SINDROME NAVICULAR

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SINDROME NAVICULAR
JOSE ALBERTO GARCÍA LIÑEIRO MV –DA –ESP UNIV
PROF ADJ CATEDRA DE SALUD Y PRODUCCIÓN EQUINA
DIRECTOR ACADÉMICO DE LA CARRERA DE ,MAESTRÍA EN MEDICINA DEPORTIVA DEL EQUINO
DIRECTOR DE LA CARRERA DE ESPECIALIZACIÓN EN MEDICINA DEPORTIVA DEL EQUINO
INTRODUCCION
Las primeras descripciones de la enfermedad navicular se remiten al siglo XVI, màs
especìficamente en 1752. Ya desde entonces ha sido reconocida como una de las causas
mas importantes de cojeras crónicas en el caballo (constituye un tercio de las causas de
dichas cojeras en el miembro anterior). Debemos tener en cuenta que es una de las
principales y más estudiada patología claudicógena que presenta el aparato locomotor del
equino.
También es de difícil estudio debido a que no es reproducible experimentalmente, lo
que lleva a que todos los conocimientos no puedan partir de un estudio científico tipo, sino
de animales que padecen dicho síndrome.
En muchos lugares del mundo se ha adoptado el hecho de tener en cuenta
seriamente todas aquellas alteraciones radiológicas y de aplomos, razas, conformación,
edad y deporte que practica o practicará el animal para determinar la aprobación de un
exámen clínico de compra.
Una crítica aplicable al contexto de cualquier discusión veterinaria tiene un
específico blanco sobre el síndrome navicular: un médico alemán rezaba que una
enfermedad es descripta a través de los años cuando se llega a la conjunción de numerosas
teorías, todas parcial o totalmente válidas y la comparaba con la descripción que pueden
hacer varios ciegos de un gran elefante, uno lo tomará por la cola y la describirá como tal,
otro tomará un miembro y hará lo mismo, otro tomará alguna oreja, otro la trompa y otro un
colmillo. Todos contarán algo cierto pero diferente y solo cuando se produzca la
confrontación de todas las descripciones se darán cuenta que estaban frente a un elefante.
Y así aquellos hombres de Indostán
discutieron fuerte y largo,
cada uno con opinión propia
excesivamente firme y dura,
y aunque cada uno con razón parcial
todos estaban equivocados.
Como muchas veces en las guerras teológicas
los contrincantes obnubilados,
ignorando por completo
lo que los demás decían,
hablaban respecto de un elefante
que ninguno de ellos había visto.
Los resultados ampliamente diferentes de las investiaciones de esta patología no son
contradictorios sino complementarios, conformando un cuadro de síndrome completo con
etiologías y patogenias multicausales y manifestaciones clínicas y patológicas diversas.
Esto ni más ni menos es el síndrome navicular, una enfermedad cuyo diagnóstico certero y
tratamiento preciso quita el sueño a muchísimos investigadores del planeta.
A LA LUZ DE LA EVOLUCIÓN DE LA IMAGENOLOGIA, LO DESEABLE ES
SALIR RÁPIDAMENTE DE LA CONSIDERACIÓN DE ESTE SINDROME COMO
TAL, DETERMINANDO FEHACIENTEMENTE QUE PARTE DEL APARATO
PODOTROCLEAR HA SIDO AFECTADA
DEFINICION
"Trastorno doloroso asociado a anormalidades en el andar, centrado en la parte
palmar de una o ambas manos debido a alteraciones degenerativas localizadas en el aparato
podotroclear" (6).
"Es un estado mórbido que compromete al hueso navicular, bolsa podotroclear, FDP
y ligamentos asociados" (10).
Algunos autores han divido al síndrome en entidades separadas como ser la
artrosinovitis interfalangena distal, tendinitis del FDP, desmitis del ligamento suspensorio
del navicular o d e los colaterales, forma ósea, bursitis podotroclear, forma ungueal y forma
vascular. Esto no presenta demasiado sentido debido a que como se explica en varios
puntos de este trabajo no tenemos una enfermedad simple sino un auténtico síndrome.
SINONIMIA
Podotrocleosis crónica aséptica, Enfermedad del Navicular, Podotroclitis, Artritis
Navicular, Sesamoiditis Distal, Bursitis Podotroclear, Naviculitis, Podoartrocasis,
Tenosinovitis Podosesamoideana.
RESEÑA ANATOMICA
El hueso navicular es un pequeño hueso en forma de lanzadera ubicado entre el
tendón flexor digital profundo (FDP) y la cara palmar de la articulación interfalángica distal
(IFD) a la que contribuye en un 30% a su anatomía articular. Presenta una superficie
articular y una superficie flexora, ambas con una cresta sagital media. También presenta en
su borde distal excavaciones que son fosas sinoviales y no canales vasculares como se creía
antes (7) las cuales como veremos son uno de los principales asientos degenerativos del
navicular.
Es un hueso sesamoideo que se encuentra en ligamento interóseo palmar. Este
actúa proximalmente como ligamento suspensorio del navicular y distalmente como
ligamento navicular distal, menos importante patológicamente hablando, que lo sostiene
contra la cara palmar de la tercera falange. Las arterias nutricias ingresan al navicular a
través de dichos ligamentos siendo mayor el aporte desde el ligamento suspensorio como
así lo demuestran los estudios angiográficos (12). En el adulto normal el aporte sanguíneo
proximal está muy reducido, hecho que dió origen a la teoría vascular.
La superficie articular del navicular se encuentra cubierta por cartílago hialino,
mientras que la superficie flexora lo es por fibrocartílago la cual alberga una pequeña fosa
sinovial a nivel de la eminencia sagital media cuya degeneración es objeto discutido en
cuanto a si guarda o no relación con la manifestación clínica de la patología (3, 5, 6, 12).
Entre el FDP y el navicular se encuentra interpuesta la bolsa sinovial vesicular
podotroclear, la cual es un espacio prácticamente virtual en condiciones normales, limitada
en sus extremos por un delgado tejido sinovial y conteniendo una mínima cantidad de
líquido sinovial. Esta bolsa puede estar, en porcentajes variables según los investigadores
(hay quienes hablan de hasta en un 95% de los casos), conectada con la sinovial de la
articulación IFD, hecho que le restaría mérito a la tan laboriosa infiltración de dicha bolsa
(3, 6, 12).
El llamado APARATO PODOTROCLEAR está constituído por el hueso navicular
y sus ligamentos, el tendón del FDP y la bolsa podotroclear.
La principal función del hueso navicular es la de proporcionar un delicado cambio
de dirección al FDP y asegurar un ángulo de inserción adecuado y constante en la cresta
semilunar de la falange distal.
Por otra parte este hueso es un punto de poco movimiento pero sometido a mucha
carga. Esto se da en el extremo proximal y más aún en el distal, sitio en el que asienta una
de las principales alteraciones anatómicas del navicular, siendo mínima sobre la eminencia
sagital (6). Esta presión es ejercida sobre la superficie flexora por el FDP. Este es un hecho
fundamental ya que esta característica predispone a padecer una enfermedad articular
degenerativa, como sucede en otras articulaciones del equino como ser la intertarsiana
distal y la tarsometatarsiana; son articulaciones que soportan mucha presión por unidad de
superficie y tienen poco movimiento. Estos descubrimientos dieron origen a la teoría
mecánica y a la de la enfermedad articular degenerativa (EAD).
En base a todo esto y a lo que será descripto a continuación es que se considera más
apropiado dirigirse a esta patología como un SINDROME y no como una simple
enfermedad (4, 12, 6). Debemos tener en cuenta este punto ya que frente a un paciente que
sufre un síndrome navicular probablemente no encontremos un pie enfermo sino un
miembro o a veces un paciente con múltiples puntos dolorosos y una capacidad deportiva
disminuida o anulada para un deporte de alto rendimiento. El éxito del veterinario y del
tratamiento dependerá en gran parte de esto.
CARACTERISTICAS DEL SINDROME NAVICULAR
Se caracteriza por la existencia de dolor crónico en la parte palmar o de los talones
de las manos y su presentación en general es bilateral. Aún hoy no se comoce todavía la
causa precisa de esta patología y el significado de las modificaciones estructurales de los
naviculares casi siempre bilaterales pero no idénticas, no siempre se correlacionan bien con
los signos clínicos (6).
Algo cierto es que el trastorno es debido al desarrollo de fenómenos degenerativos
del navicular. La existencia del síndrome navicular también implica la existencia de un
espectro clínico de caballos afectados por la enfermedad, donde se incluyen los
clínicamente silenciosos, los sintomáticos, los que se están recuperando, los recuperados
(ojo, no sanos), y los afectados crónicamente aunque esto es una redundancia ya que la
enfermedad es siempre crónica.
Los huesos sesamoideos distales de los caballos de cada uno de los mencionados
grupos deberían, presumiblemente tener un espectro de alteraciones morfológicas
correspondientes y representativas de los distintos estados del mencionado síndrome.
La presentación en los miembros anteriores es por mucho más frecuente que en los
miembros posteriores e incluso autores de mucho estudio han conocido solo por referencias
alguna presentación en dichos miembros. Esto podría deberse a la diferente función que
cumplen los miembros anteriores y posteriores en la biomecánica del movimiento: los
anteriores son de recibimiento y direccionales mientras que los posteriores son
principalmente de propulsión lo que determinaría que el trabajo realizado por el aparato
podotroclear, si bien similar, no es el mismo, por otra parte los miembros anteriores
soportan el 60 a 65% del peso del animal.
ETIOLOGIA
Diversas teorías proponen diferentes causas específicas para el síndrome navicular,
que en general reflejan el particular sesgo de los proponentes o de la técnica de
investigación empleada.
A) VASCULAR (3, 5, 6, 12)
Colles propuso que la trombosis de las arteriolas que irrigan la parte distal del
navicular puede provocar dolor y necrosis isquémica del tejido del hueso afectado. La
reabsorción del tejido necrótico sería la responsable de la formación de quistes óseos y la
lisis del hueso subcondral. Hoy por hoy no ha sido posible confirmar la presencia de
trombosis o áreas de tejido óseo infartado en huesos naviculares afectados por la
enfermedad.
B) BIOMECANICA (5, 6, 12)
Adams entiende que la causa incitante de la enfermedad son las presiones repetidas
que sufre el navicular durante el ejercicio lo que provoca una bursitis podotroclear; además
la concusión, la conformación parado de talones, la existencia de pies pequeños y
desvasados y herrados inapropiados son predisponentes a la enfermedad.
Rooney postuló que vibraciones producidas entre el FDP y el navicular durante la
locomoción provocan artrosis de la superficie flexora y degeneración de la superficie del
tendón.
En Dinamarca se teorizó que el aumento de las presiones entre el tendón del FDP y
la superficie flexora del navicular producen una remodelación de la corteza flexora y de la
correspondiente esponjosa subyacente de dicho hueso. Cualquier anormalidad que aumente
la carga sobre el lado flexor del pie desencadenaría este mecanismo; por ejemplo la ruptura
posterior del eje podofalangeano en cascos largos de pinzas y bajo de talones,
encastilladura y los mencionados talones remetidos y pies asimétricos.
C) ENFERMEDAD ARTICULAR DEGENERATIVA (6, 12)
Esta teoría apunta hacia la similitud que existe entre el síndrome navicular y la
enfermedad articular degenerativa como causa básica del síndrome navicular y consideran
que las modificaciones que se producen en el fibrocartílago, en la corteza flexora y en la
esponjosa subcondral, tanto en la eminencia sagital media como en el borde distal, son
esencialmente idénticos a las que se desarrollan en la EAD de las articulaciones sinoviales.
D) UNIFICADORA (6)
El factor etiológico principal son las fuerzas anormales resultantes de una mala
conformación. Así el hueso sufre un fenómeno de remodelación muy lento en respuesta a
las fuerzas biomecánicas que se generan durante la actividad física normal. Esta
reestructuración del hueso es la responsable del aumento del grosor de la corteza flexora
como respuesta adaptativa en los caballos de deportivos y de las modificaciones de la forma
del hueso en los animales viejos ambos asintomáticos.
Cuando las anormalidades conformacionales provocan el desarrollo de fuerzas
biomecánicas no fisiológicas comienza a desarrollarse el proceso patológico el que puede
llevar al desarrollo de una EAD del fibrocartílago que recubre la superficie flexora,
alteraciones del hueso subyacente y de la médula ósea, hipertensión venosa y dolor.
Probablemente la enfermedad degenerativa de la superficie flexora es por sí misma
asintomática en la cual las presiones son suficientes como para deteriorar el fibrocartílago
que recubre la superficie y estimula la esclerosis ósea subcondral. Sin embargo el
incremento de la vasculatura que acompaña el proceso de remodelación del hueso
subcondral y esponjoso no es de la intensidad suficiente como para producir edema y
organización con tejido fibroso en los espacios medulares de la esponjosa.
Las alteraciones que se producen en el navicular de caballos con síndrome navicular
son las mismas que se producen en la superficie articular de articulaciones con EAD.
Cuando esto sucede sí existe edema, congestión y fibrosis del estroma medular del hueso
esponjoso. El líquido edematoso es una secuela producida por la filtración capilar que
forma parte de la hiperemia activa asociada al proceso de remodelación. Probablemente la
organización del edema en tejido fibroso sea más crítica en el navicular que en otros
huesos.
Esta teoría ayuda a explicar la razón por la cual pueden existir idénticas
manifestaciones clínicas, radiográficas y macroscópicas en los naviculares de caballos
asintomáticos como en aquellos que muestran signos iniciales de síndrome navicular; la
diferencia radica en que las alteraciones naviculares de un caballo asintomático pueden
resolverse sin que nunca presente signos. Otras veces algunas lesiones progresan hassta un
punto en el cual el caballo puede manifestar signos clínicos intermitentes hasta que el
proceso de remodelación modifica la estructura del hueso lo suficiente como para atenuar
los efectos de las fuerzas compresivas tornando al animal asintomático. La remodelación
intensa se da en casos en los que las presiones son excesivas y sostenidas.
PATOGENIA
A) CURSO
Presenta un curso crónico de naturaleza insidiosa y muchas veces deportivamente
invalidante.
B) MODIFICACIONES
SIGNIFICADO
ESTRUCTURALES
DEL
NAVICULAR
Y
SU
Existen una serie de modificaciones que suelen acompañar a las modificaciones del
navicular que si bien empeoran el cuadro no son tomadas como parte de la patogenia del
síndrome navicular; ellas son las entesopatías y las modificaciones del FDP. Las
entesopatías que se forman en el ligamento suspensorio a lo largo del borde dorsal y de las
extremidades proximales del navicular, así también como en el ligamento navicular distal,
serían resultantes de esfuerzos más que iniciadores del síndrome navicular y pueden
constituirse en una fuente de dolor durante su formación ya que una vez maduras en general
son asintomáticas y no contribuyen a la signología clínica del de dolor. La corteza flexora
por debajo de esta lesión está intacta y no muestra evidencias de reabsorción ósea activa.
Estas "fosas sinoviales de la eminencia sagital media" desarrollan en el lugar donde no hay
una superficie de aposición que comprima cíclicamente a los condrocitos y los estimule a
mantener la producción de matriz cartilaginosa. Por todo esto se ha determinado que son
asintomáticas. Sin embargo en caballos con síndrome navicular son lugares predispuestos a
llenarse con tejido de granulación y desarrollar adherencias con la bolsa podotroclear y el
FDP llegando a formar una gran fosa sinovial enrojecida. Cuando se llega a este punto sí
existe una remodelación generalizada de la corteza flexora y de la esponjosa de la cavidad
medular.
Tercio medio del borde distal del navicular: actúa como punto de apoyo sobre el
cual pasa el FDP. Todos los factores nombrados como alteraciones de los aplomos
contribuyen a incrementar las presiones en este punto. Es también un punto de gran
compresión y poco movimiento ya que está muy próximo a las líneas de inserción del
ligamento navicular distal y la fascia de inserción del FDP en la cresta semilunar de la
falange distal.
Degeneración del fibrocartílago que cubre la mitad distal de la superficie flexora
del navicular: es una alteración común en caballos viejos con o sin signos de síndrome
navicular. Pueden presentarse desde los 3 años en caballos atletas pero es más común que
aparezca a partir de los 8. Inicialmente pierde el brillo y se colorea de amarillo. Luego la
superficie se vuelve granular y el espesor del cartílago disminuye. Finalmente hay un
patron punteado de capilares subcondrales cuando se expone la cortical. Es remarcable el
hecho que de esta mitad distal del navicular la zona que sufre el mayor desgaste
cartilaginoso se centra en el tercio medio adoptando la forma de un navicular en miniatura
(6). Las características macro y microscópicas de estas lesiones son iguales a las
encontradas en el cartílago hialino articular de las articulaciones sinoviales con EAD:
adelgazamiento del fibrocartílago asociado a fibrosamiento de su superficie con pérdida de
la tinción a los proteoglicanos, muerte de condrocitos superficiales y formación de
condromas por condrocitos viables adyacentes. Esto sería mejor denominarlo "enfermedad
degenerativa de la superficie flexora" ya que la superficie flexora del navicular no forma
parte de la superficie articular. En caballos atletas con enfermedad degenerativa de la
superficie flexora pero sin signos de síndrome navicular la corteza flexora es más gruesa y
radioopaca que la de caballos no atletas con naviculares macroscòpicamente normales. Esa
corteza flexora engrosada se debe a un marcado grado de esclerosis ósea subcondral que es
representante del efecto combinado de dos respuestas adaptativas diferentes del hueso
subcondral: un aumento de la carga soportada por la cortical ósea durante el trabajo y la
degeneración de la matriz cartilaginosa que disminuye su capacidad para disipar las fuerzas
transmitidas hacia el hueso subcondral; no presentan edema, fibrosis o vasos tortuosos en
los espacios medulares del hueso canceloso. Este hecho podría significar que la velocidad
de remodelación ósea fue lo suficientemente gradual como para que no se produzca fibrosis
medular e hipertensión venosa, manteniéndose el pie asintomático. Esto sería la base para
determinar que las anormalidades encontradas en el tejido óseo y medular debajo de las
lesiones cartilaginosas son las que permiten distinguir los naviculares provenientes de
caballos que padecen este síndrome.
Incremento de los espacios de reabsorción vascular en la corteza flexora:
especialmente debajo del lugar de la fosa sinovial de la eminencia media. El patron regular
del hueso esponjoso normalmente se extiende formando columnas continuas entre la
corteza articular y la flexora; esta anatomía es alterada por la presencia de canales
irregulares que se abren en la base de una fosa sinovial agrandada localizada en el borde
distal del navicular. Los espacios medulares del hueso canceloso localizado debajo de la
corteza flexora de la mitad distal del navicular contienen acúmulos irregulares de
sinusoides dilatados y vénulas embebidas en un estroma de médula ósea fibrótica y
edematosa pero nunca hay exudados.
Hiperemia activa del lecho capilar sinovial de la fosa sinovial de la eminencia
sagital media: la irrigación de la parte distal del navicular está dada por los vasos que
penetran por el borde distal provenientes del ligamento navicular distal; pasan a través del
piso de la fosa sinovial y emergen como vasos de la cavidad medular. Antes de que cada
uno de los vasos nutricios entre en la cavidad medular emiten una rama que irriga la
membrana sinovial que recubre la fosa sinovial. En ese lecho capilar es donde se produce la
hiperemia activa acompañada por remodelación ósea de la corteza flexora y de la esponjosa
reclutando osteoclastos que reabsorben la lámina cortical que separa la fosa sinovial de la
esponjosa adyacente y el proceso de reabsorción sigue el curso de los vasos sanguíneos
dentro de la esponjosa. La sinovial también avanza tapizando los túneles óseos coniformes
que van dejando los osteoclastos. Este proceso reabsortivo crea la llamada "invaginación
sinovial" de la base ósea de la fosa sinovial (6). Estas modificaciones vasculares no se ven
en caballos asintomáticos.
Adherencias: se originan desde la base erosionada de la fosa sinovial de la
eminencia sagital media y de las pequeñas aberturas de las cavidades reabsortivas en la
superficie del hueso subcondral del tercio distal de la corteza flexora. Son típicas de los
casos crónicos.
Chupetines (lollipops): las fosas sinoviales localizadas a lo largo del borde distal del
navicular se extiende dentro de la esponjosa adyacente como invaginaciones sinoviales de
forma cónica. Estas invaginaciones pueden terminar en grandes quistes dentro de la
esponjosa dando origen a las evidencias radiológicas denominadas chupetines por su forma.
Es también característico de casos crónicos. Lo que es cierto e importante es que no existe
evidencia de comunicación entre los quistes localizados al final de las invaginaciones
sinoviales y las lesiones quísticas formadas en la base de la fosa sinovial de la eminencia
sagital media. Esto da a pensar que la patogenia de ambas lesiones es diferente. En la foto
solo la forma 1 son las normales, el resto son todas patològicas.
C) DOLOR
En base a lo visto hasta aquí se puede concluir que el dolor en el síndrome navicular
es de origen vascular y tiene su génesis en el estiramiento de las paredes de los sinusoides y
vénulas en la esponjosa subcondral luego del comienzo de la hipertensión venosa.
El proceso sería el siguiente: la hiperemia se desarrolla en primer lugar, lo que da
lugar a edema de la esponjosa y organización del mismo. Esa fibrosis por efecto mecánico
genera primero una distensión venosa y luego un aumento de la presión intravascular del
hueso subcondral. Esto es algo similar a lo que sucede a nivel subcondral en la EAD de
cualquier articulación sinovial.
Así el dolor queda asociado a la dilatación de las venas en la esponjosa subcondral y
a la reducción del drenaje venoso de los espacio medulares por debajo de las lesiones. El
mecanismo por el cual se genera el edema de los espacios medulares del hueso subcondral
en la EAD y en el proceso degenerativo del síndrome navicular se desconoce.
EXAMEN CLINICO
A) RESEÑA
Edad: puede presentarse desde los 2 años de edad en adelante, pero es notoriamente
más común en caballos mayores de 6 años e incluso las alteraciones radiológicas más
evidentes se encuentran en animales de más de 10.
Raza: está dirigido a si existe una correlación entre el tamaño corporal y el tamaño
de los cascos.
Aplomos: caballos con ruptura posterior del eje podofalangeano como sucede en los
cascos largos de pinza y bajos de talones, en parados de cuartillas y cascos con talones
remetidos están mucho más predispuestos a sufrir síndrome navicular. Esto se fundamenta
en el hecho que el aparato podotroclear no trabaja en forma adecuada. Un ejemplo: son los
Quarter Horse que tienen pequeños cascos para el peso del animal.
Desvasado y herraje: pueden alterar el aplomo normal, la dirección de las fuerzas y
la normal dilatación del casco; todo esto lleva a lo mismo: se altera el trabajo del aparato
podotroclear.
Patologías localizadas en el casco o en los tejidos blandos de la zona de los
talones: tales como los talones remetidos y desparejos y las contusiones no deben ser
incluidas como parte del síndrome navicular, aunque existe una elevada correlación entre la
presencia de estas alteraciones y la presentación de la enfermedad; por ejemplo cerca del
70% de los caballos con talones remetidos presentan síndrome navicular (6).
B) ANAMNESIS
Performance deportiva de los últimos años: repetidas veces se escuchará decir que
el caballo fue gradualmente disminuyendo su performance sin una causa aparente. Muchas
veces el relato es que se niega a saltar o a trabajar normalmente como lo hacía antes. Otro
dato que suele referir el jinete es que el animal se niega a cambiar de mano.
Tratamientos previos: en cuales hubo mejoría? Pueden orientar el diagnóstico.
Deporte y exigencia deportiva: es en el salto en los que es muy común encontrar
animales con síndrome navicular. Puede deberse a la excesiva presiòn que soporta el
aparato podotroclear en este deporte pero también es remarcable el hecho que son animales
que comienzan a entrenar a los 4 o 5 años y continúan compitiendo a veces hasta los 17 o
18 años; probablemente si los caballos de carrera siguieran corriendo hasta esa edad el
síndrome navicular aparecería con la misma frecuencia. Es menos frecuente en el polo, pato
y trote (1, 2).
Temperatura de los días en que trabaja peor: los días fríos el animal tarda más en
entrar en calor y disminuir su dolor; esto es un punto común a todas las articulaciones que
sufren EAD, duelen en frío.
Forma de caminar al salir del box: sobre todo a la mañana. Si no es posible verlo es
un dato interesante. El caballo sale dando pasos cortos porque evita que en el tercer
momento del apoyo el FDP presione el navicular; el caballo camina "como pisando
huevos".
Tropiezos: el animal con síndrome navicular tiende con el tiempo a hacerse
tropezador. Esto es porque acorta la fase anterior del paso en búsqueda de evitar la presión
que ejerce el FDP cuando el animal extiende el miembro para tomar contacto con el piso,
entonces el pie llega antes golpea con la pinza y tropieza. Esos repetidos golpes en la pinza
se constituirán en un signo clínico asociado al síndrome navicular ya que el animal
presentará dolor a la compresión con la pinza de tentar en esa zona.
C) EXAMEN CLINICO GENERAL
Es el que se realiza en todo exàmen clìnico, principalmente dirigido al estado
general del animal, temperatura, mucosas aparentes, frecuencia cardìaca y respiratoria.
D) EXAMEN CLINICO PARTICULAR (Ver Diagnostico Clínico)
DIAGNOSTICO
A) CLINICO
El diagnóstico del síndrome navicular se considera que es clínico (10). La
claudicación generalmente se hace evidente si el caballo trabaja con intensidad o sobre
superficies duras y con frecuencia el reposo hace remitir temporalmente la cojera. La
respuesta positiva a cualquiera de las maniobras semiológicas es importante pero la
negativa no permite descartar un síndrome navicular.
1) OBSERVACION
Actitud postural: suele "puntear" el casco del miembro más dolorido o
apoyar la palma sobre la muralla del casco del miembro opuesto. También puede llegar a
pararse como los animales plantados de adelante.
Aplomos
Estructura del pie: haciendo hincapié en la forma del casco; un casco
encastillado puede estar indicando la presencia de un síndrome navicular porque el animal
en búsqueda de disminuir la presión en el tercio posterior del pie apoya menos esa zona.
Incluso es posible que en el box cave pequeños pozos en los que introduce el pie como una
cuña aliviando el dolor que le imprimiría estar parado normalmente. La falta de dilatación
que normalmente tiene un casco no se produce totalmente en este caso y por ende se cierra
o se encastilla. En la foto se aprecia un pie normal.
Fascie: el animal que sufre un severo síndrome navicular se refleja en la
expresión facial, está angustiado, e incluso el dolor constante puede llevar a que cambie su
carácter.
Deambulación: la cojera suele acentuarse haciendo deambular al enfermo en
círculos pequeños, por eso es importante examinarlo cuando trabaja a la cuerda. Existe la
posibilidad que un animal dolorido de ambas manos no claudique cuando se lo hace
deambular en linea recta; la claudicación se hace evidente cuando se practica la anestesia de
uno de los miembros.
2) PALPACION
-Manual: en la fosa de Genot, con los dedos pulgares.
-Pinza de tentar: la respuesta positiva debe ser uniforme y determinada en
relación al exámen del resto del pie.
-Una rama en una de las lagunas laterales y la otra en la muralla
(repetir al revés).
-Una rama en la laguna central y la otra en la muralla (repetir al
revés).
-Una rama en la laguna central y la otra en la muralla a nivel de las
pinzas.
-Una rama en la laguna central y la otra en la fosa de Genot
(interponer un algodón en ésta).
-Percusiòn en la laguna central de la ranilla.
-Una rama de la pinza en la muralla a nivel de la uniòn de cuartas
partes y talones y la otra en la muralla opuesta al mismo nivel: esta
prueba evalùa la sensibilidad de las fosetas de inserciòn de los
ligamentos colaterales de la articulaciòn IFD.
3) FLEXIONES FORZADAS
-DEL DEDO
-METACARPOFALANGIANA
-INTERFALANGEANA PROXIMAL
La respuesta positiva se dará cuando algúna de estas articulaciones se
encuentre afectada de artrosinovitis, EAD, o cuando exista una forma ligamentosa o
tendinosa del síndrome navicular. Estas articulaciones pueden llegar a verse comprometidas
cuando existe un síndrome navicular debido a que se altera la biomecánica del movimiento
y defendiendo un dolor a nivel del aparato podotroclear, el animal se lesiona en alguna de
éstas. Complementar con las anestesias.
4) PRUEBA DE LA CUÑA DE LUWINTZ
Se eleva la pinza del miembro sospechoso miembras se mantiene en el aire
el miembro opuesto. Se mantiene así 1 minuto y se saca al animal al trote. Ver si se
exacerba la claudicación. El fundamento de esta prueba es aumentar la presión que ejerce el
FDP sobre el navicular. Los caballos con problemas ligamentosos o tendinosos también
pueden responder positivamente a esta prueba.
5) PRUEBA DE PRESION
Se coloca un bloque o el mango de un martillo en los 2/3 palmares de la
ranilla y se eleva el miembro opuesto. Se espera 1 minuto y se saca el animal al trote. Ver si
se exacerba la claudicación.
B) COMPLEMENTARIO
1) ANESTESIAS
-Troncular: digital palmar. Normalmente un caballo con síndrome navicular
disminuye en un 70% su claudicación después de esta anestesia.
-Intraarticular: interfalangeana distal. Complementa la anterior y es de
muchísima ayuda en el diagnóstico; no debería dejar de hacerse nunca en el diagnóstico de
un síndrome navicular.
Anestesia de la articulación interfalangiana
distal 4.
-Intrabursal: bolsa podotroclear. No es sencilla de realizar correctamente y
además hay que tener en cuenta que en un amplio porcentaje de los casos se halla
comunicada con la IFD, por lo tanto no tendría sentido realizarla (9). Existen varias
técnicas. La más común es la que se realiza en la cara palmar de la cuartilla. La aguja se
introduce en el punto medio entre los bulbos de los talones y en correspondencia con el
fondo de la fosa de Chenot . Primero se infiltra la piel de la zona inyectando 1 cm de
solución anestésica y se esperan unos 5-10 minutos . Se introduce aguja de 50/12 hacia
abajo y delante de la línea media, tratando de imprimirle una dirección paralela a la suela,
se avanza hasta tocar el hueso y entonces se la retira levemente inyectando 5 ml de
anestésico.
Técnica Distal palmar paralela a la suela 3.
2) RADIOLOGICO
Se debe tener en cuenta que existe una zona gris entre la normalidad,
definida por la ausencia de modificaciones patològicas detectables y las anormalidades
evidentes. El significado de cualquier interpretaciòn radiogràfica debe acompañarse de la
signologìa clìnica y de la respuesta a los bloqueos nerviosos.
En esta patología existen ciertos patrones radiológicos que se aceptan como
evidencia de la enfermedad clínica; sin embargo la presencia de modificaciones
radiológicas semejantes en pies asintomáticos hacen cuestionable su relevancia para los
casos de enfermedad clínica.
~Proyecciones
Son básicamente cuatro aunque de cada una es posible modificar la
técnica y ubicación del chasis y del pie, como es el caso de las coronarias altas y la
utilización de túneles (12).
-Dorso palmar con la muralla formando un ángulo de 80 grados con
el piso: evidencia el borde distal del navicular.
-Dorso palmar con la muralla formando un ángulo de 90 grados con
el piso: evidencia el borde proximal del navicular.
-Latero-medial
-Morgan, sky-line o tangencial: permite observar dorsalmente el
hueso navicular y su mèdula.
-Lesiones con evidencia radiológica
Los cambios radiológicos asociados a síndrome navicular incluyen
formación de osteofitos marginales, fracturas marginales, cambios en el patrón de
trabecular, formaciones quísticas o areas de destrucción osea, adelgazamiento de la corteza
flexora, contorno óseo borroso, remodelación ósea con pérdida de la forma de lanzadera
característica del hueso navicular, entesopatías de los ligamentos proximales y distales de
dicho hueso y aumento de la radiolucidez en areas del borde distal del navicular que
corresponden al aumento de tamaño de las fosas sinoviales (7). Los osteofitos y las
entesopatías pueden indicar daño ligamentoso; el agrandamiento de las fosas sinoviales
puede indicar una artrosinovitis de la articulación IFD; los quistes son indicativos de la
existencia de problemas primarios del navicular o adherencias del FDP; las modificaciones
de la corteza flexora indican también lesión tendinosa y muchas veces puede verse la
calcificación del FDP.
Fosas sinoviales: la presencia de màs de 7 fosas normales el
aumento del nùmero y la modificaciòn de la forma, asì como su aumento de tamaño, debe
ser considerada como anormal.
Osteopenia focal “radiolucideces” dentro del navicular, quistes:
tener cuidado que no sean artificios de tècnica. Son zonas focales bien demarcadas de
osteopenia y deben ser interpretadas como àreas de erosiòn cortical y medular de la
superficie flexora. Predisponen a adherencias y calcificaciòn del FDP. Son signos de
enfermedad avanzada.
Osteofitos “espolones”: se ubican en el extremo de las “alas” del
navicular: sobre la superficie dorsal de inserciòn del ligamento proximal y en el origen del
ligamento navicular distal, en este ùltimo serìa màs apropiado el tèrmino entesofitos.
Esclerosis medular o “pèrdida aparente de la cavidad medular”: es caracterìstico de
la enfermedad avanzada.
Mineralizaciòn del FDP: ocurre en casos de daño severo del tendòn.
Puede tratarse de una calcificaciòn simple, ectòpica o de la de la combinaciòn de ambas. Es
de mal pronòstico.
Fractura a pequeño fragmento de los bordes distales del navicular:
se encuentran generalmente en la uniòn de los bordes distal, palmar, horizontal y
ascendente. Si son fracturas reales, es decir que no sean artificios de tècnica, son de mal
pronòstico.
Radiografía lateromedial mostrando la correcta ubicación de la aguja en la bolsa navicular.
Entesopatía en unión del ligamento colateral al hueso navicular 1.
Radiografía dorsopalmar.
Entesopatía en el extremo y perdida de la forma normal.
Lollypops (fosas sinoviales) a lo largo del borde distal 2.
Radiografía lateromedial.
Cambios característicos: elongación de la superficie flexora y cavidad medular esclerótica
2
.
Radiografía palmaroproximal-palmarodistal.
Esclerosis medular y pérdida de demarcación etre la corteza y la cavidad medular.
Leve irregularidad de la corteza en la eminencia flexora 2.
3) BURSOGRAFIA Y BURSOSCOPIA (13)
La bursografía consiste en inyectar un opaco en la bolsa podotroclear y
radiografiarla. La bursoscopía consiste en realizar una endoscopía de la bolsa podotroclear.
Son técnicas que cita la bibliografía pero que corresponden más al campo de la
investigación que al diagnóstico diario.
4) CENTELLOGRAFIA (6, 10)
Es una técnica que consiste en la utilización de radioisótopos que son
mayormente captados por tejidos que están sufriendo un proceso degenerativo o
inflamatorio. Se mide luego la emisión de rayos gamma. Proporciona información respecto
a la vascularidad relativa y velocidad del metabolismo tisular; es muy útil en el diagnóstico
de patologías óseas. Es de valiosísimo en el diagnóstico precoz de síndrome navicular pero
lamentablemente no está disponible hoy por hoy en la Argentina.L
Las
imágenes que se obtienen son: Lateral, dorso/palmar y solar, usando VASCULAR, POOL
Y BONE PHASES IMÁGENES
FIGURA 1 A: POOL PHASE IMAGEN LATERAL: Aumento en la captación del
radioisótopo en la región del aspecto distal del Tendón del flexor profundo y en su
inserción en la falange distal izquierda.
FIGURA 1 B: BONE PHASE IMAGEN SOLAR: Captación difusa del radioisótopo en la
falange distal izquierda, mas intenso en la región de inserción del tendón flexor profundo 6.
5) TERMOGRAFIA (11)
Permite detectar áreas de mayor temperatura de la piel a través de un
termógrafo que colorea diferente las areas de distintas temperaturas. Determina el flujo
sanguíneo relativo en una región. Debe realizarse antes y después del ejercicio y en
condiciones normales solo hay un aumento de 0,5 grados centígrados lo que corresponde a
un aumento del 15% del flujo sanguíneo No se usa a diario y queda relegada al campo de la
investigación.
PATRON
TERMICO
ANORMAL
EN
SÍNDROME NAVICULAR.
6) ULTRASONOGRAFIA (10, 11)
Puede proporcionar invalorable información de la integridad de los tejidos
blandos que rodean al sesamoideo distal. Evaluar también el FDP; no se usa a diario y
requiere un transductor especial – (VER AMPLIACION EN IMAGENOLOGIA DEL PIE)
7) RESONANCIA MAGNETICA:
Proporciona imágenes detalladas de los tejidos. La parte del miembro que
puede ser imaginada es un lugar con un fuerte campo magnético. Una única señal de radio
frecuencia basada en las características magnéticas de cada tejido es emitida en respuesta a
los pulsos, estos pulsos de radiofrecuencia son collectados en una imagen. Muchas
enfermedades se manifiestan por un aumento en el contenido de agua y por consiguiente la
resonancia magnética es un prueba sensible para detectar esas enfermedades.
El alto contraste del tejido blando ofrecido por resonancia magnética hace
ésta ideal para valorar el cartílago articular, ligamentos, tendones, cápsula articular, sinovia
y médula ósea. El uso de resonancia magnética en ortopedia equina es actualmente limitado
por el costo, la accesibilidad y problemas lógicos asociados con la realización del
procedimiento en grandes animales 5.
Imágenes sagitales, transversas y dorsales son obtenidas usando tres
dimensiones.
Los cambios que se aprecian son los siguientes: Areas hipotensas compatibles
con depósito de hemosiderina , acumulación de gas o mineralización. Agrandamiento y
disrupción de la arquitectura normal del Tendón flexor profundo (TFP). Proliferación del
tejido blando en el receso proximal de la bolsa podotroclear . Disrupción del ligamento
sesamoideo impar. Adhesión del TFP. Irregularidades en la cortical en la inserción del TFP.
Efusión en la articulación interfalangica distal. Fluido con alto contenido celular compatible
con absceso intraóseo. Efusión en la bolsa podotroclear.
Imagen sagital
Agrandamiento y disrupción de la normal arquitectura del TFP y perdida de separación del
ligamento sesamoideo impar.
Señal hipotensa representando deposición de hemosiderina a lo largo de la penetración del
tracto a través de la almohadilla digital, el TFP y el ligamento sesamoideo impar.
Disrupción del ligamento sesamoideo impar y una irregularidad endosteal de la corteza
plantar de la falange distal.
Proliferación del tejido blando en el receso proximal de la bolsa podotroclear 5.
Disrupción de la arquitectura del TPF y del ligamento sesamoideo impar.
Señal hipotensa representando depósito de hemosiderina a lo largo del tracto penetrante
dentro de la almohadilla digital, el TFP y el ligamento sesamoideo impar 5.
Disminución de la señal en la falange distal consistente con fluido o mineralización
Aumento de la señal consistente con una patología ósea.
Señal hipotensa que refleja hemosiderina a lo largo del tracto penetrante.
Cortical irregular en la inserción del TFP.
El TFP marcadamente agrandado en su inserción son un aumento de la señal.
Efusión en la articulación interfalángica distal 5.
Señal hipotensa en la falange distal indicativo de fluido presente con alto contenido celular
que es consistente con un absceso intraóseo.
Disminución de la señal en el hueso poroso de la falange distal que es resultado de un
incremento de mineralización 5.
DIFERENCIAL
1) Contusión en la región de talones, común en talones bajos.
2) Encastilladura, la cual puede ser signo de un síndrome navicular.
3) Fractura de una barra.
4) Escarza.
5) Fracturas de uña en todas sus expresiones.
6) Lesiones de cualquier origen traumàtico en la zona (clavos, piedras, etc.)
7) Bursitis navicular sèptica.
9) Fracturas de tercera falange.
TRATAMIENTO
El tratamiento inicial de un caballo con talones sensibles debe dirigirse hacia la
correción de cualquier anormalidad existente en el casco o hacia la forma en que se ha
desvasado o herrado. Una vez que el animal se haya recuperado de la inflamación de los
tejidos blandos y la claudicación persiste entonces los signos clínicos y radiológicos del
síndrome navicular serán mucho más significativos. Esto es discutible debido a que por
ejemplo sería una iatrogenia utilizar una herradura dilatadora (justura oriental) para corregir
una encastilladura cuando la causa de base es un síndrome podotroclear; si no focalizo
sobre el síndrome podotroclear es imposible solucionar la encastilladura.
El sìndrome navicular puede tratarse de varias formas diferentes, lo cual se
relaciona con la variedad de causas que lo provocan. En la mayorìa de los casos mejoran
con el tratamiento. Podrìa esperarse que el 50% mejore por un perìodo de un año. Como la
enfermedad es progresiva, un caballo afectado puede ser retirado como consecuencia de la
reapariciòn del trastorno. El primer tratamiento debe estar dirigido a aliviar el dolor y
utilizar el herraje terapèutico adecuado.
A) DEL DOLOR
-AINE`s




Fenilbutazona: 2 a 4 mg / kg, la màs usada.
Ketofeno: 5 mg / kg
Meglumine de flunixìn: 1 mg / kg
Acido meclofenàmico
-ORGOTEINA (Superóxido dimutasa)
 2,5 mg IB cada 10 días, 3 repeticiones
 Terapia de apoyo: 5 mg IM 2 veces por semana
-GCC (parenteral, poco usado)
 Acetato de Metil Prednisolona
 Acetato de Betametasona
-FISIOTERAPIA
 Campos magnéticos pulsátiles
 Laser
 Ondas de Choque.
-ACUPUNTURA
El tratamiento consiste en aplicar agujas en puntos especìficos. A medida
que progresa el tratamiento los puntos pueden llegar a modificarse. Los resultados son
variables. Como ùnica terapia es inefectiva.
B) DE LA ARTICULACION
-PRECURSORES DE GLICOSAMINOGLICANOS
Se administran por vìa oral y estàn compuestos por minerales y
vitaminas que permiten un mejor metabolismo del cartìlago. Particularmente importante
son el cobre, el manganeso, el calcio y la vitamina C.
-AC. HIALURONICO
Tanto el ac. Hialurònico como los glicosaminoglicanos han demostrado
mayor utilidad en el tratamiento de la artrosinovitis interfalangeana distal o en la bursitis
podotroclear. Son drogas condroprotectoras y antiinflamatorias. No està demostrado que se
incorporen al cartìlago reconstituyèndolo, de hecho esto no sucede. Algùn autor ha
propuesto el uso de ac. Hialurònico estarìa màs indicado en los casos agudos a subagudos,
en una patologìa con destrucciòn del cartìlago, no tiene sentido.
IA: 20 a 50 mg, cada 2 a 3 semanas hasta que remitan los signos clìnicos.
Una tercera aplicaciòn sin mejorìa indica que el ac. Hialurònico no es el indicado para el
caso.
EV: 100 mg, 1 vez por semana.
-GLICOSAMINOGLICANOS POLISULFATADOS
Estarìan màs indicado en los casos crònicos (McIlwraith, 1992). Tienen
ciertas propiedades antiinflamatorias, condroprotectoras e inmunosupresoras locales, hecho
que indicarìa tener cuidado si se los administra con GCC por lo cual habrìa que
combinarlos con algùn antibiòtico (McIlwraith, 1996).
IA (combinación con Ac. Hialurónico y Amikacina): 250 mg 1 vez por
semana
IB: idem anterior.
IM: 500 mg cada 4 dìas. Este tto. No es tan efectivo como el anterior.
-GCC (IB, IA)
Acetato de metilprednisolona: 100 mg segùn tècnica. Es importante utilizar
este GCC porque el tamaño de los cristales es mucho menor que el de otros lo cual lesiona
menos el cartìlago. Se recomienda inyectarlo con àcido hialurònico para minimizar el
mencionado efecto. En todo caso la terapia con GCC debe considerarse como paliativa. Los
resultados prolongados no dan buenos resultados, debido a que un sìndrome navicular no es
un proceso exclusivamente inflamatorio.
Tratamiento reciente: medicación de la bolsa podotroclear con metilprednisolona (40 mg) o
triamcinolona (6 mg), hialuronato de sodio (10 mg) y sulfato de amikacina (125mg).
Luego, administración sistémica de fenilbutazona 2,2 mg/kg. por 7 días. Los resultados del
trabajo fueron los siguientes: A CORTO PLAZO: el 80% de los caballos retornaron a la
actividad a las 2 semanas posterior a la medicación de la bolsa y permanecieron sanos por
3-6 meses después que la bolsa fue medicada. A LARGO PLAZO: El 52% de los caballos
se usaron para su actividad 1-3 años después del tratamiento pero ellos requirieron
periódicas medicaciones en la bolsa y/o AINES sistémicos. Lo que se concluyó con el
trabajo fue que aquellos caballos que no responden al herrado correctivo, medicación
antiinflamatoria y medicación en la articulación interfalángica distal pueden responder a la
medicación en la bolsa, la que proporciona una mejora temporaria en caballos con dolor
crónico en el área navicular que no responden a otros tratamientos1.
C) DEL APORTE SANGUINEO
-WARFARINA
El uso de esta droga se basa en la teorìa vascular. Tiene que utilizarse con
mucho cuidado por varias razones: hemorragias y que se liga a proteìnas plasmàticas lo
cual puede aumentar la biodisponibilidad de otras drogas. Se indica comenzar con 0,2 mg /
kg por dìa. El objetivo es prolongar un 20% el tiempo de protrombina en relaciòn a los
valores pretratamiento. La efectividad del tratamiento es variable: 60 a 70% de los casos
mejoran (10).
-ISOXUPRINE
Es un beta-adrenèrgico vasodilatador: aumenta el flujo sanguìneo perifèrico
y cerebroespinal. La dosis oral va de 0,6 a 1,2 mg / kg dos veces por dìa durante 15 dìas, si
hay mejora ir disminuyendo la dosis paulatinamente (habiendo empezado por la mìnima)
hasta suspenderlo. Normalmente el tratamiento se ha prolongado 6 a 12 semanas. No se han
observado reacciones adversas y la respuesta es una cuetiòn de idiosincracia.
-PENTOXIFILINE
D) ORTOPEDICO
La mayorìa de los veterinarios coincide en el sentido de que el herraje debe ser la base del
tratatmiento. En ningùn caso deben colocarse clavos màs allà de mitad de ramas. Lo mejor
es herrar cada caballo segùn sus necesidades y no con un procedimiento estàndar. En todos
los casos las herraduras deben estar dotadas de una buena bòveda lo cual impide las
contusiones contra la suela. Utilizando el mètodo adecuado para cada caballo se han
logrado buenos resultados sin remisiones dentro de los 10 meses.
-RECORTAR EL PIE 3 GRADOS
El recorte se hace 3 grados màs bajo que su propio eje podal. Hecho esto se
eleva el pie hasta su valor normal con una plantilla de neoprene en cuña de 3 grados.
-DESCANSO
Mìnimo debe ser de 2 mm por fuera de la muralla a nivel de cuartas partes y
talones unos 5 mm y algo màs si el caballo es de talones remetidos.
-EJE PODOFALANGEANO
La ruptura posterior del eje podofalangeano se produce en aproximadamente
el 21% de los casos de caballos con sìndrome navicular. Esa ruptura posterior desplaza el
centro de gravedad del pie hacia delante. En la imagen se aprecia un eje podofalangeano
correcto.
-PINZAS Y TALONES
La indicaciòn màs comùn es la elevaciòn de los talones 2 a 4 grados y
redondear la pinza de la herradura (justura francesa). La elevaciòn de talones se hace para
aliviar la compresiòn del FDP sobre el navicular y la justura francesa facilita la iniciaciòn
del paso.
-HERRADURA HUEVO O REDONDA
Ademàs de la estructura de la herradura, se le hace una prolongaciòn
posterior lo que permite desplazar y reubicar el centro de gravedad del pie el que en
caballos con sìndrome navicular se encuentra desplazado hacia delante, palmarmente debe
alcanzar los bulbos de los talones. El principal criterio de la herradura huevo es que se vea
claramente desde palmar en la parte màs ancha del pie. Es una herradura muy ùtil en casos
de pies con talones remetidos (situaciòn que en el 60% de los casos es el ùnico signo visible
externamente, (10)). El problema de esta herradura puede ser que el animal se pise la
prolongaciòn posterior y se la arranque; para esto se bajan los talones y se “mocha” la
pinza del miembro posterior con lo que se retarda el arranque del paso en dichos miembros.
-HERRADURA VACHETTA O BALANCIN
El fundamento de esta herradura es desplazar hacia las pinzas el peso que
recibe el pie y a la vez proporciona un falseo de apoyo en la regiòn posterior de cuartas
partes y talones, lo cual alivia la presiòn en esta zona que es la afectada.
-HERRADURA DE SCHENEIDER
Es una herradura redonda que presenta una barra longitudinal que une la
pinza con la barra posterior. El fundamento es evitar la contusiòn que recibe la palma a
nivel de las pinzas derivado del acortamiento de la fase anterior del paso.
-HERRADURA DE MOVIMIENTO COMPLETO
Esta herradura tiene un redondeamiento de las pinzas y de los talones màs
una buena bòveda combinada con un buen descanso.
-UTILIZACION DE PLANTILLAS
Minimizan las contusiones y alivia las presiones externas.
QUIRURGICO
-SECCION DE LOS LIGAMENTOS SUSPENSORIOS DEL NAVICULAR
Esto alivia la presiòn que sufre el navicular. La eficacia es relativa y solo da
resultado cuando se la combina con otras terapias.
-LAVAJE DE LA BOLSA PODOTROCLEAR
El propòsito es diluir los componentes inflamatorios. Se usa 1 litro soluciòn
fisiològica, es una tècnica bastante engorrosa ya que de por sì abordar la bolsa podotroclear
no es sencillo y debe hacerse por dos sitios diferentes para que de resultado. La eficacia del
tratamiento es cuestionada.
-DESMOTOMIA DEL LIGAMENTO FRENADOR DISTAL
Hay algunos caballos que son tan parados de cuartillas que si se los herra
respetando el eje podofalangeano correcto, el àngulo podal excede los 65 grados. El objeto
de esta cirugìa es aliviar esta conformaciòn y poder herrarlos correctamente a la vez de
disminuir la presiòn del FDP sobre el navicular.
-FASCIOTOMIA
Se realiza para disminuir la presiòn sobre los nervios digitales, ùltimamente
indicados como culpables de algunos casos sìndromes naviculares. Se realiza la fasciotomìa
digital palmar y la neurolisis.
-NEURECTOMIA
Se realiza la neurectomìa de los nervios digitales a la altura de la mitad de la
cuartilla. Tiene el inconveniente que el casco debe estar bajo control permanente debido a
que la pèrdida de la sensibilidad conlleva el hecho que el animal puede sufrir lesiones sin
claudicar, infectarse y darnos cuenta cuando el tratamiento puede ser inefectivo. Se han
reportado casos de exungulaciones. Otra complicaciòn es los neuromas de amputaciòn que
se producen en el muñòn proximal. Por todas estas razones debe ser el ùltimo tratamiento
de elecciòn.
E) COMPLEMENTARIO
-FISIOTERÁPICO
Terapia de ondas de choque
Electroanalgesia
Campos magnéticos pulsátiles
Ozonoterapia
-EJERCICIO
Reposo contraindicado: genera un éstasis venoso.
Necesario porque: aumenta el FS y hace efectivo el herraje.
Despuès de aplicadas las herraduras terapèuticas correctas se recomienda un
ejercicio diario de 30 minutos diarios.
PRONOSTICO
A) PARA LA VIDA DEL PACIENTE
El paciente puede desarrollar una vida normal fuera de una actividad deportiva
exigente o viviendo a campo. Para nada se haya comprometida la vida del animal.
B) DEPORTIVO
Dependerà de la respuesta al tratamiento. En casos avanzados el pronòstico
deportivo para la alta competencia es reservado pero en ningùn caso debe
desahuciarse un paciente para cualquier deporte ya que existen enfermos no
enfermedades.
CONCLUSIONES
"El hombro es el refugio de los ignorantes y el pie el de quienes quieren dejar de
serlo" cita Pires en su tratado del pie equino en referencia a que muchas de las
enfermedades del pie tienen manifestaciónes clínicas en otras partes del miembro, en otro
miembro, en la cintura escapular o en el cuello. Asimismo no solo estaría indicado tratar la
patología de base únicamente, en este caso el síndrome navicular, sino también todas
aquellas zonas que hayan enfermado a causa de dicho padecimiento.
Es remarcable tener en cuenta el curso la patología, que hoy por hoy no tiene una
cura definitiva, que el tratamiento está dirigido a aliviar las manifestaciones clínicas,
principalmente el dolor, y a limitar su avance permitiéndole desarrollar al paciente una
actividad deportiva de alto rendimiento prácticamente óptima. Los propietarios tendrán que
concientizarse de que su caballo necesitará de una atención médica particular y permanente
por el resto de su vida y que ellos mismos deberán convivir con esta patología y colaborar
con el veterinario, de lo contrario el futuro queda librado al azar.
Un caballo con síndrome navicular no es un caballo desahuciado si es tratado a
tiempo, pero hay que tener en claro que tampoco es un animal sano y que muchas veces su
performance se verá afectada por este padecimiento.
Teniendo presentes todos los puntos desarrollados es posible sobrellevar el
síndrome navicular y en la mayoría de los casos obtener un buen desempeño deportivo el
cual constituirá el éxito del veterinario, del propietario y principalmente de aquellos que
son el objeto del presente trabajo: LOS CABALLOS.
BIBLIOGRAFÍA (FOTOS)
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Magnetic resonance imaging and scintigraphic findings in five horses with obscure
foot lameness associated with penetrating injuries. (Ed) Publisher: American
Association of Equine Practitioners, Lexington KY. Internet Publisher: International
Veterinary Information Service, Ithaca, NY. 4-Dec- 2004, P 1453,1204.
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