos tiempos? También distamos mucho de creerlo asi, porque en varios de estos casos de éxito feliz atribuido únicamente á la trasfusion en-.
«miramos motivos poderosos para presumir que la curación fue, en unos mas bien debida a los remedios empleados, antes de practicar la operación, en otros á los solos
recursos de la naturaleza del enfermo muy suficientes pa/ ra superar una enfermedad poco grave, y en algunos á la
organización aventajada del enfermo, que pudo sobreponerse al mal y al medio, abiertamente contraindicado, de
la trasfusion con que se intentaba combatirlo. De todo esto pudiéramos citar ejemplos muy notables tomados de la
historia de la trasfusion, especialmente en el siglo XV11,
que fue mando estuvo mas en boga. Pero en medio de estos estremos exagerados y viciosos, no podemos menos de
reconocer que en una multitud de casos la trasfusion de la
sangre, obrando como un remedio heroico, ha vuelto á
la v,ida y á la salud á enfermos que, según todas las apariencias y el modo mus racional de discurrir, hubieran sucumbido infaliblemente sin el auxilio de osle remedio. Y
si procuramos inquirir el género de enfurmadades ó de estados morbosos en que la trasfusion es mas especialmente
útil y'ventajosa, que es lo que sobre todo interesa ala
ciencia y á la humanidad, lo encontraremos en las inaniciones que sobrevienen á consecuencia de las grandes pérdidas de sangre; y encontraremos también que la sangre
que mas conviene" inyectar es la de individuos jóvenes y
sanos de la mísm.. especio que el paciente; observándose
que la reunión de todas estas circunstancias, no solo ha sido coronada de un éxito el mas feliz en la gran mayoría de
los casos, sino que en manos de Doub.leday , "Waller, Dumas, Prevost y otros esperimentadores, ha producido resultados verdaderamente portentosos, resultados que si bien
se medita la preinserta observación, vemos reproducidos
y confirmados en la historia de la muger de Drieves que
nos ha comunicado su autor.
G. B.
del comercio, es el saturarlos por el ácido sulfúrico á 10.°,
y ver luego que cantidad de ácido ha sido absorvido' para
saturar dráema y media (por ejemplo) de estos cárbonatos.
Mr. Wistein indica, como preferible al ácido sulfúrico á
10.°, el ácido tártrico reducido á.polvo fino y secado aun calor suave, pero de un modo que sin perder su agua de cristalización pierda la humedad que hubiese absorvído.
Según dicho autor emplea.
1.° Para saturar cinco gramas de carbonato de potasa
seco, cinco gramas y cuarenta y cuatro centigramos de
ácido.
2.° Para saturar cinco gramas de carbonato de sosa seco,
siete gramas y sesenta y cinco centigramos de ácido.
3.° Para saturar cinco gramas de subearbonato de sosa
cristalizado, dos gramas y 625 miligramos de ácido.
Esta última cifra debe variar, por que se sabe que la
cantidad de agua varía en la sal de sosa cristalizada.
Modo &*• operar. Se pesa la cantidad necesaria de ácido, según que se quiere ensayar uno ú otro de los carbonatas; se añade el ácido por pequeñas porciones ala solución alcalina coloreada con una gota de tintura de tornasol; se calienta para desprender el ácido carbónico, y se
continúa añadiendo ácido hasta que el líquido tire á violado. Se suspende entonces la operación", y se vé que cantidad de ácido se ha empleado; si las cinco gramas ensayadas de carbonato de potasa han absorvido las cinco gramas
y cuarenta y cuatro centigramos de ácido, es prueba que
la sal está pura; si no absorve mas que dos gramas y setenta y dos centigramos, es señal de que no contiene mas que
cincuenta por,ciento de carbonato puro, y asi sucesivamente.
Se puede operar de otro modo mas exacto, haciendo
disolver 1.° las 5 gramas y 44 centigramos de ácido: 2.° las
7 gramas y 65 centigramos, ó bien las dos gramas y los 72
centigramos en suficiente cantidad de agua para llenar las
cien divisiones de un tubo graduado, y servirse de esta disolución , obrando en caliente,como seha dicho ya; de este modo se sabrá el valor real de la sal ensayada, sabiéndose si contiene, 5 0 , 7 5 , 80, ó 100, de carbonato puro.
Seria muy conveniente examinar este procedimiento,
que quizás fuera útil en un gran número de transaeiónes
comerciales.
fJournal de Pharm. du Midi,núm. 8.1843).
Itiel Clinker, nuevo agente
propuesto, por Mr. Conway J. Edtcards.
El Clinker no es mas que el residuo de la forja de los
herreros, cerrageros, fundidores, y varios otros que trabajan con carbón de piedra, asi que es aquella porción de
hulla que resiste á la combustión. Se diferencia de las cenizas ordinarias y del coka, asi por su aspecto exterior-, como por su peso específico y deméritos constitutivos. Como
medicamento indicado contra las enfermedades caquécticas , especialmente en lasmugeres,ha figurado hace algunos años en primera línea en la medicina popular de ciertos distritos manufactureros de Inglaterra, Escocia, Alemania y Suecia; y los escelentes resultados que se han obtenido con su'uso en varias dolencias, particularmente en
las afecciones cloróticás, hanhecho que seleconsidereeomo el especificó de ellas.
Preparación. El modo de prepararle es el siguiente: se
separan de las masas de Clinker las porciones mas azuladas
y las mas pesadas, reduciéndolas en seguida á polvo impalpable (operaciou que se halla esenta de dificultades, en razón
de la naturaleza metaloide de este producto). Luego se mezcía íntimamente una cierta porción de los polvos obtenidos
con suficiente cantidad de triaca, de modo que se pueda obtener una pasta algo consistente, añadiendo á cada ocho
onzas de esta mezcla tres dracmas y media de magnesia,
y otras tantas de gengibre pulverizado. Preparado el medicamento en esta forma presenta una vista repugnante,
pero se le puede dar una apariencia mas seductora reemplazando la triaca por miel, y añadiendo escrúpulo y medio
©e! sis© del aetdo tártrico cía. la Alcalt- de peróxido de hierro,
Administración. El modo de administrarle es tan senmetria; por Mr. Wistein.
cillo como su preparación; consiste pues en hacer tomar
' Todos saben que el modo de apreciar la cantidad de una cucharadita de café, tres dias seguidos, una por la maálcali que contienen los carbonates de sosa y de potasa ñana y otra por la noche; en seguida descansar otros tres;
FARMACIA, ESPER1MENTAL..
Capczuoü espiicó un método para averiguar la exislencia del azur.ir en la orina de los diabéticos, empleando los
reactivos (Se Taddei para diferenciar los azúcares. A la oriT
na recogida en vaso cilindrico ó cónico algo angosto, se
unen pocos granos do óxido de cobre hidratado y solución
de potasa cáustica en cantidad que haga el líquido sensiblemente alcalino. Agitado este y abandonado se enturbia
por l,i precipitación tíx" los fosfatos terrosos que se hallan
disueitos por e! ácido libre, y por el óxido de cobre que sa
halla suspendido. El líquido se aclara por la precipitación
y toma un color amarillo pálido que sube basU pasar
a color de a/ofaila. El precipitado á las veces se muestra
al principio de; color celeste y después azulado, pero pasadas algunas horas comienza á tomar un color amarillo dj
canario, que llega áiuvadir toda la masa, y antes que oslo suceda aparece de igual modo un color rojo que sustituye al anterior en parte ó totalmente. Las causas de estas,
gradaciones, son , dijo el inventor, la reacción del azúcar,
sobre el óxido de cobre que se reduce á menor grado do
a r o m á t i c a a l a m e d a , d e JPlas- oxidación del que tenia, y que recobra para ceder mas
oxíjeno, mientras que el azúcar se transforma en ácido
son.
fórmiej. Recordó Majocchi con este motivo un procedimiento físico, con el que se puede reconocer el azúcar en
tres dracmas.
K. Corteza de quina de losa.
la orina de los diabéticos, debido á üiol, aprovechando la
R;i¡/ de ruibarbo.
aa. dracma y media. polarización de la luz, mediante la cual se descubre, ci
Raiz de colombo.
azúcar en cualquiera liquido j su cantidad. Discutida la
Simiente de anís.
preferencia, se dio esta al procedimiento químico, no nedos esm'niu'os,
Hojas de agenjos,.
gándola al físico para determinar I» cantidad. -Vannoni
mi escrúpulo,
Magnesia pura.
comunicó cien esporimentos de los que cuarenta y cuatro
libra y media.
Agua común fría.
sirven para manifestar la existencia de la kicstlna en la,
Se quebranta la curte?» y las raices, se corlan en orina de las embarazadas en estado de salud, y los demás
pedazos pequeños las hojas, \ se hace macerar el iodo para probar la suspensión del fenómeno en caso de enferdurante doce horas: al cabo de este tiempo se cuela con medad y su retorno por la curación; y prometió nuevas,
observaciones f¡ue continuará haciendo en unión de Cozzi
expresión y se filtra por medio de un papel de eslr./a.
Esta preparación . cuya fórmula se debe al ÍS. IMisson, y Parlalorc, adviniendo que en estas investigaciones so
ofrece un medicamento* que al mismo tiempo de ser debe á Taddei la prioridad. Turchctti opuso haber hallado
agradable a! paladar es muy eficaz para los ca-os de la kieslina en los niños, eu las mugeres impúberes, y hasoiigotroíia de las vías digestivas. Se'le usa contra la dis- ta en los hombres. Se reconoció por consiguiente mas nepepsii y auorcfia que dependen de un estado de debilidad cesario repetir los análisis, considerándose decisivo el de
la orina del hombre, si demostrase la existencia de tal susdel aparato digestivo especialmente del eslónugo.
ISl modo de administrarlo es tomar tres onzas do esto tan.'ia. - Adorno habló de una sustancia amarillo-purulíquido un cuarto de hora antes de desayunarse y olro
antes de comer.
{Journal des decouvertes)
y luego volver á lo mismo y asi sucesivamente. Es preciso
intercalar ios tres días lie descanso; pues sino sobrevienen,
irritar iones gástricas muy inicnsas.
Según Cnnway y Wat-ion i!e Badén el elinlier goza en
mirv' ralio graiio de Lí propiedad corroborante y de unaactíoú lo omop'iyctica {coloriíiea); al mismo tiempo es uti
oscebnte tónico y antihelmíntico; conviene geneialmenL>
á los «ugelos leueoílemáticos : pero en los casos de dispepsia, de clorosis y de afecciones, escrofulosas, qstá contra
indicido, si existen signosde diátesis inflamatoria.
La cantidad de metal que el clinkes' contiene ,\aria considerablemente. El mejor se saca de los herreros y hornos
de fiuuiinon; y cimas pesado, v el mas rico en apariencia
inelá'ica es el que solamente debe emplearse; el que es ligero y de un color apizarrado es casi incrle.
{Diario de Farmacia del medio día).
le Tai-gioni, y de nuevo dijo (¡rigolalo haberla estudiado
notando que la Phiíljrea latifolia era empleada eu el
Polesiue cojnd aqtiperiódica. La sqliciw fue también ohQUINTO CONGRESO CIENTÍFICO ITALIANO. geto de tuieyós es,tuíljo,s. íiria, habló de las transformaciones de que es susceptible y dijo'ser compuesta, de azúcar d,e
uva, y de una sustancia cuyas propiedades descubrió, denominándola Salinjenina - El arsénico que el cólcotar del
í l
estract© del, «^¡pií^eaalís del, comercio tiene muchas veces, dio origen á accidentes de
Se. tolmeiro,acerca de lostrabajosde'dicho Congreso. q,ue habló Adorno, y á proposito délos compuestos de
hierro comunicó; que mezclado el sesquióxjdo hidratado
Varios é Interesantes son los puntos químico-médicos de hierro con miel y dejándole algún tiempo, el metal se
y toxicológicos que han sido tratados, algunos de ellos depaupera de oxíjeno que se une á la sustancia sacarina
nuevos. Luis Luciano Buonaparle, cuyos conocimientos di. la miel resultando de esto un ácido que forma can el
en las pacíficas ciencias hacen olvidar las ideas que su cé- hierro parcialmente oxidado una sal soluble. L(. L. Buonalebre nombre nos recuerda, manifestó las investigaciones parte cree que este ácido sea el fórmico , y diciendo Parola
que él había hecho sobre el vem.no de la víbora, del que que entre las sales de hi,erro debe preferiise como medicaaisló ti principio actiyo, que denominó echidnma ó vipe- mento el malato por ser muy soluble, manifestó Buonai Ina, considerándolo como un cuerpo azoado, no gompso, parte sq opinión de que como quiera que se administre el
muy análogo á ia ptialma de los mamíferos, con la que se hierro, debe pasar casi siempre en las primeras vias al ess.abe ¡iene de común ser produelo de la secreción de ór- tado de lactato, y en ello insistió á pesar de varias objecgano semejante. Tal ana'ogía dio origen á que Calamai in- ciones.
Otro procedimiento interesante también bajo el aspecvitase á hacer espenmentos para aislar el principio activo
de la saliva de los animales rabiosos. Comunicó Buonapar- to médico, que se debe al citado Taddei, es el que halló
te resultados obtenidos de la administración de la echidni- para determinar en la orina de los enfermos la cantidad de
na á algunos hidrofóbieos eu Florencia , bien que no con- moco. Emplea un cilindro de cristal para poner la orina
cluyentes, y afirmó por otra parte que e\ veneno do la que sujeta á examen. Toma una lamina de cobre del lar"\ íbora no tiene antídoto. En la sección de medicinase go de la mitad del c.hndro, que siendo antes oxidada con
manifestaron deseos de que se repitiesen ensayos sob.3 la un poco de solución de sal amoniaco ó de sal común, enacción de la eehidnina a pesar de haber antes reeordadp juga y pone en la orina, dejándola suspendida. Hace enGriffa que desde muy amigao la mordedura de ¡a víbora tonces observar que todo el moco de este líquido, dirijiénhabía sido empleada en la hidrofobia sin efecto, como su- dose sobre ¡alamina lorma, copos ligeros que poco á poco
cedió también en un caso reciente refunda por el prest- bajan al fondo y forman un poso bastante notable. Recojidente Speranza. (jiannelli, apoyándole en esperimentos rio este precipitado sobre filtro de papel lavado y desecapropios, comunicó que los órganos y humores de los ani- do, dala cantidad de moco que se busca.-Presentó Sbramales muertos por el ácido arsénico , dado á los aves y es- gid á la sección de Química el análisis de un polvo blanco
pecialmente á los mochuelos, producen osi cieríaaiente su ceniciento arrojado por un enfermo, demostrando ser compuesto d^ una materia amarilla propia de la bilis y de coenvenenamiento y muerte.
lesterina; y á la decirujia participó Cima haber hallado en dos con la inyección del nitrato de plata en cantidad meun^sugeto operado de la cistotonJa, en lugar de cálculos, nor de un grano por onza de agua, aumentando sucesivaeuatro cuerpos de forma varia y de tamaño mayor ó me- mente hasta el doblé, sin necesidad de otros medios*, emnor del de una avellana, compuestos de fosfato amoniaco- pleando la jeringuilla de Anel. Limitó Centofanti este mémagnesiano, jelatína y albúmina, que formaban el núcleo. todo á los tumores menores, creyéndole , cuando sea granLas causas que ocasionan la muerte de los operados j a - de,el desarrollo, peligroso por poder pasar á los vasos mamaron íá atención de la sub-seccion quirúrjica: Regnoli yores la inyeceion. Péllizari consideró esto difícil por la •
consideró como principal l i flebitis; Paecini invitó áhacer naturaleza cáustica de la susíáñciá empleada qué restrihje
investigaciones sobre la neuritis y recomendó el examen los vasos, a n o ser que hubiese un enorme desarrollo.
del método de muchos cirujanos alemanes, mas afortuna- En fin, no se estiende el método á los tumores de grande
dos en la curación secundaria de sus operados, y el presi- importancia, y se escluyen enteramente los ñévi materní
dente notó que debian tomarse en cuenta las circunstan- no inyectables. Aconsejó Turchetti que se repitiesen los
cias locales. Manifestó Borelli los deseos de una definición espéríméntos de Ducrit, introduciendo en IQS tumores
de las fiebres tifoideas dependientes de neuro-celebritis y eréctiles durantelaprimera edad el pus vacuno—Leyó Pepor defecto de inervación; y en finAenzi recordó que Pe- lliccia otra memoria en favor dé lá sutura, ségun él métotrunti réusa operar enfermos muy susceptibles de influen- do de Velpeau para las úlceras varicosas, y Centofanti se
cia moral. El Presidente, admitiendo la flebitis y las afec- declaro por la electro-puntura. Dijo Páccini haber visto alciones de ánimo, observó que existe en algunos indivi- gunos de los cincuenta casos recojidos por Rizzoli con la
duos tendencia á enorme formación de pus desproporcio- implantación de las agujas á lo largo de la vena á la disnado al formado en la parte cruenta, resultando abscesos éii tancia de una pulgada, dejándolas mas ó meiíos tiempo
las visceras, etc.-Pelliccia leyó una memoria sobre la fiebre según la correspondencia de la vehá misma al resentimientraumática estableciendo caracteres diferenciales entre la to flojístico deseado, y solicitó que se repitesen esperimenfiíebre nerviosa hiposténicá esencial y la fiebre nerviosa tos. Bellini prefirió ía electro*ácu-piintura á la acupuntuflojís/tica; mostró que la neuritis tiene los caracteres de la ra. Bini razonó sobre la ventaja dé la electricidad para
ataxia, y la flebitis difusa los de la adinárriia ; reflecsionó coagularla: sangré, y exortó áesteiidér la electro-acusobre la rebeldía de la flebitis; espuso la causa déla per- puntura al hidrocelé é hidrartrOse, con lá idea de que
niciosa que ataca á los heridos y comparó sus efectos con con el estimulo eléctrico se establezca la flogosis necesaria.
los de las miasmáticas graves.-: Borelli pidió á lá asamblea -Büréi se ocupó én una familia de tumores que llama jecaracteres diferenciales dé ía fiebre nerviosa, del tifo, de latinosos, comprendiendo el sarcoma pancreático de Aberla flebitis y dé la linfajióitis, y en particular de las fiebres nethy, los tumores linfáticos del hígado, los tumores
con algor recurente; y se aplazó la solución al congreso idatijíneos de las mamas de Gooper r el fungo compuesfuturo, en el que también se propuso hablar de la causa to de Porta, el cárcitrotná fasciéülad'b hialino de Muller,
ignota de muchas psoilis observadas sin orijen manifiesto. cistosarcoma filoideo de Valentín. Espuso sus caracteres y
£1 diagnóstico de los abscesos iliacos fue ilustrado por Li- admitió una variedad fibro-jelatinosa de dichos tumores;
nón; y de los tumores crccliles se promovió cuestión sobre pero promovida disensión; no convinieran algunos en que
si en estos tumores conjénitos es preferible la inyección en fuese tümóf jemiiíds» elgartóMípáhcVaáticóv
él envoltorio de vasos que los componen, á losotros méSe concluirá.
todos quírúrjicos que se conocen. Galli dijo haber curado
SOCIEDAD MEDICA GENERAL
Nota de los individuos que solicitan ingresa?' en la Sociedad Medica General dé Sócórroé Mutuos,
y se publica para que, si alguna persona tubiere conocimiento de cualquiera circunstancia por la cual
no deban ser admitidos en la Sociedad, se ruega lo ponga en noticia de la Comisión Central en el término dé un mes contado desde la fecha de este aviso j dirigiendo sus comunicaciones al secretario geN
neral que suscribe.
;
< .PRETENDIENTES. •
PUEBLO DÉ RESIDENCIA.
REMISIOM DEL
ESPEBIENTÍU
RECIBO EN SECRETA
KIA GENÉKAL
D e I»<BomiM®tt~piÑrwisaciaI d e ]Bas*cel0'ÍKá¿
Barcelona.
D.Tomás Soler y Mestres.
Juan Rabella.
Antonio Ribera.
M.'C.
M.G.
C.
Barcelona.
Barcelona.
Gracia.
D. PedroJosé Morey.
c.
Palma.
29 enero Í8M.. 2 febrero 1844.
1." febrero id. 5 id. id.
29 enero id. 2 febrero id.
Mallorca.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
6
id.
B e Sa e©SMisi®si ps'íü^Isieáal úc Ti
Tarragona.
D. Lorenzo Sarda y Masdeu.
C-
Canonja.
C o l i s i ó n pi'ssviEseáal de Zarago z a .
Teruel.
D. Joaquín Blasco y Grafulla;
Francisco Moré.
José Tomás Samper y Sánchez.
Tomás Elmas y Verdie.
F.
C.
C.
C.
Mora de Rubielos.
Tornos.
Miedes.
Sta> Eulalia dé Gallego.
3f ebrero id.
id.
id.
id.
id.
id.
id.
Madrid 8. de febrero de 1844. José Ramón Villalba—Srio. general.
S febrero id. ¿
id.
id.
id.
id.
id.
id.
—48—
COSIISIOM .PROVINCIAL VE MADRID.
Solicitudes presentadas en esta comisión en los dias que abajo se señalan pidiendo su ingreso en la Saciedad los profesores siguientes:
NOMBRES.
PROFESIONES.
PUEBLOS S>: QUE RESIDEN.
FECHAS DE PRESEXTAGIOS.
Provincia de Badajoz.
I). Juan Rodrigez Ledesraa.
c.
Castiblanco.
5 de febrero 1844.
Provincia de Madrid.
D. Lorenzo Rivera y González.
Patricio Lardies Alcalá.
Isidro Gu.tierez y Diego.
-c.
c.
c.
Madrid.
Madrid.
Madrid.
31 de enero 1844.
5 de febrero id.
7
id. id.
Provincia de Toledo.
D. Alejandro Fernández Alcarria.
Santiago Feliz Barrajon.
c.
G.
Candilla.
Torriios.
5 de febrero id.
id.
id. id.
La Comisión provincial de Madrid espera qué, si alguna persona tiene conocimiento de cualquiera circunstancia
por la que no deba ser admitido en la sociedad alguno de los individuos comprendidos en la anterior relación, lo ponga en conocimiento del secretario de la comisión en el término de un mes contado desde la fecha.—Madrid 8 de
Febrero de 1844.—El secretario, Bruna A güera.ERRATA. En el núm. anterior se puso la fecha de 11 de Enero en lugar de la de 1.» de Febrero
Este nuevo método curativo abraza casi todas las dolencias que aflijen á la humanidad. Ha sido ensayado con
un éxito singular en París, en Londres y en otras capitales
de Europa; y ha dado motivo á que en Francia, se plantee
un establecimiento donde curan con esté método los mas
BIBLIOTECA EWIBAlMEDICINA 1CÍEÜJ1A.
afamados profesores de la qiencia de curar del vecino reino.
Se ha repartido la entrega 74 de esta interesante publi- En Londres es tal su'voga qué se ha formado una sociedad
cación , que corresponde á la Patolojia interna de Mone- filantrópica con el objeto de propagarla por todos los meret, Fleuri, etc,, y con ella el folletín número 47 gratis dios posibles. Por manera que la hidropatía, después de
para los SS.,suscritores.
haber nacido y recorrido la Alemania, ha penetrado en
toda Europa. Los periódicos especiales de medicina y los
La 75 será de la misma materia.
Contiuúa abierta la suscricion á 6 rs. cada entrega en sabios mas distingidos en la ciencia, se han ocupado
Madrid y 7 en las provincias , franca de porte por el cor- muchas veces del examen de este método-curativo.
La obra que anunciamos está escrita para toda clase
reo .
Se suscribe en Madrid, en la Redacción, calle de los de personas, sus preceptos son sencillos y claros, y en ella
Caños, número 4 , cuarto principal; y en el despacho de está fijado el tratamiento especial de cada enfermedad. Su
los SS. viuda de Jordán é hijos , calle de carretas. En las cura es la de naturaleza, y por lo mismo la mas sencilla de
•
•
,
provincias , en las administraciones de correos y principa-r todas.
les librerías.
Atlas d e a n a t o m í a descriptiva^
p g j
fica y patológica del cuerpo humano y de medicina,
operatoria.
ANATOMÍA DESCRIPTIVA POR C. BONAMY.
-EXAUJEN ©BITICJ©.FILOSÓFICO:
DE
tloetriraas médicas homeopática J
alopática comparadas, entre sí; por D. Sebastian Coll,
profesor de medicina en esta Corte.
Ha salido ya la 2.a entrega de esta obra (única de su
clase hasta ahora en España) que entera, formará un vojumende4S0á SOOpáginas, en8.° marquilla, buen papel,
impresión correcta y esmerada, que se publica por entregas de 80 páginas, siguiendo abierta la suscripción en Madrid, librerías de.Cuesta, Calle Mayor; de Ríos, Calle de
Carretas; Villa, plazuela de Sto. Domingo.; y viuda de Razóla, Calle déla Concepción Gerónima. En las provincias
en todas las principales librerías, en las administraciones
de correos y estafetas.
El precio de cada entrega en Madrid, es de 4 rs. yon.
y 5 fuerade la corte franco de porte; en las provincias no
se recibirá suscripción por menos de 4 entregas V tomando
libramiento contra la administtacion principal de Correos
de esta Corte , valor "de 20 rs. á favor de D. José Sebastian
Coll, á quien se le dirigirá Calle de Bordadores, núm. 7,
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entrega en negro y 12 iluminida, y en las Provincias á 7
reales las primeras y 14 las segundas francas por el correo.
Se' suscribe en Madrid en la Redacion calle de los Caños
número4 cuarto principal, en el despacho de los Sres. Viuda de Jordán é Hijos calle de Carretas, y en las Provincias
en las Administraciones de Correos y principales librerías.
MAlHftID: IMPRENTA del BOLETÍN DE MEDICINA, á cargo de L. DELGKAS: calle de la Amnistía , www.S.