JULIÁN CABALLERO AGUADO Procurador A uto de la Sección 1ª de la Sala de lo Civil del Tribunal Supremo del que ha sido ponente Antonio Salas Carceller, interpretativo de los artículos 276 y 277 de la Ley de Enjuiciamiento Civil. E había impugnado una tasa­ ción de costas sin que por el procura­ dor de la impugnante se hubiera pro­ cedido a dar el preceptivo traslado de la copia al procurador de la contrapar­ te, y precisamente por ello, ésta recu­ rrió la resolución que lo tenía por pre­ sentado al entender que el escrito de impugnación de la tasación de costas debió ser inadmitido por falta del tras­ lado previo de copias por imperativo del artículo 277 LEC. Por la parte que omitió el traslado se invocó la senten­ cia del Tribunal Constitucional de 9 de mayo de 2005 (STC 107/05), que exa­ minó la problemática planteada por la omisión del previo traslado de copias y sus efectos en el procedimiento, y concluyó que la omisión de traslado de copias había de entenderse defecto subsanable, siempre que dicha subsa­ nación se verificara dentro del plazo procesal concedido para evacuar el trá­ mite de que se tratare. En el caso planteado, el Tribunal Supremo estima el recurso planteado en­ tendiendo que la parte impugnante de las costas presentó su escrito una vez agotado el plazo de diez días que con­ cede la norma procesal y dentro de las 15 horas del día siguiente hábil al del vencimiento, que concede el art. 135.1 LEC, “por lo que no podría subsanarse la omisión, al no restar día alguno del plazo concedido, al haberse agotado el mismo y sin que pueda ­entenderse como un formalismo exacerbado, atendiendo al principio de improrrogabili­ dad de los plazos establecidos por el legislador (art. 134 LEC 2000) que rige, con carácter general, en nuestro sistema procesal, y que determina que és­ tos, fuera de los casos de fuerza mayor que impida cumplirlos –apreciada, de oficio o a instancia de la parte que la sufrió, por el Tribunal–, no puedan interrumpirse ni demorarse, producién­ dose la preclusión y subsiguiente pér­ dida de realizar el acto de que se trate una vez transcurran aquéllos, según resulta de lo establecido en el art. 136 LEC 2000. Y sin que ello cause inde­ fensión a la parte ni menoscabe su derecho a la tutela judicial efectiva, ya que es doctrina consolidada del Tribu­ nal Constitucional que no menoscaba el derecho a la tutela judicial efectiva la interpretación judicial acerca de que resulta extemporánea la llegada fuera de plazo de un escrito de parte presen­ tado en tiempo pero en otro órgano judicial distinto del competente (SSTC 117/99, 260/2000, 41/2001 y 90/2002; AATC 134/97, 80/99, 137/99 y 182/99) y que no existe vulneración de tal derecho cuando la falta de respuesta en el fondo se deba a la pasividad, desin­ terés, negligencia, error técnico o im­ pericia de las partes o profesionales que las representen o defiendan (SSTC 112/93, 364/93, 158/94, 262/94, 18/96 y 137/96)”. q Procuradores Nº 84/Febrero 2010 S Jurisprudencia Omisión de traslado de copias de un escrito presentado el día siguiente al del vencimiento 47 La fijación de cuotas variables por los colegios de ámbito autonómico es ajustada a Derecho Nº 84/Febrero 2010 Jurisprudencia S 48 entencia de la Sección 8ª del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, de 13 de noviembre de 2009, de la que ha sido ponente el magistrado Gregorio del Portillo García, que se pronuncia sobre la legalidad de las cuotas variables fijadas por los colegios de procuradores. AVISO A NUESTROS LECTORES En la Web del Consejo General de Procuradores, www.cgpe.es, pueden consultar los textos íntegros de las sentencias que se citan en este artículo. Si tienen conocimiento de alguna sentencia o resolución judicial que pueda ser de interés para la profesión, les rogamos que nos la hagan llegar por fax al nº 91 637 21 16 o a la dirección de correo electrónico [email protected] Muchas gracias por su colaboración. Procuradores C ONTRA el acuerdo de baja en el ejercicio de la profesión por impago de cuotas variables, se interpuso recur­ so de alzada ante el Consejo General de los Procuradores de los Tribunales de España que, desestimado y recurri­ do en vía contencioso-administrativa, sería objeto de sentencia estimatoria por parte del juzgado de lo contencio­ so-administrativo nº 26 de Madrid, de­ clarando nulo el acuerdo amparándose en el artículo 106.1 e) del Estatuto Ge­ neral de Procuradores del año 2002, anunciando el planteamiento de una cuestión de ilegalidad respecto del mis­ mo una vez ganara firmeza la senten­ cia, y considerando igualmente nulo el reglamento del Colegio de Procurado­ res de Madrid en cuanto define y esta­ blece la obligatoriedad para sus cole­ giados de la cuota variable. Interpuesto y tramitado recurso de apelación contra dicha sentencia, el Tri­ bunal estima el recurso y anula la sen­ tencia del juzgado, razonando en su fundamento segundo que “la doctrina más actual del Tribunal Supremo con­ sidera que el régimen económico de los colegios profesionales es susceptible de “ ser desarrollado de forma diversa en las distintas regulaciones autonómicas y estatutarias, atendiendo a las caracte­ rísticas propias de cada Comunidad. Que ello es así lo corrobora la norma­ tiva autonómica que se ha ido dictan­ do en esta materia, normativa entre la que se encuentra la Ley 19/1997, de 11 de julio, de Colegios Profesionales de la Comunidad de Madrid, en cuyo artículo 15, al regular los estatutos de los colegios de ámbito autonómico, dispone que en ellos se establecerá su régimen económico, respetándose de esta forma el principio de reserva de ley a que alude el recurrente. Debemos por todo ello concluir que la atribución a estos colegios de ámbito terri­ torial autonómico de la posibilidad de fijar las cuotas variables según las pe­ culiaridades propias de su ámbito es ajustada a Derecho y la resolución recurrida, que aplica el artículo 20.1 c) del Estatuto General al no haber sido abo­ nadas las cuotas variables, es ajustada a Derecho, procediendo por ello la es­ timación del recurso de apelación, la anulación de la sentencia y la confirma­ ción del acto impugnado”. q El régimen económico de los colegios es susceptible de ser desarrollado de forma diversa en las distintas regulaciones autonómicas y estatutarias, atendiendo a las características propias de cada Comunidad