NEGOCIACIONES / EL OBJETIVO ES CERRAR LA MESA INDUSTRIAL El TLC entró en la recta final http://eltiempo.terra.com.co/hist_imp/HISTORICO_IMPRESO/econ_hist/200509-19/ARTICULO-WEB-NOTA_INTERIOR_HIST-2536556.html Se acelera el proceso para terminar la negociación en octubre. En esta cita deben definirse temas como la importación de productos usados y remanufacturados. Optimismo, preocupación, nerviosismo, rechazo, son los sentimientos más evidentes de quienes asisten desde hoy y hasta el viernes a la XII ronda de negociaciones del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Colombia, Ecuador y Perú con Estados Unidos. Ya nadie apuesta a que para concluir este proceso se necesiten más de dos rondas, incluida esta de Cartagena, pues se espera que aquí se cierren varias mesas, siendo la industrial la más importante y la que ha generado más sensibilidad en los últimos días. Para el presidente del Consejo Gremial, Luis Carlos Villegas, el ambiente y el estado de las negociaciones para la apertura de los mercados industriales de Colombia y E.U. son propicios para dar por terminado el trabajo en este sector. "Debemos aprovechar la ronda de Cartagena para el cierre de la mesa industrial", comentó el dirigente. Y aunque también hay optimismo oficial, el ministro de Comercio, Jorge Humberto Botero, y el jefe del equipo negociador, Hernando José Gómez, son más cautos públicamente y prefieren hablar de "hacer los mayores esfuerzos para cerrar la mesa de acceso industrial". Otros aires, sin embargo, se respiran en cadenas como la petroquímicaplastico, cuyos dos extremos hicieron planteamientos opuestos para eliminar el arancel del 15 por ciento a las materias primas: los productores pedían 10 años y un grupo de transformadores aspiraba a que fuera de inmediato. El Gobierno fue casi salomónico y le ofreció a E.U. -que el 29 de agosto lanzó una ofensiva para conseguir acceso inmediato al mercado industrial colombiano alrededor de seis años para el desmonte de aranceles que al instante fue rechazado por los empresarios de la cadena. Cada uno, en defensa de sus intereses, critica la posición oficial. Pero el mayor temor de diferentes empresarios es que Colombia resulte abriendo proporcionalmente más su mercado industrial que E.U. sin tener en cuenta las diferencias en los grados de desarrollo de sus respectivos aparatos productivos. Siendo así, dicen, el país llevaría las de perder en la negociación. Sin embargo, el presidente de la Andi y del Consejo Gremial señaló, al igual que el Ministro, que la negociación tiene unos principios fundamentales entre los cuales se destaca la asimetría: E.U. se abre más rápido que Colombia en el sector industrial. "El acceso inmediato debe ser más rápido para nosotros que para ellos. Mientras este principio general esté cubierto, lo importante es que en lo que no vamos a desgravar de una vez sea lo que tiene mayores necesidades de ajuste", manifestó Villegas. Botero destacó que otra regla de la negociación es la de no generar protecciones efectivas negativas, que es lo que ocurre cuando los productos finales se desgravan más rápido que las materias primas. No obstante esas declaraciones y apreciaciones tranquilizadoras, lo cierto es que estos mensajes no han logrado calar en diversos sectores empresariales tan profundamente como lo desean el Gobierno y el Consejo Gremial. Es el caso de subsectores como pinturas, tintas, algunos papeles de impresión, maderas, electrodomésticos, autopartes, hay inquietud por las señales enviadas por el Gobierno, que "no se sabe hasta dónde llegará" tras la idea de cerrar en Cartagena la mesa industrial, pues aún faltan definiciones en productos usados y remanufacturados, obstáculos técnicos al comercio, protección a los derechos de propiedad intelectual en el entorno digital, en solución de controversias, entre otros. El lío de los usados Además del cierre de las listas de desgravación, donde puede haber un ligero forcejeo por la ubicación de un pequeño pero significativo número de productos en las diferentes canastas (A, para los bienes de apertura tan pronto entre a regir el TLC; B, para los que la eliminación de aranceles se hará en cinco años; C, para los de plazo a 10 años, y los que se clasificarán en puntos intermedios), hay otras definiciones que deben redondearse para completar el ejercicio en la mesa industrial. La importación de productos usados, pedida por Estados Unidos, está en la redacción del texto final. Colombia defiende la inclusión de un mecanismo de control como la licencia previa (permiso previo para poder importar), que es permitida por la OMC con exclusión plena de los productos más sensibles, como autos, repuestos y ropa. Colombia, además, tiene una válvula de escape para el ingreso de bienes de capital y equipos usados que por su costo cuando son nuevos dificultan su compra por parte principalmente de las pymes. Otro asunto por definir es el de los remanufacturados (que para algunos son lo mismo que los usados con algunos arreglos). Lo que harían las delegaciones en Cartagena es ponerse de acuerdo en cuáles bienes clasifican en una lista única (el universo común de los andinos hasta ahora es de 292 partidas arancelarias de las cerca de 1.400 de interés estadounidense), de lo contrario cada país tendría su propio listado para la importación de remanufacturados. Si se superan esos puntos en Cartagena, la meta de finalizar las negociaciones en octubre se verá más cercana. A la capital estadounidense solo llegarían unos muy pocos pero sensibles temas: agricultura, medidas sanitarias y fitosanitarias, textiles, protección a medicamentos, biopiratería y conocimientos tradicionales. Una ronda con muchas expectativas El ministro de Comercio, Jorge Humberto Botero, confía en que en Cartagena se concreten las expectativas que tiene el Gobierno sobre avances en la mesa de medidas sanitarias y fitosanitarias, "porque el éxito de esta mesa es crucial para el tema agropecuario global". ¿Finalizarán las negociaciones de la mesa industrial? Nosotros nos aproximamos a ese cierre fieles al principio de reciprocidad asimétrica a favor de Colombia, que otros países como Chile y Centroamérica han obtenido y que nosotros también debemos alcanzar. La cadena petroquímica rechazó la oferta que el Gobierno le hizo a Estados Unidos. En los pocos casos en los cuales los integrantes de una misma cadena productiva no han logrado acuerdos corresponde al Gobierno tomar las determinaciones, buscando maximizar los intereses del país. ¿Cuál es la perspectiva en medicamentos? Me inclino a creer que Estados Unidos podrían estar dispuestos a moderar sus ambiciones, lo cual facilitaría el cierre de la mesa, dado el muy reducido margen de maniobra que Colombia tiene en ese capítulo. ¿Y contra la biopiratería? También tengo expectativas positivas sobre el avance de nuestras aspiraciones en biodiversidad y conocimientos tradicionales, que es de enorme interés para Colombia y los andinos y novedoso e inédito en estos tratados de comercio. JORGE CORREA C. Enviado especial de EL TIEMPO CARTAGENA