BOLETÍN 3109-07 I. DESCRIPCIÓN

BOLETÍN 3109-07
27 de enero de 2006
ISSN 0787-0415
I. DESCRIPCIÓN
REFERENCIA
: Modifica los artículos 24 y 25 de la ley N° 18.918, orgánica
constitucional del Congreso Nacional, en materia de
admisibilidad de indicaciones
INICIATIVA
: Moción de los senadores Sres. Horvath y Procurica
COMISIÓN
: De Constitución, Legislación y Justicia
ORIGEN
: Senado
INGRESO
: 30 de octubre de 2002
CALIFICACIÓN
: Sin urgencia
ARTICULADO
: Un artículo único, que modifica los artículos 24 y 25 de la ley
18.918
OBJETO, SEGÚN LA INICIATIVA
1.-
Permitir que las indicaciones de parlamentarios que versen sobre aspectos de
un proyecto de ley reservados a la iniciativa exclusiva presidencial, puedan ser
puestos en conocimiento del Presidente de la República.
2.-
Facultar expresamente al Presidente de la sala o de la comisión (del Senado o
de la Cámara) para declarar, en el caso anterior, la admisibilidad de la
indicación parlamentaria (y no solamente su inadmisibilidad).
3.-
Impedir que la admisibilidad o inadmisibilidad, una vez resuelta por la sala,
pueda ser revisada por una comisión.
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CONTENIDO ESPECÍFICO
Artículo único.-
Introdúcense las siguientes modificaciones a la ley Nº 19.918, Orgánica
Constitucional del Congreso Nacional:
1) En la primera parte del inciso tercero del artículo 24, suprímese la frase
que expresa “ni siquiera para el mero efecto de ponerlas en su conocimiento.”,
pasando la coma (,) que la precede a ser punto seguido (.).
2)
Reemplázase el artículo 25 por el siguiente:
"Artículo 25.- Corresponderá al presidente de la sala o comisión la facultad de
resolver la cuestión de admisibilidad o inadmisibilidad de las indicaciones a
que se refiere el artículo anterior. No obstante la sala o comisión, en su caso,
podrá reconsiderar la resolución de su presidente.
La declaración de inadmisibilidad puede ser hecha por el presidente de la
Cámara respectiva o de una comisión, de propia iniciativa o a petición de
algún miembro de la corporación, en cualquier momento de la discusión del
proyecto.
La circunstancia de que no se haya planteado la cuestión de admisibilidad o
inadmisibilidad de una indicación durante la discusión general en la sala, no
obsta a la facultad del presidente de la comisión para hacer la declaración
correspondiente o para consultar a la comisión en caso de duda.
Una vez resuelta por la sala, o su presidente, la cuestión de admisibilidad o
inadmisibilidad de una indicación, ella no podrá ser revisada en comisiones.
La cuestión de admisibilidad o inadmisibilidad de indicaciones resuelta en
comisiones no obsta a la facultad del presidente de la Cámara respectiva para
hacer la declaración de admisibilidad o inadmisibilidad de tales indicaciones o
para consultar a la sala, en su caso.”.
FUNDAMENTO, SEGÚN LA INICIATIVA
1.-
Desde la instalación del Congreso Nacional e iniciarse la tramitación de los
primeros proyectos de ley, se suscitaron dudas y se debatió sobre el real sentido
y alcance de las disposiciones de la Ley Orgánica Constitucional del Congreso
Nacional que regulan los casos y el procedimiento para declarar inadmisibles las
indicaciones formuladas a una iniciativa, durante su discusión general. El artículo
25 de la Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional presenta lo que se
ha considerado una incongruencia o falta de analogía en lo tocante a la cuestión
de admisibilidad de las indicaciones, por una parte, faculta al Presidente de una
Comisión para declarar admisible una indicación y, por otra, faculta al Presidente
del Senado o a la Sala, para revocar la decisión de la Comisión y declararla
inadmisible, sin embargo, en el caso contrario, esto es, cuando se ha declarado
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la inadmisibilidad en la Comisión, se ha estimado que no es posible a la Sala
revisar esa decisión.
2.-
Ello ha sido consecuencia de la interpretación que se impuso en el Senado, la
que significa que cuando una indicación ha sido declarada inadmisible en la
respectiva Comisión, dicha declaración no puede ser revisada por la Sala, de
manera que el criterio del Presidente de la Comisión o de la mayoría de ésta, que
puede estar formada por dos senadores, se impone irrevocablemente con
relación a una determinada indicación, que no podrá ser renovada en la Sala ni
podrá el Senado admitirla a tramitación, aun cuando una mayoría sustancial e
incluso la unanimidad del Senado, considerara que, con un mayor estudio, dicha
indicación debe ser declarada admisible y puede, en consecuencia, ser debatida
a fin de que la Corporación se pronuncie sobre ella en su propio mérito.
3.-
La circunstancia de que el mencionado inciso final del artículo 25 no aluda
explícitamente a la posibilidad de que el Presidente de la Corporación
reconsidere una declaración de inadmisibilidad hecha en Comisiones no
significa que el legislador haya tenido la intención de excluirla, sino que se
debe a que tal situación solo puede presentarse excepcionalmente, en caso de
renovación de indicaciones, materia que es propia de regulación
reglamentaria.
II. COMENTARIOS DE LIBERTAD Y DESARROLLO
IMPLICANCIAS CONSTITUCIONALES
1.- Materia de ley.
El artículo 55, inciso tercero, de la Constitución, señala que la ley orgánica
constitucional relativa al Congreso Nacional regulará, entre otras materias,
“todo lo relacionado con la tramitación interna de la ley”.
La admisibilidad o inadmisibilidad de una indicación parlamentaria respecto de
un proyecto de ley que verse sobre materias comprendidas en la iniciativa
exclusiva presidencial, está actualmente regulada en dicha ley, por lo que su
modificación es también materia de normas del mismo rango constitucional.
Siendo así, este proyecto requeriría para su aprobación del quórum de 4/7 de
diputados y senadores en ejercicio y de control por el Tribunal Constitucional.
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COMENTARIOS DE MÉRITO
2.- Marco
constitucional.
Se entiende por iniciativa la facultad constitucional de presentar un proyecto
de ley para su tramitación en el Congreso Nacional. Una manifestación de
dicha facultad está constituida por las indicaciones que tanto los
parlamentarios como el Presidente de la República pueden presentar para
adicionar uno o varios preceptos a un proyecto de ley, o bien para suprimirlos
o para sustituir una norma del proyecto de ley por otras. Según lo cual las
indicaciones pueden ser aditivas, supresivas o sustitutivas.
Por otra parte, la Constitución regula dos clases de iniciativa: la común, que
puede ser ejercida tanto por los parlamentarios (no más de 5 senadores ni por
más de 10 diputados) como por el Presidente de la República; y la iniciativa
exclusiva, que está reservada para ciertas y específicas materias respecto de
las cuales solo el Presidente puede proponer proyectos de ley.
En consonancia con lo anterior, el derecho de presentar indicaciones a los
proyectos de ley está regulado, en principio, por el mismo criterio; por lo tanto,
los parlamentarios no pueden presentar indicaciones en aquellas materias de
iniciativa exclusiva presidencial. No obstante, los parlamentarios pueden, por
excepción, presentar indicaciones para rebajar gastos propuestos por el
Presidente de la República (artículo 67, inciso segundo, de la Constitución).
La ley orgánica constitucional relativa al Congreso se hace cargo de estas
normas constitucionales.
Su artículo 24 prohíbe a los parlamentarios presentar indicaciones sobre
materias de iniciativa exclusiva presidencial, ni siquiera para que sean
comunicadas al Presidente de la República. Ahora, la modificación propuesta
lo permitiría.
Su artículo 25 dispone que el Presidente de la sala o comisión declarará la
inadmisibilidad de las indicaciones que versen sobre materias de dominio
exclusivo presidencial.
Se pretende que pueda declarar tanto la
inadmisibilidad como la admisibilidad, en su caso, y regular la competencia de
las comisiones, en el sentido de que no podrán alterar lo resuelto por la sala o
por el Presidente de ésta.
3.- Proyecto
positivo.
El proyecto es positivo por dos razones: en primer lugar, porque resulta una
exageración que los parlamentarios no pueden proponer una indicación al
Presidente de la República (sobre materias que le están reservadas) para que
éste resuelva si la estima procedente o no.
Con ello no se altera la norma constitucional sobre materias exclusivas
presidenciales. Además, no se puede impedir que un parlamentario, sobre
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todo si es de gobierno, le haga llegar por cualquier medio al Presidente una
indicación. En cualquier caso, será éste quien decida si tal indicación se
presenta o no.
En la práctica, y de manera informal, los parlamentarios sugieren indicaciones
que no les está permitido presentar formalmente, por no ser de su
competencia.
En segundo lugar, es adecuado precisar las atribuciones del presidente de la
sala y de las comisiones, toda vez que la ley orgánica constitucional relativa al
Congreso se pone en la única hipótesis de que el Presidente de la Cámara
declara inadmisible la indicación, y no concibe la posibilidad de que ha hubiera
declarado admisible, situación que también merece estar adecuadamente
regulada.
En general, el proyecto tiende a acercar la tramitación de la ley a lo que en la
práctica suele suceder; y a precisar la competencia de la sala sobre la
comisión y del Presidente de la Sala sobre el Presidente de la Comisión.
4.- Conclusión.
El proyecto clarifica un aspecto puntual pero de ordinaria ocurrencia en la
tramitación de los proyectos de ley. Permite presentar indicaciones sobre
materias de exclusiva iniciativa presidencial, sin que ello signifique una
presentación formal, sino una sugerencia que se puede transmitir a quien tiene
la facultad constitucional de decidir.
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