Buenos Aires, Martes 13 de Abril de 2010 Nº 1937 Derecho colectivo del trabajo Trabajadores amparados por tutela sindical: Intimación para jubilarse. Necesidad de tramitar la exclusión de tutela. comenta el Dr. Rodolfo Aníbal González La Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo, sala 3ª (09/09/2009), en autos "Melidoni, Carlos A. y otro v. Empresa Ferrocarril General Belgrano S.A.", dispuso que la intimación prevista en el art. 252 de la Ley de Contrato de Trabajo, sólo pudo realizarse válidamente, de corresponder, respecto de los trabajadores amparados por la tutela sindical, previa exclusión de tutela decretada en sede judicial. La intimación en los términos del citado artículo implica poner un plazo para la terminación del vínculo, por lo que mal puede afirmarse, como pretendió la empresa, que ello no constituye una modificación de las condiciones contractuales. Los demandantes, que se desempeñaban como miembros de la Comisión Revisora de Cuentas de la Asociación del Personal de Dirección de los Ferrocarriles Argentinos y Administración General de Puertos y Puertos Argentinos estaban comprendidos en la descripción del art. 48 de la Ley 23.551 de Asociaciones Sindicales, pues esta norma alude a todos los trabajadores que ocupan cargos electivos o representativos en asociaciones sindicales con personería gremial. En tal sentido, la Ley 23.551 dispone que los representantes sindicales en la empresa continuarán prestando servicios y no podrán ser suspendidos ni modificadas sus condiciones laborales ni despedidos durante el tiempo que dure el ejercicio de sus mandatos, salvo que mediare justa causa (art. 48) y declaración judicial previa que los excluya de tales garantías (art. 52). Y aun cuando opte el empleador por llevar adelante, ante los Tribunales, el referido proceso, su promoción no importa, ni mucho menos, la automática privación al delegado del derecho de prestar servicios –menos aún de ejercer sus atribuciones gremiales- durante el desenvolvimiento del trámite ante la justicia. Actio Reporte Diario es una publicación especializada en Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social. Dirección Jurídica: Dr. Rodolfo Aníbal González. © Hecha la reserva que marca la Ley 11.723 Editora: Actio Consultores Jurídicos S.A. E-mail: [email protected] Central de Consultas Telefónicas: (54-11) 4322-3071/3120/5654/6188/6335/6348/8655/8700. Administración: (54-11) 4322-6704. Comercialización: (54-11) 4322-7203. E-mail: [email protected] Lavalle 648 - Piso 2º - 1047 - Buenos Aires - Argentina Ingrese a Ingrese a Ingrese a Ingrese a Ingrese a Actio Web Actio Reportes Nuestros Servicios Comentarios Atención al Cliente Página 1 - 2 Ello significa que la citada ley, para proteger la estabilidad de los trabajadores que cumplen funciones gremiales, diseñó un sistema que establece la imposibilidad de afectar los contratos de trabajo de los representantes sindicales sin que medie "...resolución judicial que los excluya de la garantía...", régimen que participa de las características de un "sistema de propuesta de despido", ya que el contrato laboral sólo puede ser afectado por despido o por el ejercicio de facultades propias del empleador, mediante el resultado de un acto complejo en el cual el dador de trabajo participa con una iniciativa que no puede perfeccionar por sí mismo, sino que queda subordinada en su eficacia a una instancia, sea judicial, administrativa o interprofesional que la admite y legitima. Vale decir que en el régimen de la Ley 23.551 al empleador le está vedado disponer por sí, la cesantía de trabajadores amparados por la garantía que la propia ley prevé. Por ello, para determinar si la decisión del empleador respecto del representante sindical es lícita no sólo se requiere acreditar justa causa con la finalidad de descartar la posibilidad de trato discriminatorio o una conducta persecutoria en virtud del ejercicio de una función gremial, sino que también debe obtenerse la correspondiente exención de tutela; vale decir, que debe mediar autorización judicial para sancionar, modificar las condiciones del contrato o despedir. Por consiguiente, lo que el empleador disponga sin haber obtenido la respectiva autorización es nulo y, por lo tanto ineficaz para alterar el statu quo vigente. Concluye el tribunal que en lo que respecta a la intimación prevista en el art. 252 de la Ley de Contrato de Trabajo, dicho emplazamiento sólo pudo realizarse válidamente, de corresponder, previa exclusión de tutela decretada en sede judicial, porque la intimación en los términos del citado art. 252 implica poner un plazo para la terminación del vínculo, por lo que mal puede afirmarse, como pretendió la empresa, que ello no constituyera una modificación de las condiciones contractuales. El contrato de trabajo se entiende celebrado por tiempo indeterminado y la intimación para que el trabajador se jubile es facultativa, no obligatoria para el empleador, por lo que la decisión, de realizarla, queda sujeta a igual suerte que las restantes decisiones de tal tipo que puedan afectar al delegado o representante gremial. Vale decir que salvo el caso previsto por el art. 51 de la Ley 23.551 (cierre del establecimiento), en todos los demás supuestos el empleador que desee adoptar una medida respecto de un trabajador amparado por la Ley de Asociaciones Sindicales debe promover la acción de exclusión, incluso cuando se trata de decisiones que intenten ampararse en lo dispuesto en el art. 252 de la Ley de Contrato de Trabajo, a fin de despejar motivaciones antisindicales.♦ Comentarios y consultas: [email protected] Actio web Llegamos a los 160.000 visitantes!!!! Nos congratulamos por haber recibido hasta la fecha 160.000 visitantes a nuestra página web www.actio.com.ar A todos Ustedes, que nos honran por ser nuestros Clientes, Muchas Gracias !!! Página 2 - 2