166-12(4) Cámara Tercera de lo Penal de la Primera Sección del

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166-12(4)
Cámara Tercera de lo Penal de la Primera Sección del Centro: ciudad de San Salvador, a
las quince horas con cincuenta minutos del día veintiuno de Agosto del año dos mil trece
Por recibido el día catorce de agosto del año dos mil trece, procedente del Tribunal Tercero de
Sentencia de la Ciudad de San Salvador, el oficio número 3200 (Exp. 93-2013-1c), de fecha trece
de agosto del año en curso, juntamente con el proceso penal instruido en contra de NELLY
HERMELINDA V.V.D.M., […] por el delito de APROPIACIÓN O RETENCIÓN
INDEBIDA, regulado y sancionado en el Artículo 217 del Código Penal, en perjuicio
patrimonial de ARTURO FRANCISCO V.R..
Inconforme con la Sentencia Condenatoria dictada en audiencia de Vista Pública de Juicio
Ordinario, por el Honorable Señor Juez del Tribunal Tercero de Sentencia, licenciado MARTÍN
ROGEL ZEPEDA, el licenciado RUBÉN ANTONIO AVILÉS RAMÍREZ, interpone recurso
de apelación, en su calidad de Defensor Particular, representando los intereses de la imputada
NELLY HERMELINDA V. VIUDA DE
MENJIVAR, procesada por el delito de
APROPIACIÓN O RETENCIÓN INDEBIDA, regulado y sancionado en el Artículo 217 del
Código Penal, en perjuicio patrimonial de ARTURO FRANCISCO V.R..
A) FUNDAMENTO DE LA RESOLUCIÓN OBJETO DE ALZADA:
La causa sometida a la consideración de esta Cámara de Apelaciones fue tramitada en
proceso ordinario, realizándose audiencia de vista pública, a partir de las once horas con treinta y
cinco minutos del día catorce de junio del año dos mil trece, dictándose sentencia de condena en
perjuicio de la procesada, en fecha uno de julio del año dos mil trece, en cuyo fallo se decreta:
"...I CONDÉNASE a la acusada NELLY HERMELINDA V.V.D.M., de generales antes
expresadas en el preámbulo de esta sentencia en la calidad de AUTORA DIRECTA, del
delito calificado definitivamente como APROPIACIÓN O RETENCIÓN INDEBIDA,
previsto y sancionado en el art. 217 del Código Penal en perjuicio patrimonial de ARTURO
FRANCISCO V.R., a la PENA PRINCIPAL de TRES AÑOS DE PRISIÓN. II
CONDÉNASE a la acusada NELLY HERMELINDA V.V.D.M., de generales antes
expresadas en el preámbulo de esta sentencia, por la comisión del delito Calificado
Definitivamente como APROPIACIÓN O RETENCIÓN INDEBIDA, en perjuicio
patrimonial
de
ARTURO
FRANCISCO
V.R.,
al
pago
en
concepto
de
RESPONSABILIDAD CIVIL de la cantidad de CATORCE MIL SETECIENTOS
CUARENTA DÓLARES EXACTOS....V. Otorgase a la acusada NELLY HERMELINDA
V.V.D.M., de generales antes expresadas en el preámbulo de esta sentencia, por la comisión
del delito calificado definitivamente como APROPIACIÓN O RETENCIÓN INDEBIDA,
en perjuicio patrimonial de ARTURO FRANCISCO V.R., el beneficio de la SUSPENSIÓN
CONDICIONAL DE LA EJECUCIÓN DE LA PENA por el PERÍODO DE PRUEBA DE
DOS
AÑOS,
bajo
RESPONSABILIDAD
las
condiciones
impuesta
inherentes
consistente
en
consistentes
el
pago
en...(c)
de
cancelar
CATORCE
la
MIL
SETECIENTOS CUARENTA DÓLARES a la víctima ARTURO FRANCISCO V.R., en el
PLAZO de UN MES, siendo el plazo máximo para cancelar dicha cantidad, el día QUINCE
de JULIO DOS MIL TRECE... "
B) POSICIÓN DE LA DEFENSA:
Como efecto del fallo transcrito en el apartado anterior, el licenciado RUBÉN
ANTONIO AVILÉS RAMÍREZ, en su calidad de Defensor Particular, representando los
intereses de la enjuiciada NELLY HERMELINDA V.V.D.M., del delito calificado
definitivamente como APROPIACIÓN O RETENCIÓN INDEBIDA, previsto y sancionado en
el art. 217 del Código Penal en perjuicio patrimonial de ARTURO FRANCISCO V.R., formuló
su recurso de apelación, argumentando que el recurso es interpuesto A) por inobservancia o
errónea aplicación del artículo 144 CPP, ya que la fundamentación de la sentencia es insuficiente
y por otra inobservancia B) art. 400 numeral 5 CPP, ya que considera que la regla de la lógica de
la sana crítica se ha violentado y C) finalmente se ha violentado el artículo 399 CPP en cuanto a
la forma en que debe hacerse la reparación civil del delito.
C) ANALIZADO QUE HA SIDO EL PRESENTE PROCESO PENAL, ESTE TRIBUNAL
DE APELACIONES HACE LAS SIGUIENTES CONSIDERACIONES:
I) ANÁLISIS DE ADMISIBILIDAD:
El presente recurso de apelación se ha formalizado por escrito presentado por el
licenciado RUBÉN ANTONIO AVILÉS RAMÍREZ, en su calidad de Defensor Particular,
representando los intereses de la imputada NELLY HERMELINDA V.V.D.M., del delito
calificado definitivamente como APROPIACIÓN O RETENCIÓN INDEBIDA, previsto y
sancionado en el art. 217 del Código Penal en perjuicio patrimonial de ARTURO FRANCISCO
V.R., como sujeto procesal facultado para incoarlo, interpuesto dentro del plazo legal establecido
y contra una resolución judicial recurrible de conformidad a los arts. 468, 469 y 470 CPP.
Del contenido de la apelación presentada se logra advertir que los motivos alegados de
inconformidad por parte del impetrarte son inobservancia o errónea aplicación del artículo 144
CPP, ya que la fundamentación de la sentencia es insuficiente, inobservancia del art. 400 numeral
5 CPP, ya que considera que la regla de la lógica de la sana crítica se ha violentado y finalmente
se ha violentado el artículo 399 CPP en cuanto a la forma en que debe hacerse la reparación civil
del delito.
En cuanto a su expresión de solución, el apelante considera que al hacer un análisis, la
honorable Cámara que conozca de la presente alzada deberá en su momento oportuno declarar ha
lugar su pretensión y consecuentemente revocar o modificar la sentencia pronunciada por el
Juzgado Tercero de Sentencia, debiendo emitir la sentencia en donde se absuelva a su defendida
de los hechos que se le atribuyen y de ser modificada la misma en cuanto a lo que respecta el
resarcimiento de la acción civil se haga a través de los tribunales competentes, pues no
corresponde al juez sentenciador la efectividad de la misma y se le de la motivación que
corresponda.
Ahora bien, del examen realizado por esta Cámara, se desprende que pueden identificarse
específicamente los motivos de agravio, las disposiciones que se consideran infringidas, el
razonamiento que sustenta tal postura y la solución aplicable, por lo que el recurso cumple con
los requisitos legales exigidos, por lo que en consecuencia de ello SE ADMITE LA
APELACIÓN en los términos delimitados previamente.
II) ANALISIS JURÍDICO:
Del estudio del recurso interpuesto, así como de la sentencia objeto de impugnación, se
tiene:
MOTIVO DE IMPUGNACIÓN.
I. La parte apelante sustenta que en la sentencia objeto ha existido una inobservancia o errónea
aplicación del artículo 144 CPP ya que la fundamentación de la sentencia es insuficiente.
La disposición legal citada establece para el Juzgador la obligatoriedad de fundamentar, el
cual se vuelve un requisito insoslayable que debe contener toda resolución judicial, obligación
que se vuelve más exigible cuanto mayor sea el contenido decisorio de la resolución, lo cual se ve
reflejado principalmente en la sentencia de fondo, con el objeto de lograr una aplicación razonada
del derecho que exprese las razones que han llevado a adoptar una determinada decisión y no otra
en el conflicto que todo proceso supone.
La fundamentación de acuerdo a la jurisprudencia española en la sentencia del Tribunal
Constitucional Español (SSTC 237/1997, del 22 de diciembre, 36/1998, de 17 de febrero), se
entiende cumplida cuando se facilita al justiciable "las razones por las cuales se adopta la
decisión hecha constar en su parte dispositiva", puesto que deben exteriorizarse en la
fundamentación de la resolución las razones determinantes del fallo.
Se concretiza entonces la fundamentación tanto en la prueba practicada como a la norma
jurídica aplicable a través de la valoración de la prueba los hechos cuya acreditación será la
premisa de la que deba partirse para la aplicación del derecho, y que el juez en cumplimiento y
sumisión a la ley, no puede ser arbitraria, caprichosa sino razonada.
Señala el impetrante en lo relativo a que la Sala de lo Penal de la Corte Suprema de
Justicia sostiene que la sentencia debe contener 1. Fundamentación fáctica, 2. Fundamentación
probatoria o descriptiva, 3. Fundamentación probatoria analítica o intelectiva, y 4.
fundamentación jurídica, indicando que no se ha cumplido la tercera de ellas, puesto que en
síntesis expresa que el tribunal sentenciador ha dado más credibilidad a las aseveraciones hechas
por el testigo víctima señor ARTURO FRANCISCO V.R. y a las otras dos testigos de cargo,
cuando han existido contradicciones en sus deposiciones, así como también en el argumento siete
se afirma que su defendida no entregó el dinero que ADMINISTRABA a la víctima, siendo que
no se sabe cómo pudo concluirse la calidad de administradora de ésta del señor ARTURO
FRANCISCO V.R., pues de ser así se estaría ante otro ilícito.
Al respecto debe partirse en primer lugar que la sentencia emitida por el Tribunal Tercero
de Sentencia de esta ciudad, ha establecido en el apartado relativo a la fundamentación jurídica
sobre el delito acusado y valoración de la prueba destilada en juicio, apartado denominado
fundamento jurídico número dos, se destaca que el Juzgador ha valorado para tener por cumplido
los elementos del tipo penal acusado, en primer orden la declaración de la víctima ARTURO
FRANCISCO V.R., quien en su deposición refirió que vivió en Estados Unidos, pero que antes
de salir para este país se puso de acuerdo con su hermana NELLY HERMELINDA V., que le
mandaría dinero para que le abriera una cuenta en el banco, que cada mes le enviaba dinero por
Wester Union a nombre de su referida hermana por la cantidad de QUINIENTOS DÓLARES, y
que a la fecha hacen la cantidad de CATORCE MIL SETECIENTOS CINCUENTA DÓLARES,
y al regresar al país por motivos de estar enfermo, fue a casa de NELLY para que le devolviera o
entregar el dinero, pero esta no se lo dio sino que se lo daría después, le dijo que se lo entregaría
en el mes de mayo, fecha en la que esperaba obtener dividendos de la compañía Del Sur, paso el
tiempo y no le entregó el dinero, luego dijo que en agosto y no se lo entregó, la enjuiciada le dio a
entender que el dinero lo había gastado en una Coaster que tenía en la ruta 11 B.
Que los elementos probatorios aportados por el testigo víctima corresponde a la fundamentación
descriptiva y que configuran el tipo penal de APROPIACIÓN O RETENCIÓN INDEBIDA que
prescribe el art. 217 CPP; se afirma también por el Juzgador que dichos elementos se corroboran
con el resto de la prueba destilada, ya que en el caso de las testigos ALBA ROCIO R. V., quien
es hermana de la víctima, es una testigo de referencia de los hechos, pero que orienta en cuanto a
la relación de confianza que existía entre la víctima y la acusada, ya que el señor ARTURO
FRANCISCO V.R., pensó que por la situación económica de la señora NELLY HERMELINDA
V., no se gastaría el dinero.
De la misma manera la testigo NUBIA ESMERALDA R. V., manifestó que conoce las relaciones
personales entre la víctima y la enjuiciada, al grado de confiar aquel en ésta de que le guardara el
dinero que le enviaría del extranjero, pero que esta relación de confianza se vio modificada
cuando regresó su hermano y NELLY no le entregó el dinero, testigo que según el tribunal
sentenciador, es relevante para fortalecer el dicho de la víctima sobre la confianza que existía
entre la víctima y la imputada que llevó a que le enviara dinero y este dinero no se lo entregó
NELLY.
Además de estas deposiciones, las aseveraciones de la víctima y las testigos ya
mencionadas ARTURO FRANCISCO V.R., se ven corroboradas con la prueba documental
aportada consistente en los recibos de fs. 13 al 43, con los que el Juzgador argumentó en la
sentencia de mérito que la imputada NELLY HERMELINDA V.V.D.M., ha adecuado su
comportamiento al tipo que regula el art. 217 CPn., como APROPIACIÓN O RETENCIÓN
INDEBIDA, por cuanto la víctima ARTURO FRANCISCO V.R., se puso de acuerdo con
NELLY HERMELINDA, para que le enviará el primero dinero desde los Estados Unidos para
que se lo guardara en una cuenta bancaria y que al retornar del extranjero se lo devolviera,
resultando que cuando vino a El Salvador la víctima en mención, la imputada no le entregó el
dinero, se apropió de éste y eso le ha provocado un perjuicio económico consistente en la
cantidad de CATORCE MIL SETECIENTOS CUARENTA DÓLARES.
Cabe mencionar que no ha existido prueba en contrario que desvirtúe las aseveraciones de
la víctima y las testigos que desfilaron en la vista pública, razón por la que para este tribunal de
alzada, si se ha fundamentado la sentencia de mérito venida en apelación, pues se ha establecido
por el juez a quo que si se ha fundamentado los motivos por los que se llegó a la conclusión en
cuanto se han acreditado y corroborado todos y cada uno de los elementos del tipo penal acusado,
no siendo por ello atendible la falta de argumentación alegada por la defensa de la enjuiciada en
este caso, puesto que si se ha expresado los motivos por los que se le ha dado credibilidad a la
víctima y testigos, haciendo constar además que las contradicciones que se han alegado, no
constituyen serias incoherencias entre sí que pudieran llevar a inferir que el resultado pudo ser
otro y no al que se llegó por el juez sentenciador.
Al referirse el juez a quo en el fundamento jurídico número 7, que la acusada no entregó
el dinero que administraba de su hermano, cabe mencionar por una parte que el término aludido,
según comentarios al delito de la Apropiación Indebida, el Código Penal Español, Editorial
Colex, Madrid, 2001, pág. 679, explica que los elementos que constituyen el tipo penal que el
núcleo de la conducta o actividad está integrado, por el recibimiento del dinero o cualquier otra
cosa mueble en virtud de cualquier contrato de depósito, comisión o administración o por otro
título que produzca la obligación de entregarlos o devolverlos, con los que se sigue el criterio de
numerus apertus, poniéndose de relieve el carácter objetivo de este condicionamiento, aunque
sirva de base a la fundamentación del delito el quebrantamiento del abuso de confianza que el
acto lleva intrínsecamente.
Con base a ello que las cantidades que fueron enviadas por el señor ARTURO
FRANCISCO V.R., desde el extranjero con el objeto de que su hermana la señora NELLY
HERMELINDA V.V.D.M., se los guardara para entregárselos a su regreso, no es una actividad
ajena a la administración de dichos fondos por cuanto se depositaban en una cuenta bancaria a
nombre de dicha imputada, la cual naturalmente estaba a disposición de ella y por tanto a la
forma en como la administrara.
Por las razones antes esgrimidas el motivo expuesto considera este Tribunal de alzada que
si se han dado argumentado la valoración de los elementos de prueba a los que se ha hecho
alusión, que son acompañados de un breve, sencillo, pero claro y expreso análisis de cómo estos
han inferido en el convencimiento intelectivo del Juzgador y propiciado con ello la emisión del
fallo de condena.
II. La parte apelante sustenta que en la sentencia objeto ha existido inobservancia del art. 400
numeral 5 CPP, ya que considera que la regla de la lógica de la sana crítica se ha violentado.
De lo anterior esta Cámara de Apelaciones considera necesario aclarar, que la
fundamentación probatoria requiere por parte del juez sentenciador, un examen integral de la
prueba vertida, el mismo debe ser llevado a cabo tal como lo establece el artículo 179 del Código
Procesal Penal conforme a las reglas de la sana crítica, en ese sentido, dicho estudio debe ser
motivado por medio de un razonamiento intelectivo concatenado que permita controlar la
secuencia lógica de los parámetros seguidos por el tribunal de juicio para emitir el fallo
respectivo, de tal manera que la simple cita de cada elemento probatorio vertido en la vista
pública no puede ser visto como una fundamentación judicial suficiente.
El impetrante precisa en síntesis que se ha violentado la sana crítica en cuanto a las reglas
de la lógica, pues en relación al elemento del título que produzca la obligación de entregar o
devolver la cosa, no se da mayor explicación en la sentencia, pues en el numeral uno de la
fundamentación jurídica se menciona en forma somera sin entrar en detalles de cómo se tiene por
acreditada la existencia de dicho título, cuestionando a cuál es el título, lo cual es importante
porque permitiría saber cuándo se debe entregar la cosa y cuál es la forma de restituirla, ya sea en
partes o en un solo tracto, agrega que ya que la legislación penal no establece el concepto de
título , y no sabemos a qué clase de título se refiere, es por ello que se recuerre al concepto y
características brindadas en el Código Civil y Código de Comercio, específicamente los arts. 623,
625 del Código de Comercio.
Agrega que si bien la legislación no brinda una definición de título que es el antecedente
jurídico, o el hecho que sirve para constituir o transferir el dominio. El antecedente en el que se
funda el dominio o la posesión (en algunos casos, aun cuando el título es apto, por diversas
razones no transferirá el dominio, más siempre habilita para comenzar a poseer.)
Se determina que en nuestra legislación civil requiere que los títulos deben inscribirse en el
Registro de la Propiedad art. 686 C.C., de ahí deviene el concepto JUSTO TÍTULO, y debe
entenderse por éste aquel que por su naturaleza es apto para atribuir el dominio.
a)
Título constitutivo de dominio: el Código se refiere aquí a los modos de adquirir el
dominio, originarios, y los enumera. Ocupación, Accesión y Prescripción.
b)
Título Traslaticio de dominio: "Los que por su naturaleza sirven para transferirlo como
la venta, la permuta, la donación entre vivos. "Tanto los títulos justos como los injustos, habilitan
para adquirir la posesión (regular o irregular dependiendo si el título es justo o no), y en último
término en el dominio si concurren los requisitos legales.
Concluye en este aspecto el impetrante que ninguno de los antes mencionados se encuentra
en la carpeta judicial sea título valor o título de carácter civil, por lo que cabe la interrogante cuál
es el título que el Juzgador valoró al momento de imponer una condena, pues lo único que consta
es una cadena de recibos de envíos de dinero que no reúnen los requisitos para ser considerados
títulos, no pudiendo asumirse la existencia de títulos verbales que se desprenda de la deposición
de las personas, y por tal razón se considera que no se ah valorado correctamente los elementos
probatorios que desfilaron en la vista pública, pues se le ha dado mayor valor probatorio a las
deposiciones de los testigos que no constituyen el título que requiere el artículo para que se
constituya el delito sancionado.
Respecto a lo antes relacionado, cabe realizar el análisis respectivo tanto de los elementos
del tipo penal de APROPIACIÓN O RETENCIÓN INDEBIDA, regulado en el art. 217 del
Código Penal, como si se ha establecido en la sentencia que se han llenado los elementos del
mencionado tipo por el sujeto activo.
En primer orden se tiene que el bien jurídico protegido es el derecho de propiedad. Esta
afirmación no presenta problemas cuando la apropiación indebida afecta a objetos específicos, sí
existe tal problema cuando el objeto material del delito son cosas fungibles y, en especial, el
dinero, porque el que recibe estas cosas fungibles, con obligación de entregar o devolver su valor,
adquiere la propiedad de lo que recibe, pero con la obligación de devolver o entregar la misma
cantidad. Por eso, si se acepta que se puede cometer delito de apropiación indebida respecto de
cosas fungibles, habrá que aceptar que lo que se protege no es el derecho de propiedad sobre tales
cosas, sino el derecho al valor económico representado por las mismas. Por tanto, en estos casos
en los que los objetos materiales son bienes fungibles, el centro del delito viene a ser la
disposición abusiva de valores patrimoniales y el bien jurídico pasa a ser la protección de
determinados derechos de crédito, lo que obliga a adoptar determinadas cautelas para no
convertir este delito en un supuesto de prisión por deudas.
Ahora bien respecto de los requisitos subjetivos para ser sujeto activo es necesario que en
una persona concurran dos circunstancias: que tenga el objeto material bajo su poder o custodia y
que lo tenga por uno de los títulos mencionados en la ley. En relación al primero de ellos es
necesario que el objeto se encuentre bajo las capacidades de actuación o conservación del sujeto
activo, cumpliéndose el requisito cuando le haya sido previamente entregado, y también cuando
ya tenía la cosa porque era su dueño y, tras dejar de serlo, sigue manteniendo la posesión y los
supuestos de ficción jurídica de entrega.
En relación al segundo requisito para que haya delito, tiene que haberse producido por
alguno de los motivos o títulos a los que hace referencia la ley, es decir, cualquiera que produzca
obligación de entregarla o devolverla, ella misma o su valor, tratándose de una relación abierta.
Son todos los títulos que hacen que el sujeto activo tenga la posesión de la cosa, pero no la
propiedad, criterio que es válido mientras nos refiramos a bienes no fungibles, pero que hay que
matizar cuando hablamos de bienes fungibles, pues en éstos, como ya vimos, al tomar la posesión
de los mismos, se adquiere también la propiedad. En general, no son títulos hábiles para la
existencia de este delito la compraventa, salvo con pacto de reserva de dominio, el préstamo
mutuo, el depósito irregular, pues todos ellos transmiten el dominio, ni tampoco el arrendamiento
de servicios, que no transmite la posesión. Por ejemplo son títulos válidos el depósito, salvo el
depósito irregular, la administración, el préstamo, salvo el ya mencionado, y todos los demás que
cumplan los requisitos dichos.
El título por el que se recibe la cosa mueble ha de originar una obligación de entregar o
devolver la cosa mueble, o darle un determinado destino, caben según la jurisprudencia
internacional, no sólo títulos que se han mencionado, sino también aquellas relaciones jurídicas,
de carácter complejo o atípico que no encajan en ninguna categoría concreta de las establecidas
por la ley o el uso civil o mercantil, sin otro requisito que el exigido en la norma penal, es decir
que se origine la obligación de entregar o devolver, por lo que se afirma que los títulos señalados
por la ley no son numerus clausus SS.T.S. 1998/94, de 5-11:955/97, de 1-7 y S.T.S. 1311/2000, de
21-7 (Código Penal, 68 edición 2001, Comentarios y Jurisprudencia, editorial Colex, Madrid,
pág. 681)
El objeto material del delito recae en la cosa mueble ajena. El concepto es el mismo
utilizado en los delitos de apoderamiento. La exigencia de ajenidad de la cosa no es
contradictoria con lo afirmado respecto de los objetos fungibles o del dinero, pues, en tales casos,
lo que es ajeno es el valor que hay que devolver o entregar, por lo que, no siendo fungible el
objeto material, sólo se comete apropiación indebida respecto de cosas ajenas, como indica la ley
con los verbos entregar y devolver y respecto de los bienes fungibles es aplicable lo ya
mencionado.
La conducta típica que la ley describe se concretiza en forma alternativa: apropiarse del
objeto material, o no entregarlo o restituirlo a su debido tiempo. Ambos recaen en el concepto
único de disposición. Hay apropiación o retención indebidas cuando el que no es el dueño, pero
tiene la cosa, realiza algún acto que supone que se atribuye la propiedad de la cosa, de modo que
va no puede, definitivamente, entregarla o devolverla en el momento preciso, como era su
obligación.
Tal conducta supone dos etapas diferenciadas: la primera se concreta en una situación
inicial lícita, generalmente contractual, en la que el sujeto activo percibe en calidad de depósito,
comisión o administración, o por cualquier otro título que produzca la obligación de entregarlos o
devolverlos, es decir la recepción presidida por la existencia de de una convenida finalidad
específica de devolución o bien de empleo en un destino determinado. En la segunda etapa el
agente trasmuta esta posesión legítima en una disposición ilegítima y abusando de la tenencia
material de los bienes y de la confianza recibida, dispone de ellos, se los apropia indebidamente
en perjuicio del depositante. El ámbito jurídico-penal apropiarse indebidamente de un bien no
equivale necesariamente en convertirse ilícitamente en su dueño, sino actuar ilícitamente sobre el
bien, disponiendo del mismo como si fuere el dueño, debiendo en todo caso existir un perjuicio
patrimonial del sujeto pasivo.
El relación al tipo subjetivo se tiene que es un delito como exclusivamente doloso,
exigiendo la doctrina mayoritaria que concurra ánimo de lucro, entendido como voluntad de
apropiación, pues, como se ha visto, se afirma que la conducta típica es reconducible al concepto
de disposición, en el sentido de apropiación, que como se dijo en el párrafo anterior no implica
convertirse ilícitamente en su dueño, o un ánimo de enriquecimiento, sino simplemente el
propósito de adquirir sobre el dinero que se administra un poder de disposición en sentido
contrario a la finalidad de una administración leal del mismo.
Finalmente la consumación del delito, por ser éste de resultado, cuya consumación exige
la producción de éste, entendido como perjuicio para el sujeto pasivo. El sujeto activo tiene que
realizar un acto de disposición que tenga una mínima efectividad, es decir, que, al menos, haya
perturbado en cierta medida los derechos del dueño, provocando la pérdida por este de algún
valor económico y la correlativa adquisición del mismo por parte del sujeto activo.
Cuando la cosa se trate de dinero o cosas fungibles, se consuma e delito por no darles el
destino convenido , se consuma también si no se le dio el destino pactado en la fecha convenida,
si se incumple la obligación y se retiene la posesión de dinero o bienes en provecho del
poseedor. De lo anterior se resalta que si bien puede haber un enriquecimiento por parte del
sujeto activo, es el acto de disposición de los bienes ajenos en forma ilícita, rompiendo la
confianza que la víctima depositó en autor del delito.
Con base a los elementos analizados podemos extraer entonces, y en contraste a los
argumentos esgrimidos por el impetrante, que cuando se trata de un bien fungible como el dinero,
no es aplicable la existencia de un título material, y que además presupone la ley un sistema de
apertus clausus de dicho título, el cual puede ser atípico, siempre que ello suponga la obligación
de entregarlos o devolverlos, como puede ser la confianza otorgada para ser guardadas las
cantidades. En el caso sub judice se estimó en la sentencia de mérito que la víctima ARTURO
FRANCISCO V.R. se puso de acuerdo con la enjuiciada señora NELLY HERMELINDA
V.V.D.M., que le enviaría el dinero en forma periódica el que sería depositado en una cuenta de
esta última, con el objeto que le fuera devuelto cuando la víctima ARTURO FRANCISCO V.R.
regresara, pero no se hizo pues, la imputada se los había gastado, tesis que fue acreditada con el
testimonio de la víctima y que ha sido corroborada con las deposiciones de NUBIA
ESMERALDA R. V. y ALBA ROCÍO R. V., así como con los recibos de envíos hechos por la
víctima a la acusada, la confianza depositada por la víctima para que el dinero fuera guardado por
enjuiciada, no habiendo prueba en contrario que desvirtuara estas pruebas, las que fueron
confirmando cada uno de los elementos del tipo penal acusado.
En relación si se ha establecido en la sentencia recurrida los elementos del mencionado
tipo por el sujeto activo, esta cámara considera que la misma contiene en su análisis componentes
intelectivos y descriptivos, de los que se desprende la presencia de valoración de la prueba que
fue ofertada y admitida legalmente para la Vista Pública, pues en la fundamentación de la
sentencia y en específico en sus considerandos, referidos estos a la valoración de los elementos
de prueba, se exponen los motivos que llevan al señor Juez del Tribunal Tercero de Sentencia de
San Salvador, a tomar su decisión, destacándose la confianza depositada por la víctima ARTURO
FRANCISCO V.R., en su hermana la señora NELLY HERMELINDA V.V.D.M. para que ella
abriera una cuenta en el banco y se lo guardara, pero al regresar no se devolvió pues se lo había
gastado.
Lo anterior constituye un breve, sencillo, pero claro y expreso análisis de cómo estos han
inferido en el convencimiento intelectivo del Juzgador y propiciado con ello la emisión del fallo
de condena en contra de la imputada NELLY HERMELINDA V.V.D.M.; así lo hace constar en
su sentencia el Señor Juez del Tribunal Tercero de Sentencia de la Ciudad de San Salvador, quien
argumentó tener por acreditada la participación de la inculpada en los hechos que se le atribuyen,
con los elementos de prueba que desfilaron en la audiencia de vista pública.
III. Con relación al último punto apelado se ha violentado el artículo 399 CPP en cuanto a la
forma en que debe hacerse la reparación civil del delito.
Respecto de lo argumentado por la parte impetrarte es de hacer ver que el art. 77 inc. 2 N 2
CPn, establece que para que opere la suspensión condicional de la pena, debe haberse cancelado
las obligaciones civiles provenientes del hecho determinadas en la sentencia, garantice
satisfactoriamente su cumplimiento o demuestre su absoluta imposibilidad de pagar. Respecto de
ello la disposición obliga en torno a la responsabilidad civil se hayan dado cualquiera de estos
supuestos, para lo cual el juez a quo ha otorgado para su cumplimiento el plazo perentorio de un
mes el cual venció el día quince de julio del presente año.
En el caso sub judice se advierte que no se ha demostrado que la enjuiciada haya
garantizado el cumplimiento de la responsabilidad civil o haya demostrado su imposibilidad de
pagarla, lo cual deja como único supuesto el que se haya cancelado las obligaciones civiles, ello
al momento de otorgar el beneficio de la suspensión condicional de la ejecución de la pena,
aspecto que no se ha dado a cabalidad, sino más bien, el juez de sentencia otorgó un plazo
judicial a efecto de no aplicarla inmediatamente como lo prevé la misma ley, pues si ha
argumentado lo innecesario de la pena de prisión y lo perjudicial que sería para la imputada, por
lo que, el plazo judicial otorgado busca facilitar a la acusada la cancelación de la responsabilidad
con la finalidad de darle cumplimiento a supuesto establecido en el art. 77 N 2 CPn, pues caso
contrario, la pena de prisión debió iniciarse al momento de la emisión del fallo respectivo hasta el
cumplimiento de las condiciones del referido artículo.
Debe considerarse que respecto del argumento planteado por el impetrante en tomo al art.
498 inc. 5 CPP, que la responsabilidad civil se tramitará ante el juez de lo civil respectivo, cabe
aclarar que de conformidad al art. 551 del Código Procesal Civil y Mercantil, prescribe que el
Juzgador puede establecer un período para el cumplimiento de una obligación, refiriéndose a
títulos de ejecución, y una vez ejecutoriada, se procederá a hacerla efectiva, conllevando que la
pretensión respectiva prescribe de conformidad al art. 553 CPCM en un período de dos años, y en
ese sentido, puede determinarse que el argumento es contrario al fundamento de la suspensión
condicional de la ejecución de la pena al que hace referencia el art. 77 CPn, pues como se dijo en
el párrafo anterior, dicha disposición prevé que la misma se haya cancelado, garantizado o
demostrado la imposibilidad de pagar, no que la misma dependa de la discrecionalidad de su
exigencia por la víctima y del resultado ante un eventual proceso de ejecución forzosa para
obtener el pago de la responsabilidad civil.
Por lo que la sentencia emitida por el Juez Tercero de Sentencia de San Salvador, deberá
ser confirmada en ese sentido por adecuarse a lo establecido en las disposiciones legales
correspondientes en tomo al beneficio de la suspensión condicional de la ejecución de la pena.
IV. Luego de los anteriores postulados, eminentemente doctrinarios, este Tribunal de Alzada,
tiene ciertamente por acreditado que efectivamente se ha logrado establecer la autoría de la
imputada NELLY HERMELINDA V.V.D.M. en los hechos acusados, ya que la prueba
documental y testimonial incrimina a la procesada como la persona a quien por la confianza
existente entre ella y la víctima su hermano ARTURO FRANCISCO V.R., éste al irse a los
Estados Unidos desde el año dos mil tres, le enviaba cantidades de dinero para que se lo
depositara en una cuenta bancaria, pero al volver por estar mal de salud, la procesada no se los
devolvió por haberse gastado el dinero el cual ascendía ya a la cantidad de CATORCE MIL
SETECIENTOS CUARENTA DÓLARES.
De lo anterior, es posible concluir que las razones esgrimidas por el sentenciarte son
respetuosas de la legalidad, y responden al sistema de valoración que la ley establece, pues a
criterio de esta Cámara, las argumentaciones sobre las que se construye el fallo son razonables y
derivan válidamente del análisis lógico de las pruebas introducidas al debate, las cuales fueron
valoradas conforme a las reglas de la sana crítica, observándose además una acertada
aplicación de los preceptos legales, en cuanto a cuestiones de hecho y de derecho; por ende, no
se advierte la existencia del vicio alegado.
Por lo expuesto en los párrafos anteriores, esta Cámara considera que habiéndose
analizado los motivos de impugnación y descartado su capacidad de provocar una modificación
de la sentencia condenatoria apelada, habrá de rechazarse la pretensión del recurrente y
confirmar, en el fallo respectivo la sentencia definitiva condenatoria, en todas sus partes.
POR TANTO: Conforme a los fundamentos vertidos, disposiciones legales
citadas y arts. 77, 79, 217 del Código Penal, arts. 144, 179, 395, 452, 453, 459, 468, 469, 470,
473, 475 todos del Código Procesal Penal, esta Cámara EN NOMBRE DE LA REPUBLICA
DE EL SALVADOR, FALLA: A) CONFIRMASE LA SENTENCIA DEFINITIVA
CONDENATORIA dictada en el proceso penal en contra de NELLY HERMELINDA
V.V.D.M., de las generales ya enunciadas en el preámbulo de esta resolución, por el delito de
APROPIACIÓN O RETENCIÓN INDEBIDA, regulado y sancionado en el Artículo 217 del
Código Penal, en perjuicio patrimonial de ARTURO FRANCISCO V.R.1 B) en caso de
transcurrir el plazo procesal para interponer recurso sin que las partes hicieran uso del mismo en
la sentencia dictada por este Tribunal de Apelaciones, está deberá declararse FIRME de
conformidad a lo dispuesto en el artículo 147 del Código Procesal Penal; C) Certifíquese la
presente resolución y remítase al Juzgado de origen.
NOTIFIOUESE.
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