Maestría en Educación Diseños y Estrategias Instruccionales Sesión 7 Bruner II Introducción: En esta lectura revisarás las principales características del Aprendizaje por descubrimiento, así como los seis problemas que se deben superar en la enseñanza a través del método del descubrimiento. Este documento forma parte del libro: Patterson, C. H. (1982). Bases para una Teoría de la Enseñanza y Psicología de la Educación. Manual Moderno. México. Aprendizaje por descubrimiento En 1961, Bruner publicó un artículo con el título "The Act of Discovery" (El acto de descubrir), que se convirtió en la base para una "escuela de pedagogía," que hiciera hincapié, dice Bruner, en el descubrimiento como meta por sí misma, sin tener en cuenta para nada lo que se descubriera. Bruner pretendía destacar la importancia de la autodirección y de la intencionalidad en el aprendizaje. En 1966, publicó "Some Elements of Discovery" (Algunos elementos del descubrimiento), en un intento por remediar el abuso del concepto de aprendizaje por descubrimiento. Aprender descubriendo no quiere decir descubrir algo totalmente desconocido hasta ahora; quiere decir descubrir algo por sí mismo. Estos son los conocimientos más exclusivamente personales y más propios de la persona. Descubrir significa "reordenar o transformar la evidencia, de tal modo que se logre ir más allá de los datos organizados de esta manera, y llegar a otros conocimientos más profundos". Descubrir no significa encontrar verdades totalmente nuevas. Los niños emprenden naturalmente el aprendizaje por descubrimiento y siguen cultivándolo, en un grado mayor o menor, según sea su ambiente de aprendizaje. Un factor importante para que pueda seguir es la expectación de que hay algo por descubrir, que hay regularidades y relaciones en el ambiente, en lugar de creer que todo ocurre al azar. El aprendizaje por descubrimiento aprovecha y fomenta la expectación que produce la regularidad y las relaciones recíprocas. Conduce precisamente al descubrimiento de otras características de los sucesos y a métodos eficaces para lograrlo. "Es, si se quiere, una condición necesaria para poder aprender todas las técnicas para la solución de problemas y para transformar la información con el fin de usarla mejor; más aún, para aprender a emprender bien la misma tarea de aprender. La práctica de descubrir por sí mismo le enseña al sujeto a adquirir una información que resulta más asequible y útil para la solución de problemas . . . En el grado en que puede uno abordar el aprendizaje como una tarea en la que va 1 Maestría en Educación Diseños y Estrategias Instruccionales uno a descubrir algo, en lugar de aprender algo acerca de ello, en ese mismo grado brotará en el niño la tendencia a llevar a cabo sus actividades de aprendizaje con la autonomía del premio por sí mismo, o más propiamente dicho, con la autonomía que da el descubrimiento como premio en sí mismo". De esta manera, el que aprende se libera del control del estímulo inmediato (premios y castigos externos) y queda en libertad para utilizar el éxito y el fracaso como retroalimentación informativa. El comportamiento o actividad adquiere una dimensión de mayor alcance en su orientación y opera más de adentro hacia afuera. Bruner propuso estos principios como hipótesis que deberían ponerse a prueba en las escuelas. Se aprende a resolver problemas por medio del descubrimiento, solamente practicando o probando una y otra vez. Sin embargo, la enseñanza puede facilitar el proceso. Bruner distingue entre enseñar exponiendo y enseñar en forma hipotética. En el primer caso, el maestro controla el proceso, y el estudiante escucha pasivamente. En el segundo caso, el estudiante toma parte activamente, y en algunos momentos puede convertirse en el actor principal. El estudiante llega a conocer bien las alternativas y puede valorar la importancia de la información al ir presentándose. Bruner supone hipotéticamente que este enfoque facilitará el aprendizaje por descubrimiento. En el aprendizaje por descubrimiento el estudiante incorpora la información en una estructura cognoscitiva que él mismo ha desarrollado, de suerte que lo que se aprende adquiere sentido, y por lo tanto, no solamente se retiene en la memoria, sino que se puede recuperar con mayor facilidad. Sin embargo, el aprendizaje por descubrimiento es ineficaz como medio para comunicar y transferir a otros la cultura. Cada individuo no puede redescubrir todo lo que ya se sabe. El descubrimiento tampoco puede ser el medio principal para que conozca uno su propio ambiente. Y Bruner, en un artículo posterior, insinúa que no es el modo natural. Hace notar que el modo como se aprende el lenguaje sí es natural. En este proceso hay tres elementos. Uno se parece mucho al descubrimiento: la exploración de una situación. El niño explora el uso de la lengua. Durante este proceso, el niño inventa combinaciones o patrones de palabras que tienen cierto aspecto innato o que nacen de las características básicas del sistema nervioso. Pero los padres u otras personas del ambiente del niño moldean o les dan forma a estas invenciones para acomodarlas a la gramática de los adultos. De esta manera, el proceso implica tanto enseñanza activa como modelación o imitación, como dos elementos adicionales además del descubrimiento. Al niño no se le permite descubrir al puro azar. Bruner discute luego seis problemas que hay que superar en la enseñanza por el método del descubrimiento, para que los niños usen el material debidamente en diversas situaciones. Primero está el problema de ordenar el aprendizaje de suerte que los niños caigan en la cuenta de que existen conexiones o relaciones entre las cosas que han aprendido; con esto podrán ir más allá de la situación en que han aprendido y pasar a situaciones nuevas. Esto es una actitud; una convicción en los que aprenden de que tienen algo en su mente, ciertos modelos implícitos, que son útiles. "La enseñanza por descubrimiento generalmente implica no tanto el proceso de conducir a los estudiantes a descubrir lo que está 'afuera', sino más bien a descubrir lo que tienen en sus propias mentes". El segundo problema es el de compatibilidad; como lograr que los niños encuadren el nuevo material en sus propios sistemas de asociaciones, categorías y marco de referencia, para asimilarlo plenamente. Es bueno hacer que los estudiantes pongan el material en sus propias palabras, usando sus propios términos. Asistirlos para que formen conceptos y conexiones nuevas y, para ellos, significativas, también ayuda. 2 Maestría en Educación Diseños y Estrategias Instruccionales El tercer problema es el de activar a los niños para que caigan en la cuenta y experimenten su capacidad para resolver problemas, y para lograr el éxito que se necesita para poder percibir el premio propio del razonamiento personal. Aquí, Bruner vuelve a repetir la idea de la competencia personal como autogratificante. El cuarto problema es ver que los niños obtengan práctica en el uso de la información y en resolver problemas. Esto se puede fomentar enseñando por el método hipotético, de suerte que los estudiantes adquieren experiencia en la formulación de hipótesis al igual que en la comprobación de las mismas. El quinto es el que Bruner llama "el problema del apoyo en sí mismo". Con frecuencia los niños pueden hacer cosas, pero no pueden decirse a sí mismos lo que han hecho ni pueden ponerlo en una forma que facilite su retención en la mente. Por lo tanto, también son útiles las discusiones sobre la manera en que decimos las cosas y sobre modos idénticos y diferentes de decir las cosas. Por último, está el problema del manejo de la corriente de información de tal manera que se pueda usar para resolver problemas, o el problema de organizar el descubrimiento de suerte que sea algo ordenado y no una cuestión de inspiración. Bruner hace hincapié en la importancia de presentar el material en forma de contrastes, por ejemplo presentar los aspectos de la vida según las diferentes culturas. "Creemos que haciendo que el niño explore contrastes, habrá mayor probabilidad de que organice sus conocimientos de una manera en que le sirvan para descubrir, en aquellas situaciones particulares en las que se necesita el descubrimiento" La eficacia del método de contrastes "nace del hecho de que un concepto requiere para su definición la opción de un caso negativo, o poder apelar a un caso negativo. El concepto de Hombre es diferente según que se contrapone a los osos que se yerguen, a los ángeles o a los demonios. La posibilidad de explorar contrastes ofrece la elección entre alternativas, elección que puede ser pertinente". Por consiguiente, el aprendizaje por descubrimiento no se aplica a todo tipo de aprendizaje. El método de aprender descubriendo es lo que parece que Bruner quiere recalcar, y es esto lo que se debe aprender. Este método implica la construcción al igual que la comprobación de hipótesis; su importancia o valor está en que desarrolla la habilidad para trascender lo inmediato o lo muy conocido, y para asumir la postura "como si" o "si luego", la cual puede conducir en general a un pensamiento más creador, así como a un aprendizaje específico por descubrimiento. Intuición disciplinada Intuición o pensamiento intuitivo tiene por lo menos dos significados o connotaciones. Por un lado significa el conocimiento que se logra por un camino diametralmente opuesto al conocimiento que se logra por el método científico, o sea, mediante la experimentación, el estudio empírico, el análisis lógico estadístico o la prueba matemática. Es el conocimiento que se obtiene por medio del arte, la poesía, el mito y las humanidades. Esto es lo que Bruner llama conocimiento por la mano izquierda. En este sentido, el término pensamiento intuitivo se suele tomar en sentido peyorativo o reprochable. Pero este mismo término se usa en matemáticas (al igual que en las ciencias físicas y biológicas) sin ningún sentido o connotación negativos. El pensamiento intuitivo se tiene en grande estima en estas disciplinas, tal vez, opina Bruner, debido a la confianza que los representantes de estas disciplinas tienen en su fuerza y rigor. 3 Maestría en Educación Diseños y Estrategias Instruccionales El diccionario define intuición así: "Percepción o conocimiento inmediato". Es el logro de la solución repentina de un problema en el que se ha trabajado durante mucho tiempo, cuya prueba formal viene bastante después. También significa el reconocimiento de una verdad o solución sin ninguna prueba, o sin saber cual de los diversos enfoques y soluciones de un problema tiene la probabilidad de resultar provechoso. Intuición "implica el acto de captar el sentido, significado o estructura de un problema, sin el apoyo explícito del aparato analítico propio del campo en que uno se mueve. La modalidad intuitiva de conocer es la que produce hipótesis rápidamente, la que produce combinaciones interesantes de ideas antes de conocer a fondo su valor. Antecede a la prueba; más aún, es aquello que las técnicas del análisis y de la verificación deben someter a prueba y comprobar". El pensamiento intuitivo se contrapone al pensamiento analítico. El pensamiento analítico procede por pasos, con respecto a los cuales el que piensa está consciente. Suele echar mano del razonamiento deductivo, de las matemáticas, de la lógica, o de la inducción por medio de la experimentación. El pensamiento analítico proporciona la prueba de las soluciones o hipótesis que se han logrado por medio del pensamiento intuitivo. El pensamiento intuitivo puede alcanzar soluciones a las que tal vez no se llegue por el pensamiento analítico, o si se llega, lo logra más lentamente. El pensamiento intuitivo puede incluso descubrir o inventar problemas que el pensamiento analítico no podría descubrir ni inventar. La importancia del pensamiento intuitivo es evidente. Es la fuente de muchos de los problemas e hipótesis importantes que han llevado al progreso de las ciencias. Necesitamos aprovechar las corazonadas, las conjeturas y las intuiciones, que son algunas de las formas del conocimiento "por la mano izquierda", pasándolas a la "mano derecha", para que sean comprobadas. Conviene, pues, fomentar, alentar y mejorar el pensamiento intuitivo. Bruner sugiere que hay muchas cosas que tal vez podrían alentar el pensamiento intuitivo en los estudiantes: 1. El desarrollo del pensamiento intuitivo en los niños es más probable si sus maestros piensan intuitivamente. Parece que aquí viene muy al caso el modo hipotético de enseñar. Los estudiantes se sentirían inclinados a imitar o a identificarse con los maestros. 2. El ofrecer diversas experiencias en un campo debe aumentar la eficacia del pensamiento intuitivo en ese mismo campo. La intuición supone un conocimiento profundo de la materia; el conocimiento no tiene que ser formal, pero se necesita algo sobre lo cual se puede trabajar. 3. El énfasis en la estructura o en las relaciones mutuas de los conocimientos, aumenta la facilidad para pensar intuitivamente. La estructura destaca las ideas, conceptos, principios y relaciones importantes; todo lo cual proporciona a su vez una buena base para desarrollar interrogantes o hipótesis. 4. La enseñanza de procedimientos heurísticos en la solución de problemas debe fomentar el pensamiento intuitivo. Estos enfoques no son rigurosos, comparados con el procedimiento analítico o algorítmico; y aunque los procedimientos heurísticos no garantizan una solución (como lo hace el procedimiento algorítmico), se pueden usar cuando no se conoce ningún procedimiento algorítmico para un problema determinado. Estos procedimientos incluyen el uso de métodos apropiados para un problema simple como el que se tiene entre manos; razonamiento por analogía; apelación a la simetría; examen de las condiciones 4 Maestría en Educación Diseños y Estrategias Instruccionales limitantes; y la visualización de soluciones. Estos procedimientos permiten que los estudiantes exploren, en lugar de obligarlos a un único procedimiento. 5. Alentar al estudiante a que adivine y conjeture (no a una conjetura alocada, sino a una educada, fundada en cierto conocimiento de alguna materia determinada) debe aumentar el pensamiento intuitivo. Con demasiada frecuencia se castigan las adivinaciones. Pero en la vida real, con frecuencia se hace necesario actuar con conocimientos incompletos, o realmente adivinando. "Lo que probablemente deberíamos enseñar a los estudiantes es a reconocer cuándo es demasiado elevado el precio de no adivinar, al igual que cuándo la adivinanza misma es demasiado costosa. Lo segundo lo solemos hacer mucho mejor que lo primero". El que los maestros echen mano de la adivinanza o conjetura cuando se encuentran ante un problema que no pueden resolver, seguido por una comprobación de la conjetura, podría servir de ejemplo para los estudiantes. 6. El fomentar en los alumnos la confianza en sí mismos debe fomentar el pensamiento intuitivo efectivo. El pensamiento intuitivo lleva con frecuencia a soluciones correctas, pero también puede conducir a errores. Se tiene que estar dispuesto a equivocarse, riesgo que suele tomar la mayoría de los casos aquellos estudiantes que se sienten seguras de sí mismos, o que tienen confianza en sí mismos. 7. El modificar el sistema actual de premios y castigos en las escuelas, el cual probablemente tiende a inhibir el pensamiento intuitivo, debe aumentar dicho modo de pensar. El premiar las respuestas correctas y la adquisición de datos con buenas calificaciones, y castigar la conjetura y otras manifestaciones del pensamiento intuitivo con bajas calificaciones, ciertamente desalienta lo segundo. Estas sugerencias (aunque intuitivas ellas mismas) son lo suficientemente razonables como para que se les preste atención. Un argumento convincente para darle entrada al pensamiento intuitivo en la educación, es que permite enseñar la estructura y fundamentos básicos de una materia a niños pequeños, antes de que estén capacitados para comprender el razonamiento analítico o el pensamiento formal. El niño al nivel concreto o icónico de desarrollo cognoscitivo, puede captar conceptos básicos a un nivel intuitivo. Especialmente en la enseñanza de las matemáticas, se ha demostrado con toda claridad que los niños son capaces de comprender conceptos complejos cuando se les presentan en una forma concreta, en lugar de presentarlos por medio de un vocabulario formal. En los grados más elevados, por ejemplo en la geometría plana de la escuela secundaria, la enseñanza debe empezar con métodos intuitivos, incluyendo pruebas visuales. Después de que se ha logrado una comprensión intuitiva, el maestro puede pasar a los métodos tradicionales y formales de probar las cosas. El niño pequeño llega a la escuela con una comprensión, a nivel intuitivo, de muchos principios matemáticos que tal vez no pueda expresar de palabra. La escuela, en lugar de empezar por aquí, introduce "el uso prematuro del lenguaje matemático, su formalismo que más bien debería venir después, lo cual hace que las matemáticas le parezcan al niño como algo nuevo y no como algo que él ya conoce. . . Al interponer el formalismo impedimos que el niño caiga en la cuenta de que ha estado pensando en términos matemáticos desde hace mucho tiempo. Lo que estamos haciendo esencialmente es privarlo de la confianza en sí mismo, y de su habilidad para emprender el estudio de las matemáticas. Lo peor que podemos hacer es ofrecer la prueba formal (necesaria para la comprobación) en lugar de la intuición directa. . . Es muy importante dejar que el niño 5 Maestría en Educación Diseños y Estrategias Instruccionales use sus modos naturales e intuitivos de pensar; más aún, alentarlo para que lo haga, y rendirle los debidos honores cuando lo hace bien". De lo contrario, en lugar de aceptar y fomentar el pensamiento intuitivo natural del niño, la escuela lo estará obstaculizando. El resultado es que al niño se le obliga a emprender todo el proceso mecánico de manipular números sin ningún sentido intuitivo del asunto. Bruner escribe que la observación de este proceso le recuerda lo dicho por Lewis Carroll: "Embrollándose y retorciéndose, por supuesto, para empezar. . y luego las diferentes ramas de la aritmética: ambición, distracción, repugnancia y desprecio". Aceleración Hay que decir aunque sea una palabra acerca de la postura de Bruner respecto a la aceleración, ya que se le ha interpretado como si estuviera en desacuerdo con Piaget en esta materia. En realidad, es muy poco lo que Bruner ha dicho acerca de la aceleración, la palabra no aparece en los índices de sus libros. La postura de Bruner parece ser simplemente que el niño necesita, y que crece más fácilmente en situaciones que exigen el ejercicio de las aptitudes propias del nivel de desarrollo en que se encuentre en ese momento. O como lo expresó en otro lugar, "la instrucción en las ideas científicas, incluso al nivel elemental, no tiene que seguir servilmente el curso natural del desarrollo cognoscitivo en el niño. También puede dirigir el desarrollo intelectual ofreciéndole al niño oportunidades retadoras, pero aprovechables, de suerte que pueda avanzar despacio pero constantemente en su desarrollo". Si siempre existe un modo de enseñar a los niños las ideas y conceptos básicos, como afirma Bruner, entonces, dice él, no puede o no debe uno esperar pasivamente que aparezca el momento apto para aprender. Esta disposición se puede crear mediante la enseñanza apropiada. Otras aportaciones sobre el tema: Con el aprendizaje por descubrimiento el individuo tiene una gran participación. El instructor no expone los contenidos de un modo acabado; su actividad se dirige a darles a conocer una meta que ha de ser alcanzada y además de servir como mediador y guía para que los individuos sean los que recorran el camino y alcancen los objetivos propuestos. En otras palabras, el aprendizaje por descubrimiento es cuando el instructor le presenta todas las herramientas necesarias al individuo para que este descubra por si mismo lo que se desea aprender. Constituye un aprendizaje bastante útil, pues cuando se lleva a cabo de modo idóneo, asegura un conocimiento significativo y fomenta hábitos de investigación y rigor en los individuos. Jerome Bruner atribuye una gran importancia a la actividad directa de los individuos sobre la realidad. 6 Maestría en Educación Diseños y Estrategias Instruccionales Para Jerome Bruner el aprendizaje es un proceso activo de construcción de nuevas ideas o conceptos basados en el conocimiento previo o actual . Instruír a alguien (...) no es conseguir que guarde resultados en la mente. En cambio, es enseñarle a participar del proceso que hace posible el conocimiento. No enseñamos una materia para producir bibliotecas vivientes sobre el tema, sino para conseguir que el estudiante piense matemáticamente por sí mismo, para que considere los asuntos como lo haría un historiador, para que sea parte del proceso de adquisición del conocimiento. Conocer es un proceso, no un producto . (J. Bruner,1966) Resumen El aprendizaje por descubrimiento es un método de aprendizaje muy útil en el caso de los niños, método que con demasiada frecuencia se descuida en la educación. Debe fomentarse y continuarse, ya que es una condición necesaria para aprender las técnicas de la solución de problemas. Aprender descubriendo es un premio o compensación por sí mismo y, por lo tanto, libera al que aprende del control de los estímulos. Este modo de aprender se fomenta con una enseñanza de modalidad hipotética, por oposición a la enseñanza por exposición. Aunque el aprendizaje por descubrimiento es insuficiente para transferir todos los conocimientos propios de la cultura, el método sigue siendo importante, ya que abre el camino para el descubrimiento de nuevos conocimientos mediante el método científico. El descubrimiento de nuevos conocimientos supone el pensamiento intuitivo. El pensamiento intuitivo es la solución repentina de un problema, o el logro de una verdad o solución sin ninguna prueba formal. Estas verdades o soluciones se convierten luego en hipótesis, las cuales se someten después a prueba o se verifican por medio del pensamiento analítico. La educación tiende a desalentar el pensamiento intuitivo. Debería, por el contrario, fomentar este modo de conocer, y de hecho lo puede hacer de varias maneras: por el ejemplo de los maestros; presentando diversos puntos de vista o diversos enfoques con respecto a alguna materia; haciendo hincapié en las ideas y conceptos fundamentales, así como en sus relaciones recíprocas; fomentando los procedimientos heurísticos en la solución de problemas; fomentando la adivinación y conjetura dirigida; fomentando en los estudiantes la confianza en sí mismos, de suerte que acepten el riesgo de equivocarse; y abandonando el sistema de premiar las respuestas "correctas" y de castigar la adivinanza, conjetura u otras manifestaciones de pensamiento intuitivo. Los niños son naturalmente intuitivos en su modo de pensar. Reconocer esto y presentar las materias primero bajo una modalidad intuitiva facilita a los niños captar las materias básicas a una edad temprana. Teniendo la sensación de que pueden comprender, se les puede llevar a una comprensión más analítica y formal, sin que pierdan la confianza en sí mismos y sin tener que apelar al aprendizaje de pura memoria. 7