k OFICINA ESPAÑOLA DE PATENTES Y MARCAS 19 k kInt. Cl. : A63B 59/04 11 Número de publicación: 2 121 411 6 51 ESPAÑA k TRADUCCION DE PATENTE EUROPEA 12 kNúmero de solicitud europea: 95928441.5 kFecha de presentación : 18.08.95 kNúmero de publicación de la solicitud: 0 777 512 kFecha de publicación de la solicitud: 11.06.97 T3 86 86 87 87 k 54 Tı́tulo: Raqueta de tenis de mesa provista de un mango. k 73 Titular/es: Joachim Kuhn k 72 Inventor/es: Kuhn, Joachim k 74 Agente: Dı́az Núñez, Joaquı́n 30 Prioridad: 23.08.94 DE 44 29 843 Wolffelstrasse 4 97072 Würzburg, DE 45 Fecha de la publicación de la mención BOPI: 16.11.98 45 Fecha de la publicación del folleto de patente: ES 2 121 411 T3 16.11.98 Aviso: k k k En el plazo de nueve meses a contar desde la fecha de publicación en el Boletı́n europeo de patentes, de la mención de concesión de la patente europea, cualquier persona podrá oponerse ante la Oficina Europea de Patentes a la patente concedida. La oposición deberá formularse por escrito y estar motivada; sólo se considerará como formulada una vez que se haya realizado el pago de la tasa de oposición (art◦ 99.1 del Convenio sobre concesión de Patentes Europeas). Venta de fascı́culos: Oficina Española de Patentes y Marcas. C/Panamá, 1 – 28036 Madrid 1 ES 2 121 411 T3 DESCRIPCION La invención tiene por objeto una raqueta de ping-pong dotada por una pala maciza sobre la cual, en la zona de la superficie de fricción, capas de revestimiento pueden aplicarse sobre un lado o sobre los dos lados y un mango constituido por una prolongación de la pala de la raqueta que es continua en la totalidad de su longitud y sobre el cual se aplican por los dos lados placas de mango en los cuales uno o los dos presentan una cavidad en la zona lı́mite de la prolongación de la pala lo cual crea un hueco en el interior del mango, las cavidades presentan perpendicularmente al eje del mango, secciones prácticamente en forma de segmento de cı́rculo o de segmento de elipse, las placas del mango están fijas lateralmente sobre toda su longitud a la prolongación de la pala de la raqueta y las placas del mango, en el extremo del mango más alejado de la superficie de fricción, estando abiertas o cerradas por un elemento flexible. La madera de las raquetas utilizadas para la disciplina deportiva ping-pong, en particular aquellas utilizadas para el deporte de competición, están en general constituidas por una pala en contrachapado o en contrachapado reforzado por fibras y por un mango compuesto por dos chapas. La palabra “chapa” designando aquı́ las partes del mango que se encolan en los dos lados de una prolongación de la pala o sea el extremo es el mango. Estos dos elementos son semejantes a las “chapas de mango” por ejemplo cuchillos u otros utensilios que son habitualmente elementos macizos sin cavidades y ya están encolados por el fabricante de madera de la raqueta (cf. Brockhaus Enzyklopädie, Bd. 16, p. 549, 17a ¯ edición, 1973). Se constituyen en general por una o varias piezas de madera o de contrachapado encoladas unas a otras y que preferentemente, antes de encolarse sobre la pala de la raqueta se fresan a la forma exterior del mango. La superficie de contacto y de encolado entre la chapa del mango y la pala de la raqueta es en general todo el envés de las chapas del mango que, normalmente es plano aunque el delantero no muestre en general fuera de la raqueta descrita zonas particularmente marcadas. Según las reglas A de ping-pong de la Federación Internacional de Tenis de Mesa, la madera de la raqueta, mango de la raqueta incluido, se definen de la forma siguiente: “4.1. La talla, la forma y el peso de la raqueta no están fijados. La pala debe sin embargo ser plana y no flexible ... 4.2. Al menos el 85% de la pala, con respecto a su espesor, debe ser constituido por madera natural. Una capa de cola en el interior de la pala de la raqueta puede ser reforzada por materiales fibrosos, como fibra de carbono, de cristal o papel comprimido. No debe sin embargo exceder 7,5% del espesor total o más de 0,35 mm, según sea inferior ... 4.5. La pala en sı́ misma, cada capa de la pala y cada capa de revestimiento o de cola deben ser continuos y de espesor regular.” La realización del mango, en particular en lo que se refiere al material y la forma, no está actualmente definido en las reglas internacionales. Independientemente de ello, la realización de una raqueta no conforme a las reglas internacionales 2 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 2 es siempre posible para una utilización fuera de las competiciones oficiales. Para el jugador de ping-pong, sentir las pelotas depende en gran parte de la percepción de las vibraciones de la raqueta engendradas por el contacto entre la mano que ejecuta el golpe y el mango de la raqueta. Las vibraciones y las desviaciones de la pala y del mango de la raqueta en una zona de varios micrometros, causados por el impacto de la pelota sobre la pala de la raqueta son percibidas aquı́, en particular, por los receptores llamados de Pacini que se encuentran sobretodo en el interior de la palma de la mano y del mayor. Estos receptores senso-motores presentan una sensibilidad particularmente incrementada por las vibraciones situadas en una gama de frecuencia entre 150 y 300 vibraciones por segundo. En esta gama de vibraciones, las desviaciones de algunos micrómetros pueden ya ser bien percibidos por el hombre. Además, la sensibilidad es particularmente elevada si los puntos de contacto están a una distancia de alrededor de 4 mm (Referencia: G. M. Shepherd, Neurobiology, 2a¯ edición, p. 247 y siguientes, Oxford University Press, 1988). La transmisión de las vibraciones del punto de impacto de la pelota por medio del mango de la raqueta a la mano del jugador tiene lugar, para las vibraciones mismas principales de la raqueta, en una gama de frecuencia situada entre 150 y 3000 por segundo, lo cual depende de la composición del chapado, de la talla y de la forma de la pala de la raqueta. En particular un modo de vibraciones situadas entre alrededor de 250 y 400 por segundo, longitudinales con respecto al eje del mango de la raqueta son responsables del sentido de la pelota del jugador y de la capacidad de control de la raqueta. Aquı́, los receptores de Pacini hacen muestra de su sensibilidad máxima. Para esta forma de vibraciones, el extremo abierto del mango presenta desviaciones particularmente marcadas y además bien perceptibles. Además, sabemos por ejemplo por el DE 24 07 213 que utilizar un mango de raqueta hueco reduce el peso. Al mismo tiempo es posible de esta forma amortizar las vibraciones si la unión entre las chapas del mango y la pala de la raqueta se limita a la zona del nudo de vibración, como se describe en la DE-GM 80 03 137. Un reforzamiento en el blanco de las vibraciones no es en general investigado y es al menos realizable por una raqueta descrita en la EP 0 213 467. Esta última está dotada no obstante por una raqueta hueca la cual, para todos los materiales utilizados habitualmente reduce considerablemente la resistencia a la torsión y restituye esta raqueta inutilizable para el deporte de competición. Finalmente, el fascı́culo de descripción de la patente US 2 205 578 describe una raqueta de ping-pong en la que el mango está dotado de calibrados por los cuales el sudor puede escurrirse en una cavidad situada en el interior del mango que está abierto en su extremo. Para reforzar las vibraciones, este mango está sin embargo igualmente inadaptado. En este contexto, la invención se ha propuesto como tarea el realizar el mango de raquetas de ping-pong de tal forma que las propiedades relativas al juego sean optimizadas en particular que el sentido del jugador respecto a la 3 ES 2 121 411 T3 pelota sea netamente aumentado y que por ello, la capacidad de controlar el golpe sea mejorada. La influencia sobre las propiedades relativas al juego de la madera de la raqueta debe ser considerada en forma de blanco teniendo en cuenta para cada una de las maderas de raqueta los deseos personales del jugador y su forma de jugar. Este problema se resuelve según la invención por el enunciado de la reivindicación 1. Para una transmisión óptima de las vibraciones, es necesario que el sistema de mango constituido por la parte del mango de chapado o de la pala de la raqueta y de las chapas del mango esté adaptada a estas vibraciones. Para hacerlo y en primer lugar, es mejor utilizar una pala continua hasta el extremo del mango y no interrumpida por agujeros o calibrados. Tal pala hace la función de lámina de vibración y garantiza además una alta resistencia a la torsión es decir, una alta estabilidad de la raqueta de ping-pong. Esto es absolutamente necesario sobretodo para los golpes secos. Por otro lado, las chapas colocadas sobre el mango sirven de cavidades resonantes que refuerzan por una parte selectivamente las vibraciones y las transmite por otra parte de forma regular a la mano. Además la pared de las chapas del mango es fina, más la amplitud vibratoria de las vibraciones del mango está señalada y encima la sensación producida por el golpe es fuerte en la mano del jugador. Es sorprendente que se pueda constatar que en particular en razón de cavidades de formas particulares en el interior de las chapas del mango, el sentido de la pelota del jugador puede ser netamente aumentado y que las propiedades relativas al juego de la raqueta pueden verse influenciadas en gran medida. Las chapas del mango rodean también las cavidades resonantes en las que la sección está en semicı́rculo o en arco. La anchura que se retendrá para la cavidad en el lugar más ancho, en la base del mango, se sitúa entre 1,5 y 2 cm. En la práctica, es posible apartarse dentro de ciertos lı́mites de estas dimensiones retenidas si un compromiso debe ser hecho entre propiedades óptimas relativas a las vibraciones, estabilidad mecánica y técnicas de producción. La elección del material juega igualmente un papel en el momento de la realización de las chapas del mango debido a que su comportamiento frente a las vibraciones depende de su módulo de elasticidad. Para chapas de mango realizadas en dicha forma, las vibraciones se hacen notar particularmente fuertes en el mango y se transmiten en consecuencia de forma particularmente marcada a la mano que ejecuta el golpe. Una ventaja de las chapas de mango según la invención reside en el hecho de, que ellas vibran no solamente perpendicularmente a la pala sino casi en todas direcciones. Por ello, los receptores de las vibraciones de la mano son estimulados en una grande superficie y, para el jugador, ello permite una mejor localización del impacto de la pelota sobre la pala. En una ejecución mejorada de la invención la forma de la cavidad corresponde en gran parte a la forma exterior de las chapas del mango es decir que la chapa recubre una cavidad alargada y continua. Asimismo, su longitud tı́pica está com- 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 4 prendida entre 8 y 9 cm. Es igualmente posible fabricar una o las dos chapas del mango con un sistema de cámaras constituido por dos o más cavidades que pueden presentar perfiles longitudinales muy diferentes, preferentemente en arco o rectangulares. Para esta modificación, las chapas del mango presentan, mediante un pasador, una resistencia mecánica acrecentada. Un sistema de cavidades en forma de cámaras con 3 ó más cavidades puede ser igualmente acertado para utilizaciones y materiales particulares. Las vibraciones de la superficie de las chapas del mango dotadas por un sistema de cavidades en forma de cámaras son, en la mayor parte de los casos, menos marcadas que en el caso de una cavidad única continua; pero ciertos jugadores prefieren justamente esta sensación. El espesor de la pared de la chapa del mango está comprendido, según el material, entre 1 y 5 mm. ella se eleva preferentemente a 2 ó 3 mm. debido a que una pared demasiado fina de la chapa del mango es por una parte poco robusta desde el punto de vista mecánico y entraña por un lado las vibraciones propias que se sienten por el jugador como menos agradables que por una pared más espesa. La sección puede ser constante o variable. En particular en cuanto a superficies de unión, es mejor que el espesor sea más importante para conservar una superficie más importante de contacto y de encolado entre la chapa del mango y la pala de la raqueta. Además, las cavidades pueden ser rellenadas por un material fibroso y/o una espuma. Ello tiene como efecto una amortiguación durante las frecuencias de las vibraciones de tal forma que es posible esperar una transmisión selectiva de los modos escogidos. Se ha constatado, también, durante los tests ejecutados sobre las raquetas que por un espesamiento, preferentemente en el revés del mango de la raqueta del extremo anterior dirigido hacia la superficie de fricción, chapas del mango que las vibraciones desencadenadas por el golpe son particularmente bien transmitidas al pulgar y al ı́ndice de la mano que ejecuta el golpe. Ello es bien recibido por ciertos jugadores. Un espesamiento según la invención de las chapas del mango puede ser ejecutado sobre una o las dos chapas del mango. Una realización mejorada de la superficie del mango de la raqueta tiene como efecto que una transmisión particularmente eficaz de las vibraciones que tienen lugar sobre los receptores de vibración en la epidermis de la mano del jugador mediante salientes o rugosidades. La condición para que ellas tengan efecto es que estén distantes de 3 a 4 mm. unas de otras y que su altura sea preferentemente de 1 a 2 mm. debido a que el máximo de estimulación de los receptores de Pacini se encuentra en esta gama de intervalos. Los salientes o rugosidades pueden ser fresados, o bien directamente en el material de base de las chapas del mango, o bien ser realizados por un revestimiento de otro material teniendo especialmente esta forma. En una ejecución moderada, las zonas estructuradas conforme a la invención se colocan en particular en la región en que reposa la palma de la mano y el mayor. 3 5 ES 2 121 411 T3 Un reforzamiento de las vibraciones según la invención proveniente del mango de la raqueta puede ser realizado con diferentes materiales. Sin embargo, el espesor de las paredes y su curvatura se deben adaptar al material para conservar una buena sensación psicológica de las vibraciones. Por otra parte, es posible que la prolongación de la pala de la raqueta en la zona del mango presente, continua o localmente, un menor espesor. Ello permite esperar un reforzamiento del efecto de hoja de vibración que estimula las cavidades para obtener vibraciones resonantes. En particular para mangos rellenos por un material amortiguador de las vibraciones, es útil cerrar las cavidades con una placa ligera y fina, preferentemente de madera, de material sintético o de metal con el fin de evitar que el material caiga. Además, todas las otras cavidades abiertas en el extremo del mango pueden cerrarse mediante una arandela pegada o fija. Ello evita que no entre suciedad. Hace falta sin embargo evitar absolutamente que las vibraciones comprendidas en una gama de 200 a 400 vibraciones por segundo del mango abierto no sean demasiado amortiguadas por la placa. Es por esto que la placa presenta o bien una alta flexibilidad o bien que no esté fija en todos sus puntos. Para un ensanchamiento lateral de las placas del mango en la zona de paso entre el mango de la raqueta y la pala de la raqueta, la resistencia mecánica de la raqueta está por una parte acrecentada y por otra, los dedos se colocan en la toma clásica sobre toda su superficie lo que entraña una sensación acrecentada de la pelota. Esta medida tiene como efecto sin embargo en primer término una optimización conforme a la invención de la transmisión de las vibraciones de la pala al mango de la raqueta debido a que los extremos de las chapas del mango que van hasta la pala de la raqueta producen una estimulación acrecentada de las vibraciones de las cavidades resonantes. Los mangos de raqueta según las reivindicaciones aquı́ descritas pueden ser combinados con palas de raquetas realizados por no importa qué material. En todos los casos, las propiedades relativas a las vibraciones del conjunto de la raqueta deben, adaptarse a la sensibilidad psicológica del jugador. Reemplazando las chapas del mango, es posible tener una influencia sobre las propiedades relativas al juego de la madera de la raqueta y, conforme a la tarea impuesta aquı́, de optimizar el sentido de la pelota por la madera de la raqueta y adaptar la raqueta a las necesidades individuales del jugador. Un intercambio posible puede, por ejemplo, ser realizado de tal forma que el fabricante proponga por una parte una gama de palas de raquetas que se distingan unas de las otras, entre otras cosas, por su rapidez, su elasticidad y su resistencia a la flexión, por ejemplo 3 palas de raquetas que se encolan 3 veces, 5 veces y 7 veces correspondiendo a una madera de defensa, allround u ofensiva. Paralelamente a ello, diferentes chapas de mango son propuestas para combinarse a elección con las palas de las raquetas. Es posible responder a los deseos individuales del jugador 4 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 6 en la medida en que le será dado consejo sobre la base de test ejecutados por jugadores de ping pong experimentados sobre los efectos experimentados con tal o cual combinación entre la pala y la madera de la raqueta. El encolado de las chapas del mango puede tener lugar en pocos minutos utilizando colas de acción rápida, por ej. cola de la utilizada en los dispositivos de presión adecuados para el encolado. Un procedimiento análogo ya se utiliza de forma corriente para el revestimiento de las raquetas o igualmente, los diferentes revestimientos pueden combinarse según las necesidades individuales con las maderas de raquetas escogidas. Hasta aquı́, las chapas del mango de las raquetas no eran reemplazadas más que para optimizar la presentación de la raqueta en la mano por una modificación exterior del mango. Fresando las cavidades, en particular antes de encolar las chapas del mango, las cavidades que tengan una sección poligonal pueden igualmente convertirse en forma de semicı́rculo. Test de los mangos de las raquetas. En una serie de medidas fı́sicas, las raquetas y los mangos de raqueta han sido llevados a vibraciones situadas en una gama de frecuencia de 50 a 3000 vibraciones por segundo y su comportamiento respecto a las vibraciones ha podido ser observado. Una neta influencia del mango de la raqueta sobre la pala y recı́procamente ha podido ser constatada. Más amplios tests ejecutados por jugadores han mostrado que, para cada una de las chapas de mangos descritas, el sentido de la pelota es netamente optimizado. Asimismo, los jugadores podrı́an, la mayor parte del tiempo en razón del sentido acrecentado de la pelota, localizar exactamente el lugar de impacto de la pelota sobre la pala de la raqueta y tener ası́ un mayor control de ejecución del golpe. Dicha constatación ha podido ser hecha tanto por entrenadores, por jugadores de ping pong de competición como por algunos jugadores contados entre los buenos jugadores. Ejemplos de ejecución de la invención están representados en las figuras adjuntas que revelan otros detalles, caracterı́sticas y ventajas. Ellas representan esquemáticamente: Figura 1 Corte longitudinal de una raqueta de ping-pong conforme a la invención Figura 2 Corte transversal a lo largo de la lı́nea A-B de la figura 1 55 Figura 3, 4 Corte longitudinal de través de una variante de realización de la raqueta Figura 5 Vista en alzado de una raqueta de pingpong conforma a la invención 60 65 Figura 6 Raqueta con un espesamiento del mango Figura 7 Corte longitudinal de través de una raqueta de ping-pong dotada de una cavidad rellena Figura 8 Corte transversal a lo largo de la lı́nea A-B de la figura 7 7 ES 2 121 411 T3 Figura 9 Vista en alzado de una raqueta con zonas superficiales estructuradas Figura 10 Corte transversal a lo largo de la lı́nea C-D de la figura 9 La figura 1 representa un corte longitudinal de través de una raqueta de ping-pong a lo largo del eje del mango, de cada lado solamente una única cavidad continua es visible en el interior de las chapas del mango (2). Las chapas del mango (2) están encoladas sobre la pala continua de la raqueta (1). La figura 2 representa un corte transversal (AB de la figura 1) de través del mango de la raqueta perpendicularmente al eje del mango. La cavidad del interior de las chapas del mango (2) presenta un corte en forma de segmento de cı́rculo. La figura 3 representa un corte longitudinal de través de una raqueta de ping-pong a lo largo del eje del mango, dos cavidades posicionadas una detrás de la otra y teniendo un perfil longitudinal en arco siendo visibles. La figura 4 representa un corte longitudinal de través de una raqueta de ping-pong a lo largo del eje del mango, dos cavidades posicionadas una detrás de la otra y teniendo un perfil longitudinal rectangular siendo visibles. La figura 5 representa una vista en alzado de una raqueta de ping-pong en la que las chapas del mango (2) representan cavidades y un espesamiento en su extremo anterior. Ello garantiza una unión particularmente sólida entre la pala de la raqueta (1) y las chapas del mango (2) y una mejor transmisión de las vibraciones de la pala de la raqueta. (1) a las chapas del mango y 5 10 15 20 25 30 35 8 además igualmente a la mano que ejecuta el golpe. La zona anterior (sombreada) de las chapas del mango está biselada en el extremo lindante a la pala de la raqueta. La figura 6 representa un corte longitudinal de través de una raqueta de ping-pong a lo largo del eje del mango. Reconocemos la forma de ejecución con un ligero espesamiento, de las chapas del mango en su parte frontal. Ello tiene como efecto que las vibraciones de la pala de la raqueta (1) se perciben particularmente netamente en la zona de la mano que ejecuta el golpe que está colocada en la dirección de la superficie de fricción. La figura 7 representa un corte longitudinal de través de una raqueta de ping-pong a lo largo del eje del mango para la cual una sola cavidad continua es visible en el interior de las chapas del mango (2), cavidad rellenada con una espuma o un material fibroso. Ello tiene como efecto el amortiguar sobretodo las vibraciones de alta frecuencia sentidas como desagradables. La figura 8 representa un corte transversal (AB de la figura 7) de través del mango de la raqueta y perpendicularmente al eje del mango. El relleno de la cavidad se compone de una espuma o de un material fibroso. La figura 9 representa una vista en alzado de una raqueta de ping-pong en la que las chapas del mango (2) están cada una provistas por una zona dotada de salientes o aristas allı́ donde reposa el mayor o la palma de la mano. La figura 10 representa un corte transversal (C-D de la figura 9) perpendicular al eje del mango para la cual rugosidades teniendo una sección rectangular son visibles sobre una de las dos chapas del mango. 40 45 50 55 60 65 5 9 ES 2 121 411 T3 REIVINDICACIONES 1. Raqueta de ping-pong dotada de una pala maciza (1) sobre la cual, en la zona de, la superficie de fricción, dos capas de revestimiento pueden ser aplicadas sobre un lado o sobre los dos lados y por un mango constituido por la prolongación de la pala de la raqueta que es continuo sobre la totalidad de su longitud y sobre el cual son aplicadas por los dos lados chapas de mango (2) en los que una o las dos presenta una cavidad en la zona lı́mite de la prolongación de la pala de la raqueta (1), lo cual crea un hueco en el interior del mango, las cavidades presentan, perpendicularmente al eje del mango, secciones prácticamente en forma de segmento de cı́rculo o de segmento de elipse, las chapas del mango (2) están fijadas lateralmente sobre toda su longitud a la prolongación de la pala de la raqueta (1) y las chapas del mango (2), al extremo del mango más alejado de la superficie de fricción estando abiertas o cerradas por un elemento flexible, caracterizada por el hecho de que las caras superiores de las chapas del mango (2) están cerradas. 2. Raqueta según la reivindicación 1, caracterizada por el hecho de que una o las dos chapas del mango (2) están dotadas de exactamente una cavidad interna en la que la forma corresponde en lo esencial en la forma exterior de la chapa del mango (2). 3. Raqueta según la reivindicación 1 ó 2, caracterizada por el hecho de que una o las dos chapas del mango (2) presentan varias cavidades. 4. Raqueta según una de las reivindicaciones 1 a 3, caracterizada por el hecho de que el espesor de la pared de las chapas del mango (2) esta comprendido entre 1 y 5 mm. y preferentemente de 2 a 3 mm. 5. Raqueta según una de las reivindicaciones 1 a 4, caracterizada por el hecho de que las cavidades están rellenas completamente o en parte por un material fibroso y/u otro material poroso. 6. Raqueta según una de las reivindicaciones 1 a 5, caracterizada por el hecho de que la parte del mango situada próxima a la superficie de fricción, preferentemente a 1 ó 2 cm. de paso entre la superficie de fricción y la chapa del mango (2), es más gruesa que el extremo situado lejos de 5 10 15 20 25 30 35 40 45 10 la superficie de fricción. 7. Raqueta según una de las reivindicaciones 1 a 6, caracterizada por el hecho de que el mango presenta una o varias zonas provistas por salientes o rugosidades distantes de 1 a 5 mm. y de 0,1 a 3 mm. de altura y colocadas en la parte donde reposa la palma de la mano y/o en la que se coloca el mayor. 8. Raqueta según la reivindicación 7, caracterizada por el hecho de que los salientes o rugosidades son de material sintético, de metal, de corcho o de madera. 9. Raqueta según una de las reivindicaciones 1 a 8, caracterizada por el hecho de que una o las dos chapas del mango (2) es de madera, de material sintético, de metal o fabricada con material reforzado con fibra. 10. Raqueta según una de las reivindicaciones 1 a 9, caracterizada por el hecho de que la prolongación de la pala de la raqueta (1) presenta, en la zona del mango, enteramente o en parte un espesor menor que el resto de la pala de la raqueta. 11. Raqueta según una de las reivindicaciones 1 a 10, caracterizada por el hecho de que una cavidad abierta situada en el extremo del mango está cerrada por una placa fina y ligera. 12. Raqueta según una de las reivindicaciones 1 a 11, caracterizada por el hecho de que la pala (1) está fabricada de material sintético, con un material reforzado con fibra, por contrachapado o por combinación de varios materiales o reforzada por papel comprimido. 13. Raqueta según una de las reivindicaciones 1 a 12, caracterizada por el hecho de que las chapas del mango (2) sobrepasan la prolongación de la pala de la raqueta (1) y lindan con el lı́mite de la superficie de fricción y están fijadas a la misma. 14. Raqueta según una de las reivindicaciones 1 a 13, caracterizada por el hecho de que las chapas del mango (2) están encoladas, atornilladas, clavadas, o fijadas de cualquier otra forma sobre la pala de la raqueta (1). 15. Raqueta según una de las reivindicaciones 1 a 14, caracterizada por el hecho de que la sección en forma de segmento de cı́rculo o de segmento de elipse de la cavidad son aproximadamente de forma poligonal. 50 55 60 NOTA INFORMATIVA: Conforme a la reserva del art. 167.2 del Convenio de Patentes Europeas (CPE) y a la Disposición Transitoria del RD 2424/1986, de 10 de octubre, relativo a la aplicación del Convenio de Patente Europea, las patentes europeas que designen a España y solicitadas antes del 7-10-1992, no producirán ningún efecto en España en la medida en que confieran protección a productos quı́micos y farmacéuticos como tales. 65 Esta información no prejuzga que la patente esté o no incluı́da en la mencionada reserva. 6 ES 2 121 411 T3 7 ES 2 121 411 T3 8 ES 2 121 411 T3 9 ES 2 121 411 T3 10 ES 2 121 411 T3 11