INTERES BANCARIO CORRIENTE, CERTIFICACIÓN POR LA SUPERINTENDENCIA FINANCIERA - INTERES MORATORIO EN PROPIEDAD HORIZONTAL Concepto 2008028249-002 del 28 de mayo de 2008. Síntesis: Corresponde a la Superintendencia Financiera de Colombia (artículo 12 del Decreto 4327 de 2005) certificar el interés bancario corriente respecto de cada una de las modalidades de crédito que para el efecto determine el Gobierno Nacional. Las personas diferentes a entidades vigiladas por esta Superintendencia, entre ellas las propiedades horizontales, deben observar como límite, para todos los efectos legales, el calculado sobre interés bancario corriente certificado para el crédito de consumo y ordinario. «(…) comunicación radicada en esta Superintendencia bajo el número citado en la referencia, mediante la cual formula una consulta relacionada con la legalidad en el cobro de los intereses de mora en las cuotas de administración de un conjunto residencial Al respecto, proceden las siguientes consideraciones: 1.- Facultad de la Superintendencia Financiera de certificar las tasas de interés Sea lo primero manifestar que corresponde a la Superintendencia Financiera de Colombia (artículo 12 del Decreto 4327 de 2005) certificar el interés bancario corriente respecto de cada una de las modalidades de crédito que para el efecto determine el Gobierno Nacional. Es así como el 26 de febrero del 2007 el Gobierno Nacional expidió el Decreto 519 de ese año, por medio del cual se determinan las distintas modalidades de crédito cuyas tasas deben ser certificadas por la Superintendencia Financiera de Colombia, disponiendo en su artículo 3º lo siguiente: “Artículo 3. Efectos de las certificaciones del interés bancario corriente. En las operaciones activas de crédito, para todos los efectos legales relativos a los intereses e independientemente de la naturaleza jurídica del acreedor, deberá tenerse en cuenta el interés bancario corriente certificado por la Superintendencia Financiera de Colombia para el respectivo período, que corresponda a la modalidad de la operación activa de crédito de que se trate, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 2 del presente decreto 1 . (…) “En todos los demás casos en que se deban pagar intereses de plazo o de mora, así como en los eventos en que los intereses se encuentren definidos en la ley o el contrato en función del interés bancario corriente, tales como los intereses de mora que se deban por concepto de tributos, obligaciones parafiscales u obligaciones mercantiles de 1 El artículo 2º del Decreto 519 de 2007 estableció y definió, para los efectos previstos en el mismo, las modalidades de Micro crédito, y de Consumo y Ordinario. carácter dinerario diferentes de las provenientes de las operaciones activas de crédito y demás operaciones mencionadas en el inciso anterior, únicamente deberá tenerse en cuenta el interés bancario corriente certificado para el crédito de consumo y ordinario (…)” (se resalta y subraya). Bajo este marco legal, consideramos que actualmente las personas diferentes a las entidades vigiladas por esta Superintendencia, entre ellas las propiedades horizontales, deben observar como límite, para todos los efectos legales, el calculado sobre interés bancario corriente certificado para el crédito de consumo y ordinario, el cual según la Resolución No. 0474 del 31 de marzo de 2008 fue del 21.92%, para el período comprendido entre el 1 de abril y el 30 de junio de 2008, por lo tanto para los efectos de la norma sobre usura (artículo 305 del Código Penal) la cifra para el período citado se sitúa en 33.93%. 2.- Falta de competencia de la Superintendencia Financiera para establecer el momento a partir del cual se causan los intereses de mora en el pago de las cuotas de administración. Sobre el particular, cabe precisar que dentro de las facultades asignadas por la ley a la Superintendencia Financiera contenidas en el Estatuto Orgánico del Sistema Financiero, el Decreto 4327 del 2005 y en la Ley 964 del 2005 no se encuentra la de señalar la forma cómo se causan los intereses de mora y a partir de cuando se cobran en las obligaciones derivadas de las cuotas de administración de las unidades residenciales. Ahora bien, revisada la normatividad existente y vigente sobre la propiedad horizontal, contenida en la Ley 675 de 2001, la cual en su artículo 87 derogó las Leyes 182 de 1948, 16 de 1985 y 428 de 1988, encontramos que en su Capítulo VIII, artículos 29 a 31, se hace referencia a la contribución de las expensas comunes, aludiendo a aspectos tales como su obligatoriedad, solidaridad, intereses por incumplimiento en el pago de las mismas, sectores y módulos de contribución, permitiendo su regulación a través del Reglamento de Propiedad Horizontal. Es así como, el primer inciso del artículo 30 de la Ley 675 de 2001, en punto al incumplimiento al pago de las expensas dispone: “Art. 30.- Incumplimiento en el pago de expensas. El retardo en el cumplimiento del pago de expensas, causará intereses de mora, equivalentes a una y media veces el interés bancario corriente, certificado por la Superintendencia Bancaria, sin perjuicio de que la asamblea general, con quórum que señale el reglamento de propiedad horizontal establezca un interés inferior” (se subraya. El resaltado es del texto). En consecuencia, se considera que en cada caso debe revisarse el contenido del Reglamento de Propiedad Horizontal, el cual debió ser previamente aprobado por la Asamblea General de Copropietarios, con el fin de establecer si en el mismo se reglamentó el cobro de intereses derivados del pago de las expensas aplicables en dicho régimen, así como la fecha a partir de la cual son causados. En todo caso, no sobra manifestar que las obligaciones deben ser satisfechas en la forma y términos estipulados, en este caso dentro de los parámetros señalados en el reglamento de propiedad horizontal y su inobservancia tienen como efecto no sólo la exigencia inmediata de la misma sino el pago de los intereses de mora conforme a los lineamientos de dicho reglamento, aunque, se reitera, no deben superar el límite de la usura. Finalmente, conviene recalcar que el conocimiento de las diferencias que se presenten en relación con las situaciones derivadas del Régimen de Propiedad Horizontal, actualmente no están sujetas al conocimiento de ninguna autoridad administrativa, por lo cual las mismas se deben someter a la decisión de las autoridades judiciales, ante las cuales puede acudir quien se considere perjudicado, con el objeto de obtener la protección de los intereses que en su favor consagran las normas sustantivas del derecho, entre ellas las contenidas en la citada ley así como en el respectivo reglamento de propiedad horizontal. (…).»