23 LATERCERA Domingo 21 de agosto de 2016 MÁS QUE CIFRAS Nasdaq en puntos 6.000 var% en 2016 POR 4,61% MICHELLE LABBÉ 5.238,38 5.000 INFLACIÓN A LA BAJA, UNA BUENA Y MALA NOTICIA 4.000 ENE FEB MAR ABR MAY JUN JUL AGO L Acciones con mayor rentabilidad en el año 926,7 Magellan Petroleum Corp 615,8 Helios & Matheson Analytics Inc Ocean Power Technologies Inc 333,3 China Commercial Credit Inc 303,9 Globus Maritime Ltd 293,8 LA TERCERA * ¿PARA CORTO O MEDIANO PLAZO? Las recomendaciones de los expertos fluctúan entre el mediano y largo plazo. Desde Santander precisan que estas acciones se gestionan en un plazo mínimo de 12 meses, opinión que coincide con la de Bice. “Actualmente, las carteras recomendadas de Bice Inversiones tienen un posicionamiento estructural, de largo plazo, en acciones norteamericanas. Aun así, en el corto plazo hemos reducido levemente nuestro posicionamiento para favorecer las regiones emergentes”, acota Castillo. ¿PARA QUÉ INVERSIONISTA? * En opinión de Correa, este tipo de inversiones están orientadas hacia un perfil de inversionista que va de mo- derado a agresivo, mientras que Castillo plantea que “para clientes más adversos al riesgo, claramente la recomendación es tener un posicionamiento más acotado en acciones internacionales. En la actualidad, “en Bice Inversiones, para un perfil balanceado, estamos recomendando una exposición de 10,3% en acciones de Estados Unidos”, añade el ejecutivo. ¿CÓMO ACCEDER? * El acceso a esos mercados es una variable clave para los expertos. Se puede realizar mediante la compra directa de acciones, pero con una cuenta en el extranjero o a través de fondos mutuos que tengan como objetivo invertir en la Bolsa estadounidense o instrumentos pasivos que repliquen a un determinado índice accionario, como los ETF, en este caso del S&P 500. N a semana pasada, en medio de la efervescencia política y económica generada por la reforma de pensiones propuesta por la Presidencia, el INE publicó la variación del Índice de Precios al Consumidor, o sea la inflación del mes de julio, que alcanzó sólo 0,2% en el mes, después que a principios del mismo mes muchos esperaban que incluso fuera el doble. De este modo, la inflación medida en 12 meses a julio alcanzó un 4,0%, siendo ésta la primera vez en más de dos años que la inflación entra dentro del marco de expectativas del Banco Central. Esta baja en la inflación es una buena noticia para todos los consumidores, no sólo porque finalmente la inflación está volviendo al rango-meta del Banco Central, que es mantener una inflación entre 2,0% y 4,0% medida como variación en 12 meses, sino porque para el bolsillo de todos nosotros, los consumidores, implica que la tasa a la que crecen los precios de los productos que cada día compramos y consumimos está disminuyendo levemente y, por lo tanto, la tasa a la que nuestro ingreso medido en pesos pierde capa- cidad de compra está cayendo. O sea, estamos en una mejor situación. Lo anterior es especialmente cierto para aquellos que consumen la mayor parte de su ingreso, es decir, con menores tasas de ahorro, que corresponde a las familias de ingresos menores y, por tanto, es un gran éxito para el Banco Central. Pero como no todo lo que brilla es oro, ¡la baja en la inflación es también una mala noticia! La mala noticia es que una de las razones por las que está empezando a ceder la inflación, y la razón por la cual todos los analistas estiman que la inflación seguirá cayendo este año, tiene que ver con la poca fuerza del consumo interno en el país, es decir, la poca capacidad de compra de los chilenos, tanto por efecto del aumento en la tasa de desempleo, como por la baja en la tasa de crecimiento de los salarios, todo producto de una economía que sigue bajando su tasa de crecimiento y que, de acuerdo al mismo Banco Central, no se espera que recupere fuerza durante al menos este año. En efecto, la Unidad de Inteligencia de la Revista Economist, reconocida internacionalmente, acaba de publicar su proyección de crecimiento de la economía chilena para el 2016 y 2017, y el crecimiento de nuestro país alcanzaría las míseras tasas de 1,6% el 2016 y 1,8% el año 2017. Más aún, si examinamos las recientemente publicadas cifras de crecimiento económico del Banco Central, se observa que durante el segundo trimestre de este año, mientras el consumo de los hogares chilenos ha crecido sólo un 1,7%, el del gobierno lo ha hecho en 7,0%. Es decir, no sólo la fuerza del consumo en Chile está cayendo, sino que, además, el crecimiento del gasto en el sector público en vez de estar cayendo está creciendo más de cuatro veces el consumo privado. Finalmente, entonces, la baja en la tasa de inflación no era tan buena noticia, porque gran parte de ella se debió a que las condiciones económicas han seguido deteriorándose, afectando el empleo y salarios y con ello nuestra capacidad de compra. Yo, al menos, preferiría estar al otro lado de la balanza, luchando contra la inflación, porque nuestra economía está boyante, el desempleo bajando y los salarios reales no dejan de subir. Economista jefa de Econsult