Com. Cinca Medio 2/10/07 6 10:51 Página 265 El deporte en la comarca del Cinca Medio GUILLERMO UGUET CARRASQUER Hoy nadie cuestiona que el deporte y la actividad física sean componentes esenciales de la calidad de vida, ni se discute su plena integración en el estilo de vida de las sociedades modernas sean rurales o urbanas. Los ciudadanos de la comarca del Cinca Medio presentan pautas de relación con el moderno hecho deportivo similares a los de las grandes urbes. Esta convergencia, sin embargo, es una realidad reciente. La globalización y la tradición actúan como dos fuerzas contrapuestas que promueven una convergencia de pautas la primera y una singularización la segunda. Del grado de influencia de una y otra resulta una diferente velocidad de convergencia, siendo clara la gradación de mayor a menor de las grandes urbes hacia las zonas con presente o pasado reciente rural. La ruralidad del Cinca Medio ha frenado el borrado de la actividad lúdica y físico-deportiva tradicional, alimentando su identidad o carácter singular dentro de la imparable homogeneización. Ante una mirada analítica el Cinca Medio, como otras áreas rurales, se muestra como un mosaico en el que coexisten diferentes paradigmas deportivos que también permiten reconstruir su evolución en el tiempo. Como en un yacimiento arqueológico son reconocibles diversos pisos o etapas de su historia reciente, que permiten vaticinar al condicionarlo el proceso de maduración de cualquier iniciativa o actividad físico-deportiva nueva que venga a surgir en el espacio comarcal. Como en el desarrollo de un embrión la actividad repetirá las etapas de nuestra historia común: el deporte de los individuos, el de las asociaciones, el de las infraestructuras y el del consumo y las organizaciones empresariales. El deporte de los individuos La vida rural tradicional era demasiado exigente como para liberar tiempo para dedicar a lo que hoy entendemos por actividad física o deporte, que desde la óptica de la época resultaba una pérdida de tiempo. El juego y la actividad físi- La huella de sus gentes 265 Com. Cinca Medio 2/10/07 Carrera del pollo (Monzón) 10:51 Página 266 ca subyacente se ejercitaban desde la esfera de lo personal como manifestación cultural que facilitaba e intermediaba en la relación entre las personas. Pasatiempo, diversión, con una alta complicidad emocional de sus practicantes y regulación local, dada la capacidad de mutación de esquemas básicos bastante generalizados. Cada pueblo jugaba sus pequeñas variantes de las gallinas ciegas, chapas, palín, galdrufas... difundidas y documentadas por Castillón, García, Adell y otros. Si las plazas, fuentes o lugares mágicos locales fueron los primeros testigos de su juego y transmisión, más tarde lo serían los patios escolares, función que en el siglo XXI vuelven a ejercer, aunque desde un enfoque erudito no vivido, a modo de intrusión cultural anacrónica en el ocio electrónico y virtual. Solo las almas más agonísticas exploraron el camino del deporte como competición, aventura personal o reto al imposible que predicaba el espíritu olímpico, inexcrutable desde la realidad rural. Bien por apuestas o por superarse para no se sabe qué, las hazañas de leyenda habidas sobre mesa y mantel en cualquier pueblo de la redolada pasaron a la arena deportiva. Las carreras del pollo, el animal contra el hombre, subir al mallo, la bajada de la Clamor... aún estarán vivas en la memoria de muchos lectores y aún hoy se practican en los núcleos más pequeños. También hoy, con la mayor longevidad y el conocimiento de que la actividad física o deportiva se asocia estrechamente con múltiples beneficios para la salud física y mental, son muchas las personas mayores que se administran su andada diaria, jóvenes y adultos que corren por calles o en plena naturaleza, montan sus bicis... y reviven contemporáneamente los viejos valores de la recreación, y más cuanto más pequeño sea su núcleo, de la relación y de la amistad. El deporte asociativo Cuando el juego deportivo saltó la inmediatez del entorno natural aumentando su radio de significatividad, lo tradicional empezó a perder terreno. Medirse a otras localidades, iniciativa seleccionada positivamente al favorecer la cohesión interna y el sentido de pertenencia, iba a tener un éxito rápido y general. Hacían falta disciplinas deportivas comunes a amplios territorios, regladas externamente (federaciones) y con instalaciones tan simples que cualquier pueblo pudiera apañarlas. Para lograr ir con los tiempos resultó obligado pasar del enfoque indivi- 266 Comarca del Cinca Medio Com. Cinca Medio 2/10/07 10:51 Página 267 dual al colectivo, asociando esfuerzos de voluntarios que invertían tiempo y recursos materiales y emocionales para mayor gloria del pueblo, sentido como ropio. Nacieron los Club, Centro, Sociedad, Atlético, Unión Deportiva... tal o cual, y así se modernizó el enfrentamiento más o menos sangriento en cortadas, costeras o riberas para dilucidar el grado de honor, valor o rasmia local con un cuero de por medio, ya que el fútbol Partido de fútbol en el campo del Palomar resultó ser el vehículo común más (Monzón) aceptado. La competición traía triunfos, clasificaciones, méritos y recompensas, reconocidos públicamente. Un gran avance para demostrar que nosotros somos más y mejores que vosotros. Hoy aún quedan testigos vigentes de esta etapa en la figura de los clubes y sociedades recreativas básicamente ajenos a Monzón. El deporte de las infraestructuras Aumentar la variedad de los deportes que tenían éxito popular en las ciudades pasaba por generar unas infraestructuras materiales, y también humanas, que no estaban al alcance de todos, pero que la mera tenencia ya de por sí iba a generar prestigio social. No bastaba la era, acondicionar unas fajas, el río o las zonas tradicionales de caza. Desde la tradición invertir recursos municipales en costosas instalaciones deportivas improductivas no se entendía, desde la modernidad urbana que nos hacían llegar las radios, revistas y una filosofía político-deportiva naciente que predicaba la nueva religión del deporte para todos parecía una necesidad imperiosa. Una vez más hubo que asociar, aunque esta vez no fueron personas sino instituciones. En el Cinca Medio fueron contadísimos los casos en el que un club o la iniciativa privada pudieron liderar la promoción de una infraestructura: Airon Club, HidroNitro Española, Club de Tiro, clubes de cazadores..., pero las grandes inversiones solo quedaban al alcance de la suma de esfuerzos de ayuntamientos, diputaciones, Consejo Superior de Deportes, después del Gobierno de Aragón y más recientemente de la Administración comarcal. Son los años ochenta y noventa de la efervescencia de los planes de infraestructuras deportivas, y de la aparición de la figura de las personas dedicadas en exclusiva a su gestión y mantenimiento. Se retocaron todos los campos de fútbol, se inauguraron pabellones cubiertos en Monzón, Fonz, Binaced, Alcolea, Almunia de San Juan... y la oferta se multiplicó en el deporte para todos. Desde la psicomotricidad hasta la gimnasia de mantenimiento, pasando por la actividad para discapacitados o la gimnasia ge- La huella de sus gentes 267 Com. Cinca Medio 2/10/07 10:51 Página 268 Partido de baloncesto celebrado en Monzón rontológica, o disciplinas como la gimnasia rítmica, el tenis, tiro con arco y un largo y variado etcétera. El deporte nos enseñó su cara más popular y social. Pero las infraestructuras caras también nos enseñaron la jerarquización de las mismas, como la piscina climatizada de Monzón, que han generado flujos internos comarcales para «consumir deporte», percibidos con la misma normalidad que los de carácter administrativo, comercial o de otras parcelas del ocio. El deporte de consumo Con la multiplicación de las infraestructuras la oferta deportiva «para todos» se multiplicó, diversificó y, con la creación del Servicio Comarcal de Deportes, se llevó a todas las poblaciones. Tampoco tardaron en crecer los éxitos y expectativas de los deportistas y clubes de competición. La mezcla de instalaciones, genética y organizaciones empezaron a mecer la cuna legendaria de los olímpicos y de deportistas de diferentes puntos de la comarca que alcanzaron niveles tan destacables como meritorios. Pero el modelo de sistema, las organizaciones (con una gestión cada vez más compleja pero con directivos aficionados animados aún por los viejos valores del 268 Comarca del Cinca Medio Com. Cinca Medio 2/10/07 10:51 Página 269 asociacionismo) y los presupuestos pronto se colapsaron por la sobredimensión que adquirió un sector multiplicado por la llegada de ávidos consumidores. El deportista actual, tanto el social como el de competición, tiene un concepto globalizado y mediático del deporte radicalmente diferenciado del clásico. Hoy se habla de demanda, de usuarios, de consumidores de servicios deportivos, de imagen, de marketing, etc. El producto deportivo, sea el disfrute de una instalación o la pertenencia a un grupo de actividad deportiva, no son esencialmente diferentes a cualquier otro producto cultural y de ocio. Se amplía el radio de acción del deportista al límite y se atenúa y hasta desaparece la imSara Sampietro en lanzamiento de jabalina plicación emocional directa con la actividad, el reconocimiento grupal o la cohesión social solo se activan en situaciones tan puntuales como extraordinarias. En el llamado deporte social las instituciones veían superada su capacidad de gestión y servicio, y en el de competición los grandes clubes se han demostrado obsoletos para gestionar un alto volumen de deportistas y el efervescente entramado de competiciones regionales y nacionales en rápida evolución. Sin la profesionalización de las estructuras el colapso parecía asegurado, pero abrir esa etapa sin una masa crítica (volumen de actividad, instalaciones, presupuestos, etc.) era imposible. Partidas económicas muy importantes públicas y privadas impulsan un sector que en el Cinca Medio no termina de romper hacia la única fórmula que se ha demostrado como posible, la profesionalización. El sector público ya la practica en su modelo de gestión de instalaciones y actividades, y avanza en la de organización de grandes acontecimientos avalado por la rentabilidad social y política que hoy nadie esconde ni discute. En el sector privado queda casi todo por hacer y la cuestión es si podrán adaptarse al nuevo paradigma del deporte de consumo o serán borrados por él. Nuestra realidad actual refleja nuestra historia, es uno de los posibles resúmenes de ella, y condiciona nuestro futuro. El futuro tal vez pase por alumbrar entes mixtos, públicos y privados, de amplio espectro territorial, que permitan darle el sentido comercial y empresarial que el deporte moderno exige, poniendo en valor las inmensas posibilidades que ofrece todo el espacio y todas las localidades de la comarca del Cinca Medio, sumando al deporte de competición y de consumo interno el deporte en la naturaleza, el deporte de rendimiento y la organización de grandes acontecimientos de referencia nacional e internacional, dirigidos al demandante externo. No deja de ser el mismo reto de siempre, la versión moderna del más alto, más lejos, más fuerte... La huella de sus gentes 269 Com. Cinca Medio 2/10/07 10:51 Página 270 Conchita Martínez Bernat JOAQUÍN SANZ LEDESMA Nació en Monzón (Huesca) el 16 de abril de 1972. Desde muy pequeña sintió gran interés por el tenis. Los inicios en este deporte los realizó de la mano de José María San Vicente, quien le dio las primeras lecciones. Con solo doce años la Federación Española de Tenis la invitó a trasladarse a Barcelona para iniciar su nueva actividad deportiva. Viendo las aptitudes de la muchacha pronto entró en el mundo de las competiciones. De Barcelona pasó a Suiza, a la localidad de Leuggern, para trabajar a las órdenes de Enric Van Harper. Con una altura de 1,70 m y un peso alrededor de 57-58 kg, la diestra montisonense hizo su debut profesional en 1988 con 16 años y fue campeona, en individuales, en Sofía. En 1989, Conchita ascendía a la lista de las diez mejores jugadoras del mundo del tenis, posición en la que permaneció durante la mayor parte de la década de los años noventa. Ha participado en cuatro Olimpiadas: Barcelona 92, Atlanta 96, Sidney 2000 y Atenas 2004. Durante esta etapa obtuvo numerosos títulos que hacen de su carrera una de las más brillantes del deporte español: 1989. Campeona en Phoenix (USA), Wellington, Tampa (USA). Subcampeona en el European Open celebrado en Bayonne (Francia). 1990. Campeona en París (Francia), Scottsdale (USA) e Indianápolis (USA). 1991. Campeona en Barcelona, en el torneo Austrian Open (Austria) y en París. 1992. De nuevo campeona en el Austrian Open. 1993. Campeona en Brisbane (Australia), Houston (USA), Roma (Italia), Stratton Mountain (USA) y Filadelfia (USA). Subcampeona en Linz, Barcelona y Essen. En una de las revistas especializadas de este deporte fue nominada como «la jugadora más sobresaliente» del tenis profesional. Este año, pródigo en títulos, preludiaba el que iba a ser el mayor éxito de su carrera: Wimbledon. 1994. El triunfo en Wimbledon, reconocido torneo en pista de hierba, significó el mejor momento de la tenista. Derrotó a Martina Navratilova –ganadora de este mismo torneo en varias ocasiones– por 6-4, 3-6 y 6-3 en la que fue su primera final de Grand Slam. Se convertía así en la primera española –y única hasta la fecha– que ganaba un título de singles. Ese mismo año vencía en los campeonatos de Hilton Heard (USA) e Italian Open. La revista especializada Tenis la nominó como la mejor tenista femenina profesional del año. 1995. Fue campeona en Hilton Head (USA), Amelia Island (USA), Hamburgo (Alemania), Italian Open (Roma), San Diego (USA) y Los Ángeles (USA). 1996. Campeona en Italian Open (Roma) y Moscú. Además, con la victoria en el Abierto de Roma marcó un récord al ganar cuatro ediciones consecutivas de este torneo. 270 Comarca del Cinca Medio Com. Cinca Medio 2/10/07 10:51 Página 271 1997. Llega a la final en Roma en 1997 pero sufrió una lesión cervical y perdió la oportunidad de ganar el título. 1998. Campeona en German Open (Alemania) y Warsaw Cup (Varsovia). 1999. Campeona en Sopot. Y en el 2000 campeona en Berlín (ganando a Amanda Coetzer por 6-1 y 6-2). Junto a Arantxa Sánchez Vicario ganó cinco títulos de la Copa Federación, en los años 1991, 1993, 1994, 1995 y 1996. Fue también finalista en el torneo de Roland Garros, enfrentándose a Mary Pierce. Tras la eliminación en el año 2005 del Open de Australia, anunció la intención de poner fin a su carrera deportiva. Más de una década de éxitos. En total, cuenta la tenista con 33 títulos individuales, los cinco de la Copa Federación y tres medallas en los Juegos Olímpicos. Por el conjunto de su trayectoria como deportista recibió el prestigioso premio Reina Sofía. Todos los especialistas han elogiado su potente saque y su derecha, una de las mejores del circuito internacional, que le han permitido obtener excelentes resultados en torneos de alta competición. Sin duda, es Conchita Martínez una de las más importantes representantes del tenis español. La huella de sus gentes 271 Com. Cinca Medio 2/10/07 10:51 Página 272 Javier Moracho Torrente JOAQUÍN SANZ LEDESMA Nació en Monzón el 18 de agosto de 1954. Durante su etapa escolar, los profesores reconocieron las aptitudes atléticas de Javier y el Centro Atlético de Monzón procedió a su entrenamiento y, de su mano, entró en el mundo de las competiciones. De Monzón se trasladó a Barcelona como becario en la residencia Blume. Allí compartirá su vida deportiva con los estudios, entre los que destacó Informática. El entrenamiento lo realizó con Jaime Enciso. Terminado el Bachillerato y COU se matricula en la Universidad de Barcelona donde se licencia en INEF. Como atleta del Centro Atlético Monzón destacó en las pruebas de los primeros años setenta: en 1973 fue sexto en exalon en Barcelona con 3.187 puntos y segundo en categoría juvenil en 110 metros vallas; al año siguiente, en 1974, Moracho bate el récord provincial de altura con 1,88 m y logra su primer campeonato de España en 110 metros vallas en categoría juvenil, con un tiempo de 15,2 segundos; en 1975, doble triunfo en los nacionales juveniles, en triple salto y 110 metros vallas (con un tiempo de 14,38 y 13,7). En los absolutos el quinto puesto fue para Javier. En el campeonato de Europa Junior, celebrado en Atenas, fue medalla de plata en 110 metros vallas con 14,46, tras hacer 14,39 en semifinales. En pista cubierta se celebran los nacionales absolutos de 1976 y queda tercero. Será en San Sebastián, en 1977, cuando Moracho se proclame campeón nacional en 60 metros vallas con un tiempo de 7,90. En la misma ciudad quedará el tercero en semifinales en los Juegos Europeos. Y el mismo puesto ocupa en 110 metros vallas en el absoluto nacional de Granollers. En Madrid se proclama campeón universitario en 110 m vallas. Corre el año de 1978. Al año siguiente se celebran en Viena los campeonatos de Europa de atletismo. Moracho queda sexto en 60 metros vallas, pero en el nacional absoluto vence en longitud y 60 metros vallas. En Méjico, en la Universiada, logra el cuarto lugar en la especialidad de 110 metros vallas y tercero en los Juegos del Mediterráneo celebrados en Split (Yugoslavia). En 1980, en Oviedo, se proclama campeón de España absoluto de 60 metros vallas. En este mismo año logra su primer podium en un Campeonato de Europa absoluto. Se celebra en Sindelfingen y vence en 60 metros vallas con un tiempo de 7,7 segundos. Ha logrado la medalla de bronce. Ese verano participó en los Juegos Olímpicos que se celebraban en Moscú. En 1981 vence en pista cubierta en 60 metros vallas y en Grenoble consigue la medalla de plata con un tiempo de 6,8. Nuevo triunfo en Barcelona en los absolutos y, días después, en Coblenza logra batir el récord de España con un tiempo de 13,52. En 1982 pasa a América y obtiene buenos resultados en su prueba reina, los 110 metros vallas. En 1984 acudió a la Olimpiada de Los Ángeles y en 1988 a la de Seúl. Fue en 1986 campeón de Europa absoluto en 60 m vallas en pista cubierta. Actualmente Javier Moracho es delegado en Cataluña de Unipublic y comentarista de Eurosport en televisión. 272 Comarca del Cinca Medio