Decid Felipe Santos, SDB Decid “perdón”, sin dudar, a Dios y al prójimo. Esta palabra es difícil de pronunciar. Con ella rompéis los muros, construid pasarelas por encima de profundos fosos, Decid públicamente que habéis hecho mal, Que os habéis equivocado, que lo sentís y deseáis reanudar en vínculo roto. Dios Silencio, nos has hablado: Luz en nuestros ojos, fermento en nuestro pan. Decid «te amo », sin dudar, a Dios y tus semejantes. Esta palabra es preciosa como el oro. Os compromete. Es una palabra que os une. Con esta palabra expresáis que el otro es tu sol Que sin él tu vida es una noche, Que para él estáis listos a dar todo y que no tenéis otra inquietud que su felicidad. Dios Silencio, nos has hablado: Luz en nuestros ojos, fermento en nuestro pan.