Accionar emocional vs racional Cómo interactuamos como seres

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Monografía
Formación en Neurosicoeducación
Alumno: Fernando Julio Silva
www.asociacioneducar.com
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Facebook: www.facebook.com/NeurocienciasAsociacionEducar
Accionar emocional vs racional
Cómo interactuamos como seres humanos individuales y
dentro de organizaciones a partir del accionar de las
Amígdalas Cerebrales (AC) y los Lóbulos Pre Frontales
(LPF)
Para reformar a esta sociedad,
refórmate primero a ti mismo,
pues así habrá un granuja menos en este mundo
Thomas Carlyle
Dedicatoria
Este producto monográfico no hubiese sido posible sin la inmensa colaboración y apoyo continuo de mi
Tutora (y a quien hoy considero mi amiga), Denise Toiw. Ella estuvo siempre presente con sus invalorables,
afectuosos y profesionales comentarios; alentándome en todo momento a proseguir con el avance en los
estudios de esta ciencia por demás apasionante.
Valga el reconocimiento para una gran profesional, pero ante todo excelente persona
El autor
Resumen
Prof. Lic. Fernando Julio Silva
2015
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El presente trabajo mostrará una introducción al área de investigación que interrelaciona a las emociones con
el sistema racional; vale decir, que nos muestra de qué manera las Amígdalas Cerebrales (AC) pueden
interferir en la toma de decisiones racionales que se realizan a partir de la intervención de los Lóbulos Para
Frontales (LPF)
Esta relación nos permite realizar un primer análisis de comportamiento sobre la actuación del ser humano
como tal y a su vez establecer un parámetro de su comportamiento dentro de las organizaciones
(entendiendo a estas últimas como a un grupo de personas que interactúan entre sí teniendo como meta un
fin común. Pudiendo ser éste monetario o no)
Palabras clave
Cerebro – Amígdalas Cerebrales (AC) – Lóbulos Pre Frontales (LPF) – Emociones – Racionalidad Comportamiento – Phineas Gage - Neuronas en espejo
Sistema Problemático Inicial
En las Neurociencias no existe de manera acabada un estudio sobre las relaciones que se producen dentro de
nuestro cerebro, si bien se han realizado numerosas investigaciones que dieron comienzo aproximadamente
a partir del año 1800, aún se siguen descubriendo nuevas facetas.
Propósito de la Investigación
Mi propósito al investigar el tema del impacto de las emociones sobre el comportamiento humano en este TP
es mi deseo de un pequeño aporte que sume a las investigaciones ya realizadas; soy consciente que debido al
índole de TP y a lo escaso del espacio no podré ahondar con la debida profundidad en el tópico. Ya que es
en este espacio donde se van a producir la gran toma de decisiones que involucran a nuestro desarrollo diario
como persona y nuestra interrelación para con los demás.
Para realizar el trabajo, el objetivo principal se descompondrá en:
1. Probar cómo se relaciona, si es que esto existe, el comportamiento neuronal/emocional sobre el
comportamiento per se del individuo dentro de una organización.
1.1 Al referirme a organizaciones, no hago distinción del tipo de la que se trate
1.2 Cómo la actuación directa de las amígdalas puede ocasionar desbordes de carácter emocional y cómo la
intervención de los LPF actúan como frenos de las anteriores y permiten un comportamiento con mayor
grado de racionalidad.
1.3 Cómo situaciones de gran stress pueden desencadenar acciones de miedo que hacen que la supervivencia
se convierta en factor primordial
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Marco Teórico
La presente versión del marco teórico es solo un indicio por el cual trata solamente del estado del arte.
Realizo exprofeso una introducción descriptiva de la composición anatómico-fisiológica de nuestro cerebro,
de las neuronas y de los LPF como así también de las AC, ya que este conocimiento es básico para poder
comprender la investigación y desarrollo del tema central de este trabajo
En las figuras a continuación realizo una descripción anatómico-fisiológica de las áreas de interés para esta
investigación:
En la Figura 1 podemos apreciar cómo operan las distintas áreas de nuestro cerebro, y en particular los
Lóbulos Pre Frontales (LPF), asociados al pensamiento racional y las AC (relacionadas con el área
emocional
Figura 1.- Composición anatómica del cerebro humano
Fuente: Google images (Fuente particular desconocida)
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Lo anteriormente explicado puede verse con mayor facilidad en la Figura 2, la cual nos muestra – y
evidencia de manera fácil – los comportamientos de ambas partes del cerebro y la manera en la cual
reaccionan
Figura 2. Amígdalas y Lóbulos Pre Frontales (LPF)
Fuente: Asociación Educar
La Figura 3 complementa las anteriores ilustrando el desenvolvimiento de las distintas áreas que componen
nuestra área central de control del organismo.
Si bien se entiende que la Unidad Cuerpo Cerebro Mente (UCCM) actúa como un todo indivisible y que su
función primordial es garantizar la supervivencia del ser humano todo como tal, para dar luego de cumplida
esta fase a otras de importancia.
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Figura 3. Funciones cerebrales
Fuente: Google Images (fuente particular desconocida)
Nuestro cerebro está compuesto por un número superlativo de conexiones axiales entre neuronas que son las
responsables de trasmitir las distintas informaciones que hacen que nos desenvolvamos de la manera en la
cual lo hacemos
Podemos definir a la neurona como “célula especializada en la generación, transmisión y conducción de
señales eléctricas (potenciales de acción)” (ASOCIACIÓN EDUCAR. Sin fecha edición: 32)
Figura 4. Estructura de una neurona
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Fuente: Imágenes de Asociación Educar (http://asociacioneducar.com/partes-neurona)
Es a partir de la unión entre sí de distintos tipos de neuronas que se llevará a cabo la transmisión de impulsos
eléctricos que permitirán el traslado de información, y a partir de esta información que se producirán
distintos tipos de reacciones del individuo.
Para nuestro caso son de interés las de índole puramente emocional y las de índole racional; y la manera en
las cuales estas dos variables impactan sobre nuestro comportamiento dentro de las organizaciones.
Teoría del Buen Salvaje
Las primeras responden a la acción directa de las AC, nuestra UCCM (Unidad Cuerpo Cerebro Mente)
trata en primera instancia de satisfacer nuestra necesidad de supervivencia por lo cual actúa con este
objetivo. Por ejemplo haciéndonos huir cuando sentimos la presencia del peligro, etc. Son reacciones
emocionales puras que también pueden transmitir la ira y si no son controladas por los LPF, las
emociones emergen como tales al exterior.
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Por otra parte, es el accionar de los LPF los que harán uso de la faz racional y frenarán la salida de los
impulsos emocionales en estado “bruto”, analizando qué cosas sí tienen cabida y cuáles no. De allí la
importancia en que ninguna de estas dos áreas se encuentren dañadas ya que la falla en el accionar de
una de ellas producirá cambios en la conducta social del individuo y afectará su normal
desenvolvimiento como tal, un ejemplo en este caso es el de Phineas Gage quien sufriera en un accidente
la pérdida del área de los LPF, aunque estudios posteriores demostraron que solamente se vio afectado
su LPF izquierdo.
En las siguientes imágenes podemos apreciar el nivel anatómico de las lesiones, como así también su
impacto sobre las áreas cerebrales
Figura 5. Impacto sobre el área craneal
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Figura 6. Cómo se vio afectado su cerebro por la lesión
Fuente de las Figuras 5 y 6: The Tale of Phineas Gage, Digitally Remastered - PETER RATIU,1,* IONFLORIN TALOS,1,* STEVEN HAKER,1 DANIEL LIEBERMAN,2 and PETER EVERETT1
Esta teoría nos muestra cómo se produce un enfrentamiento entre el “mal salvaje” (representada por la
amígdala cerebral) y su tendencia hacia el “mal” y el “buen salvaje” (representado por los Lóbulos
Prefrontales)
que
tienden
hacia
el
“bien”;
en
otras
palabras,
como
puede
reaccionar/proceder/comportarse el ser humano en función de cuál de estos dos sectores tenga
preponderancia sobre el otro (Silva: 9)
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Si es la Amígdala tenderá a un comportamiento cercano a la barbarie mientras que si son los Lóbulos
tenderá a un comportamiento más tranquilo
Desarrollo
Haciendo un salto comparativo
Podemos establecer una correlación con lo hasta ahora enunciado y lo planteado por Abraham Maslow en su
Pirámide, asociando los puntos basales de la misma con los estados emocionales y los superiores con los
racionales ya que el individuo no podrá progresar y alcanzar su óptimo si primero no consolida los estadios
iniciales de la pirámide. En otras palabras no podrá auto realizarse (o actualizarse) si primero no consolida
sus necesidades fisiológicas o de supervivencia (comparable a la acción básica de la UCCM, las necesidades
de seguridad, las sociales o de pertenencia y las de autoestima
Fuente: http://www.bbc.com/news/magazine-23902918
La casa abandonada y el comportamiento humano en las organizaciones
Me valdré ahora de una pequeña historia para mostrar cuál es la reacción de un grupo ante el
comportamiento de un individuo. La misma cuenta que venía por la calle un pequeño perro contento,
ladrando de felicidad y se topa con una casa abandonada. Entra en ella moviendo la cola y dando ladridos de
alegría, y de la misma forma es recibido dentro de la casa. Luego se va y prosigue su camino más alegre que
cuando había ingresado. Al rato transita la misma calle otro perro, gruñón y de mal humor. También ingresa
en la casa y es recibido de igual forma, de mala manera, cuando abandona la casa está de peor humor que al
ingresar.
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La pregunta es qué había dentro de la casa?... tan solo ESPEJOS, o sea ambos vieron reflejada su imagen en
ellos. Lo anecdótico de esta historia es que así sucede en la realidad, así como tratemos a los demás seremos
tratados. Esta forma de trato/comportamiento es asociable a las neuronas en espejo, las cuales producen una
“imitación” del comportamiento de los demás por parte del actor
De la fábula a la realidad
Para tratar este tema tomaré en consideración un Paper que nos muestra qué sucede con el comportamiento
humano ante la evacuación por incendio y cuáles son las reacciones.
En la primera cita podemos observar con claridad un ejemplo de la UCCM operando bajo la influencia de
supervivencia como primera reacción
…en los años ’50 Quarantelli propuso la conceptualización del pánico como un comportamiento asocial;
las personas no se transforman en animales, sino más bien, buscan satisfacer sus necesidades sin prestar
atención sobre aquellas de las otras personas… (Luca Pierantoni y Gabriele Prati, pp. 53-57)
En cambio en la segunda vemos como se produce un cambio de actitud y aquí se activa una actividad más
racional (¿?), ya que ante la misma situación de incendio el comportamiento grupal e individual cambia
Tomando el término “Milling” podemos decir que:
…los individuos verifican o buscan confirmación con otras personas sobre la gravedad del mensaje o de
la advertencia que han recibido; sólo cuando la red social confirma la veracidad del aviso se inician las
acciones de protección… (Luca Pierantoni y Gabriele Prati, pp. 53-57)
Conclusión
Como conclusión de este pequeño esbozo de análisis realizado puedo decir que se ratifica la interrelación
entre el comportamiento emocional y el racional, y que de acuerdo al área de mayor preponderancia variará
el comportamiento del ser humano (individual y social).
Que en la mayoría de los casos en los cuales se trata de supervivencia la acción de las AC prevalecen de
manera inicial sobre la de los LPF, aunque esto fue visto como compartido en el caso del incendio
Finalmente, que nuestro comportamiento individual influye (y se ve influido) en un muy alto grado en el
desempeño que podemos tener dentro de una organización, ya sea de manera positiva o negativa (no dejando
de lado el resultado neutro cuando nuestra influencia es pasiva)
Lo hasta aquí experimentado abre las puertas para continuar con investigaciones futuras y de mayor
profundidad
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Bibliografía
CASTRO, Marita. Las respuestas de recompensa y amenaza en las organizaciones. Buenos Aires:
Descubriendo la Mente y el Cerebro. 78
CASTRO, Marita. Las respuestas de recompensa y amenaza en las organizaciones. Buenos Aires:
Descubriendo la Mente y el Cerebro. 77
LOGATT GRABNER, Carlos y CASTRO, Marita. 2011. Neurosicoeducación para todos – Neurociencias
para el cambio. Buenos Aires: Asociación EDUCAR
PIERANTONI, Luca y PRATI, Gabriele. 2007. Il comportamento Umano negli Incendi; Obiettivo
Sicurezza, Anno V, N°1 Gennaio – Febbraio 2007, pg.53 a 57.
SILVA, Fernando Julio. 2014. Cuestionario Clase 10. Formación en Neurosicoeducación. Buenos Aires:
Asociación Educar
Prof. Lic. Fernando Julio Silva
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