Los asesinatos en la Tarifa del verano de 1936 (1ª parte) Wenceslao Segura Entre final del mes de agosto y primera mitad del de septiembre del año 1936 se desarrolló en Tarifa un plan sistemático de asesinatos políticos, en el que murieron más de medio centenar de tarifeños Este verano se conmemora el 75 aniversario del inicio de la guerra civil española. Como ya dejamos escrito en este mismo diario, las tropas nacionales entraron sin resistencia en Tarifa el día 24 de julio de 1936, solo cinco días después de la sublevación de las tropas de África mandadas por el general Franco. Al día siguiente de la entrada de las tropas de regulares en Tarifa, se produjo en el puerto el desembarco de un contingente de legionarios al mando del falangista Manuel Mora Figueroa, produciéndose poco después el bombardeo de la población por la escuadra republicana que controlaba el Estrecho. Tarifa queda ya desde ese momento lejos del conflicto bélico, pero la huella de la guerra se dejó sentir fuertemente. Más de un centenar de tarifeños murieron por causas imputables a la guerra, ya fuese resultado de la represión que se desencadenó nada más iniciarse la contienda o por muertes en campaña, tanto en uno como en otro bando. Los principales líderes republicanos de Tarifa lograron huir en aquellos días, muchos de ellos por el campo, para llegar a la zona republicana, principalmente a Málaga. No obstante, otros militantes de menor relevancia de partidos de izquierdas y de partidos republicanos, permanecieron en la población y fueron rápidamente detenidos y encarcelados. Entre ellos se encontraban miembros del PSOE, Partido Comunista, Acción Republicana, Izquierda Republicana y de sindicatos, principalmente UGT y CNT. La operación de “limpieza política” que por entonces se inició en Tarifa fue desarrollada casi exclusivamente por la Falange. Partido político que no había tenido ningún protagonismo en la población. Tanto es así que al comienzo de la guerra solo tiene a tres tarifeños afiliados. Sin embargo, debe añadirse que en las elecciones a Cortes del año 1933 venció con holgura en Tarifa la candidatura de derechas, donde se encontraba el principal líder de la Falange, José Antonio Primo de Rivera, que alcanzó el acta de diputado por la provincia de Cádiz y a quien acompañó a las Cortes el que fuera alcalde de Tarifa durante la dictadura de Primo de Rivera, Carlos Núñez Manso. En los primeros días de la guerra se registró una masiva afiliación de jóvenes tarifeños a la Falange, entre los que se encontraba en lugar destacado José Mora Figueroa Derqui, conocido popularmente como El Marquesito, que ejerció el cargo de primer edil tras el cese de Antonio Morales Lara que estuvo desde las llegada de las tropas hasta el 19 de septiembre. A final de septiembre de 1936, a solo dos meses del inicio de la guerra, se contabilizaban en Tarifa unos setenta falangistas. En un principio los falangistas se limitaron a custodiar en la cárcel local a los izquierdistas y republicanos que habían sido detenidos. Por entonces nadie podía sospechar que la tragedia iba a ser tan grande. El día 26 de agosto de aquel fatídico año de 1936 se inició el masivo asesinato de numerosos tarifeños, sin ser sometidos a juicio previo y sin ningún tipo de defensa. Las fuerzas militares supervisaron la operación, pero no se implicaron directamente en ella. Llegaron a Tarifa con la orden de detener a los principales gobernantes republicanos, lo que no pudieron hacer por causa de su precipitada huida y de inmediato permitieron que la Falange actuase por su cuenta. Los asesinatos en la Tarifa del verano de 1936 (2ª parte) Wenceslao Segura “Heridas por arma de fuego penetrante en cráneo y tórax” con estas palabras se recoge la causa de los fallecidos por la represión política realizada en Tarifa entre final de agosto y mitad de septiembre de 1936 En los primeros días de la sublevación militar no se tenía conciencia de que se iba a desencadenar una guerra civil, se pensaba que el gobierno de la República iba a controlar la situación. Pero ya entrado el mes de agosto era innegable que había comenzado un enfrentamiento armado fratricida. Es en este momento en que se inician los asesinatos políticos tanto en Tarifa como en otros lugares. Con aquella brutal represión no solo se quería eliminar a potenciales enemigos, que por entonces se encontraban controlados en las cárceles, sino que se quería crear un ambiente de terror que facilitara el control total de la población, algo que indudablemente se consiguió. Por otra parte, la comisión de aquellos asesinatos venía a mostrar la firme determinación de los nuevos gobernantes de impedir un paso atrás. Por cierto, lo mismo ocurrió en el bando republicano. Difícilmente puede mantenerse la argumentación de que unos actuaron como reacción a lo que hicieron los otros. Más bien parece que los dos bandos tomaron a la par la determinación de aplicar criminales represalias políticas. Lo que llama la atención es lo excesiva que fue la represión en Tarifa con relación a los escasos incidentes que se registraron durante la II República. Entre los más destacados sucesos que pudieran justificar la represión posterior, señalar el incidente que protagonizó el alcalde socialista Amador Mora Roja cuando hizo en la calle varios disparos al aire durante un altercado; las detenciones de elementos derechistas que se hicieron por orden del mismo alcalde; y sobre todo las medidas anticatólicas que la tuvieron que sufrir la mayoría de la población que tenía un fuerte sentimiento religioso. La ciudad de Tarifa (el campo fue otra cosa) mostró durante toda la República una clara inclinación hacia la derecha. Hasta el extremo de convertirse en la población más derechista de la provincia, si nos atenemos a los resultados electorales. El análisis de lo que ocurrió entre el 26 de agosto y el 16 de septiembre de 1936 nos lo facilitan los archivos locales: el registro civil, el archivo parroquial de San Mateo y el archivo municipal, a lo que añadir los relatos orales. El día 24 de noviembre de 1936, pasado ya lo más duro de la represión, el comandante militar de Tarifa envió al Registro Civil una relación incompleta de los tarifeños que fueron asesinados. En todos ellos se lee la misma causa de la muerte: “Heridas por arma de fuego penetrante en cráneo y tórax”, haciendo expresa mención al tiro de gracia con que fueron rematados los fusilados. En el libro de finados del archivo parroquial de San Mateo se fueron asentando los nombres de los fusilados al día siguiente de su muerte. El párroco de entonces, José Gámez Coto, era avisado el día anterior de las ejecuciones para que se acercase a la cárcel y facilitara atención espiritual a los que horas después iban a encontrar la muerte. Todas las ejecuciones se hicieron a las primeras horas de la mañana. Las seis es la hora que recogen los certificados de defunción del Registro Civil. Una hora que permitía ocultarse de testigos incómodos. Los familiares de los presos, que se veían obligados a llevarles el alimento diariamente, conocían las muertes el mismo día de la ejecución. La población era conocedora de lo que estaba ocurriendo. Difícilmente se podían ocultar tantas muertes, o la llegada del ruidoso camión que había transportado los presos bajando por la calle de la Luz, o el jolgorio que en ocasiones mostraban los que habían formado parte del pelotón de fusilamiento. Y el “boca a boca” debió funcionar intensamente durante aquellos días, extendiendo el miedo y el terror y atenazando a una población que poco o nada podía hacer. Las evidentes dificultades que conlleva realizar una masacre de tal envergadura, exigió a los dirigentes falangistas una precisa organización. Los asesinatos se realizaron en grupos de cinco personas, un número que podía ser fácilmente controlado. El traslado de los presos se hacía en un camión que había sido confiscado a un empresario local. Los enterramientos eran realizados por personas diferentes de los que componían el pelotón de fusilamiento. Los asesinatos en la Tarifa del verano de 1936 (3ª parte) Wenceslao Segura Las primeras muertes tuvieron lugar el miércoles 26 de agosto de 1936, cuando cinco de los presos fueron fusilados y enterrados en el cementerio de Tarifa Como antes hemos mencionado, el miércoles 26 de agosto de 1936 se iniciaron los “paseos”. Los primeros en ser fusilados fueron Juan Balongo Cortés, Antonio González Solano, Antonio Iglesias Benítez, José Fillol Mora y José Delgado Vera. Fueron fusilados y enterrados en el cementerio de Tarifa. Al principio, las ejecuciones se realizaron de forma espaciada, pero a medida que avanzaba el mes de septiembre se hizo más frecuente que cada mañana, cinco presos que se hacinaban en la cárcel municipal fueran sacados y fusilados. Durante días 9, 10, 11, 13, 15 y 16 de septiembre fueron asesinados al menos 27 tarifeños. Parece como si quisieran terminar cuánto antes, quizás por la sospecha de que por orden superior se iban a paralizar las ejecuciones. En los primeros días de septiembre de 1936 acudió a Tarifa Carlos Núñez Manso, anterior alcalde de Tarifa, ex-diputado a Cortes y que desde hacía unos años tenía su residencia en Sevilla. Al conocer la magnitud de la represión se puso en contacto con el prestigioso almirante Pascual Cervera, suegro de su hermano, para que mediara al objeto de frenar la atrocidad que se estaba dando en Tarifa. No se sabe qué efectos tuvo aquella intermediación y todo apunta a que no fue eficaz, ya que la represión en Tarifa terminó en las mismas fechas que en otras poblaciones. Aunque se tuvo una preferencia por fusilamientos y enterramientos en el cementerio municipal, al menos nueve personas fueron asesinadas en Vico, Facinas, en los mismos terrenos donde se iba a construir el cementerio municipal. Algunos de los fusilados fueron enterrados en el mismo lugar de fusilamiento, mientras que otros fueron llevados al cementerio de aquella localidad que se encuentra colindante con la iglesia parroquial. Igual que llama la atención la excesiva represión que se produjo en la ciudad de Tarifa, es sorprendente que en Facinas, donde se desarrolló un movimiento obrero fuertemente reivindicativo durante la II República, fuese mínimo el número de represaliados por aquellos días. Quizás la causa habría que buscarla en que los allí detenidos fueron trasladados a Algeciras, donde comparativamente, la represión fue menor que en Tarifa. Caso excepcional lo representa Vicente Gil Gil, empresario y cartero rural de Facinas, abuelo del actual alcalde de Tarifa, que tras su detención fue trasladado a la cárcel municipal y fusilado el 9 de septiembre cuando contaba 42 años de edad. También fue ejecutado por aquellos días, y fuera del municipio de Tarifa, el alcalde de Facinas y militante del Partido Socialista, Juan Pérez Álvarez, abuelo de la concejala socialista Paola Moreno Pérez. Por cierto, señalar de paso que el abuelo del anterior alcalde de Tarifa, Miguel Manella Guerrero, el guardia forestal Francisco Guerrero Rebolledo, también fue víctima de estos fusilamientos. La población de Tarifa no solo iba a sufrir la tragedia de las muertes por motivos políticos. Numerosos tarifeños fueron al frente. Unos voluntariamente, ya fuese encuadrados en la Falange o en cuerpos militares nacionales o republicanos. Otros tuvieron que cumplir su servicio militar durante la contienda. Más de medio centenar de tarifeños murieron en el frente, la mayoría de ellos jóvenes que cumplían con su obligación militar. Los primeros caídos en el bando nacional recibieron los honores de las autoridades. Pero a medida que aumentaban más y más el número de muertos en el frente, estos honores fueron reduciéndose hasta finalmente desaparecer. Habiendo sido Tarifa ocupada desde un comienzo por el bando de los sublevados, es lógico que la represión política fuera ejercida sobre izquierdistas, republicanos y sindicalistas. Solo conocemos un caso de tarifeño que fue fusilado por el bando republicano. Se trata del secretario de Juzgado Emilio Carballo Acuña que murió en la población malagueña de Arriate en septiembre de 1936. Los asesinatos en la Tarifa del verano de 1936 (4ª parte) Wenceslao Segura Más de medio centenar de tarifeños murieron en el frente durante la guerra civil, la mayoría de ellos eran soldados de reemplazao Si desde nuestra perspectiva actual tenemos que lamentar todas y cada una de las muertes que se produjeron por aquellos días, el sentimiento es más intenso cuando los asesinatos castigaron en más de una ocasión a una misma familia. Citar el caso de los hermanos Iglesias Benítez, Antonio, Juan y Diego, que fueron fusilados en un intervalo de diez días. Al albañil Antonio Gutiérrez Fuentes que fue fusilado unos días antes que lo fuera su mujer Isabel Ríos Moya. El de Ana Sánchez Fuentes fusilada en Facinas y el de su marido Vicente Enrique González que encontró la muerte en el frente de Córdoba. Citar igualmente la muerte en el frente de los dos hermanos falangistas Romero Abreu, de nombres Fidel y Joaquín, quien fue el primer militar tarifeño muerto en campaña. No podemos olvidar la tragedia que se abatió sobre la familia del alcalde socialista de Tarifa Amador Mora Rojas, quien murió en el frente cuando mandaba un batallón de voluntarios tarifeños; su mujer Antonia Martín Muñoz fue asesinada en Facinas, su hijo Miguel Mora Marín murió en Cádiz nada más comenzar la guerra al oponerse a los militares sublevados y la hija mayor Carmen Mora Marín fue fusilada ya comenzado el año 1937. Terminamos este artículo que hemos publicado durante varios días dando una relación de los tarifeños que murieron por causa de la guerra civil. Debemos advertir que no es una relación completa, entendiéndose que debe faltar algunas decenas de nombres y es posible que algunos de los nombres que damos sean incorrectos, lo que se explicaría por la variedad y en ocasiones poca fiabilidad de las fuentes que hemos utilizado. Pero en cualquier caso nos da una estimación del horror que se sufrió en Tarifa durante los años que duró la guerra. 1.- Aragón Escribano, Antonio (muerto en campaña) 2.- Araujo Gallardo, José (muerto en campaña) 3.- Araujo González, Antonio (muerto en campaña) 4.- Araujo Escribano, Antonio (muerto en campaña) 5.- Araujo Iglesias, Antonio (muerto en campaña) 6.- Ariza Leal, Manuel (muerto en campaña) 7.- Avilés Collado, Bartolomé (fusilado) 8.- Avilés Velasco, José (fusilado) 9.- Arco Ruiz de Conejo, Alonso de (fusilado) 10.- Ballesteros Gil, Gaspar (muerto en campaña) 11.- Balongo Cortés, Juan (fusilado) 12.- Bernabeu Arrabal, Rafael (fusilado) 13.- Blanco Chico, Isidoro (fusilado) 14.- Blanco Mesa, José María (muerto en Mauthansen) 15.- Bru Casado, Carmen (fusilada, no está confirmado) 16.- Cabezas Ruiz, Manuel (muerto en campaña) 17.- Carballo Acuña, Emilio (fusilado) 18.- Carrero Lirola, Damián (muerto en campaña) 19.- Cobo Morando, Manuel (fusilado) 20.- Cortés Lozano, Pedro (muerto en campaña) 21.- Cózar Gil, Luis (muerto en campaña) 22.- Delgado Vera, José (fusilado) 23.- Díaz Díaz, José (fusilado) 24.- Díaz Rodríguez, M. (muerto en campaña) 25.- Díaz Serrano, Sebastián (fusilado) 26.- Diéguez Serrano, Antonio (muerto en campaña) 27.- Duarte Sánchez, Antonio (muerto en campaña) 28.- Enrique González, Vicente (muerto en campaña) 29.- Fernández España, Esteban (fusilado) 30.- Fillol Mora, José (fusilado) 31.- Franco García, José (fusilado, esposo de tarifeña) 32.- Gallardo Rodríguez, José (muerto en campaña) 33.- Gallego Triviño, Juan (muerto en campaña) 34.- Gaona Garrido, Francisco (muerto en campaña) 35.- Gil Gil, Vicente (fusilado) 36.- González Solano, Antonio (fusilado) 37.- González Santos, Manuel (fusilado) 38.- Guerra Díaz, Pedro (muerto en campaña) 39.- Gurrea Caballero, José (fusilado) 40.- Guerrero Mena, José (fusilado) 41.- Guerrero Serrano, Francisco (muerto en campaña) 42.- Guerrero Rebolledo, Francisco (fusilado) 43.- Gutiérrez Fuentes, Antonio (fusilado) 44.- Herrera Adrete, José (muerto en campaña) 45.- Hidalgo Silva, Manuel (muerto en campaña) 46.- Hidalgo Villaverde, Francisco (muerto en campaña) 47.- Iglesias Balongo, Diego (fusilado) 48.- Iglesias Benítez, Antonio (fusilado) 49.- Iglesias Benítez, Diego (fusilado) 50.- Iglesias Benítez, Juan (fusilado) 51.- Iglesias Romero, Antonio (fusilado) 52.- Ledesma Villanueva, Pedro (fusilado) 53.- López Avilés, José (fusilado) 54.- Manso Rondón, Manuel (muerto en campaña) 55.- Máñez Duarte, José (muerto en campaña) 56.- Marín Muñoz, Antonia (fusilada) 57.- Martínez Manso, Dionisio (muerto en campaña) 58.- Mayo Guerrero, Juan (muerto en campaña) 59.- Montano Muñoz, Jacinto (fusilado) 60.- Mora Marín, Carmen (fusilada) 61.- Mora Marín, Miguel (fusilado) 62.- Mora Rojas, Amador (muerto en campaña) 63.- Moreno Diéguez, Miguel (muerto en campaña) 64.- Moreno González, José (fusilado, esposo de tarifeña) 65.- Natera García, A. (muerto en campaña) 66.- Navarro Carrero, José (muerto en camapaña) 67.- Navarro Muñoz, Dolores (fusilada) 68.- Nieto Jurado, Antonio (muerto en campaña) 69.- Noria Rodríguez, Pedro (muerto en campaña) 70.- Ochoa Triviño, Pedro A. (muerto en campaña) 71.- Ortiz Piñero, Manuel (muerto en campaña) 72.- P. Guerra, Francisco (muerto en campaña) 73.- Partida Fernández, José (muerto en campaña) 74.- Parra Casas, Sebastián (fusilado) 75.- Pelayo Manso, Juan (muerto en campaña) 76.- Pérez Álvarez, Juan (fusilado) 77.- Pérez Pérez, José (fusilado) 78.- Pinto Ruiz, Luciano (muerto en campaña) 79.- Piñero Serrano, Miguel (fusilado) 80.- Porras Fernández, Cristóbal (muerto en campaña) 81.- Rambau García, Tomás (muerto en campaña) 82.- Richarte Alex, Francisco (fusilado) 83.- Ríos Moya, Isabel (fusilada) 84.- Rivas Millán, Andrés (muerto en campaña) 85.- Rivero Jiménez, Antonio (fusilado) 86.- Rodríguez López, José (fusilado) 87.- Rodríguez López Juan (fusilado) 88.- Rodríguez Franco, Juan (fusilado) 89.- Román Jiménez, José (muerto en campaña) 90.- Romero Pérez, Sebastián (fusilado) 91.- Romero Triviño, Manuel (muerto en campaña) 92.- Rojas Sierra, Antonio (arma de fuego) 93.- Romero Abreu, Fidel (muerto en campaña) 94.- Romero Abreu, Joaquín (muerto en campaña) 95.- Sánchez Blanco, José (fusilado) 96.- Sánchez Fuentes, Ana (fusilada) 97.- Sánchez Garrido, Juan (muerto en campaña) 98.- Sánchez Guzmán, José (fusilado) 99.- Sánchez Jiménez, Andrés (fusilado) 100.- Sánchez Llorca, José (fusilado) 101.- Santander Diéguez, Luis (muerto en campaña) 102.- Serrano Lideño, Joaquín (fusilado) 103.- Suáres Perez, Manuel (fusilado) 104.- Suarez Solera, Manuel (fusilado) 105.- Toledo Chico, Antonio (muerto en accidente en el cuartel de Falange en Tarifa) 106.- Trujillo Arcos, José (fusilado) 107.- Trujillo Fernández, José (muerto en campaña) 108.- Valencia González, A. (muerto en campaña) 109.- Varo Chaparro, Cándido (fusilado) 110.- Vázquez Fernández, Javier (fusilado) 111.- Vela Juárez, Juan (muerto en campaña) En el monumento que hace unos años se levantó en el cementerio de Tarifa a los represaliados durante aquellos días aparecen además los siguientes nombres 112.- Alba Serrano, Juan 113.- Álvarez Muñoz, Manuel 114.- Araujo Benítez, Fernando 115.- Avilés Fuentes, Miguel 116.- Blanco Guerrero, Luis 117.- Canas Pichardo, Bartolomé 118.- Chico Casas, Esteban 119.- Díaz Piñero, Juan 120.- Fernández Pizarro, Antonio 121.- García Fernández, Antonio 122.- Guerrero Román, José 123.- Gurrea González, Francisco 124.- Gurrea González, Francisco 125.- Gutiérrez Araujo, Antonio 126.- Gutiérrez Díaz, José 127.- Gutiérrez Rodríguez, Isidoro 128.- Iglesias Serrano, José 129.- Lobón González, Manuel 130.- López España, Antonio 131.- Mateo Gutiérrez, Beatriz 132.- Montano Guerrero, Rafael 133.- Mora Pérez, Rafael 134.- Murillo Guzmán, Luis 135.- Llorca Díaz, Antonio 136.- Núñez Peinado, Sebastián 137.- Ochoa Santander, Antonio 139.- Ortiz Manso, Juan 140.- Pelayo Chico, Manuel 141.- Pérez Campos, Manuel 142.- Roche Fernández, José 143.- Rodríguez Blanco, Juan 144.- Rodríguez Fernández, Ramón 145.- Rodríguez Serrano, Juan 146.- Román Iglesias, José 147..- Ruiz Cote, Rafael 148.-Salado Blanco, Pedro 149.- Salvatierra García, José 150.- Sampalo Perez, Antonio 151.- Sánchez Díaz, Francisco 152.- Sánchez López, Ignacio 153.- Sánchez Perea, Juan 154.- Santos Blanco, Antonio 155.- Serrano Santander, Juan 156.- Suárez, José 157.- Trujillo Muñoz, Miguel 158.- Trujillo Perea, Juan 159.- Valencia Rodríguez, Antonio (Puede descargar el artículo completo pulsando en el enlace de más abajo)