Estatutos Generales para la Constitución y Regulación del Consejo

DIÓCESIS DE AGUASCALIENTES
Estatutos Generales
para la Constitución y Regulación
del Consejo Pastoral Parroquial
Vicaría Episcopal de Pastoral
Prioridad Pastoral de Renovación de Parroquias
Aguascalientes de la Asunción
14 abril 2013
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Capítulo VI
NORMAS COMPLEMENTARIAS
Artículo 34.- Corresponde únicamente al párroco hacer público
lo tratado en el Consejo (Cfr. CIC. 514 § 1), especialmente
cuando, en la deliberación o el tratamiento de algún asunto,
entran en juego personas o instituciones cuya fama pudiese
ponerse en peligro y ocasione daño a la comunidad.
Artículo 35.- En el Consejo las votaciones serán abiertas, salvo
que, en asuntos delicados se requiere que sean secretas.
Presentación
En el III Plan Diocesano de Pastoral se ha hecho opción por
cuatro prioridades pastorales: familia, jóvenes y adolescentes,
formación de agentes y renovación de las parroquias. La
Renovación de Parroquias integra las otras tres y es clave para
el proceso de pastoral; por eso dice el Plan que la renovación
es necesaria para que las parroquias sean verdaderas
comunidades de discípulos misioneros (III PDP 375).
Esta renovación pastoral se realiza según el III Plan desde tres
estructuras básicas que permiten una mayor participación de los
agentes de pastoral y una mayor consistencia en las acciones
pastorales... Estas estructuras son: Las pequeñas comunidades
(cfr. DA 307-310), los sectores (cfr. DA 372) y los consejos de
pastoral parroquial (cfr. DA 203, 215).
En este “Año de la Fe y de la Comunión 2012 – 2013” se han
estado consolidando los espacios de comunión en la parroquia,
por eso el Equipo Diocesano de Renovación de Parroquias,
coordinado por el Colegio de Decanos en comunión con la
Vicaria Episcopal de Pastoral trabajaron para fortalecer el
Consejo Pastoral Parroquial como promotor principal de la
evangelización, como organismo de comunión y equipo
coordinador de las diferentes tareas pastorales de la
comunidad parroquial.
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En este esfuerzo se presentan ahora estos ESTATUTOS DEL
CONSEJO PASTORAL PARROQUIAL, los cuales han sido
elaborados con la participación de los decanatos y de los
Consejos Pastorales Parroquiales. Estos Estatutos son un
instrumento para el crecimiento de los Consejos Pastorales en
la misión evangelizadora de la parroquia, por lo que será
necesario conocerlo, estudiarlo y aplicarlo.
P. Javier Cruz Muñoz
Vicario Episcopal de Pastoral
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Artículo 33.- Si al vencer el plazo señalado para la creación del
Consejo Pastoral Parroquial, el párroco que toma posesión de
una nueva parroquia no lo ha creado, se mantiene en sus
funciones el Consejo Pastoral Parroquial anterior,
considerándose automáticamente ratificado.
P. Rogelio Pedroza González
Asesor Diocesano
de Renovación de Parroquias
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Capitulo V
DE LA DURACIÓN, RENOVACIÓN Y CESE
EL CONSEJO PASTORAL PARROQUIAL
Artículo 27.-Los miembros natos son miembros permanentes
del Consejo.
Artículo 28.- Los miembros por oficio son miembros del
Consejo por un periodo de tres años, pudiendo ser elegidos o
designados para un nuevo periodo.
Artículo 29.- Los miembros designados por el párroco, son
miembros del Consejo por tres años, pudiendo ser elegidos o
designados para un nuevo periodo quedando siempre a juicio
del mismo párroco su duración.
Artículo 30.- Los miembros del Consejo cesan en sus funciones
por traslado del domicilio parroquial, por una justificada causa
personal, por repetición de ausencias no justificadas y otras
causas que determine el párroco.
Artículo 31.- El Consejo cesa en sus funciones por muerte,
traslado o renuncia del párroco, aunque pueda ratificarlo el
sucesor.
Artículo 32.- El párroco que tome posesión de una nueva
parroquia contara con un plazo de tres meses, a partir de su
llegada, para crear el Consejo Pastoral Parroquial
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Capítulo I
DE LA NATURALEZA
Artículo 1.- El Consejo Pastoral Parroquial es el organismo
propio de cada comunidad parroquial que, presidido por el
párroco y en comunión con la Iglesia diocesana, promueve,
potencia y dinamiza la actividad parroquial para el fomento de
los diferentes aspectos del proceso de la pastoral (Cfr. CIC. 536
§ 1).
Artículo 2.- Se constituye como un órgano colegiado y
permanente de carácter consultivo que representa a toda la
comunidad parroquial, y se rige por las normas que establezca
el Obispo diocesano (Cfr. CIC. 536 § 2). Corresponde al párroco
la decisión definitiva de los acuerdos del Consejo, debiendo
éste prestar gran atención a las propuestas hechas por la
mayoría de los integrantes del mismo.
Artículo 3.- El Consejo Pastoral Parroquial es una estructura
fundamental y estratégica al servicio de la pastoral parroquial,
que atiende las diferentes necesidades pastorales de la
comunidad.
Artículo 4.- La comunidad parroquial, con el párroco a la
cabeza, urgirá que el Consejo Pastoral Parroquial exista
siempre como un organismo permanente, aunque sus
miembros deban ser renovados periódicamente.
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Capítulo II
DE LOS FINES Y TAREAS
Artículo 5.- Es misión del Consejo Pastoral Parroquial:
a) Conocer y asumir el proceso pastoral impulsado por el Plan
Diocesano de Pastoral, para que se promueva en la propia
parroquia.
b) Estudiar la realidad pastoral parroquial para que se pueda
llegar a decisiones prácticas en orden a la evangelización y que
ayuden y promuevan la conformidad de la vida y actos del
Pueblo de Dios con el Evangelio (Cfr. M. P. Ecclesiae Sanctae I,
16 y CIC 511).
c) Desempeñar sus funciones de asesoría y de consulta al
ministerio pastoral del párroco, para promover y conducir las
diversas acciones pastorales.
d) Asumir el liderazgo de la misión para que la parroquia sea
una comunidad de comunidades, promoviendo la
evangelización en los sectores y en las pequeñas comunidades,
como ejes de la vida comunitaria de la parroquia.
e) Promover, fortalecer y coordinar las actividades de los
equipos pastorales y los distintos organismos laicales.
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Artículo 22.- La Comisión Permanente se reunirá para preparar
la reunión del Pleno y siempre que el párroco lo crea oportuno,
o lo pida la mitad de los miembros de la misma Comisión
Permanente, con el fin de resolver los asuntos urgentes que no
puedan esperar a la reunión plenaria.
Artículo 23.- La Comisión Permanente siempre dará cuenta al
Pleno de las conclusiones adoptadas.
Artículo 24.- Las conclusiones o los acuerdos que se tomen
tanto en el Pleno como en la Comisión Permanente deberán
estar respaldados por la mayoría de los participantes a través
de su voto.
Artículo 25.- Por consiguiente, dichas conclusiones o acuerdos
como expresión de la voluntad del Pleno o de la Comisión
Permanente, se presentarán al párroco a manera de consejo,
sugerencia o moción, para que ateniéndose a la prudencia, el
mismo párroco tome la decisión definitiva, según lo dicho en el
Artículo 2 del presente Estatuto (Cfr. CIC 119).
Artículo 26.- El Consejo podrá llamar a personas ajenas al
mismo para recibir su juicio o consejo en materias en las que
sean competentes o gocen de un mayor conocimiento.
Tendrán voz, pero no voto.
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Artículo 18.- El Pleno tendrá un secretario, elegido con los
mismos criterios del coordinador según los artículos 13, 14, 15 y
16 de estos Estatutos.
Artículo 19.- Las funciones del secretario serán:
a) convocar, de acuerdo con el presidente, al Pleno del Consejo
con siete días de antelación, como mínimo,
b) elaborar con el párroco y enviar el orden del día para
reunión del Pleno,
c) tomar nota de los acuerdos adoptados por el Pleno y
registrarlos en un libro con este fin,
d) actualizar la lista de los miembros del Consejo,
e) levantar acta de las sesiones ordinarias y extraordinarias que
realice el Pleno y la Comisión Permanente,
f) custodiar el libro de actas y
g) organizar y custodiar el archivo del Consejo.
Artículo 20.- La Comisión Permanente estará compuesta por el
párroco, por el coordinador general del Consejo, por el
secretario y por un número de miembros proporcionado al
resto del Consejo, el total de la comisión no será inferior a 5, ni
superior a 7, elegidos por el Pleno del Consejo.
Artículo 21.- La Comisión Permanente podrá estar
representada, ad casum, por un sacerdote vicario delegado por
el párroco, atendiendo siempre lo establecido en el artículo 2
de estos Estatutos.
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g) Ser un organismo de vinculación y de comunicación pastoral
con las estructuras decanales y diocesanas; secundando y
atendiendo sus iniciativas y orientaciones de cara a la
parroquia, para una mayor eficacia de la pastoral orgánica.
h) Será testimonio y promotor de unidad entre las pequeñas
comunidades, los diferentes sectores y los diferentes grupos
parroquiales.
Art. 6 Las principales tareas a las que debe atender el Consejo
son, entre otras, las siguientes:
a) Promover las pequeñas comunidades.
b) Organizar la acción pastoral en los sectores.
c) Garantizar que se organice la pastoral fundamental en la
parroquia: pastoral profética, pastoral litúrgica y pastoral
social.
d) Garantizar la organización de la pastoral diversificada.
e) Asegurar que las prioridades pastorales señaladas en el Plan
Diocesano de Pastoral se trabajen en la comunidad.
f) Organizar la Asamblea Pastoral Parroquial.
g) Dar seguimiento a la elaboración de los programas
pastorales de los equipos y organismos pastorales de la
parroquia al inicio del año pastoral, además de cuidar que se
tengan los medios adecuados para su ejecución, así como su
revisión y evaluación.
g) Elaborar al inicio del año pastoral su programa pastoral
como Consejo.
i) Supervisar y analizar los datos de la realidad parroquial.
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j) Atender los trabajos pastorales significativos que no
estuvieron contemplados en la programación.
k) Cuidar de la formación permanente de los integrantes del
Consejo Pastoral Parroquial.
Artículo 15.- El párroco contará con un plazo de 7 días, a partir
de la elección, para hablar personalmente con el candidato
electo y preguntarle si acepta el nuevo cargo, si es necesario
hablará con cada uno; y una vez que acepte el nuevo
coordinador deberá manifestarlo públicamente a la
comunidad.
Artículo 16.- Los candidatos a coordinadores, además de
cumplir con los requisitos que menciona el artículo 8 de estos
Estatutos, deberá estar integrado ya al Consejo por lo menos
un año y se distinguirá por su capacidad de coordinar al Pleno
para que cumpla con su misión y sus tareas.
Artículo 17.- La funciones del coordinador serán:
a) representar a la parroquia en los organismos del decanto,
b) ser un vínculo estrecho entre el Consejo y el párroco,
c) coordinar y supervisar las actividades pastorales y eventos
parroquiales (Ej. Fiesta patronal, asamblea parroquial, tiempos
fuertes, etc.),
d) ayudar en la moderación de las reuniones del Consejo,
e) moderar el tiempo durante las reuniones del Pleno,
f) elaborar el orden del día de las reuniones, en coordinación
con el párroco y el secretario,
g) favorecer un clima afectivo, satisfactorio y dinámico durante
las reuniones.
h) dar seguimiento a los acuerdos del Pleno y de la Comisión
Permanente para que se lleven a cabo según lo determinado
por el párroco.
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Capítulo IV
DE LA ESTRUCTURA Y ORGANIZACIÓN
Capítulo III
DE LA COMPOSICIÓN Y MIEMBROS
Artículo 10.- El Consejo Pastoral Parroquial se integrara por tres
partes: Pleno, Comisión Permanente y Secciones.
Artículo 7.- Los miembros del Consejo habrán de ser
representativos de toda la comunidad parroquial. Tendrá, por
tanto:
Artículo 11.- El Pleno lo integran todos los miembros del
Consejo bajo la presidencia del párroco.
Artículo 12.- El Pleno se reunirá en sesión ordinaria, al menos,
una vez al mes. Y en sesión extraordinaria, cuantas veces lo
juzgue necesario el párroco, o lo pida un tercio de los
miembros del Consejo, como mínimo.
Artículo 13.- El Pleno contará con un coordinador general que
será elegido por el párroco de una terna presentada por el
pleno del Consejo a través de votación secreta, a tenor del
canon 119 del CIC.
Artículo 14.- La votación secreta será escrutada el mismo día
por el párroco y el coordinador saliente. El párroco manifestará
si los 3 candidatos cuentan con los votos suficientes para que
él pueda elegir al candidato, de lo contrario se volverá a hacer
la elección bajo votación secreta de los 5 candidatos que hayan
contado con el mayor número de votos, de donde el párroco
obtendrá los tres candidatos.
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7.1 Miembros natos: El párroco, los vicarios parroquiales y el
diácono, si lo hubiera, así como cualquier sacerdote que esté
adscrito por algún título a la parroquia.
7.2 Miembros por oficio:
a) Coordinador de cada sector.
b) Coordinador de cada una de las tareas de la pastoral
fundamental.
c) Coordinador de cada prioridad pastoral señalada por el Plan
Diocesano de Pastoral.
d) Coordinador de la formación de agentes.
e) Coordinador de cada una de las pastorales diversificadas.
f) Coordinador de cada uno de los organismos laicales que, a
juicio del párroco, den algún signo de vitalidad en la
comunidad.
g) Coordinador del Consejo Parroquial de Asuntos Económicos.
h) Coordinador parroquial del Observatorio Pastoral.
7.3 Miembros por elección, teniendo en cuenta la normativa
del CIC. c 119:
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a) Un representante por cada uno de los Institutos de Vida
Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica, tanto de
religiosos como de religiosas, si existen en la comunidad.
b) Otras representaciones que el párroco crea convenientes o
aconsejen las circunstancias.
7.4 Miembros por designación directa del párroco:
Para cubrir lagunas de representatividad y necesidades que
pudieran existir, el párroco podrá designar miembros
pertenecientes al Consejo Pastoral Parroquial, en número no
inferior a dos ni superior a cuatro, que gocen de la estima
general de la comunidad parroquial.
f) Que posean una cierta madurez personal, abiertos al
diálogo, creativos, sensibles y estén comprometidos con la
comunidad parroquial.
g) Que tengan una efectiva disponibilidad, manifestando
interés por los asuntos de la parroquia, ya que es un servicio y
no un título.
Artículo 9.-El Consejo Pastoral Parroquial estará integrado
preferentemente por un número de participantes no menor de
10 ni mayor de 30, quedando a juicio del párroco definir el total
de los miembros, salvando siempre la representatividad de la
comunidad y la efectividad en la conducción de cada sesión.
Artículo 8.- Para la mayor efectividad en el funcionamiento del
Consejo, los miembros se regirán bajo los siguientes criterios:
a) Que estén en plena comunión con la Iglesia (Cfr. CIC. 512) y
se distingan por su caridad hacia la comunidad parroquial.
b) Que destaquen por su fe, buenas costumbres y prudencia
(Cfr. CIC. 512 § 3).
c) Que a través de ellos quede verdaderamente representada
la porción del Pueblo de Dios que constituye la parroquia (Cfr.
CIC. 512 § 2).
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d) Que exista una auténtica representatividad de la comunidad
(Cfr. CIC. 512 § 2).
e) Que hayan alcanzado la mayoría de edad, que, según el
Derecho Canónico, se encuentra en los 18 años (Cfr. CIC. 97).
Salvo que a juicio del párroco se considere apto para este
servicio un menor de edad.
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