POWER PLATE Y EL ENTRENAMIENTO EN ACELERACIÓN: NUEVOS HORIZONTES EN FITNESS Y BELLEZA Por: Luis Perea. Director de formación de Power Plate España. Asesor de salud y coordinador de programas en la Unidad de Medicina del Deporte SPORTS MEDICINE de Hospital Quirón Barcelona. Director de Fit For Life Personal Trainers. [email protected] Copyright © Luis Perea 2007. Todos los derechos reservados. Cualquier copia, duplicación o uso del contenido de este artículo está prohibido salvo autorización previa del autor. El empleo de plataformas vibratorias, comenzó hace más de cuarenta años en el ámbito del deporte de élite y el entrenamiento de los astronautas. Se trata de un concepto que ha vivido de alguna forma, la misma evolución que la electroestimulación: un sistema al que le separan casi veinte años entre su utilización en el sector médico y el empleo en el ámbito del fitness o la belleza corporal, aunque los efectos de los estímulos vibratorios se conocen desde el siglo XIX (Granville, 1881) y existen ya algunos estudios de mediados de 1920 en donde se utilizan deportistas como modelos de ensayo. Pero no fue hasta entrada la década de los 70 cuando Nazarov, comenzó a crear los modelos más primarios de plataformas de vibración en base a veinte años de experiencia en su aplicación en el ámbito de la fisioterapia y la recuperación muscular. A partir de este momento, fue un sistema muy extendido en Rusia, empleado por deportistas de las selecciones de Gimnasia Deportiva, Lucha, Patinaje etc. (Weber, 1997). La evolución que ha sufrido este concepto en los últimos años ha sido enorme, habiendo creado multitud de centros específicos de entrenamiento-tratamiento en vibración gracias a sus efectos sobre el músculo, la piel, el tejido conjuntivo, el hueso o el sistema circulatorio, el equilibrio y la aceleración en los procesos de reactivación propioceptiva, habiendo creado multitud de centros en EE.UU. y también en Europa, por lo que se está convirtiendo en uno de los elementos más útiles y atractivos para ofrecer resultados a grupos de clientes y grupos de pacientes a los que difícilmente podríamos atender de otra forma con niveles tan altos de efectividad. Bases fisiológicas El repetido estímulo sobre músculos, tendones y ligamentos provocan una hiperactivación del llamado reflejo miotático. Se trata -explicado de una forma simplede una respuesta defensiva al estiramiento mediante una contracción inmediata. El inductor de este reflejo es el huso muscular, que es el receptor encargado entre otras cosas de registrar el estado de tensión y extensión de un músculo. Durante todo este proceso de repetición de tensión y extensión, suceden una serie de procesos en cadena que involucran a multitud de elementos en el interior de nuestros músculos y lo más importante: nuestro cerebro: estímulo de las fibras intrafusales que responden a los cambios en la longitud (receptores fásicos), estímulo de las fibras de núcleos en cadena que responden al estiramiento estático (receptores tónicos) y una compleja interacción entre la médula espinal y procesos sinápticos que involucran a las motoneuronas musculares… todo ello con el propósito de generar una contracción muscular suficiente como para absorber la energía cinética que busca la elongación del músculo y generar una respuesta contraria de contracción: el reflejo defensivo. Realmente, en un sector como el de la belleza o incluso el del fitness donde es ahora cuando se está profundizando más en aspectos tan importantes como la biomecánica del ejercicio o la fisiología aplicada al entrenamiento funcional (que no es más que aplicar la lógica a nuestros entrenamientos y el de nuestros clientes en vez de trabajar por mimetismo), poder contar en nuestros centros deportivos o de belleza con un sistema como la vibroestimulación, capaz de provocar de forma refleja e involuntaria una movilización y reactivación tan tremenda de nuestro sistema neuromotor es verdaderamente extraordinario. Y no simplemente por poder provocar esta reactivación, sino por poder provocarla en cualquier persona independientemente de su edad o condición física. A todo esto se suma la deplección de glucógeno en las fibras musculares sometidas al estímulo repetido, la interacción de la acetil-colina como receptor post-sináptico (aumentando la permeabilidad de la membrana celular) y un aumento de la concentración de calcio intracelular que acelera la interacción actinamiosina, con la consiguiente facilitación de contracción muscular. Dentro de toda esta amalgama de conceptos fisiológicos que cualquier buen profesional de la actividad física y la salud debería por lo menos conocer, existe uno de especial importancia: el vínculo entre la acetil-colina (el primer neurotransmisor descubierto) y su importante papel en la estimulación muscular y la reactivación por demanda de las glándulas pituitaria y adrenal. Se han dado casos de una disminución de hasta el 85% de acetil-colina en personas que padecían Alzheimer, por lo que no es extraño que los últimos estudios revelen que los deportistas habituales tienen hasta un 40% menos de probabilidades de sufrir esta enfermedad, según datos del centro Group Health Cooperative de Seattle y la Universidad de Columbia. Todo esto ¿nos lleva a pensar que el entrenamiento por vibroestimulación es extraordinario?, no, simplemente la actividad física y sus efectos sobre el organismo son extraordinarios. Lo que si nos facilitan las plataformas vibratorias es hacer llegar estos efectos a casi todos los segmentos de clientes de una forma muy segura y muy rápida. ¿Es un sistema seguro? Respetando los parámetros lógicos de progresión diríamos que es un sistema tremendamente seguro en comparación con otros sistemas de entrenamiento. Por poner un ejemplo: ¿es seguro correr en una cinta? Depende de múltiples factores como la capacidad cardiopulmonar del individuo, su estado articular, su capacidad de reacción coordinativa, su sistema propioceptivo y evidentemente la intensidad del ejercicio. Los parámetros en el caso de las plataformas vibratorias son menores si respetamos las progresiones ya que no es necesario una capacidad cardiorrespiratoria determinada, una coordinación concreta ni siquiera un nivel de equilibrio específico… menos parámetros a controlar igual a menos riesgo, pero con un efecto muy alto a nivel muscular. Campos de actuación El sistema de vibroestimulación, abarca una amplia lista de efectos en nuestro organismo: A nivel óseo, muscular y nervioso: Existen diferentes estudios que demuestran un aumento significativo de la fuerza máxima y explosiva, un aumento de la sensibilidad y respuesta del sistema nervioso central, Una mejora significativa de la flexibilidad gracias al aumento de la temperatura interna y al aumento de irrigación sanguínea del sistema muscular y téndino-ligamentoso y un aumento de la densidad ósea (Flieger y col., 1998; Porta y col., 2003) convirtiéndose en un medio idóneo para el tratamiento de la osteoporosis. Algunos estudios avalan además que física y biológicamente, el nivel de sobrecarga de una sesión de entrenamiento es perfectamente comparable al de varias sesiones de musculación tradicionales. A nivel hormonal y circulatorio: Se ha demostrado una mayor activación hipotalámica con el consiguiente incremento hormonal de hormona del crecimiento y testosterona (Bosco y col., 1999; Porta y col.,2003). La estimulación en la producción de Testosterona y HGH (hormona del crecimiento) es muy importante para la mujer ya que interviene directamente en la producción y regeneración de la masa muscular, lo que es determinante para conseguir utilizar la grasa en forma de combustible gracias también a la reactivación de los procesos fisiológicos antes descritos. Existe además una relación directa entre el trabajo muscular y el aumento de capilarización de tejidos: el ejercicio físico exige una demanda de energía y de oxigeno. Este incremento en la demanda provoca una vasodilatación para aumentar el volumen de sangre intracelular. Este aumento de sangre conlleva un aumento del porcentaje de oxigeno por centímetro cuadrado y a mayor cantidad de oxigeno mayor facilidad para la combustión de grasas. Sabemos también que uno de los principales síntomas de la inactividad es la perdida de capilares y la disminución del riego sanguíneo con el consiguiente efecto sobre la piel y la celulitis que es básicamente un problema circulatorio. A nivel de belleza y adelgazamiento: El aumento de la vascularización da un aporte añadido de oxígeno y agua a las células de nuestra piel, lo cual se traduce en una piel más tersa y mejor hidratada. Este mismo efecto ayuda a retirar los productos de desecho y elimina toxinas gracias a la aceleración de procesos que el cuerpo había “desaprendido”. Asimismo un volumen mayor de oxigeno y vasos sanguíneos significa una piel mejor alimentada, interponiendo capilares sanguíneos entre los tejidos con celulitis y disminuyendo de esta forma los síntomas que esta produce sobre la piel. Es importante destacar que el cuerpo es eficiente en hacer “lo que está acostumbrado a hacer”. Esto que parece una perogrullada, es sumamente importante para personas que poseen un metabolismo que ha merced de la pérdida sistemática de fibras musculares (por sedentarismo) y por causa de un lento metabolismo combustionador, han conseguido sin quererlo, un metabolismo muy eficaz en ahorrar en vez de en gastar. De esta forma, el incremento de fibras musculares por centímetro cuadrado (no hay un incremento de tamaño muscular) significa un aumento de la cantidad de calorías que el cuerpo necesita para vivir. Esto es: aumentamos nuestro consumo en reposo y también durante cualquier tipo de actividad física, por ello las calorías que ingerimos “de más” son quemadas con mayor facilidad. En el ámbito de la belleza y la estética, este sistema está ganando muchísima popularidad en los últimos años gracias a su facilidad de uso y a tener efectos directos no simplemente sobre la piel (algo en lo que el sector cosmético ha centralizado de siempre su atención) para ofrecer ventajas también al tejido subcutáneo y al propio músculo, con el consiguiente efecto en la tonificación general. A nivel postural y de espalda: Gran parte de las patologías de espalda son padecidas por dos razones básicas: en primer lugar comemos mal y bebemos poco (el disco intervertebral está formado por un núcleo pulposo y un anillo externo que es en un 70% agua) por lo cual, los niveles bajos de hidratación están presentes en el 33% de las hernias discales. En segundo lugar -y por decirlo de una forma no excesivamente científica- : hemos dejado de hablar con nuestra musculatura profunda. En el mejor de los casos, “nos hablamos un poco con nuestra estructura muscular periférica” pero casi siempre el estímulo que recibe nuestra musculatura interna sobretodo en las zonas más profundas de la espalda es bastante básico. Me refiero básicamente a dos grupos musculares que son beneficiados por la activación de patrones motores que se genera mediante en entrenamiento en plataforma vibratoria: 1. Los multífidos vertebrales y los intertransversos: Que unen una media de tres vértebras y se extienden desde los arcos vertebrales a las apófisis espinosas, controlando el movimiento. Los intertransversos a su vez, se extienden desde la apófisis transversa a la inmediatamente inferior, controlando a grandes rasgos y entre otras cosas la extensión de la columna y la distancia intervertebral. De ahí su importancia en las patologías de espalda. 2. El transverso abdominal que estabiliza la columna lumbar y que al reactivarse conjuntamente con los multífidos vertebrales, forman una “faja de protección” estabilizadora contra patologías como la lumbalgia. Es el antagonista desde la zona lumbosacra de los músculos extensores o espinales. De ahí su importancia en la prevención -por ejemplo- de la lordosis lumbar ya que un trabajo conjunto de abdominales y de la musculatura extensora prevendrá de anteversiones de cadera y pelvis basculadas, disminuyendo la lordosis lumbar y la cifosis torácica. Resulta evidente pensar que un trabajo analítico de cadenas musculares puede ser muy aconsejable para reactivar estos patrones motores. Es cierto. Pero eso está en manos de pocos profesionales y lo que precisamente pone en nuestras manos el entrenamiento o tratamiento por medio de vibroestimulación es realizar una reactivación muscular general también para aquellas personas que buscan un objetivo postural pero sobretodo estético y sin dependencia directa de su edad o capacidades físicas. Aplicaciones especiales Existen diferentes aplicaciones más allá del ámbito estético en donde el uso de las plataformas de vibración constituyen el caballo de batalla: 1. Clientes o pacientes con limitaciones físicas o lesiones, gracias a su baja demanda articular. 2. Clientes de cierta edad gracias a la escasa implicación coordinativa y cardiovascular. Es importante destacar que se está extendiendo su empleo en terapias anti-aging. La causa es sencilla: el primer síntoma de la percepción de la madurez física es la merma de capacidad física, bien por pérdida de equilibrio, fuerza o disminución del mapa neuromuscular, aspectos que ataca muy directamente el entrenamiento en vibroestimulación. 3. Poblaciones especiales: Mi experiencia personal desde Institut Vila-Rovira de Clínica Teknon en Barcelona, centro de referencia en cirugía estética y nutrición, así como con otras instituciones médicas, ha sido especialmente en el tratamiento de pacientes en procesos post-operatorios y tratamientos de pérdida de peso. Este campo de acción, posiblemente uno de los más interesantes del ámbito de la actividad física y el entrenamiento personal, se potencia enormemente con el uso del entrenamiento en aceleración con Power Plate, gracias entre otros muchos, a cuatro. aspectos fundamentales: La mejora de los procesos circulatorios y de capilarización favorecen los procesos cicatrizantes. La reactivación general de la musculatura aumenta enormemente los procesos de “reaprendizaje” del circuito de consumo calórico. Por otra parte la ganancia de masa muscular acelera este consumo, un hecho muy relevante en pacientes con escasa adherencia a programas de ejercicio físico o bien con ciertas limitaciones cardiovasculares o de salud: hipertensión, sobrepeso, consumo de fármacos etc. La retonificación de zonas específicas como la abdominal o la zona de los glúteos. Aspecto fundamental desde el punto de vista del éxito de la intervención y de la percepción estética. La conservación de la estructura de mecanoreceptores y neurotransmisores que acelera considerablemente los tiempos de recuperación. Como vemos, las plataformas de vibración no son artilugios extraños sino verdaderas herramientas de trabajo a las cuales se les puede sacar un rendimiento formidable si sabemos como utilizarlas. Luis Perea