TEMA II: ELASTICIDAD LINEAL 2.1 2.2 2.3 2.4 2.5 2.6 2.7 Introducción. Origen de las fuerzas de recuperación elástica. Origen atómico del módulo elástico Tensor de tensiones y tensor de deformaciones. Elasticidad lineal en materiales isótropos. Elasticidad lineal en materiales anisótropos. Métodos de medida del módulo elástico. 2.1 INTRODUCCIÓN Como vimos en el tema anterior, el régimen elástico se caracteriza porque las deformaciones son reversibles. Para que la deformación sea reversible es necesario que existan fuerzas de recuperación, que tiendan a devolver al sistema a su estado original. Estas fuerzas de retracción elástica, por tanto, devuelven a los átomos a sus posiciones de equilibrio originales. El comportamiento elástico puede ser lineal o no dependiendo entre otros factores del origen y naturaleza de dichas fuerzas de recuperación. En general, la respuesta elástica puede considerarse instantánea, de forma que nada más aplicar una cierta tensión el sólido adquiere la correspondiente deformación. Sin embargo, existe un tipo de comportamiento elástico en el cual existe un cierto retardo entre causa (tensión) y efecto (deformación), que implica una dependencia con el tiempo de la respuesta elástica. A este tipo de comportamiento se le denomina viscoelasticidad. Existe un tipo de fenómeno elástico adicional, que en realidad se verifica en mayor o menor medida en todos los sólidos y que se conoce como anelasticidad. En los materiales anelásticos la curva de descarga no coincide con la de carga de forma que la curva carga-descarga encierra una cierta área (se suele decir que la curva presenta histéresis). Este hecho denota que existe una disipación de energía en forma de calor durante el proceso de carga y descarga (de hecho la cantidad de energía disipada puede calcularse a partir del área encerrada en la curva). Este fenómeno es especialmente intenso en materiales no lineales y viscoelásticos. Este comportamiento es útil para amortiguar vibraciones o ruido pero no es deseable en otro tipo de piezas que deben transmitir esfuerzo ya que reducirían su eficiencia. El estudio de las propiedades elásticas es esencial para el diseño de estructuras y piezas, ya que en estas aplicaciones estructurales (vigas, espejos de telescopios y radioantenas) es necesario controlar la deflexión elástica. También es esencial en aplicaciones acústicas ya que las propiedades elásticas determinan la frecuencia natural de vibración del material y por tanto su capacidad para producir o conducir el sonido. En este tema analizaremos la teoría elástica que estudia la relación entre tensiones y deformaciones en el régimen elástico. Como ya hemos comentado, el régimen elástico suele limitarse a pequeñas deformaciones (<0.1 %) pero en algunos casos puede extenderse mucho más (> 500 % en el caso de algunos elastómeros). Estudiaremos los parámetros elásticos que describen el comportamiento de los materiales en este régimen y su relación con la estructura del material y, en particular, con la naturaleza del enlace atómico. 2.2 ORIGEN DE LAS FUERZAS DE RECUPERACIÓN ELÁSTICA Hasta ahora hemos limitado la descripción del comportamiento mecánico de los materiales a aspectos macroscópicos y fenomenológicos. En esta sección analizaremos los mecanismos microscópicos que son la base del comportamiento elástico, estudiaremos el origen físico de las fuerzas de retracción elásticas a partir de un análisis termodinámico del material. Consideremos una barra que se deforma un dl for efecto de una carga P que equilibra la fuerza de retracción elástica Fr. 1 l0 P Fr Fr P dl Si aplicamos a este proceso el primer principio de la termodinámica, la variación de energía interna U del sistema vendrá dada por: dU Q W con Q el calor absorbido y W el trabajo realizado por el sistema. Si el proceso es reversible (elástico) entonces Q TdS y considerando que W Fr dl pdV tendremos: dU TdS Fr dl pdV que teniendo en cuenta que la energía libre de Helmholtz, F, se define como F U TS , nos conduce a: dF SdT Fr dl pdV Es decir, se tiene que Fr F l dF dU TdS SdT Fr TV U l T TV S l TV Es decir, la fuerza de recuperación elástica (a T y V constantes) es igual al aumento de energía libre (F) del sistema por unidad de longitud y puede expresarse como suma de 2 contribuciones: Fr Fri Fre una fuerza de retracción interna o entálpica (debido a aumento en la energía interna, U), Fri U l fuerza de retracción entrópica (asociada a disminuciones en la entropía S del sistema), Fre T , y una TV S l . Es TV decir, la energía mecánica aportada al sistema por la fuerza o carga externa se emplea en aumentar su energía interna (mediante una modificación de las posiciones atómicas respecto al equilibrio) y/o en disminuir su entropía (es decir, en aumentar el orden de la estructura), en cuyo caso, parte de la energía se disipa en forma de calor. En las figuras se muestran las situaciones extremas en que domina exclusivamente una de las 2 contribuciones: cristal ideal (entálpica) y elastómero ideal (entrópica). En el primer caso la fuerza de retracción tiene un origen puramente energético y sería independiente de la temperatura. En cambio, en el segundo, la fuerza tiene origen entrópico y aumentaría con la temperatura. Demostración de la dependencia con la temperatura: 2 F Fr l TV De forma que si Fr T S l lV 2F Tl F función de estado con diferencial total exacta V 2F lT dF SdT Fr dl pdV V 0 , es decir si no hay componente entrópica (Fre= 0) TV Fr T S l TV 0 y la fuerza de lV retracción elástica no dependerá de la temperatura (esto no es estrictamente cierto, como veremos más adelante, porque el volumen no es estrictamente constante). Puede determinarse la importancia relativa de cada componente (entálpica vs. entrópica) representando la fuerza de retracción, o la tensión aplicada u T TV s TV , en función de la temperatura. La magnitud de la componente entálpica vendrá dada por la ordenada en el origen de la recta resultante y la componente entrópica por su pendiente. En las situaciones ideales (elasticidad puramente entálpica o entrópica) alguna de las dos magnitudes (ordenada en el origen o pendiente) será cero. Las expresiones anteriores nos permiten, además, escribir la ecuación de estado del sólido elástico: Fr U l T TV Fr T lV Además, puede establecerse una analogía entre el caso del elastómero ideal en tracción y el de un gas ideal en compresión: Para el gas ideal: TdS dU pdV nC v dT pdV dS p T S V nC v p dT dV de donde: T T T Análogamente, para el elastómero ideal se verifica: Fr Fre T S l TV Así, al igual que un gas ideal se calienta cuando se comprime, el elastómero se calienta cuando se alarga. La presión necesaria para comprimir un gas aumenta al aumentar la temperatura, análogamente la rigidez de un elastómero aumenta al aumentar la temperatura (aumenta la oposición a la deformación, aumenta Fr). 2.3 ORIGEN ATÓMICO DEL MÓDULO ELÁSTICO. En esta sección analizaremos lo que sucede a nivel atómico cuando el material se alarga e intentaremos deducir el valor del módulo elástico del material a partir del conocimiento de la energía potencial de enlace entre átomos. Consideremos la siguiente celda unidad cúbica: dF dr r0 dF d d Ed E d dF dF 1 dF d 2 E A r0 dr r0 dr d r0 3 r r0 Por tanto el módulo elástico puede calcularse como la derivada de la fuerza que puesto que estamos en el equilibrio será igual a la fuerza de recuperación elástica. Si consideramos elasticidad puramente entálpica, que es la dominante en materiales convencionales, entonces la fuerza de recuperación elástica no es otra que la fuerza de enlace entre átomos, y por tanto: 1 dF E r0 dr F r r0 dU dr 1 d 2U r0 dr 2 r r0 Donde U es la energía potencial de enlace, que considerando un potencial de Lennard-Jones (el más comúnmente empleado), vendría dada por la expresión: U A B rm rn Donde A, B, n, m son constantes que dependen del material y r es la distancia entre átomos. Entonces podemos calcular: d 2U A B m( m 1) m 2 n(n 1) n 2 2 dr r r B A 1 E m(m 1) m 2 n(n 1) n 2 r0 r0 r0 dU A B m m 1 n n 1 dr r r Entonces, considerando: U (r0 ) kT f dU dr 0m r r0 A r0 m A r0 m 1 B r0 n n B r0 n 1 A n Br0m n m 1 n n B kT f 1 r0 n B m 1 n kT f m r0 A kT f n / m r0 m n / m 1 n/m m r0 kT f 1 n kT n m r / 1 1 n / m 1 n(n 1) f 0 E m(m 1) m2 n 2 r0 r0 r0 kT f n(n m) nmkT f kT f nmkT f n/m n(n 1) E 3 m(m 1) E0 3 3 n / m 1 n / m 1 r0 n / m 1 r0 r0 Donde Tf es la temperatura de fusión del material, k es la constante de Boltzmann y es el volumen de la celda unidad. En definitiva, el valor del módulo elástico depende de la fuerza del enlace (que a su vez determina Tf) Por otro lado, al aumentar la temperatura (es decir, la energía térmica) las distancias de equilibrio, r0, entre los átomos aumentan como consecuencia de la asimetría del potencial de Lennard-Jones. Este fenómeno se denomina expansión térmica y, como consecuencia de él, dF dr decrece y, por tanto, el módulo elástico también r0 decrece. Esta disminución es prácticamente lineal y puede describirse de forma aproximada por la expresión: E T 1 a E0 T f donde E0 sería el módulo a 0 K (y que hemos calculado anteriormente) y a una constante de proporcionalidad que en la mayoría de sólidos está en torno al valor a = 0.5. Según esto, el módulo elástico en un material convencional se reduciría hasta entorno a un 50% cuando nos aproximamos a su punto de fusión. 4 2.4 TENSOR DE TENSIONES Y TENSOR DE DEFORMACIONES. En esta sección repasaremos los conceptos básicos de tensión y deformación, así como la notación tensorial de ambas magnitudes. 2.4.1 Tensor de tensiones Sea un punto P cualquiera del sólido elástico y consideremos un entorno plano de P, , contenido en un plano cualquiera que atraviesa dicho punto. Si f es la resultante de todas las fuerzas que actúan en el área , definimos como tensión en el punto P respecto al plano , el siguiente límite: σ π lim 0 f f de forma que el vector tensión es colineal con la resultante de las fuerzas que actúan en dicho punto y plano. Si el vector tensión es colineal con el vector unitario normal al plano, n, se dice que dicha tensión es normal; si está contenido en el propio plano se denomina tensión tangencial. Cualquier tensión se descompone en 2 componentes: una normal, n, y otra tangencial, , al plano. El vector tensión varía dependiendo del plano que consideremos, tanto en magnitud como en dirección y sentido, puesto que cambia la distribución de fuerzas en el entorno plano del punto. Esto indica que no se puede definir la tensión en el punto P con un vector, sino que se trata de una magnitud tensorial, el tensor de tensiones, que como veremos puede representarse por una matriz: σ T n Si consideramos un sistema de referencia cartesiano Oxyz centrado en P y de aristas dx, dy y dz entorno a dicho punto, según lo visto anteriormente, sobre tensión distinto, cuyas componentes normales serían paralelas a uno de los componentes tangenciales podrían descomponerse a su vez en las direcciones contenidos en cada cara. un paralelepípedo elemental cada cara actuará un vector ejes coordenados y cuyas de los 2 ejes coordenados . Denotaremos por ni o ii a las tensiones normales paralelas al eje i (con i =x,y,z), que serán positivas si son de tracción y negativas si son de compresión; y por ij a las tensiones tangenciales contenidas en el plano normal al eje j y dirigidas según la dirección i (con i, j =x,y,z). Estas tensiones tangenciales serán positivas si están dirigidas según el sentido positivo del eje i y negativas en caso contrario. Aplicando la condición de equilibrio mecánico al paralelepípedo se obtiene que para que el sólido no se desplace (ausencia de desplazamiento) las tensiones normales (y tangenciales) en caras opuestas deben ser iguales entre sí, pero con sentido contrario. 5 Por otro lado, para que el sólido no gire (ausencia de giro) los momentos deben ser nulos (Mx = My = Mz = 0), lo que implica que tensiones tangenciales deben ser iguales 2 a 2: xy yx yz zy xz zx A este resultado se le conoce como teorema de reciprocidad de las tensiones tangenciales y suele enunciarse de la siguiente forma: “Las tensiones tangenciales correspondientes a dos planos perpendiculares en la dirección normal a la arista de su diedro son iguales. Además, su sentido es tal que o bien ambas se dirigen hacia la arista o bien ambas se separan”: De acuerdo con estos resultados, de los 18 valores de los vectores tensión en las 6 caras del elemento paralelepipédico sólo 6 son independientes. Conocidos dichos valores es posible calcular el vector correspondiente a cualquier otra orientación: Sea un tetraedro elemental entorno a P como el de la figura: En la cara oblicua las componentes del vector tensión pueden expresarse en función de las 6 componentes independientes y de los cosenos directores () del vector unitario normal a dicha cara n=(). Las áreas de las caras del tetraedro paralelas a los planos coordenados son proyecciones ortogonales del área d y por tanto tienen valores d, dy drespectivamente. Para que el tetraedro esté en equilibrio la suma de las componentes paralelas a cada eje debe ser nula: x d xxd xy d xz d y d yxd yy d yz d z d zxd zy d zz d x xx y yx z zx xy xz yy yz σ T n zy zz Por lo tanto, el estado tensional de un sólido elástico queda determinado si se conoce el tensor de tensiones, [T], en todos sus puntos. Nótese que el tensor de tensiones es simétrico por efecto del teorema de reciprocidad de las tensiones tangenciales. 6 Cambio de sistema de referencia. Veamos como se transforma el tensor de tensiones si se cambia el sistema de referencia. Sea (R) la matriz de cambio de ejes (Es decir, una matriz que contiene por columnas las coordenadas de los vectores base del segundo sistema respecto al primero), entonces se puede ver que: σ ( R) σ * ( R ) 1 ( R )T T T R)T T ( R) n * σ* ( R) σ ( R) T n ( n ( R) n * T * donde las magnitudes con asteriscos están expresadas según el segundo sistema de referencia y las sin asterisco según el primero. Tensiones y direcciones principales. Cabe preguntarse si existe algún plano tal que el vector tensión es perpendicular a dicho plano. Si dicho plano existe, se verificará: σ T n n T I n 0 que desarrollado queda ( nx ) xy xz 0 yx ( ny ) yz 0 ( ) 0 zy nz zx Este sistema de ecuaciones que se denomina ecuación de autovalores del tensor, y es un sistema homogéneo (3 incógnitas y 3 ecuaciones) y por lo tanto tiene solución para determinados valores de que deben cumplir la siguiente condición de compatibilidad: ( xx ) xy yx zx ( yy ) xz yz zy ( zz ) 3 I 1 2 I 2 I 3 0 0 Las raíces de esta ecuación (denominada ecuación característica) son los valores propios de [T] que se denominan tensiones principales y las direcciones, los n=(), que son solución al sistema de ecuaciones para cada uno de esos valores se denominan direcciones principales. Las tensiones principales son independientes del sistema de coordenadas elegido lo que implica que los coeficientes I1, I2, I3 son invariantes: I 1 xx yy zz Invariante lineal (traza de T ) I 2 xx yy yy zz xx zz xy xz yz 2 I3 T 2 2 Invariante cuadrático Determinante de la matriz de tensiones T Por ser la ecuación característica de 3er orden, se puede garantizarla existencia de al menos una raíz no nula y una dirección principal de la matriz [T], aunque generalmente son 3. Ecuaciones de equilibrio interno y equilibrio en el contorno. Fijado el sistema de referencia Oxyz, las componentes de [T] en un punto serán función de las coordenadas de dicho punto. Sin embargo, los valores de dichas componentes no pueden ser arbitrarios, dependerán de las fuerzas aplicadas (fv). La condición de equilibrio estático establece que si (X,Y,Z) son las componentes de la fuerzas externas por unidad de volumen, fv, que actúan sobre el paralelepípedo elemental se cumple: 7 nx xy xz X 0 y z x yx ny yz 0 Y z y x zx zy nz Z x y z 0 Estas ecuaciones se denominan ecuaciones de equilibrio interno. Análogamente, para los puntos en el contorno del sólido, las ecuaciones de equilibrio toman la forma: X nx xy xz Y yx ny yz Z zx zy nz siendo fs=(6X,6Y,6Z) las fuerzas por unidad de superficie aplicadas en el contorno. Es decir, estas ecuaciones no son más que fs=. Sin embargo, las 3 ecuaciones de equilibrio (ya sea interno o de contorno) no bastan para determinar las 6 componentes de [T] en un punto dado (del volumen o la superficie) del material a partir del conocimiento de las fuerzas aplicadas. Para su cálculo es necesario considerar la deformación elástica del cuerpo. 2.4.2 Tensor de deformaciones Al actuar las fuerzas externas el sólido se deforma, las partículas modifican sus posiciones relativas. Sin embargo, no lo hacen aleatoriamente, sino que siguen unas leyes que dependen de una serie de propiedades del material. Sean dos puntos infinitamente próximos P y Q de un sólido sin deformar, tales que PQ=dr=dx i+dy j+dz k en un sistema de referencia Oxyz. Tras la deformación, el punto P se desplaza a la posición P’ y el Q a la Q’ de forma que P=PP’=ui+vj+wk y Q=QQ’=u’i+v’j+w’k Q Q dr P Q’ dr’ P P’ Teniendo en cuenta que los desplazamientos son muy pequeños (es decir, admitiendo que los desplazamientos u, v, w son infinitésimos de primer orden, continuos y con derivada continua) podemos expresar Q en función de las componentes de P y de sus derivadas, mediante desarrollo en serie de Taylor: u u u u dx dy dz z x y ' u u x v v v v v' v dv v dx dy dz v' v x y z w' w x w w w w w' w dw w dx dy dz x x y z u ' u du u Q P M dr 8 u y v y w y u z dx v dy z w dz z La matriz [M] puede descomponerse en suma de una matriz simétrica y otra antisimétrica: T T M M M M M D H 2 2 siendo u x 1 u v D 2 y x 1 u w 2 z x 1 u w 2 z x 1 v w , 2 z y w z 1 u v 2 y x v y 1 v w 2 z y 0 H 1 v u 2 x y 1 w u 2 x z 1 u v 2 y x 0 1 w v 2 y z 1 u w 2 z x 1 v w 2 z y 0 Calculemos ahora dr’ dr' dr Q P dr' dr M dr dr D dr H dr I H dr D dr Q P M dr La matriz [H] es una matriz hemisimétrica y por tanto representa un giro infinitesimal de sólido rígido. Por tanto, su aplicación no modifica las distancias relativas entre puntos (tampoco lo hace la traslación que se observa en la figura. Por tanto el movimiento sufrido se puede escribir como suma de una traslación más un giro más una deformación. Y al contrario que [H], la matriz simétrica [D] produce un cambio ([D]dr) tanto en la dirección como en el módulo del vector dr y por ello se denomina matriz o tensor de deformaciones. Se definen: x v u , y , x y z w , z xy u v , y x xz u w , z x yz v w z y De manera que el tensor de deformaciones queda de la siguiente forma: x D 1 xy 2 1 xz 2 1 xy 2 y 1 yz 2 1 xz 2 1 yz 2 z La matriz es simétrica y los elementos de la diagonal principal representan deformaciones longitudinales en las direcciones de cada eje. Por ejemplo, si estiramos un segmento dx en dirección x la deformación sería: l l0 u u dx u u x x dx x A su vez, las componentes ij representan deformaciones tangenciales o de cizalladura: En efecto, la deformación angular + que es lo representativo de la deformación a cizalladura vendría dada por: v v u x xy u x y tg y tg 9 Al igual que con las tensiones, también es posible definir un vector deformación según una determinada dirección o plano: dr' dr D dr dr dr' dr D dr dr ε D n Conviene destacar que la dirección del vector y correspondientes a un determinado plano o dirección n no tienen por qué coincidir. Al igual que para el caso del tensor tensión, podremos hablar de direcciones principales donde la deformación sea exclusivamente longitudinal, que se calcularán de forma análoga, resolviendo el correspondiente sistema de autovalores. Las direcciones principales del tensor de deformaciones coinciden con las del tensor de tensiones. 2.5 ELASTICIDAD LINEAL EN MATERIALES ISÓTROPOS. Veamos ahora las relaciones empíricas que relacionan tensiones y deformaciones en materiales isótropos (es decir, aquellos cuyas propiedades no dependen de la dirección en que las midamos). Como ya hemos mencionado, la mayoría de los materiales estructurales (metales, cerámicos, madera…) exhiben un comportamiento elástico lineal en las primeras etapas de carga. Es decir, se observa que estos materiales verifican la ley de Hooke. 2.5.1 Ley de Hooke. La relación lineal entre la tensión y deformación en una barra sometida a tracción o compresión uniaxial se expresa mediante la expresión: = E es decir, en dicho tramo las tensiones son proporcionales a las tensiones. La constante de proporcionalidad se conoce como módulo de Young, módulo de elasticidad o simplemente módulo elástico, E, del material. Este parámetro puede calcularse a partir de la pendiente de la curva en este tramo inicial, y nos da una idea de la oposición del material a ser deformado elásticamente (es decir, de su rigidez). Veremos otras magnitudes que caracterizan el régimen elástico lineal. 2.5.2 Coeficiente de Poisson. En el tramo elástico, la relación entre el alargamiento unitario y el acortamiento transversal unitario se mantiene constante y es una propiedad de cada material que se denomina coeficiente de Poisson: t l El signo menos se introduce para que el coeficiente sea positivo ya que las deformaciones transversales suelen ser de signo opuesto a las longitudinales. El coeficiente de Poisson es un parámetro adimensional y su valor es siempre inferior a 0.5 y generalmente está comprendido entre 0.2 y 0.4. Nota: como acabamos de ver, el hecho de que existan deformaciones en una determinada dirección no implica que existan tensiones en dicha dirección, por ello los vectores y no tienen por que ser paralelos. 2.5.3 Principio de superposición. Leyes de Hooke generalizadas. Las tensiones y fuerzas verifican el principio de superposición, por lo que “la deformación resultante de la aplicación simultánea de 2 o más sistemas de fuerzas es la suma de las deformaciones que producirían cada uno de los sistemas de fuerza por separado.” Aplicando este principio a un cubo sobre cuyas caras actúan diferentes tensiones, z la deformación en una dirección determinada, por ejemplo la dirección y, será la suma de la deformación longitudinal producida por la tensión y y de las deformaciones transversales producidas por x y z, que teniendo en cuenta la definición del coeficiente de Poisson nos conduce a: y x y y E 10 x E z E 1 y x z E y análogamente para las otras 2 direcciones: 1 x y z E 1 z z x y E x Estas expresiones se denominan leyes de Hooke generalizadas para el caso particular de que los ejes coordenados coincidan con los ejes principales, y relacionan todas las componentes de [T] y [D] en ese caso particular (en este caso sólo hay componentes en la diagonal principal: tensiones principales para [T] y deformaciones longitudinales para [D]). Veamos el caso más general en que el sistema de coordenadas Oxyz no coincide con la terna de direcciones principales Ox*y*z* y siendo [R] la matriz de cambio de coordenadas de Ox*y*z* a Oxyz. Entonces: ( R ) 1 ( R )T ε ( R) ε * ε ( R ) ε * ( R ) D * n * ( R) D * ( R) T n n ( R) n * D y análogamente: D ( R) D * ( R) T T ( R) T * ( R) T Que desarrolladas quedan: x 1 2 xy 1 xz 2 1 xy 2 y 1 yz 2 1 xz 2 r11 1 yz r12 2 r13 z 1 E x y z x r31 0 r32 r33 0 r21 r22 r23 0 1 y x z E y 0 r11 0 r21 r 31 1 z x y E z 0 r12 r22 r32 r13 r23 r33 y xx yx zx xy xz r11 yy yz r12 zy zz r13 r21 r22 r23 r31 x r32 0 r33 0 0 y 0 0 r11 0 r21 z r31 r12 r22 r32 r13 r23 r33 donde los rij son los cosenos directores de los vectores unitarios de un sistema respecto al otro. Desarrollando se tiene que: xx yx zx xy yy zy xz x r11 x r21 x r31 r11 yz y r12 y r22 y r32 r21 zz z r13 z r23 z r33 r31 r12 r22 r32 xx x r11 2 y r12 2 z r13 2 yy x r21 2 y r22 2 z r23 2 r13 xx x r31 2 y r32 2 z r33 2 r23 x r11 r21 y r12 r22 z r13 r23 r33 xy xz x r11 r31 y r12 r32 z r13 r33 yz x r21 r31 y r22 r32 z r23 r33 y análogamente para las deformaciones: xx x r11 2 y r12 2 z r13 2 2 2 2 yy x r21 y r22 z r23 r 2 r 2 r 2 xx x 31 y 32 z 33 1 r r r r x 11 21 y 12 22 z r13 r23 2 xy 12 xz x r11 r31 y r12 r32 z r13 r33 1 2 yz x r21 r31 y r22 r32 z r23 r33 11 de donde 1 1 1 x y z r11 2 y x z r12 2 z x y r13 2 E E E xx x r11 2 y r12 2 z r13 2 1 x r11 2 y r12 2 z r13 2 y z r11 2 x z r12 2 x y r13 2 E 1 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 xx r11 r12 r13 x r11 r12 r13 y r11 r12 r13 z r11 x r12 y r13 z E 2 Considerando que r11 r12 2 r13 2 1 por ser cosenos directores y que la traza es invariante, es decir que x y z xx yy zz , se obtiene: xx 1 xx x y z xx 1 xx yy zz E E Es decir, considerando todas las direcciones: xx yy zz 1 xx yy zz E 1 yy xc zz E 1 zz xx yy E (1) que son formalmente análogas a las expresiones correspondientes al sistema de ejes principales. Haciendo lo mismo para las tensiones de cizalladura: 1 2 xy x r11r21 y r12 r22 z r13r23 1 1 1 x y z r11r21 y x z r12r22 z x y r13r23 E E E 1 x r11r21 y r12r22 z r13r23 y z r11r21 x z r12r22 x y r13r23 E 1 xy r11r21 r12 r22 r13r23 x r11r21 r12 r22 r13r23 y r11r21 r12 r22 r13r23 z r11r21 x r12 r22 y r13r23 z E que considerando que r1 r2 r1 r2 r11 r21 r12 r22 r13 r23 0 conduce a 1 2 xy de donde se obtiene finalmente: 1 xy xy 1 xy E E 2 1 xy xy E G 2 1 xz xz E G 2 1 yz yz E G xy xz yz que junto con (1) constituyen las leyes de Hooke generalizadas ( G ) para el caso de un sistema de referencia E arbitrario y donde G es el denominado módulo de cizalladura, que tiene dimensiones similares a las 2 1 del módulo elástico (fuerza/superficie). Se verifica siempre que G < E y su valor depende exclusivamente del material considerado. También se puede obtener una expresión de la ley de Hooke para un estado de presión hidrostática. En este caso, por definición, independientemente de la orientación escogida, sobre las caras del paralelepípedo actuará siempre una misma presión p perpendicular a ellas, de forma que el tensor de tensiones vendrá dado por: 12 0 p 0 T 0 p 0 0 0 p El módulo de rigidez del material se define como B V p V con signo negativo para que B sea T positivo, ya que al aumentar la presión disminuye el volumen y viceversa. Entonces: p B V B V que es versión volumétrica de la ley de Hooke, y donde es la dilatación o deformación volumétrica unitaria, que puede calcularse como: dV 'dV dx' dy ' dz ' dxdydz dx ' dx x dx dxdydz (1 x )(1 y )(1 z ) dxdydz x y z dV dxdydz dxdydz p que teniendo en cuenta las ecuaciones (1) y que x y z p x y z (1 - 2 ) E conduce a : dV 'dV 3 p (1 - 2 ) dV E p E E B B 3(1 - 2 ) 3(1 - 2 ) Es decir, existe también una relación entre el módulo de rigidez y el módulo elástico y coeficiente de Poisson al igual que sucediera con el módulo de cizalladura, G. El hecho de que B ha de ser necesariamente positivo es precisamente lo que implica que el coeficiente de Poisson no pueda exceder el valor 0.5. Dicho valor corresponde al caso extremo de un material que deforma elásticamente sin cambio de volumen (es decir, un material infinitamente rígido en sentido volumétrico, un material incompresible). En estos materiales incompresibles se verifica que E 3G : 2.5.4 Ecuaciones de Lamé. Hasta ahora hemos calculado las deformaciones en función de las tensiones (leyes de Hooke generalizadas, pero el problema original era calcular las tensiones, así que debemos invertir esas expresiones. Si denominamos e xx yy zz y xx yy zz a los invariantes lineales de deformaciones y tensiones y sumamos las expresiones (1), leyes de Hooke generalizadas, se obtiene e 1 2 E y además, podemos reescribir (1) como: 1 1 1 xx xx yy zz xx yy zz xx xx (1 ) xx E E E 1 1 yy yy xc zz (1 ) yy E E 1 1 zz zz xx yy (1 ) zz E E y despejando las tensiones se obtiene: E E E xx xx e xx e 2G xx 1 1 2 xx (1 )(1 2 ) 1 e E yy E yy yy e 2G yy 1 E zz zz e 2G zz zz 1 Estas expresiones junto con xy G xy , xz G xz , yz G yz son las denominadas ecuaciones de Lamé. Donde G (también denotado como ) y son los denominados coeficientes de Lamé. 13 Es posible expresar las ecuaciones de Lamé en forma matricial, representando [T] y [D] como matrices columna de 6 elementos, según el siguiente orden en dichos elementos: 11, 22, 33, 23, 13, 12: 0 0 0 xx xx 2G 2G 0 0 0 yy yy 2G 0 0 0 zz zz · yz 0 0 0 G 0 0 yz 0 0 0 G 0 xz xz 0 0 0 0 0 0 G xy xy E T D T E D que no es más que la ley de Hooke en forma matricial, que invertida quedaría: xx 1 / E / E / E 0 0 0 xx 0 0 0 yy yy / E 1 / E / E / E / E 1/ E 0 0 0 zz zz · yz 0 0 0 1/ G 0 0 yz 0 0 0 1/ G 0 xz xz 0 0 0 0 0 0 1 / G xy xy 1 D T E -1 D E T Todo este grupo de ecuaciones que hemos visto se denominan genéricamente ecuaciones constitutivas. Como vemos, en todas estas ecuaciones aparecen exclusivamente 2 parámetros elásticos independientes. Esto es característico de materiales isótropos: sus propiedades elásticas quedan perfectamente definidas conocidos dos cualesquiera de sus parámetros elásticos (Nota: generalmente se escogen E y ), el resto pueden calcularse de forma sencilla: E, Par de módulos elásticos independientes E, G B,G B, E E E 9 BG 3B G G E 2 1 G G 3B( 1-2 21 B E 3(1 - 2 ) B B E (1 )(1 2 ) EG 3( 3G-E) E -1 2G (E-2G)G 3G-E 3B-2G 6 B 2G 2G B3 3B( 1-2 3 B(1+) ,G G( 3 2G G G 2G 3 G Las ecuaciones constitutivas, junto con las ecuaciones de equilibrio, permitirían calcular las tensiones y deformaciones en cualquier punto de un determinado material conocidas sus propiedades elásticas y las fuerzas que actúan sobre el material, es decir, resolver el llamado problema elástico. 2.5.5 El problema elástico. La aplicación más habitual de la teoría elástica es la resolución de un problema de contorno que se conoce universalmente como el problema elástico y que puede enunciarse del siguiente modo: 14 “Dado un sólido elástico continuo, homogéneo e isótropo, con constantes elásticas E y , para el que se conocen: -las fuerzas másicas fv que actúan en su volumen V, -las fuerzas superficiales fs en una región de su superficie exterior, S, y los desplazamientos u, v, w) en todos los puntos restantes de la superficie, se pretende determinar: a) En V, los desplazamientos u, v, w) y los tensores [T] y [D] en cada punto. b) En la superficie S, los desplazamientos en las regiones donde se conocen las fuerzas y, recíprocamente, las fuerzas en las regiones donde se conocen los desplazamientos.” La solución a este problema implica que las componentes del tensor de tensiones, [T], han de verificar las ecuaciones de equilibrio interno o las ecuaciones de equilibrio en el contorno, y que las componentes del tensor de deformación, [D], cumplan las condiciones de compatibilidad (que no se han estudiado, pero que básicamente garantizan la integrabilidad de las deformaciones para poder obtener los desplazamientos a partir de ellas). Existen varias formas de plantear este problema, de las cuales a continuación se describe brevemente la formulación en desplazamientos: Las ecuaciones de equilibrio interno pueden expresarse en función de las deformaciones utilizando las ecuaciones de Lamé. Además, ya que las deformaciones se definen a partir de los desplazamientos, estas ecuaciones pueden expresarse en la forma: nx xy xz 0 X x y z xy ny yz 0 Y x y z zx yz nz Z x y z 0 e 2G xx G xy G xz 0 X x y z u v w x , y , z , x y z Ec. Lamé G e G G 2 xy yy yz Y 0 u v u w v w x y z xy , xz , yz y x z x z y G zx G yz e 2G zz 0 Z x y z 2u u v u w u v w G G X G 2 0 2 x x y z y y x z z x x 2 v v w u v w u v 0 2G 2 G Y G y x y z z z y x y x y u w v w u v w 2w Z G G G 2 0 x z x y z y z x y z z 2 que, considerando la igualdad entre derivadas cruzadas, conduce a: 2u 2u 2u u v w 2 2 2 0 X G G 2 x x y z y z X G x G u 0 x 2v 2v 2v u v w G 2 2 2 0 Y G G 2 v 0 Y G y x y z y y z x 2 2 2 w w w u v w Z G G 2 w 0 0 G Z G x 2 y 2 z 2 z z x y z Estas expresiones reciben el nombre de ecuaciones de Navier. Multiplicando por los vectores coordenados unitarios y sumando, se obtiene finalmente f v G G 2 0 Esta igualdad es la denominada ecuación fundamental de la elasticidad, que resulta independiente del sistema de coordenadas elegido. Resolver el problema elástico, cuando éste se formula en desplazamientos, consiste en encontrar los desplazamientos que sean solución de la ecuación fundamental de la elasticidad, verificando las condiciones de contorno correspondientes. Una vez conocidos los desplazamientos, las deformaciones se obtienen por derivación y las tensiones a partir de las ecuaciones de Lamé. De entre los diversos métodos que pueden utilizarse para resolver esta ecuación cabe citar, por su importancia en la resolución de un gran número de problemas prácticos, el método de Galerkin (que suele ser el utilizados en muchos métodos numéricos como el de elementos finitos) y el de potencial de deformación de Lamé. 15 2.6 ELASTICIDAD LINEAL EN MATERIALES ANISÓTROPOS. En materiales monocristalinos, la respuesta elástica debe ser anisótropa ya que la fuerza que se ejercen entre los átomos depende de la dirección cristalográfica considerada. Analicemos la respuesta elástica lineal en este tipo de materiales. Definimos: 11 12 22 13 xx xy xz 23 yy yz 33 zz y 11 12 22 13 xx 23 33 xy yy 1 2 xz yz zz 1 2 1 2 Podemos generalizar la ley de Hooke en forma matricial a estos materiales de la siguiente forma: C ij cijkl kl o bien S ij sijkl kl donde [C] es el tensor (de 4º orden) de constantes elásticas (según la notación inglesa) o matriz de rigidez o stiffness (según la notación americana) y [S] es el tensor (tambien de 4º orden) de módulos elásticos (notación inglesa) o matriz de elasticidad o compliance (notación americana). Conviene notar que las letras estén invertidas en la notación americana y el significado con respecto al español (constante vs. módulo) está invertido en la inglesa. Al ser el material anisótropo, los valores de las componentes de [C]y [S] no serían los vistos anteriormente sino que serían en principio arbitrarios. En realidad, de las 81 componentes (34) de [C] y [S], sólo 36 son independientes entre sí ya que, por ser [] y [] simétricos, se cumple s ijkl s jikl s ijlk s jilk (e igualmente para [C]). Haciendo uso de esto y para simplificar, representaremos estos tensores elásticos como tensores de 2º orden de 6x6, haciendo la siguiente contracción de índices: 11 1, 22 2, 33 3, 23 4, 13 5, 12 6 y consideramos además los siguientes factores: s ijkl S mn (si m y n 1, 2, 3) s ijkl 12 S mn (si m o n 4, 5, 6) s ijkl 14 S mn (si m y n 4, 5, 6) y análogamente con [C]. Estos factores se introducen para tener en cuenta la multiplicidad de cada término y evitar que aparezcan factores numéricos en la ecuación. Ejemplo: 11 c11kl kl Einstein c11kl kl c1111 11 c1112 12 c1113 13 c1121 21 c1122 22 c1123 23 c1131 31 c1132 32 c1133 33 k ,l C 11 1 12 C 16 6 12 C 15 5 12 C 16 6 C 12 2 12 C 14 4 12 C 15 5 12 C 14 4 C 13 3 C 11 1 C 12 2 C 13 3 C 14 4 C 15 5 C 16 6 6 C1 j j C1 j j j 1 Utilizando esta notación, podemos expresar entonces la ley de Hooke generalizada como 1 C11 2 C 21 C 3 31 4 C 41 C 5 51 C 6 61 C12 C 22 C 32 C 42 C 52 C 62 C13 C 23 C 33 C 43 C 53 C 63 C14 C 24 C 34 C 44 C 54 C 64 C15 C 25 C 35 C 45 C 55 C 65 C16 1 C 26 2 C 36 3 C 46 4 C 56 5 C 66 6 16 y 1 S11 2 S 21 S 3 31 4 S 41 S 5 51 S 6 61 S12 S 22 S 32 S 42 S 52 S 62 S13 S 23 S 33 S 43 S 53 S 63 S14 S 24 S 34 S 44 S 54 S 64 S15 S 25 S 35 S 45 S 55 S 65 S16 1 S 26 2 S 36 3 S 46 4 S 56 5 S 66 6 De los 36 elementos de las matrices elásticas, sólo 21 son independientes porque, como vamos a demostrar, estas matrices también son simétricas: Calculemos la energía de un cristal deformado: W i d i (i 1,6, trabajo realizado por las fuerzas externas) dF i d i C ij j d i W F F C ij C ij j i j i F U TS dU Q W TdS W dF SdT W isotermo y al ser la energía libre de Helmholtz, F, función de estado: 2F 2F C ij C ji y análogamente S ij S ji . j i i j NOTA: La energía elástica por unidad de volumen se obtendría integrando: W C ij j d i 12 C ij i j 2.6.1 Efecto de la simetría cristalina. Dependiendo de la simetría del cristal, el número de constantes elásticas independientes se puede reducir aún más. Es decir, los únicos cristales que presentarían 21 constantes elásticas independientes serían los del sistema triclínico, que no presentan simetrías. Veamos un ejemplo de cómo las simetrías reducen el número de constantes elásticas. Consideremos un eje binario (giro 180º) según el eje a: por acción de este eje de simetría la dirección 3 se transformaría en -3, la 2 en -2 y la 1 quedaría invariante (1 1). Por tanto los elementos en la matriz de constantes elásticas se transformarían de la siguiente forma: 1 = 11 11 =1 2 = 22 (-2)(-2) = 22 3 = 33 (-3)(-3) = 33 4 = 23 (-2)(-3) = 23 5 = 13 1 (-3) = -13 6 = 12 1 (-2) = -12 c (3) b (2) a (1) C11 C12 C13 C14 C15 C 22 C 23 C 33 C 24 C 34 C 25 C 35 C 44 C 45 C11 C C 55 C12 C 22 C16 C11 C 26 C 36 C 46 C 56 C 66 C13 C 23 C14 C 24 0 0 C 33 C 34 0 C 44 0 C 55 =2 =3 =4 = -5 = -6 C12 C13 C14 C15 C 22 C 23 C 33 C 24 C 34 C 25 C 35 C 44 C 45 C 55 C16 C 26 C 36 C 46 C 56 C 66 0 0 0 0 C 56 C 66 donde los · representan constantes nulas y los ● constantes independientes. Es decir, sólo la presencia de un binario ha reducido el número de constantes independientes a 13 17 Veamos otro ejemplo con un eje cuaternario (giro 90º) según eje c: En este caso 1 2, 2 -1, 3 3. Por tanto: 1 = 11 22 2 = 22 (-1)(-1) = 11 3 = 33 33 4 = 23 (-1)3 = -13 5 = 13 23 6 = 12 2(-1) = -21 C11 C12 C13 C14 C15 C 22 C 23 C 33 C 24 C 34 C 25 C 35 C 44 C 45 C 55 C16 C 22 C 26 C 36 C 46 C 56 C 66 =2 =1 =3 = -5 =4 =-6 C 21 C 23 C 25 C 24 C11 C13 C 33 C15 C 35 C14 C 34 C 55 C 54 C 44 C 26 C16 C 36 C 56 C 46 C 66 donde los ● son constantes independientes, símbolos iguales indican constantes iguales entre sí, y donde * y ◦ son constantes iguales pero de signo opuesto. Por tanto un eje cuaternario reduce el número de constantes independientes a 7. Si tenemos varias operaciones de simetría debemos determinar la relaciones entre las constantes elásticas de manera independiente para cada una de ellas y luego combinarlas para obtener las relaciones completas del cristal. En la siguiente tabla se resumen los resultados de esta operación para los diferentes sistemas cristalinos: Según esta tabla, los cristales cúbicos sólo tienen 3 constantes independientes (C11, C44 y C12), una más que los materiales isótropos. De hecho, un cristal cúbico puede ser isótropo, pero para ello ha de verificarse que: 18 2G C11 , C12 y G C 44 , lo que implica que se tiene que verificar que C11 C12 1 . A este 2C 44 cociente se le denomina por tanto razón de anisotropía del cristal cúbico: cuanto más se aproxime a 1, más isótropo será el cristal (En una tabla de las transparencias se muestran algunos valores, y puede notarse que el W es isótropo). La matriz de módulos elásticos o matriz de compliance también tendrá evidentemente sólo 3 valores independientes, verificándose (basta con invertir las matrices): C11 S11 S12 , ( S11 S12 )( S11 2 S12 ) C12 S12 , ( S11 S12 )( S11 2 S12 ) C 44 1 S 44 Además, en cristales cúbicos es sencillo calcular el módulo elástico efectivo Ehkl en cualquier dirección [hkl] conocidos los cosenos directores () de la misma, aplicando la siguiente expresión: 1 Ehkl S11 2( S11 S12 12 S 44 )( 2 2 2 2 2 2 ) que también puede expresarse como: 1 Ehkl 1 E 100 1 1 3 E 100 E 111 2 2 ( 2 2 2 2 ) En general, en la mayoría de los cristales cúbicos E 100 E 111 , siendo ambos los valores extremos del módulo de Young del cristal. 2.7 MÉTODOS DE MEDIDA DEL MÓDULO ELÁSTICO. Finalmente, comentaremos brevemente algunos de los métodos más convencionales para determinar experimentalmente el módulo elástico de un material: - Ensayo de tracción uniaxial: Es el método más directo, calculándolo a partir de la pendiente del tramo lineal de la curva tensión-deformación. Sin embargo, en el régimen elástico las deformaciones son muy pequeñas y se requiere por tanto una extensometría muy precisa, así como un buen alineamiento de la probeta. - Ensayo de viga en voladizo (cantilever test): Es un método también muy simple consistente en medir la deflexión de una viga en voladizo cuando se le aplica una fuerza en su extremo. Esta configuración de ensayo provoca mayores desplazamientos y por tanto la medición es más sencilla. - Medidas de la frecuencia natural de vibración: El módulo elástico está directamente relacionado con la frecuencia natural de vibración de una barra (p.ej), a través de la expresión: E 16ML3 f 3d 4 2 Las técnicas de medida de la frecuencia natural de vibración requieren de sensores acústicos y son algo sofisticadas, pero se obtienen medidas de muy elevada precisión y exactitud (dependiendo de lo exactas que sean las medidas de las dimensiones de la muestra). - Medidas de la velocidad del sonido: La velocidad de propagación de ondas acústicas en un determinado medio sólido es directamente relacionada con el módulo elástico de dicho medio. Así, para ondas longitudinales se tiene: 19 VL E Medir la velocidad de propagación de ondas acústicas en un medio tampoco es inmediato, pero proporciona muy buenas medidas del módulo elástico. - Ensayos de indentación instrumentada: También es posible determinar el módulo elástico a partir de la pendiente de la curva de descarga en un ensayo de indentación instrumentada en el que se registra durante el ensayo la curva carga-profundidad de penetración del indentador: E* Con A a 2 1 dP 2 dh A h p tan 2 siendo el ángulo cónico efectivo 2 del indentador y donde h p ht Pt con 0.75 dP dh - Ensayos de indentación Hertziana: Los ensayos de indentación con esferas de radio r permiten registrar una curva tensión-deformación de indentación (presión media p0=P/a2 frente a la razón a/r) a partir de la medida del radio a de la huella residual en una secuencia de ensayos a carga P creciente. También en estas curvas se aprecia un tramo lineal cuya pendiente, m, está relacionada con el módulo elástico del material, según la expresión: 1 2 3 (1 2 ) m E 4 1 '2 4 3 m E' donde los valores E’ y ’ son los correspondientes al material del impresor y la aproximación corresponde a asumir un impresor infinitamente rígido. 20