CRÉDITO DE VIVIENDA, VIVIENDA DE INTERES SOCIAL, LÍMITE DE COLOCACIÓN Concepto 2008043688-001 del 6 de agosto de 2008. Síntesis: A partir de diciembre de 2004 no existe obligación legal para los bancos de destinar un porcentaje de su cartera bruta de vivienda al otorgamiento de créditos para vivienda de interés social. No obstante, se encuentra vigente el “Segundo Convenio Intergremial para el Desarrollo de la Vivienda de Interés Social” celebrado por el Gobierno Nacional con instituciones como establecimientos bancarios, cajas de compensación, Fondo Nacional de Ahorro y entidades gremiales del sector para la financiación de vivienda de interés social, instituciones que colocarán para los efectos previstos un monto igual a un billón setecientos setenta mil millones de pesos. «(…) consulta si los bancos comerciales tienen algún límite en la colocación de créditos destinados a la financiación de vivienda, en especial si está vigente el límite contenido en el artículo 5º de la Ley 29 de 1945. Al respecto, proceden los siguientes comentarios: En primer lugar, es pertinente precisar que mediante la Ley 546 de 1999 se dictaron normas en materia de vivienda y se señalaron los objetivos y criterios generales a los cuales debe sujetarse el Gobierno Nacional, para regular un sistema especializado para su financiación. Así mismo, es importante señalar que dentro de las consideraciones contenidas en su exposición de motivos se tuvieron en cuenta como propósitos fundamentales, entre otros, el de establecer la normas generales, objetivos y criterios a los cuales debe sujetarse el Gobierno Nacional para regular un nuevo sistema de financiación de vivienda a largo plazo atado al IPC; diseñar instrumentos de crédito para el efecto, facilitando el acceso al crédito hipotecario en condiciones de equidad y consultando la capacidad de pago de los deudores; fomentar el ahorro destinado a la vivienda y otorgar a los establecimientos de crédito la necesaria flexibilidad en la estructuración de las operaciones activas y pasivas relacionadas con la concesión de los citados créditos. En ese sentido la reglamentación mencionada al referirse a su ámbito de aplicación, señaló en el artículo 1º.: “Esta ley establece las normas generales y señala los criterios a los cuales debe sujetarse el Gobierno Nacional para regular un sistema especializado de financiación de vivienda individual a largo plazo, ligado al índice de precios al consumidor y para determinar las condiciones especiales para la vivienda de interés social urbana y rural” (Negrilla extratextual). Bajo el escenario expuesto y atendiendo, además, lo dispuesto en el artículo 58 de la Ley 546 de 1999, según el cual la citada ley de financiación de vivienda rige a partir de su promulgación y deroga las disposiciones que le sean contrarias, en nuestra opinión consideramos que el artículo 5º de la Ley 29 de 1945, norma a la que hace referencia su escrito, no se encuentra vigente. De otro lado, conviene recordar que el artículo 28 de la Ley 546 de 1999, señaló la obligación de los establecimientos de crédito de destinar recursos a la financiación de vivienda de interés social, previendo que “Las entidades financieras deberán destinar anualmente, durante los cinco (5) años siguientes a la vigencia de la presente ley, como mínimo el veinticinco por ciento (25%) del incremento de la cartera bruta de vivienda al otorgamiento de crédito para financiar la construcción, mejoramiento y adquisición de vivienda de interés social” (negrilla extratextual). Como se observa la citada norma señaló un término de cinco años contados a partir de la entrada en vigencia de la mencionada reglamentación -lo cual ocurrió con su promulgación en el Diario Oficial 437827 del 23 de diciembre de 1999- que venció en la misma fecha del año 2004, sin que posteriormente se haya emitido por parte del Gobierno Nacional otra reglamentación sobre la materia. En ese sentido, a partir de diciembre de 2004 no existe obligación legal para los bancos de destinar un porcentaje de su cartera bruta de vivienda al otorgamiento de créditos en los términos de la norma citada en forma precedente. No obstante, conviene señalar que en la actualidad se encuentra vigente el “Segundo Convenio Intergremial para el Desarrollo de la Vivienda de Interés Social” celebrado entre el Gobierno Nacional, los establecimientos bancarios representados por la Asociación bancaria de Colombia, las cajas de compensación, el Fondo Nacional de Ahorro y las entidades gremiales del sector, entre otros, para la financiación de vivienda de interés social (VIS), suscrito el 2 de julio de 2008 -en relación con el cual puede adquirir mayor información en el Ministerio de Ambiente, vivienda y Desarrollo Territorial o en el Instituto Colombiano de Ahorro y Vivienda ICAV-, en cuya cláusula segunda se señala: “SEGUNDA- Financiación Complementaria. Los Establecimientos Bancarios representados por la ASOBANCARIA y el Fondo nacional de Ahorro - FNA, en adelante -LOS ESTABLECIMIENTOS-, colocarán recursos por DOS BILLONES DOSCIEN TOS MIL MILLONES DE PESOS en nuevos créditos para financiar la construcción, mejoramiento y/o adquisición de vivienda de interés social, de acuerdo con la definición establecida en la ley, de los cuales UN BILLON SETECIENTOS SETENTA MIL MILLONES DE PESOS serán desembolsados por los Establecimientos Bancarios y CUATROCIENTOS TREINTA MIL MILLONES DE PESOS serán desembolsados por el Fondo Nacional de Ahorro. “Parágrafo 1º. En las colocaciones a que hace referencia esta cláusula, tendrá prioridad la financiación de vivienda de interés social cuyo valor máximo sea hasta de 70 salarios mínimos mensuales legales vigentes (SMMLV), que de acuerdo con las normas vigentes se denomina vivienda de interés prioritario. “Parágrafo 2º. El cumplimiento de las metas en materia de financiación durante la vigencia del convenio estará sujeto a la existencia de la demanda efectiva en las modalidades previstas de desembolso, que supone la construcción de 81.000 viviendas nuevas, la demanda y oferta de 35.000 viviendas usadas y el desembolso de los subsidios asignados”. De la lectura de la cláusula transcrita se infiere con meridiana claridad que el convenio hace referencia específicamente a las instituciones que se involucran en el mismo y como tales señala a los establecimientos bancarios y al Fondo Nacional de Ahorro, los cuales colocarán para los efectos allí previstos un monto igual a un billón setecientos setenta mil millones de pesos. No obstante lo anterior, le sugerimos también acudir al Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, con el fin de obtener también su opinión al respecto. (…).»