CONSULTA SOBRE LA ADVERTENCIA DE INCONSTITUCIONALIDAD DEL ARTÍCULO 2o., NUMERALES 1, 2, 3, 5, 8 y 9 y 3o. DE LA RESOLUCIÓN No. 009-98 DE 11 DE NOVIEMBRE DE 1998 EMITIDA POR LA JUNTA DIRECTIVA DE LA AUTORIDAD MARÍTIMA DE PANAMÁ, PRESENTADA POR EL ADMINISTRADOR DE DICHA AUTORIDAD. MAGISTRADO PONENTE: ROGELIO A. FABREGA Z. PANAMÁ, VEINTIUNO (21) DE SEPTIEMBRE DE MIL NOVECIENTOS NOVENTA Y NUEVE (1999). CORTE SUPREMA DE JUSTICIA. PLENO. VISTOS: En el procedimiento administrativo encaminado a la fijación de indemnización por terminación anticipada de un contrato de concesión administrativa, que se adelanta ante la Autoridad Marítima Nacional, la sociedad PACPROP, S. A., representada por la sociedad de abogados GALINDO, ARIAS & LOPEZ, ha promovido advertencia de inconstitucionalidad a los efectos de que el artículo 2º de la Resolución Nº 009-98, que supuestamente ha de ser aplicado en el aludido procedimiento administrativo, sea declarado inconstitucional por este Pleno. En virtud de la resolución de 22 de enero de 1999, se admitió la iniciativa constitucional y se le corrió traslado por diez días a la Procuradora de la Administración, quien, mediante Vista No. 150 de 26 de marzo de 1999 dió respuesta al traslado, recomendándole al Pleno que declarase no viable la iniciativa constitucional. Colocado en lista el negocio constitucional, ni el advirtiente ni ninguna otra persona participó, razón por la que, habiéndose agotado todos los trámites intermedios que gobiernan este proceso constitucional, se encuentra el mismo en etapa de decisión, a lo que se apresta el Pleno previas las consideraciones que se dejan adelantadas. CONCEPTO DE LA PROCURADURIA La Procuradora de la Administración, mediante Vista N° 150 de 26 de marzo de 1999, emite su concepto según consta a fojas 58-63 del expediente. La Procuradora se abstiene de emitir su concepto con respecto al fondo de la controversia planteada y, en su lugar, solicita a esta Superioridad que se niegue viabilidad a la advertencia presentada, indicando en lo medular de su escrito que la misma no debió ser admitida debido a que, para que prospere una Advertencia de Inconstitucionalidad sobre una norma legal, es menester que el advirtente presente su demanda ante el funcionario que impartirá justicia, y dado que en el presente caso el Administrador de la Autoridad Marítima de Panamá no es un funcionario que imparte justicia, según resulta de la lectura del artículo 25 de la Ley 19 de 1997, "Por la cual se Organiza la Autoridad Marítima de Panamá", se debe declarar no viable la presente advertencia de inconstitucionalidad, por incumplimiento de uno de los presupuestos establecidos en el párrafo segundo del numeral 1, del artículo 203 de nuestra Carta Magna. POSICIÓN DE LA SALA Conviene, en primer término, determinar si la Autoridad Marítima Nacional tiene, entre sus atribuciones, la de administrar justicia, presupuesto fundamental para intentar, por vía incidental, este proceso constitucional. Se percata de su creación, por medio del Decreto-Ley Nº 7 de 10 de febrero de 1998, dictado en ejercicio de facultades extraordinarias pro-témpore contenidas en el ordinal 3 del artículo 1º, de la Ley Nº 1, de 2 de febrero de 1998, que se trata de una entidad descentralizada del Estado que no tiene, entre sus funciones, la de administrar justicia, sino funciones netamente administrativas, contenidas en el artículo 4º, que, para mayor ilustración, se transcribe: "Artículo 4: La Autoridad tendrá las siguientes funciones: 1. Proponer, coordinar y ejecutar la Estrategia Marítima Nacional. 2. Recomendar políticas y acciones, ejercer actos de administración, y hacer cumplir las normas legales y reglamentarias referentes al Sector Marítimo. 3. Instrumentar las medidas para la salvaguarda de los intereses nacionales en los aspectos marítimo y aguas interiores. 4. Administrar, conservar, recuperar y explotar los recursos marinos y costeros. 5. Coordinar con el Ministerio de Desarrollo y Agropecuario que la acuicultura del país se desarrolle en estricto cumplimiento de las obligaciones internacionales del Estado Panameño, de las cuales la Autoridad es la responsable primaria. 6. Velar por el estricto cumplimiento de lo establecido en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, 1982 y los demás tratados, convenios e instrumentos internacionales ratificados por Panamá en relación con el Sector Marítimo. 7. Evaluar y proponer al Organo Ejecutivo y demás entidades estatales que así lo requieran, las medidas necesarias para la adopción de tratados y convenios internacionales referentes a las actividades que se desarrollen dentro del Sector Marítimo. 8. Representar a Panamá ante organismos internacionales en lo relativo a los asuntos del Sector Marítimo, en coordinación con el Ministerio de Relaciones Exteriores. 9. Coordinar con el Servicio Marítimo Nacional el cumplimiento de la legislación nacional en los espacios marítimos y aguas interiores de la República de Panamá. 10. Mantener actualizado el sistema de señalización, las ayudas a la navegación, las cartas náuticas y demás información hidrográfica necesaria para el paso seguro de los buques por los espacios marítimos y aguas interiores de la República de Panamá, de conformidad con lo establecido en la Constitución Nacional y las leyes de la República. 11. Dirigir, en coordinación con otros organismos estatales competentes, las operaciones necesarias para controlar los derrames de hidrocarburos y sustancias químicas, y cualesquiera otros desastres o accidentes que ocurran en los espacios marítimos y aguas interiores bajo jurisdicción panameña. 12. Coordinar con el Instituto de Recursos Naturales Renovables, o su equivalente, el cumplimiento de lo establecido en la Convención de las Naciones Unidas sobre el derecho del Mar, así como lo determinado en la legislación nacional, al respecto de los espacios protegidos marinos costeros que están bajo su responsabilidad. 13. Cualesquiera otras funciones que la ley le asigne". La consulta de constitucionalidad, como una de las vías de provocar el control o guarda de la constitucionalidad que le corresponde a este Pleno, persigue que la función jurisdiccional se realice de conformidad con el ordenamiento jurídico, eliminando la posibilidad jurídica de la aplicación por parte de un juez o tribunal, en un proceso determinado, de preceptos legales o reglamentarios que, aplicables al caso, infrinjan el Texto Fundamental, previniendo que tales disposiciones, violatorias de la Constitución, que han de aplicarse por el Juzgador en la decisión de un proceso determinado, se sometan (de oficio o a petición de parte: advertencia), previamente a su aplicación, al Pleno de la Corte Suprema de Justicia para que éste, en funciones de Tribunal Constitucional, despeje la duda constitucional del Juez o de la parte en el referido proceso, y evitar, en su caso, que una autoridad jurisdiccional administre justicia tomando como base jurídica una disposición, legal o reglamentaria, que pueda ser contraria al ordenamiento constitucional. Así, al realizarse la advertencia se pretende evitar la aplicación, al caso concreto, de una norma que podría resultar viciada de inconstitucionalidad, por parte de una autoridad jurisdiccional, que resulta necesaria para decidir el proceso. Por lo tanto, este tipo de control tiene, como finalidad inmediata, la administración de justicia con arreglo al ordenamiento jurídico, y, como su finalidad mediata y consecuencia necesaria, la depuración del ordenamiento jurídico de aquellas normas que resultan contrarias al ordenamiento jurídico-constitucional. ENCARNACIÓN MARÍN PAGEO se ha referido a este extremo, de la siguiente forma: "... como el control constitucional en vía incidental es un instrumento que, reparando la infracción realizada por el poder legislativo, impide la vulneración de la Constitución por el poder judicial, en este sentido la cuestión de inconstitucionalidad tiene una función tuitiva del principio de jerarquía normativa. Mediante su utilización que el poder judicial aplique normas inconstitucionales. El fin de la cuestión de inconstitucionalidad, en definitiva, es evitar la conculcación de la Constitución en el proceso jurisdiccional." (Encarnación Marín Pageo, "La cuestión de inconstitucionalidad en el proceso civil", Editorial Civitas, 1990, pág. 69). Es evidente, por lo expuesto, que lo que se persigue con este proceso es evitar que aquellas normas que, dentro de un proceso, no se han aplicado y deberán ser aplicadas al mismo, se conformen con el ordenamiento jurídico. Este criterio de aplicabilidad, por otra parte, ha de ponderarse en forma racional, en atención a que no habrá que requerir una prueba o evidencia indubitable, que la norma ha de ser, necesariamente aplicable, sino que es razonable suponer que podría ser objeto de aplicación por el Juzgador. Este Pleno, en sede de consultas de inconstitucionalidad por vía de advertencia por alguna de las partes, ha señalado que no son susceptibles de utilizar este medio incidental de inconstitucionalidad sino se trata de un servidor a quien le corresponde administrar justicia, y que la norma cuestionada sea susceptible de decidir la causa, desestimándose, en consecuencia, aquéllas que tengan un contenido procesal, como lo son las que advierte la firma GALINDO, ARIAS & LOPEZ, por lo que no resulta viable la advertencia (véase sentencias de 19 de enero de 1998, y 25 de septiembre de 1998, esta última en la que se citan las de 30 de diciembre de 1996, 14 de enero de 1997, 19 de enero de 1998 y 5 de junio de 1998). De lo dicho se desprende, sin la menor duda, que le asiste razón a la Procuradora de la Administración al recomendar se declare no viable la acción constitucional intentada, por corresponder en derecho la decisión que ha de adoptar este Pleno. En efecto: no nos encontramos ante una pretensión que se ha dirigido a un funcionario a cuyo cargo se encuentra la función de administrar justicia, a través de un proceso con plenas garantías para las partes. El pleno de esta Corporación de Justicia ha sido consistente al inadmitir advertencias de inconstitucionalidad dirigidas contra servidores públicos entre cuyas funciones no se encuentra la de administrar justicia. Véase, como ejemplo, las sentencias de 12 de diciembre de 1995 y de 25 de enero de 1994. Ello no obstante, el advirtente, de estimarlo así, puede intentar una acción directa de inconstitucionalidad contra el artículo 2º del acto reglamentario que estima inconstitucional, al amparo del primer párrafo del artículo 203 de la Constitución Política y las normas contenidas en el Capítulo III del Título I del Libro IV del Código Judicial. Por todo lo expuesto, la Corte Suprema, PLENO, administrando justicia en nombre de la República y por autoridad de la ley, DECLARA NO VIABLE la consulta sobre la advertencia de inconstitucionalidad del artículo 2o., numerales 1, 2, 3, 5, 8 y 9 y 3o. de la resolución No. 009-98 de 11 de noviembre de 1998, emitida por la JUNTA DIRECTIVA DE LA AUTORIDAD MARITIMA DE PANAMA, presentada por el ADMINISTRADOR DE DICHA AUTORIDAD. Notifiquese. (fdo.) ROGELIO A. FABREGA Z. (fdo.) HUMBERTO A. COLLADO (fdo.) MIRTZA ANGELICA FRANCESCHI DE AGUILERA (fdo.) ARTURO HOYOS (fdo.) EDGARDO MOLINO MOLA (fdo.) ELIGIO A. SALAS (fdo.) MARIBLANCA STAFF W. (fdo.) JOSÉ A. TROYANO (fdo.) ELITZA CEDEÑO (fdo.) OSCAR CEVILLE (fdo.) GRACIELA J. DIXON (fdo.) CARLOS H. CUESTAS G. (fdo.) YANIXSA YUEN DE DÍAZ Secretaria General, Encargada