PROCESOS DE COMPOSICION ESCRITA Y FUNCION EPISTEMICA DE LA ESCRITURA FUNCIÓN EPISTÉMICA DE LA ESCRITURA La escritura, como el lenguaje en general, cumple una doble función: a) Comunicativa (o interpersonal, transaccional). La producción de textos escritos nos permite interactuar con otras personas b) Representativa. Nos permite asimismo expresar conocimientos, sentimientos, opiniones, ideas, … A estas dos funciones hay que sumar la función heurística o epistémica de la escritura que, por su compleja naturaleza, es usada como instrumento de toma de conciencia y de autorregulación intelectual y como instrumento para el desarrollo y la construcción del propio pensamiento. La función epistémica quedaría definida como la capacidad del lenguaje escrito, por su carácter planificado y diferido, de crear y desarrollar conocimiento. LOS PROCESOS DE COMPOSICIÓN ESCRITA La concepción de la escritura como un proceso la encontramos ya formulada en la Retórica aristotélica, que distinguía varios pasos en la composición: 1. Intellectio.- Sería el estadio en que el escritor determina cuál es la naturaleza de la situación comunicativa en que se encuentra según la audiencia y la intención. 2. Inventio.- Comprende la recogida de información 3. Dispositivo.- Organización del contenido que se va a comunicar 4. Elocutio.- Transformación de las ideas en contenido verbal. 1. LOS MODELOS POR ETAPAS Surgen en los años sesenta del siglo pasado, centrados en el análisis del texto y con una clara orientación didáctica y la intención de mejorar la calidad de los escritos de los alumnos desarrollando técnicas de trabajo de las distintas etapas del proceso. Distinguen tres etapas: a) Pre-escritura (generación y ordenación de ideas) b) Escritura (elaboración y producción real del escrito) c) Re-escritura (reelaboración del primer producto que da origen escrito final) Han tenido gran aceptación en la enseñanza porque permiten una fácil programación de la actuación en el proceso considerado linealmente, instruyendo al alumno en las técnicas adecuadas para cada una de las tareas de cada etapa: generar ideas, seleccionar palabras, construir frases, etc. La evolución de estos modelos y la constatación de que el proceso de composición no es lineal, son el punto de partida de los llamados modelos cognitivos. 2. LOS MODELOS COGNITIVOS Se denominan así porque consideran las operaciones psicológicas que se desarrollan en el proceso de elaboración y porque entienden la elaboración de un texto como una construcción de significado. A diferencia de los modelos por etapas no se centran en el texto sino que intentan explicar cuáles son los procesos que el escritor sigue durante la tarea del la escritura. Las operaciones y/o subprocesos que presentan estos modelos no se dan en un orden lineal sino recursivo e interactúan entre ellas. 2.1. MODELO DE FLOWER Y HAYES Establece tres subprocesos básicos: a) Planificación.- Consiste en definir los objetivos del texto y establecer el plan guía. Comprende: La contextualización. El escritor analiza la situación comunicativa y elabora la representación de los elementos del contexto que condicionan su escrito, fundamentalmente la intención y el destinatario. La generación de ideas a partir de los conocimientos disponibles Organización de las ideas, jerarquizándolas y agrupándolas en bloques b) Redacción.- Transformar los contenidos mentales en elementos de lengua, lo que supone tomar decisiones a nivel léxico-semántico, morfosintáctico y ortográfico para producir enunciados correctos, coherentes y apropiados. c) Revisión.- Comprende el conjunto de operaciones retroactivas de lectura que evalúan los resultados de la textualización en función de su grado de acomodación a la planificación. 2.2. MODELO DE BEREITER Y SCARDAMALIA. Estos autores asocian el proceso de escritura al proceso de producción del conocimiento (función epistémica de la escritura) y en base a este principio distinguen entre dos modelos de elaboración que denominan: a) “decir el conocimiento” b) “transformar el conocimiento” En el primer modelo el escritor parte del tema y del tipo de texto y busca en su memoria un elemento que le permita empezar, a partir del cual va elaborando nuevos temas. El esquema es decir-pensar-decir. Este modelo no es productivo en cuanto al avance de los conocimientos puesto que se limita a reproducir el conocimiento que ya posee. En el segundo modelo el escritor analiza el problema y establece unos objetivos que generan dos “espacios-problema” el qué decir (problema conceptual) y con qué intención y cómo decirlo (problema retórico). El proceso dialéctico que se establece entre estos dos espacios hace que la escritura que se produce influya en los conocimientos, tanto conceptuales como discursivos, del escritor. COMPLEJIDAD DE LA TAREA DE REDACCIÓN: LA SITUACIÓN DE SOBRECARGA COGNITIVA. ESTRATEGIAS PARA RESOLVERLA. El análisis de los procesos de composición textual revela la complejidad de la tarea de redacción. Cuando se escribe, es necesario: Activar en la memoria a largo plazo los contenidos semánticos Organizarlos jerárquicamente Transcribirlos a una organización lingüística necesariamente lineal Utilizar conocimientos de estructuras textuales, gramaticales léxicas y ortográficas Tener en cuenta los condicionantes del contexto (intención y audiencia) En definitiva, un escritor experto debe desarrollar, de forma recurrente y simultánea, tareas globales y locales de enorme complejidad, lo cual supone una situación de sobrecarga cognitiva. En el terreno de la didáctica de la composición escrita es necesario facilitar al aprendiz estrategias que le ayuden a resolver este problema ya que, por lo general, centran su atención en problemas de carácter local (grafía, ortografía, gramática, vocabulario, …) y desatienden los niveles globales o superiores ( organización textual, destinatario, intención, …) Siguiendo las especificaciones de los escritores expertos, estas serían algunas de las estrategias: Dejar de lado uno de los requerimientos Dividir el problema en subproblemas semi-independientes Establecer prioridades Automatizar alguna de las operaciones implicadas Hacer planes: para hacer, para decir, para componer. APORTACIONES/IMPLICACIONES DIDÁCTICAS DE LOS MODELOS DE COMPOSICIÓN Constatar que escribir es un proceso global y complejo en el cual el escritor realiza diversas operaciones, no lineales sino recursivas. La enseñanza de la redacción debe estar, por tanto, orientada al proceso (especialmente en las operaciones de planificación y revisión) y no solo al control del producto. Hay que ofrecer al alumno la posibilidad de ejercitarse en las distintas habilidades del proceso. Se debe disponer de un horario específico para ejercitar la redacción en colaboración entre alumnos y en interacción con le profesor. La enseñanza de la composición escrita debe basarse en situaciones reales de escritura para que exista una tensión real entre lo que el alumno quiere decir y el lenguaje y la situación comunicativa, que tienen sus imposiciones. Permiten planificar y programar la enseñanza de la escritura mediante una organización procesual que tiene como objetivo trabajar las estrategias cognitivas de los alumnos y organizar los contenidos según las diferentes operaciones del proceso. Valoran más el contexto, porque relacionan la competencia de un escritor con su capacidad de resolución del problema retórico, fundamentalmente la intención y el destinatario. La tarea del profesor consistirá en diseñar situaciones de comunicación reales o simuladas que den lugar a la redacción de un texto escrito Dan un valor considerable a los factores motivacionales y a su influencia en el acto de escribir. Los proyectos de escritura y las secuencias didácticas Constituyen la herramienta didáctica más apropiada para abordar la enseñanza/aprendizaje de los procesos de escritura. Los proyectos de escritura “son tareas globales en las cuales el aprendiz usa significativamente los conocimientos y estrategias disponibles para llegar al objetivo final que se le plantea” Secuencia didáctica. “Organización sistemática de la enseñanza/aprendizaje de la escritura de un texto, inscrita en un proyecto más amplio, que está formada por una serie de talleres, actividades o ejercicios que tienen por finalidad la escritura de un género textual y conseguir unos determinados objetivos de aprendizaje.”