¿Se puede redimir la dutasterida en el carcinoma de la próstata? Autor: Nick Mulcahy Los datos son interpretados de manera muy diferente La dutasterida (Avodart, GlaxoSmithKline) todavía podría desempeñar un papel en el carcinoma de la próstata —como tratamiento complementario en hombres con neoplasias de bajo riesgo que están bajo vigilancia activa—, señaló el autor principal de un nuevo estudio sobre el tema. En el estudio se determinó que los hombres que recibían dutasterida tenían «un periodo más prolongado hasta el inicio del avance del carcinoma de la próstata», en comparación con los hombres que recibían placebo. Sin embargo, un experto en el campo consideró el estudio como «un estudio negativo» e hizo hincapié en que la rapidez de avance de la enfermedad en los dos grupos de hombres «fue básicamente la misma» a los tres años, que fue el término del estudio. El ensayo en cuestión es el estudio patrocinado por la industria Reducción con Dutasterida de los Episodios de Avance Clínico en la Conducta Expectante (REDEEM, por sus siglas en inglés). La dutasterida, un inhibidor doble de la 5 alfa reductasa, que se utiliza para el tratamiento de la hiperplasia prostática benigna recientemente fue rechazada por la US Food and Drug Administration (FDA) como un fármaco quimiopreventivo en el carcinoma de la próstata. Sin embargo, REDEEM indica que la dutasterida podría ser útil «en hombres con carcinoma prostático de bajo riesgo que desean someterse a un periodo de observación», dijo el investigador principal Dr. Neil Fleshner, de la University Health Network en Toronto, Ontario, Canadá. Esto lo afirmó en una conferencia de prensa que precedió al inicio del Simposio sobre Carcinomas Genitourinarios 2011, donde se presentará el estudio. Se cuestionan los datos del criterio principal de valoración Los 302 hombres que participaron en el estudio REDEEM tuvieron tumores de bajo riesgo demostrados en la biopsia y se trataron con vigilancia activa —un programa de vigilancia de los indicadores de la enfermedad para tratar de evitar el tratamiento innecesario de carcinomas indolentes—. Fueron aleatorizados para recibir placebo o tratamiento con dutasterida (0,5 mg al día) y se sometieron a biopsias de seguimiento a 1,5 y 3 años. El criterio principal de valoración del estudio fue «el periodo transcurrido hasta el avance del carcinoma prostático», lo que tomaba en cuenta tanto la variable tradicional del avance patológico así como una variable menos conocida «el avance terapéutico», es decir, el tiempo transcurrido hasta el inicio de un tratamiento más radical como lo es la intervención quirúrgica. En comparación con placebo, la dutasterida retrasó notablemente el avance del carcinoma de la próstata durante el periodo de estudio de tres años (reducción del riesgo relativo: 38,9%; intervalo de confianza [IC] del 95%: 12,4% a 57,4%; p = 0,007), escriben el Dr. Fleshner y sus colaboradores en un resumen que dio a conocer la American Society of Clinical Oncology cuando se llevó a cabo la conferencia de prensa. Sin embargo, el Dr. Patrick Walsh, del James Buchanan Brady Urological Institute en Johns Hopkins Medical Institutions in Baltimore, Maryland, dijo que esta aseveración precisa análisis y no significa que a los tres años la dutasterida fuese notablemente mejor que el placebo. Los datos finales del estudio REDEEM se han dado a conocer con anterioridad, dijo el Dr. Walsh, incluidos los de un documento de suplemento que fue parte de la solicitud de nuevo fármaco que no se aprobó para la dutasterida en la quimioprevención del carcinoma de la próstata. Hacia los tres años la frecuencia de avance en los dos grupos fue básicamente la misma. En este documento, presentado a la FDA el 1 de diciembre de 2010, GlaxoSmithKline indicó que en el estudio REDEEM la frecuencia de avance del tumor a los 1,5 años favoreció a la dutasterida: 23% de los 142 hombres del grupo con dutasterida presentaron avance en comparación con 35% de los 144 hombres del grupo que recibió placebo. Sin embargo, a los tres años, los dos grupos tuvieron un avance casi similar: 24% del grupo con placebo (que para entonces comprendió 86 hombres) presentaron avance, en comparación con 21% del grupo con dutasterida (para entonces 106 hombres). El Dr. Walsh dijo a Medscape Medical News: «A mi entender, los datos señalan que hubo una reducción del avance de la lesión a los 18 meses, pero hacia los tres años la tasa de avance en los dos grupos fue básicamente la misma». El Dr. Walsh resumió: «En virtud de que estos pacientes recibirán el fármaco durante muchos años y puesto que el efecto ya no estuvo presente a los tres años, interpretaría esto como un estudio negativo». Éste es un paso importante hacia delante El encargado de coordinar la conferencia de prensa señaló que los resultados del estudio son valiosos. El Dr. Nicholas Vogelzang, de US Oncology, refiriéndose a la repercusión de los resultados en el tratamiento del carcinoma de bajo riesgo, dijo que «este es un paso importante hacia delante». En el estudio se definió el bajo riesgo como una etapa clínica T1c–T2a, una calificación de Gleason de 6 o menos y una concentración sérica de antígeno específico de la próstata de 10 ng/ml o menos. Sin embargo, informó el Dr. Fleshner, no es de esperar que GlaxoSmithKline solicite a la FDA una indicación para la glutasterida en este contexto. Dijo: «La FDA derribó el modelo de prevención. No creo que vayamos a ver una indicación formal para la vigilancia activa», añadiendo que el estudio REDEEM no es un estudio para autorización y que cualquier empleo de carcinoma de la próstata sería extraoficial. Otro médico al que abordó Medscape Medical News señaló que la dutasterida tiene cierta utilidad en pacientes con carcinoma de la próstata de bajo riesgo. El Dr. Richard Greenberg, del Fox Chase Cancer Center en Filadelfia, Pensilvania, dijo: «Realmente utilizo la finasterida y la dutasterida para este fin, aunque desde luego no es una indicación aprobada por la FDA». El Dr. Greenberg añadió: «Sigue habiendo dudas en si estamos tratando el carcinoma o al paciente y a su esposa». Sin embargo, también señaló una posible utilidad clínica de estos fármacos: «Que también se pueden utilizar para diferenciar el tumor maligno (avance) del benigno en muchos casos al nivel clínico, y por tanto ayudan a determinar el momento oportuno para la intervención». Notas sobre la enfermedad de alto riesgo El Dr. Fleshner y sus colaboradores observaron que «no hubo signos de un aumento de la calificación de Gleason con la glutasterida» entre el momento de la biopsia inicial y la biopsia final a los tres años. Los grupos con glutasterida y placebo tuvieron proporciones equivalentes (alrededor de 15%) de pacientes que avanzaron a calificaciones 7 u 8 de Gleason a partir de una puntuación más baja. Sin embargo, el mayor problema es que en estudios previos en los que han participado millares de hombres el tratamiento con glutasterida y finasterida se relacionó con un riesgo más alto de diagnóstico de enfermedad de gran malignidad. En el estudio REDEEM, en la biopsia final, sólo tres hombres del grupo con placebo y dos del grupo con dutasterida tuvieron una calificación 8 de Gleason, ninguno tuvo una calificación de 9 ó 10. El Dr. Fleshner admitió a Medscape Medical News que el estudio de 302 pacientes no estuvo potenciado para valorar la importancia de la frecuencia de la enfermedad de gran malignidad. Sin embargo, también dijo que en este contexto el riesgo de enfermedad de gran malignidad es «muy pequeño debido a que la biopsia inicial ha descartado a pacientes con tumores de gran malignidad fácilmente detectables y estos pacientes no reúnen los requisitos para una vigilancia activa. El Dr. Fleshner también dijo que la interrelación entre la glutasterida y la finasterida y la enfermedad de gran malignidad «podría ser algo bueno». Explicó: «Los fármacos reducen el tamaño de la próstata y permiten la detección más fácil de carcinoma de gran malignidad». «La dutasterida no los produce, sino más bien facilita detectarlos». En el estudio REDEEM también se determinó que en 23% de los pacientes (n = 31) del grupo con placebo y 36% (n = 50) de los del grupo con dutasterida no se detectó cáncer en la biopsia final. Basándose en los hallazgos previos, dijo el Dr. Fleshner que era de esperar el porcentaje en el grupo con placebo. El Dr. Vogelzang señaló que, no obstante, el porcentaje en el grupo con dutasterida indica que el fármaco «parece reducir la masa de cáncer en la glándula». Los investigadores también determinaron que la ansiedad relacionada con el carcinoma de la próstata, medida con la Escala de Ansiedad de Memorial para el Carcinoma de la Próstata, fue inferior en el grupo con dutasterida que en el grupo con placebo (p = 0,036). El Dr. Vogelzang afirmó que este hallazgo es una parte importante del estudio debido a la «ansiedad creciente que los hombres tienen mientras se tratan mediante conducta expectante». El Dr. Vogelzang informa tener un puesto directivo en US Oncology; prestar sus servicios como asesor a Amgen, Aveo, Bayer, Celgene, Dendreon, Eisai, GE Healthcare, Genentech, GlaxoSmithKline, Medscape, Novartis, Pfizer, SanofiAventis y Wilex; y de recibir honorarios de Amgen, ArQule, Bayer, Clinical Care Options, Cougar Biotechnology, Genentech, Imedex, Lilly Lippincott, Williams and Wilkins, Medscape, Novartis, Onyx, Pfizer y Veridex. Referencias: 2011 Genitourinary Cancers Symposium (GUCS). To be presented February 17, 2011. Copyright 2012 WebMD, Inc. Todos los derechos reservados. Queda expresamente prohibida la reproducción y la distribución total o parcial de los Contenidos de Medscape o de Medcenter sin la autorización previa y por escrito de WebMD.