RESUMEN 1/ El problema fundamental de Kant −"el interés supremo de la razón"− es el problema de la metafísica (qué debemos hacer, si es libre la voluntad, si existe Dios y una vida futura...) y su intención dar una nueva fundamentación de la misma. 2/ Esa recuperación o fundamentación de la metafísica (conocer la verdad), tras el fracaso del racionalismo y el empirismo, no puede hacerse dogmáticamente (como en el racionalismo). Debe ser crítica (como en el empirismo); pero sin recaer en el escepticismo puramente negativo. ¿Cómo tiene que llevarse a cabo una filosofía crítica, antidogmática, pero no escéptica? 3/ La filosofía tiene que llevarse a cabo como critica análisis trascendental de la razón, pero en todos sus usos: a) Crítica o análisis de la razón en su uso teórico (análisis de las condiciones que hacen posible el conocimiento... objetivo, y por tanto, análisis del valor y límites del conocimiento y la objetividad): Crítica de la razón pura. b) Crítica o análisis de la razón en su uso práctico o moral (análisis de las condiciones que hacen posible los juicios morales o el imperativo categórico; y que no son otra cosa que la libertad, la inmortalidad del hombre y la existencia de Dios): Crítica de la razón práctica. c) Incluso, análisis y crítica de la razón en su uso estético: la experiencia de lo bello y lo sublime: Critica del juicio. 4/ Resultado de la "Crítica de la razón pura": −No podemos conocer la "realidad en sí" (más allá de nuestras posibilidades). −Lo absoluto, Dios, la inmortalidad... son sólo "ideas", que podemos pensar, cuya posibilidad concebimos, pero que no conocemos realmente ni se nos muestran en su realidad. Aunque no pueden ser negadas ni descartadas. 5/ Resultado de la "Crítica de la razón práctica": Son auténticos "ideales" para la acción y las condiciones de posibilidad o sin las cuales no sería posible ni la realidad ni el cumplimiento −del objeto− de la ley moral. Sin esos supuestos (postulados) quedaría sin explicación el hecho mismo de la ley moral y reducida al absurdo su pretensión (la de actuar por deber y en último término realizar la "humanidad"), lo más sublime y racional que hay en el hombre. −Luego queda abierta de forma más firme su verdad, hasta el punto de ser "razonablemente" aceptable (aunque nunca conocida ni "demostrada"). LA CRITICA DE LA RAZÓN PRACTICA O EL ANÁLISIS KANTIANO DE LA EXPERIENCIA MORAL (REFLEXIÓN TRASCENDENTAL SOBRE LA MORALIDAD). EXPOSICIÓN SINTÉTICA 1/ La Crítica de la razón práctica es el análisis kantiano de la experiencia moral, la crítica de la razón en su uso práctico o moral.: un análisis de las condiciones −formales y a priori, trascendentales− que hacen posibles 1 los juicios morales o la determinación de la voluntad por medio de leyes prácticas o imperativos... categóricos. El hombre no sólo conoce, sino que actúa moralmente, o mejor, se pone o reconoce leyes, normas de comportamiento, imperativos para la acción. La razón, en cuanto determina a la voluntad para obrar por medio de tales leyes prácticas es llamada por Kant RAZÓN PRÁCTICA. Si la razón teórica se expresaba en juicios, ésta lo hace en IMPERATIVOS, que en última instancia son CATEGÓRICOS. Tal es el hecho de que parte Kant en la KpV. Si en la KrV partía del hecho del conocimiento objetivo o científico y se preguntaba por las condiciones de posibilidad de los juicios sintéticos a priori, aquí parte del hecho del conocimiento o la conciencia moral humana y se pregunta cuál es el fundamento o condiciones de posibilidad de los juicios morales, es decir, del imperativo categórico. No pretende tanto una Filosofía moral (normativa, que responde a la pregunta "qué debo hacer"), sino una reflexión crítica previa sobre el hecho de la moralidad, que se convierte en una Fundamentación de la Metafísica de las costumbres o una Crítica de la razón practica. Y esto con un doble objetivo: a) moral: exponer las condiciones o requisitos mínimos que debe cumplir una filosofía moral (o metafísica de las costumbres) en su determinación del "bien" y la virtud. b) "rnetafïsico": analizar si la razón práctica puede ampliar el campo de nuestro saber sobre lo incondicionado o da nuevas perspectivas a lo que constituye el supremo interés de la razón humana: "si es libre la voluntad, si existe Dios y una vida futura". 2/ El factum del imperativo categórico (universalidad, necesidad, incondicionalidad, desinterés). Kant parte, pues, del hecho de la moralidad, de la existencia en el hombre de principios de actuación que sólo pueden ser descritos como IMPERATIVOS CATEGÓRICOS (la presencia en la conciencia del imperativo categórico es el hecho, el factum fundamental del que parte Kant en su KpV). El hombre, en la acción que llamamos moral, posee un sentido del deber, experimenta en sí mismo una conciencia de "lo que debe hacer", en que eso −la conducta a realizar− se le presenta como algo que debe ser hecho de forma incondicional, sin supeditarlo al interés propio, a los bienes que vaya a conseguir por su acción o a cualquier otra consideración interesada. Él hombre, la conciencia moral, se rige o cree que debe regirse por la pura realización de lo "bueno", de lo que es debido, y eso tiene carácter categórico, algo que debe ser realizado, con independencia, dice Kant, de los resultados que se deriven de su acción ("prescindiendo de lo que se cumpla por su causalidad"). El hombre comprende esta exigencia: "debo hacer esto" (no matar, no mentir, no apropiarme de lo que no me pertenece...), porque eso es lo justo, lo correcto, "lo debido". Y eso debo hacerlo por encima de todo, sin condiciones, con independencia de que me premien o me castiguen, con independencia de que yo salga beneficiado o perjudicado por hacer lo que debo. La conciencia moral es desinteresada (es una voluntad "pura", porque se exige actuar por puro sentido del deber, con total pureza de intención, restando valor moral a cualquier acción en que se hayan mezclado cualquier motivo o consideración interesada). No dice: "Si quieres ser feliz, haz lo que debes", sino: "Haz lo que debes", sin más. Los mandatos morales que el hombre experimenta en su conciencia son Acondicionados. Kant los llama CATEGÓRICOS. La forma del imperativo moral, tal como lo experimenta el hombre moralmente desarrollado, no es: "Si quieres X, haz Y" (I. Hipotético), sino: "Haz Y" (categórico, donde se manda algo que tiene que realizarse sin condición). Por eso dice Kant que "sólo es soberanamente buena la "buena voluntad", la pureza de intención. Y que sólo es auténticamente moral la "acción por deber" y no la simple "acción conforme al deber". 2 En suma, lo característico de la norma moral, del imperativo, es la necesidad e incondicionalidad con que se impone a la conciencia y, en último término, el desinterés: "Actúa siempre con pureza de intención, por el interés de lo justo, del bien, y no por un interés particular o cualquier otra condición interesada". "Actúa no por lo que te interesa o te reporte beneficios, sino por lo que debes hacer". Esa es la conciencia del deber en el hombre. 3/ ¿Cuál es el fundamento de ese imperativo?¿Por qué se determina la voluntad en la ley moral? Kant afirma que ese imperativo (los juicios morales) tiene un fundamento formal y a priori, es decir, que la conciencia moral (razón práctica), en su juicio moral, se determina, no por el contenido o materia de la ley, que es siempre particular, circunstancial y condicionado, sino por la pura forma de obligación, que es lo común a todo juicio moral, frente a la diversidad de los contenidos o acciones concretas a realizar, siempre variables, condicionadas y empíricamente determinadas. Sólo la forma, el puro sentido de obligación, explica la universalidad y necesidad con que se presenta la ley moral. Y esa "forma de obligación", ese puro sentido del deber, es una estructura a priori de la razón práctica o de la voluntad: pertenece a la estructura racional del hombre como tal, pertenece a su propia constitución como conciencia humana (conciencia de hombre, conciencia de humanidad). NOTA: No es que Kant proponga una "ética formal", sino que afirma que la conciencia moral se determina −desde sí misma o a priori− por la pura forma de la ley. La conciencia es "formalista". 4/ ¿Y qué significa eso? La autonomía de la voluntad Que la voluntad se determina exclusivamente desde sí misma en la acción o en el juicio moral, esto es, que la voluntad moral (una voluntad pura) es AUTÓNOMA y que se da a sí misma sus propias leyes, es autolegisladora. Lo que está claro para Kant es que la conciencia moral y su ley no surge de algo externo al hombre: la moral no se funda ni en el mandato divino −dependencia o heteronomía teológica− ni en la consideración de los resultados que para mí se deduzcan de la acción u otros motivos empíricos (heteronomía natural o fenoménica). La ley moral surge exclusivamente de la constitución racional del hombre, pertenece en última instancia a la conciencia que la humanidad tiene de sí misma y refleja el respeto y la consideración que el hombre o la humanidad exige para sí. 5/ Por eso Kant critica v rechaza las éticas materiales, aquéllas que establecen un contenido determinado o un "bien" determinado como determinación de la voluntad en la acción moral (y en virtud del cual o por cuya consecución ha de establecerse qué es lo que debe hacerse. a) Porque, como explicación o justificación del hecho moral, no dan razón de la universalidad y necesidad con que se presenta la ley moral (el imperativo categórico). b) Y porque, como propuesta o como filosofía moral, quedan muy por debajo de la propia conciencia moral o moralidad humana existente (por debajo de lo que los hombres juzgan como auténticamente moral): Proponen el interés (la felicidad, etc.) como fundamento y determinante de la voluntad, cuando ésta es desinteresada. Proponen imperativos hipotéticos, cuando la razón práctica se rige o se da a sí misma imperativos categóricos. 6/ ¿Y cuál es el verdadero significado o contenido de la ley moral? 3 Fundamentalmente, el respeto a la humanidad. Decimos que la ley moral se origina en la misma constitución de la razón como conciencia humana (conciencia de hombre, conciencia de la humanidad), que se impone a sí misma esos principios morales, y de alguna forma reflejan el respeto y la consideración que el hombre, la humanidad, se tiene a sí misma y exige para sí misma. Quizá el verdadero significado es que el hombre, la humanidad, de la que surge la ley moral categórica, se valora a sí misma por encima de todo y se impone el respeto a sí o a la humanidad (lo que Kant entiende por "humanidad" es una comunidad de hombres autónomos, racionales y solidarios).Entonces, el verdadero mandato y contenido del imperativo categórico es el respeto y la promoción de esa humanidad (de ahí la exigencia de universalidad). Por eso, el imperativo categórico se formula de diferentes maneras: "Actúa de tal manera que tu acción pueda convertirse en norma universal, o en la forma en que actuaría toda persona moral −racional y autónoma− en esa circunstancia". "Actúa de tal manera que tomes a la humanidad, tanto en ti como en cualquier otro, siempre como fin y nunca como medio" Formulaciones que muestran a su vez las condiciones básicas o exigencias mínimas que ha de cumplir una acción moral o los criterios básicos a que debe atenerse toda filosofía moral que quiera determinar qué es el bien: autonomía moral, exigencia de universalidad y respeto a la humanidad. 7/ LOS POSTULADOS DE LA RAZÓN PRÁCTICA: LIBERTAD. INMORTALIDAD DEL ALMA Y EXISTENCIA DE DIOS Aclaraciones sobre el significado de los POSTULADOS DE LA CRITICA DE LA RAZÓN PRÁCTICA La ley Moral manifiesta (pone en evidencia) una dimensión no fenoménica del hombre. La ley moral es una exigencia que apela a nuestra LIBERTAD (al hombre como libertad), una condición sin la cual no habría ley ni actuación moral, algo que tiene que ser supuesto como condición misma. No se nos da directamente en sí misma, no es un conocimiento ni penetramos en su esencia. Lo que se nos da, lo que conocemos siempre, es el hombre como ser fenoménico, como ser natural, causalmente determinado, e incluso una voluntad normalmente condicionada, movida efectivamente por motivos, inclinaciones, intereses y pasiones que hacen prácticamente inexistente una decisión y una actuación realmente moral, impulsada puramente por el sentido del deber, del bien. Pero la existencia del ideal moral −"tengo que regirme por el bien"− hace/ referencia a una auténtica LIBERTAD del hombre, no ya fenoménico y condicionado, sino esencialmente libre y por ello no puramente físico o natural, sino espiritual: el hombre nouménico, la más auténtica realidad del hombre. La LIBERTAD es condición para que exista la ley moral (no hay ley moral, no hay voluntad moral, voluntad que se autodetermina en el querer para la acción, sin libertad), . La INMORTALIDAD es condición, no para que exista la ley moral, sino para que pueda llevarse a cumplimiento, para que el objeto de la misma sea posible y por tanto para que no sea un absurdo, un querer sin posibilidad de realización, una "pasión inútil". DIOS es la condición para que esa inmortalidad sea posible. Es el garante necesario de la inmortalidad. 4 KANT: INFLUENCIAS Y REPERCUSIONES 1. INFLUENCIAS RECIBIDAS − Racionalismo en el que se formó (Leibniz, Christian Wolf, su maestro). Por supuesto, Descartes. − Empirismo (Hume). − Pietismo protestante, en el que se educó, decisivo en su ética. −La presencia continua de Aristóteles, revisado (materia y forma, reinterpretación continua de las categorías. Distinción fenómeno y noúmeno, manteniendo la "realidad en sí"). 2. INFLUENCIAS DE KANT (repercusiones) La influencia de Kant es inmensa y definitiva: la idea de la finitud y carácter indirecto del conocimiento humano; la existencia del a priori, de estructuras aprióricas que condicionan el conocimiento; la distinción entre "lo que sea lo real en sí" y lo que es "lo real para nosotros"; incluso la idea de que Dios no es objeto de conocimiento racional...; la orientación de la ética como análisis de la moralidad y búsqueda del fundamento del juicio moral; la necesidad de ese análisis o del análisis de la experiencia moral como dimensión fundamental de la experiencia humana; la incondicionalidad del deber; la necesidad de autonomía moral, de la humanidad como fin para sí misma y su dignidad como fundamento de la moral; el planteamiento de la trascendencia en el ámbito de la "fe filosófica" (motivos razonables para la creencia)... Son ideas de amplísima repercusión y aceptación. (El principio idealista de que lo real está en necesaria referencia al sujeto y de que el conocimiento es activo−constituyente; o que el hombre es finito y limitado, pero aspira irremediablemente a lo que sobrepasa sus límites...). −Necesidad del CRITICISMO, de comenzar la filosofía por el análisis del conocimiento... La filosofía como análisis crítico (trascendental, de las condiciones de posibilidad) de la totalidad de la experiencia. −El IDEALISMO ALEMÁN: Fichte, Schelling, HEGEL (idealismo subjetivo−moral, idealismo objetivo o de la naturaleza, idealismo absoluto). Parte de Kant, convierte al sujeto, la conciencia, en el absoluto (suprimida la "realidad en sí"): el YO, el OBJETO (romanticismo) o la TOTALIDAD SUJETO−OBJETO. −SCHOPENHAUER: el mundo como voluntad y representación. −KANTISMO Y NEOKANTISMO (Cohén, Natorp, maestro de Ortega). −POSITIVISMO Y FILOSOFÍA ANALÍTICA: negación de la metafísica, realidad como objetividad, la filosofía como análisis de las condiciones de posibilidad de los juicios, lo que puede conducir al análisis del lenguaje... −Influencia en la filosofía de orientación "PERSONALISTA", individualista, "humanista": insistencia en la autonomía de la voluntad, del sujeto moral, irreductibilidad de la moralidad y de la libertad... EXISTENCIALISMO, PERSONALISMO, FILOSOFÍA DE LA ACCIÓN (M. Blondel). −FENOMENOLOGÍA, y particularmente en la filosofía trascendental de HUSSERL, tan emparentada a la de Kant. −NEOESCOLÁSTICA −ÉTICAS DE ORIENTACIÓN NEOKANTIANA: Rawls, Habermas, 5 −SOCIOLOGÍA DEL CONOCIMIENTO (K. Manheim) y EPISTEMOLOGÍA GENÉTICA (J. PIAGET). También en la gestaltheorie o PSICOLOGÍA DE LA FORMA. 6